La estancia Introduccién alambrada Benjamin NahumLos cercos primitivos Is primeros cercados artificiales de que tenemos no- ticia en nuestro pais fueron creados por agricutores. En la €poca colonial, uno de sus principales problemas era el proceger las sementeras contra la invasién de los. ga- tados que los estancieros dejaban vagar, sueltos por los cjsdos de los pueblos. Ya Pérez Castellano lo mencionaba, las chacras de Montevideo, en su "Observaciones sabes a Agric, de 1814 e medio siglo después, un profundo conocedor 4 le materia como Modesto Cluzeau Moret, establecia en S77 ls eres clases de cerco que se empleaban en los i dios Las zanjas, que al rodear la chacra, tenian Js wearaje de servir de desaguadero, no constiuian un obs- & slojar animales dafinos, como comadrejas, que lo iban so- cavando y terminaban por derrumbarlo. El ultimo tipo, qve parece haber sido el mis usado en las chacras, el cereado vivo, se formaba con diversas plantas que se po- daban de acuerdo 2 las necesidades del propietaio, cons- situyéndose paredones verdes de cina-cina, ula de gito, ramarises, acacia, talas, ec Detalle de wn corral de palmas de la que fuera stancia de Juan Fanstine Corres, en Rocha. (Foto del Archivo del Sr. Anibal Barrioe Pintor) En las regiones donde Ia piedra abundabs, se recurria a ella para la construccién de cercados, y todavia quedan cjemplos en nuestra campala de largusimas paredes bajas de piedsa que delimitaban una propiedad, producto sobre todo del rabajo esclvo. En las estancias, los. primeros cercos_ se emplearon para proteger las pequefias quintas anexas al casco; eran de plantas o de maderas, ya que no faltaban bosques en las cereanias. Pero 0 constituian valla suficiente pars el ganado mayor. Seguramente el primer “cercado” que se ib para él fue el natural: la Finconada, tetra entre co- rrientes de aguas que impedian su dispersién. Mis tarde se hicieron cercos de picdes, posibles tnicamente en los deparaamentos donde abundara ésta 0 su transporte fuera ficil. Pero ademis de ésa y las otras desventajas que tenia, su costo era tan elevado que difialtaban su difusion. Ast por ejemplo, en la testamentaria de Carlos Genaro Reyle en. 1886, consta que los cercos de piedra de sus estancias se tasaban en $0,60 el metro, y los de alambre a $0,18 el meu. Ain considerando que por estos aos el alambrado habia disminuido su costo considerablemente, lama. la acencién que el cerco de piedra costara casi tres veces més que el oc0, 1o que debe haber determinado su progresivo abandono, Como los cercos de alambre no tenfan ninguno de los inconvenientes de los cercos vivos y muertos, y acumulabaa mayores ventajas que ét0s, porque ocupzban menos. es paci, se colocaban ficilmente, no dejaban claros por donde pudieran escaparse Ios animales, etc, los ganaderos co menzaron a considerarlo con preferencia, sobre todo a me dida que su precio inicié un descenso’aprecable 63ie Los primeros cercos de alambre ro pais en la cria de ovinos, la Argentina nos precedié también en la introduc- ccién del alambrado para cercar las estancias. Alli, como aqui, los precursores fueron hacendados extranjeros, dota ddos de un afin de progreso incontenible que los llevaba ‘ aplicar siempre las dltimas técnicas en 1a exploracién de sus predios, El primer hombre que cere una estancia en la Ar- gentina, fue el cénsul prusiano en Buenos Aires, Francisco Halbach, quien, en 1855, rode6 su estancia "Los Reme- dios” con cuatro hilos de alambre, sujetos con grampas a los «principales» de fandubay (postes enteros) plantados cada 50 varas y con medios postes cada cinco varas’. A este alemin, siguié el inglés Richard B. Newton, q 3 considerado como el principal introductor de los cercos. de alambre en el pais vecino. ‘Su progresiva aunque lenta difusién en los afios 50, veinte afios antes que en Uruguay, bien pudo servi de ejemplo para nuestros ganaderos. Sin embargo, y entre otros factores, nuestras continuas convulsiones politicas ale jaron el tiempo de su aplicacién entre nosotros. Es dificil determinar con precisidn quién tendié el Primer alambrado en nuestro pais y en qué fecha Varios datos sefalan, sin embargo, a estancieros extranjeros del Litoral como ‘Jos introductores de Ja novedad, reaficmén dose asi su papel de adelantados en la introduccién de me: joras téenicas, Los primeros cercos de alambre de que tenemos no- ticia fueron utilizados en estancias para resguardar quincas cercanas a la casa principal, y quizis ovejas finas. En las festamentarias de Eduardo Mac Eachen, 1857; Diego Mac Envyre, 1861, y Roberto Young, 1864, figuran referencias al respecto, EI historiador Isidoro de Maria sefiala que Ricardo B, Hughes fue el primero en cercar su estancia, “La Paz", centte los arroyos Negro y Rabén, en los primeros afios del 60. Mariano B, Berro atribuye el primer alambrado de es- tancia a José de Buschenthal, y Domingo Ordofiana al es tanciero de Soriano, David Silveira. Pero todos los datos, parecen sefalar como introductores de esta mejora a los estancieros extranjeros radicados en el Litoral y Centro Sar del pais, las zonas mas progresistas y avanzadas dentro de Ia tendencia hacia el crecimiento econdmico. —_ ata ae Gorral de Piedras de ta actual estacia "El Lladoner”, Durezno (Foto del Archivo del Sr. Anibal Barros Pinto),Causas del alambramiento de los campos Is ventajas que el alambrado proporcionaba al es tanciero eran miltiples. En primer lugar, fijaba con claridad el limite de a tierra que cada uno’ poseia, hecho fundamental en. una Gpoca donde Ia indefinicién’ de la propiedad era la regla ¥ los pleitos que de ello resultaban, miltiples. Se conso- Tidaba la eseuceara de la propiedad de la tierra en manos de sus actuales ocupantes, y se alejabn el peligro de un despojo 0 de una dispata’ por limite. ‘Ahorraba mano de obra, porque ya no se necesitaba ‘gente para recoger Ia hacienda dispersa 0 para parar rodeo, Jo que permitia hacer fuertes economias en los salarios. “Es suprimie gastos, hay necesidad de menos peones, me- 105 caballos, completa seguridad para la hacienda... es tuno duefo absoluto de su campo", decia uno de los edito- rialistas de la Revista de la Asociacién Rural de la época ‘Uno de los males més importantes que afrontaban los estancieros de antafo era la disparada de los animales asusados, 0 la dispersidn provocada por las sequias. El slambrado lo curaba radicalmente. Salia més barato alam- bear que perder cientos de animales que se alejsban en busca de aguadas. Favorecia notablemente fa cria del ovino: “La mayor densidad y el asentamiento de las majadas en sectores de- limitados tendian a faciliar el crecimiento y engorde del snimal y contribuir con sus residuos al abono de los po- treros". Hl refinamiento del ovino y el cercamiento de los Campos fueron dos procesos que se desarrollaron_parale- lamente El mismo benéfico resultado tenia para el bovino. No se podia pensar en un mestizaje conttolado y seguro sin la existencia de potreros, y ét0s s6lo se podian hacer de alambre. "Es asi que se volveria a duplicar el étea tsacional de pastoreo que habilita para duplicar las hacin- das en cria 0 en engorde’, sostiene Arredondo. Por ocro lado, el alambrado constcuia una valla im- eas sis del campo, Coalquiet psi cumtlo, al ganado, dificultando su engorde, y ‘== mis de una ocasiGn, cuereando agin animal alejado. lise caminos que lo atravesaban eran fuente continua de permatbacioncs de este tipo, que el cerco contribuyé ef Gsemente 4 climinar. Desde este punto de vista, el cerco Significd ponerle puertas al campo, custodiario mejor, ase- {Gsrar les bienes que contenia. Trajo consigo una afirmacién de fe propiedad: ello explica que todos los estancieros, seadicionalasas y progresistas, lo hayan adoptado veloz- smeare Pero los Sltimos, ademés, le dieron un significado ‘ccontmnico que habiltaba a proseguir con el esfuerzo de dearrolo en que estaban embarcados: Ia subdivisin en poteros peemitia el mestizae, es decir, lograr mis came © mis lana en menos tiempo, y por lo tanto, més ganancias. Los motivos ocasionales La forcisima crisis econémico-politca de 1869-1875 influyé en la difusidn del deseo de cercar. Por un lado acentué el afin por desarrollar el campo y salir del ma- rasmo econémico en que se encontraba, y ello sélo podia hacerse mejorando la produccién, es decir, mestizando, y para mestizar, el alambramiento era imprescindible. Por otro lado, Ia anarquia agudisima de la época hizo sentir mis que nunca la necesidad de definir de una buena vex la propiedad y disminuir los robos continuos de ha- cienda; para ello era también imprescindible el alambrado. La década siguiente —1876-1886—, que trajo una evidente prosperidad al medio rural, no disminuyé este cempuje; por el contrario, lo reforas. El crecimiento de la produccidn permitié ganar fuertes sumas que fueron re- invertidas en el campo a través de la inroduccida de animales finos y de alambre, sobre todo, ya que éste posi- Piliabe In conscuciin de aque fin ‘Asi que ambos factores, crisis y_prosperidad, se con- jugaron para impulsar Ja implancacién de un elemento seni pers. loo enanceroe progiesine—y_jertico —para progresstas y tradicionalistas por igusi—, que ha- bbria de transformar la faz del medio rural uraguayo. Otros motives pesaron. Por ejemplo, la exenciéa de impuestos a la introduccién de alambre conseguids por la Asociacién Rural del Ministro de Hacienda, Andrés La- mas, en 1875. Y también la medianeria obligatoria, esta- blecida en el Cédigo Rural reformado de 1879. Si un es tanciero alambraba, el lindero tenia que compartir sus costos, con lo que el interesado vein descender los suyos a la mitad, incitindolo a completar ripidamente el cer camiento de toda su propiedad. Este hecho fue decisivo cn la marcha del proceso, como lo demuestran las enormes cifras de importacién de’alambre de 1880-82 65Velocidad del cercamiento Basindonos en diversas fuentes consultadas, hemos podido confeccionar este cuadro sobre la IMPORTACION DE ALAMBRE, CUADRAS Y SUERTES DE ESTANCIA ALAMBRADAS ENTRE 1872 y 1882 ‘Aso Importciin Valor$ ——_Cuadeas 1872 2030250 128.439 29.700 173 1.847931 112840 26700 1874 2476023 150.169 35.800 49 1875 2140835 135333 31.000 129 1876 2150000 31.000 19 1877 6646743 397.818 96500 401 18786674977 367681 96700 402 1879 10290295 574493. 149.000 620 oe = 216480 (estim.) 902 (estim,) 1881 19642000 — 284600, L185 1882 12502800 © — 181.200 735 1178480 4306 (woul) s = Pee re Rr BI alembramiento aclerd el procro y mejoramiento de los ovinon, En la Revista de la Asociacién Rural del 15 de agosto de 1881, se calculaba que en 1879, segiin declaraciones de 4a Contribucién Directa, existian 7.685 suertes de estan- cia en todo el. pais. Si'se alambraron 4906 hasta 1882, quedaron sin alambrar 2.779, 0 sea, el 36% del tocal. Se alambré, pues, hasta esta dleima fecha, el 64 % de las es: tancias del pais. De este 64 %, s6lo un 13 % 10 hizo entre 1872 y 1876; el restante 87% lo realizd entre 1877 y 1882. Con lo que se demuestra que la afirmacién de un editorialista de Ia Revista de que “silo cinco afios han bas- ‘ado para realizar casi por completo el cietro de la pro- piedad”, no era una exageracién; la fuerza de los nimeros ermite afirmar la portentosa velocidad del alambra ‘miento en el pais: diez afios, de los cuales en especial los llkimos cinco, registran el grueso de la facna El cercamiento delimicaba la propiedad y la asegura- ba; beneficiaba asia todos los estancieros, progresistas © ‘radicionalisas. Estos Gltimos pudieron oponerse a todos los adelantos predicados por la Asociacién Rural —el ovino, el mestizaje, las praderas artificiales— porque implicaban tun riesgo; pero al alambramieato no se opusieron porque significabs Jo contrario: asegurar, no arriesgar, consolidar, no lanzarse a una aventura. Apoyado asi por ellos, que erat 4a inmensa mayoria del pais rural, el alambrado fue un hecho. rr 66 SSCaracteristicas econdmicas de la inversion El costo del alambsamiento fue considerablemente ele vado para nuestros estancieros, sobre todo en los prime- tos afios de su aplicacién. Comprendian su ucilidad, pero la fuerte inversiGn que necesitaban para hacerlo, los retw vo por algiin tiempo. En 1874, Lucas Herrera y Obes cal: ulaba que cercar una legua cuadrada de campo, 0 sea 240 Cuadras lineales (20.616 metros) costaba mis de $ 6.000. Pero el costo bajé gradualmente, y se hizo menos pe- sado para el estanciero después de 1879, cuando el Cé- digo Rural reformado estableci6 la medianeria obligatoria, y los gastos se dividieron entre los linderos. Por ese aio Se calculaba el costo de una legua cuadrada de alambrado en $ 4320, con lo que a cada lindero le rocaba pagar la mitad, 0 sea § 2.160. "Qué estanciero poseedor de una legua de campo con los ganados correspondientes mo ha perdido solamente en el ultimo temporal mis de 2.160 pesos. ..?” preguntaba un periédico del interior. En 1882, el cilculo promedio de Carlos Maria de Pe- na, indicaba $ 3870 de costo la legua cuadrada, que re partido entre los linderos, daba $ 1.935. El descenso, pues, habia sido nororio: 1874: $ 6.000; 1879: $ 2.160; 1882: $1935. En la misma medida se aceleré el proceso de cer Pero le era mis ficil y barato cercar al hacendado que estaba mis cerca de Montevideo, centro de introduc: én de alambre y madera. El mismo de Pena calculabs que una cuadra cercada costaba $ 12.50 en una estancia 210 leguas de la capital, pero $ 18 en los departamentos del litoral, y $ 21.75 en’Tacuarembé y Cerro Largo. Esto revela varios puntos significativos: Ia importancia de la cereania a Montevideo en el precio de costo total, lo que demuestra que el factor que mas influia en él eran la ma- dra y el alambre y no la mano de obra; en segundo lugar, To costoso que resultaba alambrar en el norte froterizo, Jo que unido a sus otros rasgos arcaizantes y contratios al pprogreso, contribuye también a explicar su atraso relativo; yen tercer lugar, lo aceptable del costo en la zona del li- oral, la mas rica y por 10 tanto, la més capaz de emprender la tazea sin contenerse mucho por el precio. Esta zona y la del Sur, impulsadas por los fuertes miicleos de hacenda dos europeos que en ellas residian, entraron ripidamence 4 Ia subdivisi6n en potreros. En 1882, el costo promedial para todo el pais de la cuadra cercada, alcanzaba a 16 pesos con 125 milésimos Esto nos permitiré calcular cudl fue Ia inversién del pais en el alambrado, para compararlo primero con la existen tia de ganado, y luego con el valor de la tierra; sin estos puntos de referencia, la primera cifra perderia su signifi ado, Dr. Carlos M® de Pena, ano de lor principales propagen INVERSION TOTAL DEL PAIS EN SU ALAMBRAMIENTO. (1872-1882) Cileulo de Carlos M. de Pena, $16,125 por cuadra, y 457.026 cuadras alambradas $ 7.369.570.69 Extimacién de Adolfo Vaillant en 1879 5.000.000..00 Nuestro cilculo, a $ 16125 la cuadra, por el niimero de cua- dras alambradas segin cuadro anterior 19,002. 990.00 Esta cifta de casi 20 millones de pesos, comparémos- la con el valor de la existencia de ganados en todo el pais fen 1880: $ 53,681.40, Es decir, que la inversién en alam- brados en diez afios es equivalente al 35% del valor total del ganado en un afio. Como el procreo anual de ganados vvacunos se estimaba entre un 20 y un 30%, se deduce ue el pais empleé casi dos afios de sus procreos en alam basse durance el periodo clave de 1872-1882, Fue una fortisima reinversion de utilidades, que capitaliz6 al me- dio rural. ‘Veamos ahora la relacién entre el alambramiento y el precio de la tierra @Plano de ta extencia del Barém de Mend, inmediata ¢ Mercedes. Se disinene lg division de potreros y ta plata de Tos edifices de Petes, cbaber, ee INVERSION TOTAL DEL PAIS EN SU ALAMBRAMIENTO (1872-1882) Con relacién al precio de Ia tierra Valor de Ia legua cuadrada en 1872-76 $ 16387 Costo de su alambramiento en 1874” 6.000 Fl valor dél alambrado equivale al 25,4 % del valor de la tierra Valor de una legua cuadrada en 1877-81 $ 16945 Costo de su alambramiento en 1879 * 4320 El valor del alambrado equivale al 25,4 % del valor de la tierra, pero como ya rige Ia medianeria forzosa, y el ago se hace entre los dos linderos, el porcentaje baja & la mitad: 12,7 $6, Valor de una legua cuadrada en 1882-85 $ 23.744 Costo de su alambramiento en 1882 * 3870 El valor del alambrado equivale al 16,3 % del valor de la tierra, pero por la medianerfa forzoss, el porcentaje baja a 815 %, Como se aprecia, si bien el costo del alambrado fue bajando, las primeras inversiones fueron atisimas, supe: rando en 1874, a la tercera parte del valor de la tierra Luego, gracias a la medianeria forzosa, su costo que alcan- zaba a la cuarta parte de ésta, bajé a la octava en 1879, ‘Para pasar finalmente de la sexta a la doceava parte en 1882. Todo esto prueba ta enorme capitalizacién que para el medio rural significé el alambrado. Junto a la realizada en ovinos de Ia década 1860-70, el cercamiento de los cam- pos fue la mayor hecha en nuestra campaiia hasta 1885. EL mestizaje serd la cercera en el futuro, Consecuencias econémicas del alambramiento El cercamiento: base técnica de los cambios €conémicos en Ia ganaderia criolla Después del ovino, el alambrado fue el segundo ele- ‘mento transformador de la estructura econémica. rural. Gracias a se pudo dividi la estancia en potrero, lo que habeia de permitit una mejor alimentacién del ganado y habilitar al estanciero para emprender el largo y costoso ‘proceso del cruzamiento, que culminaria con Ia. modifica. ién completa de nuestra ganaderia basada en el primitive vacuno crillo. Estos dos hechos, mejor alimencacién y cruza, tienen én su origen al alambre. Por eso es que lo consideramos como el elemento téenico bisico de nuestra modificacion de eseructuras. Lo que ef tractor fue para los paises agei- cola, Jo constituyé el alambre para el uestro ganadero. Es mérito de la Asociacién Rural del Uniguay haber Drevisto sus ventajas e impulsado su adopcién; bien se dio cuenta de que era el primer paso habilitante para lo- agrar aquel progreso econdmico en que cifraba sus espe- anzas para salvar al pais, y a los estancieros. Uno de sus rohombres, Lucio Rodriguez Diez, definia con sama cla dad, en 1880, lis consecuencias del cercamiento: *... El cierro de la propiedad que se esti verificando de algiin tiempo aci, tiende a ese objeto; pero del cierto {general, es conveniente venir al porrero, con la subdivision de los campos por zonas destinadas a la cria y al engorde; al ganado mayor y al menor. El empocreramiento debe traer, como consecuencia ligica, la pradera artificial y el cultivo de focrajes apropiados para la clase de ganados que se uieran euidar, ya dedicindolos al engorde 0 a la cria. Y on ellos tiene que venir el cruzamiento con razas extran jeras,o la selecciin entre las que el pais posee. Porque el razamiento es imposible sin el potrero, la pradera y el fo- saje artificial, pues razas formadas a esablo, no pueden sostenerse sin degeneracién a campo libre y con alimenta- idm insuficiente. La seleccin de la raza tipica del pais, no Puede sujetarse al albur del campo abierto y s6lo en el ppotrero y con las subdivisiones adecuadas, es que se deben esperar de este sistema, los bienes que indudablemente ha cde producir en Ia mejora de la hacienda vacuna”. He ahi el mejor resumen de las ventajas del alam- bbrado para ls economia ganadera: engorde y cria; ganado ‘mayor y menor; alimentacién y cruza. Los estancicros pro- ‘gresistas comprendieron estas ventajas, y desde los prime- 05 afos del alambramiento empezaron a utilizarlo de acuerdo a esas normas. Un observador que habia visitado el departamento de Soriano en 1878, escribe sobre la eseancia “Concordia, de Anronio Prange: "Gracias a la amabilidad del sedor Prange tuve el gusto de observar las inmensas ventajas que se obrienen por medio de potreos bien distribuidos. Alaspocas cuadras del establecimiento esté una de las cabafas, donde se hallan carneros negrette «sangre pura» separados de las ovejas de la misma clase; esta cabafia esti situada fen el centro de cuatro potreros independientes cada uno de los cuales sirve para determinada calidad y nimero de animales cuya procedencia se halla consignada con la mis fma exactitud como si fuera un érbol genealégico de una familia de sangre azul; la fe de nacimiento de cada animal ce anotada en un registro especial que se lleva al efecto, fen el que consta de qué familia desciende, lo mismo que todos los demés pormenores acerca del desarrollo, calidad especial, fuerza, etc. ...Aqui se hallan «Merinas», «Ne- gretese, «Rambouillet», «Lincoln», y demés razas de pura Sangre, 10 mismo que las diferentes cruzas anotadas con es mero y cuidado'. En lo relativo a la cruza, el papel del alambre es, pues, clarisimo; pero también va a crear un nuevo tipo de «ra- bajo con’el ganado: Ia invernada, es decir, el engorde cal cculado de los animales para venderlos en los meses en que la hacienda es escasa y el consumo encuentra dificultades para proveerse. El mayor precio que se obtenia por estos Animales especiales, permitia abonar el costo del cercado Troplla de caballos criollos contenide por le manguere improvisada cen tiempo relativamente corto. Pero hay otras ventajas, que si bien son secundaria, pesaban considerablemente en el conjunto de Ia explora én ganadera. Por ejemplo, el cerco disminuye el pisoteo y la pérdida de los pastos por el ganado vacuno, de manera que cuando hay sequia, los campos alambrados se conser- Yan bien mientras que los sin cercar no tienen pastos. Cuando hay alguna epidemia, los animales pueden ser ais: lados en potreros alejados, y en el caso de que sean ataca dos por la enfermedad, se pueden salvar todos los cueros porque se evitan la dispersién y el robo. ‘También se economiza en sueldos de peones, que ya rho se necesitan para recoger animales que no pueden es ‘apar de los limites de la propiedad; ni representa proble- ima la estampida; ni los propietarios de mucho ganado y poca tierra, pueden utilizar la de los vecinos, como hacian Antes, porque el alambre se eleva como obsticulo insalvable ‘Los males de la ganaderia que el alambre eliminé 0 disminayé en sus efectos, fueron numerosos. Quizis ée pueda ser considerado como su aporte complementario a la Consolidacién del progreso econémico. ronta pars ser ensillald” (El Libro del Centenario del Uroguay, 1930) 69Asentamiento de la estructura de la propiedad de la tierra Como ya dijimos, el alambeado trajo una importanti- sima consecuencia juridica para el medio rural: consolidé el régimen vigente de la propiedad de la tierra, al delimi tar real y efectivamente cada predio, Para el grupo social de los grandes estancieros, que habia alcanzado la hegemo- nia econémica, nada mis légico que buscar el afianzamiento de sus bienes, oponiéndose a todas las situaciones que an tes, cuando ascendian, los fav bian llegado, los perjudicaban, Esas situaciones eran miltiples. Por ejemplo, el caso ya cizado del minifundista ganadero, quien, con demasia- dos animales para su poco campo, acoscumbraba pastoreatlo fen las tietras vecinas, generalmente del gran propietario. Tanto éste como la Asociacién Rural, protestaron frecuen temente contra tal hecho, llegando a hablar de un “comu- rismo de los campos”. El alambeado, al fijar el limite pee ciso y cerrar la gran propiedad, elimind esa situacién. De cia Carlos Maria de Pena en 18 Ha cesado en gran parte aquel comunismo de las praderas naturales, para el apacentamiento de los rebatios. El cerco de alambres ha ddado seguridad a la propiedad rural; ha obligado a cada woo 2 vivir de lo suyo y a usar sus propios recursos Con ello se eliminaba la posibilidad de la pequefia cexplotacién ganadera, desaparecian el minifundista y el agregado. Domingo Ordofana, el principal idedlogo de la Asociacién Rural, no tenfa reparos en confesar que ée ha- bia sido uno de sus objetivos fundamentales al pugnar por Ja implantacién del alambrado, desalojando a esos hombres, de la explotacién pecuaria. “Lis consideraciones que hemos aducido nosotros para prestigiar el cierto de la propiedad, més bien fueron de orden moral que de orden fisico, por que con el cierro queda la divisién bien hecha entre los son terratenientes y los que viven en la condicién de agre ‘on, ¥ ahora, que ya ha gados, y ét0s que son numerosos, deben perder toda espe ranza de ser ganaderos, ni de set stiles en la ganaderia in dustrial y deben necesariamente doblar la cabeza sobre el arado que es su vida y su porvenit’. Alli esti la expresiéa mis diifana de un interés exclusivamente clasista. Habia, que separar a los que tenian tierra de los que no la teafan, ¥ a é5tos reducirlos a la condicién de agricultores. Mientras los grandes propietarios, s6lo por serlo, les estaba ida In actividad més luceativa y rentable: la gana- que Esta afirmacién de la propiedad fue la que incité a toda la clase alta rural —hacendados progresists y hacen: ddados tradicionalistas o rutinarios— a alambrar. Todos vie- ron en ese hecho la concrecién de su derecho de propiedad, ‘no vigente ain con plenitud. Y todo el pais vio con ellos que el alambrado terminaba con una época y abria otra dis tinta, no tanto por la modificacién de estructuras econé micas que hubiera podido provocat, sino principalmente Por esa reafirmacién de un derecho que les era mas vital 70 ba Solidamente instalada en la propiedad ahora indiscutida, alambrada.La palperie no {ue silo contro de reanién sin para eb uiseno traniformado en "vate también trompa que cualquier otro, Inclusive un periédico urbano como “La Democracia”, anotaba en 1881: "... Los alambrados han dado por tierta, con respecto a los campos, con todos los usos y todos los vicios del antiguo sistema, como el arma de precisién, 0 sea el remingron ha dado en tierra con el reinado de la chuza. ...EI alambre en el reino econémico hha realizado el fendmeno que el remington realiza en el orden politico... El campo abierto era la propiedad en comin. El alambrado es la plenitud del ejercicio del de recho. Tncluso algunos miembros de la Asociaciéa Rural, los ‘rurales", ms progresistas, fueron arrastrados por ese em: puje de ‘reafirmaciéa propietarista, que pospuso los obje tivos de progreso econémico por ellos tan proclamades. La propia Asociacién se vio obligada a prevenir contra ese criterio exclusivista, que s6lo vela el beneficio en el cer famiento mismo: “También hemos pretendido explicar el alcance que tiene para el porvenir y las nuevas necesidades {que requiere, el cierzo o alambrado de los campos con la idea de destruir el falso concepto que hemos oido expresar de que: alambrados los campos o las propiedades, cesa toda necesidad de trabajar, todo cuidado, porque creemos, y los hhechos Jo estin demostrando, que después del cietro de la propiedad es precisamente cuando empieza la necesidad mis, grande de trabajar, porque el cierro de la propiedad no ts Ia causa, es el efecto de Ia escaser de tierras’ El cerco asumia asi el papel de simbolo final de Ia frontera": ya no habria mas espacios libres que explora, mis tierras que agregar a las propias; la propiedad estaba fijada y cada uno debia valerse con lo que ruviera, sin contar con lo del vecino, por supuesto, pero también sin contar con las tierras vacias del norte, que podrian seguir vacias, pero estaban vedadas por el cerco, Por lo tanto se hacia necesario mis trabajo para vivir de lo que cada uno tenia, Esto no podia preocupar al gran cerrateniente, pero si al pequefio estanciero, cuya suerte quedaba sellada. A él preferentemente se dirigia Ia Rural: "La estrechez de los ‘campos pide otro orden de aprovechamiento. Los alam brados aseguran la propiedad, pero también a reducen a lo que es propio, y ya no se puede contar con, lo ajeno. Cada cual en su estancia tiene que bastarse a s{ mismo. De lo contrario, la ruina es inevitable, os ganados se moririn de hambre, ...De hoy para adelante el estanciero pequefio {que no trabaje y saque todo el partido posible de su mo: desto «campito» es hombre perdido... Y nos ocupamos del pequefio estanciero con preferencia porque es de ese ‘premio que se compone la mayoria de nuestros hacendados Esa. "mayoria” fue efectivamente perjudicada por el alambrado hata tal punto que se puede sostener que el ‘lambre eliminé el minifundio ganadero, y atin muchos ‘medianos propietarios se vieron obligados a vender sus tierras por el costo del cercado. Es que, como ha pasado siempre en nuestro medio rural, as inversiones importan tes sélo las pueden hacer los grandes propietarios; los pe ‘quefios, colocados en situacién de desventaja productiva ppor no poder alambrat, o por estar obligados a pagar una medianetia que les imponia —por ley— su vecino mis poderoso, tenian que vender ganados o tierra. Ademés, todo Adelanto técnico supone un perfeccionamiento de la pro duccién. Cuando a causa del alambrado se implantara elimestizaje y se criaran animales superiors, ca quiéa podrfan venderle su ganado criollo los pequefos propietatios? Su destino se presentabs muy claro: o se sumabsn al impulso renovador y producian segin las nuevas exigencias —lo ‘que requeria dinero—, 0 quedaban marginados de la ac- tivided econdmica rural. Esto fue lo que le sucedié a ta imayoria, tendiendo a disminuir en peso social y econémico Ja clase media rural, a la vex que aumentaba la fuerza de Ia clase alta Ya demostramos que el alambrado fue bajando de costo, Pero no lo suficiente como para ponerse al alcance del pequefio o mediano ganadero. Por Ia simple poca ex- tensién de sus predios, a la mayoria le costaba extremada- ‘mente caro alambrar, ‘Ademis, el alambrado resultaba mis barato para el duefio de una gran extensi6n que para el pequeio pr tatio, en relacion a las superficies de sus respectivas tierras. Véase este simple ejemplo aritmético: sea un campo de 50 his, de lado; su superficie seré de 2.500 his. y su pe- rimetro (a alambrar) de 200 his. Imaginese otro de 100 his, de lado; su superficie seré de 10.000 his. y su peri metro de 400 his, El propietario de este tltimo (que a los efectos del ejemplo, consideramos “gran” propietario) alam- bra una superficie 4 veces mayor al tiempo que su perf metro es 2 veces el del otro propietatio. Comparindolo con a superficie del otro predio, al “gran” propietario el cierre le cuesta la mitad o visto desde ‘el punto del "pequedio” propietario, a éte le cuesta el do- ble alambrar. Por Jo tanto no puede hacerlo, en muchos ‘atos, se resigna a vender. ¢A quién?, a quien puede com- prarle, a su vecino gran” propietario. Ta conclusién légica es que el alambrado favorecié ‘la gran propiedad. Por ello lo apoyaron con fervor tan inusitado los hacendados rutinarios. Se puede decir que el Los sroperos fueron expultadot leetamente de le produccién, ferrocarrils y alambredos se unieron para ello. alambrado fue el ‘nico objetivo de In prédica de la Rural que se cumplié completamente; pero no porque la cam- Pavia entera quedara subyugada por su propaganda reno- vadora, sino porque el cerco coasolidaba definitivamente Ia ‘estructura de la propiedad de la tierra que regia en ese mo- ‘mento en el pais. Ante la importancia de ese hecho, hasta el objetivo de la Rural, que era conseguir la definicién de Ia propiedad privada como base para el desarrollo econd- mico, quedé relegado a segundo plano. Y todos los rura les se lanzaron al cercamiento, dndole prioridad a la pri- mera intencién sobre la segunda. Por eso el alambramien to fue general, por eso los “tradicionalistas” no discutie ron la prédica de los “progresistas”. Todos se embarcaron en la misma una vez satisfecha esa finalidad, nue- vamente se dividieron: los “tradicionalistas” siguieron con sus viejos métodos de ganaderia extensiva, y los “progre- sistas” lo tomaron como punto de partida de las innovacio- Pero lo que importa enfatizar ahora es que el alam. bre, al delimirar la propiedad, marcar la vier, fijar la po sesion, Hev6 fatalmente a la consolidacién del latifundio y de la sociedad tradicional. Ambos, pero sobre todo el pri- ‘mero, fueron obsticulos insuperables para la creacién de un desarrollo econémico rural viable. Por defender sus intere ss de clase, los rurales mutilaban su propio empuje pro: (gresista, destindndolo a la frustraciGn, Predicaron el alam. bramiento aun sabiendo que consagraban, y hasta agranda- ban —por las ventas de lot pequefios propietarios— el la tifundio. Creyeron, quizés, que podrian superar esa valla contagiando al Latifundista rutinario con su espiritu de pprogreso y adelanto; se equivocaron radicalmente. El lati fundio fue més fuerce que ellos: acepes el alambramiento ppara fortificarse, pero el segundo paso, perfeccionar la ex- plotacién, no lo dio nunca; no tenia interés en darlo 73