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UNA LENGUA COSIDA DE RELAMPAGOS val flores FIEBRE DE UN GESTO podremos extenuar a tetra hasta el ‘xtasis dela compulsion voleénica? UUna escritura feminista que se hace en el ritual nomade de una politica del cuerpo al explorar luna fisura contingente, una posibilidad agazapa- dda en el lenguaje cotidiano, un destello en la maginacién inauadita del mundo que queremos crear. Tan impropla, tan desquiciada, esta tenaci- dad en el gesto diaspérico de una lengua cuyo festremecimiento nos impide descorazonar, Un Intento de deambular migicamente entre los mo- los de hacer educativos, los viajes escriturales, los desplazamientos geopoliticos, les infecciones \isciplinarias y 1a subversion de las jerarqutas ‘4A LENCUA ConA BE RELAMOAGOS val Horse sexuales, como un acontecimiento polimorfo de equeias conspiraciones sensibles, poéticas y politicas desde el sur. Un ejereicio extético y protelco de minimos guifos 4e antidiseiplina desde los feminismos excremen- ticios y la disidencia sexual, una apuesta ontoldgica y experimental de incrustar un abismo en el cen tro de las palabras. Gesto y lengua en erupcién de ‘una economia de la interrupeién de los procesos de ‘normalizacion sexual, de género, racial, de clase, ccapacitista, La flebre de este juego serin los es- combros de nuestro presente al extraflar y torcer sus modos de inscribirlas marcas corporales y de componer afectos, en una faena de desprivatiza- clon y descolonizacion de las narrativas de nuestrasidentidades repulsivas, Hacer cuerpo en Ta experiencia de eseritura, una intimidad que se arriesga, una palabra que se ‘A LENGUA COSIDA DE RELAMPAGOS va ores abandona, como un pasadizo secreto a nuestras tensofiaciones sin duelo, porque ne hay gesta pos- ticalen unas palabras que se resisten al deseo. 11 feminismo es una travesia en el amanecer de- ‘morado de una insolencia que desguaza la man- sedumbre de una utopfa redentora, consoladora y bsoluta, El jadeo epitrida de una lengua liminal {que enloquece en cada desaprendizaje en los su burbios dela luminosidad algorttmica, Un gesto de \lesercién vitatista, una musea tan errética como Vagabunda, un nombre que continuamente se des- hombra, una practica que aloja la propia posibili dad de 1a decepeién, una heterotopia que mina jwcretamente el longuaje y arruina de antemano In sintaxis pablica Hi feminismo como poétics det cuerpo y politica de Jn letra es estado de convulsion, vértigo de pregun- (, desacomodamiento de la facilidad. Un susurro DWALENGUA CIDA DERELAMPAGOS val lores ético y un desvio temporal, espacialy sensitivo en una mieroficcién disonante de la civilizacion, Porque el desprendimiento del pellejo adherido a los protocolos del disciplinamiento corporal y fepistémico, es una invitacion 2 singularizar la distorsion de los ideales regulativos dela subjeti vidad neoliberalyy sus coacciones normativas. Una plebeya activacién pottica y erdtica de la lengua como un ensayo de urgencia para montar tun tono rugiente y sigiloso del pensar ferninista- mente que disloca las imagenes sedentarias y grandilocuentes de la consigna consagrada en el polvo de la historia, para habitar y propagar los uumbrales turbulentos de las ficciones politicas pasadas que nos legaron como huracanes del pre- sente, y aquellas sofiadas como tempestades del futuro hambrientas de otros nombres y gests. Fic ciones fallidas, equivocas y disruptivas, desde ‘ea sNGUA costDA DE RELAMAGOS: val lores tuna sensibilidad que desfigura los contornos del pareelamiento de a vida. Un encarnizado trabajo de despojamiento de los clichés, de los nombres, cristalizados y agotados que nada nuevo tienen para decir de nuestras vidas precarias. Que el ritmo vibracional feminista nos suefte con la perplejidad.a flor de piel, pulverice el espejo de la mismidad y rompa los labios cenicientos de si- lencfo, para hacer del éxtasis ancestral de toda audacia lectora una complicidad compartida des- de Ia paciencia brutal de una intensidad sismica ‘que instiga a fugarnos de la conformidad gastri- ccadela escritura Porque cada piel exige un idioma...de plumnas, de sauces, de silencio, de arena, de estrellas, de wias, no para entender, sino para saber la longitud de lallama... ¢CUANTOS MUSCULOS TIENE TU PACIENCIA ANTE LA INCERTEZA? QUIEN SE AHOGA EN EL PANTANO DE SUS PROMESAS? ;VOLVER ES PARTIR? ;QUE HAY ENTRE ESPINA Y PA- SADO? ;POR QUE NO TIENES SALIVA EN TU ILUSION? ;COMO SE DI- CE LA EXUBERANCIA TRENZADA AL RIESGO DE UNA CARICIA? ;PO- DRAS TRASPASAR LA POLITICA DE LA NIE- BLA PARA VER MI DE- SEO? COMO ES ELRO- cio QUE HABITA BAJO TUS PARPADOS? ;SE- RAS CRUDA PARA TAN- TA VERGUENZA ANTES DEL RAYO? ;COMO ROZAR TU DESIERTO QUE HACE TAMBA- LEAR MI LENGUA? ;TO- DA VORAGINE CUL- MINA EN HUECO? ;VI- NISTE A BUSCAR PLA- CER SIN UNA ETICA DE LA BRUTALIDAD? ;CO- MO ARRUGAR EL HER- UNA LENGUA COSIDA DE RELAMPAGOS ‘Ciudad de Neuquén, una mafiana de invierno de 41976 en un barrio perférico, Recién nos habiamos mudado desde Capital Federal, hacia muy poco tiompo del golpe militar, Ese dia, alos 3 afios, me corté la lengua, En la casa que alquilébamos, una de las tantas que nos cobijaron apenas migramos, habia un arbol en el centro del patio de tierra. Yo ‘me queria trepar a ese érbol, exhalando ya mis ai- res de chonguita. Hice una pila de tarros de pin- tura para subirme y se desmoroné junto con mi ‘cuerpo. En la caida, mis dientes se incrustaron en el medio de mi lengua, provocando un enorme y hhondo tajo del que la sangre afloraba a borboto- nes. Mi madre, asusteda pero ejecutiva, me Newb en colectivo al hospital piblico junto con mi her: ‘mano. Mi padre estaba trabajando. Fra um dia fe. riado y casi no circulaba gente por las calles. Ya fen el hospital, como mi lengua no paraba de san- sgrar y era una herida profunda, me cosieron sin anestesia mientras mi madre me sostenia en sus brazos, Dice ella, mi adorada proveedora do re- euerdos, que los médicos me felicitaron por valiente porque no loré. Por la tarde, los puntos se me salieron pero ya habia dejado de sangrar. Y as{aprendi a andar con la lengua remendada, he- ida, cortajeada, cosida por un deseo fracasado pero probado. Siempre fue un problema Ta lengua para mi. Un problem, una obsesién y una posibilidad vital. Ha- cerle frente a mi timidez y a mi ritmo silencioso, ‘URALENGUA CORIDA DE RELAMPAGOS va Mores no hizo més que situarme involuntariamente en el escenario de una guerra que no habia elegido. se dicho tan disciplinante como una sentencia punitiva, “te comieron Ia lengua los ratones", co- mo si fuera a activar un habla compulsiva y automética, fue una marca que me acompafé du- rante toda mi niiez, y paradéjicamente a lo que se esperaba, sellaba atin mis ung pedagogia de! silencio que se incrustaba como un aguijén en mi cuerpo Este rigor mutis hacia de mi lengua una asonada para los imperativos del decir, de eso que se debia, decir, Claro, nunca tuvieren oportunidad de asolar ‘me con el praverbio sexista y misogino que se les adjudica las mujeres, de tener a “lengua larg: wa ewovA cori Be RELANPAGOS va lores porque poco hacia para parecerme a una mujer. Por el contrario, mujer era una identidad que me ldesconocia{Y cuando empect a politizar esa len- gua que hablaba de mi cuerpo, esa lengua binaria ¥ heteronormativa, también se abrieron otras he- das, otras costuras, otros tajos, una contusién tpistémica (Basile, 2008). Esa lengua que aprende- sos en la escuela, en La familia, en la television, en fag revistas, en el club, en las bibliotecas, era recta, seca, blanca, vertical, igubre, con pocos recove- cos para el palpitar dela imaginacién) — pesde que era nifia, una nifia masculina, me da pan miedo las tormentas, Mi madre dice que nact tun éfa portefio de Ilavia fuerte, con truenos ¥ Te Tampagos. ¥ algo de ese resplandor Fugazy de ese ‘ea ENCUA cosDA DERELAMPAGOS va Mores temblor atronador se me debe haber instalado en el cuerpo, mas certeramente en la lengua.|Prime- ro ven{a el reldmpago a descubrir mi temor en las {grletas de mi cuerpo, mi soledad ensortijada ala piel de las palabras, y luego el trueno me hacia ‘entrecerrar los ojos y apretar a lengua, con el co- razon latiendo a la velocidad de la luz 0 de una sombra que se escapaba entre las persianas rotas de la casa, Tal vez, desde esos tiempos primigenios se incubé ete estremecimiento para mi lengua por venir ‘La lengua como obsesién, asi es mi existencia en- tte las palabras, entre los sllencios. La lengua se hizo vertebra textual y sexual, incandescente y crepuscular, de mi propia vida. Asi advierto que a LeNoua cost ae RELAMRAGOS va Mores iis escritos ficclonales, pedag6gicos, politicos, ‘poéticos, estén plagados de figuraciones sobre la Tengua: la lengua del mandate y la lengua det de- sacato, la lengua bifida de ta lesbiana, ta lengua ‘sexual del presente, la lengua cimarrona, la len ‘gua interdicta, la deslenguada, el sacar ta lengua como gesto feminista, Ia lengua que escribe con- tra st misma, la lengua de la normalizacién, 1a tengua del sur, la lengua del péjaro que no sabe si puede nombrar et ojo de su verdugo, cada mudan- ‘za que me hizo perder un pedazo de mi lengua. todas heridas que perturban una lengua legal y preceptiva, con sus mucosas profilacticas y sus téenicas asépticas de produccién del yo, del mundo, del cuerpo.) ‘Dun LENoUA cosIDA DE RELAMPACOS al lores ‘Una lengua, mi lengua, como un acto colectivo y no posesivo, para ensayar un modo sensible de decir y de pensar desencajado de los ideales nor- rmativos y programaticos del género y la sexua. dad, y dar forma singular e inédita a la nifia ‘masculina, ala activisa lesbiana, a la pensadora feminista, ala maestra proletara, 21a poeta sure- ‘ha, la amante promiscua, ala teérica sexual, ala teabajadora precaria, a la migrante provinciana, ‘Una lengua que se hace esfinter de esos relampa- {gos que fui acopiando en cada tormenta, devota y fervorosamente, para jugar al destello efimero de otras vidas posibles. Una lengua extraila y pen- denciera que rechaza el estatuto de lo inmacu- lado asi como la pregunta slempre tramposa por wa eNeuA cosiok ne RELAMPAGOS val Doees 1 origen, que no es mas que umbral de movi imientoe hibrider, {sta lengua, obscena eimpédica para a higiénics 'y normalizada lengua colonilista y racista de 1a ‘Corona académica y empresarial de Espafa, que ha chupado clitoris, anos, dedos, vulvas, bocas, axi- fas, tetas, pezones y pieles, atesora el éxtasis de la carne, deletrea una Identidad como pasajera del ‘deseo y besa una politica del saber perversoJUna tengua que ha lamnido la rareza como estigma y co- ‘mo condicion del saber, una poétics del lenguetaz0 Sexual para sacudir el mundo. Una lengua para sentir, para tocar, para rozar, insaciablemente ccariosa y de apetite erdtico. Una lengua actistica fen la que resuena una proliferacién inadecuada de lecturas, que afiebrada se enreda y acaricia ‘Dea teNGUA Cost BE RELAMEAGOS val lores ‘con otras lenguas,y se vuelv fe eco singular de una ‘escucha demorada en los aiicos de as palabras. Una lengua de la dificultad y la opacidad refracta- ra, que hace colapear un sistema de inteligiblidad {el cuerpo, wn régimen de lectura que aplana hori zontes y texturas del decir, que fagocita los mati ces, los detalles y accidentes, y demanda sentidos aptos para el consumo rapido y sin contrariedade para una deglucién amansadora y domesticadora del trance postico. ‘Una lengua remendada por los derroteros de Ia luz, que insiga a Is friceién con otras lenguas, ardiendo en patpitaciones onircas, trastornada por nuestras materialidades precarias. arias, Porgue la hhuella del derpojo ya destruccién la forjan como tuna lengua cruda, sin alivio, donde habita una a enc cosioa nt RELAMPAGOS valores amistad funeraria enclavada en el memorial de cedaveres que nos recuerdan el terror de} poder fsicomola vulnerabilidad dela vida. Frengua de sefas, de gestos, de tropismos de a di- fsidencia, del disturblo somético y del sabotaje Gplstémico, de las interferencias a escala celular has que afectan la fistologia de las palabras en su Constituci6n organica, y practican el arte del des: fronamiento y de la irreverencia para desacralizar Jnetuso nuestra propia experiencia del activismo politico y linghistico. ) ‘Una lengua feminista y de la disidencis sexual tte amor por la mindscula y por el merodeo del pensamiento, qwe no se queda quieta ni fia, ave te agita y zigzaguea entre Ia luminosidad y 10 Inedvertido de su Impostura, que sabe detenerse [DwA NCUA CORDA BE RELAMAGOE va Mores fen la minima entrafia de las cosas calladas que esperan su ocasién de decir/se. {ina lengua que se saca al aire pitrido heterosexual, al exterminio capitalist, a Ia blanca hostilidad de los suet gue se exhibe en su esplendorjugoso y himedo de la perversion, como una mueca pornogratica que desorganiza Ta topografia somética de la decen- ia y a moral, un ademén burlesco para los escri- bas del régimen. Una lengua dubitativa pera no por ello menos decidida a a virulencia fiecional y ala efusiva (in)sociabilidad, excedida en su den- sidad metaforica, que la arranca de los lugares cémodos y habitables para hacerla transitar por la espesura y la curvatura de unas preguntas que no acallan su tonalidad batallante. Una lengua wa tenoua costa oe neLkxracos: val ores como acrobacia festiva, burla de sty paras, como gesto de des-educarnos de la promesa de cual- uierradicalidad tutelada que osemos encarnar.? Cuna lengua del titubeo, del tartamudeo, que ba- ‘bea, que se desborda y tropieza, desobediente a los ‘mandatos reglamentarios y rutinarios de las es: crituras dea militancia y dela gestién técnica de Ja subjetividad con su lenguaje masivo, transpa- rente, sin vaguedades anatémicas ni beligeran- cias semi6ticas, Una lengua amante de wna erdtica del conflicto, melancélica y aguerrida, euya eco- ‘noma libidinal se mueve entre los murmullos de las palabras y los cusrpos, como el insomne desa- fo estético e improductive de hacer politica con poesia) ‘ea ENGUA COSI DE RELAMPAGOS val ores Una lengua de una comunidad de extraviadas que hhabitamos espacios intersticiales y territorios {imprevistos,en Ia que se pulveriza toda ilusion de lunidad. Una comunidad eseritural que no cesa de (sacar la lengua) de desvariar en la insolencia de escribir como no se debe, come una diaspora del parloteo balbuciente y la gesticulacién orgidstica «de-un pensamiento poético embriagado de penum- bras, fantasmas, magia, ironfa y alteraciones csmicas. Una lengua de la amistad como episte- ‘mologia politica, acurrucada en una pasién y una ternura inusitadas, calibrando el efecto fisico de cada palabra, su aspecto material, su disposicién visual, su estructuracion deseante, todas tacticas ‘que nos abisman a la exposicién de la contingen- ia ya la intemperie conceptual ea t2WeUA costa DERELAMEAGOS {val ree ‘Una lengua que no busca entender ni ser enten- ida, que persigue‘el alboroto y el desorden de ‘esas voces que organizan les protocolos de la nor malidad, contrariando el imperative tirénico de ‘un llamado a “entender” que supone la supresion de toda curiosidad y disconformidad. Cudnto de fsa pretensién por “entender” nos conmina a la violencia de tener que abandonar una lengua pa- ra que se entienda lo que ya se entiende, a hablar tuna lengua que castiga cualquier excepcién 0 desvio que no consienta el estindar mayoritario de clase, racismo, heteronormatividad, binarismo de género, esténdar corporal, aultocentrismo, ) tna lengua del riesgo, més de abandono que de amparo, més de desercién que de afiliacién alo ya conocido, la que se lanza a a experiencia sismica UNA LENCUA cosiDA De RELAMPAGOS | val Mores del estremecimiento de una (contramemoria y de tun (Zesolvido que arrecia la inventiva de fieiones fallidas, equivocas, erraticas y disruptivas de nor- malizaci6n. Una lengua dispuesta a exponerse al limite, con una disposicién agonistica que no te- me a la traicién para interpelar las narrativas de ldentidad (sexuales, genéricas, isciplinarias) demasiado seguras de si mismas, que asfixian posibilidades vitales y clausuran imaginarios experienciales, (una lengua geografica, la lengua del desferto, del viento y los rios, del cardo y el petréleo, de la trashumancia, con las marcas historicas e inde- lebles del genocidio mapuche, que ensaya una préctica descolonizadora con interdicciones, hla- ‘0s, puentes, 0 apenas hilos que descuelgan una ‘wea NCUA cOsIDA DE RELAMFAGOS val lores complicidad relacfonal como creacién inaudita y multiforme que acontece en las periferias de ts smetrépoll.) ‘Una lengua de Ia disonancia, que tuerce cual- quier representacién sedimentada, y forcejea en Jos campos residuales del sentido, en esos espa clos liminares que combaten 1a liturgia de 1a armonia y el discurso liberal de la {gualdad y 1a (iversidad, Una lengua de un agut y ahora, que ‘escarba en el presente y no enmudece los gritos del pasado inconcluso, que no persigue la excep- cionalidad n\ la propiedad privada de a creacién. (una lengua interespecie, habitada y desbordada de ‘otras vidas, tangibles y ficcionales, de microor- sganismos que se escabullen y burlan le vigilancia OMALENCUA Cosi DE RELANPAGOS jal Moret de lo humano, que contaminan los limites espe- cistas de los euerpos, una lengua que se sustrae a lag dindmicas jerarguizantes para operar su des- baratamiento en las tinicblas de la garganta del ‘canon antropocéntrico) ‘Una lengua que se mueve en los cireultos mas ca- pilares y clandestinos de a institucionalidad, que {intenta abrir el apetito de los insolitos e inade- ccuados modos de decir(nos), haciendo colapsar el ‘monolingiismo sexual y cultural, y que apuesta, con sus fallas, anacronismos y equivocos, ala in- vencion de un futuro de justica erética. No es la lengua del estado ni de las maquinarias épicas ‘que con sus ficciones universales y aplanantes ‘eliminan toda aspereza dela superficie demasia- do pulida y educada de su gramatica ansiolitica, wa eNoUA cosioA DE RELAMFAGOS {val ores ‘Una lengua que desorganiza las bases del contrato cescritural heterosexual y rompe la conformidad politica apaciguada por los lugares comunes del ri- to institucional, de las tradiciones hegeménicas, del credo militante, de los saberes oficiales y las jerarquias diseiplinarias, Tuna lengua que produce actos alqusmicos para fantasear modos de existencla con los residuos de la maquina semiética heteropatriarcal que gobierna las palabras y las vidas, y también con los dese chos dela instituclonalizacién y normalizacion del ferinismo de pancartas y consignas aprisiona- das porellenguaje iberaly de derechos. ) ‘una lengua de sensibilidad espectral, transmisora calérica de energfas de rescate de nuestros sentidos dela rebeldia y de a emancipacion para subvertir ‘Wn LeMouA cosio DE RELAMPAGOS va Mores cl alfabeto del poder, del destierro poético que nos recuerda en clave micropolitica y cromética, con la astucia erizada y la voluntad impertinente, que'el lenguaje no es una zona de conciliacién ni repotonniarmonia.) ‘na lengua viajera hecha contra las fronteras del saber, en la porosidad de la ambigiiedad, con el cextratio poder de electrzar el espacio entre dos pa- labras para provocar mutaciones imperceptibles, Poblandola de diferencias sutiles 0 mindsculos Una lengua cosida de relémpagos, com las punta das de a impureza y la fragilidad, lacerada por et misterio y la insurgencla, Tengo un texto pen- diente, aplazado, sobre las innumerables cicatri ces que habitan mi cuerpo. Un corte en la cabeza wa LeMoua cosioa pe RELAMPAGOS jv lores como trofeo de un juego infantil, una vescula ex: tirpada de urgencia, wna cirugia laparoscépica por una intervencién uterina, pero displasia de mis lunares hace su mayor trabajo, silencioso y persistente, que amerita con frecuencia la sec- cfm del bsturi AS{ se fue cosiendo mi piel. En esas cicatrces se celebra la memoria del dao, con los ramalazos del dolor que persist y con la plcazén que evoca “la tomuda persistencia de la sangre seca” (Basile, 2008) armando un presente como un palimpsesto de eada sed que nos ha mor- Aisquendo en nuestra historia/Sin embargo, en cere céleulo de 29 ciatrices que llevo hasta el ia ‘de hoy y que constelan mi cuerpo lesbian, qued® ausente la cicatriz invisible de Ia lengua dela in- fancia, esa que indujo una politica dela lengua ‘WALENOUA cosoA DE RELANPAGOS val lores ‘que note teme ala herida porque la hace gesto in- solente del deseo, que hace de las cicatrices la ‘memoria viva del ensayo escritural, la experimen- tacién sexual, Ia posibilidad colectiva, la creacién pedagdgica, la critica feminista. Una lengua cosida de relampagos para iluminar, fugaz y ardiente, ese silencio de nifia y esa experiencia postica que viveen las suturas politicas de a carne? [OMA LENGUA COSA DE RELANDAGOS va Mores E, (2008) “Cicatrices Ungirticas que picen Pensamientos sobre traduceién como una pottica de furacién cultural’. En: DeSignis N” 12, Traduccion / Género / Poscolonialismo, Calafate, by Gedsyel, P (Coords), FELS La crujia, Buenos Ares,

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