Teodoro Palacios Flores

Atleta
 Guatemaltecos que dejan huella

Teodoro Palacios Flores (Atleta)

Teodoro Palacios Flores es considerado la leyenda del atletismo, obtuvo medalla de oro en tres ocasiones en los Juegos

Centroamericanos y del Caribe, ganó medalla de oro en los Primeros Juegos Iberoamericanos de 1960 en Quetzaltenango y

participó en el campeonato mundial en el Madison Square Garden Nueva York en 1962 donde obtuvo el tercer lugar.

Teodoro es la leyenda viviente, nació el 7 de enero de 1939 en Livingston,

Izabal. Desde muy pequeño su vida se tornó difícil, pero nada de lo
que vivió lo detuvo, él nació para resaltar, para sobresalir en todos los
aspectos. A sus dos años de vida falleció su mamá, su abuela materna lo
acogió y crió hasta los ocho años cuando falleció ella también, luego una
tía lo recibió en su hogar, pero de allí el dispuso emprender a los dos años
de estar allí.
Lustró zapatos, durmió en la calle, algunas veces comió otras no, pero él
siempre con la ilusión de ser un jugador de fút bol, sin embargo, durante
su intento por lograrlo, conoció entrenadores que le aconsejaron que él
tenía habilidades para practicar distintos tipos de saltos y llegó a saltar
hasta 2.16 metros.
En 1970 viajó a Estados Unidos en busca de superarse intelectualmente,
estudió la secundaria por madurez, logró una Licenciatura en Educación
bilingüe en Chicago State University. Se convirtió en catedrático de
hispanos que no hablaban inglés. Obtuvo una maestría, fue asesor del
alcalde de Chicago, y en su honor, el Gimnasio Nacional “Teodoro Palacios
Flores” lleva su nombre. La Orden del Quetzal forma parte de otras de sus
condecoraciones.v
En la actualidad vive quebrantos de salud producidos por la diabetes y un
derrame cerebral.
Teodoro Palacios Flores es una leyenda viviente, ejemplar para todos los
guatemaltecos, aún más para todos aquellos que por alguna razón no
crecen dentro de un ambiente con oportunidades y con el calor de hogar.
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