Pitágoras, nació en Samos alrededor del 569 a.C. Cuándo y dónde murió es un misterio, pero en el 460 a.C. los pitagóricos, el culto que él fundó fue atacado y destruido. Muchos supervivientes huyeron, posiblemente Pitágoras era uno de ellos, pero incluso esto es una conjetura pues no sabemos prácticamente nada sobre Pitágoras. Su nombre es bien conocido, básicamente debido a su famoso teorema sobre triángulos rectángulos, pero ni siquiera sabemos si Pitágoras lo demostró. Sabemos mucho más sobre la filosofía y las creencias de los pitagóricos. Entendían que las matemáticas tratan con conceptos abstractos, no con la realidad. Sin embargo, creían también que estas abstracciones estaban encarnadas de algún modo en conceptos «ideales», que existían en algún reino extraño de la imaginación, de modo que, por ejemplo, un círculo dibujado en la arena con un palo es un intento fallido de un círculo ideal, perfectamente redondo e infinitamente fino. El aspecto más influyente de la filosofía del culto pitagórico es la creencia en que el universo se funda en los números. Expresaban esta creencia en simbolismo mitológico y la apoyaban con observaciones empíricas. Por el lado místico, consideraban que: El número 1 es la fuente primaria de todas las cosas en el universo. Los números 2 y 3 simbolizaban los principios femenino y masculino. El número 4 simbolizaba la armonía, y también los cuatro elementos (Tierra, Aire, Fuego, Agua) a partir de los cuales está hecho todo. Los pitagóricos creían que el número 10 tenía profunda trascendencia mística, porque 10 = 1 + 2 + 3 + 4, que combina la unidad primaria, el principio femenino, el principio masculino y los cuatro elementos.