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El documento es una carta de despedida a un padre que falleció recientemente. El autor expresa que su padre siempre fue su mejor amigo, consejero y maestro. A pesar de extrañar su alegría, optimismo, sabiduría y gran amor, el autor agradece a Dios por haberle dado un padre tan bueno y ejemplar. El padre siempre estuvo disponible para el autor y marcó su vida de manera inolvidable.
El documento es una carta de despedida a un padre que falleció recientemente. El autor expresa que su padre siempre fue su mejor amigo, consejero y maestro. A pesar de extrañar su alegría, optimismo, sabiduría y gran amor, el autor agradece a Dios por haberle dado un padre tan bueno y ejemplar. El padre siempre estuvo disponible para el autor y marcó su vida de manera inolvidable.
El documento es una carta de despedida a un padre que falleció recientemente. El autor expresa que su padre siempre fue su mejor amigo, consejero y maestro. A pesar de extrañar su alegría, optimismo, sabiduría y gran amor, el autor agradece a Dios por haberle dado un padre tan bueno y ejemplar. El padre siempre estuvo disponible para el autor y marcó su vida de manera inolvidable.
Nuestro mi Padre siempre fue nuestro mejor amigo, nuestro consejero
y nuestro maestro. Acaba de partir a un lugar mejor, a un lugar donde
siempre perteneció. A sus 83 años por fin se encontrará con sus Padres y desde ahí velarán por todos nosotros.
Sin embargo, aún no encontramos como continuar sin su alegría, su
optimismo, su sabiduría y su gran amor. Nuestro Padre nunca dejó de decirnos cuánto nos amaba a través de su trabajo constante y sacrificado, tampoco lo importantes que éramos en su vida. Recordaremos por siempre sus palabras de aliento, de confianza y de orgullo. Hasta hace unos días estaba molesto con Dios porque sabía que este día estaba cerca y no quería aceptarlo. Pero ahora que veo todo con más claridad lo único que puede decirle al Señor es GRACIAS. Gracias por haberme dado un Padre tan bueno y tan ejemplar. Cada día que me levanto le pido a Dios me permita ser como mi Papá y creo que eso es para mí una gran bendición. No cambiaría nada de lo vivido con mi Papá… perdí a mi Mamá siendo muy joven, pero mi Papá se las arregló muy bien para que yo creciera siempre con el recuerdo de mi Madre y para que los dos solos salgamos adelante.
Yo siempre estuve primero en la vida de mi Papá, nunca se casó
porque siempre quiso estar disponible para mí y así fue. Cada vez que recurrí a mi Padre, el siempre estuvo ahí con los brazos abiertos. Espero Papá que desde el cielo me estés escuchando y me sigas escuchando cada día porque creo que nunca podré dejar de hablar contigo y recurrir a ti para pedirte algún consejo. Gracias por enseñarme a amar sin reparos, a dar sin esperar nada a cambio y a soñar sin límites. Yo, mi esposa, mis hijos y todos los presentes aquí te extrañaremos y recordaremos cada día, porque marcaste nuestras vidas y será imposible que estas huellas que dejas en nuestros corazones se borren a pesar del tiempo. Te amo Papá. Desde aquí te mando un fuerte abrazo y muchos besos. Un favor Papá, no olvides decirle a Mamá cuánto la extrañé y cuánto la amo a ella también.