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El

contacto con los Guías Extraterrestres y con nosotros mismos nos enseña
que todo es pensamiento, actitud y amor; que las experiencias no sólo se dan
a un nivel físico, sino también mental y espiritual; que el primer contacto que
necesitamos mantener es con nosotros mismos y que sin este permanecemos
aislados del cosmos; en definitiva, que vivimos en un universo sin límites y
que el único límite es nuestra ignorancia.

En épocas de cambio y agitación, el pesimismo suele apoderarse del ser


humano, los más negros augurios cobran actualidad. Sixto Paz, ufólogo de
fama mundial y creador del grupo de contactos Misión Rama, nos descubre
que las profecías no tienen por qué cumplirse. El futuro que entrevén es sólo
una posibilidad que puede y debe ser alterada para corregir nuestros errores.

La antiprofecía nos relata la aventura personal de su autor: sus contactos con


extraterrestres, los mensajes que ha recibido de ellos y las enseñanzas de
culturas antiguas que ha ido acumulando a lo largo de los años. Además, nos
brinda una interpretación personal de las otras famosas profecías de la
historia, desde San Juan hasta Nostradamus. Entre sus originales
interpretaciones destaca, por ejemplo, la escalofriante prefiguración en los
textos bíblicos del ataque terrorista contra las torres gemelas.
Sixto Paz Wells

La antiprofecía

Revelaciones de los Guías extraterrestres para el Tercer Milenio

ePub r1.1

XcUiDi 17.07.16
Título original: La antiprofecía

Sixto Paz Wells, 2001

Editor digital: XcUiDi

Corrección de erratas: Mozartillo

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mediante archivos como este·
Este libro está dedicado a Claudine Jacober, por su amistad y sus hermosas
cubiertas, que han venido caracterizando mis libros; a Ignacio y Clarita
Balcazar, amados amigos y hermanos; a Francisco Quiroz Cuarón, sabio
maestro, gran amigo y ser humano excepcional, así como instrumento de la
Misión; a María Domínguez y Cristina Penedés, amadas hermanas y amigas
de Barcelona; a Carlos y Celia Cáceres, por su amistad, apoyo y sabiduría; a
Oscar, Ángela y Viviana Borri, por su ejemplo y especial amistad; a Mirta
Minutti, por su generosa amistad; a Fernando García, por ser amigo y
compañero en el camino; a Leandro Sarlo, por ser todo alma y corazón; a
Rosario Abrahams, por su amistad y apoyo; a Betty Rodao y su esposo Juan
Xais, por su calidez; a Viola Lissner, por ser como es; a Argenis Jara y su
maravillosa familia; a Ricardo, Carina y Mariano Zapata, amigos de Bariloche;
a don Lucas Anich y su esposa Juanita, por su sabiduría, bondad, generosidad
y sincera amistad; a Sixto Inchaustegui y Henry Hermida, grandes amigos y
compañeros en la Misión; a Marco Córdoba, por su amistad y entrega
generosa; a Yearim Paz, por su amor y ejemplo de constancia, coraje, valor y
fortaleza; a Tanis Paz, por su amor y por ser inspiradora y mi maestra en
tantas cosas, y muy especialmente a Marinita, mi compañera y amiga en la
aventura del viaje de la vida.
INTRODUCCIÓN

La vida es la aventura del alma.

La heroicidad consiste en continuar

con valor y entusiasmo.

La vida es un reto, una interesante y apasionante aventura de


autoconocimiento, si sabemos afrontarla con entusiasmo, alegría y coraje.
Aún cuando sean muchas las pruebas que dificulten nuestro avance, estas son
las que templan nuestro espíritu y lo fortalecen para alcanzar cimas
luminosas, destinos nobles y trascendentes.

Aunque resulte difícil imaginar por donde nos llevara el destino, ni a cuantas
personas conoceremos, ni la profundidad de las experiencias que se nos
tienen reservadas para nuestro crecimiento, toda esta incertidumbre hace
más emocionante y divertido el proceso de crecer y madurar con las pruebas.
Porque todo en la vida es una cuestión de actitud. Si esta es valiente e
intrépida, las dificultades se nos presentaran como el condimento perfecto del
alimento que fortalece el alma.

La idea que buscamos compartir es la de afrontar la vida con espíritu


deportivo, aceptando igualmente lo bueno y lo malo, porque la aventura es
interior. Hay que competir sanamente con uno mismo, para ser cada día
mejor de lo que uno es, para dar y darse más y mejor a los demás. Esta
aventura comporta ciertos riesgos, y esta en nuestra mano que seamos
capaces de asumir la responsabilidad sobre nuestras decisiones.

Ciertos aspectos de nuestra vida están más allá de nuestras decisiones, por
cuanto han sido previstos con mucha anticipación; han sido programados para
que ellos nos conduzcan a la realización y cumplimiento de unas metas.
Aunque no todo está predeterminado, ciertos sucesos y acontecimientos
responden a un marco creado durante las negociaciones o acuerdos previos a
nuestro nacimiento con los «Guardianes del Destino», o «Señores del Karma»,
entidades espirituales que coordinan las encarnaciones y el plan de vida para
la evolución de las almas. A mayor edad evolutiva o madurez de conciencia,
mayor capacidad de negociación, pudiendo escoger en gran medida las
circunstancias que lo rodean a uno.

Una buena parte de nuestra vida sigue una programación más o menos fija,
pero siempre expuesta a una gran cantidad de variables tanto interiores como
exteriores. Por eso, como un mecanismo de ayuda para prever las variaciones
o anticipar los desenlaces, existe en el ser humano el Don de Profecía, es
decir, la capacidad de adelantarse a los acontecimientos con premoniciones y
precogniciones, que nos advierte de sucesos o nos prepara para afrontarlos.
El propósito del conocimiento previo o anticipación a los acontecimientos es
advertirnos para corregir sobre la marcha, y también recordarnos cada cierto
tiempo, a través de los sueños y visiones, que debemos fortalecernos por
cuanto nuestra vida sigue un curso, como un río, que a veces puede salirse de
su cauce.

Mi aventura personal, hoy ligada a la vida de muchísima gente en muchas


partes de este y otros mundos, es mundialmente conocida por mis continuas
apariciones en la televisión, radio, periódicos, revistas y por mis anteriores
libros, que giran en torno a los contactos extraterrestres que se iniciaron en
Perú con recepciones de mensajes telepáticos psicográficos, avistamientos de
naves y contactos físicos directos. Una serie de acontecimientos previos en mi
vida familiar crearon una ambientación especial que desemboco en los hechos
que hoy son motivo de difusión. Todo empezó cuando tenía diecisiete años.
Por aquel entonces yo era un adolescente inquieto que empezaba a buscar
respuestas cada vez más profundas a los interrogantes que han movido
nuestra historia: ¿quiénes somos?, ¿de dónde venimos?, ¿hacia dónde vamos?,
¿cuál es nuestra misión y nuestro destino? Para muchos era considerado un
muchacho demasiado serio y maduro, a pesar de mi juventud, pero vivía como
cualquier joven de mi edad, afrontando mis propios procesos internos con
alegría y entusiasmo. Siempre me gusto el deporte, y en el colegio destaque
en varias disciplinas atléticas; era bastante tranquilo en las clases y muy
responsable. Poco a poco comenzaba a tener en cuenta la necesidad de
procurarme un proyecto de vida que satisficiera mis inquietudes y velara por
mis intereses futuros. En esa época, mis metas giraban en torno a la historia,
la arqueología y la paleontología, de las que era un romántico enamorado.
Soñaba con pasarme la vida conociendo lugares exóticos, ascendiendo
montañas, explorando profundos valles, haciendo excavaciones y grandes
descubrimientos en sitios antiguos cargados de historia y riqueza cultural,
que pudieran permitirnos entender los procesos humanos y retomar los
avances olvidados o perdidos.

En mi búsqueda me encontré una y otra vez con la influencia positiva de


personas, cosas y circunstancias que me rodeaban, como la vida de mi abuelo
materno, químico profesional, apasionado por la arqueología, a quien solo
conocí por los hermosos y continuos relatos de mi madre. Y también con el
ejemplo positivo y valeroso de mi padre en el terreno de sus investigaciones
de lo desconocido, específicamente sobre la vida extraterrestre, tema que por
aquel entonces pocos se atrevían a tocar[1] .

Mi padre trabajaba para el gobierno, pero en sus ratos libres investigaba


denodadamente para profundizar en el controvertido tema de los ovnis, por lo
que pronunciaba habitualmente multitudinarias conferencias que él mismo
organizaba o a las que lo invitaban para que diera a conocer sus avanzadas
teorías, propias de una mente lúcida y de vanguardia.

Aunque me mantenía al margen de los estudios científicos del instituto que mi


padre había fundado antes de que yo naciera, cuando menos lo imagine me vi
envuelto en esa atmósfera y, a la vez, en una vorágine de ideas que marcarían
mi existencia y me llevarían a terrenos insospechados.

Por esas cosas que tiene la vida, llego el momento en que se manifestó el
factor desencadenante o, como diríamos, el detonador que lo transformaría
todo a nuestro alrededor. Mi padre fue invitado a dar una conferencia sobre
los ovnis en la sede de una agrupación de yoga, y mis hermanos y yo lo
acompañamos.

Mientras mi padre disertaba, me dedique a observar a la gente que


abarrotaba la sala donde estábamos reunidos, y me percate de que allí había
de todo: gente que buscaba, otra que se veía que se había encontrado y hasta
personas sedientas de evadirse. Pero el ambiente no estaba tan mal. También
había gente joven. De pronto empecé a notar que la mayoría de la gente
presente tenía un algo que no había visto antes y que los hacia parecer bien
distintos de aquellos que rodeaban a mi progenitor.

Yo diría que eran más cálidos, menos acartonados, pero además parecía que
no estuviesen escuchando a mi padre solo con sus oídos y sus mentes, sino
también con el corazón. Así que, sin habérmelo propuesto, me encontrada en
medio de una escuela orientalista que a partir de ese momento marcaría
profundamente mi visión de la vida, por cuanto encontré allí una
espiritualidad practica, una deliciosa autenticidad, mucha sabiduría,
abundante sentido común y voluntad de servicio, cosa que no había
encontrado en ninguna otra parte hasta ese momento, aunque había estado
frecuentando la religión y, con ella, todas las obras sociales y barrios
marginales en la época de la escuela, buscando canalizar mi vocación de
servicio. Claro está que tampoco me había afanado demasiado en buscar el
lugar y la forma adecuadas, quizá porque hasta ese momento ni siquiera me
había percatado de que era eso lo que yo realmente necesitaba, o quizá
porque tenía la firme convicción de que todo lo que yo necesitaba me saldría
al encuentro en su momento, como si ya estuviese previsto.

Cuando menos lo esperaba, me vi sumergido en el mundo del yoga, su


filosofía, sus técnicas de meditación y todo lo que implica el hallazgo de
semejante ideología de vida a esa edad. A todo esto lleve conmigo al gran
amor de mi vida, Marinita, mi enamorada de los tiempos del colegio. Ella
resulto ser el mejor amigo que uno pudiese desear, en todo el sentido de la
palabra: me ayudaba a madurar y me alentaba siempre a hacer cosas
importantes, aunque los cambios implicaran grandes riesgos. Ella ha sido mi
maestra en muchos aspectos de la vida, y una fuente de ayuda y colaboración
invalorable. Ha sido maravilloso compartir juntos el crecimiento espiritual,
experimentando en poco tiempo una revolución en nuestras vidas, que más
adelante nos llevo a crear las condiciones para vivir la insólita aventura del
contacto extraterrestre.

Tal como he explicado una y otra vez, el contacto llego a mi vida través de un
sin fin de hechos sincrónicos, que hoy no dudo que fueron dirigidos desde lo
alto, siguiendo un plan preconcebido que paralelamente afectaría a las vidas
de muchísima gente. Las vivencias se sucedieron y se multiplicaron en muy
poco tiempo y a un ritmo muy veloz, con contactos del tercero, cuarto y
quinto tipo[2] con los tripulantes de las naves extraterrestres. La evolución de
la experiencia del contacto no estuvo exenta de problemas, sobre todo a la
hora de relacionarnos entre nosotros mismos, lo cual produjo un violento
frenazo donde los errores y los problemas internos de los grupos nos
obligaron a reflexionar sobre todo lo vivido hasta ese momento. Una vez
superados los fallos de la etapa inicial se retomo la dinámica de las
experiencias, a un ritmo duro pero necesario de crecimiento y madurez.

El contacto se ha mantenido a lo largo de estas décadas, y se han logrado


avances impresionantes, se han recibido revelaciones importantes y se han
cometido y superado errores aleccionadores. Pero, como decía, hemos crecido
y madurado con la experiencia, y hemos viajado por gran parte del mundo en
viajes de estudio y difusión, relacionándonos con un volumen significativo de
gente, disertando en muchos de los más importantes foros internacionales,
llegando a ser motivo de reflexión y controversia para muchos, pero
influyendo de una manera positiva en su despertar.

Con el transcurrir de los años aprendimos en contacto con los Guías


Extraterrestres y con nosotros mismos que todo es pensamiento, todo es
actitud y que todo es amor; que las experiencias no solo se dan a un nivel
físico, sino también mental y espiritual; que el primer contacto que
necesitamos mantener es con nosotros mismos, y que sin este permanecemos
aislados del cosmos; que vivimos en un universo sin limites, y que el único
limite es nuestra ignorancia.

Aprendimos también que debíamos ejercitarnos permanentemente en el arte


de leer en los acontecimientos, aprendimos a no desperdiciar las señales y a
usar la intuición y la sensibilidad a cada paso. Porque cada situación suele
venir acompañada de símbolos que, como claves en el despertar de la
conciencia, deben ser sentidos y entendidos, porque son claves activadoras de
nuestro recuerdo. Y que, cuanto más nos abriéramos a compromisos mayores
con disponibilidad, tanto más mágicas y espectaculares se tornarían nuestras
vidas, transformándose en canales de fuerzas y energías superiores en
beneficio de todo y de todos.

Después de tantos años y tantas vivencias comprobadas con experiencias


físicas y avaladas por multitud de testigos, incluyendo periodistas de muchos
medios de comunicación, hoy por hoy no dudamos de que esta aventura ha
sido importante y trascendental para colaborar en la orientación de la
humanidad hacia los grandes cambios necesarios del Tercer Milenio. Es
bueno saber que todo ese esfuerzo de tantos años y de tantas personas valió
la pena y que, después del tiempo transcurrido, esta experiencia sigue siendo
real, verdadera, autentica, original, positiva, y merece ser compartida y
divulgada. Una experiencia que desde un inicio se nos presento como una
gran aventura, pero una aventura que no termina, sino que continua más allá
del tiempo y del espacio conduciéndonos conscientemente hacia el llamado
momento de la humanidad en que deberemos ingresar en el profetizado y
simbólico «Salón de los Espejo»; un momento en que la humanidad se vera
enfrentada consigo misma, con su verdadera imagen, lejos de todo espejismo
o distorsión; un momento que exigirá de aquellos que estén despiertos
claridad como para orientar con su ejemplo y despertar al resto.

He dicho muchas veces que la relación entre los extraterrestres y la


humanidad en el pasado fue diferente de la que puede darse en la actualidad,
por cuanto antes éramos como niños, y ahora somos adolescentes, llenos de
inestabilidad y de miedos frente a las responsabilidades propias del
crecimiento, por lo que en esta etapa no se acercan hacia nosotros de la
misma manera, sino que más bien permiten que seamos nosotros quienes nos
acerquemos cuando nos sintamos preparados.

Como parte del proceso de madurez en el contacto y en el camino espiritual,


nos interesamos por avanzar hacia nuevas etapas, como aquella que ha ido
facilitando en la actualidad el encuentro con la Hermandad Blanca de los
Retiros Interiores, que son los guardianes inmemoriales de los Archivos del
Conocimiento de la verdadera historia de la humanidad, resultado de la
llegada a nuestro mundo de un contingente de instructores planetarios y de la
actuación de un remanente de civilizaciones desaparecidas ahora ubicadas en
el mundo intraterrestre.

Los invito a que entremos juntos, con los ojos del alma abiertos, en este Salón
de los Espejos, donde el reflejo nos sorprenderá y adonde el tiempo del
cambio nos ha conducido para modificar las circunstancias de nuestra vida
actual y futura, así como de nuestro entorno; un tiempo profetizado como
adecuado para intentar revertir lo más importante de todo cuanto ha sido
sembrado negativamente. Encaremos de una vez por todas, y de una manera
responsable y definitiva, el reto que supone positivizar nuestra relación con
nosotros mismos, nuestra historia, y nuestro rol en el concierto de los
mundos, pero también la relación con la naturaleza y el universo, para que así
haya esperanza en el mundo y en la humanidad.

EL AUTOR
LOS INTRATERRESTRES

Razas extraterrestres regresarán a la Tierra. Ellas ampararán ciudades


subterráneas que de ellos fueron, y aún habitadas por sus naturales
aclimatados. Bajarán para restablecer costumbres que fueron superiores a las
nuestras, hoy desaparecidas. Las manifestarán en forma telepática…

BENJAMIN SOLARI PARRAVICINI, Profecías 1959.

Los seres humanos somos entidades multidimensionales, poseemos siete


vehículos o cuerpos que viven simultáneamente en un universo de siete
dimensiones donde es posible, a la vez, la conexión con nuestra realidad y con
otras realidades. Estas pueden ser universos paralelos perceptibles a través
de los planos de la conciencia (estados vibratorios de sintonía física, mental y
espiritual), por cuanto todo es vibración.

La vibración nos permite la comunicación, que puede ser física, sensorial,


mental (telepática), astral, espiritual o, si queremos decirlo de otra manera,
interdimensional. Esta comunicación la podemos establecer con otras
personas dentro de nuestra realidad o bien trascendiendo las fronteras de lo
establecido con el alma grupal de los animales, con los elementos de la
naturaleza, y, por qué no, hasta con aquellos que habiendo desencarnado no
han terminado de trascender ni de abandonar los apegos del plano físico. En
este sentido, siempre habremos de recordar que hay cosas que, aunque se
puedan, no se deben.

Al descubrir que somos seres ilimitados, con mayor razón podríamos pensar
en comunicarnos con seres extraterrestres más avanzados que estuviesen
visitándonos en ingenios espaciales de alta tecnología, o con misteriosos y
legendarios seres intraterrestres remanentes de civilizaciones desaparecidas,
ocultos en las profundidades de la corteza terrestre; o con seres
ultraterrestres luminosos e inmateriales a los que se les ha venido llamando
desde tiempos antiguos ángeles o arcángeles.

El propósito de la comunicación es el aprendizaje mutuo. Todos tenemos


mucho que compartir y mucho que aprender, por lo que es bueno y útil
permanecer abiertos, saber escuchar, porque solo el que sabe escuchar puede
aprender y sabrá en su momento transmitir lo aprendido.

En el Universo nadie es mejor que nadie. Cada cual se encuentra en un


momento distinto de evolución, y a todos nos puede beneficiar la observación
de los diferentes procesos. Además, nadie se encuentra realmente aislado del
resto, sino que más bien la idea es la interacción continua y constante. Por
eso nadie que sea maestro puede haberse saltado la etapa del discipulado, y
no habrá quien, habiendo sido buen discípulo, desperdicie la oportunidad de
crecer aprendiendo a ser buen maestro.
La humanidad se encuentra en la condición de discípulo de la vida. Hoy por
hoy, todo nos enseña, todo nos dice algo si sabemos mantener los sentidos
despiertos, tanto los físicos como los internos. El momento actual ha
dispuesto la liberación del conocimiento y la accesibilidad del mismo, con el
riesgo de los errores que conlleva la gran cantidad de información, mucha de
ella contaminada.

Después de una etapa caracterizada por una gran abundancia de maestros,


escuelas y organizaciones, hoy por hoy todo apunta al despertar del maestro
interno, aquel que no nos engaña y que puede ayudarnos a discernir e intuir
la verdad que hay detrás del momento actual y de cuanto por allí circula. Esta
es una etapa con experiencias insólitas, encuentros insospechados y
revelaciones asombrosas, a las que cada uno debe abrirse por si mismo,
tomando la parte que le toca y que esta en disposición de digerir.

En los grupos de contacto hemos continuado recibiendo mensajes de los


Guías Extraterrestres, pero en ellos se nos ha venido insistiendo sobre la
necesidad de prepararnos para vivir contactos con los maestros
intraterrestres; contactos propios de la etapa vigente de la Misión de
Contacto. Como estos contactos han sido avalados por experiencias de campo,
nos hemos abierto a estas experiencias, las cuales también se han venido
multiplicando en cantidad e intensidad. Por eso, en este momento podemos
hablar de una conexión intraterrestre.

A propósito de esto, sabemos que hace miles de años descendieron en el


desierto del Gobi, en Mongolia, un grupo de treinta y dos seres
extraterrestres, de igual numero de civilizaciones diferentes, que se
establecieron en una extraordinaria ciudad subterránea, llamada Shamballa[3]
construida a propósito para albergarlos. Estos seres, que fueron enviados
para actuar como Instructores Planetarios de una floreciente humanidad,
llegaron a instancias del Consejo de los Veinticuatro Ancianos de la Galaxia o
Gobierno de Sabios Maestros de los planetas evolucionados de la Vía Láctea,
para acompañar el proceso evolutivo del hombre en la Tierra, y para preparar
a aquellos que fuesen dignos de ser los guardianes de los Archivos del
Conocimiento Oculto de la Humanidad o de la verdadera Historia Planetaria,
aquella que nos emparenta con los visitantes de las estrellas.

Llegaría el tiempo en que el conocimiento profundo de nuestro proceso sería


necesario que fuese accesible a todos los seres humanos de buena voluntad,
para que quien estuviese preparado encontrara en él las respuestas
necesarias para saber y hacer entender la misión y el destino colectivo.

Aquellos extraterrestres que llegaron y descendieron en Asia establecieron


más tarde una red de túneles y galerías que enlazarían a todo el planeta,
conectando otras ciudades que se irían formando después, debido a la
dinámica propia del planeta y de las civilizaciones. En algunas de estas
ciudades intraterrenas, establecidas en puntos estratégicos del mundo, se
ubicaron unos cristales capaces de retener en este plano a un colectivo de
seres conspiradores que fueron deportados aquí por su actitud inadecuada y
su mal comportamiento, y que son conocidos en nuestros mitos y leyendas
como los «Ángeles Caídos».
Los primeros que acompañaron a los visitantes e hicieron uso del mundo
intraterrestre fueron los sobrevivientes de la civilización atlante, aquella que
surgió como consecuencia de la hibridación de Guardianes y Vigilantes
extraterrestres con gente de nuestro mundo. Uno de esos atlantes, que
rescato gran parte del conocimiento heredado y lo traslado a buen recaudo,
fue el muy famoso y conocido Thot o Hermes Trismegistro (Literalmente, el
tres veces grande) quien, aunque asesoraba a la cultura egipcia, mantenía un
estrecho contacto con «Amenti» (el Intramundo). La cultura atlante sobrevivió
en pueblos como el Nahualt, quienes se llamaban a si mismos herederos de la
antigua «Aztlán» una isla continente allende los mares. Si no, recordemos la
fabulosa ciudad de Tenochtitlán, construida sobre una isla en el lago Texcoco,
en México, llena de canales, que por su similitud nos recuerda a la capital de
la legendaria Atlántida: Poseidónis o Poseidópolis, mencionada por Platón en
sus obras.

Durante el largo peregrinaje del pueblo mexicano hacia su Tierra prometida,


recorrieron el interior de cavernas, donde conectaron con sabios maestros
intraterrenos. En cavernas como las del cerro Culiacán, recibieron una
instrucción muy especial que los llevaría a conocer y a buscar concretar una
misión y un destino.

En el ocaso de la civilización maya, una parte significativa de este pueblo


escogió marcharse hacia el mundo intraterrestre, donde habrían permanecido
hasta nuestros días haciendo uso de conocimientos hoy olvidados fuera de
esos lugares. También los Incas en una de las versiones de la fundación de su
imperio mencionan a cuatro clanes, llamados los Hermanos Ayar, que salieron
de unas cavernas del cerro Tamputoco en Pacaritambo (Cuzco), y trajeron
consigo el conocimiento y la cultura que habrían recibido de seres de gran
sabiduría.

Desde que se estableció el reino intraterreno de «Agartha» cuya capital sería


Shamballa, muchas personas con espíritus elevados de nuestro mundo han
sido convocadas a unirse al Gobierno Interno Positivo Planetario. Los
llamados a llegar a estos Retiros o ciudades intraterrenas pertenecen a
muchas religiones, escuelas y filosofías, algunos incluso poseen altos rangos
jerárquicos a los que obviamente deben renunciar una vez que se integran en
este reino del universalismo. Precisamente con todos ellos se ha ido formando
lo que actualmente se conoce como «La Gran Hermandad Blanca de los
Retiros Interiores» o «Gobierno Interno Positivo Planetario». Algunos
permanecen allí aislados y otros, eventualmente, se infiltran en nuestra
sociedad para tomarle el pulso a los acontecimientos y enlazar a nuevos
convocados.

La Hermandad Blanca esta formada por una serie de Hermandades que


actúan como equipos de trabajo que cumplen funciones especificas en la
Tierra, como por ejemplo mantener la luz y el conocimiento a pesar de todo el
esfuerzo de aquellas fuerzas de oposición que permanentemente conspiran
contra la humanidad, destruyendo o desvirtuando sistemáticamente la
información. Otras se encargan de canalizar las energías de todos los grupos
que trabajan comprometidamente en la superficie, dependiendo de la
frecuencia vibratoria de las mismas. Entre estas destaca la Hermandad de los
Siete Rayos, que en la zona del lago Titicaca (Puno-Perú) posee un retiro
conocido como «La Abadía», y cuyo portal de ingreso sería una gigantesca
formación rocosa donde se encuentra tallada la Puerta de Hayumarka o el
«Portal de Aramu Muru», un pórtico inmenso que a manera de puerta ciega
resulta un enigma para aquel que no ha sido iniciado en el conocimiento de
las Siete Leyes y Principios Universales. Quien llega a dicho lugar en la
actitud correcta y obedeciendo a una llamada interior, habiéndose purificado
y preparado, no solo podrá abrir el portal utilizando el poder de la palabra o
la magia del verbo (los mantrams adecuados), sino que conectara con los
túneles y galerías cercanas, que llevan al sitio preciso donde será recibido por
los maestros.

En las espesas y húmedas selvas del Manu en la provincia de Madre de Dios,


también en Perú, se encuentra otro retiro ubicado precisamente en el valle de
la Luna Azul (valle de Cosñipata), llamado «El Paititi» o «El Corazón del
Corazón», cuyo nombre secreto es, según los guardianes de este retiro
«Quañachoai». Los últimos Incas se refugiaron allí llevándose su sabiduría y
huyendo de los conquistadores europeos, con la esperanza de que al cabo de
quinientos años de purificación planetaria, tal como decía una profecía
conocida como «el Pachacuti», todo volvería a su justo orden y el Inca
volvería a gobernar.

Paititi es una ciudad construida sobre la meseta del Pantiacolla; una montaña
donde nace el río Siskibenia, que era conocida en el pasado, por los escasos
habitantes de la zona, por estar atravesada por insondables túneles donde
vivían los «Paco Pacuris», los Sabios Maestros Guardianes vestidos de blanco
que cuidaban los registros de la historia del Mundo. A esta ciudad se
accedería por el caudaloso y peligroso río Alto Madre de Dios, siguiendo más
adelante por sus afluentes, desafiando la jungla, y llegando después de varios
días al Pongo de Mainiqui o cañón de Pusharo, donde sobre un muro vertical
de piedra aparecen multitud de petroglifos con corazones y rostros humanos,
los cuales advierten del ingreso en un territorio prohibido, controlado por la
Hermandad Blanca, y donde solo aquel que es capaz de hablar con el lenguaje
del corazón puede entrar y volver a salir vivo. La mayoría de los exploradores,
al llegar aquí, desisten de continuar, por cuanto el lugar prueba
violentamente a quienes sin haberse preparado lo suficiente se acercan,
envolviéndolos en terribles tormentas y fenómenos atmosféricos. Si uno se
atreve a continuar desafiando el estrecho, peligroso y extenso cañón y la
espesa jungla, pero sobre todo los propios miedos, llegara al cabo de tres días
al pie de la montaña del Pantiacolla, donde los tres posibles ingresos a la
ciudad son: a través de una oscura y engañosa laguna cuadrada de aguas
estancadas y profundas, llenas de feroces peces depredadores; por una
intrincada caverna laberíntica llena de abismos y habitada por jaguares; o por
una casi invisible pero resbaladiza cueva dentro de una cascada infestada de
anacondas. Dentro de la ciudad hay un templo, donde se encuentra «El Gran
Disco del Sol», verdadero Portal entre las dimensiones, y que alguna vez lució
su esotérica magnificencia en los muros del Templo del Coricancha
(actualmente absorbido por el convento de Santo Domingo), en Cuzco.

En Ecuador existe en la cordillera del Cóndor una red de túneles que


conectan por debajo toda la selva amazónica, y que han sido poco explorados.
La entrada ubicada entre los ríos Coangos y Santiago es conocida como La
«cueva de los Tayos». (La historia completa de la «cueva de los Tayos» fue
recogida por Erich Von Däniken en su libro El oro de los dioses ) La
impresionante caverna posee dimensiones ciclópeas, y su carácter artificial se
puede apreciar, sobre todo, en gigantescos salones y cámaras, descomunales
dinteles e inmensos muros trabajados. Allí ha habido quienes después de
haber descendido han tenido contacto con esferas luminosas conocidas como
«Caneplas» o «Sincronizadores Magnéticos», y hasta algunos han podido
observar seres de estatura gigantesca vestidos de blanco. Hoy se dice que
dichos túneles se extienden a lo largo de más de dieciséis kilómetros.

En Brasil existe en la sierra de Portiaria, en el estado de Goias, el valle


selvático de Parauna, donde en la superficie se pueden apreciar murallas de
hasta cuatro kilómetros de largo y cuatro metros de altura, de piedras
hexagonales basálticas unidas magnéticamente, que albergan una zona donde
hay pirámides derrumbadas, algunas de ellas escalonadas, cubiertas por la
vegetación, con entradas a ríos subterráneos que conducirían al mundo
intraterrestre. Igualmente existiría otra entrada similar en la sierra del
Roncador.

En Uruguay también habría entradas al intramundo, aunque algunas son


definitivamente de carácter dimensional, como las que se abren
ocasionalmente en la Estancia la Aurora, entre Paysandú y Salto. Otras, pero
como cavernas, existirían en la sierra de Minas.

En la Estancia la Aurora, cuyo suelo es rico en cuarzos y cristales diversos,


llega a concentrarse cada cierto tiempo una gran energía, la cual colapsa el
espacio-tiempo abriendo una puerta o ventana dimensional, a través de la
cual los extraterrestres salen con sus naves o se proyectan. En sus
alrededores suelen percibirse seres de luz o siluetas luminosas con las que se
puede establecer un contacto. Allí no habría una ciudad intraterrena, pero si
un portal interdimensional a través del cual quien ha despertado sus
potencialidades y posee la vibración adecuada puede conectar con otra
realidad.

En Argentina se ha venido dando en los últimos años un despertar de los


centros de energía y un redescubrimiento de los retiros de la Hermandad
Blanca, que ha puesto en conocimiento de la opinión pública ciudades
intraterrestres con las que la gente esta aprendiendo a comunicarse. Hoy es
muy conocida y difundida la existencia en la acogedora localidad de Capilla
del Monte, en Córdoba, de una leyenda según la cual los indígenas
comechingones lograron salvar la vida, huyendo de los conquistadores
europeos, entrando por unas cavernas ubicadas entre el cerro sagrado de
Uritorco y la zona cercana de Los Terrones. El lugar se encuentra en una
poderosa línea de energía telúrica, en donde el macizo rocoso del Uritorco
actúa como una pirámide natural y un colector cósmico, que alimentaría a
una ciudad intraterrena llamada «Erks». Dicha ciudad ha sido avistada
etéricamente en repetidas ocasiones por lugareños como un conjunto
organizado de luces y estructuras en la distancia. Uno de ellos habría
establecido comunicación con los habitantes intraterrenos, y habría recibido
el honor de actuar de guardián de su ingreso. Lamentablemente esta persona
fue asesinada, y en la actualidad es uno de sus hijos quien cumple dicha
función. Lo que si es más que evidente es la permanente presencia de ovnis
en la zona, especialmente en el cerro El Pajarillo, donde se han llegado a
encontrar inmensas huellas circulares con hierba quemada sobre las colinas
(1986 apareció en el cerro de El Pajarillo una gigantesca mancha que fue
definida por el ayuntamiento de Capilla del Monte como prueba irrefutable
del aterrizaje de un ovni). Aquel caso terminó por convertir esa región en un
centro de peregrinación de los interesados por el tema.

Otra de las ciudades intraterrestres que existirían en Argentina es la llamada


«Isidris» debajo de las montañas de Mendoza. También esta la llamada
«Ciudad de los Césares», ubicada a muy poca distancia de la turística ciudad
de San Carlos de Bariloche, en la Patagonia. Para llegar a este retiro hay que
embarcarse por los lagos, y después de varias horas de navegación,
introducirse por una reserva ecológica al pie de montañas nevadas, siguiendo
pequeños senderos que lo conducen a uno por en medio de espesos bosques
que llevan hasta hermosos y solitarios glaciares, los cuales esconden los
ingresos subterráneos.

En el norte de Chile, en La Serena, existe en la zona de El Elqui un valle


mágico y esotérico conocido como Cochiguaz, donde en un recóndito lugar
entre montañas el magnetismo llega a niveles insospechados, y en donde se
suelen observar permanentemente la presencia de naves extraterrestres
(ovnis), entrando y saliendo de las montañas. En la actualidad, esta localidad
congrega la presencia de muchos sinceros buscadores de la luz que, como
maestros del nuevo tiempo, se han establecido en la zona y orientan a los
peregrinos que hasta allí llegan buscando respuestas e iluminación. Hay un
sitio preciso donde tres quebradas coinciden sobre una colina rodeada de
piedras con petroglifos. Allí, en un antiguo pozo chamánico, se abría un portal
dimensional de conexión con el real tiempo del universo. Pero todavía hoy es
posible repetir esto si se llega en el momento y en la actitud adecuada.

En Centroamérica, en la República de Honduras, existen unas cuevas con


petroglifos a muy poca distancia de la ciudad de Tegucigalpa. Los símbolos y
figuras que aparecen en los muros son muy similares a los hallados en la selva
amazónica, y en ellos se repiten los corazones con rostros humanos, las
espirales y los laberintos. Todas estas figuras estarían haciendo referencia a
la existencia en las selvas hondureñas de una ciudad perdida de carácter
intraterrestre. Esa ciudad se llamaría «La Ciudad Blanca» y estaría ubicada
en la selva de La Mosquitia. En varios mensajes, nuestros grupos de contacto
han sido invitados a realizar una expedición de conexión con ese lugar que
tendría lugar muy pronto.

En el sur de Estados Unidos, en el estado de California, se encuentra el monte


Shasta, un impresionante y majestuoso volcán extinto que contendría en su
interior cavernas con uno de los retiros internos de la Hermandad Blanca, y al
cual anualmente llegan cientos de personas que han entrado en la frecuencia
de los maestros y están en condiciones de recibir orientaciones. Son
continuos los comentarios y testimonios de quienes has sido testigo en la zona
de la presencia de seres muy altos vestidos de blanco.

Como vemos, son muchos los lugares donde se puede establecer una conexión
con la Hermandad Blanca de los Retiros Interiores, y las oportunidades se van
multiplicando como para que esto ocurra. Pero ¿por qué y para qué?
¿Estamos acaso preparados para hacer frente al conocimiento de nuestro
proceso planetario y de las intenciones que llevaron a seres de otros mundos
a actuar en nuestro planeta a lo largo de nuestra historia? ¿Realmente
estamos en condiciones de saber a ciencia cierta quienes fueron nuestros
padres planetarios, y por qué y para qué existimos?

El descubrimiento en la actualidad de la presencia de seres iguales o


diferentes de nosotros, de nuestra propia naturaleza o de naturaleza distinta,
que coexisten con nosotros en el mundo, con sus propios propósitos e
intenciones, nos esta conduciendo a una profunda confrontación con nuestras
creencias; mas aún cuando cada día que pasa se hace más cercana la
posibilidad de un dialogo cara a cara con esos seres.

Debemos prepararnos para afrontar el desvelamiento cada vez mayor de


secretos y misterios, como algo incontenible y propio de nuestra edad
evolutiva, que hace que lo que no se nos dice lo percibamos por nosotros
mismos, pero que igualmente dicho conocimiento intuitivo o deducido
producirá cambios significativos en nuestra visión de la vida por cuanto ya no
somos niños.

Estamos en la adolescencia de la humanidad, el momento en que solemos


reafirmar nuestra individualidad y sentar las bases de nuestro futuro. Es el
periodo de formación y de definiciones, tiempo de enfrentarnos a nuestros
miedos, por lo que es bueno que conozcamos las cosas como son, para que
con madurez sepamos sobrellevar, no solo los fallos de los demás, sino
también nuestros propios errores, y podamos corregirlos sobre la marcha.
HACIA LA MONTAÑA SEGURA DE LOS HOMBRES PUROS

«Un sentido rebuscado tiene tanto más precio si se le reprocha ser un


contrasentido enmarañado; creo firmemente que jamás canto alguno, vale a
primera vista tanto como luego, cuando se comprende».

GUIRAUD DE BORNEILH, trovador medieval.

Quien hubiese imaginado que enseñanzas similares a las recibidas en


múltiples salidas y viajes de nuestros grupos para contactos con los
extraterrestres y la Hermandad Blanca, a lugares tan exóticos como las selvas
del Manu y el desierto de Egipto, el monte Shasta en California y Hayumarka
en Puno, la cueva de los Tayos en la jungla amazónica y el valle de Ingenio en
Nazca, habían sido ya predicadas unos ochocientos años atrás por un grupo
de misioneros cristianos procedentes de los Balcanes. Lugar este sumamente
conocido por ser el foco de permanentes tensiones mundiales a lo largo del
siglo XX.

Conocimientos sobre la reencarnación según los Evangelios y la Biblia; el


vegetarianismo; el ejemplo de vida; la existencia de un plan cósmico que
ubica al ser humano en medio del campo de batalla de fuerzas de la Luz y de
la Oscuridad, donde la verdadera lucha esta dentro de uno mismo; un Jesús
como la simbiosis del Hijo del Hombre con el Hijo de Dios, a su vez uno de los
Padres Creadores del Universo Mental; la esperanza del Amor como
redención en el perdón; la simplicidad en la liberación frente a las formas,
etc. Eran parte de las enseñanzas de un grupo humano inspirado desde lo
Alto, que fue consumido en la hoguera de la intolerancia y del temor de una
época mágica y oscurantista como fue la Edad Media. Pero su exterminio,
como fuego purificador, dejo la impronta de su sacrificio grabada en las rocas
de las ruinas de los castillos que los albergaron, en las cavernas que
escucharon sus oraciones, en las ciudades donde hicieron su prédica, en los
campos que los vieron vivir la vida en solidaridad con el pueblo y en el
susurro del viento que mece los bosques del sur de Francia. Presencia que
puede ser evocada por quien este dispuesto a sensibilizarse y conectarse con
la historia y con el mensaje del grupo de seres más maravillosos y maduros en
el espíritu que hayan caminado sobre la faz del planeta.

Ellos, llamados «los Hombres Puros» fueron la plasmación auténtica y


equilibrada de los verdaderos budistas; de los conscientes zoroastristas; de
los responsables esenios; de los primeros cristianos; y de los sabios gnósticos.
Su enseñanza era tan profunda, inspiradora y liberadora, así como tan
perfecta en síntesis que origino la más brutal de las represiones y
persecuciones, y que aún hoy continua a través de la indiferencia y del
silencio de la cultura oficial.

La cruzada contra los albigenses y el sometimiento por la fuerza del


Languedoc (sur de Francia) a la monarquía de los Capetos, son objeto de una
conspiración de silencio y de desinformación sólo comparable a la existente
en la actualidad con relación al tema de la muerte del presidente Kennedy o
los ovnis. Ellos «los cátaros», habrían accedido a un conocimiento de gran
profundidad esotérica, al que le llamaron «El Grial», el real Cáliz de la pasión
de Cristo. Su simbolismo, propio de los grandes alquimistas, consistía en la
propia transmutación de su cuerpo, mente y alma en una unidad
trascendente, con la que se enfrentarían al reino de las sombras, basado en la
mentira y la ignorancia; y que sabían les llevaría a una muerte segura. Ellos
intuían que la lucha iba a ser feroz, pero que la muerte —que según se les
había revelado no existía realmente sino que era un cambio de estado—, los
liberaría de la materia densa y los haría más poderosos en el Amor.

La supresión de este movimiento y su implacable persecución, con todo tipo


de torturas como argumento coercitivo así como la conveniente distorsión de
la verdad difundiendo a través de la imposición y el miedo de una imagen
falsa, hicieron que con los años se diluyera su presencia y su esencia quedara
oculta a la espera de que llegara el tiempo en que hubiese la gente dispuesta
a buscar, hallar y compartir el legado de «el ultimo portador del Evangelio de
Juan», el del «puro amor».

En esta historia y en esas mismas enseñanzas —como ya había dicho— hay


demasiados elementos en común con el proceso que hemos venido viviendo
como grupo de contacto a lo largo de los últimos veinticinco años, pero muy
especialmente en los últimos años, cuando se incremento el contacto con la
Hermandad Blanca de la Tierra o Gobierno interno positivo planetario,
responsable de los Archivos de la Historia de nuestro mundo.

Precisamente tres años antes, durante una de las innumerables visitas a


España, reunido con el maravilloso y comprometido grupo de Valencia
conformado por Maribel, Carlos, Coral, José y María recibimos un mensaje de
los Guías Extraterrestres en el que se precisaba la necesidad de trabajar para
orientar el rol protagonista de España entre las naciones de Europa, por
cuanto a esta nación le correspondía ser la puerta hacia un renacimiento
espiritual. Así también, se hacía referencia sobre la importancia de un viaje al
sur de Francia donde se trabajaría en contrarrestar la carga de negatividad
allí acumulada a lo largo de los siglos y se procedería a despertar el
conocimiento que fue ocultado a la espera de su tiempo de ser liberado. El
mensaje decía:

Comunicación: 11-12-96.

Lugar: Valencia.

Antena[4] : Tell-Elam (Sixto Paz).

Sí, somos vuestros hermanos Guías en misión.

Este año que termina ha sido un anticipo de lo que vendrá y que acelerará los
cambios mundiales para bien, pero que no reducirá el ataque de las fuerzas
negativas que, por el contrario, redoblarán su asechanza, pero les
encontrarán cada vez más unidos, fortalecidos en el trabajo interno y en la
preparación, que no deben descuidar.
En el año 97 habrá tantos cambios como buenas noticias, y también muchos
nuevos descubrimientos y revelaciones, como verán una y otra vez en el
panorama mundial. Muchos de estos cambios se darán en España, que
mostrará un giro significativo hacia la luz y a cumplir su papel protagonista
en Europa, por lo cual ayuden a positivizar y acelerar dichas realizaciones.

Con relación a los lugares a conectar en Perú, tienen ustedes los que ya se les
han ido mencionando: la puerta de Puno y la pirámide de Ayacucho (ambos en
Perú). En Argentina, Capilla del Monte. Aurora y la Sierra de las Animas en
Uruguay.

En España recibirán los nombres de lugares como Santiago y Silos.


Aparecerán algunos otros muy importantes que les aportarán información,
claves diversas y diferentes experiencias que les permitirán recordar
iniciaciones vividas en existencias pasadas y que les prepararán para este
momento. Llegado el tiempo irán al sur de Francia, allí se enfrentarán con la
Luz a la Oscuridad, pero antes habrán de fortalecerse y crecer internamente.
Los conocimientos a los que accederán se relacionan con las fuerzas y
poderes que el ser humano de este planeta puede despertar porque es parte
de su naturaleza.

Recordarán y aprenderán a ser magos y maestros, alquimistas en sus propias


vidas, sanando, trasmutando y enseñando a cada paso que se enfrenten a la
Oscuridad. El despertar de los puntos mencionados anteriormente se
relaciona con la conexión de Luz del planeta y el rescate de aquellos lugares
envueltos en las tinieblas de lo negativo para que aporten sus tesoros ocultos
de conocimientos y energía a la humanidad.

El trabajo en cada lugar será inspirado por la sintonía que alcancen y por el
puente permanente que mantengamos ustedes y nosotros, así que no pierdan
el ritmo del trabajo, mas bien increméntenlo.

Con amor,

SAMPIAC[5]

Desde aquel instante, el grupo de Valencia se esforzó más cada día para estar
a la altura de las circunstancias y cumplir con el encargo de los Guías. Por
tanto, además del trabajo de crecimiento interno a través de la meditación,
mantuvieron una dinámica de salidas con excelentes resultados en lo relativo
al apoyo de la presencia de los hermanos mayores. Desde aquel entonces se
han venido dando sendos avistamientos en los lugares de salida, lo cual me
consta personalmente al haber asistido personalmente; avalando esta
cercanía la calidad y profundidad de sus mensajes. Uno de esos lugares de
contacto ha sido el «puig Campana» una hermosa montaña de granito cerca
de la renombrada playa de Benidorm; y otro el pueblo de Noia, a 60 km de
Santiago de Compostela, en Galicia. Es curioso que en este ultimo lugar, el
pueblo de Noia, haya una tradición que afirma que allí desembarcaron los
atlantes, y en el escudo de la ciudad aparezca el arca de Noé y también el
símbolo del Cáliz.
En una de las comunicaciones recibidas por el grupo en aquel entonces, se
recibió lo siguiente:

Comunicación: 10.04.99.

Lugar: Valencia.

Antena: Coral González.

Sí, Sampiac en contacto.

Vayan al sur de Francia preparados y purificados interna y externamente.


Dejando una estela de positividad y alegría allí por donde pasen. Allí recibirán
pautas y sentirán nuevas sensaciones y vibraciones. Captarán y percibirán
con claridad aquello para lo cual realizan el viaje.

Llegado el momento deberán sembrar en planos energéticos el Disco Solar,


para que la luz y el conocimiento de la verdad reine en aquel lugar, alejando
toda negatividad y oscuridad, transformándose en un punto de luz que será
irradiada a toda Europa. Sepan que después de esto, lo autentico perdurará,
desapareciendo todo aquello que crea confusión y duda en las mentes y
corazones de los seres humanos.

No teman por las asechanzas del mal, pues les encontrarán fortalecidos en el
amor y en la unidad.

Acojan en su seno a todo aquel verdadero y sincero buscador de la verdad, y


compartan mutuamente todo aquello que han aprendido, pues esto les
aportará nuevas experiencias enriquecedoras en su caminar espiritual.

Sus hermanos Guías en Misión les apoyan y les aman.

Cuando llegó el momento de poner a prueba la preparación y dar


cumplimiento a los mensajes recibidos anteriormente, aquel grupo español no
dudó en disponerse para realizar los viajes al sur de Francia y realizar el
encargo de los Guías. Para esto se hicieron dos viajes. El primero de
reconocimiento de la zona y el segundo —más contundente— se realizó el 24
de abril de 1999, saliendo el grupo bien consolidado muy temprano por la
carretera, para llegar pocas horas más tarde a la frontera, donde les esperaba
el numero 666 como clave activadora de la conciencia, diciéndoles o
advirtiéndoles que la tarea no iba a ser fácil: «Enfrentar con la luz a la
oscuridad». Este numero, junto con la clave 33, se repitió exageradamente en
las matriculas de los coches, así como en los avisos a lo largo de la ruta.

Lejos de toda paranoia, la observación continua de ciertas claves numéricas


como el 33, 333, 22, 222, 13, 17, 666, etc., sin que uno las busque, pero
manteniendo la atención sobre las circunstancias, es parte del juego mágico y
de la conexión dimensional que se comienza a producir. Y es que nuestras
conciencias cada vez más despiertas se abren a las señales del maestro
interno y de los Maestros de la Hermandad Blanca, que nos van develando las
claves de cada viaje, recordándonos la acción comprometida que tenemos que
asumir en tal o cual etapa del Plan Cósmico; o también nos advierte de los
peligros que se ciernen sobre la ruta.

En cuanto cruzaron las fronteras el clima se torno inestable y hasta


tormentoso. Muy diferente al primer viaje poco antes, en donde el clima había
sido delicioso y todo se había dado como muy relajado. Esto hizo que al grupo
le asaltaran las dudas de si debían continuar o no. Pero por experiencias
acumuladas, sabían que si se mantenían armonizados, los elementos de la
naturaleza se calmarían actuando como un reflejo del estado mental del
grupo. Porque realmente la mente es poderosa, y más aun cuando se da el
concurso de varias mentes en sintonía, con fe y convicción.

Con el paso de las horas llegaron al castillo de Montsegur —uno de los


últimos reductos cátaros—, aproximadamente a las 5 p. m., cuando,
felizmente, la lluvia había cesado. Este castillo se encuentra enclavado en la
cima de una empinada montaña de unos 1300 m de altura, cerca de los
Pirineos y esta rodeado de un majestuoso paisaje de verdes bosques,
quebradas profundas y montañas elevadas. Un lugar mágico que invita al
silencio y a la meditación.

El grupo tenía previsto pasar la noche en la montaña, entre las ruinas del
castillo. Pero estuvieron haciendo tiempo para subir, mientras el lugar se
despejaba de turistas que en gran numero llegan a la zona. En la furgoneta en
que iban, aprovecharon en hacer algunas prácticas de armonización, hasta
que llego la noche, cubriendo con sus sombras el vasto paraje. Y sobre las 10
p. m. recibieron en comunicación los siguientes mensajes:

Comunicación: 24-04-99.

Lugar: Montsegur Hora: 22:00h.

Antena: Maribel García.

Sí, en contacto con ustedes Anitac y Sampiac.

Deberán realizar todo su trabajo en la clave 33[6] . Sembraran mentalmente y


espiritualmente en el castillo el «Disco Solar» (supuesto tesoro de la ciudad
perdida de los incas llamada Paititi o Quañachoai en el Perú), instaurando en
ese recinto la luz que en su momento perdió. El Disco Solar dispondrá el lugar
para que en un futuro no muy lejano se abra una puerta para la luz (del
conocimiento) y para una conexión interdimensional. Harán el trabajo con
convicción, visualizando que desde donde esta ubicado el Disco Solar en ese
momento, llegará etéricamente una replica exacta instaurándose e
iluminándose todo. Sellarán el trabajo con la Energía Crística (que es la
conciencia y la fuerza interna para cumplir las misiones encomendadas) y
bajarán en silencio, no rompiendo con la vibración de la palabra nada de lo
creado.

Habrá sorpresas. Les estamos apoyando.

Amor y Paz en el Profundo Amor de la Conciencia Cósmica. Subida a la


montaña a las 3.33 a. m. Y trabajo en el castillo a las 6.33 a. m.

Maribel escuchó en su contacto la palabra «Melquisedec», que como sabemos


es el nombre del rey sacerdote Yebuseo de Yerushalaim (Jerusalén), que
bendijo y recibió el diezmo para Dios de manos de Abraham (Gen. 14, 17-20),
y es también a quien se menciona en los Evangelios como parte de una orden
sacerdotal divina (Epístola a los hebreos, 7, 1-3).

Comunicación 24-04-99.

Lugar: Montsegur.

Hora: 22.00h.

Antena: Coral González.

Unifíquense, en una sola intención. Recibirán pautas para esta noche. En el


silencio escucharán la voz que los guiará. Mañana al amanecer, un rayo de luz
caerá y abrirá la Tierra para que siembren el Disco Solar. Mantengan sus
chakras (vórtices de energía, centros de energía corporal, en la tradición
médica oriental) en orden, pues serán catalizadores de energía,
desbloqueando este lugar y liberándolo de la oscuridad; abriéndolo para que,
llegado el momento, toda la luz se expanda por Europa.

Estén atentos. Los Guías y los Maestros les apoyan. Establezcan la estrella de
seis puntas (el equilibrio en vosotros y el entorno).

ANITAC Y SAMPIAC

Coral también captó en ese momento en su mente que le hablaban


trasmitiéndole el nombre de «Melquisedec» y las palabras «tiempo-espacio»
simbolizados por un circulo con una cruz en su interior de cuatro lados
iguales, con cuatro pequeños circulitos alrededor y en el exterior del circulo.

En los mensajes se insistía sobre la necesidad de hacer una serie de trabajos


mentales que pudieran trasmutar la actual situación vibratoria del lugar, y
permitiesen que dicho sitio volviese a ser un centro de irradiación de energía.
Para ello había que conectarlo energéticamente con otro que no había sido ni
violentado ni violado por las fuerzas tenebrosas. Y ese lugar era Paititi, donde
se encontraría el legendario disco de oro, de gran tamaño, que representaba
al Sol, pero que no era de un oro conocido porque era como traslucido y al
girar abría un umbral interdimensional. Este disco fue rescatado
sigilosamente del Coricancha —el templo del Sol en el Cuzco— por la gente
de Paititi, durante el caos producido por la invasión de los conquistadores.
Precisamente, durante una noche, cuando los invasores europeos ebrios de
ambición y de licor de chicha (maíz fermentado) se jugaban a los dados
semejante tesoro, que había sido colocado sobre unas Piedras a manera de
mesa improvisada hace quinientos años.

El grupo tuvo que aguardar durante varias horas en la furgoneta, hasta que
llegase la hora indicada, para empezar a ascender la montaña. Mientras, el
ambiente interno de la movilidad se iba helando, producto de las bajas
temperaturas exteriores, obligando al grupo a cubrirse con cuanta cosa
hubiesen traído, y hasta en más de una ocasión a tener que encender el motor
para calentar por dentro la furgoneta. Mientras esto sucedía se hicieron
varias meditaciones, y entre una y otra, varios del grupo lograron ver cómo
hacían su aparición unas siluetas negras que se paseaban delante y fuera del
vehículo, como acechando.

A las 3.33 a. m. el grupo, armado de valor y seguridad interna, abandonó la


furgoneta para ascender la montaña. Sabiendo de la importancia del
acontecimiento subieron en silencio. Y el ambiente fue respondiendo a la
trascendencia del momento, despejándose completamente el cielo,
apareciendo en el firmamento multitud de estrellas. Luego la Luna también
hizo acto de presencia, iluminando con un brillo sin igual el ascenso del
grupo. La montaña, en muchos de sus tramos tenía altos escalones de madera
que habían sido clavados en la piedra original, y que exigían un gran esfuerzo
al subirlos.

En lo alto de aquella rocosa cumbre que se alza como un dedo señalando


hacia el cielo, el grupo se encontró al final de su ascenso con los sólidos
bloques de piedra que forman la muralla exterior del castillo. Allí hallaron
unas escaleras de madera que se elevaban unos cuatro metros sobre el suelo,
hasta alcanzar la majestuosa puerta de entrada al recinto pétreo. En ese lugar
el grupo se sentó aprovechando el suelo de madera, apoyando las espaldas en
los fríos muros, disfrutando de la soledad y del silencio. A la izquierda se
observaba en el cielo sutilmente uno de los brazos espirales de la Vía Láctea y
a la derecha la Luna, pero aún quedaba algo de nubosidad, lo cual, combinado
con la iluminación, hacia que el ambiente pareciera algo irreal, fuera de este
mundo o de esta dimensión.

En ese momento los miembros del grupo comenzaron a vivir un proceso


interno, advertido pero impensado: ¡Se fueron despertando recuerdos de
vidas anteriores!

Se respiraba un ambiente de paz y quietud, sin embargo algunos del grupo


observaron cómo unas bolas negras caían del cielo y se estrellaban
desintegrándose silenciosamente contra una especie de barrera invisible a
varios metros por encima de todos. La temperatura seguía siendo muy baja
por lo que el grupo se encontraba cubierto hasta las narices, mientras
conversaban sobre aquellas extrañas esferas tratando de interpretarlas.

Al rato la Luna había desaparecido cubriendo todo el lugar con una oscura y
misteriosa penumbra. El trabajo continuó entonces con meditaciones y
cadenas de irradiación por el planeta. Pero sobre las 6.15 a. m. todos se
pusieron de pie pues se atisbaron los primeros claros del alba. (En Europa
suele ser diferente, porque a esa hora es noche cerrada y oscura). Lo extraño
fue que el amanecer ocurrió antes de la hora, lo cual no correspondía. Sin
embargo todos lo estaban observando. Parecía como si la luz tuviera prisa por
salir.

Cuando todos consideraron que había suficiente luz, se decidieron a entrar en


el castillo pidiendo primero permiso a los guardianes invisibles del lugar.
Todos aprovecharon entonces para decretar que el grupo venía a sembrar luz
en ese sitio y a prestarse humildemente como mensajeros del conocimiento
que estuviese dispuesto para ser canalizado a la humanidad.

A las 6.33 a. m. todos se situaron en el centro de la construcción cuyas


paredes aún se mantienen perfectamente en pie después de tantos siglos. Ya
en el patio interior y al pie de la torre del homenaje se hizo un trabajo de
protección y de armonización, utilizando un gigantesco rayo de luz dorada
que se visualizó mentalmente que descendía desde el Cosmos sobre el grupo,
y a través de este, sobre la montaña. Invadió el lugar un profundo silencio,
como si todo se hubiese detenido. Incluso los pájaros cesaron su canto,
quedando al parecer toda la naturaleza expectante de lo que allí podía darse.
Realmente podía percibirse en el ambiente la presencia de los Maestros y de
los Guías en una atmósfera atemporal de quietud.

Se encontraban todos meditando cuando visualizaron la presencia del «Grial»


(Santo Cáliz), que en un instante ascendía desde las entrañas de la Tierra y
cubría con su luz toda la montaña. Entonces todos percibieron que el lugar se
iba transformando en un enorme Cáliz cuyo centro era el castillo cátaro.
Después la práctica continuó con una proyección mental hacia la ciudad del
Paititi, desde donde se trajo una replica exacta etérica del Disco Solar
sembrándolo en el suelo, como si se hiciese dentro del Cáliz para una
comunión sagrada con la luz. Invocaron entonces la presencia de
«Melquisedec» (Rey de Salem y miembro de la Hermandad Blanca de los
Retiros Interiores. Mencionado en el Libro del Génesis). Y a la vez se pidió la
presencia de los cuatro Guardianes que fueron enviados hace casi ocho siglos
para «proteger lo que se tenía guardado», y también el lugar, evitando que
fuese utilizado para el mal.

Se sabe que cuatro cátaros «revestidos» como se les llamaba a quienes


habían asumido el compromiso máximo dentro de su iglesia, lograron huir en
secreto de Montsegur durante el asedio de las fuerzas cruzadas, llevando
consigo «algo tan especial», que no dudaron en descolgarse por los abismos
para ponerlo a buen recaudo.

A continuación nuestro grupo español del siglo XX sintió la resonancia de


aquellas palabras lanzadas por Maribel, invocando el poder del Verbo
Creador en todas y cada una de las paredes de aquel baluarte defensivo.

Luego se sello el trabajo, sintiendo la energía transformadora en todos y cada


uno. En el ambiente se respiraba éxito, y al momento los pájaros comenzaron
a cantar de nuevo, y la naturaleza volvió a la normalidad.

El grupo se dirigió entonces hacia una puerta trasera en arco atraídos por el
horizonte que desde allí se vislumbraba. Al trasponer la puerta se
encontraron en un peñón que daba a un abismo impresionante, observándose
a la distancia las montanas pirenaicas.

A partir de ese momento todos pudieron presenciar un amanecer sublime e


irrepetible: el padre Sol hizo su aparición de una forma clara y limpia por
detrás de una montaña, emergiendo poco a poco una suave pero brillante luz
dorada, teniendo el cielo y el lugar de múltiples colores. En ese instante
nuestros amigos sintieron que el propio Disco Solar representado en aquel
Sol de «oro» entregaba su luz al mundo sembrando un nuevo amanecer para
Europa.

El equipo presente aprovecha el momento para hacer una serie de


mantralizaciones, llenos de una intensa alegría y emoción, sintiendo que
todas las penalidades que habían tenido que pasar para llegar hasta ese
preciso momento habían merecido la pena por contemplar con otros ojos (los
del corazón) un solo minuto de aquel magnifico espectáculo cósmico.

Cuando el Sol salió completamente, se emprendió el regreso en completo


silencio, abrumados todos por la intensidad y a la vez la sencillez de
experiencias tan profundamente espirituales. En el ambiente se sentía que no
tardarían en volver a pisar aquel sagrado lugar en cuyo subsuelo había sido
construido en tiempos remotos, un Templo Solar sobre el cual se asentaba
ahora el castillo cátaro.
LA RUTA DEL GRIAL

Hijo mío eres tú,

yo te he engendrado hoy…

Tú eres sacerdote eternamente, a la manera de Melquisedec…

HEBREOS 5, 5-6.

El 12 de mayo de 1999 tomé en el aeropuerto de Lima el vuelo de Servivensa


que iba a llevarme hacia Madrid. Era un vuelo que hacía escala en Venezuela,
donde hacía solo unas semanas que había estado dando conferencias y
asistiendo a entrevistas en algunos programas de televisión y radio. Era muy
curioso, pero hacía veinte años que había hecho mi primer viaje aéreo al
extranjero, y fue precisamente a España, haciendo escala en el aeropuerto de
Maiquetía (Venezuela). Después de unas dos horas retome la conexión, que
fue muy agradable por el excelente servicio a bordo, y llegue al cabo de
interminables horas a la terminal de Barajas el día 13 de mayo, fecha
importante dentro de la casuística ovni por ser el día de la aparición de la
Virgen de Fátima[7] , o como realmente la llamaban los tres niños testigos:
«La Dama Vestida de Sol». También el 13 es un numero clave importante
porque nos recuerda al número mágico de los mayas, que hace referencia a
las trece lunaciones del calendario lunar o calendario de fertilidad de la
Madre Tierra, y también por ser el trece, en numerología, el número de la
muerte pero como transformación.

Hice transbordo en el aeropuerto de la capital española a una aerolínea local


y me dirigí hacia la mediterránea Valencia, donde me aguardaba el muy
querido grupo integrado por Maribel, Carlos, Coral, José y María. Ellos habían
organizado una serie de conferencias para ayudar en la difusión del mensaje
de cambio y esperanza para la humanidad que se desprende de la enseñanza
de los Hermanos Mayores o también llamados Guías Extraterrestres. Me
confesaron que tenían muchas preguntas, así como anécdotas que querían
compartir conmigo.

Fue una hermosa experiencia el reencuentro con el grupo, que en agosto de


1997 había asistido junto con muchos otros a un encuentro mundial que tuvo
lugar en Playa Paraíso, al norte de la ciudad de Lima, en Perú (véase mi libro
anterior, Una insólita invitación). En aquella ocasión habíamos trabajado con
meditaciones y prácticas continuas durante seis días en el desierto, como
preparación para experiencias mayores; experiencias que se dieron a cada
cual según su preparación y compromiso. Estas consistieron en avistamientos
colectivos de naves, recepción de «Cristales de Cesio» (cristales
materializados en las palmas de las manos de los asistentes proyectados
desde una nave cercana) y hasta el traspaso de puertas interdimensionales
«Xendra» que, por primera vez, fueron atestiguados y vividos por periodistas
como Rosario Abrahams, del diario Expreso de Lima o Alicia Escribano
O’Connor, del diario La Nación de Buenos Aires (Argentina), entre otros.

Nada más llegar a tan cálida ciudad, me pusieron al corriente de los últimos
acontecimientos y comunicaciones.

La misma Coral recibió un mensaje ese día que decía lo siguiente:

Comunicación: 13-05-99.

Lugar: Valencia.

Hora: 20.30 h.

Antena: Coral González.

Con amor, Sampiac.

Establezcan comunicación el viernes por la noche junto con el hermano Sixto.


Recibirán pautas importantes para viajes cercanos.

Manténganse fuertes en todo momento, pues se acercan momentos difíciles.


La luz brilla con intensidad e ilumina ya a todos aquellos que sienten la
llamada en su corazón.

Eliminen toda negatividad de sus mentes, pues el maligno aprovecha los


estados de baja vibración para hacerles perder la valiosa energía que
necesitarán para emprender una nueva etapa de arduo trabajo.

Nada debe fallar en estos momentos cruciales. Todo debe prepararse


meticulosamente y tener en cuenta hasta el más mínimo detalle en viajes,
trabajos y posibles situaciones.

En Perú aguardan contundentes experiencias que los reorientarán en su


caminar como grupo y aportarán nuevas pruebas de la veracidad de los
mensajes recibidos. Confíen, pues todo está previsto. Controlen sus egos y
practiquen la humildad, pues el devenir de los acontecimientos está por
confirmar cuanto se les dijo. ¡Todos deben ser uno!

Participen en todo momento de una comunión mental, entre todos los grupos
de contacto del mundo, para el total cumplimiento y realización de la Misión
en este momento.

El séptimo sello esta a punto de abrirse. Prepárense, ustedes deben estar


completa y diariamente armonizados, practicando una disciplina diaria;
trabajando la meditación profunda con sus chakras activados junto con
ejercicios de respiración. Una alimentación sana y ayunos regulares. Acallen
sus mentes y mediten en Dios, pues la energía proveniente del Sol Central de
la Galaxia ya toca sutilmente sus cuerpos (estremeciéndolos).

La Confederación espera de ustedes mayor entrega y dedicación a la Misión.


Unifíquense y vibren en la misma sintonía de amor incondicional. Los
Maestros aguardan pacientemente, pues llegado es el momento en que Sean
entregados sin demora conocimientos e información que durante mucho
tiempo estuvo celosamente guardada. Pero ustedes deben estar preparados.
Trabajen duramente y no dejen de fortalecer su voluntad y su intuición, así
como su ánimo.

Pronto se darán las condiciones para que realicen un nuevo viaje a Francia.

Estamos con ustedes, apoyándoles en todo momento.

Paz y amor en la luz.

Como este mensaje hacía referencia a viajes cercanos, procuramos crear las
condiciones idóneas para recibir nuevos mensajes en los días siguientes, y
pedir a través de ellos pautas y datos más precisos. Mientras tanto, asistí a
varias entrevistas en la radio y en televisiones locales, donde conocí a gente
muy «maja» como dicen en España; gente de amplio criterio y abierta a
escuchar argumentos consistentes y coherentes sobre algo que ya no se
puede seguir negando, como es la presencia de otra realidad que nos visita y
nos observa desde siempre. En los datos libres aproveche para recorrer un
poco el centro de la hermosa y milenaria ciudad de Valencia.

Que bonito era ver como Valencia ha sabido conservar su lengua y sus
tradiciones más antiguas, herencia de la diversidad de pueblos que la
colonizaron, desde iberos, fenicios, griegos, romanos, árabes y cristianos. Por
eso es en la actualidad uno de los principales focos de atracción del turismo
interior de España, porque hay que ver que puentes y que edificios más
antiguos y perfectamente conservados tiene. Además, las calles están muy
limpias, la gente es muy amable y tiene un orden exquisito.

A la suavidad de su clima, generalmente cálido, y el atractivo de sus playas se


le ha de sumar el que los valencianos hayan sabido fundir la tradición con lo
moderno. En sus parques y jardines, así como en las calles y plazas, se respira
fraternidad, prosperidad y mucha alegría, sobre todo cada 19 de marzo, día
de San José, cuando se celebran «Las Fallas» las fiestas más populares y
representativas de esta comunidad. Durante todo el año, los artesanos
construyen meticulosa y pacientemente los «ninots», esculturas
espectaculares llenas de colorido y arte, que hacen alusión a personajes
famosos o míticos. Días antes de la fiesta se colocan las esculturas en los
distintos barrios de la ciudad para que Sean admiradas por todos. El momento
culminante es la noche de San José, en que las esculturas son quemadas, y
solo una será indultada, librada del fuego por ser la más original y de mejor
calidad artística. Esta será conservada en un museo especial.

Hablando de lo especial del día 19 de marzo, según diversos mensajes y


enseñanzas recibidas de los Guías, así como por experiencias de clarividencia
y dermóptica trabajadas por nuestros grupos en los viajes hechos a lugares
como Belén, Qumrán y Nazaret, en Israel —que luego fueron avaladas en
investigaciones posteriores—, Jesús, el rabí de Galilea, habría nacido el día 19
de marzo del año 7 antes de nuestra era, por lo que habría siete años de error
en nuestro calendario.
Como decía, Valencia es maravillosa y especial en todo sentido, y en ella se
multiplican muchas claves esotéricas. También esta ciudad se encuentra
rodeada de lugares de misterio e historia, como la extraordinaria Acrópolis de
Sagunto, que fue en una época romana y en otro árabe, y también por muchos
castillos templarios sobre las cumbres de los cerros cercanos.

En una de esas deliciosas caminatas por las estrechas calles del centro de la
ciudad, donde me llamaban la atención los sólidos y antiguos edificios de
piedra, en los que destacan multitud de balcones, Maribel, que me
acompañaba, aprovechando que estábamos cerca, me invito a visitar
precisamente el «Miguelete», esto es, la catedral de Valencia, donde había
una exposición sobre el «Santo Cáliz». Me pareció muy interesante, por
cuanto el arcángel san Miguel sería, según la explicación de los Guías
Extraterrestres y de los Maestros de la Hermandad Blanca, uno de los seres
ultraterrestres del Universo Mental, o también llamados Padres Creadores del
Universo Material, por ser ellos los encargados por el Absoluto (el Dios Único)
de crearlo. Además, según esto, Miguel se habría fundido a lo largo de los
tres años de vida pública en una simbiosis cósmica con el Hijo del Hombre al
entrar en el cuerpo de Jesús. De tal manera que el Hijo de Dios se unió al Hijo
del Hombre y se hicieron uno, y ambas entidades coexistieron en Jesús hasta
el momento de la crucifixión. También me parecía importante que fuéramos a
ver una exposición sobre el Grial justo cuando el grupo me había empezado a
contar sus experiencias alusivas en el sur de Francia, en las ruinas de un
castillo conocido legendariamente como el castillo del Grial o el Monte de
Salvación: «Montsegur».

Entramos en aquella antigua iglesia —previo pago de un oneroso ticket— para


apreciar el audiovisual preparado sobre el Santo Cáliz que se encuentra en
aquel lugar, y que según los historiadores locales y las leyendas medievales
de la región sería el autentico que utilizo el Nazareno en la ultima cena. La
exposición del tema fue soberbia, no se dejaron vacíos en la información y
aparentemente se cumplió con todos los requisitos como para una aceptación
lógica del hecho. Pero cuando se levanto la pantalla donde se habían
proyectado las imágenes, detrás de un vidrio apareció el altar de cristal de
alabastro finamente trabajado, en donde se hallaba en la parte central el
cáliz, que lucía los añadidos posteriores propios del fervor popular: una base
de oro, con asas laterales llenas de pedrería. La copa en si era pequeña, como
un tazón pequeño o un platito, y estaba hecha de piedra de un color verde
oscuro con vetas, parecida al jaspe o al ágata.

Sinceramente, me sorprendió gratamente que la copa o vaso fuese en su


origen algo modesto y sencillo (sin los añadidos posteriores), pero el hecho de
verla no produjo en mi ninguna emoción extraordinaria. Mas bien, repuesto
de la desilusión, tuve la clara sensación de que no era el Cáliz de Cristo, y
que, en pocos días más, emprenderíamos un viaje al encuentro del verdadero,
por lo que ese lugar y ese momento solo eran una señal, un punto de
referencia, una llamada de atención y un primer paso simbólico hacia lo que
intuía que sería un viaje en el tiempo hacia otras esferas y dimensiones.

De allí fuimos a un importante centro comercial, pues estaba interesado en


ver si en su sección de librería se encontraban mis libros, importados desde
Argentina. Estábamos allí cuando Maribel se me acerco hasta en dos
ocasiones para mostrarme un libro sobre los cátaros y preguntarme si lo
compraba o no. Le conteste que siguiera su intuición, y ella quedo algo
frustrada, porque esperaba de mi una confirmación a lo que ella sentía con
fuerza. Al final lo compro de todas formas, y mientras regresábamos a su casa
me contó que anteriormente ya había buscado ese libro y, al no hallarlo, lo
encargo a la tienda. A las pocas semanas la llamaron para avisarla de que su
pedido había llegado y le preguntaron cuando iría a por él. Pero por sus
múltiples ocupaciones se le había olvidado. Por eso, como aquella era la
tercera oportunidad que se le presentaba, esta vez sí lo adquirió.

En casa de Maribel y Carlos, en un momento de tranquilidad, me puse a


revisar unas revistas que mi buen amigo Manuel Farinos me había regalado, y
en ellas encontré algo que en ese momento me estremeció por dentro y que
relacione con los mensajes recientes que se habían venido recibiendo sobre el
papel de España. Por un lado, se comentaba que se estaban gestionando los
permisos ante las autoridades de Cartagena para tratar de rescatar el
sarcófago de piedra del faraón Micerinos, que se hundió en el siglo XIX frente
a sus costas con el barco que lo transportaba con destino a Inglaterra.
Recordemos que las pirámides de Gizeh están alineadas con el Cinturón de
Orión[8] , y que su ubicación y su tamaño guardan relación con las tres
estrellas. Y es que de ese lugar llegaron los primeros «Ángeles Caídos» a la
Tierra. El otro asunto era contemplar como después de tres años los mensajes
de los Guías que nos advertían sobre el rol de España se cumplían tal cual,
por cuanto la terrible guerra de los Balcanes tenía al frente de la OTAN
precisamente a un ciudadano español, el señor Solana.

El día 15 nos reunimos con todo el grupo de Valencia para recibir nuevos
mensajes. Y después de hacer un cuestionario básico de preguntas sobre la
misión en España y en Perú, esto fue lo que recibimos:

Comunicación: 15-05-99.

Lugar: Valencia.

Antena: Maribel García.

El grupo de España deberá mantener el equilibrio y la calma reforzando su


voluntad a través del trabajo bien hecho de meditación y concentración, para
que las asechanzas de la oscuridad los encuentren fortalecidos y puedan
llevar adelante la parte que les corresponde en el Plan Divino.

Deberán redoblar los esfuerzos reuniéndose como vienen haciéndolo, puesto


que muy pronto en España se darán acontecimientos importantes que
requerirán del equilibrio y la sensatez de personas comprometidas con la
Misión.

Pueden viajar al sur de Francia y culminar el trabajo que allí se inicio,


aportando con ello la apertura a Europa de unas energías que son necesarias
para el desarrollo de la espiritualidad y la instauración de la luz y la Paz en
este continente. Esta no será inmediata, pero sí llevará a un proceso que
culminará con el entendimiento entre los seres humanos a pesar de la
oposición de las fuerzas oscuras, pues a través de los trabajos de los grupos
conscientes se derrama sobre el planeta una energía muy especial que
propicia el conocimiento y el amor en los corazones de esta humanidad.

En Perú deberán trabajar cuidadosamente el viaje previsto a Ayacucho (a la


localidad de Vilcashuamán, también conocida como la «Colina del Halcón
Sagrado», una antigua e importante ciudad Inca con un sinfín de puertas
ciegas, esto es, simbólicas, entre las que destaca una singular pirámide
escalonada de piedra), puesto que es de gran trascendencia Para la Misión y
el Plan. Allí tendrán acceso a una parte del conocimiento que abrirá nuevos
horizontes de esperanza tanto para el rol protagonista del país como para la
humanidad. Este viaje es importante y no deben descuidarlo más. Deben
participar en el aquellas personas que verdaderamente sientan el compromiso
y tengan la voluntad del trabajo sincero y por amor. Deberá viajar un grupo
reducido y armónico, y no se deberá permitir que la desarmonía y el
desaliento impidan llevar a cabo su responsabilidad. No será fácil, pero si
recibirán el apoyo necesario. La Hermandad Blanca espera y es el momento
propicio.

La situación actual de vuestro planeta es comprometida, Pero es cierto que


las fuerzas oscuras están perdiendo cada vez más fuerza en oposición a la luz
que inevitablemente esta entrando en vuestro mundo gracias a tantos seres
que oran y trabajan por la luz.

La crisis se acentuará, pero con el esfuerzo de todos los seres comprometidos


con la luz, todo cambiará y pronto. No lo duden, solo dispónganse para
acentuar su trabajo y su compromiso no desperdiciando una sola oportunidad
para hacer cadenas de irradiación planetaria y comprometiendo así a un
mayor número de seres humanos.

Amor y Paz,

ANTAREL Y ANITAC

Comunicación: 15-05-99.

Lugar: Valencia.

Antena: Coral González.

Sí, estamos aquí, en contacto, Oxalc y Anitac.

Los hermanos de España deben consolidar su compromiso con la Misión a


través de un total hermanamiento basado en el amor y el desprendimiento.

Deben incrementar sus trabajos de meditación, llevando una discipline diaria,


también a nivel físico y mental. En los momentos de dificultad, escuchen la
voz de su interior y déjense guiar por ella. Deberán aprender a canalizar las
energías que están recibiendo, manteniendo sus chakras limpios y activados,
y practicando con el prójimo la caridad bien entendida.
Manténganse libres de pensamientos negativos y procuren no hacerle el
juego a las fuerzas oscuras que, penetrando muy sutilmente en sus mentes,
les hacen caer en las garras de la irrealidad (y el desaliento).

El viaje a Francia se realizara muy pronto, y ustedes tendrán la oportunidad


de dar un Paso adelante. Gracias a su esfuerzo y a los logros obtenidos a
través de su trabajo en la Misión, recibirán una grata recompensa. Muy
pronto podrán contemplar el resurgir espiritual de Europa.

Posible fecha para realizar la apertura de la puerta dimensional en Francia en


el punto preparado anteriormente por ustedes: los días 20 y 21 de mayo.

Cuando la puerta se abra, la luz se expandirá por Europa a través de las


líneas de fuerza. Muchos serán los que vean la luz en sus caminos. Otros se
cubrirán los ojos intentando negar lo evidente. Importantes cambios a nivel
político y social acontecerán a partir del mes de mayo. Después, tres meses
silencio precederán a la gran prueba para la humanidad. Estén atentos y
preparados para este momento, pues sus espíritus para entonces deberán ser
uno, y sus cuerpos y mentes purificados deberán estar en perfecta calma y
paz interior.

Ustedes saben tan bien como nosotros que el futuro de la humanidad depende
de su perseverancia, que deberán entregar lo mejor de si mismos por amor;
tal es el camino que eligieron desde mucho antes de nacer a este mundo. Por
tanto, no deben caer en el desaliento y la desesperanza, pues de esta forma
solo consiguen retrasar el Plan y todo lo que de bueno debe ocurrir para la
humanidad en su paso definitivo a la cuarta dimensión.

En Perú deberán estrechar los lazos de unión al máximo, apoyándose unos a


otros en todo momento, pues el resultado del viaje previsto por ustedes,
depende del grado de unidad que logren alcanzar.

Deberán estimular más su percepción del mundo sutil, para poder captar más
claramente las señales que han de recibir para una posible confirmación de
viaje. Los trabajos que hay que realizar en Perú deberán tener como base la
unidad y el poder de la palabra, el Verbo Creador, seguido de las
visualizaciones para una perfecta cristalización de los objetivos que se deben
conseguir.

Sepan que los viajes de Misión ayudan a rescatar de la oscuridad lugares de


enorme poder energético, muy positivos para el planeta; los fortalecen en el
espíritu para llevar adelante la Misión con verdadera entrega; contribuyen a
darles una aportación extra de energías muy especiales que los ayudan a
madurar y van despertando todo su potencial psíquico y espiritual, y basta los
preparan para recibir el conocimiento que ha de ser entregado a la
humanidad.

Los viajes de Misión les ayudan a comprender verdades tales, recordando


situaciones y vivencias pasadas que aportan más lucidez y entendimiento a
sus mentes, y estrechan lazos de amistad y de amor entre ustedes, a través de
la convivencia y el compartir.
Todo ello, con un solo objetivo en común: su participación activa en el Plan
Cósmico en misión de ayuda al planeta Tierra en su proceso de evolución,
teniendo como base y sustento el amor.

No duden de sus posibilidades ni de su intuición. Estamos con ustedes, con


amor en la luz.

SUS HERMANOS GUIAS EN MISIÓN

Comunicación: 15-05-99.

Lugar: Valencia (España).

Antena: Sixto Paz.

Sí, somos sus hermanos Guías de Misión.

España tiene que ser portadora de paz, sabiduría y respeto con autoridad.
Para que esto sea posible, deben incrementar sus cadenas y trabajos varios,
polarizando el país hacia la luz. Es urgente, por cuanto el tiempo es llegado
como para un cambio, que se comprometan más. Nosotros los apoyaremos
con nuestra presencia.

Ya están lo suficientemente preparados como para que inclinen más la


balanza hacia lo positivo. Por eso, viajen en agosto a Toledo un fin de semana
para hacer meditaciones que los conecten con la información y el
conocimiento allí guardado. También cerraran puertas.

El viaje a Francia es importante porque cumple el ciclo de lo que se dijo que


había que hacerse: enfrentar las energías en su propio terreno, canalizando lo
bueno y depurando lo malo. Polarizarán y limpiarán el sur de Francia y
empezará con ello a abrirse la puerta de Europa, al abrir todo lo allí dejado.
Realicen el viaje juntos porque así unidos serán protegidos y fortalecidos,
aprovechen la oportunidad que se les brinda. Estaremos allí.

El viaje a Ayacucho lo podrán realizar a finales del mes de junio. Conecten la


luz con la luz. Todo lo anteriormente realizado y activado será definitivamente
enlazado.

Lo que se les ha pedido y para lo que se les ha convocado ha necesitado de


preparación, por cuanto no es fácil activar los cuerpos sutiles del planeta a
través de sus múltiples chakras, como para que las energías planetarias
desbocadas en la actualidad los apoyen y puedan ser canalizadas hacia el
fortalecimiento del aura positiva del mundo, que es su protección frente a los
peligros externos. Confíen en que todo cuanto hagan contribuirá
efectivamente a acelerar procesos.

Las fuerzas de la oscuridad están sembrando a su alrededor y en medio de


sus relaciones desconfianza y resentimientos. Ustedes ya lo saben, no se
dejen arrastrar por el desaliento y la desesperanza, porque están procurando
debilitarlos en la fe en lo bueno que hay en el ser humano y en la propia vida,
y sobre todo en la justicia. Pero es ahora cuando su actitud y su valor, así
como su capacidad de amar en el perdón, ayudará a abrir los ojos a los
demás, motivando en la esperanza al coraje y al compromiso acelerador de
cambios.

Con respecto al año en curso, nuestra presencia se extenderá sobre gran


parte del planeta, especialmente en Europa, en los lugares en conflicto, y esto
aportará giros positivos, cambios de dirección y liberación de información.
Este año trae grandes dificultades, por lo que deben fortalecerse más y más.

Las sombras de la asechanza empezarán a ceder muy pronto dando paso a la


luz de la esperanza, ya lo verán. Sean fuertes y no caigan en el juego de la
oscuridad.

Con amor,

SAMPIAC

Según estas comunicaciones, era importante que se hiciera un tercer viaje al


sur de Francia, y el mejor momento eran los días 20 y 21 de mayo. Por lo que,
en el grupo, todos nos comprometimos a crear las condiciones para la
realización del mismo.

Los días pasaban y di algunas conferencias y también me reuní con gente


interesada en, conversar sobre diferentes temas. Al final de uno de los
almuerzos en casa de Carlos y Maribel, ella me presto el libro que había
comprado, y en el comenzaron a aparecer cantidad de claves que harían de
ese tercer viaje al sur de Francia una experiencia diferente de las anteriores.

Durante la lectura, lo primero con que me encontré fue con una historia que
decía que a partir del año 1100 se comenzó a ver, caminando por ciudades y
pueblos, a unos extraños peregrinos que iban vestidos de negro y que
andaban siempre de dos en dos. Rápidamente se integraban con la comunidad
y participaban en la vida del pueblo, trabajando muy duro, codeándose con
sencillez con los habitantes, y hasta compartiendo sus penas y alegrías. Se
desenvolvían en todos los oficios como artesanos y campesinos, y a veces se
retiraban durante algunas semanas, con ocasión de coloquios entre ellos, y de
largos períodos de ayuno o de meditación.

La diferencia en la vida cotidiana radicaba en su apego a las Sagradas


Escrituras, pero sobre todo en la humildad evangélica; diferencias en la
calidad del contacto con los habitantes, y diferencias en las enseñanzas
siendo estas más sencillas, pero no menos profundas. El hecho de estar
avaladas por una práctica de vida atrajo a la gente hacia este movimiento,
que llegaría a llamarse «catarismo» («Los Hombres Puros»). El pueblo, que
no era ciego ni miope, podía comparar con el pésimo ejemplo que daban los
religiosos de aquel entonces, rodeados de riqueza y fastuosidad. Los
predicadores cátaros más bien eran coherentes en su mensaje y en su vida;
predicaban el amor a Dios y al prójimo, la sencillez, la responsabilidad de
cada uno para ser juez de si mismo, siendo ellos mismos muy exigentes
consigo mismos pero muy caritativos con los demás.
Algunas de las ideas fundamentales de este movimiento las pude hallar en el
libro Misterio y mensaje de los cátaros de Jean Blum. Por ejemplo, en las
páginas 26 y 27 se cita lo siguiente:

Que sólo existe un Dios. Que para los católicos es todopoderoso. Que para los
cátaros debe contar con la oposición de fuerzas caóticas nefastas.

Que el alma sobrevive a la muerte física. Que, según los católicos, su destino
se juega en una sola vida. Que, según los cátaros, las puertas de las
reencarnaciones llevan ese destino en este mundo hasta la purificación
definitiva.

Que el universo sensible ha sido creado. Que, según los católicos, es obra de
Dios. Que, según los cátaros, es obra de Satán, hijo de Dios, pervertido por el
caos del principio del mal.

Que los ángeles y los hombres han pecado. Que, según los católicos, lo han
hecho por ejercicio de su libre albedrío. Que, según los cátaros, lo han hecho
por el dominio del principio del mal.

Que el pecado tienta permanentemente a los vivos. Que, según los católicos,
solo implica a su autor y encuentra su perdón en un sacramento. Que, según
los cátaros, implica al universo entero y encuentra su redención con el
esfuerzo consciente de una voluntad que acaba con el determinismo inicial
[sic].

Que Jesucristo fue enviado para la redención del Mundo. Que, para los
católicos, la salvación recompensa el cumplimiento de su ley. Que, para los
cátaros, el Amor lleva en si mismo la salvación.

De un momento a otro, mi mente se había trasladado a los siglos XII y XIII, en


plena Edad Media, cuando la oscuridad y la superstición campeaban, y con
justa razón me hallaba sorprendido por la claridad de conceptos de esta gente
y la profundidad de los mismos. Y también me maravillaba el hecho de que en
ese tiempo tantas personas estuviesen conectadas con tanta madurez en una
búsqueda independiente del más allá. Realmente era una época mágica en la
que se tenía la firme convicción de que la Tierra, como el centro del Drama
Cósmico, era el escenario de la encarnizada lucha del bien y del mal; que Dios
había depositado su confianza en el ser humano, quien tenía que cargar con
todo el peso de la asechanza de rebeldes jerarquías superiores. Pero que, de
todo ello, saldría la redención definitiva. Ese mismo Dios habría permitido la
manifestación del mal, con el fin de un crecimiento de las conciencias por si
mismas, fortaleciéndose y transmutándolo en bien. Satán y Lucifer eran el
estimulo provocador de la fuerza que llevaba a la Creación a realizar su obra
de edificación y progreso.

También encontré en el texto los orígenes históricos del movimiento. En él se


decía que los antecedentes más remotos de la secta eran los paulicianos, y
que esta fue fundada en Armenia por el patriarca Constantino, hacia el año
650 d. C. Su maestro inspirador fue el apóstol Pablo. Los paulicianos creían
en dos principios antagonistas. Atribuían el Antiguo Testamento al demiurgo
(el creador y ordenador), negaban la eucaristía y rechazaban las
representaciones de la cruz, que según ellos, al haber sido maldecida por
Moisés y a la vez ser un instrumento de suplicio, no debían inspirar por
ningún motivo a la veneración. La intolerancia hizo que los paulicianos fueran
exterminados en el año 878 de nuestra era por los bizantinos. Pero con
anterioridad habían enviado numerosos misioneros en todas direcciones. Los
Balcanes fue la tierra que dio el mejor asilo a sus ideas, ideas fabricadas con
otras concepciones vecinas, surgidas del sincretismo de una época prodigiosa
e impensable para nuestros días.

A mediados del siglo X, en Macedonia, un aldeano que se hizo llamar Bogomil


(«amigo de Dios») se lanzó a predicar una religión de paz y no violencia, de
aceptación del orden de las cosas (leyes universales), de serenidad y
equilibrio. Ese predicador creó una escuela que rápidamente caló hondo en la
gente, por ser accesible a todos y dar una explicación clara y profunda,
sensata y seria a los problemas de la vida humana, así como a las preguntas
cruciales de la existencia. Sus seguidores fundaron monasterios y conventos y
predicaron como máxima la bondad por excelencia. Ofrecieron su versión de
las tesis dualistas existentes hasta ese entonces. Su originalidad consistía en
hacer de Satán un auxiliar aceptado por Dios, puesto que en la aventura de la
vida el Hacedor había aceptado insuflar un espíritu libre en las criaturas de
barro moldeadas por Satán. El principio del Mal no se planteaba
expresamente, puesto que los pensadores bogomilos prefirieron el relato
mítico a la abstracción filosófica: se daba por sobreentendido que Satán había
pecado en cierta ocasión, pero nunca era evocado el motivo de su falta.

Según esta historia, en el año 1167 el patriarca bogomilo Niketas fue a


predicar al Languedoc (sur de Francia), siguiendo el camino de otros adeptos
de su fe que lo habían precedido, pero su papel sería fundamental, pues
instaló definitivamente la que fue la Iglesia Cátara.

Volviendo a nuestro viaje, el día 20 de mayo, de madrugada, nos aprestamos a


realizar el periplo hacia el Languedoc. Salimos de la ciudad de Valencia sobre
las 5 de la mañana, e hicimos nuestra primera parada en la cercana localidad
de Castellón, donde recogimos a otra persona del grupo y cambiamos nuestro
vehículo por una furgoneta para poder ir todos cómodos y hacer el recorrido
de más de quinientos kilómetros hasta el sur de Francia. A diferencia de los
viajes anteriores, en esta ocasión íbamos cinco personas.

Por la ruta conversamos sobre la importancia simbólica de que en el primero


y segundo viaje hubiesen ido cuatro personas. El cuatro es el numero de la
«preparación» del desarrollo de los potenciales internos, de la cruz cósmica
como símbolo de evolución, de los cuatro rumbos de la Tierra y sus espíritus
guardianes y de los cuatro elementos. Además, en cuanto abrimos nuestro
libro de consulta nos encontramos con un pasaje que hablaba de la «Vía
Sagrada» (ruta de escape), y que relataba que en marzo del año 1244, antes
de que las puertas del castillo de Montsegur fuesen abiertas a los sitiadores,
cuatro cátaros revestidos se descolgaron por entre las grietas de la montaña,
desafiando el terrible abismo, llevando entre sus manos un secreto (quizás
algún valioso objeto o quizás algo simbólico pero relevante) y renunciando a
sufrir el martirio purificador del resto. El texto decía, en la página 155, lo
siguiente:
¿Qué camino tomaron los cuatro revestidos que, la última noche, pusieron a
resguardo la esperanza de su fe?

¿Es verdad que caminaron a través de las gargantas de la Frau, poniendo sus
pies sobre el muy incómodo camino que bordea el minúsculo río, lo bastante
obstinado como para haber cavado un fantástico cañón a lo largo de miles de
milenios?

¿Tenían un mensaje destinado a Hugo, Poitevin, Amiel y ese cuarto del que
nunca la Historia conoció tal vez el nombre, las sombras proyectadas por las
fantásticas rocas, el rumor y los destellos verdes y plateados del torrente, y
los árboles que se asoman desde hace siglos?

Rocas de la Frau, ¿os visitó el Santo Grial cuando fue llevado hacia el
receptáculo y el santuario tranquilo que se le destinaban, antes de que suene
la hora de su despertar?

¿Tendría algo que ver esta coincidencia en el número? ¿Serían acaso estas
cuatro personas del grupo de Valencia aquellas mismas que cumplieron una
misión hace siete siglos y ahora venían a completarla, o sería sólo una
coincidencia simbólica? Muchos eran los interrogantes que se nos
presentaban, pero no podíamos dejar volar nuestra imaginación ni dejar que
los egos nos jugaran una mala pasada. Sea como fuese, el grupo estaba
respondiendo muy bien a los requerimientos del momento y venían
manteniendo una excelente trayectoria de compromiso con el Plan, que
aunque la mayoría de las veces no lo comprendemos, sabemos bien que tiene
sentido, y que este será comprendido cuando el momento y nuestra madurez
así lo permitan.

En las comunicaciones se nos había dado a entender que habría una intima
conexión entre Montsegur y los viajes que nuestros grupos de contacto
extraterrestre habían hecho anteriormente hacia el Paititi (en las selvas del
Manu, Madre de Dios-Perú) y Egipto. Una señal de esto era que las claves de
esos viajes se repetirían en este. Las claves numéricas de ambos lugares
fueron: 13 y 17 (véanse mis libros: Contacto interdimensional y El umbral
secreto ). El 13 supone «la inmortalidad», y el 17 «la esperanza». También el
13 significa, como decíamos antes, la desintegración (muerte) y el paso a otro
plano. Es la muerte como fase transitoria, como transformación.

En la vida espiritual, una prueba suele ser seguida por la muerte simbólica
(renuncia), porque la purificación era tan dura que la muerte llegaba como
una consecuencia inevitable de quien tomaba la actitud correcta. Finalmente
podríamos relacionar el numero 13 como el maestro (el 1, la unidad) que ha
elegido a sus discípulos (el 12) para afrontar las grandes pruebas (el Cáliz),
por lo que es posible que el discípulo pase la prueba con éxito y entre en una
fase superior.

El 17 significa el final del ciclo, la elevación y la trascendencia: ya no hay


necesidad de instrucción. El discípulo ha aprendido lo que se le tenía
reservado, por eso ha madurado, y ha de ser admitido ahora en una clase
superior. Liberado de los apegos, el debe reunirse con los seres más elevados
en los retiros interiores para formarse para tareas mayores de un mayor nivel.
También este numero coincide con el anterior por cuando supone una forma
de muerte como transformación y ascenso. Estas claves numéricas se
relacionaban con los «revestidos», quienes dentro del catarismo eran aquellos
que habían recibido el «Consolamentum», el único sacramento de su religión.
Este estaba reservado para aquellos que durante mucho tiempo habían sido
constantes en un proceso de purificación y crecimiento espiritual. Estos
postulantes habían llegado a un punto de conocimiento autentico y profundo
que les permitía saber y no solo creer. Era el momento de la toma de
conciencia espiritual, en el que se decía que se había llegado a ser «uno con
el Sol». Y que coincidencia que en nuestro grupo de contacto, llamado la
Misión Rama, los Guías nos hablaron desde un principio de la necesidad de
llegar a ser «Un Sol en la Tierra» (ejemplo de vida) mediante una preparación
integral: física, mental y espiritual…, como el mejor mecanismo para enseñar
a los demás la genuina espiritualidad.

Salimos de Castellón para tomar nuevamente la carretera hacia la frontera, y


en el cielo se habían producido unas formaciones en las nubes muy curiosas.
Por una parte se veía la forma como de un pato salvaje volando en dirección
hacia el este, y también un rostro humano mirando en la misma dirección.
Este hecho nos pareció muy curioso… Quizá debíamos entender los cambios
de estación y la migración de las aves como la señal de que era el momento
de que nos dirigiéramos a donde debíamos estar.

Viajamos muy atentos a los acontecimientos, comentando lo que


observábamos en la ruta, haciendo con ello más agradable e interesante la
travesía. También comentábamos lo que íbamos leyendo, por ejemplo: que
uno de los símbolos más importantes de los cátaros era la estrella de cinco
puntas (símbolo de la magia y de la humanidad del cambio), y que también
podía representarse por un pentágono. ¡Y ahora nosotros éramos cinco!…
Habíamos hablado de esto cuando se nos cruzo delante de la furgoneta un
camión de carga que tenía en la parte trasera y en los costados tres estrellas
de cinco puntas encima del nombre «Monfort», y los números 13 y 17 a uno y
otro lado del nombre. Fue extraordinario, porque Simón de Monfort fue el
caballero cruzado que dirigió, por encargo del papa Inocencio III la cruel
cruzada contra los cátaros (también llamados el pueblo de Albi).

Durante la ruta relacionamos en nuestra conversación el significado del


numero 13 (los trece soberanos Incas) con la caída del imperio Inca y la
prueba que supuso para los grupos el hacer el recorrido por aquella ruta
(paralelo 13°) tan peligrosa y difícil de la selva sudamericana en los viajes
acaecidos en 1989 y 1990. El 17 lo relacionamos con los diecisiete años que
gobierno Akenatón en su ciudad sagrada, «el Horizonte de Atón», en donde
surgió por primera vez el monoteísmo en el mundo, y cuyo símbolo
característico era el circulo del Sol (la unidad en la Luz), con sus rayos
extendidos hacia la Tierra terminando en unas manos dadivosas. También lo
engranamos con los diecisiete años que duro el Grupo Rama como
organización, por cuanto después del segundo viaje a Paititi y ante una
petición previa de los Guías se anuncio su disolución desde un congreso
ufológico en El Vendrell (Tarragona), lo cual terminó de oficializarse en enero
de 1991 durante el encuentro mundial del grupo en Chimbote (Perú). Fue el
desvanecimiento de la estructura visible y formal, para renacer sin formas
rígidas y con una organización mínima, como éramos en un principio: un
grupo de contacto de seres humanos, amigos y comprometidos con la
humanidad y el planeta, pero sobre todo con el cambio en nosotros mismos. Y
como fue desde España desde donde se dio a conocer por primera vez
mundialmente nuestro contacto y la Misión Rama, también debía ser desde
allí desde donde se anunciara su cambio como evolución.

Llegando a Barcelona aparecieron carteles con el aviso de salida de la


carretera n.º 13 y luego, inexplicablemente, se saltaba a la salida n.º 17.
¿Sería acaso que no nos habíamos fijado bien? Pero en lo que sí nos fijamos
fue en decenas de matriculas de los camiones y de los coches con el numero
33. Fue realmente escandaloso y fuera de toda lógica en cuanto a índice de
probabilidades.

El 33, una vez más, aparecía en los viales anunciando la necesidad de trabajar
el equilibrio de fuerzas; la lucha de opuestos; la realización del Plan de la
Misión: ser soles en la Tierra.

Al llegar a Francia el clima cambio y quedó atrás el sol de España. Allí nos
encontramos con una tormenta, que terminó hablándonos…, comunicándonos
cosas, como suelen hacer los elementos y la madre naturaleza cuando tienen
un mensaje que transmitir. Esto es que simplemente actúan. Ciertamente,
todo nos estaba hablando y debíamos abrirnos para saber escuchar.
EL MAESTRE JUAN Y EL SACERDOTE DE SALEM

El Padre Santo dijo a los espíritus caídos: tendréis túnicas de todas clases e
iréis de túnica en túnica hasta que volváis a la justicia y a la verdad, en las
cuales seréis salvados.

JACQUES AUTIER, cátaro del siglo XIII.

La furgoneta en la que viajábamos se deslizaba suavemente sobre el


excelente pavimento de la carretera que une España con Francia. Los
kilómetros se sucedían rápidamente, mientras que, dentro de la furgoneta,
íbamos todos contagiados de la prisa y del entusiasmo por cumplir con la
misión que se nos había encomendado. Además, contábamos con un excelente
conductor como era Carlos Berga, gran amigo y mejor hermano, que se lucía
al volante.

Íbamos comentando con el grupo una serie de datos que iban


desprendiéndose de la lectura de aquel excelente libro de Jean Blum, y que
compulsivamente Maribel García había sentido la necesidad de adquirir en la
librería de unos grandes almacenes de Valencia; datos muy interesantes que
hacían aún más fascinante la aventura que habíamos emprendido, y de entre
los cuales destacaba el hecho de que los cátaros se regían fundamentalmente
por el Evangelio de san Juan, quien los había iniciado en el Amor a través del
cual con esperanza se salvaría el mundo. Este Evangelio, piedra angular del
catarismo, les había aportado una base esotérica muy profunda, una verdad
más allá de las palabras y de lo meramente evidente; una verdad que les
permitiría darse cuenta de que todo habla para quien esta dispuesto a
escuchar y a escucharse; que todo momento y lugar es una buena
oportunidad para conectar con Dios y sus jerarquías. Porque si llegamos a
estar atentos, todo es parte del Plan Cósmico; y hasta la situación o
circunstancia más trivial podría aportarnos más de un mensaje o clave
activadora.

Cuando faltaban diecisiete kilómetros para llegar al puesto fronterizo que


separa los dos estados europeos, vimos sin proponérnoslo, sin estarlo
buscando, un camión con el número 17 muy grande. Casi inmediatamente
también, observamos un cartel diciendo que distaban diecisiete kilómetros
hasta el control. Y Maribel, que ya había oído muchos comentarios acerca del
simbolismo de dicho número, se vio entonces motivada a contarnos que su
hermano había muerto un 17 de diciembre de hacía diecisiete años.

La conversación nos mantuvo entretenidos hasta tal punto que el tiempo nos
pasaba volando y, con la velocidad que llevábamos, pudimos llegar
rápidamente a la frontera, en donde había un grupo de casetas de control a
uno y otro lado de la calzada. En ellas se agolpaban un nutrido grupo de
guardias fronterizos encargados de revisar los documentos de los distintos
vehículos que pasan de un país a otro.
Delante de nosotros se iba deteniendo y revisando a todos y cada uno de los
automóviles pidiéndoles su documentación, pero en cuanto llegamos nosotros
frente a los ocho guardias, algo extraño ocurrió… Todos ellos se dieron la
vuelta y, como si no existiésemos, pasamos directamente sin detenernos, y al
parecer sin que se percataran de nuestra presencia. Obviamente no había
nada de que preocuparse, ya que lo llevábamos todo en regla, pero la verdad
es que el asunto nos pareció muy curioso.

Ya del lado de Francia observamos en el cielo un fenómeno natural


extraordinario: la formación de gigantescas nubes ovales que se dividían para
formar otras más pequeñas. Eran muy definidas y compactas, hasta
podríamos pensar que eran muy sospechosas.

Las claves numéricas seguían apareciendo de una manera escandalosa, sobre


todo, la clave 33, que abundaba por todos lados como queriendo decirnos que
por ningún motivo perdiéramos nuestro equilibrio o que debíamos trabajar
más que nunca en el equilibrio planetario. Dentro de la furgoneta
celebrábamos la cantidad de activadores de la conciencia que se nos estaban
presentando ante los ojos y que nos encomendaban una tarea grupal y otra
personal. Y también conversábamos sobre mi presencia en la salida, porque
conmigo rompían la formación de cuatro que habían conservado hasta el
segundo viaje. Ahora formaban el número cinco que nos traía el recuerdo de
la estrella catara de cinco puntas, símbolo de la magia y la transformación.
Entonces alguien manifestó que yo era como la carta comodín en la baraja o
en la mano, que cumple la función de completar o complementar los grupos
en cada ciudad y en cada país. Como en el ejemplo del dedo gordo de la
mano: es diferente del resto, pero es el quinto que combina bien con los otras
para agarrar las cosas con fuerza.

Al cabo de un rato en la vía apareció al lado derecho un cartel y luego un


monumento compuesto por colosales cabezas emulando a los antiguos
«Hombres Puros». Habíamos llegado a Narbona, y aquella señal decía con
letras muy grandes: «¡Está usted en el camino de los cátaros!». Muy
sugerente, el anuncio, para un grupo de buscadores como nosotros, que
sabíamos que en el camino correcto pero sin saber a ciencia cierta adonde
nos llevaría en cuanto a experiencias o que sería lo que nos permitiría
encontrar.

Habíamos entrado en un territorio donde el conocimiento profundo y la


enseñanza fueron perpetuados a través de cuentos, mitos, leyendas y hasta
mediante poesía con doble sentido, que requiere para ser interpretada —
como todo en esta época— las claves de la Era de Acuario, como son: la
intuición, la imaginación y la inteligencia combinadas. Ciertamente, el
lenguaje de los trovadores supo perpetuar la riqueza de la sabiduría de ese
tiempo, a través de una forma de expresión de gran colorido que despertaba
con facilidad la imaginación popular, y a la vez trasmitía en claves, en un
lenguaje cifrado, los arquetipos aplicables a la realidad humana. Y todo ello se
respiraba en un ambiente preparado para que el que llegase a estar en
sintonía pudiese captarlo.

Estábamos en aquel lugar para recuperar claves perdidas; información


escondida de otro tiempo para este tiempo. Habíamos sido enviados para
establecer un puente con el pasado pero procurando con ello asegurar una
proyección real hacia el momento actual y hacia el futuro.

Mientras avanzábamos por la campiña del sur de Francia, poco a poco el


tiempo se fue malogrando. Fue en ese momento cuando Maribel me dijo:
“¡Sixto, recuerda!”. E inmediatamente, como si aquella frase de mi tan
querida amiga hubiese actuado como un detonador, me vinieron a la mente
los viajes al misterioso y legendario Paititi, donde el ambiente reaccionaba
frente a los visitantes que no se habían preparado o purificado lo suficiente,
probándolos, rechazándolos u obligándolos a retirarse mediante una
tormenta.

Tomamos el desvío que debía llevarnos a la ciudad medieval de Carcasona,


donde treinta torres de origen visigótico unidas por una sólida muralla se
encuentran completando el conjunto con el castillo condal. El lugar, que es
impresionante por su ubicación estratégica en un fértil valle y por su estado
de conservación, presenta un conjunto fortificado defensivo imponente, capaz
de disuadir a cualquiera de querer conquistarlo. Allí, durante la cruzada
contra los cátaros en el siglo XIII, ocurrieron muchos crímenes, entre ellos
una vergonzosa felonía, cuando los ejércitos cruzados que llegaron a las
cercanías de la ciudad ¡a petición del legado papal!, solicitaron parlamentar
en terreno neutral con el joven vizconde Raimundo de Trencavel, señor de la
plaza de Carcasona, de veinticuatro años de edad, y protector de los cátaros
de la zona. La reunión resulta ser una traicionera trampa, porque dejando de
lado todas las reglas de la caballería y del honor, Trencavel fue rodeado,
desarmado y hecho prisionero.

El desconcierto en la población fue tal que la muchedumbre abandono la


fortaleza huyendo despavoridos, y a continuación se produjo el saqueo
respectivo de la ciudad, la segunda en importancia del país de Oc
(Languedoc, en el sur de Francia).

Trencavel fue encerrado en una celda de su propia ciudad en la peor de las


condiciones, y murió tres meses después. Entonces ocupo el vizcondado de
Carcasona Simón de Monfort, jefe militar de la cruzada, quien en nombre del
papa y para dar ejemplo a las ciudades que se mantenían fieles a la herejía,
ordeno cortar los labios, la nariz y sacar los ojos a los defensores de la ciudad
de Bram. En las otras ciudades hizo que se desnudara a la gente y delante de
todos los fue degollando o destripando, ultimando sin distinción alguna a
hombres, mujeres, niños y ancianos por haber cooperado con los cátaros. Y en
cada lugar, a estos últimos los quemó vivos. Una verdadera joyita este señor.
Y eso, ¡en nombre del papa y de Cristo!

Llegar a la ciudad de Carcasona conducidos por nuestro querido amigo Carlos


fue realmente como retroceder en el tiempo, por cuanto el lugar conserva
toda su estructura y el ambiente de aquella época. Además, por su singular
belleza, parecía sacada de un cuento de hadas. Pero a pesar de ello, se sentía
una densa energía en el ambiente, algo así como mucho negativismo o
angustia retenidos. Y con razones obvias. Quisimos darnos entonces un
descanso allí, haciendo unas fotos y recorriendo la ciudad, pero de inmediato
una presencia superior actuó a través de las fuerzas de la naturaleza y
descargo una violenta tormenta que arrecio con gran intensidad, lo cual nos
obligo a seguir nuestra marcha en dirección hacia Mirepoix.

Comentamos entre todos que obviamente algo o alguien nos estaba diciendo a
gritos que aceleráramos el paso, y apuráramos nuestra marcha hacia el
primer lugar donde nuestra intuición nos decía que debíamos llegar: “La
cueva de Belén” donde según las leyendas habría estado el caballero de la
Mesa Redonda Perceval. En ese instante Carlos recordó que en la frontera
había visto otra furgoneta que llevaba una calcomanía con la imagen de
Stonehenge, en Inglaterra, por lo que relaciono que el mensaje encubierto
nos decía que en la conexión del Grial había que unir tres puntos: España
(Valencia), Francia (Montsegur) e Inglaterra (Glastombury).

Seguimos el camino y llegamos por la ruta a un pueblo amurallado en lo alto


de una colina. Aprovechamos allí para que las damas, por motivos de
urgencia, pudieran ir al baño; no era para menos, pues hacía un frío intenso.
En el lugar nos encontramos con una casa de antigüedades llamada “La
Cueva de Merlín”, que se encontraba cerrada. Pero su solo nombre nos
pareció una señal mágica; un dato o una pieza del rompecabezas que
empezábamos a completar; donde el aparente juego de casualidades nos
indicaba que estábamos en un viaje mágico. Nos encontrábamos allí muy
orondos cuando de nuevo la tormenta, que al parecer nos perseguía, se
concentro sobre el lugar y nos echo de aquel sitio.

Curiosamente, a pesar de que era la tercera vez que el grupo hacía el viaje,
estábamos perdidos en la zona. Se había producido una extraña
desorientación en el grupo, como si algo nos estuviese diciendo que en
apariencia hacíamos lo mismo que en los viajes anteriores, pero que ahora las
formas cambiarían, haciéndolo y sintiéndolo distinto. Quizá porque el grupo
gozaba de una mayor madurez colectiva e individual, esto le permitiría
percibir más en profundidad el hecho de que viajes de este tipo —organizados
y promovidos por los Guías Extraterrestres con la colaboración de la
Hermandad Blanca Planetaria—, suelen ir acompañados de experiencias
interdimensionales que comprometen el espacio y el tiempo.

Mientras Carlos conducía, reflexiono en voz alta sobre un sueño que había
tenido días antes y que ya en el camino nos había contado, relativo al número
cinco y a los dedos de la mano. En ese justo momento logro captar como en
una visión que su significado se aclararía exactamente en la cueva adonde nos
dirigíamos. Dijo el entonces, entusiasmadísimo y muy críptico:
«¡Recordarán…!». Con esa solitaria palabra era la segunda vez que se daba
ese mensaje. Primero fue Maribel y ahora era Carlos…

Qué increíble fue descubrir más adelante que estábamos en la ruta de Foix
¡en el distrito 33! ¡En plena clave 33! Y así llegamos al pueblo de Mirepoix,
una atractiva localidad donde se entremezclan casas y edificios medievales
con estructuras más modernas, sin que nada desentone. Un lugar muy bello,
ordenado y limpio, con calles llenas de árboles. Pero nos encontramos con
que el pueblo estaba de fiesta y conque había una carrera ciclista, por lo que
el trafico estaba cortado. Al tratar de pasar por una de las calles principales,
como estas estaban bloqueadas, nos quedamos sin salida. Después de mucho
rodeo y abusando de la paciencia de los lugareños, que estaban concentrados
en su carrera, pudimos salir por la única calle lateral que nos abrieron: ¡la
calle 19 de marzo!, (supuestamente la fecha real del nacimiento de Jesús)…

Después de dar muchos vueltas nos encontramos con un cartel que decía: ¡A
Foix, 13 km! Pero también decía: ¡Montsegur, 31 km! Como las claves
continuaban dándose, y seguíamos muy atentos a ellas, nos encontramos con
que a cuatro kilómetros de Tarascon nos salió al encuentro un automóvil con
la matricula 2006. Y es que al haber siete años de diferencia con el calendario
actual, no estábamos en el año de 1999, según el nacimiento de Cristo, sino
siete años después.

Tras un largo recorrido llegamos a un pintoresco lugar entre elevadas


montañas calcáreas por donde cruza el río Ariége, un estrecho valle por
donde llegamos a la estación de Ussatles-Bains, que conduce a través de un
puente al pueblo de Ornolac, donde hay unas termas que me hicieron
recordar, por el paisaje montañoso, a Aguas Calientes al pie de Machu Picchu
(un río, un puente y termas). A la izquierda, a la altura de la villa Bernadac,
graciosa población de unas pocas y coloridas casas rodeadas de campos de
cultivo, asciende un pequeño sendero montaña arriba hacia la cueva de Belén.

En cuanto entramos en la villa, la mayor parte del grupo se dirigió a buscar a


alguien que pudiera indicarnos el camino de acceso a la cueva, pero la
pequeña aldea parecía deshabitada. Las chicas fueron hasta donde estaba un
agricultor que se hallaba a poca distancia, laborando en su campo, para
preguntarle por la cueva y el sendero de ascenso. Mientras, con Carlos nos
dedicamos a observar la montaña. Y es que desde que uno llega a ese sitio,
hay una fuerza telúrica con la que uno conecta y que lo hace estremecerse.

Observando el lugar, me sorprendió ver en la parte alta del cerro un inmenso


saliente de rocas talladas —supuestamente por la naturaleza—, que formaba
un descomunal dintel triangular, y que me hacía recordar la entrada original
de la Gran Pirámide en Egipto. De inmediato sentí que al pie de ese lugar
tenía que estar la cueva que buscábamos. Se lo manifesté al grupo que volvía,
y mi percepción coincidió con lo que les había manifestado el campesino.

La vegetación en aquella zona es exuberante, sobre todo en la parte baja del


valle, compuesta de verdes y frondosos bosques. La podíamos admirar
mientras íbamos subiendo por un empinado sendero, ancho y bien trabajado,
que nos llevaba más adelante a otro más estrecho y silvestre, donde
rápidamente nos vimos rodeados de pequeños arbustos que se abrían paso
heroicamente entre las piedras sueltas y muchos otros que se colgaban de los
salientes de piedra. De pronto, ante nosotros apareció un muro de piedra
rustico y antiguo, con un portón caído a un lado. Pasamos por él y nos
encontramos con una formación rocosa muy peculiar y de gran tamaño, que
lucía exactamente como el rostro de una calavera. De allí seguimos el ascenso
por el escarpado y polvoriento caminito, hasta una segunda muralla, esta vez
sin puerta alguna, que parece un puesto militar de observación, pero que uno
percibe que debe de tener más bien un sentido simbólico. Y ya a distancia,
llego la confirmación de lo anterior cuando, enclavada en la roca, asomo la
tercera entrada que conducía hacia lo que en una primera impresión parecía
ser una cripta y que no era otra que lo cueva de Belén. ¡Tres puertas y tres
viajes!
En ese momento sentimos que cada uno de nosotros debía recoger una
piedrecita para llevarla hacia el interior del santuario como humilde ofrenda
del peregrino.

Una vez dentro, se baja pisando una gran losa trabajada a manera de escalera
o asiento, y se encuentra con una pequeña sala. Y a un lado de la misma, una
gran roca ligeramente plana a manera de mesa de altar, apoyada sobre tres
piedras más pequeñas. En la pared se puede ver claramente tallado un
pentágono de gran tamaño; mientras que en la parte opuesta, hay otra
entrada o ventana que da al borde del abismo. Del techo de la cueva
continuamente gotean las filtraciones de agua, y en aquella atmósfera
humilde pero sagrada se percibe que allí hay mucho más de lo que se ve.

El lugar era una iglesia primitiva. Un santuario original y perfecto para una
meditación, y así lo sentimos. Este lugar fue llamado en la Edad Media el
“Santo de los Santos” o el lugar más sagrado, por lo que inmediatamente mi
mente se transporto al soberbio pero también “Santo Santuario” de Karnak,
en Egipto. Sobre la mesa de piedra de esta cueva probablemente había estado
entre dos cirios y sobre un mantel blanco el Santo Cáliz, mientras que en la
mesa trapezoidal de piedra de Karnak habían estado contenidas dentro del
“naos” (el Arca de la Alianza egipcia) “Las Tablas Esmeralda de Thot el
Atlante”.

Ese era un buen momento para detenernos y comentar que en la Edad Media
se produce el resurgimiento de una tradición muy antigua, que aunque en
apariencia ha ido variando en la forma, se termina consolidando a través del
ministerio de Jesús: la tradición del Grial. Es, por una parte, el mito de un
objeto santísimo salido de las esferas celestes y que ha conservado sus
poderes relacionados con su origen, y por otra, el símbolo de la síntesis de la
enseñanza mágica; de la alquimia verdadera; del final del camino, la
transmutación o cambio final de cada individuo.

En el Evangelio apócrifo de Nicodemo se relata que José de Arimatea


conservo la copa con la que Jesús compartió la ultima cena (celebración esta
de Pascua realizada el martes por la tarde —miércoles judío—, según el
calendario solar de los esenios de Qumrán). José de Arimatea, miembro del
Sanedrín y seguidor del Maestro en secreto, habría recogido en ella la sangre
de Nuestro Señor después de la crucifixión, uniéndose en el cáliz la sangre
física con la sangre mística del Cristo, y transformando la copa en un talismán
de poder llamado, “el Santo Grial”. Posteriormente el sanedrita se la habría
llevado consigo en una galera romana a las Islas Británicas, donde el imperio
tenía colonias, y se habría establecido en la costa de Cornualles (zona del
suroeste de Inglaterra), lo que hoy conocemos como Glastombury, en
Sommerset. Allí había exportadores de estado con los que el tenía relaciones
comerciales. Por eso, en la actualidad hay en la zona, entre las ruinas de la
primera abadía cristiana, muchas referencias a José de Arimatea. Y muy cerca
del lugar se encuentran una colina en forma de pirámide o dragón acostado,
con una solitaria y enigmática torre sin puertas dedicada a san Miguel, desde
donde se observan muy a la distancia sobre una singular elevación de tierra
las ruinas de la antigua “Camelot”, también conocida como la ciudad de
Arturo (en la actualidad se llama Cadbury y que consiste en una colina
boscosa, rodeada de un foso donde no se hallan más que los cimientos de
antiguas murallas, edificios y una alta torre). Un detalle interesante es que en
los alrededores de Glastombury hay una fuente a la que llaman “El Pozo del
Cáliz”, de la que mana una agua tan cargada de hierro, que todo su cauce
posee un color sangre intenso, y en donde los druidas hacían importantes
rituales.

En otra de las versiones de la leyenda del Grial se nos dice que María
Magdalena habría llevado personalmente la Copa a Provenza, y a partir de
aquí habría surgido una extraña y forzada conexión con la sangre de las casas
reales de Europa.

Este mismo mito del Cáliz Sagrado lo encontramos en el Antiguo Testamento,


cuando Melquisedec, rey de Salem, considerado hijo de Dios por ciertos
Padres de la Iglesia, habría hecho beber a Abraham en una copa, ordenándolo
así sacerdote del Altísimo (Gen 14, 18-20). Dicha condición se va a extender a
la persona de Jesús a lo largo de su vida cuando se cita el siguiente salmo:
«Tú eres sacerdote para siempre a la manera de Melquisedec» (Sal 110, 4).

La tradición celta integra en la Epopeya del Grial al ciclo del rey Arturo. Pero
es el poeta Chrétien de Troyes, en el año 1180, el que primero transmite a
través de su trova «Perceval» la tradición del Grial a la gente común. La
historia gira en torno a un rey enfermo que se encuentra recluido en su
castillo, el mismo que es a la vez el templo del Grial. El Grial está allí, pero no
actúa hasta que uno se de cuenta de su significado (del por qué de la
enfermedad), y que dentro de cada uno reside la semilla potencial de la
propia autocuración y renovación. El Grial aparece cada cierto tiempo como
una visión, hasta que llegue al «Monte Salvaje o Montana de Salvación» (aquí
hay una gran similitud, como decíamos antes, con el nombre «Montsegur»,
que se traduce como Monte Seguro o de Salvación), lugar del castillo del rey,
un caballero puro y loco, capaz de lograr comunicarse y hacerse con el
sagrado objeto, pero solo cuando logra la purificación completa en la
realización espiritual, mediante el amor (compasión) y la comprensión.
Recordemos que en el ciclo artúrico, el rey enferma de dolor, de rencor, de
decepción, de frustración y de desilusión.

En el año de 1210, un trovador alemán llamado Wolfram von Eschembach


habla también del Grial pero como la esmeralda que se cayo de la frente de
Lucifer en el momento de la caída de los Ángeles, recordando las antiguas
tradiciones persas. Precisamente una tradición persa habla de una esmeralda
brillante de un brillo insuperable, que fue abandonada por el demiurgo
(Lucifer) en el momento de su caída. Sus custodios sabían de sus virtudes
mágicas: es el bien supremo del mundo, pues cura, alimenta y protege, otorga
la visión del más allá, por eso la ocultaron.

Por las informaciones recibidas en los contactos extraterrestres, la piedra


verde correspondería más bien a unos cristales piramidales ubicados en
ciertas ciudades intraterrenas y que retienen a los «Ángeles Caídos»
(Guardianes y Vigilantes disidentes) deportados a la Tierra al proceso
planetario nuestro y a nuestro ciclo de encarnaciones.

También según este autor, el castillo del Grial se llama «Monte Salvaje»,
termino que como ya dijimos podría aplicarse a Montsegur. Y hasta Ricardo
Wagner situaba el templo del Grial en un castillo en la vertiente norte de los
Pirineos.

Ya en el interior de la cueva nos colocamos alrededor de la mesa del altar. En


la pared destacaba un inmenso pentágono excavado en la roca, como símbolo
probablemente relacionado con la estrella de cinco puntas, símbolo tan
importante para los cátaros por representar al hombre capaz de ser mago y
alquimista de si mismo. En ese momento, la responsabilidad del trabajo que
había que realizar recayó sobre una mujer: Maribel, que dirigió
brillantemente para empezar una armonización y protección, así como una
petición de permiso para estar allí. Luego nos pidió que hiciéramos juntos la
Gran Invocación, a lo cual siguió una meditación en silencio sobre las frías
rocas de la cueva, y luego, de rodillas, vocalizamos los mantrams conocidos
colocando una mano sobre la mesa del altar.

Durante el trabajo nos invadió un sentimiento de reencuentro, viniendo a


nosotros imágenes de un inmaculado lienzo blanco sobre el altar de piedra,
antorchas en las paredes y un grupo de personas alrededor que hacían lo
mismo que nosotros.

Según la leyenda del Grial, el caballero Perceval fue dos veces al castillo del
Grial. La primera vez no pudo lograr la actitud adecuada, ni siquiera sabía
cuál era esta. Pero fue gracias a su paso en peregrinaje por una ermita, como
descubrió que debía ser capaz de asumir el amor a través de la compasión y
la solidaridad, y esto fue lo que le permitió llegar y estar. Igualmente era este
el caso del grupo de Valencia. Su segundo viaje había sido totalmente
diferente del anterior, pero en este tercero, en el que éramos cinco conmigo,
llegábamos a la cueva o ermita —lugar de los rituales más sagrados y a la vez
los más sencillos—, como preparación previa para el encuentro definitivo con
el significado del Grial. Habíamos subido a la montaña siguiendo intuiciones y
preguntando a los humildes habitantes de la zona, y a través de ellos, a los
guardianes del lugar. En el ascenso habíamos atravesado tres cercas y
habíamos pasado por tres puertas hasta entrar en el interior de aquel recinto.
Y ahora estábamos allí, sin darnos cuenta de que repetíamos el
comportamiento de esa gente setecientos años después. Quizá la memoria
viva guardada en el lugar, o el hecho de habernos compenetrado tanto, nos
hizo realizar intuitivamente lo mismo que ellos hacían, lo cual pudimos
corroborar después. Ellos también oraban de rodillas sobre el suelo con una
mano tocando la mesa del altar. Y tal como habíamos visualizado, había sobre
esta dos grandes velas encendidas.

Estábamos en pleno trabajo, cuando oí clarísimamente en mi cabeza una voz


que me decía que termináramos nuestra labor allí, pues debíamos ir hacía
otra cueva. Si, supuestamente había otra caverna cercana e importante. Pero
el hecho de ir a esa otra, llamada de Lombrives, era algo que nos habíamos
planteado solo como una posibilidad, porque como desconocíamos las
distancias, no pensamos que fuera prioritario o que tuviéramos tiempo
suficiente de ir hasta allí. Hasta que escuche ese mandato, y no pasaron ni
cinco segundos hasta que Maribel dio por terminado el trabajo en el lugar.
Después ella me comento que había oído la misma orden mental.
Nos demoramos un poco en salir de la magia de ese lugar, pero ya apurando
el paso llegamos a la furgoneta y subimos a ella. Debíamos cruzar
nuevamente el río, para llegar a la estación de Ussat. Allí preguntamos y nos
dieron la indicación. Era muy fácil llegar, pues estaba tan cerca que había que
hacer el trayecto a pie. Solo teníamos que cruzar la carretera e ir a la
montaña de enfrente. Una vez llegamos por un sendero que cruza el bosque,
nos encontramos con el puesto de control y venta de tickets, donde el
encargado, un hombre barbudo y grueso de mediana edad, de rostro afable,
nos dijo que lamentablemente ya había terminado el horario de visitas, que
era hasta las cinco de la tarde (¿será esta otra clave?). Ciertamente ya eran
las 17.20 h cuando llegamos. Pero gracias a la insistencia de Maribel y Coral,
el guardián del lugar —que a la vez era el vendedor de tickets, chofer del
trencito de ascenso y guía— se sensibilizo y se decidió —después de pensarlo
detenidamente— a llevarnos a la cueva situada en lo alto de la montaña, pero
solo los dos primeros kilómetros (¡la cueva tiene once kilómetros de galerías y
ríos subterráneos!). Fueron las damas las que abrieron la puerta…

Para llegar a la boca de la caverna de Lombrives hay que subir —como ya


adelantaba—, en un trencito al mismísimo estilo de Disneylandia, que
asciende por un estrecho camino de herradura, rodeado de un paisaje
extraordinario de macizos calcáreos y verdes bosques. El trencito, que más
bien era un tractor disfrazado, termino por detenerse en una parte muy alta, y
desde allí todavía teníamos que caminar otro trecho. Pero, como nada es
casual, tenía su sentido que llegáramos a esa hora para estar solos, porque
ese lugar siempre está lleno de turistas. De haber llegado en otro horario nos
hubiésemos encontrado con gente, lo cual nos hubiera dificultado poder
realizar algún trabajo en el lugar.

La entrada es impresionante por el tamaño. Pero se ven bocas de túnel por


todas partes en la montaña. Al llegar, rápidamente se desciende unos doce
metros hacia una especie de «vestíbulo» que lleva hacia la oscuridad de una
caverna que poco a poco se va estrechando. Nos llamó la atención que del
lado izquierdo hay una hondonada profunda que debió de ser como un primer
lago en otras épocas y que posee en la parte inferior otra entrada o cueva,
que según el guía moría allí mismo, y que no era nada profunda. La
temperatura del ambiente era fría, pero se nos dijo que en otro tiempo más
bien era bastante caliente.

Al entrar siguiendo al guardián y guía del lugar, nos sorprendió ver que él
silbaba a las aves presentes en el interior de la caverna, como si dialogara con
ellas, y estas contestaban con sus cantos revoloteando a su alrededor.
Recordamos entonces una clave que se ha estado repitiendo una y otra vez
desde que fuéramos invitados por los Guías a hacer los viajes de contacto con
la Hermandad Blanca de los Retiros Interiores de la Tierra, y esta es: «el
canto de las aves». Una clave de sonidos que puede reproducirse a través de
las mantralizaciones y que elevaría nuestra frecuencia vibratoria,
permitiéndonos entrar en sintonía con el registro askásico planetario, donde
se halla guardada toda la información sobre nuestra historia planetaria.
Recordemos también que alrededor de nuestro mundo hay un cinturón
magnético llamado «Cinturón de Van Hallen», que como si fuese una cinta de
video o de cassette graba todo lo que decimos, pensamos o hacemos, y que
bajo ciertas condiciones de hipersensibilización, ubicándose en el lugar
correcto, en la actitud correcta, uno podría acceder a esa información. El
«canto de las aves» como un lenguaje que abre y establece conexiones con
otras esferas, es en la tradición de los trovadores un lenguaje oculto.

Una vez se encendió el sistema de luces, observamos en el lado derecho de la


cueva la existencia de una especie de socavones o galerías laterales llenos de
estalactitas y estalagmitas, algunas de las cuales llegaban a formar columnas
con el suelo.

Eran formaciones alucinantes que lo transportaban a uno a otro mundo. Ya


dentro, el espacio se iba reduciendo y estrechando. Fuimos avanzando por
una sala profunda de unos sesenta metros de largo por unos veinte de ancho,
donde el techo compuesto por dos bloques redondeados y divididos por la
mitad, que parecían cortinas que caían, lucían como la vagina de una mujer.
Era como si al entrar allí estuviésemos penetrando en el útero de la madre
Tierra. Luego nos encontramos con un estrechamiento por el que había que
avanzar agachados por un pequeño corredor de no más de metro y medio de
ancho, y un metro veinte de altura, hasta que salimos a una especie de
anfiteatro o catedral. ¡Era increíble, el lugar! Lucía como la matriz dentro del
vientre materno. Un espacio muy alto aunque no tan ancho, pero igualmente
grandioso. Fácilmente podría haber entrado allí una catedral gótica. Y la
resonancia en el ambiente era increíble. El Guía nos confirmo que en ese sitio
se han llegado a organizar grandes conciertos. El suelo estaba todo marcado
por círculos de barro o piedra caliza, producto de los goteos del techo de la
caverna que se incrementan en épocas de lluvia, dando la impresión de ser las
huellas de algún gigante.

En el fondo de aquel salón, seguía el camino por unos escalones tallados en la


roca que ascienden, y que permiten situarse como en un balcón, con una
visión privilegiada de todo ese inmenso espacio. Nos explico entonces el
guardián que la escalera llevaba a una parte alta, donde había un gran lago
subterráneo. En ese momento le pedimos permiso para hacer una meditación
con mantralizaciones en el lugar. Se nos dijo que procediéramos según fuese
nuestro deseo, y así lo hicimos. La sensación fue maravillosa y nos pareció
curioso verificar que con el guía éramos tres mujeres y tres hombres, ¡el 3 y
3!

Al salir de aquel mundo subterráneo estábamos maravillados pero también un


poco desorientados, pues al ser una ruta diferente, el grupo no sabía donde
quedaba nuestro destino siguiente: Montsegur. Ante nuestra consulta, el guía
nos dijo sonriendo que estaba muy cerca, detrás de aquellas montañas; que
nos tomaría poco tiempo el llegar allí…

Una vez fuera de la montaña le dimos al guardián de la caverna y guía


nuestro el simbólico diezmo con todas las monedas que le habían sobrado al
grupo de los tres viajes que se habían hecho a Francia (y que no eran pocas).
Una vez bajamos en el trencito, nos despedimos del guía, que quedo intrigado
por este grupo de turistas inusuales. Se despidió de nosotros diciéndonos:
¡que estaba seguro de que volvería a vernos!…

Siguiendo por el paisaje boscoso y montañoso del Arriége inferior, fuimos


avanzando por ascendentes caminos serpenteantes, atravesando pintorescas
poblaciones, hasta que en medio de la belleza natural surgió como un
descomunal megalito, la montaña de Montsegur. Y sobre la estrecha cresta de
roca, en lo más alto de ese capricho de la naturaleza, como si fuese una
corona, se encuentra allí el castillo de los «Hombres Puros Guardianes del
Grial».

Al llegar enfrente de Montsegur, uno se siente sobrecogido. Es como un


delgado dedo humano mitad verde y mitad blanco, que apunta en dirección
había el cielo, coronado en su cima por un castillo que fue edificado sobre las
ruinas de un ancestral templo solar.

A medida que nos acercábamos fuimos descendiendo siempre por la


carretera, integrándonos con la atmósfera de aquel increíble lugar. Luego
continuamos hasta ubicarnos en sus faldas, teniendo a derecha e izquierda
praderas verdes y montañas boscosas. Al pie de la mágica montaña se
encuentra el Campo de los Quemados, donde fueron quemados vivos los
cátaros defensores del castillo hace setecientos años. En el ambiente se sentía
presente la vibración de los mártires, una vibración de paz y de
trascendencia; pero también se percibía la presencia negativa de aquellos que
por su actitud quedaron atrapados en el lugar: los verdugos encadenados por
su maldad e inconsciencia.

Habíamos llegado al lugar para cumplir con una cita a la que habíamos sido
convocados por los Guías Extraterrestres, para liberar a todas esas almas allí
contenidas y contrarrestar la negatividad en Europa, rescatar también un
conocimiento oculto, abrir una puerta a la espiritualidad y colaborar en
incrementar esa gran red de energía planetaria que debe elevar la frecuencia
vibratoria mundial, con miras a un cambio positivo que ya se está gestando.
El sur de Francia debía ser conectado con todos aquellos lugares del mundo
donde se habían hecho trabajos similares, para ayudar a nuestro mundo en su
proceso de ascenso hacia la cuarta dimensión.

El redimensionamiento planetario ya ha empezado a darse gracias a tantos


grupos, escuelas y filosofías universalistas y humanistas que están trabajando
en la elevación de las con ciencias. Lo que aún no es seguro es que la
humanidad de cada cual se adecue a dichos cambios y asuma la
responsabilidad que le asigna su misión. Por eso debemos trabajar en el
despertar de nuestras propias conciencias dormidas, recordándonos la misión
y combatiendo con la actitud correcta y en su lugar a aquellos fuerzas que
actúan en oposición.

Como al parecer también había llovido por allí horas antes, todo el suelo
estaba embarrado y el ascenso se hacía peligroso, por lo que después de
ascender hasta la mitad, Carlos aconsejó que esperáramos hasta más tarde.
De pronto, las nubes, empujadas por un fuerte viento, hicieron nuevamente su
aparición, y descargaron una densa lluvia sobre la zona. Esperando a que
amainara, aprovechamos entonces para bajar hasta el pueblo de Montsegur,
al pie de la montaña, para tomar alguna infusión caliente y poder así seguir
sobrellevando el ayuno, resistiendo el penetrante frío imperante en la zona.
En la cafetería en la que compartimos la infusión caliente y revitalizadora,
aprovechamos para conversar con el grupo sobre el hecho de que los cátaros
predicaron un verdadero Jesús, que rompía con los esquemas de una religión
opresiva basada en el temor y la obediencia incuestionable, por la del Padre
Amor, la unidad, la libertad y la propia búsqueda espiritual. Y también que
para los cátaros, como dualistas moderados, consideraban que la
manifestación del mal habría sido querida por Dios en su sabiduría, con el fin
de permitir a las criaturas fortalecerse y trasmutarlo en Bien, de la misma
manera que de los textos cátaros se desprende que Satán y Lucifer habrían
sido piezas necesarias en el drama cósmico para darle la dinámica necesaria a
la evolución. Satán habría cavado una especie de agujero de gusano o pliegue
cósmico por el cual llega o cae, y llega a ofrecer cuerpos de barro (materia
densa) a los ángeles caídos que lo han acompañado. Al final lo logra, pero el
mismo no se encarna, aunque dirige la presencia de los otros. Estos
encarnados vendrían a ser los llamados «Iluminati», o verdadero gobierno
secreto mundial; un grupo humano tenebroso y satánico que estaría detrás de
los grandes gobernantes, banqueros y financieros.

Para los cátaros, la reencarnación era un proceso ascendente. Cada nueva


vida reforzaba lo adquirido previamente, y permitía una mayor purificación y
avance. Según el catarismo, Cristo es la entidad divina Aura, a la vez es el
primero de los ángeles, encargado de una misión libre, que lo lleva a
encarnarse en el mayor de los profetas, «Jesús», quien aunque ya no lo
necesitaba, volvió por propia voluntad a tomar cuerpo.

De vuelta a la montaña, aparcamos la furgoneta en el parking que


diariamente suele estar atiborrado de autobuses de turistas. Pero en esa
ocasión estábamos solos; al parecer la lluvia había espantado a todo el
mundo, además, ya eran más o menos las 20.30 cuando empezamos a meditar
con la intención de elevar nuestra vibración y poder entrar en sintonía con los
Guías, y así poder recibir comunicación de ellos con nuevas pautas para el
momento.

Al cabo de más de una hora de estar el grupo meditando dentro de la helada


furgoneta, recibimos los siguientes mensajes:

Comunicación: 20-05-99.

Lugar: Montsegur.

Antena: Maribel.

Si, estamos aquí, los Guías en Misión Sampiac y Antarel, en contacto.

Suban al castillo; a las cinco de la madrugada deben estar allí. Renueven la


antigua iniciación y el antiguo compromiso. Esta noche oren y mediten, y
déjense llevar, pues tal como se ha dado todo en viajes anteriores, así será
para este tercer viaje a Montsegur.

La semilla germinará y se extenderá de nuevo por toda Europa, y en esta


ocasión podrán percibir el fruto.

No teman las asechanzas, pues nada malo sucederá, puesto que les estamos
apoyando y protegiendo. De nuevo la luz brillara en este lugar y ustedes
habrán cumplido su cometido.

Los maestros de la Hermandad Blanca están preparados para apoyar la


apertura a la luz de este lugar. Melquisedec recibirá la ofrenda y, al igual que
en otro tiempo, elevará el sacrificio al cielo y se abrirá la puerta de la luz y la
Cristificación. No duden y déjense llevar recordando aquello que en otro
tiempo ya realizaron y ahora estuvieron dispuestos a concluir, y que en este
tiempo florecerá definitivamente.

Amor en la luz, sus Guías en Misión.

Sigan adelante con los trabajos previstos en otros países como Canadá, Perú,
Chile y Argentina. Llévenlos a cabo dejando que en ustedes todo fluya de
forma natural. Olvídense de todo aquello que la oscuridad pondrá en su
camino para perturbarlos, y centren su atención en la luz que desde lo alto les
guiará, y en la fuerza que la Hermandad Blanca les aportara, puesto que el
momento ha llegado para muchos procesos que desde antiguo estaba previsto
que se culminarán este año.

Ustedes mismos se sorprenderán de los resultados de cada trabajo si se dejen


guiar y aportan lo mejor de sí mismos, siendo simplemente instrumentos para
que todo se cumpla, pero siendo en cada momento más conscientes del
trabajo que realicen. No escuchen las voces que intentan perturbar y sigan
adelante, hermanos en la luz.

En esta noche sientan con fuerza el Amor que el Maestro sintió por el planeta
y esta humanidad. Olvídense de sí mismos, se encuentran ahí para
representar a muchos. Sientan este Amor y proyéctenlo hacia el planeta con
fuerza, irradiando cuando amanezca.

Estamos aquí muy cerca de ustedes. No se dejen impresionar por la oscuridad


de la noche.

ANITAC Y LOS GUÍAS DE MISIÓN

Comunicación: 20-05-99.

Lugar: Montsegur.

Hora: 22.00.

Antena: Coral.

Si, estamos aquí.

Participen de una verdadera comunión a partir de este momento y durante


todo el tiempo, mantengan una perfecta armonía y calma. Unifiquen sus
espíritus en el amor.

Continúen trabajando para elevar la vibración con las vocalizaciones y la


oración en actitud de recogimiento, hasta que reciban la señal del cielo.
Entonces será el momento para emprender la subida que deberán realizar en
silencio, sintiendo la energía del lugar que es especial por cuanto se cumple
un periodo o ciclo y comienza otro mucho mejor de crecimiento y total
entrega.

Tengan presente que las claves dadas a ustedes durante el día de hoy marcan
un momento de muerte y resurrección; de renacimiento en su caminar
espiritual.

Respecto al trabajo que hay que realizar, deberán sentir y dejarse guiar por
su intuición. Deberán plasmar en el lugar lo mejor de sí mismos, entregando
su corazón en el propósito de la apertura y tomando verdadera conciencia de
su labor espiritual y grupal dentro del Plan Cósmico.

Abrirán la puerta a dimensiones superiores a través de la fusión del Cielo y la


Tierra en su interior, y mediante su representación de la humanidad en el
cumplimiento de su rol en el Plan Cósmico. Se producirá un estallido de luz
que hará posible la propagación de las energías de este lugar por toda
Europa. Será el amanecer como anteriormente lo hicieron y lo vivieron, Pero
esta vez el día será completo. Después deberán realizar una cadena de
irradiación Para acelerar procesos y cambios que han de producirse a nivel
planetario.

La Tierra les agradece su labor de voluntad y sacrificio. Confíen y no teman,


pues no están solos, nosotros estamos con ustedes, y la Confederación y los
Maestros, pendientes de sus movimientos.

Con amor,

SAMPIAC

Comunicación: 20-05-99.

Lugar: Montsegur.

Antena: Carlos.

El trabajo ya se efectuó creándose una nueva alianza de luz que, como una
energía activadora, partió desde la Cueva de Belén surcando el interior de la
Tierra, y posteriormente abriéndose paso en el interior de la cueva de
Lombrives con el Zin-uru [mantram o palabra clave para mantralización
enseñada por Thot el Atlante en Egipto para la apertura de puertas
dimensiónales]; una puerta abierta para que se conecten directamente y con
más fuerza al Paititi y Montsegur. Con su acción y con la de muchos otros
fuera de estas cavernas, ya se estableció una nueva Alianza Universal
Galáctica e Interdimensional, instaurando la fuerza y el simbolismo del gran
Cáliz y el Disco Solar, consolidándose así la clave 33. Ahora viene la parte
más difícil, que consiste en concretarlo viviéndolo, y manteniéndose con la
conciencia despierta.
Suban al amanecer, no es necesario pasar allí la noche, porque la noche esta
dentro de cada uno al igual que el día.

LA HERMANDAD BLANCA DE LA ESTRELLA

Comunicación: 20-05-99.

Lugar: Montsegur.

Antena: Sixto.

Sí, somos sus hermanos Guías en Misión y en contacto con ustedes.

Pregunta: ¿Qué pautas pueden darnos ahora que estamos al pie de


Montsegur?

Cuando relean los mensajes entenderán mucho de lo que estaba previsto para
este viaje. Por lo pronto, las energías planetarias están siendo concentradas y
activadas en el lugar porque ha llegado su momento en el ciclo cósmico, y
ustedes están allí para canalizar y saber dirigir todo ese potencial, para que la
gran red planetaria positiva funcione. Bien saben que todo trabajo que
realicen en el lugar, por la conexión previa con Paititi, les permitirá darle una
gran fuerza de cumplimiento a su parte en el Plan Cósmico.

Recuerden que todo se da de acuerdo a la capacidad de focalización de sus


pensamientos creadores de formas y realidades, moldeados ahora por su
crecimiento espiritual.

Su planeta posee siete cuerpos, bien lo saben, y estos también deben ser
despertados y activados en sus centros, para que se produzca la conexión
definitiva y el puente llegue a ser concluido en su tiempo sin tiempo; señal
esta de que se producirá la fusión con el real tiempo del Universo.

Por eso, no menosprecien sus capacidades estimuladas a través de múltiples


encarnaciones. No se puede desaprovechar esta gran oportunidad que
ustedes mismos han ido creando a través de la persistencia.

Dirijan las energías a los Balcanes, por cuanto es un símbolo para la


humanidad de todo lo bueno y de todo lo malo; de la esperanza y del futuro,
así como del pasado y de la intolerancia. Además, habrán de retribuir cuanto
se dio desde allí, y también habrán de neutralizar con el amor en el perdón la
intolerancia y la ignorancia.

La conexión con Paititi permitirá que en esta salida se sellen trabajos


pendientes, por lo que estén atentas las hermanas del grupo, para que vivan y
hagan vivir profundamente el momento y el lugar.

A las 4.30 h de la madrugada, según su horario, será un buen momento,


porque corresponderá a la hora solar 3.30, para que suban a la montaña.
Traten de aplacar, como bien les decía su hermano, la tormenta interior que
aún conservan, para que vean como cambia el ambiente, y las fuerzas
desbocadas de la naturaleza se neutralizan. Todo es un reflejo de si mismos.

Tiene mucha importancia el hecho de que estén conscientes en el lugar,


recordando iniciaciones pasadas, responsabilidades asumidas y algunos
procesos inconclusos. Recuerden el tiempo que están viviendo, que es de
definiciones.

Pregunta: ¿Qué nos aconsejan sobre el Encuentro debe realizarse en junio en


Canadá?

Llegado era el momento que se trabajara a conciencia y con resultados. El


encuentro será un hito significativo en el desarrollo de los grupos de
Norteamérica. Tendrán experiencias directas con nosotros. No sólo estaremos
allí, sino que se crearán las condiciones necesarias para que los que están
preparados puedan cruzar el umbral que se abrirá y que los conectará con los
retiros de Paititi.

Vayan sin mayor expectativa que la de trabajar duramente por el planeta y la


humanidad. El resto vendrá solo y a continuación.

El encuentro estaba dividido en dos partes claramente diferenciadas. Las


circunstancias así mismo lo indican, y como nada ocurre sin que ello este
previsto, sobre todo cuando se trata de la Misión, sepan verlo y realizarlo así.

Trabajen con todos los grupos deseosos de participar, porque les tendremos
reservadas experiencias para los más constantes, que son realmente pocos,
pero los suficientes. En el lugar recibirán más comunicaciones. Nos
manifestaremos de tal manera que sabrán que es una nueva etapa la que se
abre ante sus ojos.

Procuren mantener ahora más que nunca su preparación. Con amor,

SAMPIAC

Sí, Oxalc.

Amados hermanos, la conexión con la Hermandad Blanca se está


consiguiendo poco a poco. No consiste solo en ir a lugares y hacer sacrificios,
o estar sujetos a privaciones. Es algo más, pues supone realmente estar en
sintonía, por lo que, si están dispuestos, déjense guiar, ya sea por los
mensajes como por sus intuiciones, que no les engañan. Y ahora menos que
nunca. No teman pedir nuestras corroboraciones a los mensajes, por cuanto
estos se darán.

No descuiden los pasos previos a las pautas dadas anteriormente, porque con
ello estancan el proceso e impiden que se den otros tantas cosas, como por
ejemplo unir las piezas de su rompecabezas.

Dense cuenta de cuanto se mueve a su alrededor, y verán entonces que no


faltarán las confirmaciones, sobre todo porque en este momento su aventura
es fundamentalmente una experiencia de crecimiento espiritual.
Estaremos apoyándoles, y siempre será así. Con amor,

OXALC

Ciertamente, estamos supervisando las consecuencias de su madurez y los


pasos que dan en cumplimiento de su parte en la gran tarea. Reflexionen
sobre el hecho de que no hay pequeñas o grandes partes, simplemente
misiones, labores y tareas que llevarán al cumplimiento del Plan Mayor. Y no
se está lejos de que eso ocurra.

Hoy todo se ha acercado y ustedes son los artífices de ello. No descuiden lo


que los fortalece e impide que sean víctimas de la asechanza.

Estamos con ustedes,

MAESTRO JOAQUIN

Después de haber recibido las comunicaciones y de haberlas leído y


comentado, conversamos un poco, tomándonos un rato de descanso. Afuera
de la furgoneta caía una intensa lluvia y hacía un viento muy violento. El lugar
estaba envuelto en una espesa niebla, y el sitio, saturado de nubes bajas,
sumiéndolo todo en una impenetrable oscuridad… Cuando alguien por motivo
del agudo frío tenía que salir afuera al baño publico, o sea, al aire libre, tenía
que enfrentarse a la lluvia y el viento, y a pesar de que llevábamos linterna,
era difícil competir con la negrura del ambiente. Poco a poco se fue formando
una zona ligeramente más luminosa y despejada en un radio de unos treinta
metros alrededor de nosotros, aunque el resto seguía cubierto por una lluvia
que no paraba. Cada vez que salíamos de la furgoneta percibíamos una
desagradable sensación de asechanza. Pero nada de ello nos desanimó y
seguimos trabajando intensamente en las meditaciones. Ya de madrugada, me
encontraba sentado en el asiento delantero del copiloto, al lado de Carlos,
quien se había llevado el esfuerzo mayor conduciendo durante todo el día, y
sin embargo, allí estaba él, meditando como todos, dándonos ejemplo de
esfuerzo y coraje. De pronto, Maribel, que se hallaba sentada en la parte
trasera, junto con Coral y María, interrumpió su meditación porque la
intuición la motivó a abrir los ojos. Lanzó entonces un sentido grito que nos
hizo reaccionar violentamente a todos; de inmediato encendimos las linternas
y le preguntamos la razón del mismo. Según lo que nos contó, había visto
delante del parabrisas frontal, del lado de donde yo me encontraba, una
esfera anaranjada un poco más grande que una pelota de fútbol que se acercó
muchísimo, y que nos hizo recordar las Caneplas (monitores o cámaras de
televisión controladas a distancia desde las naves por los extraterrestres).
Con el alboroto que se formó, se marcho de inmediato, y al rato pudimos
observar una esfera similar pero de color blanco, revoloteando sobre unos
carteles cercanos, distantes unos veinte metros de la furgoneta.

A pesar de todas las claves recibidas durante el viaje, el grupo comenzó a


verse atacado por el pesimismo, el mal humor y las dudas. Afuera, la lluvia no
amainaba. La oscuridad reinante, el cansancio, la incomodidad y el frío
intenso casi glacial, solo sobrellevado cuando cada tanto Carlos arrancaba el
motor y con él durante breves minutos funcionaba la calefacción, conspiraban
contra todos, llegando a producirse algunos pequeños roces entre las
hermanas ubicadas en la parte posterior. Felizmente, a pesar de que fue una
larga noche, todo se pudo superar y a las 4 de la madrugada aquella lluvia
diluvial termino mágicamente, aunque el viento seguía arreciando con
violencia inusitada. Y a las 4.30 abandonamos la furgoneta para dar
cumplimiento a la comunicación. El viento se detuvo bruscamente y se
produjo un vació parecido al del ojo de una tormenta o huracán… De repente
quedamos como aislados o protegidos de la inclemencia del tiempo. El viento
que había continuado hasta ese momento lo había secado todo, por lo cual no
se nos hacía tan peligrosa la subida al castillo. Pero antes que nada pedimos
autorización a los Guardianes Espirituales del lugar, para que nos permitieran
ascender y entrar en el recinto sagrado, y muy especialmente solicitamos la
protección y la guía del Maestre Juan, el discípulo amado y máxima autoridad
de la Hermandad Blanca en la Tierra, quien por las palabras mismas de Jesús
no solo no habría sufrido una muerte violenta como los demás apóstoles, sino
que se habría mantenido encarnando en nuestro mundo, y él habría sido el
inspirador de toda aquella maravillosa gente que lleno de luz la Edad Media.

Tan pronto como empezamos a subir por el peligroso sendero, se produjo un


avistamiento procedente del lado derecho. Era una luz intensa sin ruido
alguno que se abrió paso entre la niebla, hizo un movimiento frontal y luego
giro hacia la derecha, para desaparecer a los pocos instantes. Al amanecer de
ese día pudimos contemplar que en esa dirección no había carreteras, sino
solo montañas muy altas.

El ascenso fue suave, a pesar de la multitud de escalones tallados en la roca


que hay que superar para alcanzar el castillo. En la cima había una extraña
luminosidad azul brillante, mientras que alrededor de nosotros todo era
niebla y oscuridad. Era como estar en una islita en medio de un mar agitado
de brumas. Al llegar al castillo uno se impresiona por la poderosa muralla y la
puerta monumental que se encuentra varios metros por encima del suelo, y a
la que solo se puede acceder por una escalera de madera colocada a
propósito. En cuanto llegamos allí arrecio el viento, más no volvió a llover. El
sonido que hacía el aire al golpear contra la montaña era estremecedor, como
un profundo lamento… Subimos por la escalera y entramos por la puerta, y de
inmediato nos encontramos en el patio interior, un lugar pequeño y muy
estrecho para las casi quinientas personas que allí se resguardaron hace
tantos siglos. En los muros, que se van abriendo como un embudo, hay tres
escaleras que conectan con el patio, dos de ellas muy empinadas y peligrosas.
A la izquierda apareció la única torre existente, la torre del homenaje o
residencia señorial y capilla. Todo el conjunto visto desde el aire posee la
forma de un cáliz orientado según las observaciones y alineamientos solares,
dependiendo de los días del año.

Precisamente nuestro ascenso coincidió con que era el día 21 de mayo; los
Guías habían insistido en que estuviésemos en ese lugar, en esa fecha, y esta
se correspondía con el alineamiento solar de Géminis, que simboliza la lucha
de opuestos. Los cátaros eran tan conscientes de los ciclos planetarios que,
cuando se rindió la fortaleza, ellos insistieron en permanecer en el lugar hasta
el día siguiente del equinoccio de primavera, el 16 de marzo de 1244.
Estábamos en un lugar sagrado que favorece la lucha de opuestos, el Bien y el
Mal; un lugar donde los polos opuestos se atraen y en donde uno puede
trabajar y canalizar esas energías conectando el cielo y la Tierra.

En la pared que teníamos delante se podía observar otra puerta, aunque más
pequeña, que al trasponerla lleva a una área despejada, que del lado derecho
se prolonga varios metros antes de caer abruptamente hacia el abismo, y en
donde por los cimientos se puede ver que había muchas pequeñas casas o
depósitos. También hay algunos árboles y algunos rocas grandes muy mágicas
y llenas de vida. Del lado izquierdo la meseta sobre la que se asienta el
castillo es más reducida, pero en los salientes se aprecian igualmente
cimientos de habitaciones. En ese momento, el viento nuevamente se volvió
tormentoso, como queriéndonos arrancar de la cornisa de piedra para
lanzarnos al abismo que caía muchos cientos de metros hacia abajo. Teníamos
que pasar por un minúsculo saliente y así llegar detrás del castillo hacia la
torre del homenaje. No fue fácil bordear el lugar desafiando el vértigo, pues
aunque no se veía el fondo del abismo, la niebla igualmente daba la sensación
de vacío.

Logramos subir por una escalera de madera hasta la torre, cuyos techos han
desaparecido por acción misma de las bombardas y cañonazos de los que
sitiaron y tomaron la fortaleza en el año 1244, tras casi un año de asedio. El
lugar es pequeño, lleno de arcos de piedra, y a pesar de que esta muy
destruido, todavía conserva los muros trabajados con muchas ventanas.
También se veía una puerta que conducía hacia una torre circular, con su
estropeada escalera de piedra, y hasta se podían apreciar en la torre las
estructuras de los dos pisos que alguna vez tuvo, así como unas diminutas
habitaciones.

En ese lugar formamos un circulo entre todos, y nuevamente Maribel fue la


elegida para dirigir nuestros trabajos. En cuanto nos dispusimos a trabajar
empezó a aclararse el ambiente, y el lugar se ilumino, a pesar de que por la
hora aún no correspondía. Este hecho nos sorprendió a todos, pero
continuamos con nuestra protección y armonización haciendo la Gran
Invocación y rezando el Padrenuestro. De pronto el viento cesó, y se creó un
ambiente mágico y positivo, como si estuviésemos dentro de un lugar
totalmente cerrado y techado.

Para apoyar a Maribel les pedí a todos que recordaran que en su viaje
anterior habían colocado una proyección del Gran Disco Solar de Paititi en el
centro del patio del castillo, y que lo visualizaran ahora en el interior del
circulo formado por todos en la torre. Todos llegamos a visualizarlo y lo
sentimos plenamente, haciéndolo girar a gran velocidad delante de nosotros y
a la vez en nuestra mente. Con ello se formo una puerta dimensional que se
abría ante nosotros, percibiendo que todo el castillo era el Gran Cáliz Sagrado
en donde este disco, como si fuese una gran hostia, había sido depositado
para ser consagrado. Era tal la atmósfera de misticismo que se alcanzó, que
una intensa luz azul brillante nos envolvió, al igual que un potente aroma a
flores. Aprovechamos entonces para hacer una cadena por la Paz del Mundo;
por los Balcanes; por Colombia; por África; por el Líbano y por Israel. Pedí
luego a todos que giraran mirando hacia afuera del círculo y que hincáramos
una rodilla en Tierra; porque presentía con toda claridad la presencia de dos
entidades maravillosas, y hasta me atreví a invocarlas: «El Maestro Jesús y el
sacerdote de Salem, Melquisedec» Ya en ese momento las experiencias se
sucedían rápidamente: desde sentir que se nos imponían las manos hasta ser
parte de una “Comunión Cósmica”… Estábamos allí para interceder por un
perdón cósmico para todas aquellas almas intolerantes que quedaron
atrapadas en el lugar, producto de su maldad, y que fueron verdugos de seres
puros y espirituales. Los que estaban cautivos allí no eran los asesinados, sino
los asesinos, tanto los actores intelectuales como los materiales.
Paradójicamente, quienes les procuraron el mal ayudaron a los cátaros a
alcanzar la corona de la vida. También estábamos allí para que esas entidades
encontraran a través de nuestra humilde intercesión, el camino hacia la luz,
para ayudarlos a darse cuenta de su error. Para ello, y a pesar de lo cruel y
terrible que fue, repasamos mentalmente los sucesos acaecidos más de
setecientos años atrás, conectándonos con el registro askásico del lugar,
reviviendo con claridad toda la terrible tragedia del asedio y la rendición, con
la posterior ejecución de los cátaros, que murieron quemados al pie de la
montaña. También veíamos con el paso de los años la amargura y los miedos
que envolvían a los atacantes. Pero lo percibíamos no como quien ve una
película, sino como si nosotros mismos, transportados de alguna manera por
un portal en el espacio y el tiempo, fuéramos testigos y actores a la vez. A
pesar de lo duro que era experimentar aquellos momentos, estaban a nuestro
lado aquellas dos magnificas y luminosas presencias que nos daban ánimos y
fuerza para continuar. También pudimos ver el camino, y la ruta seguida por
aquellas cuatro personas que se descolgaron de la montaña llevando con ellos
el Santo Cáliz, y se refugiaron en las cavernas cercanas, en donde habíamos
estado conectando con el mundo intraterrestre. Veíamos pasar a nuestro lado
a la gente más variopinta de aquella época, con sus cascos y armaduras, con
sus atavíos clericales y hasta otros con trajes nobles, todos ellos cargados de
confusión y de espanto por lo que habían hecho, y que finalmente se daban
cuenta tomando conciencia, pidiendo perdón y marchándose avergonzados a
gran velocidad por una especie de vorágine o vórtice de luz que terminaba
por absorberlos.

Relatar todos los detalles es imposible, por cuanto hay cosas que se viven y
para las cuales no hay palabras. Pero lo que sí es un hecho es que en ese
instante se volcaron sobre nosotros un sinfín de energías extraordinarias, así
como una impresionante fuerza de amor que jamás hubiésemos imaginado
que existiera, además de un gran caudal de información, y que estoy seguro
que irá aflorando en la medida en que nos sigamos purificando y terminemos
de aprender a ser instrumentos de esa sabiduría superior con nuestro propio
ejemplo, no solo con palabras.

Obviamente los cátaros tenían gran parte de la información correcta; así


como de la actitud adecuada y por ello fueron exterminados. Pero ahora,
siglos después, la gente de los grupos de contacto tendrá que actuar como los
nuevos esenios y los nuevos cátaros, purificándose y procurando irradiar el
mensaje con el ejemplo, de tal manera que la semilla esta vez si terminará de
germinar.

Al culminar el trabajo en lo alto de aquella cima, en donde la mente creadora


y entrenada es capaz de establecer las más profundas e increíbles conexiones,
la niebla se fue disipando poco a poco. Sin embargo, seguíamos envueltos por
aquella atmósfera azul brillante, como si algo estuviese proyectándola sobre
nosotros (¿quizás una nave?). El viento había cesado hacía ya rato, por lo que
al descender de la torre aprovechamos para dirigirnos hacia el otro extremo
del castillo, que era el ángulo en donde se producía el alineamiento de
Géminis aquel 21 de mayo. Allí disfrutamos de un lugar que parecía irreal por
estar envuelto en la bruma; lo apreciamos insólito y bello, como un «Jardín
Secreto» de flores, árboles vivos y extrañas formaciones de rocas. Había
suficiente luz en el ambiente, por lo que me decidí a sacar mi cámara
fotográfica Nikkon, y vi que estaba en condiciones de hacer fotografías, por
cuanto había suficiente luz y sensibilidad en el rollo; además, tenía flash y, sin
embargo, no salió ninguna foto de las que hicimos en ese lugar y en ese
momento. Era como si aquel instante hubiese pertenecido a otra dimensión y
vibración.

Estuvimos mucho rato allí, no podría precisar cuánto. Luego descendimos del
castillo, sintiendo que ya éramos otras personas. El ambiente mismo había
cambiado. Ahora el valle era el que estaba despejado de brumas, como
indicándonos que en ese momento era ese el lugar de nuestra acción.
Sentíamos que gran parte de nosotros había muerto durante aquella terrible
noche oscura, pero a la vez gran parte de nuestro real ser había despertado o
resucitado como para no volver a dormirse, en ese terrible sueño que compite
con la muerte misma del alma.

Con cada paso del descenso venían a nuestra mente variadas imágenes, pero
todas ellas muy claras de nuevos trabajos: Vilcashuamán en Ayacucho, Perú;
Toledo, en España; la ruta artúrica en Inglaterra, donde se seguiría
conectando con el Grial hasta culminar la labor y lograr el objetivo final,
neutralizar la acción del gobierno negativo y la resurrección definitiva de la
conciencia humana en este tercer día de la humanidad, o comúnmente
llamado Tercer Milenio.

Este viaje a Europa fue más que especial para mí, porque fue un viaje en el
tiempo hacia otras esferas y dimensiones. Sabía que estaba allí en el
presente, pero a la vez sentía y veía intensamente el pasado. Podía presentir
que en el lugar se estaba gestando algo maravilloso y difícilmente
comprensible para nosotros; algo que para ese grupo al que tuve la fortuna y
el privilegio de acompañar era un compromiso asumido hacía más de
setecientos años…

En esos días de regreso a España me estuvieron entrevistando en algunas


cadenas de televisión, dando conferencias y firmando libros en Valencia en la
librería París-Valencia. Y ya en Madrid, asistí a la Feria del Libro, donde
esperaba encontrar gran cantidad de mis obras (que resumen la evolución de
la experiencia del contacto durante más de dos décadas), pero
lamentablemente no fue así, a causa de la ineficacia de la distribuidora local,
que a pesar de haber sido avisada con anticipación no previeron el interés de
la gente. Así, gran cantidad de personas que fueron con la esperanza de que
les dedicara mis libros, se quedaron con las ganas por la escasez de
ejemplares. Sin embargo, el evento me permitió la oportunidad de
reencontrarme con mucha gente maravillosa que a lo largo de los años me
enseñó tanto, y que habiendo participado de los grupos en la actualidad sigue
en el camino, con más madurez y conciencia, lo cual es un gran estímulo para
uno. Entre los reencuentros tuvo lugar uno muy grato con el periodista e
investigador y hoy famoso escritor Juan José Benítez en el stand donde estaba
firmando su sexto Caballo de Troya , novela de gran éxito editorial. Juanjo no
sólo se alegró de verme, lo mismo que me pasó a mí con su persona, a la que
admiro y aprecio, sino que gentilmente me regaló su obra delante de todos y
me la dedico con las siguientes palabras:

A Sixto:

Veinticinco años después, pero como si fuera ayer.

J. J. BENÍTEZ

Hago hincapié en esto por el hecho de que en algunas revistas españolas han
venido apareciendo en los últimos años ciertos artículos en los que, habiendo
entrevistado a Benítez, se suele poner en su boca supuestos comentarios
como el de que estaría arrepentido de haber escrito sus primeras obras y
bestsellers : Ovnis, SOS a la humanidad, y Cien mil kilómetros tras los ovnis ,
donde narra la experiencia de haber sido testigo de la autenticidad de nuestro
contacto. Nada más descabellado, por cuanto fueron los libros que lo hicieron
famoso y sobre los que se apoyó toda su investigación. Pero así es la vida y la
popularidad, y la fama tiene que lidiar con la envidia y la maledicencia. Nunca
falta gente malintencionada que trata de enfrentar a quienes estamos en
estos temas. Si no, recordemos que en otra de sus obras, La rebelión de
Lucifer , J. J. Benítez recuerda con cariño y respeto dicho contacto en la
página 55, y además anticipa que lo inspiró para sus futuras y más exitosas
obras. Dice textualmente:

Como recordarás, hace ahora diez años, en un conocido contacto, recibido en


Tierras del Perú por parte de unos seres del espacio a los que tú has llamado
siempre (y muy acertadamente) «los hermanos mayores» alguien pregunto a
estos “Guías” que quién era realmente Jesús de Nazareth. ¿Lo recuerdas?

Gloria asintió.

—¿Y puedes memorizar la respuesta de tales «Guías»? —pregunto de nuevo


Sinuhé.

—Ya lo creo. «Ustedes —decía el contacto— no están preparados aún para


saber quién era Jesús».

Regrese a Lima y solo pude estar unas pocas horas en casa, pues tenía que
continuar mi viaje hacia Canadá y México, porque así es la vida del misionero
y de quienes están a su alrededor: lo enseña a valorar intensamente cada
instante. Al final es una vida de calidad, más que de cantidad.

Cuántos hay que viviendo en su casa nunca se encuentran presentes. Por las
mañanas se van tan temprano a trabajar que nadie los ve, y llegan tan tarde
por la noche que nadie los siente ni se percata de su presencia; y los fines de
semana se van con los amigos al club, de tal manera que no comparten nada
con su familia. Yo, cuando llego, estoy, y a los pocos minutos la sensación
para todos es como si nunca me hubiese ido… Y aún cada despedida es con
lágrimas; aunque parezca que uno se acostumbra, no es así cuando hay
verdadero amor en casa.
DE UNA RESERVA INDÍGENA A LA MITAD DEL MUNDO

La Ley fue sembrada en el jardín de la Hermandad para iluminar el corazón


del hombre y hacer claros ante él todos los caminos de verdadera rectitud…

Manual de Disciplina de Qumrán.

En el mes de junio me dirigí a Canadá para participar en un encuentro de


grupos, el mismo que había sido anunciado por los Guías en comunicaciones
en 1998 y precisado en mensajes en 1999. Para esa reunión estaba
confirmada la presencia de mucha gente de los grupos activos de diversas
partes de Estados Unidos y de Canadá, por lo que sería un hermoso
reencuentro con todos ellos. Además, serviría para ponernos al día entre
todos, intercambiando nuestras experiencias y los mensajes, procurando en
este conjunto mayor crear las condiciones idóneas para un contacto directo
con los Hermanos Mayores extraterrestres. Obviamente esto no podría
ocurrir si previamente no conseguíamos esforzarnos todos en afinar y lograr
una buena armonía, así como una sintonía entre nosotros.

Los Guías no se manifestarían para convencernos de su presencia, ya que


estamos más que seguros de ella —son demasiados años y muchas
corroboraciones directas e indirectas—, sino que lo harían para recordarnos
que «nuestra presencia» es la importante, una presencia que significa una
participación activa en la elevación vibracional planetaria, un compromiso
adquirido de antes, y que ahora más que nunca tiene sentido.

Entre los mensajes recibidos con respecto al encuentro de Canadá estaba este
recibido en Lima el 25 de febrero de 1999, que decía:

… Que sea la reunión entre los primeros diez días de junio de este año. Así
tendrán mayor tranquilidad e intimidad para sus practicas, y también ello
facilitará que nos podamos manifestar.

Con amor,

SAMPIAC

En otro mensaje recibido en Francia el 20 de mayo de 1999 decían los Guías:

Llegado era el momento de que se trabajara a conciencia y con resultados. El


encuentro será un hito significativo en el desarrollo de los grupos de
Norteamérica. Tendrán experiencias directas con nosotros. No sólo estaremos
allí, sino que se crearán las condiciones necesarias para que los que están
preparados puedan cruzar el umbral que se abrirá y que los conectará con los
retiros de Paititi.

Vayan sin mayor expectativa que la de trabajar duramente por el planeta y la


humanidad. El resto vendrá solo y a continuación.

Con amor,

SAMPIAC

Regina Cereijo, gran amiga nuestra y natural de Galicia, residente en


Montreal, fue la que organizo todo lo concerniente al encuentro por la parte
canadiense, mientras que la parte estadounidense corrió a cargo de los
siempre comprometidos Celia y Carlos Cáceres de New Jersey, una adorable
pareja de mendocinos de Argentina. La presencia de ellos aseguró el éxito de
semejante megaevento internacional, que iba a llevarse a cabo entre el
viernes 4 y domingo 6 de junio. El lugar seleccionado para la reunión era una
distante reserva indígena llamada «Kamika», un lugar maravilloso rodeado de
lagos y pequeñas colinas con una exuberante vegetación boscosa, y en donde
hacía sólo un mes y medio que se había venido observando la presencia de
ovnis.

Fueron muchas horas en coche las que separaban Montreal del campo
escogido, pero felizmente llevaderas por cuanto transitamos por una
excelente carretera de cuatro carriles que discurre paralela a pequeñas
montañas y lagos, entre los que destacan muchas casas que parecen como de
muñecas, por lo bellas y pintorescas.

La excelente organización, que facilitó mapas y señales a los inscritos con un


año de anticipación, permitió que la gente fuese llegando en sus vehículos
hasta el mismo lugar del encuentro, donde unas cómodas y calentitas
cabañas, alquiladas para el evento, nos esperaban. Para muchos, el viaje
significó un gran esfuerzo y una oportunidad única de demostrar la confianza
y el amor que le tienen a la Misión. Al llegar, todo era alegría. A pesar del
cansancio, la gente bajaba de sus automóviles con una sonrisa de oreja a
oreja, deseosa de abrazar a los demás, tanto a conocidos como a
desconocidos. Cada uno representaba a decenas de personas que, por razones
de trabajo, familiares u otras no habían podido asistir físicamente, pero
espiritualmente se les sentía allí, y sabían que estaban bien representados a
través de los asistentes. Por eso, el reencuentro de los grupos después de
meses o años hacía olvidar a todos el trajín y el agotamiento. Entre los
presentes había incluso gente que había llegado en avión desde Miami.

En cuanto llegué al lugar, me quedé impresionado. A pesar de que sabía que


era la primera vez que llegaba físicamente a ese sitio, yo ya lo conocía…
Quizá lo había visto en mis sueños. Y hasta sabía que una nave iba a aparecer
antes de que el encuentro terminara enfrente de las cabañas y el lago,
dibujando en el cielo una «Z» a baja altura. Yo lo sabía, aunque no tenía claro
por qué lo sabía. En un determinado momento de la salida, una señora de los
grupos de Nueva York, que no sabía nada de mi presentimiento o visión, me
confesó que ella presentía que una nave iba a aparecer haciendo exactamente
el mismo movimiento y en el mismo lugar. Eso me estremeció, por cuanto
percibí que aquello era algún tipo de mensaje.

El primer día, cuando ya empezaba a oscurecer, mientras seguían llegando


las personas, se dio el primer avistamiento, observado por Regina Cereijo y
una parte de la gente de Estados Unidos, lo cual entusiasmó a todos. Se
aprovechó entonces el tiempo para compartir todo lo ultimo del contacto a
nivel mundial y se hicieron muchas meditaciones y practicas, así como
charlas, a pesar del intenso frío que hacía. Algunos de los trabajos se llegaron
a hacer dentro de las cabañas, a causa de esas mismas condiciones extremas
climatológicas propias del Canadá.

El sábado 5, la gente ya estaba aclimatada, por lo que muy temprano por la


mañana ya todos nos habíamos reunido en una pequeña playita bañada por
las tranquilas aguas del lago, y disciplinadamente estábamos trabajando.
Durante el día se mantuvo un estricto ayuno y nos preparamos para recibir
comunicación por la tarde. El mensaje recibido decía:

Comunicación: 5-6-99.

Lugar: Reserva Indígena Kamika (Canadá).

Antena: Sixto Paz.

Si, somos sus hermanos Guías en Misión.

Pregunta: ¿Qué pautas nos pueden dar para esta salida?

Con relación a esta salida les decimos que deben mantenerse trabajando
durante esta noche, porque se darán las condiciones idóneas para
experiencias a múltiples niveles. Pero les recordamos que el trabajo y los
logros son personales. El hecho de estar presente no garantiza nada a nadie,
porque la idea no es solamente estar, sino ser. Los resultados de una salida
como esta van en relación a su capacidad de reaccionar con mayores
compromisos y saber captar la enseñanza para su inmediata aplicación.

Pregunta: ¿Qué podemos esperar de esta salida?

Dense cuenta de que si han llegado a esta salida poniendo lo mejor de sí


mismas en su preparación y actitud espiritual, las consecuencias serán
evidentes a través de la mayor receptividad y conciencia, lo cual les permitirá
aprovechar al máximo lo que se les está queriendo aportar.

Mañana, unos pocos se dispondrán para procurar una conexión más profunda,
diríamos interdimensional. Por tanto, procuren trabajar en grupos de siete,
pero delegando a uno de cada grupo como responsable del trabajo.

Con amor,

SAMPIAC

La madrugada del domingo, el tiempo había cambiado increíblemente y ahora


el ambiente estaba templado y muy agradable. Nos dispusimos entonces a dar
cumplimiento al mensaje, por lo que las casi setenta personas que éramos nos
internamos en el bosque, a unos doscientos metros de las cabañas, por un
sendero abandonado. Se formaron a continuación siete grupos que se
distribuyeron por la floresta, y se internaron en la profundidad de la espesura,
alejándose entre sí los grupos como unos veinte metros o más. Luego se
procedió a la armonización y protección del lugar, con un trabajo de
positivización y recepción de energías.

En ese primer trabajo, muchos de los asistentes tuvieron la experiencia de


sentir, escuchar y ver a nuestros hermanos mayores en proyecciones de tipo
holográfico. La energía liberada fue tan intensa que algunos hermanos se
marearon.

Había un grupo que se encontraba en el extremo más remoto del bosque —al
que llamamos primer grupo—, y allí fue donde se concentro la mayor cantidad
de energía aportada por todos, incluso por los Guías; después, este terminó
siendo el sitio de las experiencias. Allí, las siete personas que formaban un
circulo pudieron ver con toda nitidez a los Guías caminando alrededor de
ellos, e incluso deteniéndose delante de todos y mantralizando junto con ellos.
Asimismo se formo sobre ese grupo un cono de luz violeta muy fuerte que se
mantuvo todo el tiempo y que podía verse a simple vista. Y como señal de
madurez, ninguno de ellos sintió temor, sino una total confianza.

Como confirmación de todo esto, durante la mantralización colectiva se vio


sobrevolando el bosque, de manera silenciosa y por espacio de poco menos de
un minuto, una nave muy grande y brillante, con la forma de una lenteja. Se la
pudo ver nítidamente pasando por encima de las copas de los árboles. Su
desplazamiento fue siguiendo la dirección de los siete grupos, y terminó por
ubicarse sobre el primero y más austral, lanzando fogonazos. Además, todos
vimos la formación física de un xendra o puerta dimensional, en forma de
media luna dorada ligeramente detrás del primer grupo.

Concluido el primer trabajo de apertura colectiva de la puerta dimensional,


regresamos todos a la orilla del lago en un lento y casi místico andar
silencioso bajo la luz de las estrellas. La gente fue entrando en la cabaña a la
espera de nuevas instrucciones. Se les pidió entonces a todos que apoyaran el
trabajo con meditaciones, y así lo hicieron.

Las comunicaciones indicaban que solo unos pocos regresarían al lugar


señalado para cruzar el «Umbral» que habría sido creado por el esfuerzo de
todos y que conectaría con el retiro de Paititi. Se estaría dando con ello el
gran paso para la consecución de los planes de la Misión, abriendo una puerta
en el espacio-tiempo de tercera dimensión y conectando a voluntad a través
de la cuarta dimensión con aquel centro de la Hermandad Blanca Planetaria.
Todo, naturalmente, bajo la supervisión de los Guías y de la propia
Hermandad Blanca.

Siete personas fueron convocadas primero a participar del xendra y volver al


bosque. Entre ellos, Regina y Celia. Todos ellos tuvieron intensas
experiencias, pero cada cual según su preparación.

En algunos estaba muy claro que el único móvil que los llevaba a participar de
semejante compromiso era el deseo de servir con la mejor disposición a la
Misión, sin buscar metas personales o reconocimiento de ninguna clase. Y es
aquí donde las pruebas nos pueden hacer tropezar fácilmente, cuando no
hemos trabajado lo suficiente nuestros egos.

Después hubo un segundo grupo, pero solo compuesto por tres personas. Lo
que ellos vivieron es lo que se detalla a continuación, según las propias
palabras de Jorge Anaya y Eric y Carlos Santana de los grupos de Nueva York:

Queremos hacer mención de la forma como cada uno de nosotros fue llamado
a participar en este grupo, pues vuelve a demostrarse como los Guías, al
conocernos más que nosotros mismos, crean los mecanismos para
conducirnos a las experiencias. En algún momento, después de la ultima
meditación, Eric se dirigió a mi (Jorge) y me dijo lo siguiente:

¡Tú tienes que venir con nosotros!, pues yo he visto un xendra frente a ti y
estábamos Carlos, tú y yo, y lo he visto entrar primero y desaparecer en esa
puerta dimensional. Después he visto que entrábamos nosotros dos.

Entonces recordé que en la meditación de proyección a las experiencias


hechas en la tarde había visto dos xendras uno junto al otro, pero no lo había
mencionado a nadie. En ese instante se lo comente a Eric, que volvió a
decirme:

¡Ves!, ¡tú tienes que venir con nosotros! Pues yo lo he visto.

Así, esperamos el momento en que se coordino la participación de nuestro


grupo. Eric y Carlos hablaron con Sixto y una vez terminada la conversación,
me acerque y pregunte si podía ir con ellos. Él, mirándome a los ojos, me
contestó:

—Si sientes que debes ir, hazlo. Haz lo que tu corazón te manda. Ni lo que
puedes ni lo que quieres, solo lo que debes… A lo que conteste que sentía que
era lo correcto y como que algo me succionaba hacía ese lugar, y mi corazón
me lo gritaba. En ese instante oí la voz de Eric y de Carlos, que me llamaban.

Era sorprendente para nosotros ver que Carlos volvía al lugar de las
experiencias, pues ya había participado en el grupo previo. Después nos
enteraríamos de que él también había recibido un mensaje muy claro de los
Guías donde se le decía que tenía que volver esa misma noche en un segundo
grupo, pues las experiencias no se habían completado, ya que las condiciones
no habían sido reunidas y el trabajo no se había terminado en el primer
grupo. Sixto me lo confirmaría después. Nuevamente veíamos que eran los
Guías los que directamente invitaban y seleccionaban, creando directa o
indirectamente situaciones muy peculiares.

En el caso de Eric también fue curiosa su selección para este tercer grupo,
pues habiendo sido llamado al primer grupo se le pidió que se quedase para
un segundo grupo, ya que otra persona iría en su lugar. Mas tarde nos
daríamos cuenta de como los Guías nos fueron reuniendo de una manera
extraña pero eficaz. Esta vez seríamos solo tres personas las que viviríamos
las experiencias completas. El tiempo nos ayudaría a entender por qué.

Los tres empezamos a caminar uno detrás del otro. Yo iba al último. No
habíamos avanzado más de treinta metros dentro del bosque, cuando oímos
un ruido detrás de nosotros a la derecha, como si alguien saltara y cayera
entre las ramas secas de los árboles caídos. Luego se oyeron claramente las
pisadas aproximándose a nosotros, me volví para ver quien era, pero no
encontré a nadie. Repentinamente el ambiente alrededor del grupo se fue
cargando de energía y todo el lugar se lleno de una coloración azul eléctrica a
la manera de una nube. Mientras, los pasos seguían acercándose y se
colocaron detrás de nosotros. Allí sentimos que por la tensión generada
nuestras facultades extrasensoriales se agudizaban al máximo. Entonces,
cerré los ojos y trate de ver más allá, con la visión síquica, observando a la
persona que nos acompañaba, la cual iba vestida con una ropa pegada al
cuerpo que le llegaba hasta el cuello, de un color plateado, y calzaba unas
botas doradas. Tenía una franja de color rojo oscuro que le bajaba de cada
uno de los hombros en diagonal formando una «V», pues se unían a la altura
de la cintura y desaparecían detrás de un cinturón dorado. Al contar lo que
veía, el grupo me dijo que lo dejara venir, pues había dudas de la procedencia
del ser y alguien hasta pensó que era alguna persona del campamento que se
nos había unido. Sus pasos eran muy claros y, conforme íbamos avanzando, vi
(físicamente) a otros tres Guías parados a una distancia de unos quince
metros. Dos a la izquierda y otro a la derecha (uno de los del lado izquierdo
era mujer). Estaban observándonos, como a la expectativa. Todos vestían
igual que el que había descrito anteriormente. Seguimos caminando
adentrándonos cada vez más en el bosque ante la mirada complaciente de los
Hermanos Mayores, hasta llegar al lugar señalado para las experiencias, que
no era otro que el mismo lugar donde nuestro grupo había realizado el trabajo
colectivo, hasta que Sixto había pedido que regresáramos…

Cuando Carlos llegó al lugar se detuvo y nos dijo:

—Hermanos, vamos a cogernos de las manos y a mantralizar las palabras


Rama, Om y Amar. Y vamos a pedirle a los Guías que se den las experiencias
que faltan.

Comenzamos a relajarnos hasta adquirir un estado de profunda armonía


mientras seguía viendo a los Guías caminar a nuestro alrededor. Verlos fue
algo tan natural para mí, que era como si siempre hubiese sido así. Ellos
estaban allí haciendo su trabajo, y nosotros, el nuestro. Entonces Carlos, con
el mayor desprendimiento de su corazón y lleno de confianza, dijo:

—Hermano Jorge, comunícate con ellos, pues yo estoy bloqueado por la


emoción. Pregúntales lo que tenemos que hacer porque hace unas horas ellos
me hicieron saber que tenía que volver, ya que había sentido muy claramente
que las experiencias no se dieron completas en el primer grupo.

Entonces comenzamos a mantralizar y desde el primer mantram cayo sobre


nosotros un flash de luz celeste muy brillante, como un fogonazo, como un
chorro, y de inmediato el ambiente se lleno de más cantidad de energía.
Lentamente el grupo cerro los ojos y empezamos (Jorge y Eric) a ver cantidad
de símbolos egipcios que nos llegaban a la mente con mucha claridad.
Algunos de estos símbolos sobresalían entre los demás y bajaban como un
arco, tornándose más grandes. Al mismo tiempo, al cerrar los ojos los dos
veíamos que detrás de cada uno de nosotros se colocaba un Guía. Este
proceso duro largo tiempo, tras el cual Carlos me pidió que le preguntara al
Guía que estaba a cargo de la coordinación cual era la experiencia que él
debía pasar y por la que él había regresado. Como respuesta, el Guía me dijo:

—Dile que primero tiene que calmarse. Y yo así se lo comuniqué.

Entonces Carlos comenzó a respirar profundamente e inmediatamente fue


recuperando la paz y la armonía. Mientras esto sucedía, el Guía me mostró —
como en otro tiempo o dimensión—, una piedra plana de uno por tres metros,
aproximadamente, e inclinada en unos 45 grados en medio del bosque. Sobre
esta había tres cruces Ank (egipcios) doradas. A continuación vi que Carlos
cogía una de estas cruces con la mano derecha y, al pasarlas a la mano
izquierda, se convertían en un número de tres cifras de metal más grande que
su mano. Los números eran: 5, 7, 5, que al juntarse se convirtieron en algún
tipo de energía que se le introdujo a él por el chakra cardiaco, y lo activó
hasta tal punto que sintió como una explosión de energía en su pecho que giro
como un vórtice y salió disparada hacia adelante, formando frente a él un
circulo de luz blanca y brillante, como una puerta. El Guía dijo entonces:

—La llave son los números, y su significado, el mismo que abre la puerta que
está en el corazón de todo. Tan pronto sea abierto definitivamente el umbral,
este conectará con otros mundos y dimensiones donde vivirán experiencias
maravillosas.

Sixto explicaría después que la clave del contacto en el momento actual es


ese «corazón simbólico» al que continuamente se hace referencia en los
mensajes, y que esta era la forma como cada uno de nosotros podíamos abrir
la puerta y traspasar el umbral, equilibrándonos y usando nuestro corazón
(intuición con amor). Además, esos números, sumados, dan el numero ocho,
que representa la intuición del corazón y el tiempo de cambio.

Era evidente que a través de la respuesta de Carlos se nos estaba dando a


todos la clave para vivir esta experiencia traspasando cada uno el umbral.
Mientras esto ocurría, a mi izquierda se formo un xendra de color celeste muy
claro, con contornos muy definidos. Carlos preguntó específicamente por la
puerta, y el Guía que estaba detrás de Eric señalo con la mano derecha al
lugar adonde yo estaba mirando, y me dijo:

¡Allí está!… Déjense guiar por su propio corazón… ¿A qué esperan? ¿Por qué
no entran? —E insistió el Guía con la pregunta.

Esto se lo comuniqué a mis compañeros, quienes coincidieron conmigo sobre


la necesidad de que entráramos cuanto antes. Empezamos a caminar juntos
hacia la luz, y nos detuvimos a menos de un metro delante de ella. Entonces
comenzamos a tocarla con las palmas de las manos, y pudimos sentir la
barrera de luz al penetrarla. Se percibía un fuerte calor, así como un flujo de
energía de muy alta vibración, algo así como un torrente de agua. Y cuando
sacábamos las manos, estas sensaciones desaparecían de inmediato.

Los tres comentamos nuestras sensaciones, pues estábamos muy lucidos. En


ese momento, Eric me dijo:
¡Entra tú primero, pues yo vi que tú entrabas solo y desaparecías!

Comencé a respirar lenta y profundamente, y a concentrarme en el chakra de


mi corazón. De pronto observe como se formaba una espiral de luz blanca y
dorada en mi pecho, e inmediatamente comencé a mantralizar muy bajo el
Zin-uru. Sentí de inmediato que la energía desbordaba mi corazón. Avance
hacia el umbral y vi que el xendra cambiaba de color y se tornaba de un
blanco brillante; dentro de él, pude observar la existencia de un túnel y la
presencia de otro Guía. Este ser se me acerco y se detuvo muy cerca de la
salida. Mi reacción fue levantar mi brazo y saludar mentalmente y con la
mano en alto. Luego, ante su señal, seguí a este ser hacia el interior del túnel.
En el interior sentí una ola de calor que me invadía y me provocaba un fuerte
mareo, que crecía y me inspiraba un cierto temor. El Guía, que estaba muy
cerca de mí, aprovechó para identificarse como Soloviac. Me deseo Amor y
Paz, y mantuvo conmigo un corto diálogo. Entonces Carlos y Eric entraron
detrás de mí; a continuación todos nos cogimos de las manos y volvimos a
sensibilizarnos. En ese instante Carlos se desprendió del grupo y se disculpo,
a firmando que sentía que debía salir y alejarse, pero me pidió que le
preguntara al Guía si podía orientarlo hacia donde debía ir. El Guía me
respondió que Carlos debía acercársele. Mientras tanto, en el lugar apareció
otro ser procedente del bosque. Carlos oyó que el Guía le decía:

—Las llaves para abrir la puerta están en tú corazón. En el respeto hay una
llave, en la tolerancia, otra; una en la compasión, otra en la misericordia y
otra muy valiosa en el perdón… Cuando pierdas el miedo a amar conseguirás
entrar.

Carlos contaría después que entre las cosas que el Guía le dijo, estaba que no
podía acercarse más porque él aún no estaba lo suficientemente armonizado.

El Guía tenía toda la apariencia de un ser humano. Era un hombre bajo, de tez
clara aunque oscurecida como por el sol, de cabello largo que le cubría ambos
hombros; iba vestido con un traje gris ajustado con franjas de color rojo
oscuro que le bajaban desde los hombros hacia el centro de la cintura. Los
tres del grupo lo vimos con total nitidez. En ese instante percibí que Eric
debía volver al lugar donde habíamos recibido los símbolos, porque allí se
estaba abriendo otra puerta que él debía traspasar. Allí tuvo el contacto con
dos seres, mientras que yo me moví en dirección a la primera puerta. Volví a
ver a Soloviac, que mentalmente me invito a acompañarlo hacia el interior del
portal interdimensional, donde las paredes laterales parecían ser olas en
permanente movimiento en forma de remolino. El interior era como un túnel,
donde después de haber recorrido unos cuantos metros, llegue a encontrarme
frente a una selva mucho más tupida que el bosque que nos rodeaba. Allí
había montañas rocosas no muy altas, un río y una vegetación intensamente
verde. Entonces capté que me decían que aquel lugar era «Pusharo» la puerta
hacia Paititi, la «Puerta del Corazón», estrecha y única; lugar que guarda en
muros de piedra antiguos e importantes petroglifos, a manera de un mapa
hacia el retiro oculto de la Hermandad Blanca. Mientras me encontraba allí,
Soloviac y varios otros Guías que hicieron su aparición estuvieron
trasmitiéndome cantidad de información sobre la misión en Estados Unidos, y
desde Estados Unidos al mundo. ¡Cuantas cosas tenían aún que madurar en
nosotros para que pudiésemos entender y aprovechar la oportunidad de estar
allí que nos concedía la vida, y poder desde allí realizar nuestra misión de ser
puentes con el universo!… Luego el paisaje cambio, y aunque seguía siendo la
selva, ahora aparecía ante nuestros ojos como una gran pirámide pero en
plena selva, similar a las de Egipto. Sus muros eran de piedras grises oscuras
y su punta se encendía con un color dorado. Muy cerca de allí y al pie de una
montaña, hacia una cueva en la roca, y a un lado de la entrada había ruinas
de una antigua ciudad.

Fueron muchas las cosas que viví a un ritmo aceleradísimo, y deseando volver
para reencontrarme con mis compañeros, quienes estaban viviendo lo propio.
Me di media vuelta, percibiendo sus voces a la distancia, y automáticamente
fui caminando hacia el final. Una vez fuera, volvimos a juntarnos los tres y,
tras unos breves instantes, el Guía me dijo:

—Ahora ellos dos deben cruzar el umbral juntos, pues la conexión que los une
viene de vidas anteriores.

Mis compañeros se acercaron hacia la puerta, y allí aparecieron los Guías,


que los invitaron a entrar. Del otro lado de la luz, el lugar estaba lleno de
pirámides de cristal de diferentes tamaños y colores. Se les permitió recorrer
una parte del lugar, pero luego se les insistió en que debían volver. Uno de los
Guías les dijo:

¡Esto se tiene que cumplir, el trabajo se tiene que volver a dar!

Se dirigieron hacia la puerta, y antes de despedirse, ante la pregunta de ellos,


el ser se identifico como Sampiac.

Carlos fue el primero en salir del xendra y luego Eric, quien lo hizo unos
minutos después. Volvimos a juntarnos para comentar todo lo vivido, y así
dimos la experiencia por terminada. Eran las 4.50 de la madrugada y el
amanecer no estaba lejos en aquel increíble paraje.

Con los días, cada uno de ellos fue reflexionando y recordando mucha y muy
valiosa e importante información. Eric recordó aquella mañana, durante su
sumo, una buena parte de la experiencia, mientras que Carlos percibió
claramente que las experiencias están comenzando para la zona norte de
América, y con ello el trabajo cada vez más comprometido.

Por la mañana del día 6, todos los asistentes al encuentro —a pesar de haber
pasado la noche en vela— estaban muy entusiasmados por compartir y
escuchar las experiencias más intensas de aquellos a quienes les tocó vivirlas
en esa ocasión. Por ello, hicimos en la orilla del lago una meditación solar,
charlamos y tomamos el desayuno para romper el ayuno que se había
mantenido hasta ese día. No faltó la emoción, así como las risas a la hora de
los relatos, pero todos quedamos muy fortalecidos por los acontecimientos.
Sabemos que la mayoría de las vivencias, aunque sean personales, son para
beneficio del grupo, y lo que cuenta e interesa en sí no es tanto la parte
anecdótica, sino el mensaje de fondo, lo que queda para todos y nos
enriquece. Una experiencia sin enseñanza nos lleva a dudar de ella, pero en
este caso hubo bastante riqueza para ser aprovechada. Sobre todo se hizo
hincapié en que debíamos ser constantes y estar dispuestos a ser sensibles y
dejarnos guiar.

Muchos tuvieron que marcharse ese día, pues el lunes debían ir a trabajar, y
tenían que conducir muchísimas horas hasta sus respectivos estados. Así que
después de la cadena de irradiación al planeta y especialmente a los
Balcanes, se sucedieron las despedidas, y el campamento de pronto se vio
reducido casi a la quinta parte. Sin embargo, éramos suficientes para
quedarnos trabajando en meditaciones que pudieran permitirnos algo más.
Por la tarde se recibió un mensaje y la atmósfera fue mágica. El cielo estaba
tan estrellado que parecía todo blanco y hasta había calor, por lo que
meditamos en circulo en la zona de aparcamiento. En ese momento avistamos
una nave que zigzagueaba a gran altura y al pasar por encima de nosotros
lanzo unos fogonazos.

Las comunicaciones recibidas en ese momento decían lo siguiente:

Comunicación: 6-6-99.

Lugar: Reserva Indígena Kamika (Canadá).

Antena: Sixto Paz.

Sí, Oxalc.

Nos alegra mucho que estén trabajando duro para sensibilizarse, por cuanto
ello permite que mantengamos una relación más profunda y práctica.

Ayer se vivió la advertida experiencia grupal del Xendra, en la que, como les
dijimos, cada cual se acerco a la experiencia de acuerdo con su apertura
mental y según su momento, que siempre es consecuencia de todo el proceso
previo de preparación, no solo para una salida, sino a lo largo de toda su vida.

Ahora que ha habido una selección espontánea, y que el número de asistentes


es menor, les invitamos con su dinámica a crear las condiciones de nuevas
experiencias. Todo depende de su actitud y disposición, que debe ser siempre
de humildad, disciplina y desprendimiento.

Con amor,

OXALC

Sí, somos sus hermanos Guías en Misión.

Les convocamos a estar unidos y a trabajar. Ahora que están allí nos
acercaremos más aún para evaluarlos y para que sientan nuestro apoyo.

Pregunta: ¿Por qué sentimos cierta negatividad en el ambiente, como


asechanza?

No estamos distantes de ustedes, pero esto tienen que superarlo por si


mismos. Sí, es cierto que en este momento se cierne sobre su mundo una
energía de asechanza muy fuerte que trata de neutralizar la comunicación
profunda y el avance. Pero no teman, que nuestro apoyo los ayudará a
mantener la conexión.

Esta salida es muy importante por cuanto el tiempo es llegado para que se
aceleren los cambios en las personas, los grupos y los países.

Pregunta: ¿Qué debemos hacer? ¿Cómo debemos continuar?

Mantengan la meditación como herramienta adecuada de trabajo. Eso los


mantendrá sensibles y receptivos. Déjense guiar por la intuición y estén
atentos a nuestros mensajes, allí siempre habrá recomendaciones e
instrucciones que no deben ser descuidadas porque ellas componen la Misión
y están anticipando el gran momento de la humanidad.

Aprovechen la fuerza que comienzan a desarrollar en su interior para avanzar


rápidamente y lo más posible.

Con amor,

SAMPIAC

Aquella noche resulto mágica, después del mensaje la negatividad se disipo


por completo y nos sentimos envueltos por una gran paz y un clima cálido.
Todo brillaba y lucía, iluminado de una luz natural. Y hasta llegó a darse el
avistamiento de una nave a baja altura sobre el lago y las colinas, que
dibujaba aquella enigmática y misteriosa «Z». Se trabajó duro tanto
conscientemente como a nivel astral, ya que, víctimas del agotamiento,
después de mucho meditar, nos acostamos temprano en las cabañas. Al día
siguiente, 7, todos compartíamos la sensación de haber sido aprovechados
para labores especificas durante el sueño.

De regreso en Montreal me quede hasta el día 10 de junio y di algunas


conferencias tanto para un público francoparlante como para latinos,
naturalmente, siempre con un traductor.

El retorno desde Canadá me permitió quedarme unos días en México, donde


participé en algunos programas de radio y televisión (Televisión Azteca), y
también di algunas conferencias en el Distrito Federal. El sábado día 12 de
junio acompañe al grupo de la capital a una salida a Las zona de Atlimeyaya,
en Puebla, detrás de un Centro Recreacional especializado en la producción
de truchas para consumo humano, propiedad del señor Paulino López, que es
un gran amigo nuestro. Allí acampamos y meditamos en lo alto de una colina
en medio de terrenos de cultivo; al frente teníamos una vista privilegiada del
volcán Popocatepetl. Aprovechamos entonces e hicimos Las cadenas
planetarias que tanto han insistido los Guías que se hagan en esta época.

Durante la tarde y la noche tuvimos que hacer frente a bajísimas


temperaturas, pero nada eso no nos amilanó, y el grupo con valor y coraje se
mantuvo meditando firme y realizando las concentraciones. Al día siguiente,
domingo, 13, nos fuimos a meditar debajo del «abuelo», un árbol milenario
llamado «Ahuehuete». Realmente era inmenso, con formas humanas en su
corteza y en sus ramas que lo hacían aparecer como sacado de un cuento de
hadas. Era tanta su personalidad y energía, que uno podía estar a unos diez
metros de distancia y sentía su fuerza y su vibración extraordinarias. Además,
se encontraba convenientemente situado al lado de un arroyo de aguas
cristalinas, por lo que pudimos cargarnos de saludables energías en ese lugar.

Después de estar allí meditando, don Paulino nos contó dos recientes
avistamientos que había tenido allí mismo en su Centro Recreacional, donde
años atrás di una conferencia pública en la que se dieron situaciones muy
interesantes, como por ejemplo que en medio de la disertación se fue la luz de
la zona, y de forma nítida y clara apareció por los ventanales del local una
«canepla» o cámara de televisión controlada a distancia por las naves
extraterrestres.

Según don Paulino, hacía una semana, en Puebla, a las 9 de la mañana, el


Canal 13 había logrado filmar de día tres ovnis revoloteando muy bajo sobre
la ciudad y todo el mundo lo vio: incluido él. El segundo avistamiento le había
ocurrido hacía poco a él y a su guardián. Era sobre la una de la madrugada
cuando los ladridos de los perros de la zona, alborotados, le llamaron la
atención. Salió a caminar con su empleado, cuando apareció sobre sus
cabezas, a no más de veinte metros, un objeto luminoso que proyecto un haz
de luz y que les hizo perder la conciencia de las siguientes cuatro a cinco
horas. El día 15, después de la grabación de un programa de radio, nos
encontrábamos con Maru Friedkensen y Héctor Ibarra —entrañables amigos
y grandes difusores del mensaje—, compartiendo los alimentos al mediodía en
un restaurante vegetariano de comida muy rica del Centro histórico de la
ciudad de México, cuando comenzó a temblar la tierra. Fue un temblor largo
e intenso que detuvo la actividad de aquella gran metrópoli. Después nos
enteramos que pocas horas antes y luego, después del temblar, se vieron
ovnis sobre la ciudad, especialmente en la zona del aeropuerto. También
supimos que uno de los lugares donde más había temblado la tierra había sido
en Puebla, donde habíamos acampado días atrás, y nos pareció muy extraño…

En Julio viajé invitado por los grupos de Ecuador a visitarlos y a dar un ciclo
de conferencias sobre los «Veinticinco años del Contacto Extraterrestre» y
«Los Ovnis y el Tercer Milenio». Hacía dos años que no volvía a ese país. La
ultima vez había sido a propósito de una invitación que me hiciera el
prestigioso investigador ecuatoriano Jaime Rodríguez, para grabar unos
programas de televisión en la importante cadena Ecuavisa. Pero esta vez era
un viaje especial, pues tenía lugar después de haberse firmado el acuerdo
definitivo de paz mediante el cual los problemas fronterizos entre Ecuador y
Perú se habían solucionado mágicamente o milagrosamente después de medio
siglo de una guerra no declarada; ambas naciones cedieron en sus posiciones
para lograr el consenso y dieron así un ejemplo al mundo de convivencia
fraterna. De este modo desapareció uno de los tantos focos de tensión
planetarias, lo cual repercutió positivamente en la salud vibratoria mundial.

Algo interesante que cabe mencionar es que el ultimo conflicto fue a


comienzos de 1998, sobre la mismísima zona de la cueva de los Tayos, en la
cordillera del Cóndor, puerta de entrada al mundo intraterrestre, y lugar
donde los hermanos de los grupos de Ecuador habían hecho tiempo atrás un
viaje por encargo de los Hermanos Mayores.

Al firmarse el acuerdo de paz definitivo se inicio una impresionante oleada de


avistamientos de ovnis sobre Perú; algo insólito, como ya mencione en mi
libro anterior (Una insólita invitación), por cuanto los primeros testigos
fueron periodistas de varios medios de televisión, radio y periódicos. La
oleada empezó coincidiendo exactamente con el día del veinticinco
aniversario de nuestro contacto. Pero, a pesar de todo este marco
prometedor, que elimino totalmente el recelo y la animadversión que existía
entre ambos pueblos hermanos, herederos de un pasado común, no me
hubiese imaginado jamás lo que me esperaba y que iba a ser igual de grave…

Llegue el día 5 de Julio a la hermosa y verde ciudad de Quito, enclavada entre


las montañas, habiendo sobrevolado previamente el cráter del majestuoso
volcán Cotopaxi, una impresionante montaña completamente cubierta de un
manto de nieve.

La ciudad tiene un ligero parecido con Cuzco, solo que tiene zonas muy
modernas al puro estilo de las grandes urbes, con exquisitos edificios que
cuelgan de imponentes abismos con una vista maravillosa hacia los valles.

Al llegar al aeropuerto fui recibido de una manera conmovedora, pues unos


niños me esperaban portando en sus manos las banderitas de ambos países
(Perú y Ecuador). También se encontraban presentes las cámaras de un
importante canal de televisión, que aprovecho de inmediato para
entrevistarme.

El panorama de la ciudad en esa ocasión era sumamente especial. Lo que se


veía y se podía sentir a pesar del sol imperante era que se acercaba una
terrible tormenta, no tanto por las nubes, sino más bien por las huelgas y el
clima de inconformidad y agitación social por las recientes medidas
económicas. En ese momento había una tremenda huelga de transportes
liderada por los taxistas, que en este país tienen un gran peso, y que con sus
vehículos habían cortado las más importantes arterias de la ciudad. Además,
se dedicaban a hacerle la guerra a los que querían trabajar o movilizarse
como fuese, llegando a serios extremos de violencia. El país estaba paralizado
y convulso… Y yo había llegado justo en ese momento para darles ¡un mensaje
de esperanza y de cambio de actitud y de mentalidad!

En Ecuador, como a nivel mundial, se había visto el especial del Discovery


Channel, en donde se hacía referencia a mi persona como el Contactado más
importante de toda Latino América. De este modo, se habían cumplido las
comunicaciones de los Guías, que decían que difundiríamos como nunca el
mensaje a nivel mundial, pues se nos facilitarían los medios. Esto también
hizo que el trato de los medios de comunicación hacia mi persona y hacia el
tema fuese diferente, mas respetuoso que nunca. Fui entonces a una gran
cantidad de medios, que abrieron de inmediato sus puertas al mensaje, a
pesar de la crisis nacional. Y en todas partes se me trato con respeto y
admiración.

Aprovechamos las distintas correrías por el centro de la ordenada y siempre


limpia capital de la «Mitad del Mundo» para visitar el local destinado para la
realización de la conferencia más importante. El lugar era el auditorio del
Supremo Tribunal Electoral, que fue cedido gratuitamente por su máxima
autoridad, el doctor Vinicio García, un hombre generoso y culto, y en todo
extraordinario, por su sencillez y su apertura mental. A él y a toda su familia
les guardo el mayor aprecio y gratitud.

Me aloje en el apartamento de Rafael y Daysi Calderón, una linda parejita con


tres niños, dos de los cuales eran aún bebes. Gente joven pero a la vez
antiguos ramas que habían estado en Playa Paraíso con nosotros, y que
habían mantenido a los grupos activos a lo largo de todo este tiempo, a pesar
de todas las vicisitudes. Rafael, por encargo de los Guías, también había
participado en la expedición a la cueva de los Tayos.

El hogar de nuestros amigos estaba en un amplio tercer piso de un moderno


edificio muy cercano al aeropuerto. Las noches de la capital eran muy frías,
cosa natural por encontrarnos por encima de los 2800 metros sobre el nivel
del mar; mientras que, temprano por la mañana, entraba violentamente un sol
radiante por los amplios ventanales, lo cual provocaba que la temperatura
subiera rápidamente. Pero una vez en la calle, uno se sentía nuevamente
como si estuviera en una nevera.

Fue tal la repercusión y el interés despertado en los medios de comunicación,


que vinieron a entrevistarme a casa de Rafael de parte del programa más
visto e importante de la televisión ecuatoriana, que se llama «La Televisión»,
y que dirige el experimentado periodista Freddy Ellers. El planteamiento del
programa fue excelente, el tema fue tratado de una forma muy respetuosa y
profesional. Me preguntaron con profundidad y sano interés sobre los
contactos, la evolución del fenómeno y las profecías del final de los tiempos.
¡Fue un éxito!

Cada vez que salíamos del apartamento situado en aquel céntrico barrio,
teníamos que intuir por donde debíamos ir, ya que las calles permanecían
cortadas y hasta tiraban clavos a las ruedas. Había mucha tensión, pero a
pesar de ello seguíamos con lo nuestro, conscientes de que, de alguna extraña
forma, estábamos contribuyendo a disminuir la tensión y a acelerar las cosas
para que estas tuvieran un desenlace positivo. Una de aquellas noches nos
reunimos con todos los grupos de contacto de la ciudad, para intercambiar
información, poner a la gente en antecedentes y explicar muchos aspectos del
proceso de la Misión en la actualidad. También aprovechamos para hacer una
gran cadena de irradiación al país que se sintió con mucha fuerza.

El día 7 de Julio dudábamos entre si viajar a un pueblo del interior o no. Está
a sólo dos horas de Quito, y se llama Machachi, y había mucho interés por
parte de la gente para que fuésemos. El problema era que estábamos en
medio de la crisis, y las carreteras estaban cortadas, y hasta apedreaban a los
automóviles que intentaban pasar. Pero siguiendo nuestra intuición y gracias
al valor de Rafael, fuimos y pudimos llegar sin mayores dificultades. El lugar
era un pueblo de sierra, bastante frío por estar rodeado de montañas nevadas
y cubiertas de nubes y bruma. Allí, a un lado de la plaza de armas, en el
acogedor auditorio del concejo o alcaldía, di la conferencia para un centenar
de personas, la mayoría de escasa condición económica pero muy motivada. Y
les gustó tanto la disertación, que en cuanto terminamos fuimos invitados a
una casa cercana donde esa entrañable gente, a pesar de sus dificultades,
compartió con nosotros un agradable refrigerio consistente en una agua
aromática o infusión y unas deliciosas empanadas vegetarianas. El retorno sí
fue problemático, porque había vándalos en la carretera que cobraban un
peaje a los autos bajo amenaza de incendiarlos.

El día 8 de Julio dimos la conferencia más importante. Había llamado


muchísima gente, deseosa de participar, pero la crisis del transporte y la
huelga nacional hicieron que la gente llegase con cuentagotas. Al final
contamos con un auditorio al ochenta por ciento de su capacidad; un
verdadero éxito para el momento que se estaba viviendo. Y una gran
oportunidad para dar el mensaje de compromiso de cambio y de esperanza de
una transformación general muy próxima. Hubo también muchísima gente
que no podía cubrir el mínimo de colaboración económica que se había pedido
para cubrir gastos, y tal fue su interés que se quedaron afuera del local, en el
frío polar de la noche, escuchando por los altavoces que reproducían la
conferencia en el exterior. Felizmente el amor y la solidaridad del grupo
hicieron que se dejara entrar a toda esa gente.

Los programas de televisión continuaron, y asistí a innumerables entrevistas,


de tal manera que los periodistas consideraron que las tres noticias más
importantes del país eran: la crisis económica, la huelga y el fenómeno ovni.

Ese 9 de Julio tenía que viajar a Ambato, a varias horas de distancia. Era una
conferencia acordada tiempo antes de la huelga, pero en ese momento la
situación de las carreteras que permanecían cerradas había llegado a un
punto álgido, por lo que no sabíamos que hacer. No había vuelos hacia allí, así
que esperamos a que nos llegase alguna confirmación de lo alto. Y estábamos
pendientes cuando, mirando desde el apartamento de Rafael en dirección
hacia el Cotopaxi y el Cayampe, con un cielo totalmente despejado, apareció
una nubecita pequeñita y alargada. Tres veces se hizo presente sobre la cima
del Cayampe y luego desapareció. Parecía ser la misma a otra exactamente
igual, pero la cuarta vez se transformó en un objeto oscuro, quizás esférico, y
se marchó en dirección a Ambato. Lo tomamos como una señal…

Llegada la hora partimos hacia Ambato, envolviéndonos previamente en una


cúpula de luz. La presión y la responsabilidad eran muy grandes, a pesar del
peligro existente. Las personas organizadoras de la conferencia eran gente
sencilla y comprometida que lo había organizado todo invirtiendo tiempo y el
poco dinero que tenían. La ruta estuvo en gran parte despejada, y en el
camino observamos los volcanes, que lucían orgullosos su nieve que coronaba
sus blancas cimas. A un lado y a otro de la carretera se multiplicaban los
bosques de pinos, cipreses y eucaliptos, completando la majestuosidad de
aquel paisaje de pintura.

Cuando llegamos a la población de la Tacunga, lugar donde nació la primera


hijita de Rafael, encontramos que el asfalto de la calzada había sido destruido
a propósito: los manifestantes habían hecho unos hoyos terribles para impedir
el paso de automóviles. Mas adelante había barricadas con inmensas piedras,
árboles caídos, llantas incendiadas y toda suerte de escombros con palos y
clavos, todo ello bajo la atenta mirada de efectivos del ejercito, apostados
muy cerca que, al parecer, con su indiferencia demostraban identificarse con
la medida de protesta popular.

Poco antes de llegar a Salcedo tuvimos que virar e introducirnos por caminos
de tierra que atraviesan las fincas, porque por la carretera venía una
muchedumbre de indígenas sublevados contra el gobierno que lo destrozaban
todo a su paso. Hasta la policía de un puesto cercano emprendió la huida al
ver a aquella masa de gente enardecida. Nosotros de inmediato evitamos el
conflicto, desviándonos por antiguos caminos vecinales empedrados, y
encontrándonos con multitud de camiones que venían de cara y que por su
volumen bloqueaban el paso. Por lo estrecho del camino había que hacer toda
suerte de maniobras para pasar y dejar pasar a los demás. Ya de nuevo en la
carretera apuramos el paso, teniendo cuidado de los obstáculos que iban en
aumento a medida que nos acercábamos a la localidad de Ambato.

Al llegar a las afueras de la ciudad, parecía que habíamos llegado a un lugar


en guerra. Se veía la población, ubicada entre altas colinas, como sitiada,
pues a simple vista se apreciaba que en distintos puntos estaba llena de
barricadas, inmensas piedras, cristales rotos, y había nubes de humo de
neumáticos quemados. Entrar en la ciudad resulto muy difícil, por cuanto los
puentes y las carreteras de acceso estaban clausuradas por los taxis que las
bloqueaban. Al forzar nuestro avance pasamos delante de unos taxistas, y un
«miguelito» se clavo en la rueda posterior izquierda del auto que conducía
Rafael. Era un plástico duro de desecho lleno de clavos gruesos, uno de los
cuales había atravesado la rueda. Felizmente, y gracias a la cúpula de luz, el
neumático, que era radial, no se deshincho y pudimos regresar hasta Quito,
porque las reencauchadoras no trabajaban. En el interior de la ciudad era
imposible avanzar de una calle a otra porque todas estaban cortadas por los
taxistas o por las barricadas y los pasos con innumerables clavos. Llego un
momento en que no podíamos ni avanzar ni retroceder, por lo que después de
muchos intentos llamamos por el teléfono móvil de Rafael a aquella gente
amiga que nos esperaba para que vinieran en nuestro auxilio. Ellos eran Galo
y Flor Chávez, una buena pareja que llegaron de inmediato a rescatarnos.
Gentilmente nos llevaron a su casa y allí nos atendieron generosamente. Nos
aguardaban unas periodistas de un programa de televisión local, personas
muy simpáticas e interesadas en el tema, quienes me entrevistaron.

Galo es un reconocido pintor que, con una humildad y sencillez exquisita, nos
mostró sus maravillosos cuadros que había hecho sobre el acuerdo de paz con
Perú y otros tantos de temas diversos. Más tarde, salimos para el lugar de la
conferencia. La asistencia fue reducida, por la situación de extrema tensión
en el ambiente, que hacía que la gente no se aventurara a salir de sus casas.
A pesar de la propaganda realizada, pudo más el temor, que conspiro contra
una mayor audiencia. Pero aun así la gente que nos acompaño en el elegante
y muy amplio local quedo muy contenta. Aquella noche descansamos en casa
de Flor y tuve experiencias extraordinarias durante el sueño. Sentí
claramente que me desprendía de mi cuerpo, así como los pasos de un muy
consciente viaje astral hacia el espacio, atraído por los Guías, durante el cual
fui envuelto en energías muy poderosas y revitalizadoras.

A las 5 de la madrugada nos levantamos para salir de la ciudad sin mayores


problemas; íbamos a escaparnos de aquel lugar sin que los manifestantes se
enteraran de ello. Afuera hacía mucho frío, y a pesar de ello, Flor y Galo
fueron tan amables que nos acompañaron hasta que abandonamos la ciudad y
se aseguraron de que no tuviéramos ningún problema. De todas formas, en el
ambiente se sentía una sensación de asechanza, por lo que sobre la marcha
redoblamos nuestra seguridad a través del consabido ejercicio de la cúpula de
protección.

Ya en la carretera pudimos evitar la mayoría de los obstáculos, pero en la


población de La Tacunga nuevamente encontramos unas barricadas
infranqueables con indígenas borrachos y alzados en armas, que habían
estado vigilando durante toda la fría noche. Y a pesar de la presencia cercana
de la policía, estos no hicieron nada para proteger a los automovilistas que
eran asediados y amenazados, obligándolos a pagar altos peajes si querían
pasar sin ser agredidos. Entre ellos estábamos nosotros. Felizmente, al
saludarnos y darles lo que pedían, inmediatamente se hicieron a un lado y nos
dejaron marchar sin mayor problema.

Llegamos a Quito sin novedad y a tiempo para asearnos, pues ese día, sábado,
y luego el domingo, tenía un seminario en un céntrico hotel. Allí nos
enteramos de los avistamientos que habían tenido lugar sobre la ciudad a
plena luz del día, el viernes, y que hasta habían sido filmados por una
televisión local. Por la noche, a pesar del cansancio, al terminar los trabajos
nos fuimos a un programa de radio juvenil muy abierto a estos temas. Fue
interesante dialogar con los jóvenes sobre sus inquietudes frente al tema.

El segundo día de seminario se desarrolló en un ambiente muy agradable, y


aprovechamos con la gente participante para reiterar con cadenas de
irradiación la ayuda a Ecuador, para que superase rápidamente la grave
situación en que se encontraba. Durante el almuerzo, Cecilia Novoa,
periodista de distintos medios de comunicación de Quito, gran amiga y
hermana y coordinadora de buena parte de los contactos con la prensa en
esta ultima visita, y quien estuvo en el encuentro de agosto de 1997 en Playa
Paraíso, me mostró el importante diario Hoy, donde aparecía mi persona en
primera plana y luego en el interior, en una página completa. Ella, con
evidente emoción, nos comentó que personalmente había visto una nave el día
de la conferencia. También la madre de Rafael vio un ovni de día, de forma
triangular y muy cerca de donde se encontraba un piquete de taxistas en
huelga, quienes también lo vieron. Aquella tarde mostraron las imágenes del
ovni visto y filmado por la televisión. Por la noche también apareció en la
revista dominical de «La Televisión» que, como he dicho, es el programa de
más audiencia local, y además, salí nuevamente en el Discovery Channel.
Semejante reiteración del mensaje, así como el apoyo en la difusión con el
acto de presencia de los Guías, parecía más bien fruto de una conspiración de
la luz para despertar conciencias…

El día 12 de Julio me llamaron por teléfono a casa de Rafael de la importante


cadena de radio Caracol de Colombia, para que en una entrevista telefónica
les diera mi opinión sobre el caso de unos miembros de una secta que habían
desaparecido en unas montañas situadas al este de su país, ante la promesa
que habían recibido a través de su líder de que un ovni iba a rescatarlos,
salvándolos de nuestro planeta que, según ellos, se acercaba a su inevitable
destrucción. Naturalmente, después de hacer mención de los peligros del
contactismo cuando escasea la objetividad y la autocrítica, les hable del
«síndrome de fin de siglo o fin de milenio» el mismo que esta llevando a
mucha gente desequilibrada a buscar evadirse en vez de afrontar los cambios
con valor y con fe.

A pesar de que cada día que pasaba se agudizaba la tensión en el país, pude
realizar los viajes que estaban previstos a otras ciudades, como Cuenca, la
ciudad más bella de Ecuador, y que con justicia ha sido nombrada
recientemente Patrimonio de la Humanidad, y también hacia Guayaquil. En
ambos lugares hubo una buena aceptación. Especialmente en Guayaquil,
donde tuve el privilegio de alojarme en casa de Yolanda Frey, y convivir con
ella y su agradable familia, de la que aprendí mucho. También pude entablar
contacto con el gran investigador ecuatoriano Jaime Rodríguez y con Rocío,
su esposa, quienes generosamente me obsequiaron cantidad de material de
televisión producido por ellos de las extraordinarias investigaciones que, con
valor y coraje, ha emprendido este gran difusor, serio y responsable, sobre el
tema de los ovnis, las profecías y hasta el Mundo Intraterrestre.

Yolanda organizó con el grupo guayaquileño una excelente conferencia,


contando con la gentileza del local del Tribunal Electoral del Guayas, cedido
también gratuitamente por intercesión del muy querido doctor Vinicio García.
También Yoli, con mucho amor, coordinó diversas entrevistas en la televisión,
así como un seminario-taller muy concurrido.

De regreso a Quito di una ultima conferencia el mismo día que se resolvió el


grave problema político, al decretar el presidente medidas correctivas
adecuadas, y justo cuando diez mil indígenas tenían sitiada la ciudad y se
dirigían hacia el Palacio de Gobierno. Inmediatamente se notó en el ambiente
como la pesadez y la negatividad se desinflaban. Fue notorio el cambio
vibracional y, al haber movilidad, la conferencia tuvo más éxito todavía.

Terminadas la actividades públicas, hicimos una salida de campo hacia la


«Mitad del Mundo». Asistieron los grupos activos de Quito, y el punto de
reunión fue el Parque Nacional Ecológico de Moraspungo, lugar al que se
llega por una carretera que, partiendo de la capital, va bajando por un
bellísimo cañón natural y luego, a la altura del monumento a la línea
ecuatorial, abandona la vía principal para dirigirse por un camino que va
ascendiendo hasta llegar a una parte muy alta, siempre bajo un intenso sol
serrano. Uno pasa por un puesto de control del parque y desciende un poco
hasta llegar a un aparcamiento situado al lado del camino. Cargando nuestras
cosas, seguimos por un caminito que se introducía en la vegetación boscosa
de alta montaña, hasta llegar a la zona de acampada. Allí descargamos
nuestro equipo, tanto en unas cabañitas muy cómodas, como en tiendas de
campana. ¡Y habían tantas!…

Era increíble como cambiaba la vegetación de un lado a otro de la montaña.


En esa parte, como daba hacia la costa, formaba con la cadena montañosa
una barrera donde las nubes se quedaban estancadas, y dejaban su
importante cuota de humedad de ese lado, que produce una abundante
vegetación, mientras que del otro lado es semiárido. Recorrimos un poco la
zona para disfrutar de sus encantos y las pocas horas de sol que tiene este
lado, porque generalmente siempre esta nublado. Llegamos entonces a un
mirador en donde se ve que estamos en una cornisa del volcán Pululahua, y
desde donde se ve la caldera o el interior del cono volcánico. El cráter tiene
seis kilómetros de diámetro, y su ultima erupción, según un cartel del lugar,
fue en el año 317 a. C.

La salida fue muy hermosa porque nos permitió compartir con todos
informaciones y trabajos diversos, entre ellos especialmente las cadenas de
irradiación planetaria. Durante los trabajos y las meditaciones, el cielo se
tapó y se volvió a descubrir en innumerables ocasiones, y llegaron a darse
momentos en los que la bruma era tal que no se veía a más de cinco metros.
Pero en otros momentos el cielo quedaba totalmente despejado, con un
maravilloso infinito de estrellas. Aprovechamos entonces para recibir
comunicación, y esto fue lo que se recibió:

Comunicación: 17-7-99.

Lugar: Moraspungo, en el Pululahua (Ecuador).

Antena: Sixto Paz.

Pregunta: ¿Podrían hacernos alguna reflexión sobre la situación actual del


Ecuador?

Si, somos vuestros hermanos Guías en Misión, muy cerca de ustedes,


procurando ayudarles con nuestra presencia a reducir los riesgos de un
desastre natural provocado por la tensión planetaria y nacional, ahí en
Ecuador.

No les es desconocido que cuanto esta ocurriendo viene siendo provocado por
quienes quieren ver al mundo sumido en el caos total y la desesperanza,
llevándolo así hacia la autodestrucción, por cuanto esto les significaría a esas
entidades aprisionadas en su mundo su inmediata liberación. Pero cada día
que pasa ustedes son más conscientes de su potencial interno; de ese poder
mental y de ese amor que puede neutralizar lo malo e incrementar lo bueno.
Por tanto, no caigan en el desaliento, que bien saben que no están solos en
esto. Estamos muy atentos a los acontecimientos, de tal manera que, en
donde fuese menester intervenir, sin que eso suponga una interferencia, lo
haremos.

La situación actual de Ecuador es una gran prueba de crecimiento y madurez


para esa amada nación, pero se están enfrentando a ella con valor y coraje,
así como con un espíritu práctico, poniendo en funcionamiento todo cuanto se
les ha enseñado. No lo olviden: deben aprovechar del momento actual para
traducir en hechos cuanto se les ha confiado.

Pregunta: ¿Qué pueden decirnos sobre la actividad volcánica local?

Nuestras naves están procurando controlar y reorientar las fuerzas telúricas y


volcánicas de la naturaleza, que se encuentran agitadas en la actualidad. No
teman, nosotros les protegeremos, porque este país esta despertando su
conciencia, y dentro de poco a la mayoría no le costará aceptar esta realidad:
nuestra presencia y un Plan cósmico para la Humanidad de la Tierra.
Pregunta: ¿Qué pautas de trabajo pueden darnos para futuras salidas?

En las salidas deben dar prioridad a las prácticas de interiorización, de


comunicación entre ustedes y con nosotros. Hagan salidas en grupos
pequeños cada mes y una general cada dos meses, para intercambiar
información y pautas. También así crearán las condiciones para un contacto
próximo más directo con nosotros.

Pregunta: ¿Qué pueden decirnos acerca de la cueva de los Tayos?

El viaje a la cueva de los Tayos no se completó, ni estaban todos aquellos


comprometidos que hubiesen sellado ese trabajo. Habrán de volver, pero
antes deben hacer una inspección de la zona, porque hay ciudades cubiertas
por la vegetación y la jungla, donde hay claves que deberán ser halladas, y
con las que deberán sintonizar antes de volver a la cueva.

Los viajes de contacto con la Hermandad Blanca deberán mantenerse sobre la


base de grupos de siete personas, y siempre entre los más comprometidos y
constantes.

También abrirán una puerta y rescatarán un conocimiento clave en


Tumibamba (Cuenca), limpiando el lugar de tanto dolor y sufrimiento, antes
de internarse en la selva. El camino y el contacto empieza allí.

Pregunta: ¿Podrá tener lugar un Encuentro Mundial en Ecuador?

No es conveniente un Encuentro Mundial aún en Ecuador, más bien harán


uno nacional en el Cajas, hacia mediados del próximo año. Los apoyaremos, y
podrán invitar a unos pocos representantes de otros grupos del extranjero. En
esa salida encuentro, nos haremos presentes pero tendrán que trabajar
intensamente de ahora en adelante.

Pregunta: ¿Pueden darnos pautas para el trabajo de esta noche?

Para esta noche sigan las dinámicas que acordaron realizar, por cuando con
ello se está elevando convenientemente la vibración del ambiente, y cuando
esto ocurre muchas son las cosas que pueden suceder por estar facilitadas.

Pregunta: ¿Nos podrían explicar que significa la terminación cósmica Ox?

Ox son los grandes escultores de monumentos espirituales y místicos. Son los


artífices de la consolidación de filosofías trascendentales. Son gente nacida
conscientemente en Oriente Medio y en China, que supieron demostrar con
su arte su fortaleza y convicción.

Pregunta: ¿Pueden darnos pautas para el viaje a Vilcashuaman en Ayacucho


(Perú)?

Se les dijo que debían realizar el viaje antes de fin de año. Vayan a él en un
viaje como en el que podrán realizar la conexión definitiva con Egipto, para
que afloren en ustedes, y en el ambiente, conocimientos que aún subyacen
incompletos en su interior y esperan eslabonarse definitivamente. Con este
viaje se retomará la dinámica interrumpida por ustedes al descuidar aspectos
que como pautas e instrucciones precisas tienen su importancia en el proceso
de los objetivos actuales de la Misión. Y les reiteramos que ese trabajo
requerirá la participación de siete personas.

Sigan comunicando que, a partir de ahora, las condiciones son más que
propicias y necesarias.

Con amor,

SAMPIAC

Durante la noche se crearon las condiciones idóneas para una conversación


en la que, entre otros temas, mencioné los cristales piramidales de color
verde brillante que retienen a los ángeles caídos al ciclo de encarnaciones de
nuestro planeta; cristales que yacen en diferentes lugares de Sudamérica,
guardados en las ciudades intraterrenas, las mismas que fueron conocidas
por los Incas. En ese momento Cecilia Novoa intervino y nos contó a todos
una maravillosa historia sobre el amor del inca Huayna Cápac y la princesa
Quitucara Quilago, quien era sacerdotisa de la Luna, y que vivía en
Cochasqui, donde hay ¡trece pirámides!, (lo cual me consta porque las
conozco, las mismas que parecen rampas de despegue de naves espaciales).
Esta princesa poseía la «Umiña», una esmeralda impresionante que le fue
entregada al inca como dote, y que él terminó colocando en su «llauto» o
corona de tela que cubría su frente.

¡Que interesante analogía con la esmeralda[9] de Lucifer! Y más aun cuando


con Huayna Cápac se produce el inicio de la destrucción del imperio, el cual
se le había anunciado a través de un oráculo en el que el soberano no quiso
creer y que hablaba de la llegada a su reinado de un «Pachacuti» («el Fin de
una Edad»), que consistía en quinientos años de purificación del planeta, por
los cuales la Tierra quedaría sumida en la oscuridad y el caos, desapareciendo
la luz junto con la cabeza visible del reino, que era el inca. Había que tener en
cuenta que esos quinientos años estaban a punto de cumplirse en esa época, y
tanto la luz como el inca debían volver a hacer su aparición con gran fuerza.

Había otra historia adicional, también a partir de los cronistas de la época de


la conquista, que cuenta que en el trance de muerte del inca Huayna Cápac,
al pie de su lecho se le aparecieron tres seres pequeñitos, como enanos
(¿grises?)[10] … ¿Tendrían algo que ver con lo del cristal verde o Umiña?
Resulta muy curiosa su semejanza con acontecimientos similares que
acompañaron la caída del imperio azteca, y con lo que en la actualidad se
cuenta de los «Visitantes de Dormitorio».

La salida terminó y todos quedamos muy motivados por los temas tocados; en
general fue una hermosa y muy completa experiencia para todos nosotros.
Para mí fue emocionante y enriquecedor también el hecho de palpar el cariño
y el verdadero amor de los hermanos de Ecuador, quienes no solo están
comprometidos con el mensaje, sino que lo viven y lo enseñan con su ejemplo
día tras día.
Poco antes de coger el avión de regreso a casa, pude ver por televisión las
noticias internacionales, y comprobé la difícil situación de Colombia, mi
próximo destino. Allí debía viajar en agosto, y me parecía curioso que,
apellidándome Paz, mi destino fuese dar permanentemente un mensaje de
Paz y de esperanza sin ser delegado de las Naciones Unidas… ¡Bueno, al
menos no oficialmente!
EL SALÓN DE LOS ESPEJOS

El año mil novecientos noventa y nueve y siete meses, del cielo llegará un
gran rey de horror; resucitara al gran rey de los mongoles. Antes y después,
Marte reinará en buena dicha.

NOSTRADAMUS, centuria X, cuarteta LXXII

Era una cruda mañana de invierno de la primera semana de agosto de 1999,


que competía en frío y humedad con los momentos más duros de la estación,
e invitaba a quedarse en la cama, remoloneando como cuando éramos niños y
no queríamos ir a la escuela. El vuelo iba a salir con retraso esa madrugada.
Pero felizmente, a diferencia de otras veces, había sido poco el tiempo que
tuve que esperar en el aeropuerto, y ya colocado en la pista, el avión hizo un
despegue impecable, rumbo a la exótica ciudad de Iquitos, joya de la
Amazonia peruana.

Había podido disfrutar de dos semanas en casa, con Marinita, mi esposa, y


mis hijas, que me enorgullecían contándome sus éxitos en la universidad y su
entereza y tenacidad para afrontar no solo los triunfos, sino también los
reveses y los fracasos, que nunca faltan, porque son parte de la vida. Viajaba
invitado por los amigos de los grupos de Loreto, una de las provincias del
Perú ubicada en plena selva, atravesado por el famosísimo río Amazonas. Este
río es el más importante de la Tierra por su caudal, de 100 000 m3 por
segundo, tiene una amplitud de su cuenca de 7000 000 km2 , y se une e
integra a varios países de Sudamérica. Fue descubierto de una manera
inesperada por el explorador español don Francisco de Orellana, quien
participó de la conquista de Perú. Precisamente cuando Gonzalo Pizarro
(gobernador de Quito) organizó una expedición para ubicar la legendaria
ciudad de «El Dorado». Orellana, como parte del contingente enviado, se
adentró por el río Coca y descubrió algo tan inmenso como un insospechado
mar interior, que los aborígenes llamaban la «Gran Yacumama»
(«Serpiente»), que era el río madre donde todos los demás convergían. En su
arrojo siguió por este hasta su desembocadura en el Atlántico, donde llegó en
el año 1542. Y le puso por nombre Amazonas, por los mitos y las leyendas
griegas de pueblos gobernados por mujeres, ya que durante toda la
accidentada ruta, soportando altísimas temperaturas de la húmeda jungla
llena de toda clase de reptiles, plagada de parásitos y de gigantescos y
agresivos insectos, fueron atacados por tribus mayoritariamente compuestas
por mujeres o por lo que, en apariencia, les parecieron mujeres a los
afiebrados europeos.

A los pocos minutos, de elevarnos por entre las nubes que forman el
acostumbrado y denso colchón sobre la sobrepoblada y contaminada ciudad
capital, el sol empezaba a hacer su aparición, abriéndose paso con dificultad
entre gruesas nubes grises y negras. Se veía que había estado nevando sobre
la cordillera de los Andes, y las más altas montañas allí abajo que pugnaban
por dejarse mirar lucían hermosas, cubriendo su permanente aridez con un
copioso manto blanco. Algunos elevados picos destacaban a la distancia
desbordando de nieve sobre sus crestas, cuando la nubosidad no los cubría o
cuando ésta no los hacía desaparecer cual si fuesen una visión irreal.

En Perú hay tres regiones principales: la costa, compuesta por un largo, árido
y estrecho desierto al borde del mar y limitado por altas montañas que
componen la segunda región; la sierra, donde tres impresionantes ramales o
cadenas de picos se van entrecruzando formando nudos (como los chakras);
en la columna vertebral de un ser humano, pero aquí como parte de los
centros de energía del planeta la tercera región es la selva, con cientos de
miles de kilómetros cuadrados de jungla espesa, donde se conservan los
recursos más importantes de nuestro mundo: ¡La mayor variedad de vida
natural, agua y aire puro que es la Amazonia! A diferencia de otros países de
la cuenca amazónica, en Perú se están haciendo grandes esfuerzos por
conservar la flora y la fauna silvestre, y esto se puede observar por la
cantidad de parques naturales y gigantescas reservas que han sido creadas
para dicho fin.

El vuelo de Lima a Iquitos dura poco más de una hora, y es maravilloso ver
cómo las cumbres, que han ido cambiando de aspecto a medida que se van
cruzando los tres ramales de montañas, van desapareciendo, quedando atrás
las mesetas andinas para formarse el manto verde impenetrable de llanuras
cubiertas de agua. Y como un gran ofidio con movimiento serpenteante que se
abre paso por la espesura, aparece con sus gigantescos meandros el
extraordinario río Amazonas. Su longitud es de 6280 km desde donde nace,
en los Andes peruanos, hasta donde termina en la costa Atlántica brasileña.
Esta formado por muchos ríos, pero especialmente el Ucayali y el Maranón. Y
dato curioso es que el río sagrado de los Incas, el Urubamba o Vilcabamba, es
afluente del Ucayali, por lo cual se convierte también en parte del Amazonas.

Después de un vuelo normal con las acostumbradas turbulencias creadas por


el clima de la época, el avión comenzó a descender sobre la otrora metrópoli
del Caucho. En el aeropuerto, la recepción ya lo va introduciendo a uno en lo
exótico y pintoresco del ambiente, pues no solo lo recibe la gentil y alegre
gente «charapa» (nombre de una típica tortuguita de río), con música típica
de la zona, sino que también lo hace la frondosa vegetación y el calor húmedo
y pegajoso.

Una cariñosa delegación me aguardaba ansiosa de que llegara para poder


llegar a cabo conmigo la apretada agenda preparada por ellos, en la cual
debía aparecer en múltiples programas de radio y televisión locales, invitando
a la gente a participar en un ciclo de conferencias que daría en el Aula Magna
de la Universidad de la Amazonia Peruana, contando siempre con el apoyo de
las autoridades y el personal de la alcaldía de Maynas.

Mi presencia coincidía con un momento de gran tensión social y política en la


zona. Hacia poco que se había firmado un histórico y trascendental acuerdo
de paz y limites con el vecino país de Ecuador, dando ejemplo a nivel
internacional de madurez y sabiduría por parte de las dos naciones. Se daba
por finalizada una guerra no declarada de más de sesenta años. Todos habían
cedido algo, y era un golpe duro para los grandes traficantes de armas, que se
habían aprovechado durante décadas para sacar dividendos de la situación de
tirantez que ellos sabían mantener encendida con la complicidad de políticos
corruptos.

Pero a pesar de todo lo positivo y difícil que fue llegar a ese acuerdo, se
habían producido graves disturbios al tratarse de dar cumplimiento a los
acuerdos de paz e integración que beneficiarían por igual a ambos países y
especialmente a la región. Obviamente había una mano tenebrosa detrás de
los violentos acontecimientos que se habían producido. Y una vez más la vida
me concedía el privilegio de poder colaborar humildemente llevando el
mensaje del Contacto que se resume en encontrar siempre la actitud correcta
frente a la vida. Esta actitud es la de la madurez en la paz y en el cambio. Con
paz interior, todo cambia como consecuencia de nuestro cambio interno.
Mediante el despertar de la conciencia estaremos en posición de asumir los
retos y la responsabilidad tanto individual como colectiva que nos permita
iniciar con ello la gran reacción en cadena capaz de transformarlo todo, pero
desde donde deben modificarse las cosas: ¡desde dentro!

Nuevamente tenía la oportunidad de estar en un momento de necesidad, en


un lugar cargado de violencia, en medio de grandes presiones, para dar un
mensaje positivo y hacer énfasis, mas allá de la parte meramente anecdótica
del contacto, sobre lo que realmente tiene valor e importancia en las
relaciones humanas: el dialogo con amor, que es sinónimo de respeto,
comprensión, tolerancia y perdón. Porque si entre nosotros no aprendemos a
comunicarnos, ¿cómo podremos llegar a establecer el puente de contacto
definitivo con el cosmos? Lo que esta en juego es más importante que los
intereses personales o nacionales, es la supervivencia de la vida en nuestro
mundo, el cual hemos recibido en administración. La intolerancia y el egoísmo
son una enfermedad creciente que puede terminar por exterminar al género
humano, y nuestra propia vida es el campo de experimentación de aquello que
será útil y exportable para el resto de la humanidad y el planeta. Y mientras
que no asumamos las responsabilidades individuales, y no aprendamos a,
«pensar con el corazón y actuar con la cabeza», estaremos hablando sin decir
nada; actuando sin construir nada positivo, como cuando se construye algo
sin cimientos.

Una y otra vez durante esos días, recalque en todos los medios a los que se
me invitó a asistir, sobre todo en los periódicos, la necesidad de mirar el
universo desde dentro de nosotros mismos, porque lo que hay fuera es lo que
llevamos dentro. Conociéndonos, conoceríamos el universo;
transformándolos, transformaríamos cuanto nos rodea; integrándonos,
acortaríamos distancias en el camino del autoconocimiento. Porque es muy
importante saber lo que tenemos para dar. En las entrevistas mencionaba que
los encuentros cercanos de cualquier tipo con otras realidades son algo
impresionante y que sacude las estructuras de cada cual, pero lo que uno
aprende a través de los años en el contactismo es que las experiencias no
cambian la vida de nadie, sino que es la actitud de la persona frente a las
experiencias la que termina cambiándolo a uno.

Desde que llegue al este del país, muchas personas de los grupos, sus
familiares y hasta personas ajenas me solicitaban tiempo para poder hablar
conmigo en privado, y así narrarme sus experiencias, pues consideraban que
mi persona podría ayudarles a entender sus procesos personales. Hubo
quienes me contaron desde asuntos domésticos hasta problemas grupales,
pero también quienes compartieron interesantes experiencias conmigo.

Con la gran oleada de avistamientos de ovnis que se inició sobre Lima en


enero (1999), se multiplicaron las observaciones también sobre otras
ciudades del interior, incluida Iquitos. Extraños objetos luminosos de formas
diversas fueron haciendo su aparición tanto de día como de noche, por lo que
se incrementaron los testigos y los testimonios que llegaban a la prensa. A
finales de junio se había venido observando sobre la capital de Maynas —
durante varios días seguidos entre las 6 y las 7 de la tarde— la aparición en el
cielo de un lucero muy luminoso que no era el planeta Venus, que, con un
movimiento zigzagueante, había toda suerte de evoluciones en el aire. Incluso
se hablaba de que se habían dado contactos directos con los extraterrestres,
como el que tuvo una persona muy influyente vinculada al Consulado de
Francia. Esto me consta, porque esa misma persona —alguien bastante serio
y equilibrado me lo contó personalmente.

Durante una de las entrevistas que me hicieron, el director del importante


diario local El Matutino me narró que en estado de sueño consciente, se le
había aparecido un ser muy alto de apariencia humana y raza negra, quien se
le presentó diciendo ser el Guía Xendor e invitándolo a hacer una salida a un
lugar llamado Picuroyactu; después se despertó y recordó el sueño y la
invitación con total claridad. Posteriormente fue con todo el personal de su
periódico al lugar, y sobre las cuatro de la madrugada, vieron aparecer en el
cielo algo así como una luna verde. Esto coincidió con una espectacular
observación ese mismo día de cuatro objetos luminosos sobre la misma zona,
hecha por otras personas y que tuvo lugar más o menos en el mismo horario.
Los objetos procedían de diversos puntos, se movían a gran velocidad y se
juntaban, y luego formaban un solo bólido verde brillante que seguía
evolucionando hasta desaparecer en el horizonte.

Me parecía muy interesante que el nombre y la descripción del ser


mencionado por el periodista fuese el de alguien que nosotros ya conocíamos
a través de experiencias directas, lo que confirma una vez más la realidad de
todo cuanto se está dando.

Durante las entrevistas en los diferentes medios pude disfrutar de la


compañía del conocido periodista y escritor Manolo Soria, un gran
investigador serio y profundo, que me contó experiencias que él había vivido
en Iquitos en compañía de otras personas el 9 de noviembre de 1980 en las
afueras del aeropuerto viejo Teniente Bergerie. Allí ellos habían contactado
físicamente con la Guía extraterrestre Anitac, quien también es conocida por
ser parte del conjunto de seres que están en contacto con nosotros. También
me refirió que el 8 de diciembre de ese mismo año, hubo una salida a la
localidad de Masan, y que en el cielo aparecieron gran cantidad de objetos
luminosos a modo de estrellas en movimiento que sorprendentemente en el
cielo formaban las palabras «Rama» y «Amar». Finalmente, todos los
asistentes contemplaron cómo los objetos formaban una estrella de seis
puntas y luego se marchaban.

Posteriormente aprovechamos cuanta ocasión se dio con los grupos para


hacer cadenas de irradiación al planeta y especialmente al país y a la región,
para colaborar con ello en la transmutación de la crisis existente. Las
conferencias de por si fueron un éxito, gracias a la excelente coordinación de
los grupos, y notamos claramente que la gente recibió el mensaje, ya que les
luego en el momento indicado. Todo esto no deja de maravillarme al
contemplar como somos utilizados positivamente y de forma conveniente para
el Plan Cósmico por las fuerzas superiores, las cuales nos ubican en las
coordenadas adecuadas con el conocimiento y la conciencia necesarias, con
capacidad de influencia positiva sobre el momento y las demás personas.

El regreso a Lima fue apresurado, pues tenía que llegar a casa y cambiar de
maletas. Salía al día siguiente hacia Colombia, un hermoso país con una gente
muy generosa y culta, pero injustamente victima de una descomunal
violencia, producto de ocultos intereses internacionales. Y precisamente me
iba a tocar vivir en ese país el ultimo eclipse total de Sol del milenio; un
acontecimiento astronómico que para los hermanos Guías son «señales» que
indican que los ciclos cósmicos marcan tiempos de cambio.

Poco antes de iniciar el nuevo viaje se produjo la acostumbrada despedida


familiar. Una a una, mis queridas y hermosas hijas Yearim y Tanis fueron
bajando la escalera de blancos pasamanos que da al segundo piso de nuestro
hogar, esquivando en el trayecto a nuestros siempre traviesos gatos, que
suelen acomodarse en los escalones para dormir. Se colocaron a ambos lados
de mis maletas para ayudarme, y las llevaron hasta la puerta, donde me
aguardaba el taxi que me conduciría al aeropuerto. Junto con Marinita
desfilaron luego en la entrada de la casa para la despedida final. Había
metido el equipaje en el maletero del automóvil y, de vuelta al umbral, me
estrecharon con sus brazos, cubriéndome de besos y llenándome de
recomendaciones para que me cuidara, como si todas ellas fuesen mi mamá…
Y hasta a coro repetían “¡vuelve pronto!“. A pesar de haber vivido esta escena
en infinidad de ocasiones, y de haber oído esas mismas palabras, estas me
llenaban el alma de Paz y profunda alegría, así como de fuerza interior.
Marinita, cariñosa como siempre, aprovecha para indicarme que había metido
en mi maletín de mano unos sandwiches de queso y unos zumos por si acaso,
para el viaje. Entonces nos miramos fijamente a los ojos y nos estrechamos en
un intenso beso y abrazo, y perdimos la noción del tiempo en un solo
sentimiento de unidad, sólo interrumpido por el chofer, que,
disimuladamente, recordaba la hora con una fingida tos.

Poco a poco, la dulce y siempre bella Marina fue apartando su rostro del mío,
con sus ojos aún cerrados como cuando nos enamoramos y nos dábamos
nuestros primeros piquitos (besos) y caricias. Una vez en el coche, venía lo
más duro. Aunque a menudo viajaba y me alejaba de casa, no podía
acostumbrarme a dejarlas solas. Cuando el taxi se iba alejando, trataba de
estirar al máximo esa ultima imagen de mis tres amores en el umbral de la
puerta, para que me acompañara siempre. En mi interior le pedía a Dios que
las cuidara y me las protegiera. El resto ya era parte de la rutina habitual…

El viaje fue como todos. La fuerza de la costumbre me hacía aprovechar las


interminables horas de espera del aeropuerto y de los vuelos para leer y
escribir.
Una y otra vez recorría el largo pasillo del aeropuerto de la calurosa y
húmeda ciudad, de Panamá, haciendo tiempo para tomar mi conexión hacia la
ciudad de Santa Fe de Bogotá. Era mi ejercicio para estirar las piernas y, a la
vez, Una forma de afrontar la dura y difícil batalla contra la impaciencia
soportando la cantidad de tediosas horas de tránsito. Había leído una buena
parte del libro que llevaba conmigo, pero me molestaba estar tanto tiempo
quieto después de las horas que había pasado sentado en el avión.

En media hora me había repasado toda la terminal y le había preguntado a los


vendedores de las tiendas libres de impuestos todo lo que se les podía
consultar; eso me servía de terapia, y a mis interlocutores, de karma.
Realmente aguardar tanto era aburrido, cansado y molesto. Eran horas de mi
vida que transcurrían sin mayor sentido, aunque siempre es bueno tener
tiempo para pensar y meditar. Pero si a este tiempo se le sumaba el de los
vuelos y otros tramites, ya era demasiado.

A derecha e izquierda había multitud de negocios que, como atractivo para


atraer clientes, afirmaban no cobrar los tan satanizados impuestos. En
algunas de las tiendas, donde me detuve más de la cuenta para curiosear, me
asustaban los precios que, en algunos productos, eran muy parecidos a los de
una tienda normal o incluso más caros; total, un engañabobos.

Felizmente, la desesperante espera llego a su fin y pude embarcarme hacia


Colombia; allí llegue ya tarde, por la noche. Para mi consuelo me aguardaban
en la terminal la maravillosa gente de los grupos Aura Stella y Nubia, quienes
se alegraron de verme, y me contaron que mis libros por fin habían llegado a
las librerías locales. Fui llevado a continuación hacia el centro de la ciudad,
donde sería alojado en el que ya consideraba que era mi segundo hogar, el
apartamento de la doctora Olga Heredia de Darquea, a quien siento como mi
madre colombiana. Un ser increíble. Una mujer mayor que, con su sabiduría y
sus innumerables anécdotas de vida como madre, neuróloga y cirujana, había
hasta llegado a ser condecorada por haber servido en el frente de batalla de
Vietnam, extrayendo esquirlas y balas de los cráneos de centenares de
joviales norteamericanos. Incluso por haber sido herida durante una
operación en un hospital de campaña, por una bala perdida que se alojo en su
pulmón, y no haberse dejado atender hasta no terminar con una
comprometida operación que dependía de ella.

Olguita, una persona muy especial, de una vitalidad asombrosa y gran


agudeza de pensamiento, me recibió con el amor de siempre, y mientras me
pedía que me pusiera cómodo, me iba preparando un suculento refrigerio.
Sentados en las sillas de su acogedora cocina, ella me comentaba que la
señora Marina, una magnifica y muy querida persona que trabaja a su
servicio, había dejado preparada una sopa de vegetales especialmente para
mí. Después de los comentarios familiares de ambos, conversamos a raíz del
eclipse anular de Sol, que iba a tener lugar dentro de dos días, cuando la
Tierra estuviera más cerca del Sol y la Luna más lejos. También conversamos
acerca de un programa de televisión que ella había visto sobre las profecías y
lo especial del momento planetario, comentando lo poco que se sabía por
ejemplo de los mayas y, sin embargo, la riqueza de información que ellos
habían aportado. Toda la información que disponíamos de ellos era gracias a
cuatro «Códices» o libros hechos en papel de amate (una corteza de árbol)
que lograron sobrevivir a la destrucción; por cuanto el obispo Diego de Landa,
perseguidor de idolatrías en el siglo XVI, reunió más de cinco mil libros de los
mayas al pie de las pirámides de Mérida (Yucatán), y en un auto de fe los
quemó porque, según él, allí había; muchas cosas que contradecían las
Sagradas Escrituras. Uno de los pocos libros que sobrevivió es el llamado
Códice de los eclipses (que se encuentra en la ciudad alemana de Dresde), y
en el están profetizados estos eventos astronómicos hasta el siglo XXI con una
precisión impresionante. Allí estaba anunciado el eclipse del día 11 de agosto
de 1999, y venía acompañado de una profecía que decía que con ese eclipse la
humanidad entraría en el llamado «Salón de los Espejos» donde debíamos
aprender a observarnos a nosotros mismos tal como somos para entender la
necesidad de un cambio, y emprenderlo. Con tal fin se produciría en este
tiempo el «Cahuac» (la «tormenta»), que sería un periodo muy violento que
conduciría a una gran transformación de todo cuanto nos rodea. También se
hacía referencia a que estábamos entrando en la Era de la Madre, por lo que
nuestra relación con el planeta (la Madre Tierra) era vital; o aprendíamos a
convivir con la naturaleza en armonía, o la naturaleza misma se encargaría de
deshacerse de nosotros.

Resulta que los mayas eran un pueblo extraordinariamente sabio que


desarrolló las matemáticas y la astronomía como pocos. Ellos habían datado
el inicio de su civilización en el año 3113 antes de nuestra era. Y, según sus
mitos, sus antepasados eran extraterrestres que habían llegado procedentes
de «Las Pléyades» a través de una «Gran Caña Hueca» o «Cola de Serpiente».
Esto coincide con las ultimas teorías científicas que nos hablan de «Agujeros
de Gusano» o «Pliegues Cósmicos», para recorrer las grandes distancias en el
universo, viajando a través del espacio tiempo.

Los mayas sabían que nuestro sistema solar giraba alrededor del Sol, al que
llamaban «Kinich Ahau», y que nuestro mundo era redondo, y giraba sobre si
mismo, lo cual les permitió elaborar muy precisos calendarios lunares y
solares. Además, sabían que todo nuestro sistema solar giraba una vez cada
25 625 años alrededor de las Pléyades, acercándonos y alejándonos del centro
de la galaxia, en lo que ellos llamaban «un día galáctico». Mientras que el giro
que hacía todo el sistema alrededor del centro de la galaxia, al que ellos
llamaban «Hunab Ku», se completaba cada 260 millones de años, en un «año
galáctico», que es a la misma conclusión a la que ha llegado la ciencia actual
en los últimos veinte años, contando con todos los adelantos de la tecnología
actual, tanto para la observación como para hacer los cálculos. Por lo que la
pregunta que se nos plantea es: ¿cómo lo supieron los mayas si no tenían
telescopios ni ordenadores?

Para los mayas, el día galáctico se dividía en cinco ciclos de 5125 años cada
uno. Había un ciclo que era como el amanecer, otro como la mañana, otro el
mediodía, otro la tarde y el último ciclo era la noche. Según sus libros, su
civilización se inicio cuando empezaba el último ciclo de cinco ciclos, por lo
cual nos encontraríamos culminando una terrible noche oscura, acercándonos
al inicio de un primer ciclo o amanecer. Esto coincidiría con la profecía azteca
del inicio del llamado «Sexto Sol».

Cada cambio de ciclo, nuestro Sol (Kinich Ahau) se conectaba con el sol
galáctico (Hunab Ku) a través de un rayo sincronizador a manera de latido
cósmico (que es emanado hacia toda la galaxia). Este rayo sincronizador o
energía extraordinaria habría empezado a llegar con fuerza entre el 11 de
julio de 1991 y 1992, coincidiendo con otro eclipse, y marcando los últimos
veinte años del ciclo (un katun) y haciéndonos entrar en el «tiempo del no
tiempo»…

Los mayas habrían lanzado una serie de profecías que tomaban como punto
de partida el eclipse de agosto de 1999, cuando quedarían trece años para
realizar los cambios e integrarnos con el planeta. Según estas profecías, con
el inicio de la Era de la Madre y de la mujer, la humanidad encontraría cada
vez más esperanza, nos acercaríamos al final de los miedos y tendríamos la
posibilidad de trascender o de terminar con el mundo. La cuenta atrás
terminaría el día 22 de diciembre del año 2012, según nuestro calendario.

Yo tenía en mi poder unos artículos de prensa que me había enviado nuestra


buena amiga Marta Couto, de los grupos de Uruguay, en los que se decía que,
a partir de 1991, los científicos habían detectado la llegada a nuestro sistema
solar de una energía extraordinaria procedente del centro de la galaxia. Y en
otro decía que los satélites de comunicaciones en orbita y la recepción de
imágenes televisivas en la Tierra estaba siendo afectadas por un incremento
inusual de la actividad de explosiones en el Sol.

En el artículo dado a conocer desde Londres, también se decía que desde


1997 en adelante habría implicaciones en el clima de nuestro mundo, por
cuanto las tormentas solares iban a azotar el campo magnético terrestre,
crearían inestabilidad, y que había la posibilidad de que satélites y sistemas
de energía resultasen dañados. Estando en 1999 no era difícil verificarlo
anticipado por los científicos.

Decía que el rayo sincronizador estaría llegando a nuestro sistema y estaría


afectando al Sol, haciéndolo entrar en convulsión y alterando sus polos
magnéticos. Este hecho estaría incrementando las tormentas solares y
lanzando gran cantidad de plasma al espacio. Y esa radiación, junto con lo
que nos llega directamente (otras energías), también estaría alterando los
polos magnéticos de nuestro mundo, reproduciendo las convulsiones. Y todo
ello también influiría sobre el comportamiento de quienes aquí vivimos. Esto
explicaría el por qué del comportamiento explosivo y depresivo, volcánico,
telúrico y hasta tormentoso de mucha gente. Pero recordemos que, así como
el planeta nos influye, nosotros también podemos afectar al planeta,
fortaleciendo nuestra voluntad y poder mental.

Al día siguiente, lunes 10 de agosto, día 222 del año, por la mañana, apareció
un reportaje en el prestigioso diario El Tiempo, el mismo que saldría
publicado el día 11, día del eclipse anular de Sol. Esa misma tarde me
hicieron una entrevista para la televisión en la Cadena Caracol, con el
reconocido periodista don Darío Arizmendi. El programa se llamaba: «Cara a
Cara». En ambas entrevistas aproveche para aclarar que al día siguiente el
mundo no se iba a acabar, sino que se empezaba a acelerar su
transformación, y que cada día aceleraría sus cambios, motivado por la
energía extraordinaria que estaría llegando procedente del Sol central de la
galaxia. Esta promoción sirvió para publicitar sendas conferencias que se
realizaron en la ciudad en esos días, y para tranquilizar a la opinión pública
con relación a un supuesto fin del mundo, como consecuencia de la mala
interpretación con respecto a las profecías de Michel de Nostradamus, y —
producto de la superstición— a una falsa lectura también del fenómeno
natural y cíclico del eclipse.

Por la noche hable con Olguita de cómo Nostradamus —que no sólo era
médico, sino también un gran astrónomo, astrólogo y vidente— enmarcaba
sus profecías entre acontecimientos astronómicos, que nos dieran luego la
facilidad para ubicarlos en el tiempo. Le cité algunas de las profecías, como
aquella situada en la centuria X, cuarteta LXXII que fijaba el año de «1999 y
siete meses» como el momento álgido para que algo de origen extraplanetario
ocurriera, atemorizando a la humanidad, pues se precisaba que del cielo
llegaría «un gran rey del terror». Y precisamente, el eclipse estaba
provocando mucha inquietud, aunque los siete meses señalados
corresponderían a julio y no a agosto, y el eclipse era en agosto, no en julio.
Pero hay investigadores que afirman que, como Nostradamus usaba el
calendario juliano y no el gregoriano (que aún no existía), habría una
distorsión de unas semanas que harían coincidir el eclipse con lo anunciado.
También decía esa cuarteta que «antes y después, Marte reinara en buena
dicha». La explicación a este punto estaría en el hecho de que, cada dos años
y medio, Marte, el planeta rojo, esta más cerca de la Tierra. Y ese año, entre
julio y agosto, Marte estaba en su punto de mayor aproximación. Pero nuestro
vecino planetario también simbolizaba el dios de la guerra en la Antigüedad,
por lo que resulta curioso que poco antes de la fecha del eclipse se
apaciguaran grandes tensiones, como las de Kosovo, Pakistán y la India.

En la misma centuria pero en la cuarteta LXXIV, se estaría haciendo mención


a la tensión de aquellos dos países asiáticos, que llegaron incluso a arriesgar
la seguridad del mundo al hacer detonar irresponsablemente bombas
nucleares en sus respectivas fronteras. La profecía dice:

Al término del cielo del gran número séptimo, aparecerán en el tiempo juegos
de hecatombe. No lejos de la gran edad milésima…

Y es que resultaba incomprensible cómo países herederos de una sabiduría


ancestral y de una arraigada espiritualidad estaban poniendo en peligro el
futuro de la humanidad, jugando con las armas más mortíferas que se
conocen, cuando los mismos libros sagrados del brahamanismo mencionaban
nefastas y desoladoras guerras en el pasado, con un armamento similar.

El miércoles día 11, el eclipse curiosamente empezó a ser observado en la


costa de Cornualles, en Inglaterra (lugar del nacimiento del rey Arturo). Su
cono de sombra se trasladó después al norte de Francia; luego cruzó sobre los
Balcanes y se situó exactamente sobre Kosovo, y siguió su camino hacia
Turquía, Iraq, Irán, Pakistán y la India. Algunos de estos lugares son focos de
gran tensión mundial, y otros concentran en la actualidad mucha negatividad.
Según el doctor Frank Espenak, director del laboratorio Goddard de Vuelos
Espaciales de la NASA, la duración precisa del eclipse, calculada con reloj
atómico, fue de ¡2 minutos y 22 segundos! La clave 222, una clave simbólica
continuamente reiterada en los contactos, que se relaciona con la lucha de
opuestos y podría estarnos hablando de la necesidad de equilibrar e integrar
los dos elementos del ser: lo masculino y lo femenino; lo positivo y lo negativo
en los tres planos: lo material, lo mental y lo espiritual, en una época como
esta, tan importante para la supervivencia de la humanidad.

Ese día salí en la segunda página del diario y por la noche aparecí en la
televisión, siempre tranquilizando a la gente y motivándola a pensar de una
forma optimista con respecto a nuestro futuro. Y aunque el tan anunciado fin
del mundo no tuvo lugar, los temblores se hicieron sentir con fuerza en
Chipre y en el Japón, y hasta se dieron avistamientos muy claros de dos
objetos plateados sobre Bogotá y otras ciudades del interior coincidiendo con
el eclipse.

En los días inmediatos al eclipse coincidieron otros eventos estelares, como


por ejemplo, el alineamiento de todos los planetas del sistema solar (a
excepción de Plutón) con centro en la Tierra. Era una formación astrológica
en el cielo en forma de cruz llamada «conjunción planetaria» en medio de los
signos fijos: Tauro, Leo, Acuario y Escorpión (que estarían representando los
cuatro seres delante del trono en el Apocalipsis: el Toro, el León, el Hombre y
el Águila, a la vez que a los cuatro evangelistas). Esta gran cruz sería el
símbolo del cambio dinámico, de la evolución. Este suceso sería de gran
ayuda para el advenimiento de la luz, y daría inicio a una gestación simbólica
que duraría nueve meses y culminaría entre los días 3 (día de la Santa Cruz) y
5 de mayo de 2000. Este sería un momento propicio para el nacimiento
colectivo hacia una conciencia superior, en donde habría de aflorar la
divinidad femenina dentro de cada ser humano, lo cual trae la fuerza de la
ternura, el amor y la abundancia, lo que nos daría la oportunidad de
sensibilizarnos.

Era el momento de restablecer la comunicación con la divinidad interior


mediante la intuición, haciendo trabajos internos de perdón y fortalecimiento
de la voluntad en el cambio.

También se dio la llegada en ese momento de un cometa: el Swift-Turtle, cuya


cola con chispazos produjo una lluvia de meteoritos a la que se le puso por
nombre «las Perseidas» que nos recordó el peligro potencial permanente que
existe sobre nosotros en un universo dinámico.

Después de una serie de actividades en la ciudad, viaje el día 16 durante


varias horas en autobús por un paisaje de encanto, descendiendo de
montañas verdes y redondeadas hacia la exuberante vegetación del Meta. Y
llegué a Villavicencio, donde vive nuestra querida amiga Argenis Jara, que
había organizado algunas conferencias para mi. Sabía que toda esa zona
estaba controlada por la guerrilla, y que habían hecho del secuestro su mejor
fuente de ingresos, y que hacía poco que habían asesinado a muchas personas
sin ningún motivo. Pero bien valía la pena transmitir el mensaje allí donde se
necesitaba.

El martes 17 se produjo en Turquía un sismo catastrófico que provoco la


muerte de 15 000 personas y la desaparición de otras 40 000; un desastre que
para muchas personas significo el fin del mundo, pero para otras, el
nacimiento de una nueva humanidad, basada en la fraternidad y la esperanza.
Por la televisión se veía a los médicos y enfermeros israelíes en sus hospitales
de campaña, instalados en el territorio turco, atendiendo con impresionante
sensibilidad a los heridos musulmanes. Y era interesante escuchar las
expresiones de agradecimiento de las víctimas que eran atendidas, pues ellas
entendían que lo que divide y aleja a los seres humanos es el egoísmo sectario
de unos pocos.

Estábamos en la localidad de Acacias, a las afueras de Villavicencio, en una


finca muy agradable que hacía poco había sido visitada por los paramilitares
con la intención de extorsionar a sus dueños. Nos habíamos reunido unas
treinta personas en un taller al aire libre. Uno de los asistentes era el padre
Francisco, un sacerdote franciscano que me contó que él había estado con
otros sacerdotes en diciembre de 1998 en el Vaticano, y que durante la
bendición que impartió el papa Juan Pablo II a la muchedumbre, la extendió
para los pueblos de la Tierra y ¡para los hermanos del Cosmos!, haciendo la
bendición también hacia arriba, hacia el cielo. Esto no nos debía extrañar
demasiado, por cuanto el mismo papa había declarado a comienzos de 1999
que «Darwin no estaba tan lejos de la realidad con respecto a la teoría de la
evolución de las especies»… Esto lo habría dicho acercando la postura de la
Iglesia a la teoría antropológica de la evolución de la vida. Con esto, el jerarca
de la Iglesia coincidía con la visión de sus teólogos, de que Adán y Eva no
existieron como personajes históricos, sino metafóricos; de tal manera que, en
algún momento de la evolución, Dios habría actuado directamente insuflando
en los prehomínidos una alma individual.

Un reconocimiento como este ocasionó obviamente una grave crisis doctrinal,


por cuanto si nuestros primeros padres no existieron como tales, no hubo,
«pecado original». Y si no lo hubo ¿por qué se bautiza a los niños en la
Iglesia? O ¿por qué murió Jesús en la cruz?… Podríamos interpretar de todo
esto que si no hubo pecado original, el único «original pecado» que arrastra
la humanidad es la ignorancia. Por eso Jesús decía: «Yo os daré la verdad y la
verdad os liberará…». Y es que, sabiendo que Dios es bueno ¿cómo podemos
creer que, por lo que supuestamente hicieron nuestros antepasados, toda la
humanidad estaría condenada a una eterna falta de la que ninguno de
nosotros somos responsables y que a fin de cuentas nunca existió? ¿Qué juez
de la Tierra condenaría al hijo de un delincuente, por el solo hecho de ser su
hijo?

Para remate, el papa salió con otra declaración igualmente fuerte al decir
que: «El infierno y el cielo no existen como lugares físicos, sino como estados
de la conciencia». Nosotros hemos tratado de hacer entender esto mismo a la
gente desde hace mucho tiempo, y que es que «no hay más infierno que el
que uno mismo se crea»…

Para el día 19 ya había regresado a Bogotá, en donde tuve la oportunidad de


ser invitado a la casa de un alto general de las fuerzas armadas, que, junto
con su adorable familia, estaba interesado por estos temas. En los siguientes
días viaje a la calurosa ciudad de Cali para promocionar mis libros, y allí me
encontré con mi gran amigo y hermano en el camino Fabián Ocampo y sus
queridos hijos, así como con la gente de los grupos, quienes me contaron que
el día del eclipse se había visto sobre el parque Caycedo, entre las 3 y las 4 de
la tarde, a pleno sol, dos objetos luminosos.
Otra anécdota interesante de este especial viaje a Cali fue la invitación del
gran periodista y entrevistador político Sami Jalil, hecha en su programa de
radio y para la televisión, en donde me convocó a hacer en directo en sus
programas la Gran Invocación para armonizar la ciudad y el país.
Paralelamente a mi estancia en Colombia, los grupos de la Argentina se
preparaban para lo que sería su primer gran encuentro de contacto,
anunciado a través de diversos mensajes, como aquel recibido por Alejandro
Mancilla el 14 de noviembre de 1998 que decía:

… Otra nueva etapa del contacto comienza. Estamos más allá de sus
problemas estructurales. Mas nadie queda excluido, sino contactado en su
medida y alentado en lo que es capaz de hacer, sin que nadie sea el realizador
de todo, sino todos piezas de un mecanismo.

Están comprometidos a superarse sin importar demasiado sus tiempos de


misión, más bien (lo que cuenta es) la actitud de sus corazones.

Instrucciones no les faltan como para seguir adelante. Continúen formándose


en grupos de sintonía y afinidad. Y que cada grupo, una vez preparado, se
comprometa a la realización de trabajos.

Intégrense en salidas…

Sean legítimos en sus realizaciones, sólo así atraerán la atención y serán


escuchados desde su transparencia.

… Verán los frutos de sus esfuerzos con el discurrir de los meses, y es


importante que Bariloche los reciba unidos y con mucho trabajo interno,
habiendo realizado salidas previas y tareas…

Nuevamente las fuerzas oscuras intentan deprimir al hombre (tensión en


Iraq). Pero el conflicto será desarticulado y no pasara a mayores
consecuencias…

OXALC

Durante meses se había estado preparando a nuestra gente de Argentina con


salidas a nivel nacional, convocando a los distintos grupos repartidos por el
país a participar entusiastamente. Especialmente cabe destacar la exitosa
salida de Córdoba, que fue organizada con mucho amor y entrega por Mario
Cannas, con la estrecha colaboración de Mario Heredia —ambos de Buenos
Aires—, y que tuvo lugar en el mes de Julio, en la Quebrada de la Luna, a
espaldas del famoso cerro Uritorco; a ella asistió gente de Uruguay y de
muchos puntos de Argentina. Allí se dieron importantes experiencias con
impresionantes avistamientos e iniciaciones (xendra y cristales) que
confirmaron las comunicaciones, a pesar de que no faltaron las tensiones,
producto del excesivo celo y los egos que aún nos traicionan.

Otra salida del mismo estilo realizada en el Chocón (Neuquen) había sido una
dura prueba para la integración de todos los grupos asistentes y de
autoselección para las personas, por cuanto el tiempo en el lugar de la
reunión (un paraje de la inmensa estepa patagónica, a la orilla de un lago
creado por un embalse) fue terriblemente inestable, y se llegaron a producir
incesantes lluvias y fuerte viento en una zona donde llueve muy pocas veces
al año. El mal tiempo terminó de una forma muy sospechosa el ultimo día del
encuentro, cuando salió un luminoso sol.

Algo que debemos aprender es que no solo el tiempo puede llegar a reflejar
nuestros estados anímicos, pues es una proyección de nuestro estado mental,
sino que también este puede confabularse con la acción de entidades
superiores como para probar nuestras convicciones, creando situaciones
incomodas y de presión que nos lleven a mostrarnos tal como somos, o para
templar nuestro espíritu. Todo esto para que, luego, más calmados, nos
demos cuenta de nuestros fallos y de cuanto nos falta aún para lograr un nivel
de equilibrio constante, para lo que se requiere continuidad en nuestros
trabajos de meditación y de interiorización.

Podríamos decir que cuando la meditación es más que una postura, una
palabra, una técnica o un conocimiento, es que ha llegado a ser una actitud
capaz de permitirnos llegar al entendimiento de nuestra propia verdad;
aquella que la Divinidad ha reservado para nosotros. Por tanto, por encima de
todo debemos mantener esa actitud.

Como una clara señal de lo que los Guías habían señalado en sus mensajes y
del importante evento que se estaba gestando, durante el mes de agosto se
sucedieron una serie de importantes avistamientos en San Carlos de
Bariloche, uno de los cuales fue atestiguado por el periodista del Canal 13
(local) Guillermo Fabio y su camarógrafo, curiosamente el día 13 de ese mes.
Fue en un mediodía soleado y luminoso, cuando se dirigían en un taxi a cubrir
una nota de prensa en una parte alta de la ciudad. El cielo estaba despejado,
con gran visibilidad, tan apacible que no hacía presagiar nada extraño. De
pronto observaron sobre el lago Nahuel Huapi —que en ese momento estaba
como una taza sin viento alguno— dos gigantescos objetos alargados
(cilíndricos) y verticales, como formando el numero 11, que destellaban
mostrando su consistencia metálica. Después se transformaron en nube y
desaparecieron como mimetizados con el ambiente, sin que ellos tuvieran
tiempo de filmarlos. Este avistamiento también fue captado por mucha otra
gente desde distintos puntos de la ciudad, entre quienes se encontraba Carina
Marzullo, profesora de ballet y miembro de los grupos de contacto.

El encuentro de Bariloche debía ser la suma de todo lo aprendido en los


encuentros y salidas anteriores, a la vez que un ejemplo de unidad y de
integración. El numero de participantes era limitado, pero a la vez se invitaba
a que todos los grupos seleccionaran a sus representantes, de tal manera que
todos se sintieran representados. De este modo, se dejaba a los Guías la labor
de disponer alguna experiencia extraordinaria para quienes estuviesen mejor
preparados.

Lamentablemente, el excesivo celo de algunos, así como la falta de


experiencia y organización de otros, llevo a que no todos los grupos fueran
avisados, y a que otros se enteraran mucho después o fuera de tiempo.
También se dio el caso de una poco democrática y respetuosa selección de los
participantes, lo cual produjo malestar y desunión. Por todo esto podríamos
decir que el encuentro estaba comenzando con mal pie.

El día 22 llegaron a reunirse dieciséis personas en Bariloche, y a pesar de que


fundamentalmente debía ser un encuentro para los grupos de Argentina, la
invitación se había extendido a algunos hermanos de otros países, como
Héctor Ibarra y Maru Friedkensen de México, Johnny Luciano y Rubén
Astacio de República Dominicana, y Camilo Valdivieso de Chile, quienes
llegaron a enseñar con humildad y sabiduría lo que debe ser la unión.

El grupo se instalo en unas cabañas rodeadas de árboles y naturaleza, a las


afueras de la ciudad y al borde del lago (en el Brazo Campanario), prestadas
gentilmente para la ocasión por Nelson Villegas y María Ester Yrigoyen, una
cariñosa pareja, muy comprometida con la misión y el mensaje. El resto de los
presentes eran: Silvia Verlengia, Nicolás Segovia, Oscar Borri, Alejandro
Mancilla, Leonardo Dufour, Gina Colombato, Jessica Ochoa, Carina Marzullo y
Ricardo Zapata.

Soportando un fuerte frío invernal, el grupo trabajó desde ese día en sus
meditaciones con el propósito de funcionar como una «comunidad mental», y
desarrollando temas como «la unión» y «el perdón», lo que era un sentimiento
general al reflexionar sobre los errores que se habían cometido en la
organización del evento. Más de uno se daba cuenta de que, si no estaban
unidos, no llegarían a estar conectados… Y nunca era tarde para corregir
desaciertos.

Todos debían estar dispuestos a pedir perdón y perdonarse por las actitudes
equivocadas. Además, por la importancia del momento debía darse como una
purificación, porque si se llegaba a concretar el encuentro programado, no
solo sería con los Guías, sino con la Hermandad Blanca, quienes custodian los
registros de información de la verdadera historia humana en unos retiros en
las montañas cercanas. Y curiosamente coincidió que en esos días el papa
declaro al año 2000 como el «año del perdón», de tal manera que la Iglesia
Católica pedía perdón por los errores históricos cometidos durante los dos
milenios, como por ejemplo, la Inquisición, el autoritarismo, la intolerancia,
las persecuciones, la indiferencia y la complicidad.

El martes día 24, ya se había que, según las instrucciones recibidas en los
mensajes, sólo unos pocos debían realizar la etapa definitiva de acercamiento
a los retiros interiores. Por tanto, había llegado el momento de demostrar que
la lección había sido aprendida y que el grupo estaba dispuesto a actuar con
desprendimiento y renunciar a las expectativas personales, para dar paso al
apoyo al trabajo y a la selección de unos pocos siete para que hicieran una
travesía en barco hacia una zona virgen del bosque, al pie de las montañas
nevadas y en un lugar remoto. La idea era alcanzar la supuesta ubicación de
la puerta de entrada al intramundo. El viaje se hizo contando con el apoyo de
todos los reunidos, que, como una unidad fuertemente cohesionada, supieron
apoyar a los que iban y supieron aguardar trabajando en el lugar de una
manera distinta pero complementaria. La embarcación zarpo siguiendo las
intuiciones de los expedicionarios, recorriendo durante largas horas la
inmensidad del lago, hasta que desembarcaron en una estrecha orilla al pie
de unos acantilados. Al bajar del barco que los había llevado hasta allí,
tuvieron que hacer equilibrios sobre gruesos troncos caídos cubiertos de
musgo. Desde allí tuvieron que penetrar en el tupido bosque frío, cubierto de
una espesa niebla, para luego subir por peligrosos despeñaderos fabricando
sobre la marcha su propio sendero. A medida que el grupo avanzaba, se
sentían observados, como si alguien estuviese evaluando cada paso que daban
por aquellos barrizales de nieve. Pero a la vez se sentían seguros y
protegidos, guiados hacia una suerte de lugar conocido y acogedor. Entonces,
después de muchas horas de caminata, llegaron hasta otro lago entre
montañas, donde el bosque se hacía más cerrado. Allí los pilló la noche, con
temperaturas bajo cero y fuerte viento, por lo que se vieron llamados a
montar su campamento. Mientras tanto, el grupo que permanecía a las
afueras de Bariloche fue testigo esa noche del avistamiento de un flash
luminoso sobre las cumbres.

El miércoles día 25 amaneció en el pequeño campamento con la compañía de


una hermosa águila que estuvo revoloteando en las alturas durante toda la
meditación. Acto seguido se produjo una nueva selección para continuar, por
cuanto lo duro del camino había hecho mella en más de uno, lo que provoco
que solo cuatro personas ascendieran a las montañas. Entonces percibieron
una sensación como si el tiempo se detuviera a su alrededor. Camilo, que se
sentía apenado de ir dejando en el camino a los demás, recordó durante la
caminata que en comunicaciones recibidas en Buenos Aires poco tiempo
atrás, se había recibido que solo cuatro personas llegarían al lugar, lo cual lo
reconfortó.

Jessica, una risueña joven de Buenos Aires, y la menor del grupo


expedicionario, reflexionaba durante el duro recorrido a pie por los bosques y
montañas sobre la necesidad de establecer un puente desde el corazón con
los guardianes del lugar y entre los grupos de contacto, para facilitar el
puente físico entre los mundos y las dimensiones. Esta chica, demostrando
mucho valor, iba delante con Camilo, abriendo camino, y al cabo de un rato
divisaron un nuevo lago con un paisaje de ensueño. De pronto oyó una voz en
su mente, como si le hablaran al oído, que le decía: «Adelante, deben llegar al
lugar, ya que si no es así, nosotros no bajaremos». Ella lo compartió con los
demás, lo cual los estimulo a todos a seguir, a pesar del cansancio. Entonces,
en un momento de mucho esfuerzo físico, mientras trataban de subir por una
cascada de aguas heladas, nuestra amiga llegó a observar a su lado, por entre
las cañas, la presencia tangible y real de una persona. Era alguien con una
túnica marrón, que la miró compasivamente, y así como apareció, se marcho.
La sensación que quedo en el ambiente después de esa fugaz compañía fue de
una gran paz… Un poco más adelante, Leonardo Dufour de Neuquen, casi
desfallecido, oyó en su mente que le decían de una manera muy contundente:
«Necesitamos solo dos pasos más…». Esto le dio fuerza para continuar.

La expedición siguió por ásperos caminos de montaña hasta llegar a una


cascada impresionante que formaba una especie de suelo de cristal por el
hielo, rodeado de un césped verde como pocos. Era un lugar realmente
mágico, como con un microclima especial. En la ladera de la montaña, un
poco más arriba, se veía una entrada hacia una gruta.

Desde las primeras expediciones de los españoles por la Patagonia, surgió el


mito de una ciudad oculta repleta de grandes riquezas, a la que llamaron: «La
Ciudad de los Césares». Fue precisamente Francisco César quien partió en el
siglo XVI del Río de la Plata hacia el sur, explorando durante años aquellas
latitudes, y quien oyó hablar a los indígenas en repetidas ocasiones de aquel
lugar. Tal vez este mito coincidiera con la existencia de una ciudad
intraterrestre, una de las sedes de la Hermandad Blanca, a la que el grupo
había sido invitado a acceder.

Pero el conjunto de los expedicionarios sintió que en aquella ocasión solo se


les había autorizado a llegar hasta donde habían llegado. Tenían el acceso
muy cerca, sin embargo había algo en el ambiente que les decía que no
podían pasar de allí. Era como si el excesivo peso de la responsabilidad y de
todo lo anteriormente experimentado les impidiera seguir más allá. También
la pronta lectura de los mensajes y de los acontecimientos permitieron hacer
una evaluación de lo que el grupo estaba en capacidad y en disposición de
lograr. Por fin estaban en el lugar, a la expectativa de cuanto ocurriera,
sintiéndose acompañados de todos los que habían viajado a Bariloche y de
cuantos los apoyaban en la distancia. Estaban a unos pocos pasos de la
entrada a una enigmática caverna, que desprendía una especie de poderosa
energía y, sin embargo, sintieron que habían llegado hasta donde debían. Se
habían dejado muchas cosas de lado en el camino, como otras que se habían
hecho mal y debían ser corregidas antes de dar el gran paso definitivo, por lo
que era hora de volver. Acamparon allí, y durante la noche se multiplicaron
las experiencias astrales. El retorno al día siguiente fue tan innecesariamente
vehemente y apurado que descuidaron coronarlo —como debería haber sido
—, con un paso lento y reflexivo, pero en su lugar se perdieron y tropezaron a
cada paso, lo cual hizo más engorroso el camino de regreso. Todo esto, por
gusto, porque el barco no llegó a recogerlos hasta después de dos días. Pero,
ciertamente, de todo se aprende.

Mientras tanto, el grupo que había permanecido en Bariloche, habiendo


renunciado a la participación directa material en el viaje, no dejó de orientar
todos sus esfuerzos, cadenas y meditaciones a la distancia a quienes viajaron
a las montañas, acompañándolos mental y espiritualmente.

Paralelamente a esta salida se hizo otra organizada por nuestro querido


hermano Mario Cannas. Allí acudió otra gente que no fue invitada por los
organizadores del otro encuentro, pero que igualmente estaban deseosos de
participar de la convocatoria que habían hecho los Guías. La idea era que
ambos grupos, respetándose en sus realizaciones, pudiesen estar unidos,
aunque no necesariamente juntos, estableciendo un puente para que el
planeta conectase con otros planos y dimensiones, dirigiendo a la humanidad
hacia una apertura de conciencia en el amor, la fraternidad y la paz. También
había la intención compartida por todos de activar ese lugar (Bariloche) y
conectarlo con todos los otros lugares en el mundo que guardan un
conocimiento para ser compartido.

Se trabajó en el cerro López, el cerro Otto y en el cerro de los Leones con 33


personas, y en el lugar se produjeron fenómenos extraordinarios, como la
formación de un evidente y sorprendente triangulo que envolvía la Luna, justo
cuando se había trabajado en triangulaciones de conexión con otros lugares.
Se llegó a observar también como los juegos de sombras formaban una puerta
en las montañas. Durante esa salida se trabajó mucho con meditaciones de
todo tipo, y hasta con juegos que relajaran a los asistentes. Todo esto generó
una serie de experiencias que fueron apreciadas por quienes se prepararon
para ello, que incluyeron proyecciones y algún avistamiento. Pero el error que
se cometió (yo también lo he cometido muchas veces) fue que, dando por
hecho que los Guías iban a apoyar la salida, Mario, en un arranque de
entusiasmo, no aisló al grupo protegiendo su intimidad para profundizar su
trabajo y darle seriedad, sino que invitó a periodistas de un canal de Buenos
Aires y de un canal local, los cuales solo acudieron por el espectáculo, y de
regreso a la capital, por su misma ignorancia hicieron mofa del trabajo
desarrollado. Esto nos enseña que hay que hacer caso a los Guías, que ya
habían recomendado en los mensajes de febrero de ese año recibidos en Lima
que no fuera gente de la prensa a esta actividad o a cualquier otra hasta que
ellos lo consideraran oportuno, y que, ante cualquier duda, debemos consultar
con ellos y hacerles caso en los detalles.

Precisamente, dicha comunicación decía lo siguiente:

… Aún no ha llegado el momento en que tengamos el encuentro definitivo en


que estrechemos nuestras manos con toda la humanidad y sus medios de
prensa estén allí para filmarlo, sin mayor interés que el de sellar el puente de
unión entre los mundos. En este momento hay demasiada mezquindad y
morbosidad, y no una sana intención. No se expongan al ridículo ni a ser
manipulados…

A pesar de los errores cometidos, estas personas también llegaron a vibrar en


el amor, pues tuvieron intensas experiencias, y se produjeron cambios
significativos en sus vidas, que es lo que fundamentalmente cuenta.

De regreso a Lima el 28, me puse a meditar enviando luz a Colombia, por


cuanto en esos días (martes, 31) iba a tener lugar una gran huelga nacional
armada, por lo que veríamos muy pronto de que habían servido las cadenas
de irradiación y positivización al país, realizadas con los grupos durante toda
la reciente visita.

Al final, la huelga se realizó, pero a pesar de que hubo un muerto, veinticinco


heridos y cientos de detenidos, con una hidroeléctrica capturada durante
unas horas por la guerrilla, para un país convulso como Colombia, fue menos
de lo que se esperaba.

Ya en casa, mientras estaba comentándole el viaje a Marinita, recordé que


poco antes de que me fuera de Bogotá la siempre querida Olguita me había
mostrado lo que ella había grabado de la televisión. Tenía la entrevista que le
hicieron primero en la RAI (Radio y Televisión Italiana) y luego para Televisa
de México, a monseñor Conrado Balducci, cardenal católico, importante
teólogo y amigo personal del papa, que declaraba que el fenómeno ovni es
real, y que el Vaticano esta convencido de que hay vida en el universo y de
que cabe la posibilidad de que haya seres más avanzados que nos estén
visitando desde tiempos inmemoriales. Este teólogo recordaba aquellas citas
evangélicas que decían: «Tengo ovejas que no son de este rebano»
(Juan, 10,16), y también «En la casa de mi padre muchas moradas hay»
(Juan, 14,2). El cardenal hacía énfasis en el valor del «testimonio humano»…
No puede ser que, con tantos testigos como han visto ovnis en el mundo, nada
de ello sea real.
Mientras me encontraba en Colombia, parte del grupo de Maranga, en Perú,
se había preparado para dar cumplimiento a una invitación que a la vez era
una labor encomendada por los Guías, y que había sido formulada en
comunicación (mensaje del 25 de febrero de 1999) para viajar a la «colina del
Halcón Sagrado» o también llamado «Vilcashuaman», en el departamento de
Ayacucho, en la sierra sur, lugar muy especial por las hermosas y bien
conservadas ruinas de la época inca, que incluyen hasta una pirámide
escalonada de piedra. Los participantes fueron Nimer y Carmen Obregón,
Juan y Silvia Maza, Elard y Cuckie Pastor y Miguel Morales. Ellos me
contaron a mi regreso que partieron de Lima en autobús la noche del 26 de
agosto, y que llegaron a las 7 de la mañana a la encantadora ciudad de
Ayacucho, muy cansados y algo mareados, tras muchísimas horas de
incomodidad por una ruta ascendente llena de curvas. Desde allí todavía
tenían que conseguir otro vehículo para continuar hacia Vilcashuaman, en un
viaje que suele durar cinco horas más. Al cabo de unas horas se consiguió el
vehículo, después de muchos inconvenientes. Pero resulto que este no tenía
amortiguación. Esto hizo que el trayecto fuera una experiencia
tremendamente dura, pues el camino estaba lleno de piedras y hoyos, con
muchas curvas y profundos precipicios.

Llegaron a Vilcas sobre las 10 de la noche, y el demoledor viaje había durado


otras diez horas. Una vez en la población, se dieron cuenta de que, por suerte,
las ruinas estaban a una manzana de la plaza de Armas, y lo primero que
destacaba contra la oscuridad del paisaje era la pirámide truncada. Miguel
quiso entrar en ella, pero no le fue posible. Así, todos juntos fueron por un
costado en dirección hacia una puerta trapezoidal. Delante había una
explanada, y allí montaron su campamento. En el ambiente hacía un frío
terrible, por lo que al abrigarse sentían que la ropa parecía sacada de un
congelador. Pero, a pesar de todo, pidieron permiso a las fuerzas guardianas
del lugar, e hicieron su cúpula de protección y su meditación, recordando una
comunicación que había recibido Silvia tiempo atrás que decía: «… deben
acampar bajo el árbol de las flores amarillas». Como era tarde, las sombras de
la noche habían envuelto completamente el lugar, de tal manera que a duras
penas se divisaban entre ellos; ¡cómo iban a salir a buscar un arbolito a esas
horas! Al día siguiente iniciarían la búsqueda. Así que, después de tomar algo
caliente, todos se fueron a dormir. Con el amanecer del nuevo día se dieron
cuenta de que se encontraban muy cerca del árbol de las flores amarillas; el
único árbol con flores del lugar. Eso les hizo releer la comunicación y, para
sorpresa del grupo, no solo se cumplía, sino que también les decía que «este
estaba frente a la puerta lateral»… Esta situación marcaría todo el viaje como
un común denominador, pues las comunicaciones que se recibieron se fueron
validando según iban pasando las horas, hasta el día de la partida a Lima.

Por la mañana del viernes 27, debido al fuerte sol de cordillera, decidieron no
trabajar y aprovechar para recorrer la población actual, construida sobre las
ruinas de piedra de los antiguos monumentos precolombinos. El lugar tenía
una gran similitud con el antiguo Egipto por la presencia de decenas de
puertas ciegas o simbólicas.

Mientras hacían su recorrido a pie por aquella típica localidad fueron


apareciendo muchos niños que se les acercaban con curiosidad. Y, cuando se
dieron cuenta, estaban rodeados por una excitadísima multitud de chiquillos
que se agolpaban alrededor de tan peculiares turistas y los seguían a donde
fueran. Hacia el mediodía, el grupo volvió al campamento escabulléndose de
sus seguidores, iniciando a continuación los trabajos de preparación con
mantralizaciones y meditación, esperando crear las condiciones idóneas para
recibir nuevas pautas; pero esta vez, en el mismísimo lugar, para orientar de
la mejor manera posible lo que sería el trabajo de la noche. Silvia recibió
entonces algunos indicaciones acerca de como debían hacer una ceremonia
que los llevara a activar ese centro de energía. Para tal fin, las tres personas
que habían viajado con anterioridad al Paititi formarían un triangulo en el
centro de la terraza superior de la pirámide, mientras que los otros cuatro
estarían a su alrededor y se encargarían de irradiarlos, para ayudarlos así en
la apertura. Durante el trabajo parecía que todos estaban conectados entre sí
y con los maestros, pues cada uno iba canalizando información que se
complementaba. Y así decidieron que cada uno apuntaría hacia un punto
cardinal y a un sitio especial como Puno, Cuzco, Paititi y Egipto. Trabajaron
durante toda la tarde, alternando con algunos breves descansos, y cada uno
se encargo de dirigir alguna practica, según lo sintiera.

Cuckie dirigió una visualización dirigida o proyección mental de todo el grupo


hacia un cerro llamado Pillusho, que se encontraba detrás del campamento;
cerro que les llamó la atención desde la mañana temprano por inspirar
sensaciones muy particulares. Y sin haberlo pensado siquiera, nuevamente se
cumplía otra parte de la comunicación que traían consigo, que decía: «… La
Hermandad Blanca tiene muy cerca uno de sus centros ocultos donde
antiguamente habitaban los Maestros y prestaban a los antiguos moradores
andinos salud y conocimiento. Ese lugar aún se halla en las entrañas del gran
cerro, que no es solo simbólico, y representa la conexión que establezcan la
señal de avance en su proceso de ascenso espiritual». Y sin haberse percatado
de este fragmento de la comunicación, hicieron el trabajo (luego lo
confirmarían). Mas tarde leyeron unos folletos que hablaban de
Vilcashuaman, y allí encontraron que se nombraba a Pillusho como el lugar
especial donde habitaban los Apus (espíritus guardianes de las montañas). Y
con ello encontraron la explicación a las sensaciones percibidas desde un
primer momento.

Todos estaban muy emocionados ante lo que sería el trabajo de la noche.


Caída la tarde, se abrigaron bien y acordaron entre todos que fuera Nimer
quien dirigiera el trabajo en lo alto de la pirámide. Quince minutos antes de
empezar con la labor de irradiar, trataron de conectarse mentalmente y
espiritualmente con todos los demás grupos que estaban en la distancia
apoyando el viaje, luego subieron a la antigua estructura y elevaron una
oración al cielo, encomendándose a Dios y pidiendo protección a las
jerarquías superiores. Formando el triangulo estaba Silvia, Elard y Miguel;
alrededor de ellos, los cuatro restantes: Cuckie, Carmen, Nimer y Juan, cada
uno de estos últimos, orientado hacia un punto cardinal. Entonces empezaron
las mantralizaciones de la palabra «Zin uru» (llave de puertas dimensiónales),
mientras que Nimer dirigía la apertura del centro de energía. En ese
momento todos sintieron una fuerza y una emoción tremendas.

Como una interesante anécdota podríamos decir que, cuando iniciaron las
vocalizaciones, los perros del poblado se volvieron como locos; ladraban y
aullaban a más no poder, y solo se callaron cuando se terminó el trabajo.
Cuando sintieron que se había abierto ese centro magnético, los cuatro se
volvieron hacia afuera y, con la mano izquierda apuntando a la Tierra y la
derecha hacia el frente (pauta que recibió Cuckie en el cerro Pillushu),
siempre bajo la dirección de Nimer, comenzaron a mantralizar su nombre
cósmico. Esta fue la pauta que le dieron a él, pues el nombre de cada uno
sería la llave que les permitiría irradiar toda esa energía; en su momento lo
hicieron con tal fuerza que hasta sentían que estaban gritando y, aun así,
sonaba armonioso.

Durante los trabajos en la pirámide, Cuckie —a quien le toco irradiar hacia


Egipto—, sintió como dos seres situados detrás de ella le tocaban el hombro y
con gran dulzura le decían que no se preocupara, que todo estaba bien y que
empezara a mover su mano de un lado a otro, porque ellos la ayudarían a
irradiar la energía; que confiara en ellos porque aquella noche tendrían una
iniciación. Después, los demás confirmarían haber sentido también a esos dos
seres.

Una vez terminada la irradiación, se volvieron nuevamente, dando la cara los


que formaban el triangulo, y en señal de agradecimiento mantralizarón la
palabra OM; finalizaron con un sentido abrazo. Cuando se pregunto si alguien
había recibido alguna pauta, Silvia dijo que las parejas presentes debían
formar la estrella de seis puntas, y Miguel, que había acudido solo (porque no
había ido su esposa, la muy querida y comprometida María), fue colocado en
el centro. La energía que se compartió entonces fue extraordinaria, haciendo
que más de uno cayera de rodillas, escuchando internamente una voz que les
preguntaba si estarían dispuestos a asumir el compromiso que todo esto
implica. Fueron momentos muy intensos y duros, porque eso del compromiso
es algo muy serio e implica muchas cosas… Se sentía en el ambiente que el
numero de entidades proyectadas al lugar era muy grande. Minutos después,
el trabajo terminaba definitivamente, habiéndose cumplido de la forma más
natural y espontánea. Y una vez más, se corroboraron las comunicaciones
cuando decían: «Cuando estén los siete en el lugar designado, sabrán que el
objetivo se cumplió. Aunque les parezca muy sencillo, ya han aprendido que lo
importante es estar en el lugar correcto, en la hora indicada y con las
personas idóneas»

El grupo descendió de la pirámide en dirección al campamento. Allí todos


estaban deseosos de comentar la experiencia y confrontar las
«coincidencias». Después cenaron y decidieron esperar la llegada del día 29,
ya que también les habían dicho en los mensajes: «… el 28 es el día clave, y el
29, la ratificación». Acostados en el suelo, contemplaron las estrellas,
disfrutando de aquella comunidad mental que se había creado.

De día prepararon las cosas, levantaron el campamento temprano para coger


el vehículo de regreso, pero antes aprovecharon para ir a conocer el
Intiwatana o Reloj Solar, un pequeño complejo de ruinas al borde de un lago
parecido a los Baños del Inca de varios otros lugares del Perú. En ese sitio,
hacia el que se habían sentido atraídos, hicieron un nuevo trabajo, sintiendo
como desde allí también se canalizaba y luego se irradiaba una extraordinaria
energía al país y al planeta.
El grupo volvió a Lima, adonde llegaron agotados por la pesadez de las
distancias, pero conscientes de haber realizado aquello que se había
solicitado, sintiendo y verificando en todo momento el apoyo de los Hermanos
Mayores.

Como consecuencia de los cambios planetarios anunciados y profetizados


tanto en los mensajes como en las diversas profecías, el día 7 de setiembre
tuvo lugar un espantoso sismo en Grecia, que solo duro diez segundos pero
que originó increíbles destrozos. También hubo sismos en Taiwan y en
México.

Los cambios seguirían siendo violentos en tanto que la humanidad no


entendiera que posee un sinfín de capacidades dormidas para movilizar las
fuerzas de la naturaleza y orientar los mismos cambios, pero primero en el
interior de uno mismo. El grupo estaba haciendo su parte en este sentido,
pero este trabajo debía generalizarse.

La humanidad aún no se ha dado cuenta de que las circunstancias de la vida


la han colocado simbólicamente delante de un conjunto de espejos en una
feria; algunos normales y otros deformados a propósito, en donde todos nos
reflejamos y podemos aprender a reconocernos tal como somos, si ponemos la
debida atención; o también podemos confundirnos con las distorsiones.
Nuestra tarea es ahora distinguir las imágenes distorsionadas que abundan
en la aventura de la existencia, provocando risa, pena o angustia, de las
imágenes reales; aceptándonos como somos para así modificar lo que sea
necesario rectificar en nuestras vidas. Este es el tiempo del
autoconocimiento, el tiempo de ser sinceros y honestos; este es el tiempo de
final de los tiempos, cuando había solo un tiempo, que es el real y que
depende de una apertura mental y de darse cuenta de que tenemos una
misión individual y otra colectiva que, a la vez, son inseparables, pues
conociendo la primera y realizándola damos cumplimiento a la otra.

Nunca antes como ahora, el futuro de la humanidad depende tanto del


compromiso que cada uno esté dispuesto a asumir en su aventura personal. Y
que mejor oportunidad que esta, la de un fin de un ciclo cósmico, para
cambiar y generar grandes cambios a nuestro alrededor. Por ello, no
desaprovechemos la ocasión y pongamos nuestros potenciales en acción.
EL DON DE PROFECÍA

Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó.

ECLESIASTÉS, 3, 15

Preguntadme sobre las cosas por venir.

ISAÍAS, 45, 11

La profecía es la capacidad paranormal o percepción extrasensorial que nos


permite adelantarnos al futuro. Es abrir una ventana para que nuestra visión
interna indague sobre las consecuencias de nuestro proceso histórico,
colectivo y personal. Todos la tenemos, pero dormida o, como diríamos, en
potencia. Muchas veces, esta capacidad con un grado inusual de desarrollo es
algo innato, de tal manera que, no habiendo buscado su despertar, se
manifiesta por sí sola. Aunque suele ser esporádica (no todo el tiempo), se
presenta bajo ciertas condiciones particulares que funcionan como
detonantes. Existen también casos en los que, en una cierta etapa de la vida
(la niñez y la adolescencia), a causa de los cambios en la edad (orgánicos o
energéticos), o en situaciones criticas extremas (muerte de un familiar, o un
accidente grave, o un divorcio de los padres, o una experiencia de abandono
corporal consciente), incrementan o producen modificaciones internas, que se
expresan en estados alterados de la conciencia, facilitando las
manifestaciones proféticas. También se da el caso de aquellos que logran
conectar mentalmente (telepáticamente) con entidades superiores, físicas o
suprafísicas, quienes les hacen depositarios de una revelación (profecía),
siempre con un propósito de beneficio positivo general, como es el de advertir
para corregir. Este hecho demuestra la naturaleza benéfica de dichas
entidades, ya sean maestros ascendidos, extraterrestres, ángeles o parientes
fallecidos (que destacaron en cuanto espiritualidad en su existencia pasada).

El futuro es la consecuencia de las decisiones tomadas en el pasado. Hay


varios futuros probables, por cuanto el futuro es en sí una «probabilidad» una
proyección de la línea de los acontecimientos, pero ese futuro puede ser
alterado, porque si fuese inamovible e inalterable, ¿dónde estaría lo más
sagrado que hemos recibido de Dios, que es nuestro libre albedrío?

La profecía puede ser vista como si tuviésemos una pantalla delante de


nosotros, o como una visión en nuestra mente; también puede ser sonada o
sentida, como una profunda angustia, o también como una incomprensible
alegría. En estos casos llega a ser una sensación tan honda, que
inmediatamente solemos empezar a relacionar hacia donde se orienta dicho
sentimiento o, como decimos comúnmente, tratamos de explicarnos el origen
o naturaleza de dicho «pálpito».

En la Antigüedad, en Grecia, concretamente en la localidad de Delfos (monte


Parnaso), había un pequeño santuario dedicado a la diosa Tierra (Gea), que
con el tiempo adquirió gran renombre por ser el centro de la adivinación y la
profecía. En el lugar había una extrañísima piedra cónica que muchos
intentaron robar, pero que inexplicablemente nunca pudieron. Los griegos
llamaban a esa piedra omphalos («ombligo»), por cuanto marcaba el sitio que
era considerado el ombligo del mundo[11] antiguo. Muy unido al culto de la
madre Tierra, estaba la presencia en el lugar de una serpiente pitón
(probablemente traída de África), primera guardiana y sacerdotisa de la
piedra sagrada del oráculo y que, según la mitología, fue muerta por Apolo.
Este se apodero del santuario y desde entonces la responsabilidad de predecir
recayó en la Pythia (pitonisa), quien debía beber del agua de la fuente
Casotis, masticar hojas de laurel e inhalar el gas tóxico que salía de una
grieta de la montaña, para luego, sobre un caldero de bronce lleno de agua,
ver el futuro. Aunque se dice que luego caía en éxtasis, corría hacia la piedra
del ombligo o hacia la llamada piedra de la Sibyla, para luego desde allí, dar
respuestas crípticas a las preguntas que se le hacían, y que posteriormente
los sacerdotes tenían que interpretar.

En Sudamérica también había un oráculo muy importante, ante el que


desfilaban los peregrines de los diversos remos, llevando ofrendas y
procurando respuesta a las diversas inquietudes de su pueblos, caciques y
gobernadores. Este centro ceremonial, de casi dos mil años de antigüedad, se
llamaba Pachacamac. Pacha era la Tierra, y camay, el creador, por tanto, era
el centro cultista dedicado al “Creador de la Tierra” y al “Señor de los
Temblores” y que los incas respetaron incorporándolo a su panteón de dioses.
A la llegada de los conquistadores españoles, el lugar aún era un centro muy
importante de consulta.

Sus ruinas se encuentran a unos veinticinco kilómetros al sur de la ciudad de


Lima (Perú), al lado del fértil valle de Lurín y situadas estratégicamente
frente al mar. Es un lugar entre cerros desérticos, donde se edifico una
impresionante ciudad de pirámides de adobe, que llego a tener 50 000
habitantes. Una de aquellas pirámides estaba dedicada al dios Pachacamac o
Ismay, y tenía forma de laberinto ascendente. En lo más alto estaba el
santuario, un lugar al que no podía llegar cualquiera, y en; el que el sacerdote
(que había recibido previamente las consultas de los peregrinos en la gran
plaza donde la gente aguardaba las respuestas) entraba pasando por una
puerta revestida de laminas de oro y plata, y de la que colgaban cantidad de
conchas marinas o “mullu” (de gran valor ritual y económico que eran traídas
de Ecuador). Dentro del santuario había un oscuro ídolo de madera de lúcumo
(de estilo Tiahuanaco-Huari), que tenía apariencia humana. A él se le hacían
las consultas, y otros sacerdotes detrás, amparados en la penumbra del
santuario, contestaban en nombre del dios (previamente habían consumido
algún tipo de planta alucinógena que les permitía conectar con otros planos y
contar con la ayuda de los elementos de la naturaleza).

Algunas civilizaciones extraterrestres que vienen visitando la Tierra desde


tiempos inmemoriales han buscado a personas sensibles y perceptivas, con
una cierta moralidad (algunas veces llamados profetas), para hacerlos
depositarios de un mensaje y de una serie de advertencias, que funcionan
como profecías o revelaciones procurando orientar a la humanidad hacia un
estado superior. A través de esos mensajes se ha reiterado en varias
oportunidades que el ser humano puede cambiar el futuro negativo, y que el
hecho de conocer las profecías es una suerte de advertencia para corregir los
desaciertos, porque generando nuevas causas positivas se puede modificar
cuanto ha sido anunciado. Y cualquier modificación —como decíamos antes—,
por mínima que sea, traería consigo un futuro diferente.

Un caso que demuestra lo anteriormente mencionado se relata en la historia


bíblica del profeta Jonás, quien es convocado por Yavé a profetizar en Nínive.
Él debía hacer un llamamiento a la gente al arrepentimiento y a la conversión,
por cuanto la negatividad venía creando un estado mental colectivo que
estaba atrayendo grandes calamidades a esa ciudad, donde residía la
comunidad israelita deportada por los asirios. Al principio, Jonás no quiso
aceptar dicho encargo por temor a la gente y al rey de los asirios, y huyo en
un barco a Tarsis (España —cerca de la actual Cádiz). Pero en el camino hubo
una gran tormenta y se lo trago una ballena muy sospechosa (probablemente,
un osni, es decir, un objeto submarino no identificado. Recordemos que las
naves extraterrestres tienen autonomía de movimiento tanto en el aire como
debajo del agua). Después de tres días, en que los extraterrestres habrían
procurado persuadirlo de colaborar, Jonás se convenció de que tenía que
hacer la labor de profetizar y advertir, y generó en el rey y en la gente que lo
escucharon un profundo temor y una genuina conversión, y no llego a
producirse nada de cuanto había sido anunciado.

Lo que ocurrió con Jonás nos recuerda que los visitantes del cosmos no deben
intervenir (pueden, pero no deben) directamente en nuestro proceso; en el
pasado lo hicieron (cometiendo muchos errores y arbitrariedades), pero poco
a poco las cosas han cambiado, y ha llegado el tiempo en que la mejor ayuda
es no interferir.

Recordemos que el don de profecía, como todas las facultades psíquicas, es


inherente al ser humano. Están dentro de nosotros, dormidas; no las hemos
desarrollado por ignorancia o por falta de estimulo. Durante siglos, los
gobernantes, políticos y religiosos han satanizado las facultades psíquicas o la
percepción extrasensorial porque no les conviene una sociedad en la que la
gente pudiese leerse el pensamiento o verse el aura (campo magnético o
cuerpo bioplasmático del individuo donde se ve su mayor o menor avance
evolutivo). Esta sería una sociedad sin mentira ni falsedad, donde no habría
jueces, policías ni delincuentes; donde no se podría prometer lo que no se va
a cumplir, ni señalar con el dedo a nadie cuando uno tiene semejante viga
dentro de sus propios ojos.

Para desarrollar la percepción extrasensorial, incluyendo el don de profecía o


la premonición (advertir desgracias) o la precognición (anticiparse a
cualquier suceso), lo que se requiere es saber que de hecho esto existe, creer
que uno puede llegar a desarrollarlo y querer poder hacerlo, asumiendo una
discipline mínima que nos permita estimular su manifestación. Para esto se
recomienda la práctica y disciplina de técnicas de respiración, relajación,
concentración y meditación, acompañados de ejercicios específicos de
proyección mental.

Estamos entrando en la muy mentada Era de Acuario, era de luz y


conocimiento, paradójicamente también de confusión y de desinformación. Es
una época en la que hay que revalorizar los símbolos que actúan como
activadores de nuestra conciencia. Algunos de estos activadores son las
profecías.

En la actualidad circulan un sinfín de profecías verdaderas y falsas que


hablan del fin del mundo, del final de los tiempos, del cambio de ciclo
planetario, de la variación del eje terrestre, de la tercera guerra mundial, de
tres días de oscuridad, de la invasión de los extraterrestres, etcétera. Y en
este sentido, la desinformación transita por los medios que deberían orientar
y esclarecer, como son los diarios, revistas especializadas y hasta en Internet.

Hoy sabemos más que nunca, a través de todos los mensajes revelados serios
y responsables, que el mundo no se va a acabar, sino que va a transformarse,
y que las profecías no hablan realmente del fin del mundo, sino de un “final
de los tiempos”. Pero, para que haya un fin de los tiempos, debe haber más de
un tiempo. En ese sentido, los extraterrestres nos han venido hablando en los
mensajes, desde hace más de un cuarto de siglo, de que nuestro mundo y la
humanidad se encontrarían en un tiempo alternativo, diferente del Real
Tiempo del Universo con el que deberá reconectarse pronto, para lo cual nos
estaríamos acercando vertiginosamente a ese momento. Según los Guías,
hace millones de años de los nuestros, el planeta habría sido destruido a
causa de una lluvia meteórica, tras la cual se extinguió la incipiente vida que
existía. Y como ellos tienen la tecnología necesaria para moverse a través del
tiempo y del espacio, viajaron con autorización de la Gran Hermandad Blanca
del Universo por pliegues cósmicos o túneles interdimensionales hasta aquí;
llegaron antes de que se produjera la catástrofe, y la impidieron creando con
esto un tiempo alternativo, una paradoja espaciotemporal. Se dieron entonces
las condiciones idóneas para establecer aquí un laboratorio de
experimentación que les permitiera sembrar la vida y programar el
surgimiento de vida inteligente, para que más adelante apareciera aquí una
civilización bajo patrones de conducta diferentes a los suyos, o con
variaciones significativas, capaz de lograr niveles de evolución superiores,
que les sirviesen a los Hermanos Mayores de inspiración para confrontarlos
con el suyo propio, que estaría afectado de una suerte de estancamiento
evolutivo. Esto explicaría por qué muchas veces las naves se materializan y se
desmaterializan viniendo de otro espacio-tiempo.

Existen profecías y espíritus de profecía que nos hablan de todo esto. En las
citas que he mencionado al inicio del capitulo, se habla de como el futuro esta
escrito: «… y lo que ha de ser, fue ya…» (Eclesiastés 3, 15). Como que las
cosas ya ocurrieron y se están volviendo a dar, como una segunda
oportunidad; es más, hasta se pide que se consulte: «preguntadme sobre las
cosas por venir…» (Isaías 45, 11). Pero la profecía estaba reservada para los
profetas y sacerdotes ungidos para ello; cualquiera podría recibir o canalizar,
pero no todos están preparados para hacerlo bien, con responsabilidad, una
adecuada moralidad y ética, y sobre todo saber interpretar.

Y he hablado a los profetas y aumenté la profecía, y por medio de los profetas


usé parábolas (Os. 12, 10).

Vengo ahora para darte a conocer lo que sucederá a lo pueblo en los tiempos
venideros, pues a estos tiempos se refiere la visión (Dan. 10, 14).
Y Él dijo: Oíd ahora mis palabras. Cuando haya entre vosotros profeta de Dios,
le apareceré en visión, en sueños hablare con él (Num. 12, 16).

El profeta o la profeta no es cualquier persona, sino alguien que ha sido


investido de una condición especial por la vida o la naturaleza y ha recibido la
autorización o el aval de una entidad superior, que ha hallado en el candidato
los valores morales, el equilibrio, la sensibilidad, la sabiduría, la vocación de
servicio y un nivel de consecuencia necesarios como para ser canal de
revelaciones. El que ejerce el espíritu de profecía es alguien autorizado desde
lo Alto a través de una experiencia insólita, e investido de una espiritualidad
superior:

Que nadie de vosotros ofrezca en sacrificio a su hijo haciéndolo pasar por el


fuego, ni practique la adivinación, ni pretenda predecir el futuro, ni se
dedique a la hechicería, ni a los encantamientos, ni consulte a los adivinos […]

Esas naciones, cuyo territorio vais a poseer, hacen caso a los que pretenden
predecir el futuro y a los adivinos, pero a vosotros el Señor vuestro Dios no os
permite semejante cosa (Deuteronomio 18, 10-14).

El profeta debe ser alguien que sabe bien lo que hace y conoce la procedencia
de su revelación. No hace las cosas porque sí, ni basándose en la superstición.
Su poder esta al servicio del pueblo y no de oscuros intereses, y no busca
solucionar los problemas individuales de las personas que le podrían resituar
convenientemente, sino que actúa como una «Quinta Columna», cuidando las
espaldas del pueblo de Dios.

Cuando un profeta lo hable en nombre de Dios, si lo que dijo no se cumple, no


se realiza, es cosa que no ha dicho Dios… (Dt 18, 22).

… Yo, Daniel, estaba estudiando en los libros el número de los setenta años
que había de cumplirse sobre las ruinas de Jerusalén, con forme al número de
años que dijo Yahvé a Jeremías, profeta. Volví mi rostro al Señor, Dios,
buscándole en oración y plegaria, en ayuno, saco y ceniza… (Dan. 9, 2-4).

Por aquellos días, yo, Daniel, estuve de duelo tres semanas. No comí manjar
delicado ni entró carne ni vino en mi boca, ni me ungí, hasta que no pasaron
las tres semanas. El día veinticuatro del primer mes me hallaba a las orillas
del gran río Tigris. Alcé los ojos y miré, viendo a un varón vestido de lino y
con un cinturón de oro puro (Dan. 10, 2-5).

Y ahora voy a darte a saber la verdad: Habrá todavía tres reyes en Persia, y el
cuarto acumulará más riquezas que los otros; cuando por sus riquezas sea
poderoso, se levantará contra el reino de Grecia. Pero se alzará un rey
valeroso que dominará con gran poder y hará cuanto quiera. Y cuando este en
la altura, se romperá su reino y será dividido hacia los cuatro vientos; no será
de sus descendientes ni ya tan poderoso como fue… (Dan. 11, 2-4).

Decíamos que el profeta es alguien sabio y prudente, que sigue la trayectoria


dejada por los profetas anteriores, estudiándolos, profundizando en sus
enseñanzas y profecías, y su visión o videncia es activada por su amor y
voluntad de servicio, así como por la asistencia de una fuerza superior que
suele manifestársele de forma contundente en visión o en un contacto directo.

El profeta sabe que su profecía puede verificarse y por eso siempre que las
circunstancias lo permitan, suele dar datos que se puedan comprobar, como
en la profecía de Daniel que hace referencia al numero de los reyes y su
sucesión. Como la visión se produce en tiempos del rey Ciro, el cuarto rey
sería Artajerjes I, que para someter la sublevación egipcia sostuvo contra
ellos una larga y costosa guerra. El rey fuerte de Grecia sería Alejandro
Magno, que a su muerte no dejó descendencia y sus generales se repartieron
su reino y lo desmembraron en cuatro reinos: Macedonia, Siria, Egipto y Asia
Menor. La historia nos enseña que la profecía se cumplió al pie de la letra.

ISRAEL Y EL RELOJ PROFÉTICO

Y cuando se acabe la dispersión del poder del pueblo Santo, todas estas cosas
serán cumplidas (Dan. 12, 7).

En la historia occidental, Israel es el foco hacia donde convergen las profecías


de los libros sagrados, como lo habrían sido en su tiempo y en su ubicación
geográfica, así como en su área de influencia el pueblo azteca, maya o inca si
se hubieran conservado la mayoría de los códices o documentos propios de
aquellas civilizaciones. Recordemos que los incas tenían una suerte de
escritura jeroglífica videográfica también llamada «Tocapu», conformada por
pequeños rectangulitos con figuras geométricas que se encuentran en todas
sus expresiones artísticas, desde su cerámica hasta sus vasos de madera
(Q’eros), en su ropa y telas. Pero la capacidad y el conocimiento de su
interpretación se ha perdido o ha sido ocultado.

En cuanto a Israel, la profecía del profeta Daniel advierte que cuando el


pueblo de Jacob volviese a tener un duelo donde establecer su nación y
concentrara su poder, se cumplirían todas las profecías o empezarían a
cumplirse. Veamos todo lo que ha venido ocurriendo en el mundo, a partir de
1947 y 1948, cuando Israel vuelve a tener su propio territorio y logra la
independencia: el hallazgo de los rollos del mar Muerto, el inicio de la era
moderna de los ovnis, etcétera.

Muchos son los libros sagrados en el mundo, valiosos, reveladores e


inspiradores; pero pocos reúnen tanta cantidad de profecías y de testimonios
del cumplimiento de las mismas como en el caso de la Biblia, por eso, vamos a
dedicarle una especial atención en el tema de las profecías.

Israel, para varias de las más importantes religiones del mundo, es el centro
de la aguja del reloj profético. Como decíamos, en 1948, se creo el estado de
Israel con asiento en la tierra de Canaán o Palestina, lugar que había sido
prometido y profetizado que quedaría en manos de la descendencia de
Abraham (los árabes también, son hijos de Abraham). Una nación (Israel), que
desde sus orígenes fue desmembrada y dispersada por el mundo, ahora había
sido restaurada a sus tierras ancestrales, con las consecuencias que eso
supone para el cumplimiento de otras profecías, porque era como una presa
que ahora abría sus compuertas, y con ello generaba una reacción en cadena
en el mundo. Como decíamos, veamos todo lo que ha venido ocurriendo en el
mundo desde mediados de los cuarenta en adelante.

Personajes como Enoc, Abraham, Isaac, Jacob, José, Samuel, Elías, Isaías,
Jeremías, Baruc, Ezequiel, Daniel, Oseas, Joel, Amós, Jonás, Miqueas,
Malaquías, Juan el Evangelista, etcétera, han sido profetas o protagonistas
directos de profecías. Todas estas profecías conducían al cumplimiento de un
proceso que debía iluminar al mundo y guiarlo hacia el conocimiento de la
Divinidad y del Plan de Dios para con el ser humano, que consiste en que
aprendamos a ser libres en el poder del amor, a ser capaces de optar en
plenitud de conciencia voluntariamente por el servicio y la entrega como
medio perfecto para lograr la felicidad; una historia sagrada que venía a
desembocar en la persona y la misión del Maestro de Nazaret, el Mesías
esperado pero no comprendido, el Ungido de Dios que nos recordaría a todos
cual es nuestro destino y la expectativa que sobre nosotros pesa.
Lamentablemente, el desconocimiento de las profecías, o el recuerdo parcial
de las mismas, o la falta de una capacidad de interpretación, o quizá la
conveniente manipulación de estas llevo a que no se supiese entender la
actuación y el mensaje de Jesús.

Yo soy el vidente —respondió Samuel—. Sube delante de mí al santuario, y


come hoy conmigo allí. Mañana temprano lo contestare todo lo que me
quieras preguntar. (I Samuel 9, 19).

El profeta Elías, que era de Tisbe, de la región de Galaad, dijo a Acab: «¡Juro
por el Señor, Dios de Israel, a quien sirvo, que en estos años no lloverá, ni
caerá rocío hasta que yo lo diga!» (I Reyes 17, 1).

El tiempo paso. Tres años después, el Señor se dirigió a Elías y le dijo: «Ve y
preséntate ante Acab, pues voy a mandar lluvia sobre la Tierra» (I Reyes 18,
1).

Interpretación: El vidente o profeta se encuentra revestido de un poder y


autoridad que emana de su conexión con lo trascendente, que es la que le da
la fortaleza y la sensibilidad para cumplir su ministerio. Su intención no es
castigar ni hacer sufrir, sino simplemente educar y orientar los esfuerzos del
ser humano hacia lo bueno y correcto, que es siempre lo mejor para todos.

La predicción de Elías, allá por el año 870 a. C. estaba en relación con el


avance del culto a Baal. La sequía, como una maldición divina, se produjo tal
cual, y al cabo de tres años terminó con otra profecía y junto con el culto de
los sacerdotes fenicios. Aquí nos encontramos por una parte con el culto con
sacrificios humanos (Baal), basado en la muerte y en la dependencia de los
dioses, frente a la enseñanza de un nuevo culto basado en la vida, la
abundancia y el sacrificio interior que es el que prospera por ser el dueño del
verdadero poder, el poder de la vida.

Haré de esta ciudad un ejemplo de maldición para todas las naciones de la


Tierra.

[…] El Señor fue quien me envió a hablar en su nombre, y a decir contra este
templo y esta ciudad todo lo que habéis oído. Mejorad vuestra conducta y
acciones, obedeced al Señor vuestro Dios, y él no os enviará las calamidades
que ha anunciado (Jeremías 26, 6-13).

Interpretación: Durante el reinado del rey Joaquín (año 609 a. C.), hijo de
Josías en Judá, Jeremías el profeta recibió un mensaje de Dios que transmitió
desde el templo mismo en Jerusalén, en el cual advertía la destrucción del
templo y del reino si la gente no se arrepentía sinceramente de sus actitudes.
La profecía se cumplió cuando, cuarenta años más tarde, los babilonios
arrasaron Jerusalén.

El propósito de las profecías es advertir para corregir, pero los cambios no


deben producirse por temor, sino por madurez, que es lo mismo que decir una
sincera voluntad de cambio basada en la toma de conciencia de los errores
cometidos.

En el pasado se creía equivocadamente que Dios castigaba las malas


acciones, como lo hace un padre recto que procura aleccionar a sus hijos,
pero hoy sabemos que son las leyes o principios universales que se cumplen
como consecuencia de nuestras acciones equivocadas. La ley de causa y
efecto nos enseña que uno cosecha lo que siembra. Si nuestra actitud es
negativa, las consecuencias serán a la larga igualmente negativas. Pero
podríamos preguntarnos: ¿qué ocurre en el caso de las personas y los pueblos
que no han hecho nada que justifique catástrofes naturales como un castigo o
como una ley de consecuencia? Sin que tratemos de buscar una explicación
sencilla y falta de profundidad, recordemos que otra de las leyes universales
es el principio de polaridad; otro, el del ritmo, y también está el de
generación, que nos enseñan que la vida es también aprendizaje, la mayor
parte de la veces por dolor, y que no siempre nos va a ir bien o mal en la vida,
sino que las cosas suelen ir alternándose, para darle a todo su justo valor.

Pues bien, Adonay mismo os dará una señal: he aquí que la doncella
concebirá y parirá un hijo, a quien denominará con el nombre Emmanuel
(Isaías 7, 14).

El pueblo que caminaba en tinieblas ha visto una gran luz; una luz ha
resplandecido sobre los que habitaban en país tenebroso. Has acrecentado el
júbilo, has aumentado la alegría; alégrense por ti como con la alegría del
tiempo de la siega… (Isaías 9, 1-2).

Y brotará un retoño del tronco de José y retoñará de sus raíces un vástago,


sobre el que reposará el espíritu de Yahvé, espíritu de sabiduría y de
inteligencia, espíritu de consejo y de fortaleza, espíritu de entendimiento y de
temor de Dios… [sic] No juzgará por la vista de ojos ni argüirá por oídas de
oídos, sino que juzgará en justicia al pobre, y en equidad a los humildes de la
Tierra. Y herirá al tirano con la vara de su boca, y con el soplo de sus labios
matará al impío. La justicia será el cinturón de sus lomos… (Isaías 11, 1-5).

Suscitare para ellas un pastor único, que las apacentará (Ez 34, 23).

Seguía yo mirando en la visión nocturna, y vi venir sobre las nubes del cielo a
uno como hijo de hombre, que se llego al anciano de muchos días y fue
presentado ante este. Y se le dio el señorío, la gloria y el imperio, y todos los
pueblos, naciones y lenguas le sirvieron, y su dominio es dominio eterno, que
no acabará, y su imperio, imperio que nunca desaparecerá (Dan 7, 13-14).

Pero tú, Belén Efratah, aunque pequeña para figurar entre los pueblos de
Judá, de ti saldrá El Salvador de Israel, cuyos orígenes vienen de antaño,
desde los días antiguos. Por eso los entregará hasta el momento en que de a
luz la que a luz ha de dar; entonces el resto de sus hermanos regresará a los
hijos de Israel con la majestad del nombre de Yavé, su Dios, y ellas se
asentarán, porque entonces él será grande hasta los confines de la Tierra. Y
será la Paz… (Miqueas S, 1-4).

Voz de uno que grita en el desierto: ¡Preparad el camino del Señor, rectificad
sus sendas! (Isaías 40, 3).

He aquí a mi siervo, a quien elegí; mi amado, en quien se agrado mi alma;


sobre él pondré mi espíritu, y anunciara justicia a las naciones. No porfiará, ni
gritara, ni oirá nadie su voz en las plazas; no romperá la caña cascada ni
apagará la mecha humeante, hasta que haga triunfar la justicia; y en su
nombre esperarán las naciones (Isaías 42, 1-4).

Decid a la hija de Sión: mira, tu rey viene a ti, manso, y montado en una
borrica y en un pollino, cría de jumento (Isaías 62, 11).

He aquí que voy a enviar a mi mensajero, que preparara el camino delante de


mí, y luego en seguida vendrá a su templo el Señor a quien buscáis, y el Ángel
de la alianza que deseáis. He aquí que llega… (Mal 3, 1).

Interpretación: Estas son algunas de las muchas profecías que concuerdan


con el anuncio anticipado de lo que sería después la vida de Jesús. Quien haya
leído o conozca los Evangelios podrá verificar el asombroso caso de
coincidencia o de cumplimiento de las mismas, lo cual lleva a señalar que
Jesús era el Cristo, el Mesías aguardado y que cumplió con dar su mensaje
con su vida, su muerte y posterior resurrección; un mensaje de amor llevado
hasta las ultimas consecuencias y que nos enseñó que el amor en el perdón es
la única fuerza capaz de superarlo todo, incluso la muerte.

LOS ROLLOS DE QUMRÁN

Esto será para vosotros la señal de lo que sucederá: cuando la prole de la


perversidad sea encerrada, la maldad desaparecerá ante la rectitud, como las
tinieblas ante la luz. Y como el humo se desvanece y ya no existe más, así la
maldad se desvanecerá para siempre y la rectitud se mostrará como el sol,
ordenador del mundo. Todos los que retienen los misterios de la rebeldía
dejarán de existir, el mundo se henchirá de conocimiento y jamás habrá ya en
él insensatez (Qumrán, Libro de los Misterios IQ27, 6-8).

Interpretación: En muchos libros y enseñanzas, entre los que se incluyen los


libros apócrifos de la Biblia, se hace referencia a la caída de los Ángeles a la
Tierra (extraterrestres deportados por mal comportamiento), y la acción
nefasta de estas entidades apoderándose del mundo, manipulándolo a través
de gente débil de carácter y voluntad, encendiendo en ellos sus carismas y
colocándolos en la política, la economía, los mandos militares, la moda y hasta
la música, para llevar al mundo al caos y a la destrucción (los Iluminati o
Gobierno Interno Negativo Planetario).

Gran parte de la acción nefasta se habría conseguido con la destrucción


sistemática de los grandes archivos del conocimiento humano, de tal manera
que la humanidad ha sido sumida en la ignorancia y en la superstición. El
final de dicha ignorancia, y la liberación de información contundente harán
que todo cambie, descubriendo el ser humano todas sus potencialidades, que
lo protegerán, porque como ya hemos dicho anteriormente: «La única ventaja
que poseen las fuerzas negativas o satánicas frente a la humanidad es que,
mientras que ellas conocen sus limitaciones, nosotros ni siquiera conocemos
nuestras posibilidades».

EL APOCALIPSIS DE JUAN

Juan el Evangelista, hermano de Santiago y el menor de los doce apóstoles de


Cristo, hacia el año 94 d. C., se encontraba deportado por el emperador
romano Diomiciano en la isla de Patmos, en lo que hoy es la costa turca. Allí
tuvo una visión con revelaciones proféticas que hoy por hoy siguen poniendo
los pelos de punta a más de uno. Lo interesante aquí es el desorden de las
profecías, por cuanto hay cosas que aparentemente ya han ocurrido (y hace
mucho, como la caída de los Ángeles), y que se mencionan como si fueran a
ocurrir dentro de poco o ya estuviesen pasando, y otras que aún no se han
dado, pero que se reseñan como si ya hubiesen sido o estuviesen dándose ya.
Esto se debería a la existencia de dos tiempos, uno en el que las cosas ya han
ocurrido (ciertas cosas) y otro en el que los sucesos estarían ocurriendo o a
punto de ocurrir. Hay quienes han argumentado que el lenguaje simbólico de
Juan se debe a la necesidad de que las profecías lograran sobrevivir a los
siglos, y solo llegaran a ser entendidas por aquellos llenos de discernimiento
(Espíritu Santo).

Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete
cabezas y diez cuernos… (Apocalipsis 13, 1).

Esto para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas (…] son siete
reyes… (Apocalipsis 17, 9-10).

La bestia que era y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a


la perdición (Apocalipsis 17, 11).

Interpretación: En la actualidad vivimos en un mundo inhumano en donde el


capitalismo, la globalización y la economía de mercado en vez de ser la
panacea que solucione los problemas del mundo, y nos dé un mundo sin
hambre, pobreza, analfabetismo, ignorancia y miseria, han terminado por
convertirse en monstruos que han ahondado las diferencias entre las
personas, y han sumido a una gran parte del planeta en la miseria, la
desesperanza y la ignorancia más extrema. Nuestro mundo se está muriendo,
por acción de los intereses creados de las grandes corporaciones, sin que se
van acciones definitivas en el campo de la ecología y el medio ambiente para
evitarlo.

¿Será acaso que todo esto, producto del egoísmo humano carente de valores y
de Dios, es parte de los monstruos que profetizo Juan en sus visiones? Veamos
a continuación la siguiente noticia y comparémosla con las citas del
Apocalipsis.

AFP/Denver, 22 de junio de 1997.

Los presidentes de Rusia, Boris Yeltsin, y de Estados Unidos, Bill Clinton, se


estrechan las manos después de que el primer país fue aceptado por el grupo
de los siete (G-7), que pasa ahora a denominarse Grupo de los Ocho o G-8. Los
demás países que forman el grupo son: Alemania, Japón, Francia, Canadá,
Italia, Inglaterra y Estados Unidos.

Interpretación: Hoy el gobierno visible mundial está controlado por los siete
países más poderosos de la Tierra, y recientemente han invitado a Rusia a
acompañarlos, de modo que ahora son los siete más Rusia.

¿Será acaso que la «bestia que era y que no es» hace referencia a Rusia?
¿Podría esto explicar la situación actual de ese país?

Curiosamente fue también en Denver donde, en una escuela pública, unos


adolescentes asesinaron en una terrible orgía de sangre a sus profesores y
compañeros, y terminaron muertos ellos también. Estos asesinatos se han
venido repitiendo y multiplicando en las escuelas públicas norteamericanas,
por lo que, al parecer existe una conexión satánica por Internet.

… Ha caído, ha caído la gran Babilonia […].

Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación, y
los reyes de la Tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la Tierra se
han enriquecido de la potencia de sus deleites.

[…] Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle doble según sus obras; en el
cáliz en que ella preparó bebida, preparadle a ella el doble.

Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y


llanto, porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy
viuda, y no veré llanto; por lo cual en un solo día vendrán sus plagas; muerte,
llanto y hambre, y será quemada con fuego […].

Y los reyes de la Tierra que han fornicado con ella, y con ella han vivido en
deleites, llorarán y harán lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su
incendio, parándose lejos por el temor de su tormento, diciendo: ¡Ay, ay, de la
gran ciudad de Babilonia, la ciudad fuerte; porque en una hora vino tu juicio!
Y los mercaderes de la Tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque
ninguno compra más sus mercancías […].

Porque en una hora han sido consumidas tantas riquezas. Y todo piloto, y
todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar,
se pararon lejos; y viendo el humo de su incendio, dieron voces diciendo:
¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad?

Y echaron polvo sobre sus cabezas, y dieron voces, llorando y lamentando,


diciendo: ¡Ay, ay de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el
mar se habían enriquecido de sus riquezas; pues en una hora ha sido
desolada! (Apocalipsis 18, 2-19).

Interpretación: Sabemos que es mucho más fácil interpretar profecías a la luz


de acontecimientos que ya se han dado que sobre sucesos que aún tienen que
ocurrir, por cuanto siempre existe la posibilidad de que entren en escena
situaciones impensadas o inimaginadas que podrían hacer girar
sorpresivamente el panorama mundial.

El 11 de setiembre de 2001, Nueva York, la ciudad más cosmopolita del


mundo, ubicada en la isla de Manhattan, una versión moderna de la Babel
(«donde Elohim confundió las lenguas») o de la Babilonia bíblica («donde
había profusión de lenguas diversa») que encontraron los judíos cuando
fueron deportados por Nabucodonosor, rey de los babilonios allá por el año
580 a. C., sufrió el ataque terrorista más grave y violento de la historia, que
colapsó a toda la nación norteamericana y conmociono al mundo entero, al
tiempo que producía el descalabro de todas las Bolsas internacionales. Cuatro
aviones comerciales de compañías estadounidenses que hacían rutas
domesticas fueron secuestrados previamente por terroristas y utilizados como
misiles, aprovechando que estaban cargados de combustible, contra objetivos
muy importantes y a la vez simbólicos (emblemáticos) del poder de Estados
Unidos. Uno de estos aparatos no llegó a su destino, ya que cayo a tierra en el
estado de Pennsylvania. El avión se incendio y con el murieron todos los
tripulantes, pasajeros y terroristas que iban a bordo. Dos de los aviones
impactaron contra las torres gemelas de Nueva York, y las destruyeron por
completo, y un tercer avión se estrelló en Washington, contra el edificio del
Pentágono, sede de alto mando de las fuerzas armadas, y provocó el incendio
de una parte significativa de sus instalaciones.

La nación entera quedó paralizada por el caos y el pánico, lo cual afectó a las
comunicaciones y a todos los servicios, sobre todo en La «Gran Ciudad» o
«Gran Manzana». Se calcula que unas seis mil personas de unas sesenta y
tres naciones distintas murieron en el ataque. Sólo en las torres gemelas,
símbolo del poderío económico de Estados Unidos y centro neurálgico de la
globalización (que esta sumiendo a tantas naciones en la pobreza más
extrema), trabajaban cuarenta mil personas. Estas torres tenían 110 pisos
cada una y 417 metros de altura. Después de incendiarse como consecuencia
de los impactos, se desplomaron como un castillo de naipes.

La terrible pesadilla se inició a las 8.45 horas, cuando la torre norte recibió el
primer impacto de un avión Boeing 767 de American Airlines. El edificio se
incendio y una gran parte de los ocupantes del edificio, todos los pasajeros
del avión y los enajenados secuestradores murieron como consecuencia de
ello. Posteriormente se comprobó que los secuestradores eran comandos
suicidas, fanáticos religiosos, seguidores de un líder desquiciado que hacía
solo unas semanas había prometido desde Oriente una guerra a muerte
contra Occidente, representado por Estados Unidos.

Tan solo dieciocho minutos después del primer desastre (¡qué curioso que
esto coincida con el capitulo 18 del Libro del Apocalipsis!), se produjo otro
cuando un avión similar, aunque este de la compañía United Airlines, se
estrello contra la otra torre, y en los incendios producidos multitud de gente
quedo atrapada en los pisos altos. En una hora, la torre sur se desplomó en
medio de una espesa nube de humo, polvo y escombros que oscureció el cielo
como si fuera de noche. Al poco rato se desplomó la otra torre, lo cual hizo
desplomarse también otros edificios cercanos como si fuesen fichas de
dominó. Como consecuencia de esto, murieron otras muchas personas que
estaban trabajando en las tareas de rescate.

Estados Unidos había llegado a concentrar el poder económico, político,


social y cultural del mundo, actuando como un imperio que se había hecho
con innumerables enemigos y con otros muchos amigos por conveniencia o
temor. Y Nueva York era la capital de todo ello, el corazón y el centro de todo
ese poder que demostró ser fácilmente vulnerable.

Se puede relacionar lo sucedido con la profecía del Apocalipsis que señala


«La Caída de Babilonia», primero porque se dice de ella: «La Gran Ciudad»,
que es una versión moderna de dicha ciudad, y porque allí se encuentran los
contrastes más dispares, desde lo más refinado de la cultura hasta lo más
bajo y perverso de la decadencia. Esta urbe concentra una gran población
judía (quizás más que ninguna otra en el mundo, a excepción de las ciudades
de Israel), llegada a ella como inmigrantes, huyendo de la persecución de la
que fueron víctimas repetidamente. Esta es la ciudad en la que más idiomas
se habla, y la que posee una mayor población multiétnica, que se ha ido
concentrando en ese lugar en busca de oportunidades que se les han negado
en sus países de origen, donde políticos y gobiernos corruptos son
reemplazados o colocados en función de los intereses del mismo poder central
que los expolia. Lamentablemente, Estados Unidos, una nación llamada a
luchar por un orden justo e igualdad de oportunidades, ha promovido durante
muchísimos años el terrorismo y la inestabilidad política a su conveniencia, y
ahora está cosechando el producto de su actitud equivoca. Y las
circunstancias se presentan óptimas como para que reaccione y deje de
cosechar enemigos, cambiando de actitud, demostrando madurez y dando
ejemplo de equidad en la búsqueda de la justicia y la Paz.

Resulta evidente, para quien quiera verlo, que en la profecía del Apocalipsis
se habla de una gran ciudad «donde los mercaderes de la Tierra (de todo el
planeta) se han enriquecido de la potencia de sus deleites» es decir, que es el
paraíso de las transacciones comerciales, que se creía invulnerable y que no
conocería el duelo: «Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré
llanto». Esto coincide con lo recientemente ocurrido cuando se menciona el
dolor, la incredulidad y la conmoción producida por los acontecimientos de
cuantos lo presenciaron en el lugar y a nivel mundial. En las Escrituras se
hablaba de un terrible incendio devastador y de una nube de polvo que se
extendía sobre todo, cubriéndolo y alzándose hasta el cielo: «cuando vean el
humo de su incendio». También se menciona la brevedad de lo ocurrido,
cuando se precisa que la duración de los acontecimientos iba a ser más o
menos de una hora «en una hora vino su juicio»; «porque en una hora han
sido consumidas tantas riquezas»; «en una hora ha sido desolada». A
continuación se detalla la interrupción de los movimientos bursátiles: «hacen
lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus mercaderías».
Asimismo, se aclara que la ciudad está sobre el mar (Manhattan es una isla):
«Y todo piloto, y todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que
trabajan en el mar, se pararon a lo lejos, y viendo el humo de su incendio,
dieron voces, diciendo: ¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad?». Aquí
vemos que se hace referencia a los marinos que recorren el mundo entero y
conocen las ciudades más importantes, por lo que se declara que no hay otra
ciudad sobre el mar que tenga comparación con esta. Además, se advierte del
polvo que cubría a la gente cuando dice: «Y echaron polvo sobre sus cabezas,
y dieron voces llorando y lamentando». Otro detalle importante que podría
aplicarse en la interpretación de la profecía para el caso concreto de Nueva
York es que los hechos ocurrieron mientras los canales de televisión lo
estaban retransmitiendo en directo. Las televisiones se encontraban
cubriendo las imágenes del primer impacto cuando se produjo el segundo, por
lo que el mundo entero pudo contemplar el desastre en el mismo momento en
que sucedía. El hecho de que fuese contemplado por todos también estaba
previsto, pues en la profecía se dice que todos los reyes de la Tierra lo verían,
y ¿cómo podría ser esto posible sin el recurso moderno de la televisión, que
traslada al televidente al escenario de los sucesos?

Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran
cadena en la mano.

Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató


por mil años, y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para
que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años. Y
después de esto debe ser desatado por poco tiempo (Apocalipsis 20, 1-3).

Interpretación: El Apocalipsis nos invita a creer en el triunfo final de la luz.


No estamos solos, nunca lo hemos estado ni lo estaremos. Los Hermanos del
Cosmos se han replegado en la actualidad, esperando que la humanidad
encuentre en sí misma el camino hacia la trascendencia. La ayuda que nos
pueden brindar en este momento es el apoyo indirecto para que nosotros,
estimulando y trabajando nuestra intuición, unamos los estabones de la
cadena, y accedamos definitivamente al conocimiento del Plan Cósmico
(véanse mis obras El Libro de los Guardianes y Vigilantes de Mundos) , la
verdadera historia de la humanidad, donde nos descubriremos como el
resultado de un experimento genético extraterrestre, de más de una
hibridación y mestizaje, de supervivientes de colonias espaciales, naufragios
estelares y hasta deportaciones de alienígenas a nuestro mundo.

Este apoyo indirecto consiste en mantener el planeta en una cuarentena


espacial para que cualquiera no pueda llegar hasta aquí, y menos aún con
malas intenciones. También es parte del apoyo el hecho de motivarnos a
conectar con los lugares y con quienes tienen el conocimiento oculto (la
Hermandad Blanca de los Retiros Interiores), para lo cual se han venido
multiplicando los viajes hacia lugares remotos y solitarios donde, si llevamos
con nosotros la llave correcta (conocimiento e intuición o sensibilidad),
podremos abrir las puertas hacia el tesoro de la información, que nos dará el
poder y la fuerza para ayudar a inclinar la balanza hacia la luz.

La humanidad recibirá mucha información dentro de muy poco tiempo, y será


tanta, que mucha gente no estará preparada ni querrá ver, por cuanto su
edad evolutiva no posee la madurez adecuada ni le permite percibir más allá.
Dentro de poco accederemos a un conocimiento que durante mucho tiempo se
nos mantuvo oculto. Y como la única ventaja que tienen las fuerzas de la
oscuridad sobre nosotros es «que mientras que ellas conocen sus
limitaciones, nosotros ni siquiera conocemos nuestras posibilidades», la
balanza se inclinará al expandirse las conciencias de muchos. Y no se necesita
que cambien muchos para que cambie el planeta. Se necesita constancia y
perseverancia en aquellos dispuestos a cambiar e inspirar cambio en los
demás. El conocimiento de todo esto hará que las fuerzas satánicas o
negativas queden sometidas a la humanidad por mil años, al cabo de los
cuales, y con la ayuda de algunos disidentes espaciales extraterrestres,
querrán liberarse aquellos que están atrapados, y entonces se podrá llegar a
producir la llamada batalla final. Pero como para pelear se necesitan dos, si la
humanidad trabaja el amor en el perdón y en el conocimiento, probablemente
nosotros sellemos con nuestra actitud la trascendencia y el cumplimiento del
Plan Cósmico, y se produzca una redención incluso entre quienes actuaron
negativamente en las más altas esferas. Esperemos estar a la altura de las
circunstancias y las expectativas.

LOS MAYAS

Como hemos dicho anteriormente toda la información de la que disponemos


acerca de los mayas es gracias a cuatro «códices» o libros en corteza de árbol
(papel de amate) que lograron sobrevivir a la destrucción de los
perseguidores de idolatrías en el siglo XVI. Uno de los pocos libros que
sobrevivió es el llamado «Códice de los Eclipses» (que se encuentra en la
ciudad alemana de Dresde), donde están profetizados estos eventos
astronómicos hasta el siglo XXI con una precisión impresionante. En este
códice se anunciaba, entre otros, el eclipse del 11 de Julio de 1991,
simbolizado por un trono de huesos humanos, que podrían señalar el
momento del descalabro del poder imperante (¿quizá la crisis del Partido
Revolucionario Institucional [PRI]?), enmarcándolo dentro de un suceso muy
importante, el regreso a la Tierra de los extraterrestres, por cuanto la
profecía decía:

Ay, de la Tierra… el final de los guerreros jaguar,

el inicio de la Nueva Era, resurgirá de las cenizas… la vida y la muerte…, la


Nueva Era,

donde regresaran los Señores de las Estrellas.

Interpretación: El 11 de Julio de 1991 sobre la ciudad de México, una de las


más pobladas del mundo, apareció un ovni justo cuando la gente se
encontraba observando un eclipse que había sido muy anunciado. El
avistamiento empezó a las 13.18 horas y terminó a las 13.31, por lo que duró
trece minutos, y en todo momento jugó con esa clave numérica. Y recordemos
que el numero trece era sagrado para los mayas, porque significaba las trece
lunaciones del calendario lunar o calendario de la fertilidad. A partir de ese
día se inició la oleada ovni más impresionante que se haya registrado sobre
país alguno; una oleada que continúa con intensidad.
Otro de los eclipses que estaba anunciado era el que tenía que acontecer el
día 11 de agosto de 1999, según nuestro calendario, y que vendría
acompañado de una profecía que decía que con dicho eclipse la humanidad
entraría en el llamado «Salón de los Espejos», donde debíamos aprender a
observarnos a nosotros mismos tal como somos para entender la necesidad de
un cambio y emprenderlo. Se anunciaba el tiempo del «Cahuac» o la tormenta
del final de los tiempos, que sería un período muy violento de
redimensionamiento que conduciría a una gran transformación de todo
cuanto nos rodea, por cuanto la Tierra entraría en una cuarta dimensión.
También los mayas señalaron que esta sería la Era de la Madre, durante la
cual se activarían los aspectos femeninos que deben ser equilibrados en la
humanidad, esto es, nuestra relación con el planeta (la Madre Tierra) y con
ello lo que significa en profundidad lo femenino: el amor, la vida, la
abnegación, la fidelidad, la intuición y la sensibilidad. O aprendemos a
convivir con la naturaleza en armonía, o la naturaleza se purificara de nuestra
presencia haciéndonos desaparecer.

Según los mayas, cada cambio de ciclo, nuestro sol (Kinich Ahau) se
conectaba con el sol galáctico (Hunab Ku) a través de un rayo sincronizador a
manera de latido cósmico (que es emanado hacia toda la galaxia). Este rayo
sincronizador o energía extraordinaria habría empezado a llegar con fuerza
entre el 11 de julio de 1991 y 1992, marcando los últimos veinte años del ciclo
(un katun) y haciéndonos entrar en el «tiempo del no tiempo».

Como hemos dicho, los mayas lanzaron una serie de profecías que tomaban
como punto de partida el eclipse de agosto de 1999, cuando quedarían trece
años para realizar los cambos de actitud de la humanidad e integrarnos con el
planeta. El numero trece señala la muerte como transformación, por lo que
tendremos que estar dispuestos a afrontar una muerte mística para un
renacimiento también espiritual; esto evitaría la muerte colectiva física
(extinción de la humanidad).

Según estas profecías, con el inicio de la Era de la Madre y de la mujer, la


humanidad encontraría cada vez más esperanza, nos acercaríamos al final de
los miedos, y tendríamos la posibilidad de trascender o de terminar con el
mundo. La cuenta atrás terminaría el día 22 de diciembre del año 2012, según
nuestro calendario, cuando tendría que producirse el «Giro del Tiempo», que
supondría la conexión de nuestro tiempo con el Real Tiempo del Universo.
Esto tendría que ocurrir como consecuencia de una toma de conciencia que
nos elevaría vibracionalmente, entrando en sintonía y en armonía con el
planeta y su cambio dimensional.

LA PROFECÍA DEL PACHACUTI

La leyenda del Pachacuti hace referencia a un relato mencionado a los


cronistas por los ancianos de las Panacas reales (clanes incas), que
informaron que tras la muerte del Inca Túpac Yupanqui, jefe del clan de los
Amaru («serpiente»), su hijo Huayna Cápac ascendió al trono. En ese
entonces (finales del siglo XV), uno de los «pacos» (astrólogo-astrónomo) le
hizo al gobernante un oráculo, diciéndole que con su reinado se iniciaban
quinientos años de purificación para la Tierra, el mundo se vería envuelto en
una terrible oscuridad, y desaparecería la luz en la cabeza visible del imperio,
el propio inca.

El rey desestimo el anuncio, pues lo considero un mal agüero sin fundamento.


Al poco tiempo debía viajar de urgencia hacia Ecuador, ya que allí se había
dado una insurrección de los indios cañaris. Viajó acompañado de su hijo y
heredero al trono Ninan Cuyuch, coincidiendo en ese entonces con la llegada
de los conquistadores europeos a la costa norte de Sudamérica, quienes
traían sin saberlo un virus que acabaría con más de un millón de personas,
entre ellos el propio inca y su heredero. Esta enfermedad mortal y
desconocida en los Andes era la viruela.

El Imperio inca se extendía por todo Ecuador, parte de Colombia, todo Perú,
todo Bolivia, la mitad de Chile y el norte de Argentina. Pero su población no
superaba los trece millones de personas, lo cual era muy poco para un
territorio tan vasto. Por tanto, la muerte de un millón de personas era algo
más que significativo.

A la muerte del inca, la nobleza del Cuzco, los llamados «orejones», por tener
la costumbre de deformarse las orejas con unos grandes aretes bastante
pesados, decidió nombrar un heredero de entre los trescientos hijos que tenía
Huayna Cápac con concubinas y princesas. La decisión recayó sobre Huáscar,
pero los ejércitos imperiales acantonados en Ecuador tenían su propio
candidato: Atahualpa, hijo del inca con una princesa quiteña. Como en la
época de la decadencia del Imperio romano, cuando las legiones nombraban a
sus propios césares, aparecieron dos gobernantes en escena que trajeron
consigo una guerra civil que acabo con la vida de otro millón de personas. Y
como dice el refrán: «A río revuelto, ganancia de pescadores». Por lo que los
españoles consiguieron que gran cantidad de otros pueblos sojuzgados por los
incas vieran en ellos el cumplimiento de la profecía del retorno de Viracocha
(el dios blanco), y buscaran liberarse apoyándolos. En ese momento uno de
los hijos del rey fallecido, y hermano de Huáscar y Atahualpa, llamado
Choque Auqui («Príncipe Dorado»), busco sobrevivir al holocausto de su
civilización refugiándose en las selvas del Manu (oriente), en la ultima ciudad
sagrada construida por su abuelo Amaru Tupac Yupanqui, Quañachoai o
Paititi, en el valle de la Luna Azul, consciente del cumplimiento de la profecía
y con la esperanza de poder preservar lo que quedaba de la luz hasta que se
cumpliera el tiempo del cambio. Esto significaba que la luz y la cabeza
desaparecieron junto con el inca, que era el Intipchurin («hijo del Sol»),
sumiendo al imperio en tenebrosas tinieblas de confusión y desesperanza.
Pero esta luz volvería a aparecer, quinientos años después, cuando según la
profecía de los Q’eros, el ultimo Intihuatana («reloj solar») fuese destruido o
dañado. Un Intihuatana era un lugar donde no solo se hacían observaciones
astronómicas, sino que literalmente allí «se amarraba al Sol», controlando su
periodicidad. Romperlo o dañarlo sería como liberar el tiempo definitivamente
(quizás el tiempo alternativo al que esta sujeto nuestro planeta); pero, sobre
todo, lo que se liberaría sería aquello que había quedado amarrado y oculto
durante cinco siglos.

Es interesante relacionar esto que he venido mencionando con un hecho


insólito. A los pocos días de que el ingeniero Alberto Fujimori se
autoproclamara presidente por tercer mandato consecutivo en Lima (Perú),
en unas elecciones fraudulentas como no se habían visto en mucho tiempo,
una compañía que estaba haciendo un anuncio publicitario en la ciudadela de
Machu Picchu fue protagonista de un terrible accidente.

Resulta que la majestuosa ciudadela de Machu Picchu, que se encuentra en


los Andes orientales, es el lugar donde se hallaba el ultimo reloj solar intacto,
que no fue destruido por los extirpadores de idolatrías católicos, que creyeron
ver en estas piedras, no observatorios astronómicos, sino adoratorios del
demonio. Esta mágica ciudad fue descubierta en 1911 por el arqueólogo
norteamericano Hiram Bingham, de la Universidad de Yale. Al lugar nunca
llegaron los conquistadores españoles; fue abandonada poco tiempo después
de la conquista, y la vegetación de la selva la fue cubriendo lentamente.

Volviendo a la compañía en cuestión, instalaron una grúa sobre la zona más


elevada de la ciudadela, que es donde se encuentra la piedra del reloj solar,
para hacer desde allí tomas aéreas. Pero la estructura metálica cedió por el
peso y por lo inestable del suelo, se rompió y se desplomó pesadamente sobre
el monumento, por lo que este se rompió. Esto coincidió con el hecho de que,
a los pocos días, fue difundido por televisión un video comprometedor que
hizo caer el gobierno de Fujimori.

Recordemos que en 1990 mí país se encontraba sumido en el caos y la


anarquía; estaba empobrecido, destruido y sin esperanza. Después de un
gobierno corrupto e ineficiente, hubo elecciones y los partidos de la oposición
se enfrentaron a la derecha peruana, representada por el laureado escritor
Mario Vargas Llosa, apoyando entre todos a un desconocido en el ámbito
político (pensando quizás que sería una persona fácilmente manipulable).
Esta persona predestinada para emprender el despegue, es decir, para sacar
al Perú hacia adelante, fue el ingeniero agrónomo y profesor de matemáticas
en la universidad Alberto Fujimori, hijo de inmigrantes japoneses y nacido ¡el
Día de la Independencia de Perú! (28 de Julio). Durante los primeros cinco
años de su gobierno, el país supero la guerra, desapareció la guerrilla, y la
inflación se redujo del millón por ciento al uno por ciento. El país fue
reconstruido en poco tiempo y modernizado con carreteras e inversiones.
Había desaparecido el miedo a la violencia terrorista y guerrillera, pero poco
a poco había aparecido otro temor: el temor a un gobierno policiaco capaz de
encarcelar a cualquiera por una simple denuncia. Bastaba con que alguien
fuera contrario al régimen para que el aparato judicial se ensañara con dicha
persona. La imagen de carácter y de voluntad le permitió a Fujimori
perpetuarse en el poder durante diez años, aunque el segundo mandato
presidencial fue muy negativo, y se retrocedió mucho respecto a lo que se
había avanzado. Apareció la corrupción, producto del exceso de poder, la
malversación de fondos públicos y la ausencia de fiscalización, y el país se
sumió nuevamente en el caos. En cuanto al numero diez es el que se relaciona
con los ciclos que terminan y los que empiezan; si no, recordemos: diez fueron
las plagas de Egipto (un ciclo de esclavitud en la ignorancia que terminaba), y
diez fueron los Mandamientos de la Ley de Dios (un ciclo de liberación en el
conocimiento que se iniciaba). Después de diez años, Fujimori no debía
continuar, sin embargo el poder marea y corrompe, y lo llevo a hacer todo
tipo de trampas, fraudes y manipulaciones para perpetuarse y ocultar un
sinfín de arbitrariedades y actos dolosos que se habían venido cometiendo en
el ejercicio del mando. Pero la profecía se abría paso para su cumplimiento.
Como parte, de la luz que volvía: ¡Todo llegaría a saberse!…

Como decía antes, sabemos que la luz sale por Oriente y se dirige hacia
Occidente, pues en la época Inca, el Oriente era el Antisuyo: la selva, la
jungla, donde se refugio Choque Auqui (el «Príncipe dorado») o Inkarri, y se
convirtió en Otorongo o «jaguar» (véase mi libro El umbral secreto ). De esta
manera, la luz salía por Anti, al mediodía era Inti y por la tarde era Conti. Al
ser Fujimori un «oriental», venía a ser ¡un hijo del sol naciente en el imperio
del sol! Él fue la luz de la esperanza que apareció en el momento justo, pero
que no podía permanecer solo como amanecer… ¡No se puede detener el reloj
de la historia!

En las elecciones del año 2000, se presento como contrincante de Fujimori un


candidato de raza puramente indígena, llamado Alejandro Toledo, natural de
Cabana (Ancash). No debemos dejarnos engañar por el apellido español, por
cuanto los apellidos eran tomados muchas veces de las haciendas y las
reducciones a las que habían pertenecido sus ancestros en la época colonial.
Toledo era un economista graduado en las más importantes universidades de
Estados Unidos que había salido de la condición más humilde y se había
abierto paso con muchísimo esfuerzo. Era la primera vez que en quinientos
años un candidato puramente indígena disputaba el gobierno y la dirección
del país. Esto le daba al momento un carácter mágico profético milenarista.
Era lo que llamaríamos ¡un buen augurio!

Pero toda la maquinaria del Estado fue utilizada para amedrentar a todos los
candidatos, amenazándolos, desprestigiándolos, interviniendo sus teléfonos,
impidiendo que aparecieran en los medios de comunicación, bastante
controlados por la extorsión bien manejada por el Sistema de Inteligencia
Nacional que todo lo dominaba. Y se llegó a fraguar un fraude muy descarado
a la hora de las elecciones, ya que se invirtieron los resultados, que
favorecían a Toledo. Todo esto creo un clima de inestabilidad y tensión
terrible en el país, que trajo consigo manifestaciones, reclamaciones
populares y todo un estado de insurrección, que permitió que el cuarto poder
que es la prensa, representado en unos pocos valerosos periodistas
independientes, se atreviera a dar a conocer informaciones de fraudes
diversos, así como que se difundieran videos comprometedores en donde se
veía claramente el pago que se hacía a candidatos de la oposición para que se
pasaran a las filas del gobierno.

Cuando peor se estaban poniendo las cosas al destaparse un sinfín de hechos


delictivos cometidos por la gente allegada al gobierno, que sumió al país en
una nueva crisis (crisis de credibilidad), apareció en la escena política un
joven coronel, cuyo nombre era Ollanta Moisés Humala Tasso. Este hombre
lideró a finales de octubre un golpe militar en la sierra del sur del país, en los
departamentos de Moquegua y Tacna (que corresponden al Collasuyo de la
época de los incas, porque hasta Arequipa era el Contisuyo), y se rebeló ante
la corrupción del gobierno en un mini-golpe militar tomando la población
minera de Toquepala con tan solo nueve hombres del grupo de Artillería
Antiaérea 501, junto con su hermano Antauro, que era un mayor en la
reserva. Su levantamiento, aunque pequeño, fue profundamente simbólico y
la noticia corrió como un reguero de pólvora y logro la solidaridad de toda la
población campesina de las montañas de esos departamentos. Esto fue la gota
que colmó el vaso y produjo el suficiente revuelo como para presionar a las
autoridades y a la opinión pública a definirse, apurando el desenlace de la
crisis, que terminó con la huida del país del asesor presidencial Montesinos y
el asilo, de Fujimori en Japón; este fue destituido por el Congreso Nacional
por «incapacidad moral».

El joven comandante Humala tenía nombres muy sugerentes que podrían


vincularlo a las profecías. Por una parte, «Ollanta», quien según las historian
legendarias y la obra literaria Ollantay, era el nombre del mejor general del
inca Pachacutec, el Gran Conquistador. A este inca se le había aparecido el
dios Viracocha como un hombre blanco, vestido con una túnica blanca, que le
ciñó la corona imperial y lo nombró Sapan Inca («soberano»), con lo cual
salvó milagrosamente al Cuzco de la invasión de los chancas. Ollanta se
enamoró de la hija del Inca, Cusicoyllur («estrella de la alegría»), con quien a
escondidas tuvo una hija. Al ser de origen humilde, el inca rechazó a su
general y lo mandó castigar, pero como era su mejor hombre en el campo
militar, nadie podía vencerlo, y solo mediante una traición pudo ser
capturado. A la muerte del soberano, el hijo de este y hermano de la princesa
los perdonó. Del nombre de este general viene el de la ciudad de
Ollantaytambo.

El otro nombre de este militar era Moisés (nombre del liberador del pueblo
elegido por Dios para cumplir una gran misión), y su apellido, Humala
(recordemos que Uma significa cabeza, y Umala se traduce como «siempre la
cabeza»). Al haber desaparecido hace quinientos años la cabeza del imperio
(Atahualpa fue condenado a la pena del garrote; algunos dicen que fue
decapitado y otros degollado), es la cabeza la que tiene que reaparecer y
liderar.

En la profecía del Pachacuti se habla de la aparición primero de un Inkarri


(«el inca que vuelve») falso y transitorio, y luego de otro cuya condición
particular es que nunca habría viajado fuera del país y sería de origen
indígena (¿quizás Ollanta o Antauro Humala?). Resulta interesante añadir
otro elemento simbólico a esta historia, como es que, una vez instaurado el
gobierno transitorio por parte del Congreso de Perú, el comandante Humala
depuso las armas y se entregó a la autoridad militar, la misma que lo
encarceló en el castillo Real Felipe, en el puerto del Callao, ultimo baluarte de
la colonia española en el país y en Sudamérica. Esto fue percibido como una
trampa por parte de la opinión pública, que mayoritariamente había apoyado
el gesto valiente y digno de este joven militar. Y fue también gracias a la
opinión pública que al cabo de tres días fue liberado y reivindicado.

A finales del año 2000, Perú había nombrado a Valentín Paniagua como
presidente suplente ante la vacante dejada por Fujimori. Precisamente, el
doctor Paniagua fue elegido por haber sido presidente del Congreso, ante el
reemplazo y la renuncia de los miembros de la mesa directiva anterior.
Permaneció en el cargo tan solo ocho meses (el ocho es el numero que
corresponde a la madre o Mama Paccha), al final de los cuales entregó la
banda presidencial en Julio de 2001 (séptimo mes, que es el numero de la
perfección y la espiritualidad) a quien resulte ganador de las elecciones.

Paniagua nació en el Cuzco y uno de sus padres es boliviano. Paso su infancia


en Chuquisaca (¡Choquesaca!, lo cual coincide con el nombre del príncipe
Choque), y esto lo vincula con la raza aymará. A este respecto, cabe destacar
que existen dos versiones de la fundación del Imperio inca. Una es de origen
aymará; y habla de la salida de Manco Cápac y de Mama Ocllo del lago
Titicaca (entre Bolivia y Perú), en un trono dorado (¿una nave?). La otra es de
origen quechua, y habla de la salida de cuatro clanes de unas cavernas del
cerro Tamputoco, en Pacaritambo (Cuzco). Según la profecía y los
acontecimientos, primero debía aparecer un presidente provisional que en sus
orígenes tuviese sangre aymará, quechua y española, cosa que ocurrió al
haber nacido y vivido el doctor Paniagua en el Cuzco; después, tendría que
aparecer el gobernante definitivo.

También es interesante destacar que Alejandro Toledo, en su campana


electoral, dejó que se utilizara en torno a su imagen el símbolo de la
«Chacana», la cruz andina de cuatro brazos iguales, y la denominación Inca
Pachacutec, «el conquistador». Y su esposa (antropóloga de origen belga-
israelí), difundió y relacionó el termino «Pachacuti[12] » como «el liberador o
redentor» con la trayectoria política de su esposo, rescatando el mito
milenarista de la vuelta de Inkarri (inca-rey). Otro detalle interesante e
insólito es que en las elecciones hubo una candidata mujer, con nombre de
virgen (Lourdes Flores Nano), quien hasta el final tuvo muchas posibilidades
de triunfar. Y aunque no era indígena, sí era mestiza (su padre era de
Huanuco), y podría haber representado en el juego de símbolos la figura
femenina de la Madre Tierra.

Hoy el panorama ya está aclarado, y el doctor Toledo ha sido nombrado


presidente constitucional del país, con lo cual se ha cumplido una parte
significativa de la profecía del Pachacuti. A continuación veremos cómo van
evolucionando los acontecimientos, y cómo se están sucediendo las cosas. Los
símbolos que se están moviendo demuestran que se está materializando lo
anunciado hace cinco siglos, aunque como una oportunidad, porque esta
profecía es positiva y porque muchas personas estamos trabajando en este
sentido para que llegue a concretarse. Por tanto, tendrá que ser lo mejor para
el país y para todos.

En la ceremonia de la ascensión al poder del presidente Toledo (celebrada


curiosamente en el Machu Picchu), se hizo un ritual ancestral del «Pago a la
Tierra», algo que nunca había hecho dignatario alguno. Y curiosamente
fueron trescientos los invitados a la ceremonia en la ciudad turística,
recordando los trescientos hijos del inca Huayna Cápac.

Pero ¿será Toledo el verdadero Pachacuti o falta poco para que llegue el
definitivo? Si una de las condiciones era que no hubiese salido nunca fuera
del país, este detalle no se cumple con Toledo. Habrá que esperar aún más
entonces y leer en los acontecimientos. Y hasta surge la pregunta: ¿podría ser
que el espíritu y el alma de un imperio perdido pudieran ser incorporados en
un individuo y lo transformaran? Recordemos que, al estar en la época de la
luz, no se puede hacer nada oscuro que no vaya a ser sabido y que podría ser
castigado.

Una noticia reciente, que ha coincidido con el ascenso al poder de Toledo, ha


sido el descubrimiento arqueológico del túnel que unía el antiguo Coricancha
o Templo del Sol del Cuzco (actual convento de Santo Domingo) con la
fortaleza de Sacsayhuaman. Recordemos que habría sido por este túnel por el
que Choque Auqui se habría fugado hacia el Paititi, llevándose el mayor
tesoro de los incas: su conocimiento y su sabiduría, a las selvas del Manu
(Madre de Dios), desde donde debía volver a su tiempo, que podría ser este.

Algo muy importante con respecto a las profecías es el hecho de que estas no
se agotan necesariamente en una sola lectura, o que si se llegan a cumplir ahí
se termina todo, sino que estas pueden llegar a mantener un carácter de
atemporalidad. Pueden cumplirse, como decía, con un hecho especifico, pero
en algunos casos pueden estar haciendo referencia a más de un
acontecimiento distante en el tiempo y en el espacio. Como las profecías
también suelen aplicarse y complementarse independientemente de donde se
hayan recibido, citemos con relación al Pachacuti a Michel de Nostradamus,
en su III centuria, cuarteta XCIV, que dice lo siguiente:

Dentro de quinientos años se tendrá en mayor estima al que fue el ornamento


de su tiempo. Luego, en un golpe gran claridad dará, que por el cielo los hará
muy defensores.

Aquí podríamos interpretar que Nostradamus nos estaría hablando de si


mismo y de sus profecías, que serían valoradas quinientos años después; pero
también podríamos relacionarlo con que durante quinientos años no se tendrá
en cuenta la figura del inca (que tiende a desaparecer bajo el gobierno
colonial español), ni la gloria del Imperio Inca, que fue el ornamento de su
tiempo. Pasado ese tiempo, de pronto saldría de nuevo a la luz su mensaje de
reivindicación para los pueblos indígenas, y que tendría muchos informadores
en las ondas (periodistas de medios de comunicación como la radio y la
televisión) que serían defensores de este nuevo movimiento, así como de la
libertad de expresión, la democracia y el estado de derecho en Perú,
apoyando a Toledo contra la dictadura de Fujimori. Y así fue.

SAN MALAQUÍAS Y LOS PAPAS

El Tercer Milenio ha enfocado el interés mundial sobre los hechos y


actuaciones del primado de la Iglesia Católica, el papa Juan Pablo II, que en
un esfuerzo sin precedentes viajó a Israel y a los países de la región pidiendo
perdón por los errores históricos cometidos por la Iglesia. El ejemplo que esto
ha supuesto y la actitud que nos sugiere apunta hacia un cambio que viene
anunciado en las profecías.

San Malaquías vivió entre los años 1094 y 1148 y fue primado de la Iglesia en
Irlanda. A él se le atribuyen una serie de profecías sobre los papas, pues
estableció el numero total de pontífices que accederían al trono de san Pedro,
contando desde su época hasta un supuesto o probable fin del mundo (o del
sistema actual).

Su obra ha llegado a nuestros días como un apócrifo del siglo XVI, donde se
enumeran 267 papas. Juan Pablo II es el numero 265, y tan solo restan dos
más antes del gran cambio. Haciendo un análisis de las coincidencias entre
los nombres simbólicos aportados por san Malaquías y el comportamiento de
cada uno de estos pontífices, así como los símbolos que rodearon sus vidas, se
puede apreciar una correspondencia y coincidencia muy acertada. En cuanto
a los nombres simbólicos de los dos últimos serían estos: «La Gloria del Olivo»
y «Pedro Romano».

San Malaquías habla del fin de la Iglesia como institución, más no como
fuerza espiritual, para llevar a la humanidad hacia un gran cambio; este
hecho iría precedido por el reinado de dos últimos papas. Si lo recordamos,
recientemente hubo tres papas en un solo mes: Pablo VI, Juan Pablo I y Juan
Pablo II; por tanto, tendríamos que pensar que los acontecimientos, que se
encuentran de por sí bastante acelerados, podrían precipitar muchas cosas.

«La Gloria del Olivo» podría hacer alusión a la rama de olivo que llevó en su
pico la paloma a Noé al final del Diluvio Universal. Esta rama de olivo era la
señal de la reconciliación de Dios con el hombre. Por eso, podríamos suponer
que ahora que han sido nombrados 44 nuevos cardenales o príncipes de la
Iglesia, muchos de ellos latinoamericanos, el próximo papa podría ser
latinoamericano, de algún país donde se haya dado después de cruentas
guerras la reconciliación entre su gente, como es el caso de El Salvador y
Guatemala. El Salvador, país con un nombre tan peculiar y cuya capital es
San Salvador, es más pequeño de Centroamérica y también el más prospero,
por lo que lo podríamos encontrar en el cumplimiento de la profecía
siguiente:

Pero tú, Belén Efratá, pequeña entre las ciudades de Judá, de ti saldrá El
Salvador… (Miqueas 5,1).

Recordemos que las profecías pueden llegar a ser atemporales, de tal manera
que no se agoten en un solo significado o cumplimiento.

Con la persona de Juan Pablo II se busco reivindicar a los países del bloque
socialista y comunista, donde la Iglesia había sido perseguida. Pero ahora
podría ser el mejor momento para fortalecer la imagen de una iglesia de los
pobres, identificada con los países del Tercer Mundo, y quien mejor que
alguien de un país centroamericano o alguien de una raza tan sufrida como la
negra (tomando en cuenta quizás el color de la aceituna). Hoy por hoy existen
varios cardenales de raza negra en la Iglesia, así que también podría ser el
caso. Pero esto podría encender fuegos xenófobos, y Su Santidad podría ser
asesinado inmediatamente (¡Dios no lo quiera!), lo cual aceleraría la llegada
del ultimo jerarca: «Pedro Romano».

La Iglesia empezó con un grupo de hombres y mujeres judíos. Jesús fue el


primero de ellos, luego se universalizó con Pablo; pero originalmente eran
judíos. ¿Qué pasaría, entonces, si el ultimo pontífice fuera de origen judío?
Recordemos que entre los cardenales hay más de uno de familia judía
conversa, y recientemente se ha producido un conveniente acercamiento de la
Iglesia Católica con el judaísmo, con ocasión, como decíamos, del fin del
milenio, al reconocer Juan Pablo II que el pueblo judío fue el elegido por el
Señor para mostrarle el camino al ser humano. Esto traería consigo el fin de
un ciclo y el comienzo de otro nuevo.

LAS CENTURIAS DE NOSTRADAMUS


Michel de Nostradamus nació en Saint-Rémy, cerca de Salón, el 14 de
diciembre de 1503. Su familia, asentada en Francia, había huido de Italia por
las persecuciones contra los judíos, y terminaron convirtiéndose al
cristianismo. Nostradamus estudio primero en Aviñón y luego medicina en
Montpellier. Destacó en matemáticas y en astronomía. Desde muy pequeño
manifestó tener grandes dotes de percepción extrasensorial en lo relativo a la
precognición y la premonición. Se cuenta la anécdota de que le anunció a un
fraile que encontró en la calle, y el cual le era desconocido hasta aquel
momento, que llegaría a ser papa. Esto ocurrió tal cual. Nostradamus tuvo
ocho hijos, cuatro varones y cuatro mujeres. Destacó en medicina, por cuanto
dominaba la herboristería y la química, lo que le permitió salvar muchas vidas
en las épocas de la peste. Pero el destino abatió la desgracia sobre él, ya que
salvó a muchos y no pudo salvar a su propia familia. Esto lo llevo al
aislamiento, en donde vio activarse todo su potencial paranormal
premonitorio y precognitorio. Escribió una cantidad asombrosa de profecías,
agrupadas en centurias y cuartetas, redactadas en un lenguaje críptico
simbólico, para que no cualquier persona pudiera entenderlas. De esta
manera se libró de la persecución de la Inquisición y de la destrucción de su
material, y supo enmarcar sus profecías dentro de acontecimientos
astrológicos y astronómicos que él dominaba muy bien. Murió el 2 de Julio de
1566 a la edad de sesenta y dos años.

Entre sus profecías hemos seleccionado algunas que consideramos muy


importantes para entender y proyectarnos en el momento actual de la
humanidad:

Centuria V, cuarteta LIII.

La ley del Sol y de Venus reprimidas, apropiándose el espíritu de profecía, ni


uno ni otro serán escuchados

por el Sol se mantendrá la ley del Gran Mesías.

Interpretación: La ley del Sol podría ser el conocimiento, la luz de la


sabiduría, mientras que la ley de Venus sería la del amor. En la actualidad
vivimos en una época en la que, a pesar de que existe información y mucho
conocimiento, hay mucha falsedad y mentira. El conocimiento y la
información verdadera es poder, que es ocultado por los gobiernos y las
grandes religiones, y solo circula la información distorsionada, manipulada e
intoxicada con medias verdades y mentiras. Y en todo esto hay muy poco
amor. Incluso a través del cine y de la televisión se proyectan falsos valores
que están contaminando a la humanidad, haciendo perder la perspectiva de lo
que debería ser el verdadero amor que respeta, comprende, tolera y todo lo
perdona.

Dentro de la represión que significa el ocultamiento de información, y la


prédica de los falsos valores, tenemos también la publicación y la promoción
de ciertas profecías o de su contenido, pero de forma tendenciosa y
manipuladora, lo cual promueve más el escapismo que el compromiso con el
cambio.
Evadirse, más que encontrarse, parece ser la consigna de la sociedad
moderna.

Se nos advierte que ni la luz del conocimiento ni el verdadero amor serán


escuchados (debemos reaccionar y cambiar esto). Pero como la «luz siempre
resplandece en la oscuridad», y más aún el amor, que es la ley del Gran
Mesías, siempre hay esperanza.

Centuria III, cuarteta XLVI.

El cielo nos presagia,

con claras señales y por estrellas fijas,

que con su repentino cambio se aproxima el tiempo…

Interpretación: En los últimos años previos al fin del milenio hemos asistido a
una multitud sobrecogedora de eventos astronómicos, desde eclipses,
cometas, tormentas solares, cambios en el Sol y en el eje terrestre, hasta a la
llegada de peligrosos meteoritos. Todo ello parece estar anunciando el fin de
un ciclo y el comienzo de otro, coincidiendo con profecías de pueblos antiguos
como los mayas, los aztecas, los incas y otros, que hablaban de una época de
oscuridad que culminaría para empezar el nuevo día de la humanidad. Pero
para ello teníamos que estar atentos a las señales de los cielos.

Centuria I, cuarteta XCI.

Los Dioses se aparecerán a los humanos porque serán autores de gran


conflicto, antes de que el cielo visto sea libre de espadas y lanzas se
producirán mayores penalidades hacia el lado izquierdo.

Centuria II, cuarteta XCV.

Entre los hermanos mayores habrá muerte y discordia…

Interpretación: El 2 de julio de 1947 cayo un ovni en la granja de William Mac


Brazel, en Nuevo México (Estados Unidos). A los pocos días fue encontrado
lejos de donde había impactado y fue recogido por el ejercito norteamericano,
que se encargo de informar a la prensa de que habían capturado los restos de
una nave extraterrestre. Aunque después el Pentágono ordenó que los
oficiales involucrados se retractaran (obligándolos a hacer el ridículo), y
declararan que había habido un error y que solo había sido un globo
meteorológico. Pero resulta que ese día habrían caído dos naves, lo cual no
fue un accidente. Estos aparatos de factura extraterrena fueron derribados
por otras naves (no por un radar experimental norteamericano) que están
cuidando nuestro planeta de quienes no vienen con buenas intenciones.
Porque en el universo hay de todo, al igual que hay de todo en nuestro
planeta.

Centuria X, cuarteta XII.


Elegido papa, una vez electo será burlado, súbitamente de pronto
rápidamente emocionado y temeroso por demasiado benévolo provocado a
morir un temor extinguido guía la noche de su muerte.

Interpretación: Existen muchísimos rumores acerca de que Juan Pablo I,


hombre autentico y valiente, fue asesinado (lo cual no es una novedad en la
tradición del Vaticano), con lo cual no se le permitió llegar a un cambio de
luna (no duro un mes).

Centuria I, cuarteta LXIV.

De noche el Sol creerán haber visto cuando el cerdo semihombre se pueda


ver, ruido, canto, batalla, en el cielo un batir percibido y bestias brutas se
oirán hablar.

Centuria II, cuarteta XIII.

El cuerpo sin alma no esta ya en sacrificio, el día de la muerte trasladado al


nacimiento. El espíritu divino hará feliz al alma contemplando al Verbo en su
eternidad.

Interpretación: ¿Explosiones nucleares? ¿Manipulación genética?


¿Trasplantes de órganos? Todo lo que menciona Nostradamus en estas
cuartetas, en su lenguaje cabalista, simbólico y críptico, pero a veces tan
diáfano y especifico, ha venido ocurriendo. Aunque muchas veces se ha tenido
que aguardar a que ocurran ciertos acontecimientos, para que, haciendo
asociación de ideas, podamos relacionar lo que se dijo con lo que sucedió.
Hoy vemos, por ejemplo, que se están utilizando cerdos, a los que se les
insertan genes humanos, para conseguir crear las condiciones adecuadas
para realizar trasplantes de órganos y piel que no sean rechazados. Podemos
imaginarnos lo que debe de haber en la actualidad en los grandes
laboratorios, las terribles e indecentes monstruosidades que se habrán
creado.

También nos aporta un dato interesante con respecto a la clonación, por


cuanto nos habla del «cuerpo sin alma» que no permite ganar los méritos que
aportaría quizá la aventura kármica o lo reencarnación administrada por los
«Señores del Karma» o los «Guardianes del Destino», que serían las entidades
espirituales que rigen los nacimientos. Además, sin control, cualquier tipo de
entidad podría entrar en ese cuerpo con el peligro de que sean los bajos
astrales más cercanos al plano físico, los que lo ocupen como un tenebroso
Caballo de Troya. Esta situación de ninguna manera ayudaría a estas
entidades, al contrario, las perjudicaría aún más vibratoriamente; y expondría
al resto de la humanidad a un peligro mayor, teniendo que alternar con las
entidades incorporadas.

Centuria I, cuarteta IV.

Bajo el contrario clima babilónico será tan grande el derramamiento de


sangre, que en Tierra, mar y aire, el cielo será inocuo. Sectas, hambres,
reinados, pestes, confusión.
Centuria X, cuarteta LXXXVI.

Como un grifo llegará el rey de Europa acompañado de los de Aquilón.

Con rojos y blancos conducirá un gran ejercito, que contra el rey de Babilonia
irá.

Interpretación: A mediados del año 1990, los ejércitos de Iraq invadieron


Kuwait y dieron inicio a la guerra del Golfo Pérsico. Iraq se encuentra en
Mesopotamia, donde existió en su momento la ciudad y el imperio de
Babilonia. Durante la guerra, a causa de los bombardeos y sabotajes, se
destruyeron tuberías en el mar que llevaban petróleo, lo cual contamino el
océano y las plantas desalinizadoras de agua. Igualmente, se incendiaron a
propósito más de seiscientos pozos que contaminaron terriblemente el aire.

Las Naciones Unidas, lideradas por Estados Unidos, quien rescato Europa
durante la segunda guerra mundial con sus inversiones, y con la compañía de
Inglaterra, Alemania y aún Rusia (los rojos), atacaron a los ejércitos de Sadam
Hussein y los obligaron a retroceder.

Centuria II, cuarteta XCVI.

Luminaria ardiente en el cielo, de noche será vista…

Centuria II, cuarteta XCII.

Fuego dorado bajado del cielo en tierra visto,

golpeado del alto nacido, viene a ser algo maravilloso…

Centuria II, cuarteta LXXXI.

Por fuego del cielo la ciudad casi abrasada…

Interpretación: En los últimos años se han multiplicado los fenómenos


celestes, pero especialmente los eclipses y los cometas. Estos últimos han
venido preocupando al ser humano más de la cuenta. Recordemos que, en
1994, el cometa Shumaker Levy 9 casi chocó contra la Tierra, pero felizmente
cambió su rumbo y se dirigió hacia Júpiter. Allí se fragmentó y fue absorbido
por el enorme planeta. Hubo testimonios de observadores que afirmaban
haber visto a otros cuerpos diferentes acompañando los trozos del cometa y
supervisando su eliminación. ¿Tal vez sea que, al haberse producido en los
últimos años cambios significativos en el panorama mundial, nuestro estado
mental lo alejo? ¿Habrán sido los extraterrestres los que nos echaron una
mano, impidiendo que no solo no chocara contra nosotros, sino que también
terminara desapareciendo sin causar daños a nadie? El tiempo lo dirá.

Centuria I, cuarteta XLV.

En cierta parte de sectas, gran castigo al delator, bestia en teatro, monta el


aparato escénico,
del hecho antiguo ennoblecido el inventor, por sectas el mundo confuso y
cismático.

Centuria II, cuarteta LI (sectas y asesinatos).

De la misma secta muchos serán muertos…

Interpretación: En los últimos años hemos visto multiplicarse los escándalos


vinculando a ciertas sectas con escándalos sexuales, económicos y hasta
asesinatos en masa, o suicidios colectivos. Pero hubo un caso en particular,
protagonizado por un pastor norteamericano económicamente muy poderoso
y con gran influencia sobre la gente por sus apariciones en televisión. Este
señor llamado J. Swaggart había echado de su iglesia a otro de sus pastores,
acusándolo de inmoralidad. Este, a su vez, pago a un detective privado para
que siguiera a Swaggart, y descubrió que el reverendo era un enfermo
degenerado, ya que de vez en cuando se ocultaba en un hotelucho, donde le
pagaba a una prostituta para hacerle toda clase de aberraciones delante de la
pequeña hija de esta.

El reverendo fue descubierto públicamente, y lloró delante de las cámaras,


diciendo que se arrepentía. Quizás el arrepentimiento no era muy sincero,
porque no quería perder el inmenso monopolio que había creado con las
aportaciones de su crédula e ingenua comunidad. Pero ¿puede ser posible que
Nostradamus lo profetizara cuatrocientos años antes?

Centuria X, cuarteta LXXIV.

Al terminó del cielo del gran número séptimo aparecerán en el tiempo juegos
de Hecatombe no lejos de la gran edad milésima…

Interpretación: Durante los años 1999 y 2000 hemos asistido a una terrible y
revivida pugna entre la India y Pakistán, por problemas fronterizos y
religiosos. Se ha llegado a poner en peligro la seguridad del planeta, y hasta
su propia existencia, al hacer estallar (como si fuese un juego) bombas
nucleares en sus respectivas fronteras. Y eso que en la literatura vedanta ya
se habla de la utilización en el pasado de armas nucleares, con las nefastas
consecuencias que ello comporta. Además, uno hubiese esperado algo
diferente de países con semejante tradición mística. Poco tiempo después
tuvo lugar en la India un terrible terremoto que se cobró cientos de miles de
vidas, y precisamente muy cerca de la zona de las explosiones.

Centuria X, cuarteta LXXII.

El año mil novecientos noventa y nueve y siete meses del cielo llegará un gran
rey de horror;

resucitará el gran rey de los mongoles;

antes y después Marte reinará en buena dicha.


Interpretación: Decíamos que Nostradamus era un gran astrónomo y
astrólogo, de tal manera que supo enmarcar sus profecías entre eventos
astronómicos, o simplemente como vidente, leer en aquellos sucesos. Como él
se regía por el calendario Juliano y no por el gregoriano, que se oficializó
después de su muerte, encontraremos en esta profecía un aparente error de
concordancia. Hay unos quince días de margen de error o diferencia entre un
calendario y otro, lo cual haría coincidir la fecha del acontecimiento
profetizado.

Aquí se habla del eclipse que tuvo lugar el 11 de agosto de 1999 y del
alineamiento planetario que se sucedió a continuación. Ambos hechos fueron
percibidos por la humanidad como algo malo, tenebroso, que hasta produciría
horror. Hubo gente que se suicido a causa del eclipse y el alineamiento.

El planeta Marte se acerca a la Tierra cada dos años y medio, y precisamente


durante los meses de Julio y agosto, Marte estuvo más cerca de la Tierra.
Además, Marte era considerado en la Antigüedad el dios de la guerra, y antes
del eclipse como después de este hubo muchos conflictos en el mundo, como
lo de Kosovo, Chechenia, India y Pakistán.

Centuria I, cuarteta XCII (desconfiar ).

Bajo el mandato de uno la paz será por doquier aclamada, aunque poco
después, pillaje y rebelión.

Interpretación: Si bien es cierto que una profecía tan general es aplicable


muchas veces a todos los corruptos en general, recientemente en Perú la paz
fue proclamada por Alberto Fujimori, presidente del país. Había luchado
frontalmente contra la violencia guerrillera y la había derrotado. Pero
después el país quedó sumido en el más terrible caso de corrupción de su
historia, y se produjo una rebelión colectiva contra su doloso gobierno.

Centuria VI, cuarteta XCVII.

El cielo quemará a cuarenta y cinco grados, el fuego se aproximara a la gran


ciudad nueva, al instante una gran llama dispersa saltará, cuando se quiera
probar a los normandos.

Interpretación: A cuarenta y cinco grados de latitud norte se encontraría más


o menos Nueva York (entre los paralelos 40° y 45°) «la gran ciudad nueva»
que fue alcanzada por el terrorismo internacional en uno de los atentados
más violentos y condenables de la historia, como fue el ataque con aviones
comerciales secuestrados transformados en bombas humanas a los más
importantes edificios de la cosmopolita ciudad de los rascacielos. El
presidente George Bush hijo, aparentemente asesorado por esoteristas,
estuvo tiempo antes insistiendo en la necesidad de llevar a cabo el proyecto
del «Escudo Espacial Antimisiles» tal vez porque pensaba que la profecía de
Nostradamus se cumpliría bajo la convencional forma de cohetes balísticos. A
los pocos días (también en setiembre de 2001) hubo en Francia un aparente
accidente que produjo una gran explosión que se cobra muchos heridos.
Centuria V, cuarteta VIII.

El fuego será dejado vivo, el muerto escondido, dentro de los globos horribles
y espantosos, de noche sobre la ciudad naval será convertida en polvo. La
ciudad arderá, lo que favorecerá al enemigo.

Interpretación: El incendio generado al estrellarse los dos aviones


comerciales abarrotados de pasajeros en Nueva York atrapó vivos a una gran
cantidad de empleados de los edificios de las Torres Gemelas, produciendo
una destrucción dantesca que incluso redujo a cenizas los cadáveres. Y el
panorama posterior, al derrumbarse los edificios, fue de una tenebrosa y gran
nube de polvo. Semejante destrucción favoreció a los autores intelectuales del
hecho criminal, pues no se pudieron encontrar evidencias de su
responsabilidad directa.

Centuria V, cuarteta LXV.

Alguien que avanzará súbitamente causará un gran miedo, a algunos notables


que se esconderán: y la dama ardiente desaparecerá de la vista y poco a poco
los grandes se enojarán.

Interpretación: La existencia de terroristas educados y bien preparados en


comandos suicidas, capaces de inmolarse de la forma en que lo hicieron en
Estados Unidos, sin ningún escrúpulo, era algo desconocido. A raíz de los
acontecimientos, el pánico se extendió entre los viajeros de todo el mundo, de
tal manera que las aeronaves vieron mermados sus vuelos hasta cifras
alarmantes. El temor se extendió de tal manera durante el acto terrorista de
Nueva York que el presidente Bush y los más importantes miembros de su
gabinete fueron protegidos y escondidos. La Gran Ciudad quedo sumida en la
ruina, producto de los incendios, y los edificios fueron cayendo uno tras otro.

Todo esto creo una indignación general que llevo a la reunión de las naciones
más poderosas para formar una coalición frente al terrorismo como nunca
antes se había visto.

Centuria VI, cuarteta XCVI.

Una Gran Ciudad será abandonada a los soldados, nunca hubo un tumulto
mortal tan cerca ¡oh, qué horrenda mortandad se acerca! Ni una sola ofensa
será perdonada.

Interpretación: Después del terrible atentado terrorista, la ciudad de Nueva


York fue sitiada por el ejercito para evitar desmanes y cualquier otro
atentado, y al mismo tiempo posibles cómplices en Tierra. Al pie de los
edificios derrumbados, la gente, atontada por las explosiones, el estruendo de
los derrumbes, el humo, el polvo y la asfixia, formaba tumultos sin saber
adónde ir ni que hacer. En los telediarios, la presencia del presidente
estadounidense aseguraba que no habría perdón para tan grave ofensa y
crimen.

Centuria 1, cuarteta XXIV.


En una ciudad nueva, pensativo para condenar, el pájaro de presa al cielo se
ofrece: después de la victoria a cautivos perdonar […]

Interpretación: El atentado de Nueva York estuvo tan bien planeado, que al


hecho le siguieron las dudas en señalar a los culpables, por falta de
evidencias tangibles, tan necesarias en la justicia norteamericana, que
incriminaran a tal o cual líder. Sin embargo, poco a poco iban apareciendo los
nombres de los pasajeros de los vuelos siniestrados, algunos de los cuales
pertenecían a naciones en cuyo territorio existen campos de adiestramiento
de terroristas, y que habían hecho horas de vuelo en academias
norteamericanas de aviación, ante las mismísimas narices de la CIA, el FBI y
NSA. Estos no tan improvisados pilotos, a pesar de su preparación y
formación, eran suicidas, y había varios a la vez en cada avión, que
equivocadamente ofrecieron al cielo, a un dios alejado del amor, su cruento y
estéril sacrificio. En los aeropuertos se sucedieron los arrestos de muchas
otras personas que coincidían con el mismo perfil de los posibles
secuestradores, pero ante la falta de pruebas hubo que soltar a varios de
ellos.

Centuria III, cuarteta LXXXIV.

La Gran Ciudad será desolada, de sus habitantes ni uno solo podrá vivir en
ella: muralla, sexo, templo y virgen violados, por hierro, fuego, peste y cañón,
el pueblo morirá.

Interpretación: Nueva York quedo, como bien decía la profecía, «desolada».


Todo lo que había en aquella ciudad, síntesis del mundo y del sistema,
catedral del capitalismo donde conviven los mayores contrastes, fue
violentado por los terribles acontecimientos del 11 de setiembre del año 2001,
y quedará como un recuerdo imborrable en las mentes de cuantos lo vivieron
en directo o a través de la televisión.

Centuria V, cuarteta IV.

De la comarca de la Arabia Feliz, nacerá un maestro de la ley de Mahoma,


que vejará España y conquistara Granada, y luego por mar al pueblo ligústico.

Interpretación: El panorama del futuro de la humanidad aparece tenebroso si


no se enfoca la necesidad de realizar cambios con la actitud adecuada. Y es
que la humanidad debe comenzar por ser consecuente con su base moral y
sus principios y valores tan venidos a menos. Es el momento idóneo para dar
pasos significativos hacia la integración, la solidaridad y la hermandad, si no,
el fundamentalismo basado en el fanatismo sectario propio de la miseria y la
ignorancia (a veces muy arraigadas) puede llevar a una confrontación entre
Occidente y Oriente. Recordemos que algunos terroristas islámicos podrían
haber adquirido en el mercado negro armas nucleares de los deteriorados
arsenales de las fenecidas repúblicas soviéticas. Un ataque con este tipo de
armamento podría tener consecuencias espantosas. Y quien sabe cómo se
podría reaccionar frente a la amenaza de semejantes individuos.

Centuria II, cuarteta XXIX.


El oriental saldrá de su sede, pasará los Apeninos y verá la Galia, traspasara
el cielo, las aguas y la nieve, y pegará a cada uno con su vara.

Interpretación: Los hechos armados que involucran al terrorismo


fundamentalista se trasladarían muy pronto a Europa si no se busca llevar a
la causa del problema: ayudar al progreso de los países del Tercer Mundo,
que es la única manera de desarraigar semejante lacra moderna. Solidaridad
contra el fanatismo y la violencia.

Centuria V, cuarteta XXV.

El Príncipe Árabe, Marte, Sol, Venus, Leo, el rey de la Iglesia sucumbirá ante
el mar: hacia Persia cerca de un millón, Bizancio, Egipto, la verdadera
serpiente invadirá.

Interpretación: Se anuncia que el papa actual o el próximo podría perecer en


el mar o por el mar, y que este hecho coincidiría con ataques violentos
probablemente terroristas y nucleares sobre Italia. Esto coincidiría también
con la confrontación islámica más violenta en Egipto y Turquía entre
partidarios y no partidarios del extremismo.

Centuria X, cuarteta LXXIII.

El tiempo presente junto con el pasado será juzgado por el Gran jupiteriano;
tarde le será el mundo dejado y desleal para con los clérigos juristas.

Interpretación: Según mensajes recibidos por los grupos de contacto


extraterrestre de Misión Rhama, el Maestro Jesús, que habría sido llevado
fuera de la Tierra y de nuestra galaxia en una nave con su cuerpo físico
sublimado después de su resurrección, habría vuelto al sistema solar y se
habría establecido, a partir de 1987 (según nuestro calendario), en una de las
lunas de Júpiter (Ganímedes); ahora estaría a punto de volver a nuestro
planeta, aunque primero debería esperar la gran definición de la humanidad,
para hacer él su respectiva evaluación.

Bien sabemos que si Jesús volviera a la Tierra, no sería ni católico, ni judío, ni


musulmán, sino que estaría al margen y por encima de todas las religiones.
Quizá por eso se dice: «y desleal con los clérigos juristas», por cuanto los
clérigos, ante semejante posición, podrían llegar a acusarlo de traición a las
instituciones religiosas, que él no creó.

De todas formas, se siente una visión pesimista del futuro planetario por parte
de Nostradamus, aunque comprensible por su estado anímico en la época que
lo escribió.

EDGAR CAYCE, EL PROFETA DURMIENTE

Edgar Cayce nació el 18 de marzo de 1877 en Hopkinsville, Kentucky


(Estados Unidos). Tenía muy desarrollada la capacidad de la videncia, sólo
que ésta se manifestaba en sueños, por lo cual siempre debía consultar
durmiendo.
Profetizó que en 1968 se encontrarían cerca de las Bahamas las evidencias de
la existencia de la legendaria Atlántida. Exactamente en ese año se hallaron
sumergidas en la zona lo que parecían ser gigantescas murallas y calzadas
empedradas. Profetizó también que en 1998 se encontraría debajo de la
esfinge de Gizeh, en Egipto, la evidencia de la conexión del antiguo imperio
de los faraones con los extraterrestres. Pues el 3 de marzo de 1999, la cadena
de televisión Fox dio a conocer el hallazgo de las «tumbas perdidas de
Egipto», que incluían el descubrimiento de una gran caverna con un lago
subterráneo debajo de la esfinge, con túneles aun sin explorar. El hallazgo se
había hecho en 1998, aunque se dio a conocer en 1999.

JEANE DIXON Y LOS KENNEDY

Jeane Pinckert Dixon nació en Estados Unidos en 1918, y hoy por hoy es
conocida por las importantes profecías vinculadas a la vida de los Kennedy
que dio a conocer.

Ella predijo el 13 de mayo de 1956, cuando se hallaba en Washington, que en


1960 las elecciones serían ganadas por un candidato del Partido Demócrata
que sería asesinado o moriría ejerciendo su mandato, aunque no
necesariamente en su primera etapa. Las elecciones las ganó John F.
Kennedy, el candidato de los demócratas. Y al final del tercer año de su
mandato, es decir, el 22 de noviembre de 1963, fue asesinado en Dallas,
Texas.

LOS DIBUJOS PREMONITORIOS DE PARRAVICINI

Benjamín Solari Parravicini nació el 8 de agosto de 1898 en Buenos Aires,


Capital Federal, y durante toda su vida residió en Argentina. Fue una persona
muy querida por todos, y ejerció como pintor y empleado de banca. A lo largo
de cuarenta años canalizó cientos de dibujos premonitorios y precognitorios,
combinándolos con extraordinarias psicografías, las cuales se han venido
corroborando con una precisión asombrosa. Las recepciones psicográficas
empezaron de una manera espontánea a partir de 1936, y anticipan con una
precisión alucinante los acontecimientos del siglo XX. En ellas describe la
progresiva decadencia de la sociedad moderna y su posible final, por
cataclismos que el propio ser humano está provocando al haberse divorciado
de la naturaleza y no haber aprendido a vivir en armonía con ella. Parravicini
también habló de esperanza, de la posibilidad de cambiar las cosas y de una
nueva Era Dorada que se concentraría en Sudamérica.

Según él, era una fuerza desconocida, imperiosa, que se apoderaba de él y lo


motivaba a escribir dictándole frases completas, acompañadas de dibujos de
trazo grueso, a veces muy definidos, y otras veces muy abstractos. Estas
recepciones venían acompañadas de una profunda e inexplicable angustia. El
no sabía la procedencia exacta de dichas revelaciones (aunque hablaba de
seres de otras dimensiones), pero lo que sí sabía, y se lo trasmitía a sus
amigos, era que tenía una misión a la que no debía renunciar, y esta consistía
en ayudar a la gente a través de las profecías, comprometiéndola a cambiar y
a ayudar a cambiar al mundo.
Aquí cito algunas de sus más famosas profecías en el orden cronológico de
sus recepciones.

En 1936 recibió:

En las cinco horas de la hora lunar, llegará la espacial nave de Ares y dirá:
Pasada la tribulación, nuevamente llegara el sol, el pájaro celeste de pecho
blanco, y se posara en la argentada Tierra salvada y cuidada por Dios.
¡Llegara el constructor!

Interpretación: Los avistamientos de ovnis en Argentina se han venido


multiplicando (igual que en Ecuador, Perú y Chile) de una forma
extraordinaria en los últimos años. Todo ello debe de ser una señal de que
algo importante va a ocurrir pronto; algo que dependerá mucho de nosotros y
de nuestro estado mental, así como de nuestras actitudes.

En 1937:

La era atómica se acerca. Rusia ya está jugando con ella sin saberlo. Llegará
la guerra de guerras. Fuego de fuegos será. Cabeza de barba, que parecerá
santa pero no lo será, encenderá las Antillas. La mujer pasará sus cabellos al
hombre en los sesenta, y este, sus vestiduras a la mujer.

Interpretación: Parravicini se adelantó a los acontecimientos y los vio con


claridad, tanto con Rusia como con Fidel Castro y Cuba, cuando el futuro líder
de la revolución tenía solo once años de edad. También percibió lo que sería
la moda de los sesenta y los setenta.

En 1938:

Caerá el corazón del mundo, año 40. Caerá y será alemán hasta el 44.
[Referencia a París].

El corazón será artificial en el 66. [Y así fue.]

España 66. La Palabra Celeste llegará a una aldea de España… Llegará un día
la Virgen, escoltada por Gabriel; ella dará a las campesinitas la mano y les
enseñara sus huellas a seguir; Cristo bajará de esa mano. [Garabandal.]

El mundo será desnaturalizado por el poder de la pantalla domestica. Toda


mala influencia será desparramada groseramente sobre todo hogar y será
impuesta por el comercio avisador que busca la masa. La masa embrutecerá
dominada por las ordenes disfrazadas de paraísos fáciles y superiores,
contemplara la estupidez y la inmoralidad con complacencia. Llegará el día en
que el grueso popular será manejado como aprisco.

Wall-Street, la Bolsa al suelo en los noventa.

Interpretación: Con una precisión asombrosa, Parravicini anticipa la caída de


París, los trasplantes de corazón, las apariciones marianas modernas, la
influencia nefasta de la televisión y hasta las nuevas crisis económicas. El
tiempo le ha dado toda la razón a este increíble profeta moderno.

En 1938:

Los seres serán telepáticos con el correr del tiempo. Existen ya, y ya saben de
su cualidad y la esconden. Día llegará que será a toda luz y no asombrará.

Aparecerán volando en las alturas círculos de luces, trayendo seres extraños


de otros planetas. Sí, sí, serán los que vinieron a poblar la Tierra, se dirá, y se
dirá bien. ¡Sí!, los que se llamaron Ángeles en el Antiguo Testamento, o la voz
de Jehová, serán. Y de nuevo se les verá y se les escuchará.

Los mares serán invadidos por los seres de otros mundos que llegaran en sus
barquillas anfibias. Llevarán de la Tierra hacia Ganímedes y su gemelo
Europa algas; allá se precisa como alimentación. Carecen de grandes mares.
Llegarán.

Cerebros vivos hablarán con cerebros astrales y darán al mundo la hora de


empezar y hablar del cerebro vivo morador de atmósferas, del latido del
universo.

Interpretación: Las profecías advierten de lo que sería la comunicación


telepática y el contacto con seres extraterrestres afincados en las lunas de
Júpiter, cosa que ha ocurrido tal cual en los años setenta.

En 1939:

El niño debe nacer, Dios lo ordena y manda. El destino no debe ser controlado
por el hombre. [Aborto, clonación.]

Maternidad artificial, ¡cultivada! El origen será desvirtuado. El hombre


cultivará sin contacto. [Fecundación in vitro ]

La Iglesia será en prueba grande; luego habrá un nuevo corazón, la Iglesia


será renovada totalmente después de la discordia del final del milenio.

Era de oro. La mujer-hombre llega para el 70. Destronará al hombre y hará


guerras políticas, hará negocios de toda índole y buscará el oro a todo precio.

La cinematografía encumbrará la pornografía. El acto sexual será escena de


éxito. Cae el arte sano.

El teatro será desteatro; será psíquico, material, irreverente, sucio. Se


impondrá el desnudo, la aberración sexual, la homosexualidad, el lesbianismo
y drogados en crímenes. La masa aplaudirá corrompida sin saberlo.

Los interplanetarios invisibles al ojo humano mensajeros son de Dios, y


llegarán de más en más para evitar el estallido atómico. Ellos tratarán de
imponer la hermandad y el amor al prójimo y hasta infiltrarán en la juventud
desorientada la meditación mística y el retiro de todo mal.
Interpretación: Los acontecimientos mundiales le dan la razón a Parravicini.
En cuanto a la referencia a los interplanetarios el Grupo Rhama, famoso
grupo contactista integrado en sus inicios por una mayoría de jóvenes
adolescentes, se inició en Perú en la década de los años setenta, a través de la
meditación, procurando crear las condiciones idóneas para la recepción de
sus mensajes psicográficos (telepatía instrumentalizada). Lo consiguieron con
un éxito tal, que el hecho se difundió a nivel mundial. También Billy Meier, el
contactado suizo, antes de tener sus contactos con seres de las Pléyades,
había estado en su adolescencia en un centro de meditación en la India.

En 1940:

Ante las constantes visitas de navieros extraterrestres, la ciencia negará,


luego dudará y, por fin, dirá: ¡Verdad es! Y ¡nuestra sapiencia ha quedado
atrás! Siglos nos contemplan y vigilan.

España y Argentina serán unidas por un puente espiritual, sostenido por


naves interplanetarias. En ambos países morarán ¡navieros blancos!

Interpretación: Aquí se estaría haciendo referencia al famoso caso Ummo,


estudiado en profundidad por el gran investigador español Antonio Ribera.
Resulta que, en los años sesenta, un grupo de supuestos seres extraterrestres
se habrían establecido en España y Argentina; eran los ummitas, de la estrella
Wolf 424, a 14,6 años luz de distancia. Estos seres infiltrados en nuestra
sociedad mantuvieron un contacto epistolar con muchos investigadores y
periodistas, a quienes remitían mucho material con sus teorías, la descripción
de su sociedad, adelantos técnicos e información científica. Aunque varias de
las fotografías de sus naves supuestamente resultaron ser un fraude, hay
investigadores que consideran que hay datos suficientes para pensar que una
parte del caso es real.

En 1951:

Fenómenos inexplicables acaecerán en la atmósfera y la Tierra en el final de


los finales. La ciencia se encontrará corta y pequeña; ante ellos callara. El
hombre más dúctil comprenderá que es llegado el grande instante de la
advertencia, pero aguardará en confianza. Voces de orantes gritaran: es ya el
cataclismo, llega ya el fuego de los cien fuegos. ¡Orad!

Interpretación: La guerra fría que llegó a enquistarse en nuestro mundo creó


una psicosis colectiva en la sociedad moderna. El peligro de una guerra
nuclear ha sido algo con lo que se ha tenido que convivir durante décadas.

En 1959:

Razas extraterrestres regresarán a la Tierra. Ellas ampararán ciudades


subterráneas que de ellos fueron, y aún habitadas por sus naturales
aclimatados.

Bajarán para restablecer costumbres que fueron superiores a las nuestras,


hoy desaparecidas. Las manifestarán en forma telepática, ¡será en 2000!
Los navieros interplanetarios, los mensajeros de Dios, ayer ángeles, llegarán
al mundo en número cada vez mayor. Ellos se manifestarán de diferentes
maneras, queriendo advertir al hombre inconsciente del peligro del átomo.
Civilizaciones anteriores, superiores a la actual, desaparecieron víctimas del
mismo poder. Se sabrá.

España recibirá una raza de seres hermosos venidos de un planeta alejado de


nuestro sistema solar. Argentina igual los recibirá, y establecerán un puente
de comunicación entre ambos países y el planeta de origen.

Seres extraterrenos vigilarán las agujas habitadas que los humanos enviarán
en viajes siderales y las raptarán o asustarán. Ellos, de regreso ¡callarán!

Interpretación: Nuevamente se hace énfasis en la llegada de visitantes


extraterrestres y en un inminente contacto directo y manifiesto.

En 1960:

El sacerdote egipcio que conoció la alta matemática de los asteroides, que


contribuyo a la construcción de las pirámides, fue cuidadosamente dirigido
por los astronaviegos azules, que con devota dedicación enseñaron al
sacerdote los secretos de las aristas.

Ellos alzaron y pulieron las enormes piedras de las pirámides.

Ellos iniciaron la medida y la relatividad en la quinta dimensión.

Naves interplanetarios no visibles a la retina humana llegarán a la Tierra.


Habitarán América en el extremo sur. Allí recogerán materiales para socorrer
al mundo en el hombre y en el cataclismo de fuego. Portarán sangre humana
a sus laboratorios satélites para elaborarla artificialmente. ¡Proveerán de
hemoglobina!

Virajes del nuevo mundo hacia un 2002. Llega la atómica sin solución y
estallará al fin. No es verdad la actual actitud de las naciones al decir y hablar
de paz. Ellas comercian con la guerra organizada. Ellas atemorizan con el
hongo azul, creyendo que jamás se llegará a las manos, pero el rocío amarillo
dirá: ¡Va! Y en ofuscación, ¡irá! Después, final de finales. Principio de
principios. Luz.

Interpretación: Hay una mención explicita de la conexión de los


extraterrestres con los antiguos egipcios, como en el caso de Edgar Cayce.
Además, ¿podría estar aquí la explicación para los casos de «abducciones»
(secuestros), llevarse sangre para recrearla en el caso de una destrucción
catastrófica?

En 1969:

Seres alados viajan a los mundos, mensajeros son de Dios. Naves tripuladas
desde planetas alejados bajan. Mensajeros son de Dios.
Pájaros luminosos se acercan a los mundos en brumas. Mensajeros son de
Dios.

Ellos portan el mandato superior a los mundos habitados por seres opacos
que miran… atención debe prestárseles…

Interpretación: Parravicini menciona que hay una conexión espiritual y


mística en la visita de los hermanos extraterrestres a la Tierra. No es solo un
interés científico.

Con respecto al final del milenio, Parravicini recibió la siguiente


comunicación entre los años 1937, 1938 y 1939:

Las almas vagarán en el 99.

¡Llega la locura en masa! El trastorno cerebral será generalizado en el final


del siglo.

Serán portadores de paz [los extraterrestres] y vendrán en nombre de Jesús.


Llega el tercer milenio. Con él, el renacer de la verdad.

Nuevo corazón. La Iglesia será renovada totalmente después de la discordia.

Fe en la Fe. Será en 2002. ¡La voz de Cristo llega ya! Familia regresa en
2002… Elevación de la Tierra en 2002. Año 2002. El año 2002 será el
principio de la era del amor. Todo ser se amará sin concupiscencia. El hombre
habrá olvidado esto y la mujer conocerá su deber. Almas nuevas poblaran la
Tierra y todas serán superiores, trayendo la quinta dimensión. Se hablará
mentalmente y se vivirá en Cristo Dios. Victoria total del hombre sobre el mal
en 2002.

El último papa Pedro, cierre del papado, reinará sin mente sobre el nuevo
«Ministro de Dios», «Cristo Mundus», se dirá y será Cristo en el Mundo. Él
vendrá en Él desde el cataclismo final. El mal será aquietado y en el nuevo
mapa geográfico se verá el Sáhara azul, como el Pacífico en vergel.

El hombre de 2002 será cerebral, fortificará ciudades metalizadas. El oro no


existirá. La lucha por la existencia no existirá. Será el hombre perfectamente
organizado. Habrán desaparecido los mandones, puesto que la ambición,
lujos, etc., no existirán. El amor al prójimo será verdad y el mundo vivirá en
abrazos. Por mil años el mal será desterrado del mundo y en esos mil años la
paz será en amor, y los hombres conocerán y visitarán a sus hermanos
planetarios. El cerebro de 2002 será el que hoy impera en Venus.

El sublime ser será en el año 2002. El mundo cambiado ostentara nuevas


Tierras, nuevos vergeles, un solo idioma, un solo gobierno universal, y un solo
Dios-Cristo. Las Tierras vírgenes, que fueron hasta el cataclismo cosmópolis
gigantes, serán cultivadas con las nuevas sementeras aparecidas junto a los
mares. Los animales de «carne» ya no serán. Se vivirá del mar. Pan y peces se
dirá, más se comerá en comprimidos, puesto que la gula habrá desaparecido.
Interpretación: ¿Podrá ser posible que en tan poco tiempo como falta para el
año 2002 puedan ocurrir tantos cambios? ¿El significado será textual o
simbólico? ¿Será gradual o traumáticamente radical el cambio? Falta poco
para saberlo.

¿TRES DÍAS DE OSCURIDAD?

Por Internet ha venido circulando desde 1975, por parte de un supuesto


¡embajador de los extraterrestres de las Pléyades! —Ubicado en Estados
Unidos (¿cómo no?)—, la profecía de que era inminente que se produjeran en
nuestro mundo ¡tres días de oscuridad! Esta profecía computarizada se
basaba en el ingreso de nuestro sistema solar en el cinturón de fotones de las
Pléyades. Precisamente, cuando nuestro planeta llegara a entrar en el área de
influencia de la estrella Alción, e ingresara previamente en una zona neutra,
en ese momento nada eléctrico funcionaría, y no habría propagación de la luz,
de tal manera que quedaríamos sumidos en unas terribles tinieblas. No se
tiene en cuenta aquí que, al ser los seres vivos organismos eléctricos, la
profecía suponía la muerte instantánea de todos nosotros. Esto debería haber
acontecido entre noviembre y diciembre de 1995, pero al no haber sucedido
se ha venido postergando, y cada seis meses se han ido dando fechas
tentativas.

Es tan poco serio el tema que no habría que extenderse demasiado en


comentarlo. Lo que sí sería cierto, como decían los mayas (quienes sí eran
verdaderos astrónomos, herederos de un conocimiento desvelado del cosmos),
es que nuestro sistema gira alrededor de las Pléyades una vez cada 25 625
años, y de vez en cuando ingresa en su cinturón de fotones. Pero los fotones
son quantums de luz (emisiones de luz), y nunca por ingresar en la luz, o en
una zona neutra previa a este cinturón, el planeta podría quedar sumido en la
oscuridad. Lo único que podría producir días de oscuridad en nuestro planeta
sería que un cuerpo opaco de regular tamaño se situara entre el Sol y la
Tierra y originara un eclipse.

Interpretación: Hoy por hoy sabemos a través de la arqueología y la


historiografía que Jesús de Nazaret no nació hace 2001 años, sino que hay
siete años de error en el calendario. Así pues ahora estaríamos realmente en
el año 2008 después del nacimiento de Jesús. En el siglo octavo de nuestra
era, el emperador Carlomagno dispuso modificar el calendario, que hasta ese
momento se regía por la fundación de Roma. El rey dijo que quería que fuese
a partir del nacimiento de Cristo, para lo cual se hicieron investigaciones y se
descubrió que, dos siglos antes de Carlomagno, Dionisio el Exiguo, un monje
escita, había descubierto cuándo (según la fundación de Roma) había muerto
Herodes el Grande. Pero como Herodes había muerto cuatro años después de
que Jesús hubo nacido, no se tuvo en cuenta este hecho, sino que el
calendario fijó su inicio en la muerte de Herodes, lo cual dio lugar a cuatro
años de error. En el siglo XVI, el papa Gregorio modificó el calendario para
introducir los años bisiestos. Y el calendario no disminuyó su error en tres
años, sino que lo aumentó en tres años más.

… Para el Señor, un día son como mil años, y mil años como un día
(II Pedro 3, 8)
Según esta cita de la segunda carta del apóstol Pedro, desde que Jesús nació
hasta la fecha han pasado 2008 años, esto es, dos días y algo más; hace ocho
años que estamos en el tercer milenio, que es el tercer día. Si Jesús resucitó
al tercer día, que es lo que se espera que ocurra con la humanidad, ahora que
hemos entrado simbólicamente en el ¡tercer día de la humanidad!

Lo que se espera es que resucitemos a un estado de conciencia superior, que


se produzca en todos nosotros un renacimiento en la luz (el conocimiento) y el
amor (la caridad).

Estos tres milenios son los tres días de oscuridad que tanto se habían
profetizado, pero días de oscuridad interior, de confusión, en los que la gente
no sabe ni en qué creer.

LA APARICIÓN DE FÁTIMA

El 13 de mayo de 1917 en Cova de Iria, en Portugal, tres pastorcitos (Lucia,


Jacinta y Francisco) fueron testigos de la aparición en el cielo de una
luminosa nube, que se posó sobre una encina y proyectó un haz de luz del
cual salió una mujer radiante, a la que ellos llamaron: «La Mujer vestida de
Sol». Según el archivo parroquial de Fátima, la descripción que los niños
hicieron fue de una figura femenina de un metro de estatura, con un gorro
redondo en la cabeza, un traje de una sola pieza y botitas, una capa acolchada
cuadriculada y una bola de cristal en la mano. ¡Qué lejos está esta descripción
de la imagen que nos han hecho llegar en las estampitas religiosas!… ¿Pero
qué fue lo que vieron los niños? Recordemos que cada cual interpreta lo que
ve de acuerdo con su comprensión y nivel cultural. Pero los niños nunca
dijeron que habían visto a la Virgen; fue el obispo el que instruyó a los niños,
y les explicó que habían visto a la Santa Madre de Dios.

La confirmación de los encuentros se dio el 13 de octubre de ese mismo año,


cuando 70 000 personas se reunieron para contemplar la «danza del Sol».
Había llovido y el suelo está mojado, y la gente, empapada. Entonces apareció
por debajo de las nubes un objeto luminoso (algunos lo describen plateado),
que giraba sobre si mismo con luces multicolores, zigzagueando en el cielo. A
continuación, el objeto se abalanzó sobre la gente, desprendiendo un fuerte
calor y produciendo el ruido de una gran explosión, como si atravesara la
barrera del sonido. Pero ¿en 1917?… Y no fue alucinación colectiva, porque
hubo un fenómeno físico: se secó el suelo y la ropa de la gente. Claro está
que, si hubiese sido el Sol, habría sido una catástrofe cósmica, y el fenómeno
habría sido visto en todos los demás lugares de la Tierra iluminados en ese
momento por el astro rey. Pero el fenómeno solo se vio sobre el lugar y en
sesenta kilómetros a la redonda.

El objeto zigzagueaba en el cielo; giraba sobre si mismo con luces


multicolores; producía ruido, etcétera; son demasiados datos que inducen a
pensar que detrás de esa aparición había un ovni.

El día 26 de junio de 2000 fue la fecha elegida por la Iglesia Católica para dar
a conocer el Tercer Secreto de Fátima, ante un ofrecimiento de parte del
propio papa Juan Pablo II. Las dos partes anteriores del secreto (o también
podríamos llamarlos los dos secretos anteriores), tenían que ver: uno con el
infierno, donde se encuentran los demonios (quizás la dimensión donde están
capturados los ángeles caídos en nuestro mundo), y el otro, con el anuncio de
la noche iluminada por una luz desconocida (¿bombas nucleares?, ¿ovnis en el
cielo?) y la consagración de Rusia a la Virgen para neutralizar el avance del
comunismo en el mundo, aunque entendido este como la necesidad de
contrarrestar el avance de la violencia, intolerancia y el fanatismo político. De
todas formas, habría que pensar que los supuestos mensajes pasaron
previamente por la «censura» de la Iglesia, a la que no le hubiese importado
en aquel entonces no ser muy fiel al original.

El encargado de hacerlo fue el cardenal Joseph Ratzinger, máxima autoridad


en el Vaticano del Instituto para la Doctrina de la Fe, conocido anteriormente
como Santo Oficio o Santa Inquisición. El portavoz de la Santa Sede entra en
contradicciones a la hora de querer explicar la postura de la Iglesia frente a
su contenido, y se limitó más bien a comentarlo que a leerlo. Según el
prelado, por más que la profecía escrita por sor Lucía —única superviviente
de los tres pastorcitos de Fátima, que tuvieron el encuentro en 1917 con la
«Dama Vestida de Sol»— haya sido dada por la Virgen, no tiene carácter de
doctrina de la Iglesia, ni tiene por qué ser creída, aunque hable de los dos
atentados que sufrió el papa, y de los que saldría airoso, ni porque mencione
los espectaculares cambios que tuvieron lugar en Europa a partir de los años
ochenta. Al haber sido escrito en un lenguaje simbólico y críptico, más bien
tiene que ser tornado como un mensaje personal y nada más.

De todas formas, la supuesta tercera parte del secreto revelado el 13 de Julio


de 1917 en Cova de Iria, y que fue dado a conocer recientemente, dice lo
siguiente:

Escribo en obediencia a Ti, Dios mío, que lo ordenaste por medio de su


Excelencia Reverendísimo el señor obispo de Leiria y de la Santísima Madre
tuya y mía. Después de las dos partes que ya he expuesto, vimos al lado
izquierdo de Nuestra Señora y un poco más arriba, a un ángel con una espada
de fuego en la mano izquierda. Centelleando, emitía llamas que parecían
encender el mundo, pero se apagaban al contacto con el brillo que Nuestra
Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él. El ángel, señalando
la Tierra con la mano derecha, dijo con voz alta: «¡Penitencia, Penitencia,
Penitencia!». Y vimos en una inmensa luz que es Dios —algo semejante a
como se ven las personas en un espejo cuando pasan delante de él— a un
obispo vestido de blanco. Tuvimos el presentimiento de que era el Santo
Padre. También a otros obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subiendo
una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran cruz de troncos
toscos como si fueran de alcornoque con la corteza. El Santo Padre, antes de
llegar allá, atravesó una gran Ciudad, medio en ruinas. Medio tembloroso, con
paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezaba por las almas de los
cadáveres que encontraba por el camino. Llegado a la cima del monte,
postrado de rodillas al pie de la gran cruz, fue muerto por un grupo de
soldados que le dispararon balas y flechas. Y del mismo modo murieron uno
tras otro los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas
seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos
brazos de la cruz había dos ángeles, cada uno con una jarra de cristal en la
mano, en las cuales recogían la sangre de los mártires y regaban con ella las
almas que se acercaban a Dios.

Tuy, 3-1-1944

Si fuese este el contenido y tal la explicación, no habría tenido sentido alguno


haber creado el aura de misterio que se creo en torno al mensaje, ni siquiera
haberlo ocultado durante tanto tiempo y originar así el morbo que despertó el
«secreto». Más bien, el hecho de ocultarlo habría sido una irresponsabilidad.
Pero también (según lo que dice el cardenal Ratzinger, tenía que ver con los
atentados del papa y los cambios que se iban a producir en Europa) puede
interpretarse como un mensaje personal, domestico y sin mayor
trascendencia. ¡El papa es una persona pública!

Fue desilusionante, no tanto por su contenido, como decía, que obviamente


continuaba siendo ocultado, sino por la postura de la curia frente al
ofrecimiento del papa, quien al parecer antes de morir está dispuesto a
cambiar muchas cosas, si es que lo dejan, naturalmente. El hecho de que
ocultaran el contenido del mensaje se explica porque la aparición de Fátima
tiene una clara relación con el fenómeno ovni.

LA VIRGEN DE GUADALUPE

En las últimas elecciones celebradas en México ocurrió algo muy especial y


simbólico. Resulta que el líder de la oposición, Vicente Fox, justo después de
ser elegido presidente, se dirigió hacia el santuario de la Virgen de
Guadalupe, en el cerro del Tepeyac, para agradecerle a la patrona del país
sus bendiciones, que le permitieron llegar a hacerse con el liderazgo de la
nación.

El 12 de diciembre de 1531, año 13 Carrizo, según el calendario azteca, se


produjo una conjunción en el cielo del Sol y Venus, que daba cumplimiento a
un ciclo sagrado nahualt de 104 años. Había entonces una profecía nahualt
que decía que ese día de ese año, habría de aparecerse en el cerro del
Tepeyac la diosa madre Cuatlicue. Coincidía también que ese año se esperaba
la llegada del cometa Halley y un eclipse de Sol.

Aquel 12 de diciembre, Juan Diego, llamado en nahualt «Cuahtlatoatzin», que


significa «el que habla como águila» (fray Toribio de Benavente lo bautizo),
un indígena muy apreciado por su gente como hombre bueno y religioso,
pasaba cerca del cerro y vio una especie de fuego intenso o una luz
impresionante que lo atrajo. En la luz, que tenía forma de medialuna
llameante, se le apareció una mujer vestida de sol, que le pidió que recogiera
en su ayate (una especie de poncho hecho de una muy rustica tela de maguey
[«ixtle»]) unas rosas de Castilla y que se las llevara al obispo.

Al llegar ante la presencia del clérigo y abrir su ayate, este quedó impreso
con la imagen de una mujer de rasgos indígenas, rodeada de una aura
radiante y con los pies pisando una medialuna.

Gracias a esta aparición, la población indígena aceptó la transculturización de


una forma más pacifica, con lo cual hubo menos muertes y se aseguró la
supervivencia de la raza indígena y de sus símbolos, disfrazados o encubiertos
en el cristianismo. La imagen conservada hasta hoy ha sido considerada como
un enigmático códice mesoamericano. Y son muchos los misterios que
encierra, por cuanto los estudios de composición pictórica muestran que tiene
una proporción áurea, o sea, una perfección estética.

Al analizarse la tela no se han encontrado huellas de pinceladas, y la imagen


no contiene tintes vegetales, ni animales o minerales, y su calidad se ha
conservado de una forma extraordinaria, después de tantos siglos de haber
estado expuesta al humo de las velas de los fieles.

Doce personas aparecen reflejadas en las corneas de los ojos de la Virgen, de


solo siete milímetros. Incluso aparecen vasos sanguíneos en sus párpados.
Entre las personas que aparecen se puede distinguir a Juan Diego, fray Juan
de Zumárraga, el traductor, una sirvienta negra, otros indios y unos frailes.

Se ha hecho la prueba de superponer la imagen a una fotografía del territorio


de México tomada desde el espacio, colocando su cabeza del lado del Caribe
(Atlántico), y los pies del lado del Pacífico. Y el descubrimiento ha sido
asombroso, pues la túnica está llena de símbolos de flores nahualts, que a la
vez representan montañas que se sitúan en su ubicación geográfica real: ¡un
mapa desde el espacio de la geografía del país!

Las estrellas del manto no son meros adornos colocados artísticamente, sino
que son la visión del cielo tal como se vería desde fuera de la Tierra.

La aparición fue el 12 de diciembre, y muy curiosamente nos encontramos


que en el capitulo 12 del Apocalipsis se habla de la «mujer vestida de sol». El
Apocalipsis dice lo siguiente:

Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida de sol, con la luna
debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas (Ap 12, 1).

Y estando encinta, clamaba con dolores de parto, en la angustia del


alumbramiento (Ap 12, 2).

Interpretación: La imagen en el ayate es de una mujer de aspecto indígena


que tiene un lazo por encima del vientre, símbolo nahualt de que estaba
embarazada. Además, ella se encuentra de pie sobre una luna, y tiene un
manto lleno de estrellas, y todos estos detalles coinciden con los mencionados
en el Apocalipsis, sólo que la profecía evangélica insiste al decir que no sólo
está embarazada, sino que se encuentra en pleno alumbramiento. Esto podría
significar que quien aparece en el ayate representa a la Madre Tierra
viviendo el «Parto Planetario». El hecho de que hoy podamos interpretarlo y
relacionarlo con las convulsiones que está viviendo nuestro mundo, que ha
visto incrementarse la actividad sísmica y volcánica de una forma alarmante,
es porque la profecía hablaba de este tiempo, el actual. El Apocalipsis
profetizó mil quinientos años antes la aparición de la Virgen de Guadalupe, y
la Virgen de Guadalupe anticipó que este momento llegaría quinientos años
después. Nos estamos acercando a un nacimiento colectivo, doloroso pero
necesario.

También apareció señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata que


tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas (AP 12, 3).

Y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó
sobre la Tierra. Y el dragón se paró frente a la mujer que estaba para dar a
luz, a fin de devorar a su hijo tan pronto como naciese (Ap 12, 4).

Interpretación: La lucha de la humanidad es cruenta contra las fuerzas


espirituales de la oscuridad. Hasta Jesús fue tentado. Si no, recordemos lo
que dice el capitulo 6 de la carta de Pablo a los Efesios:

La guerra del hombre no es contra seres de carne y hueso, sino contra altas
jerarquías celestiales infernales, que tienen mando y autoridad sobre este
mundo oscuro y confuso.

Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las
naciones, y su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono (Ap 12, 5).

Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban
contra el dragón y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni
se halló lugar para ellos en el cielo (Ap 12, 7-8).

Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y
Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la Tierra, y sus
ángeles fueron arrojados con él (Ap 12, 9).

Y cuando vio el dragón que había sido arrojado a la Tierra, persiguió a la


mujer que había dado a luz al hijo varón (Ap 12, 13).

Interpretación: La Biblia menciona en reiteradas ocasiones la guerra entre los


ángeles, y a continuación la nueva guerra, la declarada por las fuerzas
satánicas a la humanidad.

Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de
delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un
tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo (Ap 12, 14).

Interpretación: El escudo de México es una águila comiéndose una serpiente


sobre un nopal (cactus símbolo del desierto), de tal manera que hay una
coincidencia total. ¡La virgen de Guadalupe estaba profetizada en el
Apocalipsis!

Y la serpiente arrojo de su boca, tras la mujer, agua como un río, para que
fuese arrastrada por el río… Pero la Tierra ayudó a la mujer, pues la Tierra
abrió su boca y trago el río que el dragón había echado de su boca (Ap 12, 15-
16).

Entonces el dragón se lleno de ira contra la mujer, y se fue a hacer guerra


contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos
de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo (Ap 12, 17).

Interpretación: A toda fuerza se le opone otra contraria de igual intensidad,


por lo cual podríamos decir que las expectativas sobre la humanidad son
grandes.

PROFECÍAS EN LOS CONTACTOS EXTRATERRESTRES

Los mensajes extraterrestres recibidos por uno de los grupos de contacto más
serios y conocidos del mundo, Misión Rama o Grupo Rama, también están
llenos de informaciones de anticipación y de profecías, como las que han
llevado a la prensa internacional a corroborar avistamientos que habían sido
anunciados previamente. Ahora pasaremos a transcribir como un ejemplo
algunas de las más importantes comunicaciones donde se anuncian una serie
de acontecimientos negativos y positivos que después han sido confirmados.
Estas revelaciones han sido dadas como una llamada para descubrir y utilizar
nuestra capacidad de intervenir para modificar las cosas, especialmente las
negativas, y para lograr que se lleven a cabo las positivas.

Este año traerá cambios en los países que parecía que no necesitaban un
cambio, y en aquellos que se creía que el cambio no llegaría jamás.

Acabarán dictaduras y solo el pueblo de cada ciudad elegirá gobernarse.

Las fuerzas oscuras arremeterán a mediados y finales de año, pero solo


apresurarán definiciones positivas.

Estén atentos porque este año empieza con acontecimientos graves, que, sin
embargo, serán la ventana a la esperanza y la puerta hacia el nuevo día: la
nueva humanidad. Están a punto de hacer girar el Apocalipsis
convenientemente para el Hombre Espiritual, porque a una revelación se le
opone otra que se establece cuando hay quienes reaccionan, y son pocos los
necesarios para ello, ya lo saben (Oxalc, 1-1-90).

Interpretación: A finales de enero de ese año, y contra todo pronostico, uno


de los grupos guerrilleros más importantes de Colombia depuso las armas y
se reintegró a la vida política de ese país sudamericano. A mediados de año,
Iraq invadió Kuwait, y en diciembre, las Naciones Unidas le impusieron un
ultimátum para que las tropas invasoras abandonaran el país, situando al
mundo al borde la tercera guerra mundial. Iraq tenía armas nucleares,
químicas y bacteriológicas. Ese mismo año hubo elecciones democráticas en
Chile y en Nicaragua; se aceleraron los cambios en Europa y tuvo lugar el
derrocamiento de Ceaucescu en Rumanía.

La década de los noventa será critica porque les plantea el hecho de que las
fuerzas de la oscuridad seguirán perdiendo sus agentes de negatividad, que
están siendo enfrentados, suprimidos o transformados hacia lo positivo.

Esta es una década difícil pero importante, pues los cambios se producirán y
la humanidad pecara de ignorancia frente a estos. Sabemos que la capacidad
existe para que, sobre la marcha, esto sea corregido. Y lo será con su ayuda.

La década traerá consigo la guerra interna y externa sin cuartel de algunas


religiones muy importantes consigo mismas y con otras con las que
mantienen distancias desde siempre.

Se inicia una década de cambios de consecuencias imprevisibles, que


requieren primero de su autocontrol y de su capacidad de enfrentamiento, así
como de canalización de las energías. Podrán hacer mucho y saber más si
saben mantenerse en el trabajo de cambio permanente.

A partir de los noventa empezara a saberse lo que estaba oculto y el temor en


las religiones y en el hombre crecerá. Empezaran a darse inconvenientes
hallazgos en el terreno de la antropología; seguirán con la física, luego
continuaran con la química. La crisis de los descubrimientos se acentuará con
trascendentales hallazgos arqueológicos en Oriente Medio, que asombrarán a
sus descubridores y angustiarán a los entendidos. Se buscará dar marcha
atrás a los cambios, pero eso será imposible, y los cambios políticos,
religiosos y sociales se multiplicarán.

Las autoridades religiosos sufrirán una progresiva perdida de poder y control


sobre las crisis internas de las comunidades. Se verán entonces en el seno
religioso actitudes sorprendentes e inimaginables, y todo se dará a partir de
esta década.

Como consecuencia del proceso humano, en el Caribe la aguja del reloj


retrocederá y luego se adelantará positivamente, de tal manera que se
superará rápidamente con el olvido, la intolerancia y la tristeza.

En esta década puede pasar de todo, y entre sus posibilidades se encuentra el


hecho de que quizá nada más grave de cuanto ha pasado vaya a ocurrir, y se
efectúe entonces un encaminamiento general.

En Sudamérica se enfrentan las fuerzas internas, desembocando en toda


suerte de actitudes, algunas muy violentas. Los militares serán empujados a
querer desfilar nuevamente en el poder, por ello será grande la tragedia, y no
prosperará. Pero ¿a costa de qué?

Los pueblos se unirán, y madurarán y cambiarán en su forma de pensar y de


actuar. Por primera vez habrá esperanza de justicia, y llegará pronto, como
consecuencia de ello, la paz (Oxalc, 2-2-90).

Interpretación: La reacción de la humanidad frente a los cambios mundiales


ocurridos en la década de los noventa y frente a la magnitud de los mismos ha
sido mínima. Parece que no nos hayamos percatado de la dimensión de las
transformaciones dadas. Si no, recordemos lo que significó el fin del
apartheid en Sudáfrica, la caída del Muro de Berlín y la unión de las dos
alemanias, así como la disgregación de la Unión Soviética y la desaparición
del Telón de Acero, o la apertura de China comunista a una economía de
mercado, etc.

Esta década también supuso una mayor tensión religiosa en Irlanda, el


Líbano, Israel, Yugoslavia, Indonesia, y Malasia, entre otros lugares. Además,
los descubrimientos científicos estuvieron a la orden del día, y se llegó a
encontrar agua en la Luna, en el satélite Europa y hasta en Marte, y se
conoció el mapa genético humano (genoma).
La Iglesia Católica fue noticia con diversos pronunciamientos teológicos del
papa que hicieron variar muchísimos conceptos que se tenían. El Santo Padre
hasta llegó a ofrecer liberar el tercer secreto de Fátima. También monseñor
Conrado Balducci, amigo personal del papa, apareció en la televisión italiana
(RAI), afirmando que la Iglesia acepta la posibilidad de la existencia y la visita
de los extraterrestres.

En cuanto al Caribe, la cosa estuvo muy movida en Cuba y en Puerto Rico.

Y finalmente, en relación a los militares, estos tomaron el poder a través de


Alberto Fujimori en Perú, lo cual acabó en un escándalo de corrupción sin
precedentes. En Venezuela los militares también llegaron al poder en la
persona del presidente Chávez. En cuanto a Ecuador, hubo tal tensión que se
llegó al derrocamiento de varios presidentes, y en todo ello estuvieron
involucrados militares.

1999 será el año de las evidencias, ya que los apoyaremos con


manifestaciones nuestras que serán captadas por ustedes y también por
medios de comunicación… (Oxalc, 24-11-98).

Nos vamos a seguir apareciendo porque eso está dispuesto, no lo duden. Y


también lo haremos escandalosamente en Perú y a nivel mundial, de tal
manera que ya no se podra negar ni ocultar nuestra presencia (Sampiac, 7-
12-98).

Interpretación: El año de 1999 marcó el veinticinco aniversario de un hito en


el contactismo mundial: la «Misión Rama», que coincidió con el ultimo año del
milenio. Ese año de 1999 era tan importante por las expectativas que se
habían creado en el pensamiento colectivo de la humanidad, que se inicio con
el surgimiento de una nueva oleada de apariciones de ovnis en todo el mundo
(tal como había sido anunciado en los mensajes), pero especialmente en Perú,
justo cuando se dio al mundo un ejemplo de madurez y responsabilidad
mediante un acuerdo de paz y limites con la república hermana de Ecuador.
Lo inédito de esta oleada fue que la atestiguaron periodistas de diferentes
medios de comunicación y público en general, y se inicio justo el día del
aniversario del Contacto de Misión Rama. Las apariciones se multiplicaron de
noche y de día sobre Lima y las más importantes ciudades del país, y se les
dio una cobertura sin precedentes en los medios de comunicación, por lo que
a la gente no le quedó la menor duda de la realidad del fenómeno.

El Perú está acercándose a un cambio extraordinariamente positivo, que en


este momento les resulta difícil entrever. Pero no falta mucho. Colaboren en
el cambio con su trabajo mental creador y la actitud positiva, orientando las
energías en la dirección correcta, y este se consolidará. Están en una
transición necesaria, enriquecedora y que, además, estaba profetizada. Todo
apunta hacía el amanecer en su mundo (Sampiac, 3-6-00).

Interpretación: En este mensaje excepcional recibido en el desierto de Chilca


el 3 de junio de 2000, los Guías Extraterrestres anunciaban los cambios
inminentes que se iban a dar en Perú. Estos cambios se aceleraron primero a
raíz de la proyección de un video de sobornos que comprometía a las altas
esferas del gobierno y el Congreso el día 14 de ese mes, y luego el día 16 de
setiembre, con el anuncio por la televisión realizado por el propio presidente
Fujimori (elegido por tercera vez consecutiva en elecciones altamente
cuestionables), del acortamiento de su periodo presidencial a un año (la
renuncia a la presidencia y posterior destitución por inmoralidad se produjo
los días 19 y 21 de noviembre).

Hay mensajes desde 1974 hasta 1991 que dicen que se iban a incrementar las
guerras y enfermedades en el mundo, y con ello la tensión mundial, lo cual
atraería a un asteroide o un cometa, que se estrellaría contra nuestro planeta
o se acercaría tanto que lo afectaría gravitatoriamente e incrementaría su
actividad sísmica y volcánica. Este hecho ha sucedido con la multitud de
cometas y meteoros que se han acercado en los últimos años (Shumaker
Levy 9, Hiakutake, Hale Bopp, Swift Turtle, El Barnard I, etcétera), y con la
inestabilidad planetaria. Pero estos mensajes también hacen énfasis en la
capacidad que tenemos para revertirlo todo, creando un estado mental
colectivo positivo que pudiese crear otro futuro más favorable, y creo que así
está siendo. Aunque aún no se puede cantar victoria y en el mundo hay
muchas cosas que deben cambiar, estamos construyendo con nuestra actitud
nuevas profecías, pero esta vez, esperanzadoras.
GLOSARIO

Agujero de Gusano . Este es un termino acuñado a partir de la física


cuántica y llevado a la astrofísica, y que se emplea para denominar a una
suerte de pliegues o atajos cósmicos que existirían en el microcosmos y en el
macrocosmos para acortar distancias en el tiempo y en el espacio.

Aura . Campo magnético que envuelve el cuerpo de los seres vivos, y que fue
corroborado por Semyur Kirliam en 1935.

Avistamiento . Dícese de la observación de un ovni. En el caso de que


hubiese una psicografía de por medio, la captación del objeto sería la
confirmación de que se ha producido una percepción de un contacto
prefijado.

Canepla . «Ojo de gato» o «cazafantasmas», suele denominarse así al objeto


que sueltan las naves a modo de cámara de televisión controlada a distancia,
que puede llegar a medir desde 30 cm hasta metro y medio de diámetro, y
puede tener un color metálico, blanco, naranja o rojo intenso.

Contactado . Toda aquella persona que ha llegado a establecer una


experiencia real y verificable de contacto con entidades superiores, ya sean
extraterrestres, maestros ascendidos, etc.

Cristales de Cesio . Una de las iniciaciones más intensas en la experiencia


del contacto. Consisten en la recepción de dos estructuras cristalinas
proyectadas desde una nave cercana a las palmas de las manos de la persona
receptora. Estos cristales son visibles tanto para el receptor como para los
demás presentes en el lugar, y terminan siendo integrados en el pecho al
cruzar nuestras manos y brazos sobre el cuerpo. Su propósito se relaciona
con la necesidad de estimular la sensibilidad y captación de nuevas y
poderosas energías en la persona.

Cristificación . Denominación del proceso de toma de conciencia y de


recuerdo de la misión personal y colectiva de cada ser humano, para aprender
y enseñar a amar.

Cuarta dimensión . Aquella que correspondería al terreno de las facultades


psíquicas y la percepción extrasensorial, donde el tiempo y el espacio pueden
ser trascendidos.

Fuerzas satánicas . Con este nombre se relaciona a un grupo de


extraterrestres procedentes de Orión, liderados por un ser llamado «Satanel»
que fueron deportados hacia la Tierra hace miles de años por mal
comportamiento, y que en la actualidad actúan como una fuerza invisible que
gobierna a través de mentes esclavas vinculadas al poder material.
Grises . Denominación que se ha dado en la actualidad a entidades
extraterrestres procedentes de un planeta de la estrella Zeta-Retículi, en la
Osa Mayor. Su apariencia es la de pequeños seres antropomorfos con cabeza
voluminosa, brazos largos y solo cuatro dedos en cada mano. A este tipo de
alienígenas se les relaciona con el tema de las abducciones, aunque son
muchas las razas que caen bajo esta denominación (grises), y no todos vienen
con malas intenciones.

Guardianes y Vigilantes . Categoría de seres enviados por la Confederación


de Planetas de nuestra galaxia a la Tierra para cuidar a nuestro mundo
(cuarentena) de la presencia de civilizaciones malintencionadas.

Guía . Cada uno de los seres extraterrestres de un mayor nivel de evolución


que participan de una labor de dirección y orientación de los contactados y de
los grupos de contacto.

Hermandad Blanca . Es el gobierno interno positivo planetario.


Originalmente estaba conformada por 32 seres extraterrestres que fueron
enviados a la Tierra y descendieron en el desierto del Gobi (Mongolia), en
calidad de guardianes del conocimiento planetario. Después de fundar
Shamballa, la capital del mundo intraterreno de Agartha, se encargaron de
preparar a personas de diferentes filosofías, religiones y pueblos, muchos de
ellos remanentes de civilizaciones desaparecidas, para que los reemplazaran
asumiendo la responsabilidad de ser los depositarios de un conocimiento que
debe ser puesto a disposición del ser humano cuando dé señales de madurez.

Iluminati . Gobierno secreto mundial al servicio de las fuerzas satánicas y


que manipula a la humanidad, llevándola hacia su autodestrucción. Es un
gobierno en la sombra, es decir, que se encuentra detrás de los grandes
gobernantes, y que mueve los hilos invisibles que puedan mantener el caos
planetario.

Jardineros cósmicos . Denominación de un cierto grado jerárquico de seres


de nuestra galaxia que actúan como sembradores de vida en los planetas de
experimentación.

Misión Rama . Experiencia de contacto que trae como mensaje la necesidad


de que el ser humano descubra la importancia de la comunicación consigo
mismo, con los demás, con la vida y el universo. Rama es el contacto para
establecer un puente de comunicación con civilizaciones más avanzadas de
las que podemos aprender mucho. Aporta una enseñanza y una filosofía de
vida que nos recuerda que somos creadores de esperanza y de futuro. La
Misión empezó oficialmente en 1974 a raíz de un mensaje psicográfico, que se
corroboró a los pocos días con un avistamiento de una nave extraterrestre,
que había sido anunciado previamente.

Nombre Cósmico . Clave vibratoria personal de cada individuo. Funciona


como una clave de acceso al archivo interior de cada uno. Este nombre es el
mismo a lo largo de todas las encarnaciones. Y se puede recibir a través de
sueños, en meditación o como revelación por parte de los maestros a través
de las meditaciones.
Ovni . Siglas de objeto volador no identificado.

Paititi . Legendaria ciudad perdida de los incas en la selva del Madre de Dios
(Perú). Su nombre secreto era «Quañachoai», y se la vincula con la leyenda
del retorno de Inkarri (inca rey). En el interior de esta ciudad habría un
templo que guardaría un gran disco solar, que funcionaria como una conexión
con puertas dimensionales en diversos puntos del planeta relacionadas con
archivos de la historia planetaria. Este lugar sería en la actualidad un retiro
de la Hermandad Blanca, por lo que no cualquier persona puede penetrar en
él. Muy cerca de estas ruinas, en el nacimiento del río Siskibenia, se
encontraría también la Base Azul, una importantísima base extraterrestre.

Plan Cósmico . Proyecto ultraterrestre y extraterrestre que consideró la


necesidad de experimentar en ocho planetas de categoría «UR» para crear las
condiciones idóneas para que surgiera una civilización con un potencial
psíquico y espiritual, capaz de transformarse en poco tiempo en «Maestro» de
sus propios maestros.

Quinta dimensión . Sería la que correspondería a nuestra alma (simbolizada


por una abadía o catedral) y a los recuerdos de nuestras vidas anteriores.

Rama . Vibración profunda que nos recuerda a todos los que nos vimos
llamados a compartir la experiencia del contacto que todo ser humano debe
ser un «Sol en la Tierra», e irradiar con su ejemplo para ayudar a la
humanidad.

Real Tiempo . Existiría más de un tempo en el universo material, y el nuestro


sería uno alternativo, creado artificialmente para desarrollar un Plan
Cósmico. Nuestro planeta sufrió un desastre meteórico hace millones de años,
a raíz del cual se extinguió la vida. Este hecho habría permitido que
civilizaciones extraterrestres viajasen a través de portales dimensionales a
nuestro pasado impidiendo así que el mundo muriera, y dándole una segunda
oportunidad.

Retiros Interiores . Dícese de cada uno de los lugares secretos en el mundo


donde la Gran Hermandad Blanca ha depositado archivos de un conocimiento
oculto, que deben ser liberados y entregados a la humanidad en esta época.

Psicografía . Técnica de escritura automática o canalización simultanea de


un mensaje telepático. Para que la recepción del mensaje sea válida, esta
debe cumplir una serie de requisitos, entre ellos que se haga
conscientemente, dentro de un grupo y con una preparación previa.

Sincronizador magnético . Objeto esférico e inteligente, similar a las


caneplas, pero más pequeño, que puede llegar a medir como un puño o una
pelota de pimpón. Se le observa muchas veces como una luz verde, amarilla o
azul, y puede llegar a atravesar una pared para entrar en una habitación. Esta
esfera activa los potenciales psíquicos de la persona que entra en contacto
con ella.
Ultraterrestre . Seres que habitan en el universo mental, mas allá de la
séptima dimensión. A esta categoría corresponden los verdaderos Ángeles,
Arcángeles, Tronos, Principados, Querubines, Potestades y Dominaciones.
Precisamente un grupo de estos seres llamados «Hellel» o
«Resplandecientes» o también llamados «Hijos de Dios» fueron los padres
creadores del universo material.

Ur . Categoría de planeta propio de aquellos que existen en sistemas solares


de una sola estrella, y que si entran en convulsión pasan a ser sujetos de una
experimentación especial por ser considerados laboratorios naturales.

Ved . Siglas de vehículo extraterrestre dirigido.

Xendra . Umbral o portal dimensional creado artificialmente por la tecnología


y el poder psíquico extraterrestre, que permite a las personas convocadas a
vivir la experiencia de una teletransportación que puede ser física a otro
planeta, a una base o al interior de una nave. Suele tener la forma de una
medialuna dorada brillante o de cúpula gaseosa. Dependiendo del grado de
intensidad, se reconoce la existencia de tres tipos de Xendra. El tercero, el
más sutil, es llamado «Gimbra» y produce experiencias conscientes de
bilocación, desdoblamiento astral o proyección mental.

Zin-Uru . Mantram o palabra clave o llave que es capaz de abrir puertas


entre las dimensiones, y que fue enseñado por Hermes Trismegistro o Thot el
Atlante.
Nació el 12 de diciembre de 1955 en Lima, Perú. Hijo de un conocido
investigador del Fenómeno ovni, Carlos Paz García, creció en un ambiente
familiar, muy propicio a la investigación de la vida extraterrestre ya que su
padre desde muy jóven los llevaba a conferencias que trataran el tema. Paz
García fue fundador del IPRI, el Instituto Peruano de Relaciones
Interplanetarias.

Cursó sus estudios primarios y secundarios con los Hermanos Maristas,


culminando los mismos en el primer lugar, siempre se ha considerado como
un buen alumno. Siguió luego estudios universitarios en la Pontificia
Universidad del Perú, en la Facultad de Historia. Sin embargo, su gran anhelo
era estudiar Arqueología. Le fue imposible al no existir aún dicha facultad.

Durante su adolescencia, fue socio activo del IPRI y desde 1974 asegura
haber vivido experiencias de contacto extraterrestre. En cinco ocasiones ha
convocado con anticipación a periodistas de diversos países (incluido Juan
José Benítez, autor de libros como «El caballo de Troya») a presenciar el
avistamiento de un ovni en el cielo del desierto de Chilca. A raíz de estos
primeros contactos y por orden de los maestros superiores es que funda la
Misión Rama y la conduce hasta el momento de su disolución, en 1990, para
evitar un posible sectarismo. Incluso, afirma haber visto, solo, o a veces
acompañado, ovnis y sus tripulantes, así como haber viajado con ellos en más
de una ocasión.
Actualmente imparte conferencias sobre contactos extraterrestres en más de
35 países, entre ellos: Canadá, Estados Unidos, México, Israel, Argentina,
Francia, Alemania y Brasil. Continua investigando todo el fenómeno
extraterrestre y fruto de sus estudios son sus diversos libros, por ejemplo
«Los Guías Extraterrestres», «Contacto Interdimensional», «El Umbral
Secreto», etc.

Es fundador del Instituto Peruano de Relaciones Interplanetarias… una suerte


de jefe de Foreing Office para explicarles a los extraterrestres cómo
funcionamos los humanos.

En el plano personal, está casado con Marina Torres de Paz y tiene dos hijas
Yearim y Tanis. A pesar de estar de viaje la mayor parte del tiempo, como él
señala, siempre tiene tiempo para ser padre y esposo, y realizar uno que otro
arreglo en el hogar.
Notas

[1] El padre del autor, Carlos Paz García Corrochano, fundó en 1955 el
Instituto Peruano de Relaciones Interplanetarias y escribió varios libros sobre
el fenómeno de los Objetos Volantes No Identificados u ovnis. (N. del e.) <<

[2] En la investigación ufológica clásica se dividen las experiencias con ovnis


en «tipos». Las del tipo 1 se refieren al avistamiento de un objeto no
identificado a cierta distancia. Las del tipo 2 describen efectos físicos y
fisiológicos del objeto sobre el terreno o las personas, incluyendo apagones de
luz, alteraciones electromagnéticas, quemaduras… Las del tipo 3 —que dieron
titulo a la celebre película de Spielberg Encuentros en la Tercera Fase
engloban aquellas experiencias de encuentro con sus tripulantes. Las de tipo
4 y 5 son, en cambio, vivencias de contacto más subjetivas, donde intervienen
procesos de comunicación telepática y espiritual. No todos los ufólogos las
aceptan. (N. del e.) <<

[3] Shamballa, Agartha, Shangrilá… Todos estos términos definen la supuesta


existencia de una ciudad subterránea, incluso toda una comunidad de ellas,
donde según diversos autores se esconde la «jerarquía espiritual» que rige el
planeta. Las entradas a ese mundo subterrestre se han ubicado en regiones
tan remotas como Tibet, Afganistán, India e incluso ciertas regiones andinas,
en América del Sur. En el ultimo siglo y medio autores como lord Bulwer
Lytton, Helena Blavatsky o Nicolas Roerich se encargaron de popularizar su
presunta existencia. (N. del e.) <<

[4] Antena: es el equivalente, en la más extendida terminología espiritista, al


médium. En el contexto que nos ocupa, es la persona que actúa de receptor
telepático de los supuestos mensajes extraterrestres y los plasma por escrito,
mediante la técnica de la llamada «escritura automática». (N. del e.) <<

[5] A lo largo de la obra aparecerán varios nombres así, que corresponden a


los «Guías Extraterrestres» que contactan telepáticamente con el autor o con
los miembros de su organización, «Misión Rama». (N. del e.) <<

[6] En 1998 comienza a hablarse, en ambientes contactistas, de la llamada


«clave 33». En España esta se pone «simbólicamente» en marcha a raíz de un
avistamiento masivo de un ovni en la tarde del 2 de febrero (un día a 33
jornadas del inicio del año y a 333 del final) y que movilizará a muchos
contactados. El 33 es un número con fuerte carga simbólica: representa la
edad de Jesús al morir en la cruz, el número de cantos de la Divina Comedia
de Dante, los grados de la francomasoneria, los días que duró la lluvia de
maná del cielo durante el Éxodo del «pueblo elegido»… Trabajar en «clave
33» significa, básicamente, ser conscientes de la carga simbólica de este
número y estar atentos a los momentos y lugares en los que este aparece. (N.
del e.) <<
[7] La vinculación de las apariciones de Fátima con el tema ovni es algo muy
aceptada entre ufólogos. El 13 de octubre de 1917, ante más de 20 000
testigos, un «Sol» brillo por debajo de las nubes, causando estupor en quienes
lo vieron. Aquel «ovni» había sido repetidamente anunciado por la virgen en
sus apariciones anteriores. En Portugal la historiadora FINA D’ARMADA ha
estudiado a fondo otras coincidencias ufológicas del caso. <<

[8] Sixto Paz se hace eco aquí de la Teoría de la Correlación de Orión,


brillantemente formulada en 1994 por el ingeniero angloegipcio Robert
Bauval. Según este, la disposición en diagonal de las tres grandes pirámides
de la meseta de Gizeh se llevó a cabo para imitar la disposición de las tres
estrellas centrales de la constelación de Orión —las llamadas «Tres
Marías»—. Los egipcios creían que ese rincón del cielo era el duat, la «puerta
estelar» a la que se encaminaban las almas de los difuntos, y por eso
quisieron imitarlas en el desierto. Véase El misterio de Orión de Bauval y
Adrián Gilbert (Emecé Editores, Barcelona 1995). <<

[9] Existe una extendida leyenda esotérica que afirma que el Santo Grial no
fue sino una esmeralda gigante que cayo de la frente del mismísimo Lucifer a
la Tierra. Algunos expertos han creído ver en esa referencia una alusión a un
betilo, o piedra sagrada de origen meteórico. En la obra Percival de Wolfram
von Eschembach (s. XIII), uno de sus protagonistas llama al Grial «lapsit
exillis», un epíteto pseudolatino que probablemente derivaba de la expresión
«lapsit ex coelis» o «piedra del cielo». Eschembach dijo que el Grial era
verde, como las Tablas del dios Thot en la tradición hermética o la esmeralda
de Lucifer. <<

[10] «Grises» es el término coloquial por el que, desde finales de los años 80s
del pasado siglo, se conoce a una tipología muy concreta de presuntos
tripulantes de los ovnis. Por lo general se trata de criaturas de gran cabeza,
pequeña estatura y complexión débil, con grandes ojos almendrados negros y
piel grisácea. La literatura ufológica más reciente está llena de alusiones a
ellos. <<

[11] El ombligo del mundo forma parte de otra arraigada tradición esotérica
que se popularizó a ambos lados de los océanos Atlántico y Pacífico. Además
del «omphalos» griego, también en la Isla de Pascua, a 4000 km de las costas
de Chile, se llamaba a su tierra te pitokuna, «la piedra ombligo». Para los
incas de Cuzco (Perú) su ciudad era el ombligo del mundo. Mientras, en
Bolivia, la antigua ciudad de Tiahuanaco tenía un sentido similar. Según
explicó el padre Bernabé Cobo en 1610, Tiahuanaco procede de la palabra
taypicala que significa «la piedra del centro». ¿A qué misteriosa piedra se
refieren todas estas tradiciones? ¿A otra «lapsit ex coelis» como la que
describíamos al hablar de la esmeralda de Lucifer? ¿A una piedra
extraterrestre? <<

[12] El Pachacuti es un termino que podría traducirse tentativamente como —


era— y define un periodo de tiempo de unos 500 años. Los incas creían que
los Pachacuti se suceden alternativamente como periodos positivos y
negativos. Cuando en 1533 Francisco Pizarro conquista Cuzco, los sacerdotes
incas creyeron iniciado un «Pachacuti negativo» para su pueblo. <<

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