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Actividad 4: la libertad como valor y derecho humano fundamental.

Instrucciones:
1. imprimir, recortar y pegar en tu cuaderno
2. el texto se leera en el grupo

Joe era un pequeño elefante que había quedado huérfano luego de que la


cacería de elefantes en África le dejara sin su querida madre. Desde entonces,
fue acogido en uno de los circos más famosos de Europa.
Al llegar a su nuevo hogar, fue inmediatamente anclado al suelo con una gran
estaca de madera y una gruesa cadena de hierro rodeando una de sus patas.
El pobre Joe, asustado y sin entender qué sucedía, comenzó a tirar de la
cadena para intentar librarse. Empujó, jaló y se sacudió, pero sus esfuerzos
fueron en vano. Por más que lo intentaba, no podía soltarse, pues la cadena
era mucho más fuerte que él. Ya cansado y sin energía, el pequeño elefante
cayó rendido en su primera noche en el circo.
Al día siguiente, tras haber recuperado algo de sus fuerzas, continuó con su
tarea, pero por más que trataba de soltarse, sólo conseguía hacerse daño.  Y
así por casi una semana… hasta que, finalmente, decidió resignarse y darse
por vencido.
Los años pasaron y Joe creció hasta alcanzar una altura y peso considerables.
Era la atracción principal del circo. Los niños se agrupaban para apreciar su
enorme tamaño e imponencia. Los adultos se sorprendían con la gran fuerza
y, a la vez, sumisión del animal. Durante el show, recibía aplausos, sonrisas,
comida y montones de cuidados. Pero, al terminar la función, siempre era
encadenado a una pequeña y vieja estaca, la misma que lo había tenido
prisionero todos esos años. Y, aunque tenía la fuerza de una bestia y podría
arrancarla del suelo sin problema, jamás volvió a intentar liberarse porque en
su mente tenía claro que, por más que se esforzara, nunca iba a poder
conseguirlo.

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