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UNIVERSIDAD AUTONOMA DE BAJA CALIFORNIA SUR Area de Conocimiento de Ciencias Sociales y Humanidades Departamento Académico de Economia TESIS Hacia un Proyecto Etico-Politico Incompleto de Justicia Que como requisito para obtener el grado de: Doctora en Ciencias Sociales: Desarrollo Sustentable y Globalizacién, con Orientacién en Globalizacién Presenta: Zenorina Guadalupe Diaz Gomez Directora: Dra. Lorella Guadalupe Castorena Davis Directora Externa: Dra. Rossana Cassigoli Salamon La Paz, B.C.S., noviembre de 2016 AGRADECIMIENTOS Al finaizar éste viaje, slo el sentimiento de gratitud puede expresar el aprecio del valor de lo recibido: FT La comprensin, y el amor incondicional de mi familia La solidaridad, y la amable compania de una excelente amiga (Ménica), El apoyo, la guia y buena disposicién de mis directoras y comité asesor. Gracias Lorella, Rossana, Micheline, Cinthya y Humberto. Gracias a mis profesores por su trabajo comprometido y generosidad, Gracias a la vida, por esta oportunidad, que hoy se constituye en und significativa experiencia que guarda migicos recuerdos, deseos realizados, nuevas amistades y el coraje de la lucha. Gracias por este enriquecimiento, espero dar tanto como he recibido, ‘A mis hijos, mis grandes maestros, con todo mi amor. Contenido INTRODUCCION.. CAPITULO 1. HACIA UN PROYECTO ETICO-POLITICO INCOMPLETO DE JUSTICIA. ‘Lave la necesidad de elaborar un concepto ético-paticoincompleto de justia 22 1.2E! concepto étieo-plitico incompleto de justicia: su fundamentacin normative ¥ procedimental. 31 : 4.3 La meta de la justicia como un mas alld de Ia justicia: fa vida buena. 36 ( 1.4 Del propésito de la investigacién 38 5 bela elecisn de herramintas tedrieo-MetOdOI125,onennennnnsnnnn 1.6 El enfoque sistémico como herramienta tesrico-metodol gia, a7 1.7 La labor genealogista como herramienta te6rico-metodol6gica.. 54 1.8 Sobre la delimitacién temporal... h CAPITULO III, LA CONCEPCION DE JUSTICIA EN LA MODERNIDAD. 2.4 La dea de justicia en el pensamiento politico moderno: de Maquiavelo @ Hegel. 65 ‘ 2.1.1 lusnaturalismo y justicia moderna... 67 ' 2.1.2 La concepcién de la justicia en el idealismo aleman.. 7 | 2.2 Consttucién del idea! liberal como ideal de Justicia 86 La dimensisn ética de ta justicia en 1a modernidad. nnn Ja razén y la libertad. 3.2 La reflexign ética sobre la justia en el pensamiento de Immanuel Kant. LA DOMINACION COMO CORRELATO DE LA JUSTICIA. 3.1 elestado modemo como eje de fa dominacién: expicaciones contextualesy tticas 307 43.2 Criss eilzatoria: las guerras muNGiaeS. .nnr-nsennsnnrnennnnmenenanen 126 3.3 Reinvencién de la dominacién: De las teorias del desarrollo al neoliberalismo econémico. 134 3.4 Crisis sistémica: su entrads en la fase terminal... srosnnrneeesnnnnnne AS CAPITULO IV. 187 DE LAS POSIBILIDADES DESEABLES DE JUSTICIA: movimientos antisistémtcos, derechos humanos y democracia. 157 4.1 Del principio de esperanza. - . soe ST 4.2 Historia y transformacion de los movimientos antisistemicos, o---- eevee 161 4 Pons 4.2.4 Primeros movimientos antisistémicos. 4.2.2. 1968, Nuevos movimientos anti-sistémicos. 4.2.3. Novisimos movimientos antisistémicos. 4.3 La lucha por los derechos humanos: historia y actualidad. saeeeeennnsnnnee 189 200 4.4 La aspiracién democratica como ideal de justicia.... 14.5 Otras alternativas encaminadas hacia la busqueda de mayor justicia. 204 44.6 Algunas referencias empiricas que enriquecen el desarrollo te6rico de la investigacin 208 213 CONCLUSION. —ea—~—~ INTRODUCCION Hacia un proyecto ético-politico incompleto de justicia, es una reflexién sobre las posibilidades de justicia global para las sociedades contemporéineas. El acercamiento a este tema, nacié del interés de saber qué posiblidades de realizacién y vida buena nos oftece el tiempo presente, ya que esa es Ja meta de Ta justicia, mientras, el cumplimiento de una normativa es tnicamente la condicién que la posibilita.' El imerés por el tema ademas, fue motivado por el reconocimiento de que vivimos una circunstancia histérica compleja, caracterizada por un creciente proceso de globalizacién que ha generado entre las culturas relaciones de interdependencia, cuya consecuencia para la humanidad es compartir una suerte de destino comtin Hoy las acciones de una nacién pueden repercutiren otras, ¢ incluso pueden generat problemas globales, por ello, resulta pertinente empezar a pensar Ja justicia, en términos de un universo cultural pluralista, en el que las diferentes formas de vida se encuentren ligadas por el reconocimiento mutuo, el respeto y Ia solidaridad, La concepeidn ético-politica incompleta de justicia propuesta por Agnes Heller, expresa esa aspiracién. Heller denomina a su concepto de justicia incompleto, poraue ha rentificado un error epistemolégico en todas las concepciones completas de justicia, error que las Hev6 a pervertir su propésito, pues en un mundo de perfecta Justicia, la libertad humana pierde sentido, ademés de que la diversidad de formas de vidas buenas existentes y posibles es ignorada Bl uikimo ejemplo de esto, es el que constituye Ta idea moderna de justicia, la que al determinar el rumbo y la meta de Ja historia, permitié la cancelacién de miltiples expresiones histérico-culturales. La historia de la Europa moderna cuenta con crueles ejemplos en este sentido, desde la exclusion de saberes tradicionales por la ciencia moderna, hasta el colonialismo o los regimenes totalitaristas. La conciencia de esos hechos, llevaron a Heller a revisar de manera critica todas las concepciones completas de justicia, y de modo particular Ia concepeién moderna Como + Eetaidea es planteada por Agnes Heller en sulibro Mads all dela justicio. Véase Agnes Heller, Més ala de io justicia, Planeta, 1994, Aunque ya se encuentra en Aristoteles ‘risttees, Etica a Nicdmaco, México, Prria, 1994, . 4 resultado de esa evaluaci6n decidié dar continuidad al proyecto de Ia ilustracion, pero desde la conciencia de sus limites; es decir, reconociendo el riesgo de garantizar la realigacién y permanencia de un mundo de perfecta justicia. De esa mancray llegé a concebir la idea de incompletwd, que significa que la justicia es un proceso en contin construccién, y sus logros son siempre provisionales, debido a que se encuentran supeditados a la evaluacién permanente que las personas hacen sobre sus condiciones de vida. Desde la perspectiva de 1a incompletud, no existe una meta historica determinada y estable, ya que si en verdad fuera realizable 1a justicia completa, en ésta no cabria el sentido de justicia, estimulado precisamente por el reconocimiento de condiciones de vida que resultan inadmisibles para determinado grupo bumano Sélo puede haber justicia did Heller, donde hay injusticia. Slo en un mundo en el gue se da menor 0 mayor justicia tiene cabida la personalidad libre y recta, que se constituye de ese modo precisamente porque puede elegir entre hacer el bien o no. ya que vive en un mundo que le permite sufrir la inj cia en lugar de cometerla Desde la evaluacin critica de 1a experiencia histériea modema, y en la biisqueda de alternativas que respondan a las necesidades del tiempo presente, Heller asume la tarea » de disefar una estructura normativa que permita una convivencia éptima entre las naciones. Su propuesta parte de Ta idea de que puesto que no existe una forma de vida que sea considerada la mejor, sino muchas, Ia normativa debe servir como condici6n para el florecimiento de los mejores mundos posibles. La estructura normativa contempla la dimensién politica y la dimensién ética, Como para Heller, la justicia consiste en la aplicacién de las mismas normas 8 todos los tiembros del grupo social, considera que la universalizacién de la regla de oro, debe ser el criterio que gufe la dimensién politica. El aspecto ético por su parte, observa la 2 yhtler. Agnes. Mas al de a jesticia. op. cit p. 95. ————————————————— isposicién que se espera de los participantes para que la normativa se cumpla, y que la justicia logre una cimentacién sélida. 3 ‘Ademés de la dimension ética y politica, establece un procedimiento de justicia, ave es Jarracionalidad discursiva. BI procedimiento se piensa justo, porque las necesidades de todos Tos participantes pueden hacerse vsibles mediante el discurso valorativo. Esto puede garantzarse, ¥8 ave cen atenciGn a la regia de oro, todos se reconocen como libres ¢ iguales. Esta propuesta normativa que serd descrita con mayor detalle en la tesis, representa para Heller la precondicién para acceder a la meta de Ia justicia, la que en definitiva no es el mero cumplimiento de una normativa, sino el Togro de una vida buena Es asf, que la reflexi6n sobre la justicia devela su motivacién primordial: el logro de una vida buena, lo cual quiere decir, un mundo en el que prevalezca el respeto mutuo y debido a ello, la vida de cada persona ten posibilidad de florecer. Inspirado en la concepcién de Heller y en su propuesta normativa, éste trabajo de investigaci6n se cuestiona qué posibilidades existen, de que una propuesta como la antes descrita pueda llevarse a cabo. Entonces, la pregunta con la que se abrié éste texto: jeuiles son las posibilidades de una justicia global para Tas sociedades contempordneas? tiene como imagen de fondo la construccién de un universo cultural pluralista, igado por vinculos de reciprocidad La pregunta por la posibilidad de dicho mundo, contempla su doble contingencia basica: Ja de su imposibilidad y la de su realizacién deseable, Para el primer caso, la investigacin se centra en el andlisis de la dominacién, ya que se piensa como la principal condicién que obstaculiza Ia justicia. Para la segunda opcidn, la de su realizacién deseable, el andlisis recupera el ejemplo de acciones colectivas que han Jogrado conquistas en términos de justicia. Particularmente el tipo de acciones colectivas en las que se centra el andlisis son los movimientos antisistémicos 5 Heller va a sefalar, que ef axpecto sta fue précticamente égnorado por el pensamienta, poltiso cet Meer recnporado por Kant, Esta idea sr ampliada en el primer y seyundo capitulo dels esis 8 ———————— i La herramienta metodol6gica que da cauce al trabajo, es el andlisis historico, pues se pretende derivar de la observacién del comportamiento que han mantenido los aspectos antes mencionados a través de la historia, una evaluacién razonable acerca de las posibilidades de una justicia global Como la concepeién de justicia de la que se parte €s moderna, entonces el andlisis ancla su estudio en el proceso hist6rico de la modernidad, La perspectiva te6rica del sistema-mundo propuesta por Immanuel Wallerstein y el anilisis genealégico de Michel Foucault son las herramientas teorico-conceptuales de Jas que se dispone para el andlisis hist6rico. La perspectiva de Wallerstein, ha permitido analizar el tema de la justicia en St dimensi6n interestatal, ya que su teoria del sistema-mundo, consiste en una explicacién del complejo proceso de interrelacién que se ha generado entre Tas culturas desde el siglo XVI hasta la actualidad. Segin su andlisis, nuestra realidad se configura come 0? sistema-mundo, 1o que significa, que habitamos en un sistema que integra diversas entidades potticas, y cuyo dinamismo es impulsado por el motor de una economia de tipo capitalista, es decir, caracterizada por acumular capital de manera permanent Segin explica Wallerstein, fue la aparicién de un sistema interestatal en Europa en tomo al siglo XVI, la condici6n que posibilits el desarrollo de ésta forma de economfa, debido a que dicha configuracién politica, propici6 la competencia econdmica entre las aciones europeas, € imposiblité la edificacién de imperios, cuya gran inversién en mantenimiento impedia que el dinero fuera acumulado, Para entender et posterior desarrollo de la economia-mundo capitalista, Wallerstein explica que fue necesaria la construccién de aparatos de Estado, encargados de legalizar eterminadas formas de trabajo, e impulsar leyes que promovieran la circulacién de mercanefas, El otro factor clave, fue la expansién del horizonte geogréfico, que permitié en un principio ta apropiacién de mano de obra a bajo costo, y posteriormente la ampliacién de mercados para el comerci 0.4 La intenci6n de Wallerstein, al mostrar la historia del surgimiento y desarrollo del sistema-mundo, es evidenciar que el nicleo que sostiene y da vida al funcionamiento del sistema, es 1a desigualdad en el juego competitivo entre naciones. Existen Estados fuertes que imponen sus reglas a los mas débiles, lo que permite a los primeros cl aprovechamiento maximo de ganancias. Para Wallerstein, resulta sorprendente el hecho de que el sistema-mundo haya podide fancionar pot més de cinco siglos, sin que fuera evidente la desigualdad sobre 12 ave opera‘Lo que se muestra desde su nacimiento hasta la actualidad, es sdlo el recrudecimiento de su Iogica depredadora Segtin el autor, las actuales crisis en el ambito politico, social y ambiental, obedecen a que el sistema-mundo se encuentra en fase terminal, lo que significa que su capacidad acumnulativa empieza a dificultarse, razén por la que sus técticas tienden a volverse cada vez mis agresivas. Ante inminentes signos, invita a responsabilizamos en la decisién de continuar en un sistema que mantenga la misma estructura de relaciones jerdrquicas, 0 encauzar el proceso hacia la construccién de un mundo de mayor justicia. La forma en que el autor concluye su andlisis, pone de manifiesto que la mera erradicacién del capitalismo como sistema histérico, no garantiza el paso hacia sociedades més justas. Por ello, la decisién que asuma cada actor social en la transicion, resulta crucial respecto a I desembocadura del proceso. Particularmente, piensa en el papel que los movimientos antisistémicos pueden jugar en la transicién. Michel Foucault por su parte, ofrece una perspeetiva que busca superar el enfoque economicista de la domin cién, Su reflexién se sumerge en un nivel més profundo de anilisis, que pretende mostrar que no es la economia en sf, el motor de la dominacién, ella. seria solo una de las miltiples formas que puede tomar. El motor que subyace « Watlerstein, Immanuel, El mederno sistema mundial H. ET mercantlismo y ta consolidacién de la economia europea. SXX1. 1999. p. 4 SGallertein, Immanuel. Et capitalism histérice. S. XXL. 1998. p. 21 ia ialreeat ected incluso bajo la configuracién econémica, son relaciones de fuerza que en cada momento ide la historia toman la forma de una estrategia de lucha particular. Por ello, para Foucault, el anilisis histérico debe hacerse desde Ja deteccién de las estrategias de lucha que se han conformado en cada momento de la historia. A diferencia de Wallerstein, Foucault toma distancia de los estudios de larga duracién, ya que en su interpretacién la historia es un proceso discontinuo, en el que cada estrategia de lucha da cuenta de los cambios en la historia En relacidn a la manera en que se conforma la estrategia de lucha, Foucault sefiala que Jos discursos forman una parte central en ellas. Asi, el resultado es que todo ejereicio de dominacién se encuentra legitimado por un discurso, Para el caso de las soe sdades modernas, ha sido el discurso de la soberania y el de la necesidad de disciplinamiento de Jicas a través de las cuales se ha ejercido la dominacién. los sujetos, las dos formas bi Respecio al papel gue ha jugado el concepto de soberania como forma de control y dominio, Wallerstein coincide y explica que los Estados modernos se denominaron soberanos, para disfrazar de legalidad relaciones de dominio de unos sobre otros.“Michel Foucault también reconoce éste hecho, ademés de incorpora 8 su andlisis ‘a en las relaciones de dominio al interior de los Estados el uso del concepto de sobera En relacién al método de disciplinamiento, su explicacién contribuye a reconocer el proceso de complejizacién que han seguido las sociedades modernas a partir del siglo XVIII y Ia transformacién de fos métodos de control que ello geners Transformacién que deriva ademas, en una forma distinta de concebir el poder, segin la cual, éste ya estaria centrado en institucién como la Estatal, ni funcionaria de manera vertical Gnicamente, En la nueva interpretacién foucaultiana, et poder actiia en red y se replica de instancia en instancia, No va de arriba abajo, sino de sujeto a sujeto, porque en Tas sociedades disciplinarias son los mismos sujetos los encargados de mantener la Vigilancia y el control social: los médicos, os profesores, los psicdlogos, los padres, todos contribuyen a mantener un control dentro de su espacio disciplinario. « Walterstein, Immanuel, Ancliss del sistema mundo. Una inaroduccidn. México. S. XXI- 2005, Pp 65: 66. a ———___— cn un principio ki apropiacidn de mano de obra a bajo costo, ¥ posteriormente la ampliacivin de mereados para el comercio. La intencién de Wallerstein, al mostrar Ja historia del surgimiento y desarrollo del sistema-mundo, es evidenciar que el nécleo que sostiene y da vida al funcionamiento del sistema, es la desigualdad en el juego competitive entre naciones. Existen Estados fuertes que imponen sus reglas a Tos fis débiles, lo que permite a los primeros el aprovechamiento maximo de ganancias Para Wallersein, resulta sorprendente el hecho de que el sistema-mundo haya podido funcionar por més de cinco siglos, sin que fuera evidente Ia desigualdad sobre 12 que operaSLo que se muestra desde su nacimiento hasta la actualidad, es sdlo el recrudecimiento de su légica depredadora Segiin el autor, las actuales crisis en el mbito politico, social y ambiental, obedecen a que el sistema-mundo se encuentra en fase terminal, lo que significa que se capacidad acumulativa empieza a dificultarse, razén por la que sus técticas tienden a volverse cada vez més agresivas. Ante inminentes signos, invita a responsabilizarnos en la decisién de continuar en un sistema que mantenga la misma estructura de relaciones jerdrquicas, © encavzar el proceso hacia la construceién de un mundo de mayor justicia. La forma en que el autor concluye sv andlisis, pone de manifiesto que la mera erradicacién del capitalismo como sistema hist6rico, no garantiza el paso hacia sociedades més justas. Por ello, 1a decisién que asuma cada actor social en la transicién, resulta crucial respecto a la desembocadura del proceso. Particularmente, piensa en dl papel que los movimientos antisistémicos pueden jugar en Ta transicién. Michel Foucault por su parte, ofrece una perspectiva que busca superar el enfoque economicista de la dominacién. Su teflexién se sumerge en un nivel més profundo de andlisis, que pretende mostrar que no es la economia en si, el motor de la dominacién, ella. serfa s6lo una de las miltiples formas que puede tomar. El motor que subyace « watterstein, Immanvel, El movdemo sistema mundial I EI mercantilsma y ta consolidacidn de la ‘economia europea, S.XXI. 1999. p. 54. S Wallerstein, Immanuel. El capitatismo histérico. S. XI. 1998. p. 21 10 incluso bajo la configuracién econémica, son relaciones de fuerza que en cada momento de la historia toman la forma de una estrategia de lucha particular Por ello, para Foucault, el andlisis hist6rico debe hacerse desde Ia deteccién de las estrategias de lucha que se han conformado en cada momento de la historia. A diferencia de Wallerstein, Foucault toma dist ancia de los estudios de larga duracién, ya que en su interpretacién ta historia es. un proceso discontinuo, en el que cada estrategia de lucha da cuenta de los cambios en Ia historia En relaciGn a la manera en que se conforma la estrategia de lucha Foucault sefiala que tos discursos forman una parte central en ellas. Asi, el resultado es que todo ejercicio de dominacién se encuentra legitimado por un discurso. Para el caso de las sociedades modemas, ha sido el discurso de la soberanfa y el de la necesidad de disciplinamiento de Jos sujetos, las dos formas basicas a través de las cuales se hha ejercido la dominacién. Respecto al papel que ha jugado el concepto de soberania como forma de control y dominio, Wallerstein coincide y explica que los Estados modernos 5 denominaron soberanos, para disfrazar de legalidad relaciones de dominio de unos sobre otros.“Michel Foucault también reconoce éste hecho, ademds de incorporar a su andlisis el uso del concepto de soberanfa en las relaciones de dominio al interior de Jos Estados. En relacién al método de disciplinamiento, su explicacién contribuye a reconocer el proceso de complejizaci6n que han seguido las sociedades modernas a partir del siglo XVIII, y la transformacién de los métodos de control que ello generé. Transformacin que deriva ademnds, en una forma distinta de concebir el poder, segtin la cual, éste ya estaria centrado en institucién como la Estatal, ni funcionaria de manera vertical Jinicamente. En la nueva interpretacién foucaultiana, el poder actia en red y se replica de instancia en instancia. No va de arriba abajo, sino de sujeto a sujeto. pordue & las sociedades disciplinarias son Jos mismos sujetos los encargados de mantener la vigilancia y el control social: los médicos, los profesores, los psicélogos, los padres, todos contribuyen a mantener un control dentro de su espacio diseiplinario, « Watesten, Immanuel, Anclisis del sistema mundo, Una introduecién. México S XXIL. 2005. pp. 65> 66, uw ——————— Kespecto a la forma de enfrentar la dominacién, Foucault piensa en el papel de los discursos como un elemento clave en la lucha politica, y es que asf como sirven para dominar, sirven también para minar el poder. Un ejemplo en ese sentido, es el mismo discurso moderno de justicia, su oferta universalista y fundada en la idea de libertad ha servido para disfrazar formas de control y dominio, pero también ha posibilitado Ia inclusion cada vez mayor, de grupos que han asumido la oferta universalista y buscan hacerla valer. Desde el movimiento obrero, hasta las actuales demandas por los efectos nocivos de la globalizacin de mercados, todos esos grupos han constituido un proceso de luche que busca hacer valer Ia idea de justicia como un derecho para todos. Después de haber planteado Ia propuesta de investigacion y el uso de herramientas te6rico-metodol6gicas de las que se dispuso, el segundo capftulo de Ia tesis, se centra en ta explicacién del proceso de gestacién de Ia idea de justicia en la modernidad, Segtin se verd en este capitulo, 1a concepcién modema de justicia se configura como la defensa de dos valores centrales: la vida y Ia libertad. La explicacién acerca de esta forma que tomé la idea de justicia en la modemnidad, muestra que tas el resquebrajamiento del modelo feudal, las sociedades europeas tuvieron ave reorganizarse bajo una nueva estructura politica: el Estado, Para obtener legitimidad como nuevo centro de poder, ésta institucién tuvo que construir una argumentacién que pudiera refutar al tradicional derecho divino, Ta defensa de la vida y la libertad, como valores respaldados en el uso de la raz6n, se convirtieron en el mejor argumento. El espiritu cientficista que acompafé al nacimiento de Ia época moderna, fue Ja fuente que posibilité una argumentaciGn de este tipo. De esa manera, el pensamiento politico empez6 a ocuparse a la manera de las ciencias de la naturaleza, de establecer leyes universales sobre las que debia edificarse el orden social Ese proceder racionalista, puede verse con claridad en las teorfas insnaturalistas particularmente, Los pensadores comprendides dentro de dicha corriente, se distinguieron por elaborar explicaciones coherentes acerca de un hipotético estado 2 natural en que pudo habitar el ser humano, para de ello derivar una propuesta respecto & to que cada cual consideraba la mejor forma de gobierno. El trinsito del estado de naturaleza hacia uno de civilidad suponia ademas, la realiz sién de un pacto social 0 contrato, lo que significaba que el orden politico era producto de un acto voluntario y racional de los individuos Toda 1a historia del pensamiento politico moderno, se caracteriz6 por esa clara aspiracién de un orden gobernado por la raz6n, en el que Ta vida y la libertad aparecen como los valores centrales que un orden justo debe resguardar. Para el momento en que pensadores como Kant y Hegel. desarroliaron st argumentacién filoséfica, puede notarse un claro compromiso con Ia idea de que la vida y libertad de la persona deben constituir Ia fuente del derecho y Ia justcia, Por Jo que la tarea del Estado, es garantizar la proteccién de esos derechos considerados ya inalienables. Fl entusiasmo que éstos pensadores mostraron por laraz6n, Jos Hlev6 a afirmar el fin de ta dominacién, pues consideraban que las jerarquias mantenidas por tadici6n, no fenfan cabida en el Estado, donde todos los miembros del grupo social eran reconocidos como libres ¢ iguales. Kant confiaba en la realizacidn de ese reino de justicia, porque encontr6 en el hecho de la libertad humana el fundamento que le permitfa pensar que Tos seres humanos no se encontraban determinados por la contingencia de sus deseos. Las personas por tanto, eran capaces de autodeterminarse y vivir en el respeto de la libertad de los otros, ya fueran compatriotas 0 extranjeros. La consideracién de este segundo grupo, pone de manifiesto en Kant, la idea de una ciudadanfa cosmopolita, que significa el reconocimiento de Ia universal dignidad que poseen todos los miembros de Ta tierra. Kant pensaba que para llegar a la realizacién de ese universo cosmopolita, era necesario tun proceso de ilustracién. Para él, la historia representaba ese proceso de aprendizaje, y fen el que cabe Ia esperanza del logro de una dispesicién moral al bien. Esta consideracién era importante, porque para Kant, una estructura legal sin disposicién Gtica de las personas, slo podia ser una estructura superficial, bajo la amenaza constante de corromperse. 3 Para Hegel en cumbin, el Estado moderno representaba ya esa reconciliacién entre teoria y prictica, En Hegel el Estado era el universo ético realizado, la inica forma de garantizar ese universo de respeto mutuo, que permite a las personas vivir libertad. Con ello tenemos que la visi6n hegeliana, constituye una especie de conclusion del pensamiento politico moderne, que afirma que la instiuciOn estatal representa la garantia de los derechos inalienables de vida y Tibertad, por tanto de Ia justicia. El desarrollo de esta perspectiva que cultivé el pensamiento politico a lo largo de la modernidad, finalmente coadyuv6, a que el Iiberalismo se convirtiera en el ideal politico por excelencia, en el siglo XIX. Pero esta historia de la idea de justicia como defensora de los valores de vida y libertad, encuentra su correlato en la historia de 1a dominacién que oculta. De revelar este aspecto de encarga el capitulo tercero. ‘A través de una revisién eritica del proceso que dio lugar a Ta idea de justicia en la mmodernidad, pudo entenderse porqué mientras los Estados proclamaban libertad y soberan‘a, inerementaban su fuerza militar al exterior, y el control policial al interior. La explicacién que tanto Foucault como Wallerstein brindan al respecioy © que el avance de la empresa econémica en la modernidad, impuls un proceso de racionalizacién de la esfera politica también. Los Estados, desarrollaron una capacidad administrativa, y empezaron a ocuparse de potenciar sus elementos constitutivos, con el propésito de inerementar su. poder tanto al interior, como al exterior Fue asi, que el terrtorio se convirtié en un espacio juridico con una clara reglamentaciGn de sus us0s para el comercio en particular, mientras la poblacién, fue asimilada como fa fuerza productiva indispensable para potenciar la riqueza econ6mica del Estado. Como consecuencia de esa productividad, la necesidad de control y vigilancia se volvi6 otro de los factores importantes de los que se encargaria el Estado. Este aspect debia cuidarse tanto dentro del territorio como fuera, por ello junto a la serie de acuerdos diplométicos, se reforzaban también los _dispositivos militares EI discurso que maquillaba estas précticas propias del siglo XVII, era el del equilfbrio entre nasiones; aungue en realidad lo que se pretendia, era mantener una competencis comercial controlada. 4 Ya para el siglo XIX la competencia colonialista requirié de un nuevo discurso, de modo que la idea de la balanza europea, fue sustituida por el ideal de progreso. Los ejemplos anteriores respecto al uso de los discursos para disfrazar précticas de dominacién, constatan la perspectiva foucaultiana segin la cual, no existe ejercicio de dominacin, sin un discurso legitimador de ésta, Para el caso de las sociedades modernas, explica el autor, fueron dos los discursos fundamentales mediante los que se ech6 a andar todo un sistema de control y represin, el discurso de la soberania y el de Tanecesidad de disciplinar a la poblacién. EI principio legal fundado en la soberan . explica Foucault, se remonta al siglo XII, producto de los primeros intentos de centralizar el poder en Ia figura del monarca. De lo ue se trataba en ese primer momento, era de legitimar el poder del Rey, sus derechos y a necesidad de obediencia de los stibditos.’Posteriormente, ya en la modernidad, el discurso fue utilizado para legitimar las monarqufas absolutistas, luego por quienes abogaban por el parlamentarismo en Inglaterra para finalmente ser incorporado ya en al siglo XVIII a la concepcisn de soberanta popular. Es decir, cualquier grupo ave buscaba dar legitimidad sus proclamas, hacia uso del principio de soberania por ser al fundamento legal por excelencia. Fue a partir del siglo XVIII, que aparecié un nuevo discurso legitimador de practicas de dominio: el disciplinamiento. Con el intenso desarrollo del comercio durante ese periodo, la atencién se centré en administrar mejor la fuerza de trabajo De esa manera los métodos de tortura 0 la exhibicién piblica del suplicio de los condenados, dejaron de tener utilidad como préctica judicial. En sustituci6n de los antiguos métodos, se inicié un sofisticado disefio espacial que garantizara el control de la productividad de Jos sujetos: las cdrceles, las fabricas, las escuela, todas estas instituciones funcionaban bajo la misma Iégica productivista. En el caso de la prisin en particular, se desarrollé un sistema de prevencién del delito y correccidn de la condveta de los delincuentes con el propésito de reincorporar al sujeto ala vida productiva —_—_ 7 Foucault. Michel. Defender la sociedad. México. FCE 15 Foucault explica que la reforma del sistema penal y la ineorporacién de téenicas de disciplinamiento, se respaldé en el saber que las ciencias humanas produjeron a partir de refinados métodos de registro y observacién de la conducta de las personas De esa neradora de discursos legitimadores, manera el derecho dejé de ser Ja Unica instanci: y el discurso posbilitado por las ciencias humanas, permitié un nuevo sistem de vigilancia, acorde al proceso de complejizacién de las sociedades modernas. A partir de cege momento la sociedad en general se constituyé en un sistema de vigilancia: del -patrén al trabajador, del hombre @ 1a mujer, del advlto al nino, y as vicumas SS convierten en victimarias en algunas ocasiones también. Con Ja emergencia de las sociedades disciplinarias, el poder se vuelve ilocalizable, porque se desplaza por cada nodo del sistema social, en red. La imagen de las sociedades disciplinarias particularmente, golpea de manera abrupra la idea de justicia como expresién de la defensa de los valores de vida y libertad. Lvego, a suefio de la raz6n languidece atin mas al enfrentar el desenlace fatidico de la historia modema: las guerras mundiales. Sobre Jo que se aprendi6 en dichas guerras, no ¢S seguro, ya que segin el anélisis que Wallerstein desarrolla respecto al periodo de posguerra muestra que la dominacién continus y persiste hasta la actualidad, incluso con sus mismas ticticas. Los patses vencedores en la guerra, procuraron mantener la hegemonfa.econ6mica sobre eA AN NE SN tos mas débiles, bajo el nuevo discurso desarrollista. La independencia que los paises colonizados reclamaron tras la guerra, se otorgé junto a una oferta de desarrollo econdmico, que ha servido para mantener antiguas relaciones de dependencia entre Tas naciones. La dltima transformaci6n de la economfa-mundo capitalista, que evolucioné de la teoria del desarrollo al neoliberalismo de mercados, ha generado estragos cada vez. més profundos a nivel social, ambiental y politico. Las reglas que institueiones como a Banco Mundial (BM) o el Fondo Monetario Internacional (FMI), imponen a los paises stabilidad y en vias de desarrollo violentan de manera cada vez més profunda Ia bienestar de la poblacién de estos paises, Para Wallerstein os Himites que ha tocado el sistema-mundo, lo conducen 2 st jinminente final, Segtin su prospectiva, en el trayecto, se presenciarin las convulsiones 16 vilentas de su caida. Algunos de los ejemplos que él menciona y que son recuperados cn la parte final del tercer capftulo, son el debilitamiento de la institucién estatal y sus consecuencias: tendencia @ la privatizacién, fuertes conflictos sociales y amenaza de filtracién del crimen organizado. A nivel global, se vislumbra una migraciGn masiva por falta de seguridad y empleo en Jos paises del sur hacia los del norte. Ello sera ocasién de manifestaciones racistas y venofébicas, aunque al mismo tiempo representan la oportunidad de desarrollar una conciencia multicultural y pluralista. Las respuestas ms violentas, pod encontrarse en grupos radicales como Jos terroristas. Sin olvidar la amenaza siempre latente de una catastrofe nuclear. ta pregunta que ha estimulado la realizaci6n de este trabalo de tesis persiste. Qué posibilidades existen de habitar un universo cultural pluralista, en el que las naciones se sencuentren vinculadas mediante el espeto de reglas de sana convivencia y cooperacién? {Bn qué tipo de experiencias puede encontrarse un eaves en 6S sentido? {Por qué pensar que las aeciones colectivas de lucha por mayor justicla no Se diluirdn en el olvido histérico? Estas preguntas son Tas que buscan responderse en el euarto’ Y thtimo i | ‘Ante el escenario poco alentador que describe ‘Wallerstein respecto a nuestra actualidad, | capitulo. Fl desarrollo general del cuarto capitulo, se centraen la deseripcion de Ta historia de los | movimientos antisistémicos. La jntencién de realizar ese recorrido, es poder mostrar de qué manera estos movimientos han constituido una experiencia de lucha que ha contribuido a generar condiciones de mayor justicia para grupos ave tradicionalmente habjan sido excluidos de derechos y reconocimiento, La historia de los movimientos amisistémicos ademés, permite observar un proceso de transformacion en las técticas de tucha, en los objetivos que se persiguen, incluso en la eancepci6n de 1a idea de justicia AAungue su papel no es determinante para garantizar Ia permanencit de sus conquistas, ni la posibilidad de que logren erradicar injusticias actuales, se logré una reflexién que busca brindar esperanzas razonables respecte a le que se puede esperar de estas luchas histéricas por la justicia, Asf, el capitulo abre con una reflexion sobre el significado de estas experiencias, sin pretender alimentar falsas expectabvas La reflexién se encuentra respalda en el pensamiento de Immanuel Kant y el de Hannah Arendt. 7 _———————————————— Al igual que nosotros, Kant se pregunt6 por las posibilidades de vida justa para su presente, En el reconocimiento de Jos limites que la raz6n humana impone al conocimiento, Kant sabfa que era una imprudencia afirmar lo que serfa el futuro, sin embargo encontré en el hecho de la libertad humana una puerta aa esperan?a: El texto ue se retoma del autor es Si las sociedades se encuentran en Progreso hacia mejor. trabajo en el que se pregunta cémo reconocer si las sociedades muestran signos de progreso, se encuentran estancadas, 6 peor atin, retroceden. Kant encuent™s gus la especulacién racional no offece una respuesta suficiente, por To que Fecur® @ la observacién de la experiencia, La revolucién francesa y la independencia horteamericana, son los datos de experiencia en los que bas6 su reflexién. Para Kant, dichos acontecimientos ofrecen un conocimiento que pone en alta estima el valor y sentido del género humano. La actitud entusiasta que se manifiesta por la revolucién, no puede sino representar una disposicién moral de Tas personas qe reconocen el valor del ideal, De modo que se atreve a decir que incluso si la revoluci6n fracasara, si las personas olvidaran en un tiempo el sentido de ta lucha, de cualquier manera la aparicién de un ideal de tal envergadura, representa una esperanza de progreso.*Pues, existira ya como referente siempre disponible para futuras luchas. Es por tanto, el resguardo de esos pensamientos y acciones ejemplares en la memoria, 1o que constituye una experiencia de la que se puede abrevar al momento de emprender nuevas luchas, al tiempo que las nuevas acciones continian enriqueciendo la experiencia humana. La aspiracién a la construcci6n de un universo cultural pluralist Tigado por vineulos de reciprocidad simétrica, es muestra de esa ampliaci6n de significados que enriquee® la experiencia humana vuelta historia, es decir acervo valioso. Hannah Arendt hablaré en ese sentido, de Ia existeneia de-un mundo comin, en el eval Jas personas entran y salen seglin el proceso de nacimiento y muerte, Ese mundo es construido por Tas distintas generaciones de seres humanos y puede ser preservado gracias al registro de la memoria histérica. Lo gue queda inscrito en ese relato sin ® Kant, Immanuel. Filosofia de [a historia, México, FCE, 1979. p. 108. 18 CC EIE’'S ‘v= Principio. ni fin. dirti Arendt son las aeciones y discursos que resultan ejemplares. "Ex meatiante estas dos formas, que cualquier ser humane logra su libertad, pues ha sido capaz de trascender el mundo que le es dado al aportar algo nuevo. La historia en ese Sentido, representa para Arendt la apertura a la posibilidad. Por ello diré que si se observa toda la historia politica, cominmente el modelo ha sido el gobierno de un solo hombre sobre una poblacién diversa a la que se pretende controlar. Finalmente, la satisfaccién momenténea de orden y estabilidad no ogra perdurar, Porque logra irrumpir en cada caso ta accién transformadora de quienes cuestionaron las condiciones dadas y se propusieron cambiarlas, Lo que puede inferirse de tal Ss argumentaciones, es que ningun régimen de dominacién Permanece para siempre, y que las acciones transformadoras ‘onstituyen un hecho que Se preserva en el patrimonio de la experiencia humana. Esas acciones alientan la esperanza de la erradicacién de injusticias porque de ello es testigo la historia, aunque ‘ampoco puede garantizarse el logro definitivo de la justicia, Para el caso del proceso modemo, se cuenta con valiosas experiencias de lucha en ese sentido. Como bien lo anticipé Kant, tras la ejemplaridad que constituyé la revolucién francesa, un grupo tras otro ha retomado su promesa exigiendo su cumplimiento.'°La historia de Jos movimientos anti stémicos, permite rastrear ese proceso de lucha inspirado en los ‘deales de libertad, igualdad y fraternidad. El inicio de esa historia puede situarse en _ 1848 cuando estalla la primera lucha anti-sistémica, representada por la clase obrera La exigencia primordial de este grupo era el reconocimiento de la ciudadania mediante la ‘iniversalizaci6n del sufragio, Pronto pudieron advertir que la mera accidn violenta no Serfa suficiente para lograr sus objetivos, por lo que se constituyeron como partido Politico, Su estrategia era la toma del poder estatal, luego lograr Ia transformacién del mundo hacia una sociedad sin clases. La presién que ejercieron a nivel politico, fue Suficiente para que se les otorgara la ciudadanfa, ademas de beneficiarse de otros bienes Sociales como un estado benefactor y acceso a la educacién, { Afendi. Hannah. La condicién humana, Barcelona, Paidés, 2006, p. 225-231, " Kant Ib. p.110. 19 ‘Tras las guerras mundiales, se gener6 una reorganizacién geopolitica, el nuevo discurso que imperé en ese momento fue el del desarrollo. Una breve etapa de prosperidad parecfa consta ar la viabilidad de la propuesta, se elevé la calidad de vida en general y se amplis el sistema universitario a niveles sin precedente. Pero en 1968, fueron esos mismos estudiantes formados en las universidades, los que pudieron peratarse de que e] Estado benefactor no podria sostenerse y cualquier esfuerzo por lograrlo implicarfa mayor explotacién para el entorno humano y natural. Estos nuevos movimientos rechazaron en gran medida la estrategia y los propdsitos de sus antecesores: ni partidistas, ni deseosos de introducirse en el Estado, como tampoco creen en Ia intensificacién del proceso productive como etapa necesaria para alcanzar el objetivo de una vida libre de dominacién. El tema de clases qued6 desplazado para incorporar nuevas problematicas, Para 1980, la presencia de nuevas crisis econémicas y la inserci6n del modelo neoliberal is de los movimientos antisistémicos. La conciencia de dio lugar a una reinvencién mai los efectos nocivos del sistema econémico mundial, desborda los mbitos estatales, y estimula el surgimiento de una nueva ciudadanfa cosmopolita, cuyas denuncias son los riesgos globales que ocasiona el sistema. Los nuevos temas abordan ambiente, racismo, pacifismo, derechos humanos y justicia. Sobre las estrategias que emplean y que hacen posible que mantengan una interaccién planetaria, se encuentra el uso de redes sociales Estos grupos procuran una organizacién no jerarquizada. Desde lo local y conformando redes de cooperacién a nivel global, identifican temas comunes y trabajan incorporando la experiencia de movimientos que los han antecedido. Su fragilidad y fortaleza al en su horizontalidad o1 nizativa mismo tiempo, rad y en la répida conformacién lograda a través de los medios de comunicacién. La pre: 1 de estos grupos ha sido importante para poner en evidencia los problemas globales, aunque no es suficiente segin algunos autores, para que sus demandas sean concretizadas. La apuesta por instituciones globales por tanto, igue considerada como tuna necesidad, junto a esa aspiracién, se mantiene el temor de que una institucién con ese gran poder, se desvirtie en una especie de macro dictadura internacional. No es posible saber qué ocurriri, El espiritu en el que se desarroll6 este trabajo de investigacién, no cesé de confirmar el cardcter sorpresivo que constituye a los procesos 20 histiricos y su tendencia a crecer en complejidad. Segiin las estrategias de lucha que se han devartoliado en ka actual era global, se puede inferir que las formas de dominacién se verdn renovadas en la superacion de una economia industrial a una basada en el conocimiento, Quizas el control sobre los sujetos se tornard cuda ver més sutil aunque & 4 mis efectivo. La la vez se asimetria entre naciones ser mayor, Ia dominacién en ese sentido continual 4, Pese a eso, el registro en la memoria de acciones ejemplares que han tenido lugar en Ia historia, estaré alli como referente disponible que incentiva la esperanza y llama a la responsabilidad a los actores hist6ricos de nuestro propio presente. Tal gesto, es el més humano, ya que pese a Ja incertidumbre se asume el riesgo por lo que se considera digno de luchar. Ese acto de decision solidariza a las hhumanidades pasadas, presentes y futuras, que desde el relato vuelto vestigio encuentra el camino que orientaré a cada generacién en la lucha permanente por la justicia. a 94187 HACIA UN PROYECTO ETICO-POLITICO INCOMPLETO DE JUSTICIA, 1.1 De la necesidad de elaborar un ci ncepte ético-politico incompleto a. de jus Hacia un proyecto ét )-politico incompleto de justicia enuncia un viraje en el horizonte rector de la justicia, que va de la aspiracién a la completud de la justicia, a una visién que reconoce y asume Ia imposibilidad de garantizar la meta de los procesos histéricos. La nocién de incompletud fue elaborada por la fildsofa Agnes Heller'', con Ja intencién de mostrar una actitud critica respecto a las concepciones de justicia que han dominado en occidente, que en la ingenuidad de su perspectiva terminaron por pervertir su Propésito. El mundo perfecto tiende a volverse tirano porque ignora la existencia de la libertad. EI tltimo esfuerzo por pensar a a justicia como un proyecto completo, estuvo a cargo de las filosoffas de la historia. El entusiasmo por el progreso, representado por la cultura Europea en esa narrativa de una historia universal, terminé por cancelar Ia validez de miiltiples expresiones histérico-culturales. Sobre el tipo de acciones que encontraron justificacién en esta visién finalista de la his Tecursos naturales y culturales que propicié, como en la fatidica experiencia de la ria, se puede pensar tanto en el proceso de colonizacién y la explotacién de segunda guerra, y el genocidio que en ella tuvo lugar. El registro en la memoria de ésta ‘iltima forma de barbarie provocada por la ignorancia que deviene en intolerancia hacia los otros, se convirtié en el acontecimiento decisivo que puso de manifiesto la necesidad ta de la de defender el derecho a respetar las diferencias. La abstraccién universali " Agnes Heller es una flisoa hingara, principal exponent dela escuela de Baas. Trabajo con de Giorgy Lukécs, Sus trabajos parten de una ein a a movernidad que procura sala la limitaion de sus concepts. asf como las nociones que considera ain podrian desarollarse, tal es el caso del concepto Stico-potica incompleto de justicia. Lo que se expone a continvacién en este apanado. represents un resumen del libro, Mads ald de Za justcia, texto en el que desarolla la noci6n de una justicia ncompleta Dicho libro se propone tres objetivos centrale: realizar una metacritica a las teoras tradicionales y rmodernas sobre Ia jusicia establocer que ls alegatos en tno a la justia en la modernidad se cntran los valores de vida y libertad, indicar que la meta dela jusicia se encuentra mas allé de sta Vee Heller. Agnes. Més alld de la justia, Madrid Planeta-Agosini, 1994, 22 5 concepeién moderna de justicia se vio asf enriquecida por esa nueva consciencia que reconoce y defiende la pluralidad. Este hecho, aunado a la ereciente interdependencia cultural que Ta globalizacién ha generado, ha vuelto ineludile la necesidad de pensar tina forma de convivencia respetuosa de las diferencias garantizada por normas de justicia La pregunta crucial que se desprende de esta exigencia es ge6mo podria sobrevivir est pluratidad de formas de vida, sin ser homogeneizadas por Ia niversalidad de las normas de justicia? Esta pregunta que parece expresar una problemética actual, en realidad ha sido un tema basico dentro de la reflexién filoséfica, en ese sentido la soluci6n a ésta disyuntiva cuenta con uni larga experiencia. Tradicionalmente el debate filoséfico entre unidad o diversidad tendié a privilegiar la primera opcién, apelando a un argumento epistémico-ontolégico, basado en Ia idea de que la verdad es esa unidad que sélo el pensamiento racional es capay de contemplar. Desde esa comprensién se fundamentaba la necesidad de establecer un orden ideal regido por una ley homogeneizante. Tanto en la Grecia clisica como en el pensamiento politico modemno, el principio rector del orden pablico, se ha basado en ese ideal de ‘unidad, La pluralidad en cambio ha sido vista con cierta preocupacién, ya que se asocit al desorden y al conflicto que impide la paz, y por tanto el desarrollo de Ia vida publica En la actualidad y tras mas de dos mil afios de historia occidental, el pensamiento ya no pretende la reconciliacién 0 sintesis de las diferencias,""sino el respeto y reconocimiento de su existencia, no s6lo como un asunto epistemol6gico o de apreciacién estética, sino como un compromiso ético-politico. Esta nueva comprensi6n no pretende fundarse en la certeza de la unidad de la razén porque ha Hegado al reconocimiento de sus limites."La riqueza del —_—_ © mmanuet Levinas. realira una severa critica al pensamiento occidental respecto a su afin de hacet derapaover las diferencias mediante un proceso de sntesislogrado a través el metodo diakéctico. En su aera) nemo y el orre aborda est impontviidad de disoucion de los eontrarion, ens IWS ta presencia de 10 otro 6 del otro, came wea dimensiéa inabarcable qe no 1 Levinas puede ser el préjimo. 0 la muerte ¢ Levinas, Emmanuel. El tiempo ¥ el ‘otro, Barcelona, Paidds. 1993, Bee acco ce gener ext Fractura radical en et pesamionto Ia ual va de Ins certezas Emmure #9 Feat Je nceridumbre, se pueden mencicnar dos condiciones principales que posiilitaron, #40 sates La primera se neiewe a Tas eonsectepeias generadas por el propio proceso refieXo impulsado 23 a dominarse, El otro en el tiempo 0 Dios. siwnifieado de esa ruptura radical, podria encerrarse en la idea de que “hemos perdido certeza y ganado libertad. “lB gta frase abre espacio para imaginar la profundidad del cambio de horizonte de sentido que se es configurando, y las implicaciones te6ricas y précticas que conlleva. Justo en esa linea de tensién que supone este cambio sociocultural, se sta esta investigacion. Hacia un proyecto ético-politico incompleto de justicia, significa la apertura 2 tna reflexién sobre las implicaciones que supone ese cambio que trastoca Tas simientes que habian sostenido al pensamiento politico modemo, ¢ incluso me atreverfa a decir que ha removido al pensamiento occidental Esta aseveracién se respalda en fa transformacién de concepciones claves como Ta que va de lo completo a lo incompleto, de fo universal a to plural de ta certeza a la incertidumbre, donde ademas la dimensién de aplicacién ha escalado de un ambito estatal a uno global La tensién que produce ese vaivén queda de manifiesto en las fuerzas que se debaten en el conflicto: los nuevos poderes del capital trasnacional, la debilidad de los Estados nacionales y et surgimiento de multiples expresiones de la personalidad que van desde el consumidor hedonista hasta Ta emergencia de una pore ponsarinto midero. li ops con el mite de sus pois fronteras desizindes hci oo de ear compli Kant en ese sentido ese primer pensador que estableee fos mites do frie human, sefelando ue eis hechos co’ el de a ibertad gue no pueden ser conoides 2 omprensig Manes Je Tos eiencay de ht naturaleza, Posteriormente ‘Niewsche se encargs oe ta aa oe desu ited. al ediicio de fa cultura occidental al atcar al lenguaje racial, Segue derrrnhar deve enguaje como el conoimiento no son sino va suerte de esrategas de conservacién aera jc d a fragidad humana supoitada a a contingeneia de vida, or ello la Glowoa Be ate coe raion com densa ane el a7ar Desps de Nietzsche na sere de pensadores ontinvarm ahonndo ideas ore vuelve a plantcar la pregunta por el Ser dornfcar que een pus we dctcrminad peri slo aecedes 9 una inermcsion 0c aa eanit anes Die aa ya esuhlecide ta neces de ernst el mst de las cenees temps Tigmanas desacand en ests ifimas wit eile condckin de einen interpre Contemporinen de Nictsche, Fred et Ge que gobieran Ia mente de los individues Canteen gr el suo, convirtcnols co una sic insane: ll, yo. sper ter as ine pa erirenca, Nicns canto el mbit desi se estan reatizandy oo har npn ylver a crc en Ta cen: a fisen cia! fendmeno de Feet apna dsorden onstuv, See eto timo ase Meri, Edgar, 1 ta vid, Maki. Citar, 19S, SS. Esto oh eo al rime axpeto, respecte a ei oc po experi strc de as ran as fs ces ron pallet ol eh sa ee rare finaente e el proces cf elabiacis et gus ba snide poner de eieve See carder plural ue consttuye al mundo, ete frase es una interpretacisn respecto una reflexion que Agnes Heller reali re aque jucgan las Siguiente Forma: “Pero Ia ciencba soci Rencs. Historia y ft tun sentido similar: Heid Irisqueda de fe Ieias sorialcs en este nuevo conteNto de comprension, La frase o a nos prometeni cettezae al contrarie, wo dara libertad” Helle 1 ssabrevivind fa moderidad”, Barcelona. Peninsukt, 1991, p. 58 24 nueva ciudadania cosmopolita que se sostiene sobre 1a concepcién pluralista © incluyente de la justicia, Todos estos actores juegan un papel clave a la hora de elaborar un pronéstico razonable respecto a las posibilidades de justicia para nuestro tiempo. En principio, la investigacién parte de la concepcién ético-politica incompleta de justicia elaborada por Agnes Heller, porque refleja dos cuestiones que considero fundamentales: el cambio en el modelo de interpretaci6n de la justicia, y su propuesta de estructura normativa que se apega a la exigencia de pluralidad. Como critica de la modemidad, Heller pone de relieve los aspectos valiosos del proyecto moderno y busca impulsarlos desde el reconocimiento de los limites impuestos por el caricter indeterminado de los procesos histéricos, que Ia comprensién universalista descuid6 Consciente de la perversidad que puede ocasionar las concepciones abstractas y universalistas, renuncié a pensar la justicia como un proyecto completo. Su el reconocimiento de las consecuencias de la critica a la modernidad, impli estrechez de mirada implicita en la idea de completud, sin que ello signifique una renuncia a lo moderno. La postura de Heller, y que asumo en esta investigacién, es que la opcién politica abierta por la modemidad que es respeto a la libertad y a Ia vida, sobreviva y prospere. Heller prefiere la condicién modema a la premodema, porque abre la posibilidad de que las reglas de justicia sean aplicadas sin distincidn, a todos los miembros de que cada grupo social, Esto quiere decir que antes de la aparicién de este horizonte de sentido, la estratificacién social era una condicién incuestionable porque se consideraba natural En las sociedades premodernas la desigualdad no era un problema, porque imposibilitaba el juicio respecto a las acciones de una clase sobre otra, o de unos suijetos sobre otros no sujetos. Por ejemplo, las acciones de una mujer frente a un varén no podian considerarse justas o injustas. pues la inferioridad de rango de las mujeres, las exclufa del poder de impartir justicia © injusticia." 'S Ver Heller, Agnes. Mas alld de la justicia. op. cit. p. 37 TC CwCwCc ee istérica Jos libers del Lat modernidad al situar a Jos sujetos en su conting cia determinismo de la uadiciGn y abrio ka opeién de que las condiciones sociales existentes pudieran ser cuestionadas. En ese sentido es la libertad precondicién de la igualdad. Con el sélo hecho de situar a las personas en su contingen: historica, se abre la opcién de que se puedan cuestionar y evaluar las Condiciones sociales existentes hasta imaginar un mundo de igualdad. Desde esta perspectiva justo significa aplicar las normas de manera igual a todos los miembros que conforman un grupo social,'*no aplicar dobles estindares, en funcién de rangos, clases, género, intereses, gobiernos o disputas territoriales. Por su cardcter severo e inclemente al momento de aplicar las normas, se identifica a la justicia como una fria virtud, indispensable para la coexistencia humana."’La sola representacién de una mujer que con los ojos vendados Sostiene entre sus manos una balanza, remite a la idea de que es universal porque no hace diferencias. “Por frfa que pueda ser esta virtud, es una virtud capital, La legitimidad, la validez de cualquier sistema de normas y reglas depende de si los miembros de una determinada sociedad practican esta virtud y de la medida en que la practican."*Aspirar a eliminar las relaciones jerarquicas y discriminatorias en la humanidad entera es un ideal valioso. Desde la idea de igualdad, entendida como reconocimiento mutuo de la dignidad que constituye a cada ser humano se hace patente la pluralidad. Igualdad y pluralidad por tanto, son conceptos complementarios."? Este es el espiritu que subyace a la propuesta normativa de Heller, que vislumbra la Posibilidad de construcci6n de un universo cultural pluralista, en el que las naciones y ty Esta es la redefinicién que hace Heller del concepto formal dejusticis bd. p. 16 ” La expresidn de la justicia como una fra vind es utlizada por Heller pars referirse a su inclemente juicio. thid, p. 23 "ibid. p. 24 "" Esta idea es argumentada por Alain Touraine en su texto Jgualdad y diversidad. Véase Touraine. Alain {gualdad y diversidad. Las nuevas tareas de la democracia, México. CE, 2000. Por su parte Michael Walzer. hablaré de lo absurdo que resulta creer que el ideal de igualdad refiere una eliminacion de Ins diferencias. Segtin el autor el origen del ideal se sustenta en la busqueda de erradicacion de formas de dominacién de una clase sobre otra. Lo que se busca en ese sentido es la eliminacién de rel Jerdrquicas. Esta perspectiva es la que encierra su concepto de igualdad compleja. Véase Walzer Michiel, Las esferas de la justicia, México, FCE, 1983, pp. 9-12. 26 a 3 ic Jos individuos que las conforman, estarfan ligadas por vinculos de reciprocidad siundriea, Este propésito, en principio, supone la idea de que tx humanidad deberfa constituirse como un grupo social” y dejar de ser sélo una idea regulativa, como ha sido hasta ahora, El ideal de humanidad fue abordado por primera vez a finales del siglo XVIII por Kant y Hegel,"‘quienes desde la filosoffa de la historia dieron lugar a un primigenio referente de la era global, y los retos ético-politicos que entrafia La acid pottica actual no se Timita un pats o ultra ni sguiraa varios pases cultuas, 8 historia mondial una antigua idea de las flosfias dela historia aplicada a todas las époeas seh hecho realidad en nuestro tiempo. Dferentes culturas y por To tanto diferentes historias no slo comparten cl nism planeta. sino también comparten el destino del globo, Cuando slagimos 28 humanidad tenemos presente este hecho innegable: nos referimos pues la humanidad como 1a suma total de seres humanos que habitan el globo. Heller considera que esta consciencia de un destino comin compartido, ya estaba implicita en las reflexiones de Kant y Hegel como horizonte ineludible en la propia nocién de humanidad, en tanto que compromiso moral 2De hecho fue Kant, el primer filésofo que desarrollé un concepto de dignidad humana apelando a esa cualidad fundamental de la persona, que toma inadmisible toda accién que la degrade.“El cuestionamiento sobre el abuso o explotaci6n al que podian estar expuestos Tos pueblos colonizados, invita a pensar en que el compromiso ético-politico del fl6sofo inclusa al total de 1a humanidad. Por otro lado, Hegel en su Filosofia del Derecho se refiere Eas 2° para Heller ol grupo social es Ia delimitacign del sector al gue se aplican determinadas normas d= jteln, Deido a ia inerdependncia cultural que ha generado ta globalizacion Helier consiee 1 ia eect constitute camo grupo soko que supane cl etablecimiento de una normative de validez internacional 3 Filosofos modemnos, ubicados dentro de fa cortiente de ‘Ambos contribuyeron’a Ta conformacién de la filosof rogresiva y universal 2 Ibid. p. 51 2 fem. p. 52. ae eee dignidad humana desarolla por Kant. ha sersido como fase argumentative ofa ome de los derechos humanos. Dichs Qesarralla por Kant. en sus reflexiones eticas, Véase Kant, Tnumanucl. Critica de la vazén prictica, Mexico, Por, 2007 rensamiento denominada Idealism aleman, dc la historia, caracterizada por una idea 7 ————— tambien a lw reprobate que resultan has aveiones de dominacién y explotacién sobre cualquier person, apelando de igual manera a-un sentido de d jgnidad humana, Adn y cuando se ha crticado su interpretacin de la historia madera con Europa, a la cabeza del proceso civilizatorio precedida por el resto de los pueblos que no alcanzaron al grado miiximo de evolucién cultural, en Hegel Ia idea de dignidad ya esté asociada a la de dignidud. En ambos autores, 1a nocién de humanidad encuentra una resonane!a particular en el contexto histrico: general de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX cuando se derrumbaban los fundamentos del poder politico impuestos por la tradicién mondrquica y eclesial Pese a que Ja humanidad como referente ha impulsado la defensa de derechos de las personas excluidas en el reparto de bienes politicos y sociales en diferentes momentos de la historia moderna, aparece slo como una idea regulativa, susceptible de ser uuilizada en beneficio de intereses individuales. Heller, reconstruye los juicios ‘Niremberg” para ilustrar la ambigiiedad que subyace a la idea de humanidad: “Por medio del proceso de Nuremberg, la humanidad se estableci como excepcién representativa, pero no como regla. No podemos explicar por qué fue justo el juicio, aun cuando sentimos y saberos que lo fue. En la sentencia se formula la pretensién de que la humanidad deberia ser un grupo social, que deberfa convertirse en algo que no €s- Y todavia no es un grupo social.”"" La idea de humanidad es utiizada como estandarte de diversos discursos politicos, adn en aquellos que sirven para enmascarar los crimenes que denuncian, como ocurrié en 3 : Jos Juicios de Néremberg. La teconstruccién de este ejemplo se toma paradigmética para Heller, porque expresa al mismo tiempo, un ideal vacfo de humanidad y su potencial perversién, Para Heller, la humanidad entendida como universal deriva en perversién si no se reconoce Ia necesidad de establecer un nuevo contrato entre las 25 Los juicios de Nuremberg consttuyen el primer ejemplo de procedimiente jurisdiceional de orden inte cieal Se establecteron al terminar Ia segunda guerra mundial por inieiativs de los aliades PAPA aera los enfmenes realizados durante la guerra por los eres nazis. Aunque su clemnio consttese hoy un referente en términos de justicia internacional, fo cierto es que su actuacion fue parcial pues silo se jurg6 al erupo perdedor. dem, p. $5) 28 sitRREAE aca diversas culturas.2”En la creacién de acuerdos interculturales, se encuentra la posibilidad de comprender a la humanidad como grupo social enlazado por vinculos de reciprocidad simétrica que generen el reconocimiento de la gualdad y el respeto mutuo, como precondicidn para la imparticién de justicia. Interpretada como virtud capital, 1a justicia implica el establecimiento de acuerdos rminimos pata la convivencia social en contextos histéricos social y culturalmente determinados, Precisamente, la nocién de virtud capital, permite a Heller sobreponerse & ta idea moral de virtud universal. Mientras la noci6n de virtud capital abre las puertas al pluralismo cultural, la nocién de virtud universal las cierra. El primero, reconoce las indo las excluye: singularidades y las compara, el s Sino pueden comparase clasificarse o eraduarse cultura diferentes y singulares en modo alguno. no hay justcia, y acusar a eualguiera de dobles estindares carece simplemente de sentido, es n¥l0 Y vacio.. Si as personas. son encarceladas. torturadas. asesinadas, humilladas ¢ incluso discriminadas. en determinadas culturas es enonces. y slo enfonces. cuando nuestro sentido de juscia nos exige aplicar cexactamente los mismosestandares de justia 8 tods ellos. El que las mujeres Heven velos 0 minis 5 una cuestGn de gusto cultural peculiar. Sin embargo. de ser forzadas a evar velo. je d= ser une evesticn de singularidad cultural y se convierie en una cuestién de eoercin o fuerza a Si existe coercién 0 fuerza, no se respeta el reconocimiento de la dignidad que toda persona porta, Las culturas pueden juzgarse como justas 0 injustas si el referente en las, practicas culturales es la dominacién 0 el uso de Ja fuerza. Es por tanto, la necesidad de erradicar prictcas de dominacién y sojuzgumiento, la motivacin principal que gua la jsticia, Para lograr este propésito, la humanidad deberia ser el grupo social al que se apliquen las mismas reglas. Seasin Heller, son ls cultras y no los individuos entre quienes se realizaria el contrat. Esta postrs conhanta de manera abiena ala postura que desarrlla John Raw. Segin este autor los seres harman pactan justamente, pues han sido descargados de intereses subjetivos a) fer reconducidos a un estado de Poreza original. representado por Rawls con 1a metifors del uso de un velo de ignore Eltexto Teoria seta jusicia,elaborado por John Rawls, se ha convertido en um referente Iss de las. tworfas onierpordneas sobre Ia justia. Dicho wabajo continua en la Iigiea de las won ccontractualistas. s6l0 que ha modificado a idea del “estado de naturalera por la d a superar la ae de acudir a Un hiowstico estado original. Heller desarrolla su concepto de justia dingmies TVcoat cualquier momentores propicio para realizar el pueto ya gue no se pare de condiciones ideales Sina de tealismo de las condiciones existentes desde las que se discute el cambio d= unas norms Por tras consideradas justas, 2 Fdem, pp. 62-65 velo de ignorancia.” Pa 29 EJ] maximo fundamento normativo para Heller, debe ser el establecimiento de la regla de oro, ya. que querer para otro fo que se desea para sf, supone un reconocimiento muro de igualdad. Esta posibilidad aunque sigue pareciendo una meta Iejana, ¢s una opcidn abierta por Ia modernidud, entendida como el momento historico donde se comprende que las desigualdades son construcciones que se pueden erradicar al modificarse las leyes que se consideran injustas. A esta nueva concepeién se Ie denominaré justicia dindmica, su representaci6n no es la de la mujer ciega, sino la de mujer que mantiene Ja vista en alto, que en una mano porta el simbolo de la paz y en Ja otra el de la guerra” Esta representacin implica que ta justicia no reside en a aplicacién de las mismas normas a todos, sino la agudeza de juicio para poder comprender Ia circunstancia. Su aspiracién es que la paz tenga mayores posibilidades que Ja guerra. “Es en la modernidad y sélo en la modernidad cuando cl proceder de la justicia dindmica se ha vuelto cada vez mas, si no por completo, en algo dado por supuesto.”"Ello significa que as normas de justicia pueden ser cuestionadas ¢ invalidadas proponiendo su sustituci6n por normas alternativas. Las normas de una sociedad determinada por tanto, nO $° dan por supuestas (justicia estitica), al contrario suponen que"...pueden ser invalidadas como injustas si los eriticos de éstas reeurren a criterios normativos Cuya observancia contradiga a las normas y reglas a invalidar.“*'Su procedimiento por excelencia deberd ser el uso de una racionalidad comunicativa “...porque el valor (0 norma) observado jnvalida o convalida las normas y reglas existentes, y esto s6lo puede suceder a través de ta argumentacién racional como justificacién.”“EI surgimiento de la concepcién de justicia dindmica y el uso de la racionalidad diseursiva como procedimiento de evaluacién de las normas, evita que la justicia tenga que recurrir al tipo de argumentaciones que apelan a un supuesto estado de naturaleza para validarse. Para Heller todas las teorfas contractualistas establecieron formas de dominacién, ya que una vez realizado el pacto, las personas no podian modificar el sistema de justicia debido = ue éste representaba el modelo por excelencia. Ese modelo perfecto era extraido de un hipotético estado natural que To Tegitimaba como sinico, Con Ta aparicién de la justicia —_ 29 og alegoria de la justcia pintada por Gioto en a capila de Arena es. sin embargo, uns represent del concepto dindmico de justicia, y no del estética”. Ibfd. p. 25 "pid, p. 171 hid, p. 151 * hid. p. 185, 30 dinimica y la ra jonalidad discursiva como procedimiento, se ha podido superar él rivygo de dominacién de dichas tworfas, porque en cualquier momento las reglas de justicia pueden ser cuestionadas. En ese sentido, el momento original del que habla el contractualismo, es siempre el momento presente, 8 Después de este planteamiento general de la perspectiva teérica de la que parte el concepto-dtico politico incompleto de justicia, pasemos a la descripetén de Ta propuesi8 normativa que realiza Heller. 12 El concepto ético-politico incomplete de justicia: su fundamentac ion normativa y procedimental. Desde una evaluacién critica de la concepeién modema de justicia y reconociendo las necesidades de la sociedad global, Heller aspira a establecer un fundamento normativo™ comin para diferentes formas de vida que convivan libres de dominacién, & través de la procuracién de reaciones de cooperaci6n y solidaridad. La propuesta busca responder a Ja pregunta: “{Cémo es posible un universo pluralista en el que cada cultura esté ligada alas demas por lazos de reciprocidad simétrica” gu respuesta es que no es posible, ni deseable establecer una forma de vida como la mejor, pues en un universo cultural pluralista cada forma de vida puede ser considerada como Ia mejor Por quienes la viven. En ese sentido y desde esa conviccién Heller sostiene: “...debemos renunciar, ¥ de hecho hemos renunciado, al ambici so proyecto del concepto ético-politico completo de justicia”“°En el pasado, cada alusién a la idea de una justicia completa, s6lo manifestaba el deseo de modificar condiciones injustas por otras que se consideraban justas a partir de un ideal de justicia Los eros sociales de Ta njusticia ra ver, si aeaso alguna, han tendo en mente ete tpo de Justis Cuando convastan sus normas y regs imaginarias con las existntes (las institucionalizadas), 9 planiean ta exigncia de un mundo de perfects Bondad moral, Més bien plnteron 1a esigeneis M9 mayor cantidad. oun diferente ipo, de Hbertad: de un aumento de las opomunidades d= vida (de todos © de un propo social paicular. de nuevas y altemativasinsitusionespoliteas y socal 0 de la admision % tid, p. 317. 3 Una Cetructura normativa para Heller es el conjunto de normas eticas. sociopoliicas y procedimentales que se aplican y tiene validez. en un grupo social determinado, Debido 9 4M rormativa que ella Fropone pretende aplicarse la humanidad como grupo social, se busca una normal conuin a diferentes formas de vida. Ibid. p. 281 'SThid, p.281 “Ibid. p. 281 31 le {de tons ticity on lay institaciones antiguas » esistentes, Estas evigencias brilkiran Si en verdad fuera realizable la justicia completa, en ella no cabria el propio sentido de Jesticls, estimulado precisamente por el reconocimiento de condiciones de vida que Fesultan inadmisibles para otros grupos sociales, Slo puede haber justicia dir Heller. donde hay injusticia, adems, s6lo en un mundo en el que se da menor 0 mayor justicia “ene cabida la personalidad recta que se constituye precisamente porque puede elegir Entre hacer el bien o no, porque vive en un mundo que le permite sufrr Ia injusticia en lugar de cometerla.*Paradéjicamente, un mundo de perfecta bondad, destruiria todo Winculo humano: instiuciones y normas que procuran la coexistencia ya no serfan necesarias.""La justicia por tanto, sélo Puede ser pensada como un proyecto incompleto, ablerto a la evaluacién y transformacién de los actores en cada tiempo y lugar hist6ricos, Esta posibilidad de pensar Ja justicia en términos de lo incompleto, es retomada por Heller principalmente de Diderot, a quien atribuye ser el primero en formular una nocién de justicia incompleta. El pensador ilustrado, considera Ia tarea de Ia filosofia Como una reflexién permanente que debe asumir la paradoja que supone el deseo de aleanzar la perfeccién pese al reconocimiento de las limitaciones humanas que dificultan lograr dicha meta: Formular las cuestiones. afrontar las contradicciones. penetrar en la profundidad de estas evestiones Presupone la idea reguladora de que estas euestiones pueden ser resuclias. Pero se trata de una idea reguladora y no es con debe permanecer inacabada, incompleta, si la vida no roporciona una s6tida base para su acabamiento,*" Al parecer s6lo algunos pensadores como Diderot lograron ver la trampa de la aspiraci6n a la completud, la mayoria de ellos en cambio sucumbié a ta tentacién,!! ea p. 284-285, * Ibid. p. 286. ™ Aqui Heller se refiere a ls filosofias de In historia que vislumbraron una humanidad emancipada y gompletamente racional como meta histérica. Ibfd. p. 280-287 “Ibid. p. 144, & Heller se remite hasta Platén, para demostrar que en miiples acasiones los fl6sofos han cafdo en ta {eniacién de construir concepciones completas de justcia, Para el caso de la modernidad el certor se repite nel pensamiento de Rousseau Kant, Hegel, Nietzsche y Marx. 32 , —_ ae tin Diderot, fa apelacién a ka construccisn de una socieda sta ey manifestacicn det deseo de cambio en el sistema de normas consideradas injustas (justicia dinémica). “La aparicién de la justicia dindmica ha transformado nuestra consideracién de tal modo que Ringing sociedad puede volver a ser completamente justa. sino slo justa en mayor 0 ‘menor medida y, similarmente, injusta en mayor 0 menor medida."""Desde este enfoque Heller elabora su estructura normativa, que es pensada en términos éticos, sociopoliticos Y procedim; ales. En consideracién de esos tres aspectos se pregunta: “;eémo pueden establecerse racionalmente normas y reglas sociopoliticas (y leyes) por personas ‘gualmente libres de modo que, en el momento de ser establecidas, estas normas y gy cesidad si todas las reglas (y leyes) proporcionen iguales oportunidades ¢ igt al libertad para todos’ : Fespuesta es que el aspecto sociopolitico puede cubrir esta 1 culturas logren unirse bajo el reconocimiento mutuo de la igualdad y reciprocidad. La Propuesta apunta asi, a la necesidad de universalizar la regla de oro: Penomino bien politico supremo a la generalizacin y universalizacin de la “regla de oro". Denoming en social supremo a Ia pluraidad de cultures y formas de vida que saistacen los estindares del bien Politico supremo. El bien politico supremo realiza la norma universal de igual libertad Para todos. EI bien Social supremo realiza la norma universal de igualdad de oportunidades para todos La disposicién de los participantes de aceptar y cumplir dicha normativa, es lo que |= compete el aspecto ético. Como su presencia es crucial para el Sptimo funcionamiento de la justicia, Heller desarrolla una reflexién respecto a su condicién de posibilidad. Su Srgumento se respalda en Ia certeza de Ia existencia de personas rectas, Lo que ello epresenta segtin Heller, es que si bien “las acciones de una persona recta han sido consideradas a menudo como fines en sf mismas.” “esto no significa que la Persona se conforme con su recto obrar. Las personas rectas, piensa Heller, aspiran a vivir en un mundo en el que las demés personas sean rectas también, y en el que las normas sociales y morales coincidan. Debido a que la respuesta parece sumergirnos nuevamente én la paradoja de un mundo perfecto en el que la capacidad de eleccisn pierde sentido, Heller resuelve que: “el buen fin implicito en el acto recto no es el mundo moral total DOSS SS™C ERLE © Ibid. p. 288, 291-292, 9-294, 33 re sino cl mejor de los posibles mundos morales. Es devin. un mundo en eb que las Personas puedan decidir el sentido de su obrar, ain y cuando éstas no elijan la rectitud Lo cierto es que deben construirse las condiciones para que los mejores mundos morales Posibles tengan lugar, y eso es de lo que se ocupa una estructura normativa ~al menos en ello esta pensando Helter. 4 cuestiGn decisiva que hemos de plantear ~y resolver- aqui se refiere al tipo de legislaci6n politica necesatia para que se cree el mejor de los mundos morales posibles.“”La Iégica de su argumentacion indica que, al existir condiciones politicas favorables, las personas tienen la posibilidad de ser unos agentes libres en su comunidad, lo que abona a la construccién de los mejores mundos morales. No se puede obligar a las personas a ser rectas, pero si es posible construir estructuras Politicas que favorezcan la personalidad recta. La labor formativa puede hacerse desde Gl terreno politico. Aunque siempre cabe la aparicién de acciones que desde la individualidad de la conciencia ética, transforman la esfera de lo politico. Por ello, la existencia de personas rectas es deseable para el dptimo funcionamiento de la justicia, {a incorporacién de la dimensién ética en la concepeién de justicia que elabora Heller, ¢s felevante, porque de ella emerge la consideracién del azar en los asuntos humanos, la mposibilidad por tanto de que un proyecto de justicia pueda ser completado. Es dec : al pensar la ica debemos reconocer el hecho complejo de la libertad, aspecto en el que Se estrellan hasta las mis elevadas reflexiones sobre lo que deberfa ser, donde las exPectativas se ven frustradas, donde el mensaje original se bifurca en multiplicidad de formas de recepeién. En ese sentido, Heller enfatiza la imposibilidad de que un Proyecto de justicia sea completado. Una vex abordada la dimensién ético-politica de la estructura, Heller desarrolla sus bases procedimentales. Para que el procedimiento sea justo, tanto contestatarios como Contestados deben ser reconocidos como libres e iguales. Si existe un reconocimiento Mutu entre los miembros del grupo social, entonces las necesidades de todos ellos Podrdn ser reconocidas y evaluadas mediante el discurso, La base teérica que respalda el isefio del procedimiento, es la reflexién moral kantiana, en particular procura atender a su méxima moral, que indica que la persona siempre debe ser entendida como un fin en a “Ibid. p. 69, “Ibid. p. 73 34 sino el mejor de lox posibles mundos morales.““Es decir, un mundo en el que Jas personas pucdan decidir el sentido de su obrar, atin y cuando éstas no elijan Ja rectitud, Lo cierto es que deben construirse las condiciones para que los mejores mundos morales posibles tengan lugar, y eso es de lo que se ocupa una estructura normativa al menos en ello esta pensando Heller- “La cuestidn decisiva que hemos de plantear ~y resolver- aqui se refiere al tipo de Iegislacién politica necesaria para que se cree el mejor de los my mundos morales posibles.“"La légica de su argumentacién indica que, al existir condiciones politicas favorables, las personas tienen Ia posibilidad de ser unos agentes libres en su comunidad, lo que abona a la construcci6n de los mejores mundos morales No se puede obligar a las personas a ser rectas, pero si es posible construir estructuras politicas que favorezcan la personalidad recta. La labor formativa puede hacerse desde el terreno politico, Aunque siempre cabe la aparicién de acciones que desde la individualidad de la conciencia ética, transforman Ia esfera de Jo politico. Por ello, la existen de personas rectas es deseable para el dptimo funcionamiento de la justicia La incorporacién de la dimensién ética en la concepcién de justicia que elabora Heller, es relevante, porque de ella emerge 1a consideracién del azar en los asuntos humanos, la imposibilidad por tanto de que un proyecto de just ia pueda ser completado. Es decir, al pensar la ética debemos reconocer el hecho complejo de la libertad, aspecto en el que se estrellan hasta las mas elevadas reflexiones sobre lo que deberia ser, donde las expectativas se ven frustradas, donde el mensaje original se bifurca en multiplicidad de formas de recepcién. En ese sentido, Heller enfatiza la imposibilidad de que un proyecto de justicia sea completado ‘Una vez abordada la dimensién ético-politica de la estructura, Heller desarrolla sus bases procedimentales. Para que el procedimiento sea justo, tanto contestatarios como contestados deben ser reconocidos como libres e iguales. Si existe un reconocimiento mutuo entre los miembros del grupo social, entonces las necesidades de todos ellos podrin ser reconocidas y evaluadas mediante el discurso, La base teérica que respalda el disefio del procedimiento, es la reflexién moral kantiana, en particular procura atender a sv maxima moral, que indica que la persona siempre debe ser entendida como un fin en si misma y jams como un medio para beneficio de otra.*Las reglas que derivan en atencidn a esa mxixima moral son: Se sigue que aquellas (convencion normas, reglas) que regulan la relaci6n sociopolitica entre diferentes cculturas (en el universo cultural plural) deben validadas por todos los seres humanos en secuencias de discurso real verificadas en cada cultura (forma de vida)......cada cultura, cada forma de vida. debe Feconocer como validas las normas. y re las sociopoliticas de cualquier otra cultura o forma de vida. incluso si ha validado, y observa otras diferentes.” Con estas reglas Heller pone de manifiesto el principio de reciprocidad y reconocimiento mutuo, el otto elemento indispensable para que el procedimiento sea justo, es la racionalidad discursiva. Con el uso de la racionalidad discursiva, se espera que cada persona entre en la discusi6n, como portadora de valores culturales, sociales, politicos y morales y no de intereses particulares.“'Lo cierto es que al tratarse de un universo cultural pluralista, Ja cuestién ineludible es cémo hacer coexistir diversas formas de vida en el respeto mutuo y la cooperacién. ;Qué delinea el limite entre la diversidad de valores? La respuesta que Heller ofrece es que, més que una norma concreta que orqueste la coexistencia pacffica, debe tratarse de maximas que den cabida a diversidad de normas coneretas, Esas maximas pueden ser el respeto a la vida y la libertad, debido a que en la actualidad ninguna forma de vida puede defender lo contrario a estos valores, es decir, la servidumbre y Ia muerte. Nuevamente la maxima moral que es pertinente aplicar es la kantiana, la cual reza que ninguna persona puede ser medio para otra, Desde esta consideracién, enlista algunas méximas que gufen la eleccién de leyes de convivencia, MAXIMAS PROHIBITIVAS: a) _Noelegir normas que no puedan hacerse piblicas. “Ibid. p. 314. Esta nocién es desarrollada por Immanuel Kant en su Critica de la razén préctica, como argumentacién respecto a la inalienabilidad del derecho a la integridad de Ia vida de toda persona. La reflexién levada a cabo por éste pensador alemén al respecto, es reconocido como la expresién més acabada y profunda del pensamiento ético en la modemidad. Véase Kant, Immanuel. Op. cit, © Ibid. pp. 311-312. "Ibid. p. 321. 35 b) No elegir normas cuya observancia supone (en principio) el uso de las demas personas como mero medio. c) No elegir nomas que no todo el mundo sea libre de elegir. 4) _ Noelegir normas morales cuya observancia no sea un fin en sf. MAXIMAS IMPERATIVAS: a) Dar igual reconocimiento a todas las personas como seres libres y racionales. b) _Reconocer todas las necesidades humanas, excepto aquellas cya satisfaccion supone el uso de otras personas como mero medio por razones de principio. ©) Respetar alas personas exclusivamente segtin sus virtudes y méritos (morales) 4) Mantener la propia dignidad humana en todas tus acciones. Estas son algunas recomendaciones del proyecto de justicia disefiado por Heller, su propésito ha sido crear las condiciones para la existencia de los mejores mundos posibles. Una estructura normativa éptima y Ia racionalidad discursiva como procedimiento justo lo posibilitan, aunque en definitiva la meta de 1a justcia va més allé del cumplimiento de normas y procedimientos. Porque la meta de la justicia es “la vida buena.” 4.3 La meta de la justicia como un mas alla de la justicia: la vida buena, La justicia es apenas condiciGn para el logro de una “vida buena,” ya que la vida buena supone més que el cumplimiento de una normativa, incluso si su cumplimiento es Gptimo, La razén por Ia que toda vida buena se encuentra més alld de la justicia, es debido a que ella representa la realizacién plena de Ia vida, el goce y la satisfaccién de vivir en armonfa con la comunidad. Heller menciona tres elementos que contribuyen a esto, y por eso los nombra como los tres componentes de toda vida buena. Esos elementos son: el que las personas puedan desarrollar sus talentos. que las personas * Par Heller, “la vida buena” es la finalidad autéatica de tn justicia. Vé buena.” Mais alld de ta justivia. op. cit, we Heller. Agnes. “La vida pucdan tener vineuliciones personales profundas y Finalmente, el ercer elemento es la ninteneia de personas rectas, Sin duda, estos aspectos estén ms alla de Ta justicia porque dependen en una buena medida de la disposicion de cada persona para realizarlos, y el grado en que quieran realizarlos. ‘Al quedar las personas en libertad para vivir una vida buena, la justicia encuentra un limite @ su intervencién. LO que le compete es establecer condiciones potiticas Sptimas, en donde pueda proliferar la reatitud, Para Heller la rectitud es el componente més importante de Ta vida Puers. 38 que supone ser su condicién moralEsto es asi porgue las persons rectas se caracterizan por reconocer y apreciar la dignidad de la vida humana manifiesta en los valores propios de 1a comunidad en que viven, y por ello muestran disposici defenderlos. Su capacidad de valoracién obedece a su capacidad autoreflexiva, la que les exige dar razones éticas sobre su obrar, y los vuelve agentes responsables de la comunidad en que viven. Desde la interpreta .n de Heller, las personas rectas eligen el vinculo humano; es decir, eligen vivir de acuerdo a normas y valores. Como st decision ¢s libre e independiente de cualquier constriccién social, su obrar es recto La persona recta en ese sentido, es el fundamento moral de ta vida buena, pero también lo es de la justicia, Finalmente la solidez. de esa virtud eapital que es 1a Justicli depende de Ja disposi cién de los participantes a hacer valer la normativa, aunque sin condiciones. politicas favorabies, dificilmente proliferarian personas rectis. La dimensién ética y politica de la justicia se retroalimentan. Heller propone empezif POF construir las condiciones polfticas que permitan el lorecimiento de los mejores mundos posibles. Su propuesta se asume como continuacion del proyecto de 18 ilustracién. Incorpora 1as méximas morales de libertad y respeto a la vida, generadas por el proceso reflexivo impulsado por la modernidad, aunque critica también el idealismo absurdo que ha dado ugar a concepciones que conciben la justicia como un proceso completo y perfecto. Una propuesta como esta es pertinente, porque por un lado el proceso de globalizacion ha generado una interrelacién entre las culturas que invita a establecer normas entre ellas, y particularmente porque la actual circunstaneia historica se encuentta signada por «al recuerdo del holocausto y 10s erimenes cometidos en nombre de le superioridad racial. Ese lamentable acontecimiento constituye un referente ineludible para pensar la —— Ibid. p. 351 37 ————— justicia en términos de respeto y reconocimiento de la diversidad cultural. Aunque esta jucha por la inclusi6n y el reconocimiento de grupos marginales de Ta sociedad, fue abjerta por la proclamacién de las promesas ilustradas, fue la experiencia de las guerras mundiales y el tipo de violencia que provacaron bajo el estimulo de un ferviente nacionalismo o de Ia ereencia en la superioridad racial, que el respeto Y reconocimiento de la diversidad que constituye a los seres humanos, se volvi6 una exigencia de las sociedades contempordneas. Ese aprendizaje necesariamente debe incorporsis’ ala concepcidn de justicia en la época actual. La asimilacion de 1a propia experiencia ist6rica, invita a una identifiaci6n de la jusicia, expresada en el ideal de democracies plurales, Entre las reflexiones que participan en el debate actual sobre Ia justicia, es ta perspectiva de un proyecto ético-politice incompleto de justicia, Ja que permite pensar a la sociedad contempordnea en términos de un universo pluralista 1.4 Del propésito de la investigacién. ‘Ahora bien, la anterior descripcién de la perspectiva de justicia de Ta que <= parte, permite puntualizar la propuesta de esta investigaci6n. Lo qve Ja tesis persigue, es una evaluacién de las posibilidades de aplicacién de la propuesta elaborada por Heller. Esta reflexion sobre las posibilidades se establece desde la consideracién de su doble contingencia bisica: la de su imposibilidad y la de su reafizacion deseable, Para el primer caso, se piensa en el hecho de ta dominacién como factor generador de multiplicidad de situaciones de injusticia. El concepto de dominacién al que se hace alusién es el desarrollado por Max Weber: 8 “Consiguientemente, entendemos por dominacién un estado de cosas Por el cual una oluntad manifiesta (mandato) del dominador o de tos dominadores influye sobre los actos de otros (de! dominado 0 dominados), de tal suerte que en un grado socialmente Sax Weber, desamolio una caracterizacién de Tos tipos de deminacidn que han eX alo largo de la Fae erdcatl al menos, Weber como socilogd moderne, s¢ interes prineinamens Pt reflexionar aioe ecrrtersticas propias ds las sociedades modems, las cuss idenulie® OA sometidas a serssoe prooesos de racionalizaciin y ditincin de fs diversas esferas gue, Sine a la cultra: Reavis arte y moralidad. Seguin ésta L6gica comprensiva cl tipo de dominsc i Tt ha caracterizado a las cient ae 3 Mgrnas ex una dominacin de tipo legal. Weber. Max, Brenna y soe ‘edad, México. ECE. 1997 38 relevante, estos actos tiene un lugar como si os dominados hubieran adoptado por sf mismos y como maxima de su obrar el contenido del mandato (obediencia) cal ‘La dominacién por tanto, supone Ja anulacién de la voluntad de una persona mediante la presién 0 fuerza que otro le impone. Lo anterior supone el establecimiento de relaciones de desigualdad que impiden que todas las personas tengan las mismas oportunidades de desarrollarse. Esa condit jon es injusta, Segtin el andlisis de Weber, la dominacién se ha mantenido a lo largo de la historia de occidente, aunque puede clasificarse en tres formas reconocidas por las caracteristicas que manifiestan, Esas tres formas de dominacién son: dominacién tradicional, dominacién carismética y legal. La primera se refiere a un tipo de dominio fundado en el poder de la tradicién, en la autoridad de Io que se ha preservado. Se venera y respeta lo que ha sostenido a determinada cultura o grupo social: rituales, sucesiones dindsticas, los grandes mitos. EI autor Jo expresa de la siguiente forma: “Dominacién tradicional en virtud de creencias en Ia santidad de los ordenamientos y los poderes sefioriales existentes desde siempre. Su tipo mas puro es el dominio patriarcal” La segunda forma de dominacién se fundamenta en las cualidades extraordinarias de un lider, se ha identificado histéricamente con la figura del profeta, el mago, héroe, guerrero 0 demagogo. Al lider le basta su carisma para congregar ¢ incitar a las masas, ademés a sus dotes extraordinarios suele incorporar la idea de una mision que debe ser cumplida con ayuda de sus fieles seguidores. “El portador del carisma abraza el cometido que le ha sido asignado y exige obediencia y adhesién en virtud de su misi6n."%6 El tercer tipo de dominacién (que es en el que se centra ésta tesis) es la que se ha desarrolla principalmente en ta época moderna, Ia que Weber denomina dominacién legal. “* fdem. p. 699. $$ fdem. p. 708. “Thid. p. 847. ar errte vas Esta forma es posibilitada por el poder que representa 1a ley como expresién de un imperativo de la razén humana. Lo que vale por tanto para fundamentar la Tegitimidad del ejercicio del poder en la vida moderna, es la racionalidad. Aunque desde una mirada critica a la historia del pensamiento moderno, se trataria de una racionalidad instrumental y no fundada en un imperativo ético como lo pensaba Kant por ejemplo, ya que “Se obedece a la persona no en virtud de su derecho propio, sino a la resla estatuida, 1a cual establece al propio tiempo a quien y en qué medida se debe obedecer”™” La efectividad del ejercicio de la ley, ha podido ser garantizada mediante la Dentro de sus organizacién de un aparato administrative denominado burocrac caracteristicas principales se encuentra la profesionalizacién de sus miembros y el ejercicio de una racionalidad operativa, De acuerdo a esas caracteristicas “eaen por supuesto bajo el tipo de la dominacién legal no sélo, por ejemplo, la estructura moderna del Estado y el municipio, sino también Ja relacién de dominio en una empresa capitalista privada, en una asociacién de finalidad utilitaria, 0 en una uni6n, de cualie tipo que sea, que disponga de un equipo numeroso y jerarquicamente articulado.”* La dominacién legal deriv de la necesidad de restablecimiento de un nuevo orden politico, tras 1a serie de mutaciones politico-sociales que tuvieron lugar durante el El modo de produccién capitalista proceso de cambio del sistema feudal al capitalista. se convirtié en un motor de desarrollo para las naciones europeas, que activé entre ellas una lucha por el predominio econémico. Las posibitidades de obtener una ventaja econémica, requerfa de eyes mercantiles promulgadas por una institucién Tegitima como la estatal, De ahi que desde los orfgenes de la modemidad Estado y mercado han constituido una alianza que permitié el ejercicio de una forma de dominaciOn fundada en el supuesto de Ia legalidad. La complicidad entre ambas esferas, fue claramente reconocida y denunciada por Carlos Marx®y continuaré siendo central paran el pensamiento marxista. En la época contempordnea el anilisis del sistema-mundo p. 707. S bid. p. 707 2 eine Mare realizaré una critica a las Gilosotas idealists. que chservan en Ta figura del Esiado 6} siiime grado de desarolo de una coneiencia hstrica, Pore contrario Mars. ve en dicha insich la ene rae ce dominacién, por lo que resulta necesaria su eliminacin y el trite hacia una sociedad sin clases, que goce de uns perfecta igualdad. Véase Marx. Carlos El capital, México, Ed. Unidos. 2006. 40 elaborado por Immanuel Wallerstein‘es una de las perspectivas teéricas que ha profundizado en la explicacién del papel que ha tenido el Estado en Ja tarea de dotar de legalidad las estrategias comerciales de las naciones fuertes. El concepto que fundamenta Ia legitimidad del Estado, fue el de soberanfa, que @ 10 largo de la historia moderna se ha constituido en un fundamento legitimo de las luchas por el poder politico y econémico, tanto al interior del Estado como al exterior De este primer acercamiento a la historia de Ia dominacién moderna, se puede anticipar que la idea de justicia en este periodo, se alza sobre la base de las luchas por el predominio econémico, y la desigualdad entre naciones ‘Ahora bien, respecto al segundo aspecto, el de las posibilidades deseables de conformar tun universo cultural pluralista, me propuse un rastreo que hurga en el tipo de experiencias generadas en la modernidad que han propiciado 1a transformacién de condiciones politico-sociales hacia unas consideradas més justas. En ese sentido se parte del siglo XIX, momento en el que aparece una forma de accién colectiva que mediante la denuncia y la lucha por la obtencién de derechos y reconocimientos logra una transformacién significativa de las condiciones politico-sociales. El tipo de acciones colectivas en el que se centra esta investigacién, son los lamados movimientos antisistémicos. La propuesta de Wallerstein parte del andlisis sistémico de la modemidad, entendida como sistema hist6rico organizado particularmente por una economfa de tipo capitalista, que constituye el eje de la dominacién y es la causa de las luchas antisistémicas."" En estas acciones se puede identificar un proceso de transmisién de Ia experiencia de Jucha, que es evaluada segtin aciertos y desaciertos, ademés de apegarse a las exigencias 5 tmmanuel Wallerstein, constructor de la perspectiva teérica del “andlisis de los sistemas-mundo! Politslogo estadounidense que ha desarrllado una visin seopotitica de Tos procesos de dominacion Frovocedos por una economia de alcance planetario, El andlisis principal, s concentra en tes toms: £1 vaederno sistema mundial. 1 La agricultura capiraista y tas arigenes de la economia-mundo curaped en arsed XVI El moderna sistema mundial. 1 ET mereanitismo v ta consolidacisn de la economia-munde suropee, El moderno sistema mundial 1600-1750. 1H Lat segunda era de gran expansid de ta econemta. tse Wallerstein, Immanuel. EI moderna sistema mundial 1 La ‘europea en el siglo XVI. México. $.XX1. mundo capitalista 1730-1850. agricultura capitals \ los origenes de la economia-mund 2011. Lo mismo para los otros dos tomos. #1 En el siguiente apartado, correspondiente a la cleecitn tedrico-metodol tin la perspectiva sistémica desarrolla por Immanuel Wallerstein jca se desarrolla con mayor 1 EEEEESSSS'’S='~: ~~ propias de cada circunstancia historiea, En ese sentido. p ede observarse una clan transformacisn en los movimientos antisistémicos, devde suy estrategias hasta fa forma como se conciben a sf mismos y a sus opositores."? Ahora bien, una base te6rica que puede respaldar la apuesta por la construccién de condiciones de mayor justicia desde la v fa de los movimientos antisistémicos, es la que brinda Kant en su ensayo “Si el género humano progresa hacia mejor.” En ese escrito Kant anuncia con cierto entusiasmo, a ejemplaridad que constituye toda accién Tevolucionaria. En ese sentido é1 afirmaba, que incluso si las revoluciones fracasan, lo importante es el nacimiento de ciertos ideales que al ser considerados dignos, impulsarfan a cada sociedad a tuchar por ellos. Los ideales a los que se referfa Kant, ¢ran aquellos que proclamé la revolucién francesa: libertad, igualdad y fraternidad, que efectivamente han inspirado el horizonte rector de las luchas antisistémicas. Desde esa inspiracién, han logrado constituir un proceso de lucha y de aprendizaje en el que la Propia nocién de justicia se ha enriquecido, Gracias a ese dinamismo ha sido posible el ideal de un universo pluralista y democrético, en el que las relaciones politicas empiecen a pensarse ya no desde la verticalidad del poder, sino desde la horizontalidad de la participacién ciudadana responsable Esta aspiracién ha dado lugar a concepciones como la de multitud, que se refiere a ese devenir politico en el que los ciudadanos ejercen su poder desde la conformacién de redes de cooperacién, y representan un contrapeso significativo frente a los grandes Brupos de poder. La ciudadania, podriamos decir, ha logrado una voz que empieza a ser reconocida en la toma de decisiones de orden Politico. Y si bien, el concepto ¢tico- politico i completo de justicia no apunta hacia la culminacién de una humanidad Completamente justa debido a que ese saber es inaccesible, si invita al menos a | Tesponsabilizarnos del presente, en la conciencia de que las decisiones y acciones _ Pesentes, representan una huella al menos que permitiré a sociedades venideras reflexionar sobre sus propias posibilidades de construir un mundo de mayor justicia. “BI cuario capitulo de esta tesis desarrolla a detallela historia y evolucién de los movimientos Aamtisistémicos, 42 La herramienta metodolig) Hla que se apoya esta investigacion, historico. La decisién fue orientada por la necesidad de encontrar respuestas acerca de las posibilidades de justicia mediante el conocimiento del proceso en el que se gest6 st concepeién moderna. Lo que se bus en la observacién de dicho proceso hist6rico, es encontrar las causas y consecuencias de la idea de justicia en la modemidad. EI andlisis hist6rico permite apreciar los procesos mediante la identificacién de los fenémenos singulares de cada época, asf como aquellos que se mantienen a lo largo del Uempo. El reconocimiento de la singularidad por ejemplo, permite identificar hechos, 0 Conceptos con una época particular. Por ello, puede reconocerse que la concepcién modema de justicia pose caracteristicas particulares, que responden a circunstancias historicas especificas. En relacién a las constantes, el conocimiento hist6rico permite observar los hechos que se repiten, las situaciones con las que los seres humanos tienen que lidiar una y otra vez. En ese sentido. la historia permite reconocer en qué consiste la condicién humana, representa un proceso de autoconocimiento, desde el que es posible abrigar esperanzas razonables, posibilita una reflexién prudente que se distancia de los radicalismos. Ni el optimismo ilusorio, ni el pesimismo fatalista son actitudes honestas en Ia investigacién, Al igual que Agnes Heller, pensaria que ambas posturas son frivolas, y que la frivolidad no debe ser la forma que tome la filosoffa.” Otra de Ia Tazones que respaldan la eleccién metodolégica, es el reconocimiento del horizonte de comprensién en el que las ciencias humanas se sitiian en la actualidad, La Consciencia histérica, es uno de los rasgos fundamentales que caracterizan al saber modemo. Desde Kant, el pensamiento filoséfico, ha asumido un cardcter que Foucault denomina, ontologia criti 4 del presente. Es decir, una forma de responsabilizarse de la €poca presente, desde la conciencia del tiempo. Tanto en Kant, como en Hegel, la historia era entendida como un proceso evolutivo, el futuro en ese sentido se vislumbraba esperanzador. Es a partir de Marx y Nietzsche,“ que el conocimiento histérico empieza a representar una herramienta critica, desmitificadora de lo que se & Vase Heller. Agnes, op. cil. p. 407, * Por esa perspectiva critica respecto a idea de Razén que habia cultivado el pensa les ubica @ ambos junto a Freud, como “maestros de la sospecha.” nto moderno, se 43 CC EIIEIEIEEE Nh Pensaba como verdades eternas. Desde ta per } spectiva nictzscheana por ejemplo, “la raz6n" es un _mero producto histérice. igual que “la verdad.” Desde entonces, las ciencias humanas han tenido que asumir sus limites en el conocimiento, y con ello, le. Es aspirar s6lo a engendrar una perspecti que exprese un pronéstico de lo po desde esa consciencia, que la presente investigaciGn delimita sus alcances en el anuncio de pretender un pronéstico de lo que podemos esperar en relacién a la justicia en la actualidad. Finalmente, la investigacién ancla su andlisis en el proceso hist6rico de la modernidad, debido a que la concepcién de justicia a la que se remite, es moderna, Para llevar a cabo el andlisis, me he apoyado en la perspectiva tedrica de Michel Foucault,"'y en la teorfa del sistema-mundo de Immanuel Wallerstein. Pese a que Parecen autores muy heterogéneos, lo cierto, es que su complementariedad tedrica Permite un entendimiento mas profunda sobre la historia de la justicia modema. Wallerstein desde un enfoque critico de la economia, y Foucault desde un enfoque hist6rico-antropolégico. Antes de abordar los aspectos complementarios de cada uno de estos autores, me centraré en sus coinciden: Tanto Wallerstein como Foucault, buscan una comprensién del presente desde su desarrollo hist6rico. -Abordaje indispensable para muchos pensadores desde el siglo Pasado, segtin el viraje que ha tomado el pensamiento como critica a la modernidad.~ En ese sentido, ambos, son abra zados por esa misma necesidad critica, que los lleva a desmitificar conceptos centrales para el pensamiento modemo, como la idea de verdad. Foucault y Wallerstein, coinciden en que el concepto ha servido para enmascarar relaciones de poder. Ambos reconocen que el anilisis de la historia, no puede emprenderse desde Ia ingenuidad de una visién lineal y progresiva, aunque tampoco desde la simpleza del acontecimiento. El analisis histérico en ese sentido, se reconoce como un anilisis complejo de los procesos, y cada uno a su manera desarrolla una interpretacién histérica de Ia modernidad desde ese reconocimiento. Immanuel Michel Foucault, filésofo francés encareado de impartir la cétedra de “Historia de los sistemas de Pensamiento” entre 1971 y 1984. en el colegio de Francia, Escribié una gran cantidad de textos, entre los que destacan. Vigilar y castigar, La arqueologia del saber. las palabras y las cosas e Historia de la locura Consciente de la significacién de la llamada crisis de la subjetividad modema, desarrolla una critica histérica que le permitiré cuestionar la visin teleolégica y esencialista construida por las ilesofias de ln historia modernas. Lo que emerge de tal critica es la fatima relacién que conocimiento y poser han ‘mantenidos en las sociedades modernas es particular, y en la historia de occidente en general 44 Wallerstein por su parte, desarrolla una explicacin de la dindmica politico-econémica aque ha caracterizado a 1a modernidad desde sus inicios en el siglo XVI, hasta Ta acwalidad, En ese sentido su perspectiva es de larga duracién histérica. Su anélisis, describe el comportamiento de una nueva forma histérica que denomina sistema- mando, y cuyo motor principal ha sido una economiacmundo de ipo capitalista. En dicho andlisis sefiala ciclos de uparicién, auge y recesion de Ia economia. Cada ciclo econémico, conlleva efectos a nivel politico-social La coherencia de la interpretacién de Immanuel Wallerstein, permite entender probleméticas actuales en relacién @ a justicia, Ta descripeién consistente del comportamiento sistémico segin ciclos, posiilita el célevlo de escenarios futuros y en » ese sentido permite orientar las acciones desde la apeiGn més digna que proporciona el conocimiento histérico. Michel Foucault por su parte, invita a otro nivel de a el que parece sumergirse en. el sustrato de lo microscépico. Para él, las relaciones de fuerza son el motor de la historia humana, su constante, Lo que ofrece cada anilisis genealdgico en ese sentido, § os la descripcién de las estrategias de lucha que se configuran en cada contexto. Para * Foucault, la historia como un proceso lineal y progresivo es Una idea ilusoria, en su ugar propone pensar la historia como un combate permanente de cambia de escenario y de estrategia. A pesar de ese tono realista de su interpretaci6n histérica, Foucault, al gual que Wallerstein, observan con cierto optimismo Jos movimientos juveniles de » 1968, Para ambos, esa fecha representa el nacimiento de wna forma de politicidad distinta a la que se habia desarroliado a lo largo de la modemidad. En ese | acontecimiento marcan el nacimiento de una sociedad mas aut6noma ¢ incrédula del poder politico, gue signifier ademés, la fractura de un régimen politico desigual, y Ta esperanza de configurar sociedades mas justas ‘En conclusién, la visién microfisica del poder en Michel Foucault, junto a la perspectiva estructural y macro politica en Wallerstein, proporcionan una ViSICn complementaria, ibilidades de fea en matices, ¥ me han permitido emprender una reflexion sobre las po: Ejusticia global en las sociedades contempordneas. ‘Ahora bien, aungue se han brindado argumentos respecto a la utilidad de ambos cin vale ta pena fundamentar la actualidad de esas 45 fenfoques para la inves perspectivas tedricas, ya que existen posturas detractoras. Por ejemplo, para Nancy Fraser, referente importante en temas de justi ia global, 1a teorfa Foucaultiana se encuentra superada ya que describe un contexto disciplinario fordista-taylorista que pertenecié a la modernidad industrial. Desde su perspectiva, el andilisis de las sociedades disciplinarias de las que habla Foucault, no coincide con las sociedades actuales. En un sentido similar el autor Gilles Lipovesky, habla de la emergencia de sociedades postmoralistas en las que el deber patristico 0 nacionalista que reinaba en las sociedades modernas del siglo XIX ha quedado atras. Para Lipovesky, el cardcter individualista de Jas personas en la contemporaneidad, se vuelca mas que a un hedonismo de cardcter egoista, a una vinculacién solidaria y altruista con diversas causas que se consideran valiosas. Este tipo de acciones, Jejos de estar impulsadas por un mandato superior, brotan de la autonomia de las personas. En esta metamorfosis del ideal liberal, pareceria que las sociedades disciplinarias de las que habla Foucault han quedado superadas, Para responder a posturas de este tipo, es importante enfatizar que el andlisis foucaultiano ofrece mis que una descripcién de las sociedades disciplinarias. Incluso esa descripcién sélo es consecuencia de una aseveracién de mayor relevancia para el analisis hist6rico: la idea de que lo que subyace a la historia son relaciones de fuerza. De modo que, incluso si pudiera afirmarse (cosa que se encuentra en duda), que las sociedades disciplinarias han sido superadas, de cualquier manera la aportacién de Foucault seria pertinente. De lo que se trata entonces en el andlisis histérico, es de reconocer Ia estrategia de lucha que domina en la actualidad. De cualquier manera, en relacién a la critica del enfoque disciplinario de Foucault, existen posturas como la del Dr. Javier Echeverria, que hablan de nuevas formas de control social generadas por la emergencia de un capitalismo basado en el conocimiento, y ya no en la industria. Con la argumentacién que brinda Echeverria, puede sostenerse que el disciplinamiento persiste atin en Ia actualidad. Por otro lado, esta misma postura del Dr. Echeverria, termina por cuestionar el enfoque del otro autor en el que se respalda esta investigacién, Immanuel Wallerstein, De acuerdo a la perspectiva que desarrolla Echeverria, la afirmacién de * & propésito del titulo del libro de Lipovesky. en el que narra esta transformacién. Véase. Lipovesky. Gilles. Metamorfosis de la cultura liberal, Barcelona, Anagrama, 2012. 46 Wallerstein respecto al inminente fin del capitalismo como sistema histérico, es equivocada, Para Echeverria el capitalismo se encuentra pletérico de salud. Lo que uere segiin su interpretacién, es la economia basada en Ia industria. Aqui en defensa de Wallerstein puedo expresar que incluso si su prondstico es equivocado, es innegable que su interpretacién del. sistema actual ha ayudado en mucho @ entender las, condiciones histéricas que lo hicieron posible y que To han mantenido por més de cinco silos. Las posibilidades de construccién de un mundo de mayor justicia, en buena medida pueden apoyarse en ese conocimiento. Dada la complementariedad de las perspectivas de Immanuel Wallerstein y Michel Foucault, son incorporadas como enfoques tedricos que apoyan la reflexién sobre Ta justicia. 1.6 El enfoque sistémico como herramienta tedrico-metodolégica. La necesidad de pensar la justicia més alli de Jos parmetros de los estados nacionales, da cabida a una perspectiva tedrica cuyo propésito es expresar la compleja interrelaciGn politica, econémica y cultural que se establece entre las naciones. La respuesta 2 esta necesidad, es la teoria del sistema-mmundo, la cual expresa que: “estamos frente a una zona espacio-temporal que atraviesa multiples unidades politicas y culturales, una que representa una zona integrada de actividad e instituciones que obedecen a ciertas reglas sistémicas”°"E] motor de esta actividad sistémica es una “economia-mundo” de tipo capitalista, Es decir una forma de economfa que opera en las mismas dimensiones del sistemacmundo, y cuya caracteristica principal es su capacidad de acumular capital de manera permanente. Esto significa que, si bien la presencia de Ta economfa ha sido constante en todas las civilizaciones, la caracteristica de acumular ganancias, volvié al capitalismo una novedad histérica su capacidad de crecimiento econdmico permanente, obedece a que opera dentro de un sistema inter- estatal que permite la competencia entre naciones: “el capitalismo ha sido capaz de florecer precisamente porque la economfa-mundo contenfa dentro de sus © Wallerstein, Immanuel. Andlisis de sistema mundo, Una Introduccidn. México. S. XXI. 2005. p. 32 a7 limites no uno, sino multiples sistemas politicos.”“Ese juego competitive es Jo que casacteriza y da dinamismo al sistema-mundo. Segin explica Wallerstein, antes del sistema-mundo, las sociedades se organizaron bajo estados imperiales cuya conservacién requerfa de grandes inversiones para mantener tanto el control politico interno, como la vigilancia estricta sobre las amenazas externas sobre sus territorios y conocimientos, factores que impidieron la acumulacién de capital,al establecerse una arena interestatal en la que se disputaba tanto el poder econémico como el politico, el suefio del imperio se volvi6 imposible, al mismo tiempo que emergié un nuevo poder, el del capital El anilisis del sistema mundo se encuentra organizado en tres fases: la que indica su nacimiento en tomo al siglo XVI, la segunda ubicada en el siglo XVII que representa su fase de recesién, y finalmente el siglo XVII cuyo acontecimiento de mayor significacién es la revolucién francesa, simbolo ademés del nacimiento de una geo- cultura liberal”“Esta etapa de auge del liberalismo que va de 1917 a 1989, encuentra su primer fractura en 1968, fecha que marca segdn Wallerstein, el socavamiento de la geo- cultura liberal, y la entrada en Ia fase terminal del sistema-mundo, como sistema histérico. El reto de investigar este amplio proceso, hizo evidente para Wallerstein la necesidad de construir una herramienta tedrica apropiada. El resultado de ese esfuerzo es la teoria del sistema- mundo, cuyo propésito es: “...dar una visién holistica de una perspectiva que in de una ciencia social histérica holistica.””En sostiene ser un Ilamado a la constitu ese sentido el enfoque sistémico se constituye como una propuesta epistemol6gica, que se desarrolla desde la critica realizada a la forma de comprensién moderna. Es por ello, aque la explicacién sobre el proceso que dio lugar a la teor‘a del sistema-mundo, parte de la descripeién de la constitucién del saber modemno en el siglo XIX, y la funcién "Thid. p. 491 0 eee atcin: Immanuel, EF moderna sistema mundial. La agricultura capitalista y los orfgenes de la economia-mundo eurapea en el siglo XVI. México. S.XXI.2011. p. eet catudio de estas tapas es desarrollado por Wallersicin en los tres tomnos que realiza sobre ET moderno sistema mundial. op. ci Mr Vatlertein, mmantiel, Analisis de sistema mundo, Una introduccién, op. cit. p11 4g, politico-social que el conocimiento tuvo a partir de ese momento. A continuacién un resumen de lo planteado por el autor en relacién a dicho proceso.” segin Wallerstein, es durante el siglo XIX que el conocimiento sufre una creciente pareelacin provocada por un claro divorcio entre jas lamadas ciencias exactas y Tas humanidades. “Cuando Laplace a comienzos del sigh XIX esc bi6 un libro sobre los origenes del sistema solar, Napoleén, a quien presentara el libro, Je hizo notar que no habia mencionado a Dios una sola vez en su grueso volumen. Laplace respondié que no tenia necesidad de tal hipstesis Seftor. Estos intelectuales serfan Hamados a partir de entonces cientificos.””* sta anéedota representa el inicio de Ta separacin entre clencias empiricas, y aquellas relegadas al oscuro dimbito de la especulacién. La unidad del saber as, se vio dividida entre ciencias empiricas Y humanidades; luego, cada uno de estos Ambitos fue parcelado en miliples disciplinas, uy consecuencia fue la especializacién del saber. Esa fragmentacton y [a exigencia cada vez mayor de especializacién, dio nacimiento a la universidad modema. A diferencia de la universidad medieval, cuenta con profesores pagados. de tiempo completo, que casi spunea son elérigos y se agrupan no solo. facultades sino también en depanamentos o eétedras dentro de ichas facutades. Cada departamento se afirma ser el Tugar de un disciplina particular.”* ‘nesta divisién sigui6 la pregunta sobre los erterios 0 l tipo de disciplinas que deberfan estudiar la realidad social, particutarmente una vez que Ta revolucién francesa puso de manifiesto la idea de inevitabilidad del cambio politico y el reconocimiento de la soberania popular. Ambas ideas debian ser explicadas 218 luz de lo que se denominarfa ciencias sociales. Nace entonces ta ciencia politica como respuesta al fenémeno del Estado modemo, luego la economia como ciencia encargads de explicar al mercado, y Ja sociologia como una forma de comprender ¥ explicar el comportamiento de ta oe cerca de las condiciones que dieron lugar al nacimnento de 1a El resumen que se realiza a continuacisn Cee ae Sxcmnarmundo de Immanust Wallerstein, parte del teste Andlisis del sistema-mundo. Una introduccién, op. cit. pp. 13-3. bid. p. 14. * Ipid. p15 49 _———————_ sociedad. Ciencia politica, economfa y sociologta como saberes que la organizacion del Gjstema-mundo moderno demandaba, de ello que estos saberes representaban Gnicamente a los cinco pafses mas fuertes en ese momento: Francia, Gran Bretafa, Estados Unidos, Alemania ¢ Italia. Luego, como estos paises tenfan dominio sobre otras zonas del mundo, se gener Ia necesidad de comprender el comportamiento de aquellos grupos humanos colonizados circunstancia que dio origen a la antropologia como ciencia social. Esta primera organizacion de las ciencias, suftié cambios significativos tras el fin de la segunda guerra mundial y el reacomodo geopdlitico posterior. Las nuevas circunstancias que habria de considerar fueron: la hegemonia estadounidens la autoafirmacién politica que experimentaban los paises del tercer mundo y un crecimiento econémico que repercutié en la expansién del sistema universitario, Por ejemplo, 1o que importaba a la nueva hegemonfa econsmica tras 1945, era saber cémo fidiar eon los movimientos independentistas del tercer mundo, o comprender el modo de produecién y organizacién comunista, En el sistema universitario de los Estados nidos, se crearon los Hlamados estudios de area bajo la justificacion intelectual de Ta teoria del desarrollo. La teorfa del desarrollo, representé una especie de sucedaneo de a visién progresista y universalista de la historia, solo que ahora se le pensaba en términos de estadios, bajo el modelo de la nacién desarrollada. Segtin Wallerstein, la teorfa del desarrollo, permitié reanimar la dindrmica de produecién capitalista encabezada por los Estados Unidos. Las reacciones a ese nuevo argumento ideol6gico no se hicieron esperar. Algunos paises latinoamericanos por ejemplo, se organizaron como Comisién Econémica para América Latina (CEPAL), y discutieron acerca de su posicién dentro del sistema econémico capitalista. La conclusién a la que ilegaron los te6ricos de la CEPAL, fue que el subdesarrollo no es una condiciOn natural, ya que ha sido producida por el propio sistema econémico, De esa comprension surgis la noci6n de centro-periferia, como una interpretacién del modelo econémico cuyo e}e fue la erftica al modelo de desarrollo. La nocién centro-periferia construida por la CEPAL, fue retomada por Immanuel Wallerstein e incorporada dentro de teorfa del sistema-mundo. Esa conciencia de la dependencia que genera el sistema capitalista, desencadené posturas més radicales, como la de aquellos que afirmaban la necesidad de una revolucidn socialista para los paises de latinoamericanos. De esa postura surge 1a teorfa de la dependencia. Entre 1959 y 1960, lus discusiones académicas se centraron en esos debates acerca de la dependencia, la nocién centro-periferia y el cuestionamiento al supuesto progreso de la historia. Ese entorno segsin explica Wallerstein, preparo y in aliment6 la perspectiva del sistema-mundo.’*Una influencia decisiva para la elabora de la teorfa, fue el trabajo realizado por Fernand Braudel, lider de la segunda generaci6n de la escuela historiografica de los Annales. Braudel pensaba que Ta historia centrada en los grandes acontecimientos politicos, como era el caso de la historia politica, aportaba un conocimiento superficial, ya que no permitia observar las estructuras subyacentes que dan cuenta de los procesos histéricos con sus ciclos y tansformaciones, La forma en que logra mediar entre una historia de acontecimientos y wna que tiende a eternizarse, es la larga duracién. Esta perspectiva logra argumentarla desde el estudio de Jas transformaciones a mediano plazo, como las expansiones 0 contracciones de la economia mundial, tema que ocupé el centro de sus investigaciones. Para Braudel, 1a investigacién histérica debfa expresar una unidad de andlisis integrada desde el acercamiento de diversas disciplinas. De esa forma, resolvié el abordaje de fenémenos complejos, como los fenémenos historicos. Estas nociones, fueron conscientemente incorporadas a la perspectiva teérica del sistema-mundo, Finalmente, el proceso de maduracién intelectual de ta teoria del sistema-mundo fue completado tras el fenémeno revolucionario de 1968: Los revolucionarios de 1968. quienes contahan con su base ms poderosa en las universidades de todo e} tnundo, comenzaron tambign a elevar una serie de temas respecto a as estructuras del saber. Al principio. hicieron preguntas referents a la participacion politica directa de Tos académicos universitarios et trabajos que apoyaban el statu quo mundial, tal como los fisicos que realizaban investigacionss winculadas con la guerra Tos cientificos sociales que proveian material para los esfuerzos de contrainsurgencia.”* Los intelectuales que participaron en Tos movimientos de 1968 abrieron la discusién sobre éreas descuidadas del saber, lo que signifie6 para las clencias sociales Ja apertura « tematicas ¢ historias de grupos oprimidos que hasta ese momento habian sido ignoradas. Lo que esto puso de relieve, fue Ia pregunta sobre el papel del conocimiento y los intelectuales en el abito politico Esa atmésfera intelectual fue a que inspird a Wallerstein para Proponct la nocién de sistema- mundo, cuya principal aportact6n tedrica ha sido Ia sustitucién de la unidad de andlisis centrada en los Estados nacionales, por una perspectiva de relaciones snterestatales ligadas por la Kégica comin de la economfa capitalista, De manera que, aunque dentro del andlisis del sistema-mundo, sea factible reconocer ademas de los econémicos, otf0 tipo de vinculos como los cutturales © politicos, es la economia su neato central. ¥ esto coincide con la perspectiva que desde de Ia historia tuvieron los, fundadores de los Annales (Marc Bloch y Lucien Febvre) desde 1930, quienes comprendieron que 1a historia debia ser estudiada bajo una perspectiva no sélo mmultiisciplinaria sino compleja y que en particular, a historia del siglo XX, debia ser explicada tomando como eje central los procesos econémicos. La elaboracién teérica del sistema-mundo, es particularmente Gti] a la reflexién sobre las posibilidades de justicia global en las sociedades contempordneas, porque permite reconacer la dominacién desde una légiea sistémica. Nos permite apreciar también, sus regularidades y variaciones a lo largo del tiempo, Io que ayuda a entender su funcionamiento y con ello brinda un pronéstico respecto a las posibilidades de cambio de sistema histrico. Que el capitalismo sea un sistema historco quiere decir, que hubo condiciones especfficas lo que hicieron posible y que como todo proceso histérico tendré un final. Para Wallerstein resulta muy interesante la forma en que dicho sistema ha logrado operar por tanto siglos, sin que fuera lo suficientemente evidente la profunda desigualdad e injusticia que produce. En opinin de Wallerstein, nos encontramos ante 52 tun sistema hist6rico que ha mermado considerablemente la calidad de vida en relaci6n a sistemas anteriores, ademas de haber borrado saberes tradicionales de gran valor.” “La abrumadora mayoria de los trabajadores mundiales que viven en zonas rurales 0 oscilan entre éstas y 10s suburbios de la ciudad, es en peores condiciones que sus antepasados hace quinientos afios, En esta primera aproximacién, es posible concluir que El capitalismo como sistema econémico imperante, propicia condiciones de desigualdad y dependencia tanto entre Jas naciones, como entre los estratos sociales al interior de cada pafs. Su forma de operacidn es la dominacién legal en el sentido expresado por Max Weber. La desigualdad que produce el sistema, se evidencia debido & Ja cada vez mayor y mas agresiva penetracién de las leyes de mercado en el tejido social. Aunque et predominio de las leyes mercantiles ha estado presente a lo largo de los cinco sigos, ha sido la expansién de sus dominios lo que toma mas agresiv la lucha por la hegemonia econémica, a pesar de que la injusticia con Ja que opera ha usado las mismas estrategias desde el comienzo de su historia: la capacidad de acumular capital de manera indefinida, mediante el sostenimiento de relaciones sociales asimétricas. Wallerstein abunda en la idea de que existen Estados fuertes 0 centrales, que imponen reglas desventajosas a los paises debiles o periféricos, que se encargan de proteger los mercados internos de los paises fuertes, mientras presionan ® Jos débiles para que abran sus fronteras a mercados extranjeros. Los pafses fuertes © del centro, operan con un minimo de regulacién, Su fortaleza responde a clertas condiciones que les dan la ventaja en ef juego competitive, cuentan con una burocracis efectiva capaz de crear dichas reglas y recaudar suficiente capital; ademés de que poseen el dominio técnico que les permite expandir sus mercados y producir més ¥ con mayor calidad: “Las mejoras en e} transporte, las comunicaciones y los armamentos hizo que fuera progresivamente menos ; ; “ caro incorporar regiones cada vez mas alejadas de las zonas centro. z 7 Whid. pp. 89-90. jnmanvel, Wallerstein. capitalismo hisreico, cit. p91 mane Wallerstein, El apstalisma historic, op cit P29 53 —————————__ sin embargo, estos paises logran mantener su hegemonta s6lo hasta que otro logra superar 1a oferta tecnol6gica de quien detenta el control de tos mercados en ese momento. Asf, lo que se observa en el desplicgue de este sistema hist6rico son traslados de la riqueza de una hegemonia a otra, pero nunca su estancamiento, ya que °s0 impediria el proceso acumulativo. Por tanto, los cambios de poder hegeménico mas que momentos de crisis en el sistema. han significado reacomodos geopoliticos y reajustes de la Iégica capitalista, que iende & del intensificarse. ‘Tras observar estos ci clos que se han repetido a lo la funcionamiento de la economia mundo, Wallerstein se atreve a vislumbrar préximo su fin, y por ello invita a reflexionar sobre el tipo de sistema que conviene construr, toda vez que un sistema se enfrenta a su fin, cuando éste deja de responder a a Légica que lo mantiene, De acuerdo con esta idea el capitalismo, se encontrarfa en una etapa donde Ta acumulaci6n de capital se torna una tarea cada vez més dificil, Ja inversién tiende a ser cada vez mayor, y es0 repercute en la reduccién de ganancias. Ante estos signos, Wallerstein considera que es necesario preparar las condiciones que den lugar a wn sistema hist6rico més justo. 1.7 La labor genealogista como herramienta te6rico-metodoligica. La labor genealogista en Michel Foucault, es un tipo de historia cuyo propésito es arrojar luz sobre el presente. A diferencia de Wallerstein, el conocimiento que tuvo dela obra de Fernand Braudel, lo impulsé a alejarse de la busqueda de las constantes en los largos procesos histéricos.""Foucault no pretende reconstruir una unidad historica, por el contrario, se centra en sus aspectos discontinuos, observa cada contexto como un tejido azaroso provocado por las relaciones de fuerza que se mueven al interior de estos. Desde esa perspectiva, propone idemtficar las diversas estrategias generadas por las relaciones de fuerza en los distintos momentos de la historia. No existe para Foucault un progreso hist6rico, al contrario, considera que la idea de a historia como proceso + Foueaut abre wu texto Arquedtogta del saber, en franca alusi a Brawl. se wfiere al esfuerza 1 historiadores. por reconos as on los larges procesos histiricos: “Desde décadas. ta ate 1 Tas coms rs eet ha ijado prcferentemente en Ws Targos periods. come sl por debayn. He US aeecsercasy desu eisodos se propuseon scar a uz low cai estas 9 Ses ae crear Foucault, Michel, La argueclogia del suber. México. S. XXI. 2010. p.11 54 evolutivo, es resultado de una construccién producida por necesidades hist6ricas particulares, de a misma forma que 1a idea de “sujeto” ha sido construida como fandamento epistemolégico garante de toda certeza, La genealogia de Foucault, desmitifica creencias que se han asumido como verdades trascendentales, al sefialar el caricter hist6rico que constituye todo lo que creemos saber. La tradicién metafisica que habia imperado desde Plat6n hasta Hegel, es fuertemente cuestionada por esa nueva consciencia histérica. Foucault se asume como continuador del pensamiento Nietascheano, al adoptar la préctica genealégica con la intencién de desenmascarar “la voluntad de poder” oculta tras el pensamiento metafisico. enealégica de Michel Foucault, vale la pena recuperar ~ Para comprender la propuesta aunque de manera breve y referencial- la genealogfa en Nietzsche. En el prefacio a la genealogia de la moral Nietzsche expresa la frase: “...¥ es que fatalmente permanecemos extrafios a nosotros: mis mos”*'con lo que resume su critica al orgullo intelectual caracterizado por desconocer lo més fntimo del ser humano. S del conocimiento de las verdades profundas de la vida humana, por el contrario, se in Nietzsche, se conoce o se pretende conocer sélo lo que resulta util, para el caso procura un olvido gue permita al hombre vivir con cierta tanguilidad, EL olvido proporciona la ilusién de que todo posee un sentido. El conocimiento por tanto, representa una especie de instinto de conservaci6n. Bajo esta nueva mirada, se entiende que el conocimiento posee fines uliltarios y no ese desinteresado gusto por la contemplacién como lo ha predicado la tradicién filoséfica desde Platon. El orden trascendente que ha revelado el saber por ejemplo, seria una construccién generada desde la necesidad de certidumbre. Incluso, una gran idea cultivada por largo tiempo por el pensamiento filoséfico, que sostiene la existencia del sujeto auto determinado, libre y racional, esconde una historia de crueldad sepultada por el intelecto con fines de conservacién, “Cudnta sangre y horror se encuentra en el fondo de todas las cosas “ipriedich Nietzsche. fiésofo alemsin que desartollé su pensamiento durante Ta segunda mitad del siglo XIX Su chra ce saraceriza por realizar una eritica radical a Ia cultura moderna. 1s cual encuentra 1 aoe esctatat an eh aatfemo flostfice inaugurado por Plain y en el judeocristianisme, Aras amc atuales representan para éste figsolo. expresiones de debiidad frente a la vida, Nietasche Friedrich, Genealogia de la moral. México. Porn, 1984. p. 141 55 buenas] olvido genera un estado de salud psfquica, que descarga a la mente de recuerdos dolorosos de los que sélo debe conservarse el resultado: 1a promess de la responsabilidad.”"Desde la perspectiva nietzscheana, la genealogia representa la posibilidad histérica de recuperar el recuerdo de lo olvidado, donde el recuerdo desmitifica ideas con cierto caracter trascendente como son la idea de Dios o el conocimiento. La critica genealégica, ayuda a observar Jas ideas como creaciones hhumanas, en ese sentido una de sus aportactones principales es el recuerdo entendido como capacidad creadora del ser humano, La genealogia por tanto, Hene un cardcter positivo porque su motivacién central es devolver al ser humano la conciencia de su capacidad creadora, de tal manera que pueda asumir 1a responsabilidad de su existencia. Conocer en ese sentido, €6 crear, y ello es una manifestacin del deseo de vivir. La genealogia ayuda @ fracturar la base dogméti que domina al conocimiento, permite bservar la pluralidad discursiva que ha generado Ia diversidad de experiencias historico-culturales. ara Nietwsche, en el saber cienifico se exprest una relacion de fuerza aie da lugar al sometimiento de ottos saberes. Montado sobre esta idea Foucault acude a la taéctica genealégica con la intencidn de generar una especie de insurreccién de los saberes sometidos, cuya emancipaci6n es guiada por el desciframiento del tema del poder. La historia de la clinica, de los sistemas penitenciarios, de la sexvalidad, o cualquiera de las, genealogias reconstruidas por Michel Foucault revelan la relacién intrinseca entre ejercicio del poder y la produecién de discursos que Jo legitiman. Expresamente el anilisis geneal6gico de Michel Foucault, consiste en mostrar cémo a partir de determinadas condiciones politico-sociales, se generan discursos sobre Jo verdadero, io del poder. Al que terminan por validar pricticas y téenicas especificas de ejercis respecto Foucault sostiene: “Me propongo mostrar @ ustedes cémo es que las précticas sociales pueden Hegar a engendrar dominios de saber que no sélo hacen que aparezcan nuevos objetos, conceptos y téenicas, sino que hacen nacer ademas formas totalmente © hid, p. 168. eam apariado de la Genealegia de fa moral, desrrlla esa RS Jel disciplinamiento humano mediante actos sacrficiales y_torturas fisicas que fungieran como reguladores de la conducta para ¢l funcionamiento social. Ibid. pp. 165-189. 56 nuevas de sujetos y sujetos de conocimiento. r™Desde esta mirada, la fuerza epistemol6gica depositada en Ja nocién de sujeto, queda reducida @ una construccién hi érica, Algunas de las inquietudes que puede surgir, respecto a lo que significa la disolucién del sujeto como fundamento epistémico son: jen qué reside entonces, 1a validez del conocimiento histrico, si su base de fundamentacién ha quedado diluida? {En qué se respalda el andlisis de Michel Foucault, qué da soporte & su prictica genealégica? Foucault responde que la desaparicién del sujeto como fundamento epistemolégico, 0 si ifica que el estudio de la historia se vuelva ininteligible, por el contrario, St clarifica én puede hacerse pero ahora desde una mirada que se interesa por observar las Juchas que tienen lugar en ella. A ello se refiere cuando dice: Al comrario es ineligible y dehe poder ser anaizada hasta su més minimo detalle: pero 9 part dela intligiitidad de Jas luchas, de las estratégicas y de Tas tcticas, Ni la dakéetica (como ligica de la comadiecin). ni la semidtica (como estructura de 1a comunieaci6n) sabrian dar cuenis de ta inteligibitidad intrinseca de Los enfrentamientos."* Si las filosofias de la historia interpretaron ta lucha como condicién necesaria para el progreso humano, Foucault considera que otra interpret én que vale la pena considerar, es que tal vez los cambios en Ia historia slo representan el trénsito permanente de un sistema de dominacién oto. En relacion @ eso &XpIsSs “La humanidad no progresa de combate en combate, hasta una reciprocidad universal en la aque las reglas susttuirén para siempre a la guerra; instal cada una de estas violencias en un sentido de reglas y va asf de dominacién en dominacién.”** Lo que le interesa a Foucault, es dar cuenta de la estrategias de lucha que se constniyed de un sistema hist6rico a otro, que implican la construcci6n de diseursos que legitiman el ejercicio del poder, porque expresar Foucault, siel poder consistiera s6lo en reprimir no podria sostenerse por largo tiempo. El poder por tanto, debe conceder ganancias, produ discursos que legitimen y vuelvan tolerable su ejercicio: las personas necesttan Foucault, Michel. La verdad fas formas jurdicas. Barcelona. Geis. 2001p. 14 45 Foucault, Michel. Micrafisica del poder. Espafa. Planeta. 1995, p. 180 " Ihid. p17. 57 —: tener razones para consentir la represi6n.*"En ese sentido, los discursos son tanto un poderoso instrumento de sostenimiento del poder, como instrumento de Tiberacién, de critica a la dominacién: “Hay que admitir un juego complejo e inestable donde el discurso puede, a la vez, ser instrumento y efecto de poder, pero también obstéculo, tope, punto de resistencia y de partida para una estrategia opuesta. ao ‘Asi, el saber se reconoce como poder en s{ mismo, por eso la responsabilidad de quien investiga debe ser la de liberar a la verdad de las formas de poder hegeménico que sostiene, De esa manera el discurso puede convertirse en una herramienta de critica y asumir responsabilidad politica. La labor genealégica, abre un nuevo sendero de interpretacién del poder, que la aleja de dos interpretaciones tradicionales: la contractualista y la economicista La primera, ha interpretado al poder como un derecho que puede ser transferido total 0 parciaimente a un representante con el fin de constituir la soberania politica, La segunda, identifica al poder con un sistema econémico impulsado por la clase burguesa, Ja que se apropia de la fuerza de trabajo de Ta clase proletaria para incrementar la produceién econémica, y por ende la ganancia. La politica dentro de esta perspectiva, se encuentra supeditada a las reglas de la economia. “Contra esas dos interpretaciones, Foucault formulé su propia concepeisn: De qué st dispone atwalmente para hacer un anlisis no ezonémico del poder? Creo que posemos decir aque, en verdad, disponemos de muy poca cosa, Contamos, en primer gar, con la afrmacién de que el poder no se da, ni se intercambia, ni se retoma, sino que se ejeree ¥ solo existe en 360 Contamos igualmente con otra afirmacién ta de que el poder no es. en primer término, mantenimiento y prorrogs de tas telacones econdmicas, sino. primariamente. una relacin de fuerza en simisma.”! En discusin con estas dos interpretaciones sobre el ejercicio del poder, Foucault propuso el andlisis microfisco para adentrarse en la triada consttuida por el poder. al * tid, p.182. ss Foucault, Michel. Historia de la sexuatidad I, La voluntad de saber, México. © Foucault, Michel, Microfisica del poder, op. cit. p. 189. W Foucault, Michel. Defender la sociedad. México, FCE, 2002. p. 27. "Ibid. p. 27. S. XX. 1987. p. 123. 58

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