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diversos. El texto es magnifico, la interpretación insuperable.

Este poema de 726 versos se ha


ATAHUALPA YUPANQUI cotejado con "Martín Fierro" de José Hernández, publicado en 1872 y que ha conocido un gran
éxito popular. El relato de las aventuras de un gaucho perseguido par las autoridades y que se
transforma en héroe, victima de los ricos es escrito en coplas de seis versos. La lengua es la de los
Primero se impone una silueta, una mirada. Y pronto el gauchos.
sonido viene a completar la imagen. Una voz. Rasgueo
de guitarra. Solicitada, la memoria entrega unos versos "Martín Fierro" y "El payador" presentan numerosas características comunes y quedarán, no cabe
que suenan y se imponen, vivencias. La voz murmura : duda, como testimonios de una época. Atahualpa Yupanqui dice y canta este poema con ritmo de
"No necesito silencio / Yo no tengo en que pensar. / Los milonga. El estilo es el de una conversación amistosa y entrañable, una invitación a compartir las
ejes de mi carreta / nunca los voy a engrasar." (Los ejes alegrías, las penas, las rebeliones. Voz y guitarra, otra vez. Y siempre, en filigrana, hombres y
de mi carreta). O se indigna : "El yanqui vive en palacio / paisajes.
¡Yo vivo en un barracón! / ¿Cómo es posible que viva el
yanqui mejor que yo? " (Basta Ya). O quizás, melódica, Todo esto, lo percibe la sensibilidad. El lenguaje musical no conoce fronteras. Es asequible a todos.
armoniosa, "dice" palabras que son música : "Si alguien Somos muchos los que nos hemos visto acompañados por sus canciones, desde "Duerme negrito"
me dice señor / agradezco el homenaje / mas soy gaucho hasta "Preguntitas...", pasando por "Campesino" y la "Milonga del solitario." Nos lleva hacia otras
entre el gauchaje / y soy nada entre los sabios..." (El tierras y del descubrimiento brota la felicidad. Luego advertimos que nos está hablando de nosotros
payador perseguido). mismos. Sea cual sea la latitud en donde vive, idéntica es la manera en que el hombre, experimenta
la soledad, el silencio a el susurro, del agua. Y esto es pura felicidad, la de la comunión. Cuando
Soledad o protesta. Canto o relato. Poesía y música describe una realidad social lo hace con pudor y dignidad. Se afirma como testigo, no como
siempre mezcladas y acompañándose. Hermanas más que abanderado, dejando a cada uno libre de escoger y de decidir. Y uno lo aprecia, como signo de
rivales. Si en "Basta Ya" la música se hace discreta es respeto.
para dar paso al mensaje; pero vuelve a sonar, más
fuerte, entre las coplas para mantener el pensamiento en Este texto - que se afirma homenaje - se lo dejamos concluir al hombre, que supo marcar nuestra
la vía emprendida par las palabras. Extraña alquimia. época, a Atahualpa Yupanqui:
Mezcla sutil. Armonía lograda. Tanto que conmueven y trastornan igual al oyente o al lector ya que
ambos se preguntan cómo ha podido Atahualpa Yupanqui obtener este perfecto equilibrio, de qué se "¡Y aunque me quiten la vida
ha nutrido y por qué su arte habla tan directamente al corazón sin que lo obstaculice la lengua. o engrillen mi libertad
y aunque chamusquen quizá
El artista es púdico. Se entrega poco. Su vida está en su obra, suele puntualizar. Intentaremos, sin mi guitarra en los fogones,
embargo, hallar algunas pistas. han de vivir mis canciones
en el alma de los demás!"
Nace el 31 de enero de 1908 en El Campo de la Cruz, al norte de la provincia de Buenos Aires. En
aquel entonces se llama Héctor Chavero. Su madre es vasca, su padre, criollo, Argentino de pura (El payador perseguido)
cepa. "Me galopaban en la sangre trescientos años de América, desde que don Diego Abad Chavero
llegó para abatir quebrachos y algarrobos, a hacer puertas y columnas para iglesias y capillas", Escrito por Francoise Thanas. Traducción al español de Montserrat Prudon.
escribe en el canto del viento. En la presentación de la recopilación de 5 CDs. Registrado a nombre de Robert Prudon (1971-1974-
1977). Copyright 1992. L'Integrale and Le chant du Monde.
Y al contar su infancia evoca su profunda afición a la guitarra, sus largos recorridos por Argentina,
las más veces a caballo, hacia el Interior : "Donde sienta un chiflido amistoso, ahí me apeo, doy las
gracias y pelo la guitarra. Si nada me dicen sigo caminando, que es quizá el signo de mi destino:
caminar, caminar siempre."

Practica diversos oficios, observa los paisajes y los hombres, compartiendo la misma vida,
impregnándose de su música. Recoge de la misma fuente las formas musicales más variadas - tan
sumamente distintas según el marco geográfico - que constituyen el folklore. Entre muchas otras la
milonga, canto lento y grave de la Pampa; la chacarera y la zamba, danzas de ritmo vivo y alegre, la
vidala, intimista; la baguala, grito o protesta de los kolla del altiplano, del arriero criollo, del peón
mestizo.

Con infinito respeto Atahualpa Yupanqui restituirá en sus composiciones todas estas formas
surgidas de la tradición más pura. Bajo forma diferente "El payador perseguido" completará "El
canto del viento." A esta autobiografía se mezclan consejos y meditaciones sobre los temas más
A LA NOCHE LA HIZO DIOS
CANCIONES DE ATAHUALPA YUPANQUI (A. Yupanqui)

A la noche la hizo dios por mas que quiera ocultarlo


A LA NOCHE LA HIZO DIOS LA COPLA para que el hombre la gane con terciopelos del aire
A VOS TE HAI PESAR LA DEL GUALICHO transitando por un sueno
AHI ANDAMOS, SEÑOR LA ENGAÑERA como si fuera una calle. Me lo contó una guitarra,
AMALAYA EL CIELO LA FLECHA hondo jahuel de saudades
BAGUALA DEL GAUCHO POBRE LA LLORONA Platicar con un amigo lo aprendí en esas historias
BAGUALA DEL MINERO LA MANO DE MI RUMOR oír un canto en el aire que cuentan los trashumantes
BASTA YA LA OLVIDADA ver el amor enredado
CACHILO DORMIDO LA POBRECITA en la niebla de los parques Lo leí en el rojo vino
CAMINO DEL INDIO LE TENGO RABIA AL SILENCIO que en las madrugadas arde
CAMPESINO LO MIRO AL VIENTO Y ME RIO O adivinar un poema lo vi brillar pecho adentro
CANCION DEL ARRIERO DE LLAMAS LOS DOS ABUELOS que nunca lo escribió nadie destilando soledades
CANCION DEL CAÑAVERAL LOS EJES DE MI CARRETA a la noche la hizo dios
CANCION PARA DOÑA GUILLERMA LOS HERMANOS para que el hombre la gane La noche tiene un secreto
CANCION PARA PABLO NERUDA MADRE DEL MONTE y mi corazón lo sabe
CHACARERA DE LAS PIEDRAS ME ESTA SOBRANDO GUITARRA La noche tiene un secreto a la noche la hizo dios
CORDOBA NORTE ME GUSTABA ANDAR y mi corazón lo sabe para que el hombre la gane
DE AQUELLOS CERROS VENGO MILONGA DEL SOLITARIO
DE TANTO DIR Y VENIR MI MALA ESTRELLA
DOS MILONGAS URUGUAYAS MI RANCHO
DUERME NEGRITO MI TIERRA TE ESTAN CAMBIANDO
EL ALAZAN NADA MAS
EL ARBOL QUE TU OLVIDASTE NIEVE, VIENTO Y SOL VOS TE HAI PESAR
EL AROMO NUNCA JAMAS Canción andina
EL ARRIERO VA POBRECITO SOY (Autor anónimo)
EL FORASTERO POEMA PARA UN BELLO NOMBRE
EL NIÑO DUERME SONRIENDO PREGUNTITAS SOBRE DIOS Cuando me vaya y no vuelva,
EL PAJARILLO PUNAY recién te hai pesar.
EL PAMPINO RECUERDOS DE EL PORTEZUELO Recién entonces, ingrata,
EL PAYADOR PERSEGUIDO SALMO A LA GUITARRA comprenderás lo perdido,
EL PINTOR SOY LIBRE y a vos te hai pesar.
EL POETA TESTIMONIO FINAL
EN AQUEL TIEMPO TRABAJO, QUIERO TRABAJO Cuando me pierda en los cerros,
FIN DE LA ZAFRA TUM-TUM MAÑANITA recién te hai pesar.
GUITARRA DE POBRE VENGO A BUSCAR MI CABALLO Cuando me vaya y no vuelva,
GUITARRA DIMELO TU VIDALA DE LA NIÑA SOLA recién te hai pesar.
HUELLA TRISTE VIDALA DEL SILENCIO Recién entonces, mi negra,
HUI, JO JO JO VIDALA DEL YANARCA Sabrás lo que son rigores,
HUINCA - ONAL VIENE CLAREANDO y a vos te hai pesar.
JUAN YO QUIERO UN CABALLO NEGRO
Caerá la nieve en el tiempo,
y el sol tal vez quemará,
camino que queda solo
del que nunca volverá,
y a vos te hai pesar.
Cuando me vaya y no vuelva,
a vos te hai pesar.
AHI ANDAMOS, SEÑOR BAGUALA DEL GAUCHO POBRE
Canción (Atahualpa Yupanqui)
(A. Yupanqui)
Alto verdeña de mi querer
Ahí andamos, señor... no tengas penas, que yo he'i volver.
Vengo de los cerros Que yo he'i volver. Como no he de volver.
donde muere el sol.
Guapeando y guapeando Para tu gaucho, tortilla.
par la vida voy Pa mi caballo, mala hoja.
Al que es pobre y mala traza
Ahí andamos, señor... siempre le dan cualquier cosa.
Hilacha, los sueños en el pedregal,
hecho a los rigores He'i volver con flete gordo
y a la soledad. Y apero de plata pura.
Pa decirle a tus parientes:
Ahí andamos, señor... háganse á un la'o los basura.

Si al morir se alcanza Alto verdeña de mi querer.


la serenidad, No tengas penas, que yo he'i volver.
le juro, a la vida Que yo he'i volver. Como no he de volver.
la voy á extrañar. Guárdame la ausencia. Negra, que pronto
he'i volver.
Ahí andamos, señor... No tengas miedo, mi Niña, que pronto he'i volver.
Vengo de los cerros ... donde muere el sol. Cuídate de tus parientes, que pronto he'i volver.
Como no he de volver. Como no he de volver

¡AMALAYA EL CIELO! BAGUALA DEL MINERO


Poema (A. Yupanqui)
(José Ramón Luna - Atahualpa Yupanqui)
Voy llevando los barrenos al socavón,
¡Amalaya el cielo me trujiera un hijo Mano fuerte y vida triste. ¡Minero soy!
en cualquier chinita de este rancherío! Golpeando piedras y piedras de sol a sol...
En cualquier chinita, si es mala lo mismo, Me duele el pan que me gano. ¡Minero, soy!
que las hace buenas el llanto del hijo.
¡Pobrecitos los mineros! ¡Qué buenos muchachos son!
Morenito oscuro, raza pura d'indio.
Sangre de mi juersa. Carne de cariño. Pero tienen la desgracia de morir sin confesión.
Pa quererlo mucho. Pa' entregarle tuito. Me duele el pan que me gano. ¡Minero soy!
Tuita esta ternura, tuito este cariño Ya vendrán tiempos mejores. ¡Minero, soy!
que pa' una pueblera yo lo hei florecido.
Voy llevando los barrenos al socavón.
Queriéndola, tanto, nunca me ha querido. Mano fuerte y vida triste. ¡Minero, soy!
Y hasta aquí perdiendo su rastro hei venido. Ya vendrán tiempos mejores. ¡Minero soy!
Se han cansa'o los vientos de acarrear suspiros. Me duele el pan que me gano. ¡Minero, soy!
Se han cansa'o mis ojos de domar caminos.

Y pa' que mis alas cobijen un nido,


y pa' que descansen estos ojos míos,
¡Amalaya el cielo me trujiera un hijo,
en cualquier chinita de este rancherío!
BASTA YA CAMINO DEL INDIO
(A. Yupanqui) Canción (Atahualpa Yupanqui)

¡Ay! Ya viene la madrugada, ¡Basta ya! ¡Basta ya! Caminito del indio, El sol y la luna,
Los gallos están cantando. ¡Basta ya que el yanqui mande! sendero coya sembra'o de piedras. Y este canto mío,
Compadre, están anunciando Caminito del indio, Besaron tu piedras;
que ya empieza la jornada... Ay... Ay... ¿Qué pasa con mis hermanos que junta el valle con las estrellas. ¡camino del indio!
de Méjico Y Panamá?
¡Ay! Al vaivén de mi carreta Sus padres fueron esclavos, Caminito que anduvo En la noche serrana
nació esta lamentación. ¡sus hijos no lo serán! de sur a norte mi raza vieja. llora la que su honda nostalgia.
Compadre, ponga atención Antes que en la montaña Y el caminito sabe
que ya empieza mi cuarteta. ¡Basta ya! ¡Basta ya! la Pachamama se ensombreciera. cual es la chola que el indio llama.
No tenemos protección... Ay... Ay... ¡Basta ya que el yanqui mande! Cantando en el cerro,
llorando en el río, Se levanta en el cerro
Trabajo para el inglés, Yo de pequeño aprendí se agranda en la noche la voz doliente de la Baguala.
trabajo de carretero, a luchar por esa paz. lo pena del indio. Y el camino lamenta
sudando por un dinero, De grande lo repetí ser el culpable de la distancia.
que en la mano no se ve... Ay... Ay... y a la cárcel fui a parar.

¡Basta ya! ¡Basta Ya! ¡Basta ya ! ¡Basta ya!


¡Basta ya que el yanqui mande! ¡Basta ya que el yanqui mande!

El yanqui vive en palacio ¿Quién ha ganado la guerra


yo vivo en uno ¡barracón! en los montes del Viet-Nam ?
¿Como es posible que viva El guerrillero en su tierra CAMPESINO
el yanqui mejor que yo? Y el yanqui en el cinema. Canción
(Atahualpa Yupanqui)

CACHILO DORMIDO Cuando vayas á los campos, Campesino, Campesino.


Chacarera no te apartes del camino, ¡Por ti canto, Campesino!
(A. Yupanqui Pablo del Cerro) que puedes pisar el sueño Sagrado misión del hombre:
de los abuelos dormidos. nieve, sol y sacrificio.
Cuando pasen por Santiago Hay un rincón en el cielo Campesino, campesino. Morir sembrando la vida.
caminen sin hacer ruido, donde moran los quichuistas, ¡Por ti canto, Campesino! Vivir, templando su grito.
porque en un rincón del pago donde cantan chacareras Campesino, Campesino,
está el Cachilo dormido. al llegar la tardecita. Unos, son tierra menuda. Par ti canto, ¡Campesino!
Otras, la raíz del trigo.
Está el Cachilo dormido Al llegar la tardecita, Otros son piedras dispersas Cuando vayas á los campos,
con su ponchito de almohada, corazón estremecido, en la orillita del río. no te apartes del camino,
quizá, buscando en el sueño anda el Soco tarareando Campesino, Campesino. que puedes pisar el sueño
el alma de la vidala. para el Cachilo dormido. ¡Por ti canto, Campesino! de los abuelos dormidos.
Nunca muertos, ¡sí dormidos ¡
El alma de la vidala, Para el Cachilo dormido, Cuántas veces, cuántas veces, Nunca muertos, ¡si dormidos!
florcita salavinera, florcita salavinera, más allá del sembradío,
llegando los carnavales, llegando los carnavales, en la fragua de las tardes Campesino, Campesino
se le ha'i volver chacarera, se le ha'i volver chacarera, fueron á templar sus gritos
(Tarareo...) (Tarareo... )
llegando los carnavales, llegando los carnavales,
se la ha'i volver chacarera, se le ha'i volver chacarera.
CANCION DEL ARRIERO DE LLAMAS CANCION PARA DOÑA GUILLERMA
(Atahualpa Yupanqui) (Atahualpa Yupanqui)

El sol ya va coronando Cantaba junta a las ollas


las altas cumbres de mis montañas. Mis llamas hasta el refugio lo que naide pudo oír.
¡Montañas mías ! por el camino se fueron solas. El monte da sus secretos
Yo marcho por el camino ¡Llamitas mías! al que hierve su raíz.
pensando en ella y arreando llamas. Ya marcho por el sendero
¡Así es mi vida! mientras mi quena llora su ausencia. Una lunita morada,
¡Así es mi vida ! vagando en cielos de añil.
Llenita de tristes risas Y dos letras coloradas
y alegres penas. Llenita de tristes risas en la esquina del mandil.
y alegres penas.
Serranito, serranito, mi canción Serranito, serranito, mi canción Doña Guillerma me hizo uno pa' mí.
nació vestida de fiesta nació vestida de fiesta Pa las campereadas de fines de Abril.
mientras lloraba mi corazón. mientras lloraba mi corazón. Pa que el paisano se pueda lucir,
Mi corazón. Mi corazón. lindo el apero, mejor el mandil.
Fue doña Guillerma que lo hizo pa' mí.

La vida tiene sus trampas


porque la vida es así.
Las viejitas trenzadoras
no se debieron morir.
Los criollos ya na' tenemos
CANCION DEL CAÑAVERAL a quien mingarle un mandil
Yaraví Doña Guillerma me hizo uno pa' mí.
(A. Yupanqui)
CANCION PARA PABLO NERUDA
Muele que muele el trapiche, y en su moler (Atahualpa Yupanqui)
hasta la vida del hombre muele también.
Pablo nuestro que estás en tu Chile,
Tira'o sobre la maloja, pobre de mí, Viento en el viento.
sin que me arrime consuelos el yaraví. Cósmica voz de caracol antiguo.
Nosotros te decimos,
¿Verde cañita de azúcar, qué dulce es! Gracias por la ternura que nos diste.
Pero al final de la zafra se vuelve hiel. Por las golondrinas que vuelan con tus versos.
Yo tengo un sueño secreto, vivo par él. De barca a barca. De rama a rama.
No hay trapiche que á mi sueño pueda moler De silencio a silencio.
El amor de los hombres repite tus poemas.
El sol de a1guna mañana me encontrará En cada calabozo de América
cantando sobre los surcos, cañaveral. un muchacho recuerda tus poemas.
Pablo nuestro que estás en tu Chile.
Ha de llegar a1gun tiempo. ¿Cuando será ? Todo el paisaje custodia tu sueño de gigante.
En que te sienta mi amigo. ¡Cañaveral! La humedad de la planta y la roca
Muele que muele... allá en el sur.
La arena desmenuzada, Vicuña adentro,
en el desierto.
Y allá arriba, el salitre, las gaviotas y el mar.
Pablo nuestro que estás en tu Chile.
Gracias, par la ternura que nos diste.
CHACARERA DE LAS PIEDRAS DE AQUELLOS CERROS VENGO
(A. Yupanqui) (A. Yupanqui - Pablo del Cerro)

Aquí canta un caminante A la sombra de unos talas De aquellos cerros vengo, negra querida,
que muy mucho ha caminado yo ei sentido de un repente a buscar los despojos del alma mía.
y agora vive tranquilo a una moza que decía Fresquita y ansiosa yo te la entregué.
y en el cerro Colorado sosiegue que viene gente Tu la destrozaste, yo no sé por qué.

Largo mis coplas al viento Te voy a dar un remedio De aquellos cerros vengo, negra querida...
por donde quiera que voy que es muy bueno pa’las penas
soy árbol lleno de frutos grasita de iguana macho Este ponchito mío, de tres colores,
como plantita e mistol mezclaita con yerba buena me dice que no fíe de tus amores.
Palomita ingrata, me has pagado mal,
Cuando ensillo mi caballo Chacarera de las piedras córtate las alas, deja de volar...
me largo por las arenas criollita como ninguna
y en la mitad del camino no te metas en los montes De aquellos cerros vengo, paloma mía.
ya me olvide de las penas si no ha salido la luna

Caminiaga, Santa Elena, Caminiaga, Santa Elena ,


el churqui región cortado el churqui región cortado
no hay pago como mi pago no hay pago como mi pago
viva el cerro Colorado viva el Cerro Colorado DE TANTO DIR Y VENIR
Canción
(Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro)

De tanto dir y venir Lo que antes fue clara senda


CORDOBA NORTE abrí mi huella en el campo. se enyenó de espina y barro.
Chacarera Para el que después anduvo
(Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro) ya fue camino liviano. Parece que no hubo nada
si se mira sin mirarlo.
Adiós Cerro Colorado Me voy por la senda vieja, En infinitos andares Todo es malezal confuso,
cerro de piedras pintadas. por Deanfunes y Ongamira. fui la gramilla pisando. pero mi huella está abajo.
Algún día he de volver Entre coplas y caminos Raspé mí poncho en los talas.
por tu camino de cabras. Se me va yendo la vida: Me hirieron pinchos de cardo. Desparejo es el camino.
Hoy ando senderos ásperos.
Me voy par él cuesta arriba No quiero cantar tristezas Las huellas no se hacen solas Piso la espina que hiere,
orillando lo quebrada. Pero hay caminos que apenan. ni con sólo el ir pisando. pero mi huella está abajo,
Pura piedra y soledad, Algunos con sol quemantes Hay que rondar madrugadas
camino de Caminiaga. Y algunos con luna llena. maduras en sueño y llanto. Tal vez un día la limpien
los que sueñan caminando.
El alto de Santa Cruz Corazón. ¿Dónde vas yendo, Viento de injustas arenas Yo les daré, desde lejos
tiene una selva de palmas. De adonde te andan llamando? fueron mi huella tapando. mi corazón de regalo.
Por ellas se va la tarde Tal vez pa' darte consuelo,
con una luz de vidalas. o pa' largarte llorando.

Adiós norte cordobés, Adiós norte cordobés,


tierra de lindos paisanos. Tierra de lindos paisanos.
Ya se van las tradiciones. Ya se van las tradiciones.
¡Adiós Don Tristán Moyano! Adiós Don Tristán Moyano
DOS MILONGAS URUGUAYAS EL ALAZAN
(Música : Atahualpa Yupanqui (Yupanqui - Pablo del Cerro)
Poema: R. Risso)
Glosa

SILBANDO PIENSAN LAS AVES HUMITO DE MI CIGARRO Dicen que un hombre "de a pié" A veces, a rienda corta,
Silbando piensan las aves Humito de mi cigarro Solo es la mitad de un gaucho. con las coscojas sonando,
yo pienso ansina también. ni que de adentro salieras. Eso, no más, y seré parecía preguntarme:
Naide sabe lo que dicen, Parece que te llevarás porque perdí un caballo. ¿qué ando pasando, paisano... ?
ellas lo deben saber. por los aires mis ideas.
Se me hace que las ideas Mi corazón va pitando No me gustan las nostalgias
con las palabras se van fuerte picadura negra. porque me achican la vida,
En el silbido parece Y el humito sale blanco y el corazón se desangra Y así voy, y así voy yendo,
que se alargan, nada más. pero el tabaco se quema. de penas mientras camina. cuesta arriba o cuesta abajo,
Mesmo sin pensar en nada La vida, como el tabaco, solitario y nostálgico
las horas suelo silbar... fuerte picadura negra. porque perdí mi caballo...
y el, humito sale blanco
pero el tabaco se quema.

Canción

Era una cinta de fuego En el fondo del abismo


DUERME NEGRITO galopando, galopando ni una voz para nombrarlo,
Arrullo crin revuelta en llamaradas, solito se fue muriendo
(Caraibes, arr. Yupanqui) ¡mi alazán te estoy nombrando! ¡mi caballo, mi caballo!

Duerme, duerme, negrito, Trabajando, Cruzó las sierras con luna, En una horqueto del tala
que tu mamá está en el campo, trabajando duramente, cruzó los valles nevando. hay un morral solitario,
negrito... trabajando sí. Cien caminos anduvimos, y hay un corral sin relincho.
Trabajando y no le pagan, ¡mi alazán te estoy nombrando! ¡mi alazán te estoy nombrando!
Te va a traer trabajando sí.
codornices para ti. Trabajando y va tosiendo, Oscuro lazo de niebla Si como dicen algunos
Te va a traer trabajando, sí. te pialó junto al barranco hay cielos pa'l buen caballo,
rica fruta para ti. Trabajando y va de luto, ¿Como fue que no lo viste? por ahí andará mi flete
Te va a traer trabajando sí. ¿Qué estrella andabas mirando ? galopando, galopando...
carne de cerdo para ti. Para el negrito chiquitito,
Te va a traer trabajando, sí. Oscuro lazo de niebla
muchas cosas para ti Duramente, sí. te pialó...
Y si el negro no se duerme, Va tosiendo, sí. En el fondo del abismo
viene el diablo blanco Va de luto, sí. ni una voz.
y ¡zas! Le come la patita, Duramente, sí
¡chacapumba!
Duerme, duerme, negrito,
Duerme, duerme, negrito, que tu mama está en el campo,
que tu mamá está en el campo, negrito..
negrito...
EL ARBOL QUE TU OLVIDASTE EL ARRIERO VA
Canción Canción
(Atahualpa Yupanqui) (Atahualpa Yupanqui)

El árbol que tú olvidaste siempre se y uno tiene que sufrir, En las arenas bailan los remolinos, Las penas son de nosotros,
acuerda de ti, y el árbol que tú olvidaste el sol juega en el brillo del pedregal, las vaquitas son ajenas.
y le pregunta a la noche siempre se acuerda de ti. y prendido a la magia de los caminos,
si serás o no feliz. el arriero va, el arriero va. Un degüello de soles muestra la tarde,
Arbolito de mi tierra se han dormido las luces del pedregal,
El arroyo me ha contado yo te quisiera decir Es bandera de niebla su poncho al y animando la tropa, dale que dale,
que el árbol suele decir: que lo que a muchos les pasa viento, el arriero va, el arriero va.
quien se aleja junta quejas también me ha pasado a mi. lo saludan las flautas del pajonal,
en vez de quedarse aquí. y animando la tropa par esos cerros, Amalaya la noche traiga un recuerdo
No quiero que me lo digan el arriero va, el arriero va. que haga menos peso mi soledad.
Al que se va par el mundo pero lo tengo que oír: Como sombra en la sombra por esos
suele sucederle así. quien se aleja junta quejas Las penas y las vaquitas cerros,
Que el corazón va con uno en vez de quedarse aquí. se van par la misma senda. el arriero va, el arriero va.

EL AROMO
Milonga EL FORASTERO
(Romildo Risso - Atahualpa Yupanqui) (A.Yupanqui)

Hay un aromo nacido como lo estruja la piedra. Porque no soy de estos para ponerlo en el cuello
en la grieta de una piedra. Fijarse que es un martirio pagos me acusan de forastero de una paisana que nunca
Parece que la rompió la vida que le envidean. como si fuera un pecado me sintiera forastero
pa' salir de adentro de ella. vivir como vive el viento
En ese rajón, el árbol Y ando por todas las sendas,
Está en un alto pela'o, nació por su mala estrella. De donde vendrán los vientos , las del valle, las del cerro
no tiene ni un yuyo cerca, Y en vez de morirse triste de donde vendrá el rocío y aquellas que no se ven
Viéndolo solo y florido se hace flores de sus penas... que besa los pastizales y andan corazón adentro
Tuito el monte lo envidea. de la llanura y el cerro
Como no tiene reparo, La gente me ve pasar
Lo miran a la distancia todos los vientos le pegan. Yo vengo de todas partes y me dice forastero
árboles y enredaderas, Las heladas lo castigan por los caminos del sueño solo escuchan mis oídos ,
diciéndose con rencor: L'agua pasa y no se queda. como las rosas a mayo porque mi alma esta lejos
Pa uno solo, cuánta tierra. los jazmines a enero.
Ansina vive el aromo Esta mirando esos mundos
En oro le ofrece al sol sin que ninguno lo sepa. Doy lo que tengo que dar , que no ven los que son ciegos
pagar la luz que le presta. Con su poquito de orgullo y a veces me doy entero aunque se llenen de luz
Y como tiene de más, porque es justo que lo tenga. como la dicha en los valles y tengan los ojos bellos
puña'os por el suelo siembra. y la pena en los desiertos
Pero con l'alma tan linda Por donde quiera que paso,
Salud, plata y alegría, que no le brota una queja. Junto estrellas en la noche voy desgranando mis sueños,
tuito al aromo, la suebra Que en vez de morirse triste y en la sombra las enhebro aunque digan los demás,
Asegún ven los demás se hace flores de sus penas. con ellas hago un collar allá pasa un forastero
dende el lugar que lo observan.
¡Eso habrían de envidiarle
Pero hay que dar y fijarse los otros, si lo supieran !
EL PAJARILLO EL PAMPINO
Yaraví (A. Yupanqui)
(Anónimo del Perú)
La pampa mata de abajo
¡Oh! pajarillo que cantas Si hasta mi guitarra, llora, el sol castiga de arriba
por las mañanas serenas, con ser madero, vacío, y entre sol, pampa y salitre
por qué a unos les das la dicha ¿Como no he de llorar yo se gana el pobre la vida.
y a mí me aumentas las penas ? si me quitan lo que es mío?
Pampino de mano fuerte
¿Por qué con tanto rigor ¿De qué le sirve al cautivo siempre toreando al destino.
has castigado mi amor ? tener los grillos de plata Hombre que baja la frente
Mi sombra te ha de hacer falta y el enrejado de oro, nada tiene de pampino...
cuando te fatigue el sol. si la libertad le falta?
Me muestro desnudo al viento
para que aprienda de mí.
Me han dicho que el viento llora
y a mi me gusta reír...
EL NIÑO DUERME SONRIENDO
(A. Yupanqui - M. Benitez Carrasco) Pampino de mano fuerte
siempre toreando al destino.
Cantado Hombre que baja la frente
La noche, con la espumita del río, El niño quiso ser hombre, nada tiene de pampino...
te está tejiendo un encaje, mi Niño. fuerte, compuso su voz.
Quiero la estrella del ciclo mas bella, Mas el mundo era tan suyo El salitre se va lejos,
para hacerte un sonajero, mi Niño. que el niño, niño quedo lo va llevando un vapor...
. y el pampino queda solo
El niño duerme sonriendo, mi Niño. Fueron pasando los años entre la pampa y el sol...
¡Ah, mi Niño ¡ y el hombre alcanzó su voz,
Qué bello mundo es tu mundo, mi Niño. y anduvo par esos mundos La pampa mata de abajo,
¡Ah, mi Niño! mezclando dicha y dolor. el sol castiga de arriba
y entre sol, pampa y salitre
Recitado Y el hombre quiso ser niño, se gana el pobre la vida...
El niño quiso ser pez quiso ser nube y ser pez,
y fue a la orilla del mar. mas la playa era de angustia
Puso los pies en el agua y las nubes el ayer.
pero, no pudo ser pez.
Y el hombre va par el mundo
El niño quiso ser nube Con razón o sin razón,
y fijo al cielo miro. y lleva un niño frustrado
Volaba el aire en el aire gimiendo en su corazón.
pero, el niño no voló.
Qué. bello mundo es tu mundo, mi Niño.
¡Ah, mi Niño! ...
EL PAYADOR PERSEGUIDO Acostumbra'o a las sierras la letra chiquita hacía
yo nunca me sé marear, pa' no malgastar sella'o,
y si me siento alabar y, era también apreta'o
Con permiso, via a dentrar La sangre tiene razones me voy yendo despacito. el sueldo que recibía.
aunque no soy convida'o, que hacen engordar las venas. Pero aquel que es compadrito
pero en mi pago, un asao Pena sobre pena y pena paga pa' hacerse nombrar. Cansa'o de tantas miserias
no es de naides y es de todos. hacen que uno pegue el grito. me largué pa'l Tucumán,
Yo via cantar a mi modo La arena es un puñadito Si alguien me dice señor,
después que haiga churrasquiao. pero hay montañas de arena. agradezco el homenaje; Lapacho, aliso, arrayán,
mas, soy gaucho entre el gauchaje y hacha con los algarrobos.
No tengo Dios pa' pedir No sé si mi canto es lindo y soy nada entre los sabios. ¡Por dos cincuenta! Era robo
cuartiada en esta ocasión, o si saldrá medio triste ; Y son pa' mi los agravios pa' que uno tenga ese afán.
ni puedo pedir perdón nunca fui zorzal, ni existe que le hagan al paisanaje.
si entuavía no hei falta'o; plumaje más ordinario. Sin estar fijo en un la'o
veré cuando haiga acaba'o; Yo soy pájaro corsario La vanidá es yuyo malo a toda labor le hacía,
pero ésa es otra cuestión. que no conoce el alpiste. que envenena todo huerta. y así sucedió que un día
Es preciso estar alerta que andaba de benteveo
Yo sé que muchos dirán Vuelo porque no me arrastro, manejando el azadón, me topé con un arreo
que peco, de atrevimiento que el arrastrarse es la ruina; pero no falta el varón que dende Salta venía.
si largo mi pensamiento anido en árbol de espina que la riegue hasta en su puerta.
pa'l rumbo que ya elegí, lo mesmo que en cordilleras Me picó ganas de andar
pero siempre hei sido así; sin escuchar las zonceras El trabajo es cosa buena, y apalabré al capataz,
galopiador contra el viento. del que vuela a lo gallina. es lo mejor de la vida; y así, de golpe nomás
pero la vida es perdida el hombre me preguntó:
Eso lo llevo en la sangre No me arrimo así nomás trabajando, en campo ajeno. -¿Tiene mula? - Cómo no
dende mi tatarabuelo. a los jardines floridos. Unos trabajan de trueno, -le dije-.Y hambre, de-más.
Gente de plata en el suelo Sin querer vivo alvertido y es para otros la llovida.
fueron mis antepasaos; pa' no pisar el palito. A la semana de aquello
criollos de cuatro provincias Hay pájaros que solitos Trabajé en una cantera repechaba cordilleras,
y con indios misturaos. se entrampan por presumidos. de piedritas de afilar. faldas, cuestas y laderas
Cuarenta sabían pagar siempre pa'l la'o del poniente,
Mi aguelo fue carretero, Aunque mucho he padecido por cada piedra pulida, bebiendo agua de vertiente
mi tata fue domador; no me engrilla la prudencia. y era a seis pesos vendida y aguantando las soleras.
nunca se buscó dotor Es una falsa experiencia en eso del negociar.
pues se curaban con yuyos, vivir temblándole a todo. Tal vez otro habrá roda'o
o escuchando los murmullos Cada cual tiene su modo; Apenas el sol salía tanto como he roda'o yo,
de un estilo de mi flor. la rebelión es mi ciencia. yo estaba a los martillazos, y le juro, creameló,
y entre dos a los abrazos que he visto tanta pobreza,
Como buen rancho paisano Pobre nací y pobre, vivo con los tamaños piegrones que yo pensé con tristeza:
nunca falto una encordada, por eso soy delica'o. y por esos moldejones Dios por aquí no pasó.
de ésas que parecen nada Estoy con los de mi la'o las manos hechas pedazos.
pero que son sonadoras. cinchando tuitos parejos Se nos despeñó una vaca
Según el canto y la hora pa' hacer nuevo lo que es viejo Otra vez fui panadero causa de la cerrazón,
quedaba el alma sobada. y verlo al mundo cambia'o. y hachero en un quebrachal; y nos pilló la oración
he carga'o bloques de sal cueriando y haciendo asao;
Mi tata era sabedor Yo soy de los del montón y también he pela'o cañas, dende ese día, cuña'o
por lo mucho que ha roda'o. no soy flor de invernadero. y un puñado de otras hazañas se me gastó mi facón.
Y después que había canta'o Soy, como el trébol pampero, pa' mi bien o pa' mi mal.
destemplaba cuarta prima, crezco sin hacer barullo. Me sacudí las escarchas
y le echaba un poncho encima Me aprieto contra los yuyos Buscando de desasnarme cuando bajé de los Andes,
"pa' que no hable demasiado..." y así a aguanto al pampero. fui pinche de escribanía y anduve en estancias grandes
cuidando unos parejeros ; de esos puebleros letrao's; hace aflojar al paisano
trompeta, tapa y sombrero, Riojanos y santiagueños, juntaba tropa e versiao's y el viento le lleva el llanto.
pero pa' los peones, de ande. salteños y tucumanos, que iban después a un libraco,
con el machete en la mano y el hombre forraba el saco En asuntos del cantar,
La peonada, al descampa'o, volteaban cañas maduras, con lo que otros han pensa'o. la vida nos va enseñando
el patrón, en Guenos Aires. pasando sus amarguras que sólo se va volando
Nosotros, el cu... ello al aire y aguantando como hermanos. Los peones formaban versos la copla que es livianita.
can las caronas mojadas, con sus antiguos dolores. Siempre caza palomitas
y la hacienda de invernada ¡Rancho techa'o con maloja, Después vienen los señores cualquiera que anda cazando...
más relumbrosa que un fraile. vivienda del pelador! con un cuaderno en la mano,
En medio de ese rigor copian el canto paisano Pero si el canto es protesta
El estanciero tenía no faltaba una vihuela, y presumen de escritores. contra la ley del patrón
también sus cañaverales, con que el pobre se consuela se arrastra de peón a peón
y en los tiempos otoñales cantando coplas de amor. El criollo cuida su flete, en un profundo murmullo,
juntábamos los andrajos, su guitarra y su mujer; y marcha al ras de los yuyos
y nos íbamos p'abajo Yo también , que desde chango siente que enfrenta un deber corno chasque en un malón.
dejando los pedregales. unido al canto crecí, cada vez que da la mano;
más de un barato pedí y aunque pa'todo es baquiano Se pueden perder mil trovas
Allí nos amontonaban y pa´ los piones cantaba. sólo el canto ha de perder. ande se canten quereres,
en lote con otros criollos, ¡Lo que a ellos les pasaba versos de dichas, placeres,
coda cual buscaba un hoyo también me pasaba a mí ¡Coplas que lo acompañaron carreras y diversiones;
ande quinchar su guarida, en las quebradas desiertas, suspiros de corazones
y pasábamos la vida Cuando yo aprendí a cantar aromas de flores muertas y líricos padeceres.
rigoriaos y sin apoyo. armaba con pocos rollos. y de patriadas vividas,
Y en la orilla de un arroyo fueron la luz encendida Pero si la copla cuenta
Faltar, no faltaba nada: bajo las ramas de un sauce, para sus noches despiertas!... del paisanaje la historia,
vino, café y alpargatas. crecí mirando en el cauce ande el peón vueltea la noria
Si habré revoliao las patas mis sueños de pobre criollo. Se aflije si se le pierde de las miserias sufridas,
en gatos y chacareras. un bozal, un maneador, ésa, se queda prendida
Recién la cosa era fiera Cuando sentí una alegría; pero, no siente furor como abrojo en la memoria
al dir a cobrar las latas. cuando el dolor me golpió; si al escucharle una trova, Lo que nos hizo dichosos
cuando una duda mordió viene un pueblero y le roba tal vez se pueda olvidar;
¡Qué vida más despareja! mi corazón de paisano, su mejor canto de amor. los años en su pasar
Todo es ruindad y patraña; desde el fondo de los llanos De seguro, si uno piensa, mudarán los pensamientos.
Pelar caña es hazaña vino un canto y me curó... le halla el nudo a la a madeja, pero angustias y tormentos
Del que nació pa'l rigor. porque la copla más vieja, son marcas que han de durar...
Allá había un solo dulzor En esos tiempos pasaban coma la raíz de la vida,
y estaba adentro 'e la caña. cosas que no pasan ya. tiene el alma par guarida, Estas cosas que yo pienso
Cada cual tenía un cantar que es ande anidan las quejas. no salen par ocurrencia.
Era un consuelo pa'l pobre o copla de anochecida. Para formar mi esperencia
Andar jediendo a vinacho. Formas de curar la herida Por eso el hombre al cantar yo masco antes de tragar.
Hombres grandes y muchachos que sangra en el trajinar. con emoción verdadera, Ha sido largo el rodar
como malditos en vida, echa su pena p'ajuera de ande saqué la alvertencia.
esclavos de la bebida Algunos cantaban bien. pa que la lleven los vientos,
se lo pasaban borrachos. Otros, pobres, más a menos... y así, siquiera un momento Si uno pulsa la guitarra
¡Tristes domingos del surco Mas no eran cantos ajenos, se alivia su embichadera. pa cantar coplas de amor,
los que yo he visto y vivido! aunque marca no tenían. de potros, de domador,
Desparramados y dormidos Y todos se entretenían No es que no ame a su trova de la sierra y las estrellas,
en la arena amanecían, guitarreando hasta el desvelo. ni que desprecie su canto. dicen: ¡ Qué cosa más bella!
a lo mejor soñarían Es como cuando un quebranto ¡Si canta que es un primor!
con la muerte o el olvido... Por ahí se allegaba un máistro, en la noche de los llanos
Pero si uno, como Fierro, al tiempo, cuenta me dic y se viene abajo el templo
por ahí se larga opinando, y agarré por buen camino. de la decencia del país. Un hombre se me acercó
el pobre se va acercando ¡Antes que nade, argentino; y me dijo: - ¿Qué hace acá?
con las orejas alertas, y a mi bandera seguí...! Detrás del ruido del oro Viaje pa la gran ciudad
y el rico vicha la puerta van los maulas como hacienda; que allá lo van a entender;
y se aleja reculando. Yo soy del norte y del sur, no hay flojo que no se venda ahí tendrá fama, placer
del llano y del litoral; por una sucia moneda; y plata pa regalar.
Debe trazar bien su melga y nadie lo tome a mal mas, siempre en mi tierra queda
quien se tengo par cantor, si hay mil gramos en el kilo. gauchaje que la defienda. ¡Para qué lo habré escucha'o!
porque sólo el impostor Ande quiera estoy tranquilo ¡Si era la voz del mandinga!
se acomoda en toda huella. pero ensilla'o, soy bagual. Cantor que cante a los pobres Buenos Aires, ciudá gringa,
Que elija una sola estrella ni muerto se ha de callar. me tuvo muy apreta'o.
quien quiera ser sembrador... El cantor debe ser libre Pues ande vaya a parar Tuitos se me hacían a un la'o
pa desarrollar su ciencia. el canto de ese cristiano, como cuerpo a la jeringa.
En el trance de elegir Sin buscar la convenencia no ha de faltar el paisano,
que mire el hombre p'adentro, ni alistarse con padrinos. que lo haga resucitar. Y eso que no vine pobre
ande se hacen los encuentros De esos oscuros caminos pues traiba alpargatas nuevas.
de pensares y sentires. yo ya tengo la experiencia. El estanciero presume Las viejas... pa cuando llueva
Después... que tire ande tire, de gauchismo y arrogancia. en la alforja las metí;
con la conciencia por centro. Yo canto, por ser antiguos El cree que es extravagancia un pantalón color gris
cantos que ya son eternos que su peón viva mejor. y un saco tirando a leva.
Hay diferentes montones, y hasta parecen modernos Mas, no sabe ese señor
unos grandes, y otros chicos. por lo que en ellos vichamos. que por su peón tiene estancia. Saltando de radio en radio
Si va pa'l montón del rico Con el canto nos tapamos anduve, figuresé.
el pobre que piensa poco, para entibiar los inviernos... Aquel que tenga sus reales Cuatro meses me pasé
detrás de los equívocos hace muy bien en cuidarlos en partidas malogradas;
se vienen los perjudicos. Yo no canto a los tiranos pero si quiere aumentarlos naide aseguraba nada,
ni por orden del patrón. que a la ley no se haga el sordo. y sin plata me quedé.
Yo vengo de muy abajo, El pillo y el trapalón Que en todo puchero gordo
y muy arriba no estoy. que se arreglen por su lado los choclos se vuelven marlos. Vendí mis lindas alforjas.
Al pobre mi canto doy con payadores comprados Mi guitarra, ¡la vendí !
y así lo paso contento, y cantores de salón. Una vuelta, sin trabajo En mi pobreza, ay de mí,
porque estoy en mi elemento andaba par Tucumán, me hubiera gusta'o guardarla.
y ahí valgo por lo que soy. Por la fuerza de mi canto y en una fonda, ande van ¡Tanto me ha costa'o comprarla!
conozco celda y penal. cantores de madrugada, Pero, en fin... todo perdí.
Si alguna vuelta he canta'o, Con fiereza sin igual me acerqué pa la payada
ante panzudos patrones, más de una vez fui golpiao, que siempre ha sido mi afán. ¡Vihuela, dónde andarás,
he picanea'o las razones y al calabozo tira'o qué manos te están tocando.
profundas del pobrerío. ¡como tarro al basural! Aunque extrañando la monta Noches enteras pensando
Yo no traiciono a los míos me le apilé a un instrumento. siquiera como consuelo,
por palmas ni patacones. Se puede matar a un hombre. Y al cabo de algún momento que sea un canto de este suelo
Pueden su rostro manchar, le di puerta a una baguala, lo que están arrancando...!
Aunque canto en todo rumbo su guitarra chamuscar. con una coplita rala
tengo un rumbo preferido. ¡Pero el ideal de la vida, de esas que llevan los vientos. Cuando el maíz esta en barbecho
Siempre canté estremecido esa es leñita prendida luce un color brillantón;
las penas del paisanaje, ¡que naide ha de apagar! Tal vez fuera la guitarra. las hebras, como un nailón
la explotación y el ultraje ¡Tan lindo como sonaba! presumen con sus lindezas.
de mis hermanos queridos. Los males se van alzando Mi corazón remontaba Pero agachan la cabeza
todo lo que hallan por ahí; tristezas de los caminos, si las agarra el carbón.
Pa que cambiaran las cosas como granitos de maíz y lo maldije al destino
busqué rumbo y me perdí; siembran los peores ejemplos, que tantas penas me daba. Igual me pasaba a mí
en aquellos tiempo idos; Pero nadie larga afuera
joven, fuerte, presumido, si no tiene nada adentro... No hay serrano sanguinario Nadie podrá señalarme
y cuando se acabó el queso, ni coya conversador; que canto por amarga'o.
volví en un triste regreso La guitarra es palo hueco, el más capaz domador Si he pasa'o lo que he pasa'o,
poblada l´alma de olvidos. y pa tocar algo bueno, jamás cuenta sus hazañas, quiero servir de alvertencia.
Cosas de la juventud... el hombre debe estar lleno y no les tienta la caña El rodar no será cencia
¡Malhaya, dónde andarás...! de claridades internas. porque el "tintillo" es mejor. pero tampoco es peca'o.
Aura que estoy bataráz ¡Pa sembrar coplas eternas
de tanto cambiar el pelo, la vida es un buen terreno...! Cada pago se aficiona Yo he camina'o por el mundo
recuerdo aquellos desvelos a una forma de peliar, he cruza'o tierras y mares,
pero no miro p'atras. Si el rezar brinda consuelos y aquel que quiera guapear sin fronteras que me pare
al que consuelo precisa, antes tendrá que alvertir y en cualesquiera guarida,
Me volví pa'l Tucumán igual que cristiano en misa que para poder salir yo he canta'o, tierra querida
nuevamente a padecer. o matrero en medio el monte, hay que aprender a dentrar. tus dichas y tus pesares.
Y en eso de andar y ver yo rezo en los horizontes
se pasaron muchos años cuando la tarde agoniza. Se aparran a puñetazos A veces, caiban al canto
entre penas, desengaños, igual que en cualquier parte; Como vacaje a la aguada
esperanzas y placer. Queda callada la pampa pero es una cencia aparte Para escuchar mis versadas
cuando se ausenta la luz. usar los modos del pago. hombres de todos los vientos,
Mas, no jué tiempo perdido, El chajá y el avestruz Ahí se pone fiero el trago, trenzando sus sentimientos
asegún lo ví después. van buscando la espesura, Como dijo don Narvarte. al compás de mi encordada.
Porque supe bien como es y se agranda en la llanura
la vida de los paisanos. la soledad del ombú. Cordobés, pa la pegrada. Pobre de aquel que no sabe
De todos me sentí hermano, Riojano, pa'l rebencaso. del canto las hermosuras.
del derecho y del revés. Entonces, igual que un poncho Chileno, pa'l caballaso. La vida, la más oscura,
a uno lo envuelve la tierra. Salteño, con daga en mano la que tiene más quebrantos,
Siempre recuerdo los tiempos Desde el llano hasta la sierra Y es un rey el tucumano hallará siempre en el canto
en que guapiando pasé, se va una sombra extendiendo, Pa peliar a cabezasos. consuelo pa su tristura.
los cerros que atravesé y el alma va comprendiendo
buscando lo que no hallaba, las cosas, que el mundo encierra. Siempre el criollo ha de peliar Dicen que no tienen canto
y hasta a veces me quedaba de noche y medio machao. los ríos que son profundos.
por esos campos de a pie. Ahí está el justo momento Es una pena, cuña'o, Mas yo aprendí en este mundo
de pensar en el destino. que a veces por una tuna que el que tiene mas hondura,
La vida me fue enseñando Si el hombre es un peregrino, se nublen noches de luna canta mejor por ser hondo,
lo que vale una guitarra; si busca amor a querencia, y cielitos estrellaos. y hace miel de su amargura.
por ella anduve en las farras o si cumple la sentencia
tal vez hecho un estropicio, de morir en los caminos. Una canción sale fácil Con los tumbos del camino
y casi me agarra el vicio cuando uno quiere cantar. se entran a torcer las cargas.
con sus invisibles garras. En el Norte vide cosas Cuestión de ver y pensar Pero es ley que en huella larga
que ya nunca he de olvidar. sobre las cosas del mundo. deberán acomodarse.
Menos mal que llevo adentro Yo vide gauchos peliar Si el río es ancho y profundo Y aquel que llega a olvidarse
lo que la tierra me dio. con facones carroñeros cruza quien sabe nadar. las ha de pasar amargas.
Patria, raza o que sé yo, o con machetes cañeros
pero que me iba salvando, que al verlos hacia temblar. Que otros canten alegrías Amigos, voy a dejar.
y así, seguí caminando si es que alegres han vivido. Está mi parte cumplida
por los caminos de Dios. Rara vez mata el paisano Que yo también he sabido en la forma preferida
porque ese instinto no tiene dormirme en esos engaños. de una milonga pampeana.
La cosa estaba en pensar al duelo criollo se aviene Pero han sido más los años Canté de manera llana
que al pulsar un instrumento, por no recular ni un tranco. de porrazos recibidos. ciertas cosas de mi vida.
hay, que dar con sentimiento Hace saber que no es manco
toda la fuerza campera. y en el peliar se entretiene.
EL POETA
Aura me voy. No sé adónde. Y aunque me quiten la vida
Pa mí todo rumbo es gueno. o engrillen mi libertad. Tu piensas que eres distinto Por un pedazo de pan.
Los campos, con ser ajenos ¡Y aunque chamusquen quizá Porque te dicen poeta,
los cruzo de un galopito. mi guitarra en los fogones, Y tienes un mundo aparte Poeta de tierras rimas,
Guarida no necesito, han de vivir mis canciones Mas allá de las estrellas. Vete á vivir a la selva,
yo sé dormir al sereno.. . en l´alma de los demás! Y aprenderás muchas cosas
De tanto mirar la luna Del hachero y sus miserias.
Siempre hay alguna tapera ¡No me nuembren, que es peca'o, Ya nada sabes mirar.
en la falda de una sierra. y no comenten mis trinos Eres como un pobre ciego Vive junto con el pueblo,
Y mientras siga esta guerra Yo me voy con mi destino Que no sabe adónde va. No lo mires desde afuera,
de injusticias para mí, pa'l la'o donde el sol se pierde. Que lo primero es ser hombre,
yo he de pensar desde allí ¡Tal vez alguno se acuerde Vete á mirar los mineros, Y lo segundo, poeta.
canciones para mi tierra. que aquí cantó un argentino! Los hombres en el trigal, De tanto mirar la luna...
Y cántale a los que luchan

EL PINTOR

Creyendo hacer cosa buena EN AQUEL TIEMPO


Un pintor me pinto un día, (A. Yupanqui)
Mas me pinto por afuera
Porque adentro no veía. Engrillado y entre cuatro mi guitarra clara y honda
hombres de torvo mirar sabe todo lo demás
¿Cuando vendrá ese pintor así cruce Buenos Aires
Que pinte lo que yo siento? por cantar la libertad Engrillado y entre cuatro,
Ganas de vivir la vida hombres de torvo mirar
Sin angustias ni tormentos... Anchos portones se abrieron así cruce Buenos Aires
para volverse a cerrar por cantar la libertad
Es mal pintor el pintor pabellones, pasadizos
Que me ha pintado ese día, y al fondo la oscuridad Duerme el tirano la siesta
Cantando coplas serranas con metralleta a la par
Con la barriga vacía. Por mi mujer y mi niño por si pasa un inocente
recé lo que se rezar cantando a la libertad
Es mal pintor el pintor,
Y en esto no hay duda alguna,
Pues solo pintó mi poncho
Y se olvidó de mi hambruna.

¿Cuando vendrá ese pintor


Que pinte lo que yo siento?
Ganas de vivir la vida
Sin pesares ni tormentos.

Creyendo hacer cosa buena...


FIN DE LA ZAFRA GUITARRA DIMELO TU
(A Yupanqui) (A. Yupanqui)

Por caminos Tucumanos, me han de separar mañana Si yo le pregunto al mundo Y paso las madrugadas
hacia el monte en que nacieron, de tus campos y tus cerros. el mundo me ha de engañar buscando un rayo de luz
tierra de soles ardientes, cada cual cree que no cambia Porque la noche es tan larga
perfumada de polen. Ya no he de ver en los surcos y que cambia los demás guitarra dímelo tu
curtidos brazos obreros y paso las madrugadas
Por caminos Tucumanos, luchando de sol a sol buscando un rayo de luz Los hombres son dioses muertos
vino, vidala y silencio, por lo que siempre es ajeno. porque la noche es tan larga de un templo ya derrumba'o
se van los hombres del surco guitarra dímelo tu Ni sus sueños se salvaron
tan pobres como vinieron. Ya no he de mirar la luna solo una sombra ha queda'o
asomando atrás del cerro, Se vuelve cruda mentira y paso las madrugadas
Ha terminado la zafra, ni el camino de Tafi, lo que fue tierna verdad buscando un rayo de luz
dura labor de invierno. piedra, canción y recuerdos. Y hasta la tierra fecunda porque la noche es tan larga
La tierra quedó cansada se convierte en arenal guitarra dímelo tu
cansada como el obrero. Han de apartarme de aquí
caminos que llevan lejos.
Ya no se ven en la huella Mas allá de aquellos montes
pesados carros cañeros. perfumados de polen.
Ya no se siente el zumbido HUELLA TRISTE
de los trapiches moliendo. Soy como el cañaveral, Milonga
tierra que rinde el esfuerzo. (Atahualpa Yupanqui)
Y en la noche de los campos Mis flores son de verano
como un adiós del silencio, pero adentro llevo inviernos. Que yo les cuente mis penas Así va mi corazón
donde antes hubieron cañas me piden de tarde en tarde. lleno de sueños y ausencias,
queda la mal´hoja ardiendo. Soy como el cañaveral, Si en ellas está mi fuerza sin encontrar su querencia
con sol, y fruto, y silencio. déjenme que me las calle. perdido en la cerrazón.
Adiós, tierra Tucumana. Y en el alma voy quemando
Caminos que llevan lejos la mal´hoja de mis sueños. Voy anclando por el mundo No se ve la Cruz del Sur
Camino de cualquier parte. en las noches de tormenta.
Llena de piedras la senda, Hay que mirar dentro de uno
lleno de sueños el aire. para encontrarla a la huella.
GUITARRA DE POBRE
Zamba
La vida es un lazo largo Cuando me cansa el camino
(Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro)
estira'o sobre la tierra. me pongo a mirar p'adentro
En una punta una dicha, como quien arrima leñas
La zamba, para ser zamba
y en la otra punta una pena al fogón de unos recuerdos.
es pañuelo y es adiós. Para cantar lo que siento
Y es zamba de luna y rancho yo no preciso la voz.
si la baila el corazón. Me escondo guitarra adentro
y allí converso con Dios.
Si yo tuviera un amor, Apenitas si es guitarra
ay, qué zamba cantaría, La guitarrita del pobre,
con magia de medianoche buscando coplas de plata,
con lujos de mediodía. hallando coplas de cobre.

Desde la hondura del monte Desde la hondura del monte


el bombo llamando está. el bombo llamando está.
Y el corazón padeciendo... Y el corazón padeciendo...
Y el canto se va, y se va. Y el canto se va, y se va
¡HUI, JO JO JO! JUAN
Canción del arriero jujeño Canción
(A. Yupanqui) (A. Yupanqui - Pablo del Cerro)

Par la Quebrado de Chisjra ¡Hay una que me hace bulla Sembrando la tierra, Juan Los pájaros siempre vuelan.
voy con el Sol adentro del corazón..!. se puso á considerar: Yo, nunca aprendí á volar.
arreando mis animales... ¿Por qué la tierra será
¡Hui, jo jo jo...! Atrasito, de las cumbres del que no sabe sembrar? Triste es la vida del campo,
se esconde el Sol; arar, sembrar, y esperar
Camino de la Cuesta yo voy llegando al potrero ... Le pido perdón al árbol
cantando voy, ¡Hui, jo jo jo...! cuando lo voy á tronchar. El verano, y el otoño,
golpeando los guardamontes... Y el árbol me dijo un día y el invierno... todo igual.
¡Hui, jo jo jo...! Y cuando encierre las vacas ... ¡Yo también me llamo Juan!
¡Hui, jo jo jo...! Quizá pensando, pensando,
¿Las penas pasan de largo ? una canción de la noche Tuve en mis ramas un nido. un día aprenda á volar . . .
¡No hai ser, señor...! cantaré yo... Yo sé que se salvarán.

HUINCA - ONAL
(Blanco Ladrón) LA COPLA
Canción araucana
(F. Flores) Pescador de mar adentro Y á su sombra se cobija
Mi amigo siempre cantaba. Mi corazón cancionero.
A la orilla del Toltem Un día volvió su copla
Tras tupido matorral Pero su canto no es canto Con el adiós de la barca. Lo siento gemir al viento
Con donairoso vaivén Ni alegrías que no goza. Cruzando montes de espinas.
Lava la india, su chamal. Es su pena es su quebranto Vi correr sangre minera Salgo al camino y le grito
Es su dolor que reboza Por un pan endurecido. Para servirle de guía.
Se endereza, se despeja junto á la mano crispada
Levanta su frente al sol No hay nipoñe, no hay almulque la luna se volvió trigo. Allá por el cielo arriba
Y lanza al aire su queja No hay ruca no hay alchaqual. Va la luna lastimada,
A manera de canción. Grita la india y refriega No me dé penas la vida, Como una copla perdida
Huinca, tregua. Su tosco y burdo sayal. Me sobra con la que tengo. Que ya no tiene guitarra.
Huinca, pillo. Como el quebracho del monte
Me quitaste mi potrillo, Me quitaste mi potrillo Sobre el hachazo florezco. Trabaja el indio en la piedra
Mi casa, vaca; y ternero. Mi casa , vaca y ternero. Su socavón de silencio.
Huinca, tregua... ¡Huinca tregua! Trabaja el indio en la piedra Y á su sombra se cobija
Huinca, pillo. ¡Huinca. Pillo! Su socavón de silencio, Mi corazón cancionero.
LA DEL GUALICHO LA FLECHA
Chacarera (A. Yupanqui - Pablo del Cerro)
(Atahualpa Yupanqui)
Llenen mi boca de arena
Cruzando los arenales me vine hasta aquí. si quieren callar mi voz.
En cuanto el sol amanezca tendré que partir. De nada sirve la pena.
Algarrobo de mi tierra, vainas doradas. La flecha vuela en el aire
Así don Ricardo Rojas te lo cantaba. para llenarse de sol.
Han de romper mi guitarra
Amalhaya china yuya me supo olvidar. para que no cante yo,
Gualicho me lo hace falta pa hacerla llorar. yo no me aflijo por eso.
Tarareo... La chacarera... La flecha vuela a en el aire
Gualicho me lo, hace falta pa hacerla llorar. para llenarse de sol.

Mañana cuando me vaya por el salitral Sin amor, rodeado, de olvido,


Consuelos tendrá que darme la chacarera. solitario el corazón,
Guitarrita caspi sonko vámosnos los dos. yo no he de bajar los brazos.
Adiós mi tierra shalaca, Telares, adiós... La flecha vuela en el aire
para llenarse de sol.
Amalhaya china yuya me supo olvidar.
Gualicho me lo hace falta pa hacerla llorar. Si me quitaran los ojos,
Tarareo... La chacarera... lo mismo he de verlo yo
Gualicho me lo hace falta pa hacerla llorar. con los ojos de mi hermano,
donde la flecha cayó
después de volar volando
para llenarse de sol.

LA ENGAÑERA
(A. Yupanqui) LA LLORONA
Zamba
Corazón tu me engañaste (J.L. Padula)
o es que no te comprendí
pensé que no la quería Yo quiero matar mi pena La zamba que voy cantando
y hoy veo que no es así pero mi pena no me abandona. va despertando las alegrías.
Por eso canto esta zamba No saben que en ella canto
Tengo miedo muchas veces que han de llamar la llorona. las propias desdichas mías.
tengo miedo de aflojar
tengo miedo que me enseñes, Sollozan junto a sus nidos Por más que ocultar yo quiero
corazón a perdonar las palomitas con sentimiento. los mil pesares que me atormentan.
Igual que esas avecitas llorando van las guitarras
Ayer la he visto con otro, yo al aire doy mis lamentos. y ellas por mi se lamentan.
alegre la vi pasar
ganas tuve de gritarle Donde te has ido, Donde te has ido.
engañera pa’ande vas Paloma mía. Quien te a llevado.
¿Adónde están las promesas Mi corazón día y noche
que me juraste aquel día? Como el crespín te a llamado.

("crespín": ave de la selva del norte argentino)


LA MANO DE MI RUMOR LA POBRECITA
(Guillermo Etchebehere - Atahualpa Yupanqui) (A. Yupanqui)

No puede ser que me vaya del todo fugacidad. Le llaman la Pobrecita Mi zamba no canta dichas,
cuando me muera, Y al anegar de piedad la mortaja de su, porque esto zamba nació en los campos. solo pesares tiene el paisano.
que no quede ni la espera detrás de la gloria, Con una guitarra mal encordada Con las hilachitas de una esperanza
voz me crecen en la memoria remansos de la cantan siempre los tucumanos. forman sus sueños los tucumanos.
que calla. eternidad.
Allá en los cañaverales Conozco la triste pena
No puede ser que solo haya ciclos de Cuando, no esté, cuando el leve cuando lo noche viene llegando. de las ausencias y del mal pago.
sombra y olvido sobresalto que me ordena Por entre los surcos se ven de lejos En mi noche larga prenden sus fuegos
en este amor desmedido que se me se trueque en tiempo de arena los tucu-tucus de los cigarros. los tucu-tucus del desengaño.
hiergue en el pecho, conmemorado, en la nieve;
si hasta en el trino deshecho se salva el cuando en mis venas abreve la liturgia de Solsito del camino. Solsito, del camino.
duelo del nido. la flor, Lunita de mis pagos. Lunita de mis pagos.
En la pobrecita zamba del surco En la pobrecita zamba del surco,
Pongo mi infancia en canciones y siento tal vez algún labrador cansado de cantan sus penas los tucumanos... cantan sus penas los tucumanos..
que se ilumina madrugadas
una siesta golondrina toda duraznos sienta en sus manos aradas la mano de
pintones. mi rumor.
Celebro las estaciones, lloro su LE TENGO RABIA AL SILENCIO

Le tengo rabia al silencio Y lo mejor de mi canto


por todo lo que perdí. Se queda dentro de mí.
LA OLVIDADA Que no se quede callado
Quien quiera vivir feliz. Cuando el amor me hizo señas,
Yo encontré esta chacarera A quien se va campo afuera! Todo entero me encendí.
Penando en los arenales, Un día monté a caballo, Y á fuerza de ser callado,
Por un criollo barranqueño Mi negra se me ha ido Y en la selva me metí, Callado me consumí.
Que no hay ver los jumiales. pa'l la'o de Chilca Juliana. Y sentí que un gran silencio
Se ha lleva'o caballo, sulki, Crecía dentro de mí. Le tengo rabia al silencio
Así cantaba un paisano, El bombo y la damajuana. Por todo lo que perdí,
Paisano salvinero, Hay silencio en mi guitarra Que no se quede callado
debajo de un algarrobo Quisiera ser arbolito, Cuando canto el yaraví, Quien quiera vivir feliz.
y en una tarde de enero. Ni muy grande, ni muy chico,
Pa darle un poco de sombra
Ya me voy, ya me estoy yendo A los cansaos del camino.
LO MIRO AL VIENTO Y ME RIO
pa'l la'o de Chilca Juliana.
(A. Yupanqui - R. Risso)
Ay, viditay, naide sabe Ya me voy, ya me estoy yendo,
Las que pasaré mañana. Asspa sumaj*, Salavina.
Que son muy negras las penas, Y verde salen los pastos.
Tal vez que yo nunca vuelva
dicen y dicen cantando. Mientras la raíz padece
Barrancas, tierra querida, A contemplar tus Salinas...
Pa mi que no ha de ser cierto, Canta en sus flores el árbol.
Te dejo esta chacarera.
si fuera, mejor negarlo.
Viditay, ama Koncáichu* * Dialecto quechua.
Ocasiones me figuro
Yo también sé de pesares, que soy de veras un árbol,
yo también sé de quebrantes. lo miro al viento y me río,
Sé de las penas más negras la raíz crujiendo abajo.
pero de penas no canto.
Si me desmiento en lo vida,
También es negra la tierra ¡acuéstenme de un hachazo!
LOS DOS ABUELOS LOS HERMANOS
Milonga (Atahualpa Yupanqui) Milonga
(A. Yupanqui- Pablo del Cerro)
Me galopan en la sangre Se lo habrá traga'o la tierra,
dos abuelos, si señor. porque tampoco volvió. Yo tengo tantos hermanos es cuando se aleja más.
Uno lleno de silencios que no los puedo contar. Yo tengo tantos hermanos
y el otro, medio cantor. Volvió pero hecho leyenda En el valle, la montaña, que no los puedo contar.
hecho canto y tradición. en la pampa y en el mar.
Hace tiempo, mucho tiempo Para que el hombre argentino Y así seguimos andando
que el indio ya se alejó, no pierda su condición. Cada cual con sus trabajos, curtidos de soledad.
con su lanza y su alarido, con sus sueños, cada cual. Nos perdemos por el mundo,
su tobiano y su tambor. Me galopan en la sangre Con la esperanza adelante, nos volvemos a encontrar.
dos abuelos, si señor. con los recuerdos detrás.
El gaucho salió a buscarlo Uno lleno de silencios, Y así nos reconocemos
por esos campos de Dios. y el otro medio cantor. Yo tengo tantos hermanos por el lejano mirar,
que no los puedo contar. por la copla que mordemos,
semilla de inmensidad.
Gente de mano caliente
LOS EJES DE MI CARRETA por eso de la amistad, Y así, seguimos andando
Milonga Con uno lloro, pa llorarlo, curtidos de soledad.
(Atahualpa Yupanqui) con un rezo pa rezar. Y en nosotros nuestros muertos
Con un horizonte abierto pa que nadie quede atrás.
Porque no engraso los ejes que siempre está más allá.
Me llaman abandona'o ... Y esa fuerza pa buscarlo Yo tengo tantos hermanos
Si a mi me gusta que suenen, con tesón y voluntad. que no los puedo contar,
¿Pa qué los quiero engrasaos ? y una novia muy hermosa
Cuando parece más cerca que se llama ¡Libertad!
E demasiado aburrido
seguir y seguir la huella,
demasiado largo el camino
sin nada que me entretenga. MADRE DEL MONTE
Vidala
No necesito silencio. (Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro)
Yo no tengo en qué pensar.
Tenía, pero hace tiempo, La copla y el hombre tienen
ahura ya no pienso mas. un secreto que guardar. Como colgada en el aire
Cuando cantan noche afuera, mi copla se quedará,
Los ejes de mi carreta por dentro llorando están. Dejen que el sol la madure.
nunca los voy a engrasar... Luz en el aire será.
Ay, Madre del Monte
por dónde andaré. Ay, Madre del Monte
por dónde andaré.
Si Dios no quiere escucharme Como una errante vidala
callado me alejaré. por este mundo, pasé.
Por el camino del monte Cuando me tape el silencio
ni polvo levantaré. ya ni vidala seré.

Ay, Madre del Monte Ay, Madre del Monte


por dónde andaré. por dónde andaré.
ME ESTA SOBRANDO GUITARRA MILONGA DEL SOLITARIO
(A.Yupanqui) (Atahualpa Yupanqui)

Como yo no soy cantor, tengo un fogón en mi casa Me gusta de vez en cuando ante de cuenten quebrantos,
me esta sobrando guitarra perderme en un bordoneo apenas mi voz levanto
para cantar como canto, No quiero apero de lujo, porque bordoneando veo para cantar despacito.
con las bordonas me basta. ni quiero espuelas de plata que ni yo mesmo me mando. Que el que se larga a los gritos
es otra luz la que busco, Las cuerdas van ordenando no escucha su propio canto,
Pobre corazón el mío otro brillo me hace falta las rumbas del pensamiento.
herido por la distancia no quiero espuelas de plata Y en el trotecito lento Si la muerte traicionera
pa’ que no miren su pena de una milonga pampera, me acogota a su palenque
se tapa con la guitarra Seis cuerdas son muchas cuerdas va saliendo campo afuera háganme con dos rebenques
pa'l que sabe poco y nada lo mejor del sentimiento. la Cruz pa mi cabecera.
Para entibiar mis recuerdos, para cantar como canto, Si muero en mi madriguera
tengo un fogón en mi casa me esta sobrando guitarra Ninguno debe pensar mirando los horizontes
y mesmo sin darme cuenta para cantar como canto, que vengo en son de revancha no quiero Cruces, ni aprontes,
se acortan mis madrugadas, con las bordonas me basta No es mi culpa si en la cancha ni encargos para el Eterno.
tengo con que galopear. Tal vez pasando el invierno
El que me quiera ganar me de sus flores el monte.
ha'i tener buen parejero. Toda la noche he cantado
ME GUSTABA ANDAR Yo me quitaré el sombrero con el alma estremecida.
Zamba porque así me han enseña'o Que el canto es la abierta herida
(A. Yupanqui - J. Imperiale) y me doy par bien paga'o de un sentimiento sagrado.
dentrando atrás del primero. A naide, tengo a mi lado
Cuando vuelva al rancho porque no busco piedad.
De nochecita Siempre bajito he canta'o Desprecio la caridad
Desde la tranquera yo siento porque gritando no me hallo. por la vergüenza que encierra.
Tu vidalita. Grito al montar a caballo Soy como el león mi sierra:
si en la caña me he vendeao. vivo y muero en soledad.
Mi chango travieso Pero tratando un verseao
Me sale a esperar.
Y entre mate y mate comienzo MI MALA ESTRELLA
A desensillar. (A. Yupanqui)

Buena leña seca Pregunto todas las noches que poca cosa había sido
Arde en el fogón. a la estrella que te cuida yo no tengo miedo a nada
Yo también enciendo los sueños si crecen flor de traiciones como le tengo a tu olvido
De mi corazón. en el jardín de tu vida
Anoche he tenido un sueno
Trajinando sendas Ay, ay con mi mala estrella que me ha dado que pensar
Me gustaba andar. que juega con mi dolor soné que juntaba nieve
Yo sé de lo lindo y lo fiero parece que dice si , cerquita de tu rosal
De la soledad. parece que dice no
Ay, ay que soy agorero,
Matrereando siempre Yo nada quiero pedirte pensando en el sueno aquel
Ay, no puede ser. pero sin querer te pido no vuelvas a juntar nieve
Es mejor destino ser, árbol cuando quieras que me mate que el rosal se va a perder
Para florecer. dame el puñal de tu olvido sonar con rosas y nieve
desdichas suele traer
Ay, ay con mi valentía
MI RANCHO NADA MAS
(A. Yupanqui) (Homenaje a Ernesto Guevara)
(Atahualpa Yupanqui)
Naide se ha de imaginar
si pinto como lo veo Cuando llega la oración Teniendo rancho y caballo Me gusta mirarlo al hombre
Es un nidito e torcazas se siente un canto de lejos es mas liviano la pena. Plantado sobre la tierra
entre dos talas y un ceibo Viene el macho de un volido De todo aquello que tuve Como una piedra en la cumbre
trayendo en el pico un beso solo el recuerdo me queda. Como un faro en la ribera
Esta en rama muy bajita Nada más. Nada más.
parece que toca el suelo Se dicen cualquier cosa
Lo hicieron sin precauciones, de mientras va oscureciendo No tengo cuentas con Dios. Alguna gente se muere
se puede ver desde lejos Después la noche les hace Mis cuentas son con los hombres. Para volver a nacer.
su caricia de silencio Yo rezo en el llano abierto Y el que tenga alguna duda
Al amanecer el macho sale y me hago león en el monte. Que se lo pregunte al Che.
a buscar alimentos Otro amanecer despunta Nada más. Nada más.
La hembrita siempre se queda y el canto se oye de Nuevo
hacienda algunos arreglos Sale el macho de un volido
llevando en el pico un beso
Piden algo los pichones, NIEVE, VIENTO Y SOL
les dan y se quedan quietos Ansina mesmo es mi rancho Canción (Antonio Molino - Coria Peñazola)
Se duermen arrimaditos, Ansina mesmo lo veo
la madre canta al la’o de ellos Desde mis montañas Vuelvo a la montaña
nieve, viento y sol, a pedirle a Dios
he bajado al valle pa estas penas mías
MI TIERRA TE ESTAN CAMBIANDO pa verte, mi amor. nieve, viento y sol.
(A. Yupanqui)
He bajado al valle Nieve pa las penas.
Mi tierra te están cambiando donde esconder mi dolor con una canción, Viento pa'l dolor.
o te han disfrasa’o que es pior dame un árbol solitario llena de perfumes, Y sol pa las sombras
amalaya que se ruempa de la pampa en un rincón nieve, viento y sol. de mi corazón.
pa’ siempre mi corazón
Dame un campo florecido Traje la esperanza. A llorar a solas
La zamba ya no es la zamba con macachines en flor Traje la emoción. y a pedirle a Dios
del provinciano cantor ande galopen potriadas Y solo desdenes pa estas penas mías,
que se han hecho los estilos como ensayando un malón me llevo de vos. nieve, viento y sol.
del paisano trovador
Ande mire reflejarse
Donde están las vidalitas la luna en el cañadón ¡NUNCA JAMAS!
que en antes escuchaba yo ande naide me pregunte Canción andina
igual que en aquellos tiempos de’ande vengo y p’ande voy (Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro)
de cuando fui charamón
Igual que en aquellos tiempos De loma en loma has de ir Eso sólo encontrarás.
Mi tierra te están cambiando, de cuando fui charamón y mi rastro buscarás. Pero a mí, nunca jamás
o te han disfrasa’o que es pior mi tierra te están cambiando Lo huella de las vicuñas,
amalaya que se ruempa o te han disfrasa’o que es pior eso sólo encontrarás. Al antigal has de ir
pa’ siempre mi corazón Pero a mí, nunca jamás. y mi tumba buscarás,
Amalaya que se ruempa Silencio de la alta sierra,
Cruz del sur márcame un rumbo pa’ siempre mi corazón Hasta mi choza has de ir. eso sólo encontrarás.
Purita piedra nomás. Pero a mí, nunca jamás
El viento zumba que zumba,
POBRECITO SOY PREGUNTITAS SOBRE DIOS
Canción Canción
(Atahualpa Yupanqui) (A. Yupanqui)

¡Pobrecito soy ¡ ¡Pobrecito soy ¡ Un día yo pregunté: la vida del leñador.


Yo nunca lo digo. ¿Y cómo será ? Abuelo, dónde está Dios.
Tal vez que por eso Mi abuelo se puso triste, Y que nadie le pregunte
pobrecito soy. ¡Pobrecito soy! y nada me respondió. si sabe donde está Dios.
Yo nunca lo digo. Por su casa no ha pasado
Tengo un cerquito de papas Tal vez que par eso Mi abuelo murió en los campos, tan importante señor.
y otrito de zapallal; pobrecito soy. sin rezo ni confesión.
el uno cerca del abra, Y lo enterraron los indios, Yo canto par los caminos,
el otro junto al corral. Van floreciendo mis sueños flauta de caña y tambor. y cuando estoy en prisión
a la par de mis tristezas, oigo las voces del pueblo
Y a veces se logran, También precisa cuidados Al tiempo yo pregunté: que canto mejor que yo.
y a veces se pierden. el alma como la tierra. ¿Padre, qué sabes de Dios?
¿Y coma será? Mi padre se puso serio Hay un asunto en la tierra
¡ Ay ! ¡mis cosechitas! Y a veces se logran... y nada me respondió. más importante que Dios.
¿Y cómo será ? Mi padre murió en la mina
sin doctor ni protección. Y es que nadie escupa sangre
¡Color de sangre minera pa que otro viva mejor.
POEMA PARA UN BELLO NOMBRE
tiene el oro del patrón!
(Atahualpa Yupanqui)
¿Que Dios vela por los pobres?
Mi hermano vive en los montes Talvez sí, y talvez no.
Que bello nombre es tu nombre tu parche de gramillas. Tu silencio de
y no conoce una flor. Pero es seguro que almuerza
Uruguay. piedra.
Sudor, malaria, serpientes, en la mesa del patrón.
Tu soledad de junco, tus nidos olvidados.
Sonoro como una fruta salvaje Gurises en los ranchos, y mujeres
de áspera piel, apretada de jugos, morenas,
PUNAY
sol y carne, con sangre azucarada. blancas, pardas, esperando un retorno
Canción india
Voz de paisajes, de escondidos ríos. en el ocaso.
(Atahualpa Yupanqui)
Esperando. Esperando...
Voz para que la digan
¡Punay! ¡Punay !
los hombres en la noche, Qué bello nombre el tuyo, Uruguay.
¡Devuélveme, devuélveme,
como una consigna, una sola divisa Nombre para la fruta jugosa de lo Patria.
mi pastorcita perdida!
desplegada. Alto nombre apretado de fuerza y de
Uruguay. pureza
Pastorcita de la Puna,
Como la luz y el aire que posa entre los
te extraviaste en noche mala,
Qué poco sé de ti. árboles.
mi voz te busca en el viento
Solo algo de tu historia, bordeando la
y en la Puna te reclama.
leyenda. Te han de cantar un día todos los
Hombres que cabalgaban. marineros
Punay! ... Punay! ...
La furia del galope en las cuchillas. desde los barracones de tus puertos.
Blancas golillas como un vuelo de Y los esquiladores en un mar de balidos.
Aunque tengo en esto vida,
gaviotas. Y el estudiante - lámpara que sueña
que viento y tierra tragar,
Y golillas bermejas aleteando en la Y e camionero que cruza tus caminos.
pastorcita de la Puna,
aurora. Y lo niña que junta cuadernos y suspiros.
ti de encontrar.
Todos, una mañana te han de nombrar
Y bajo los caballos con voces endulzadas por tu frutas
¡Punay! ¡Punay! ...
Donde las sombras pintas victorias y madura.
derrotas, ¡Uruguay!
RECUERDOS DE EL PORTEZUELO SOY LIBRE
(Atahualpa Yupanqui)
Unos ojos estoy viendo, Quisiera cruzar el río
En esas mañanitas de la Quebrada a pensar en la meza de el Portezuelo. Por esos ojos me muero. Sin me sienta la arena.
yo bajaba las cuestas como si nada. Soy libre ¡Soy bueno! Soy libre ¡Soy bueno!
Y en un marchar parejo de no cansarse, ¿Que miraran sus ojos en estas tiempos? Y puedo querer. Y puedo querer.
me iba pidiendo riendas mi mula parda. mi corazón paisano quedo con ellos. Me han dicho que tiene dueño, Al Diablo ponerle grillos,
Nunca le dije nada, pera que lindo... Y así, con dueño, los quiero. Y al amor unas cadenas.
Al pasar por el rancho de el Portezuelo, Solo tengo la copla pa mi consuelo. Soy libre! Soy bueno! Soy libre ¡Soy bueno!
salían a mirarme sus ojos negros. Y puedo querer. Y puedo querer.
Nunca le dije nada, pero, que lindo... Parezco mucho y soy poco
Y de feliz le daba mi copla al viento. esperemos y esperemos.
Pa cuando salga de pebre,
Parezco mucho y soy poco vitiday conversaremos. TESTIMONIO FINAL
esperemos y esperemos. (J.E. Seri - A. Yupanqui)
Pa cuando salga de pebre, ¿Donde andará la meza de el
vitiday conversaremos. Partezuelo? Celebro mi destino Mil gracias, si señor
¿están tristes o alegres sus Ojos negros? de sentir como siento, de la vida y la muerte,
Los vientos y los años me arrearon lejos. Nunca le dije nada, pera que lindo... de vivir como vivo, por ser apenas esto,
Lo que ayer fue esperanza, hoy es Siento un dulzor amargo cuando me de morir como muero. brizna efímera y leve.
recuerdo. acuerdo...
Me gusta arrinconarme de vez en cuando Y porque lo celebro Y el de pasar mis días
y soy al fin la nada finales en el mundo,
de la sombra de un verso, con las manos vacías
os digo: ¡muchas gracias! y el corazón profundo.

SALMO A LA GUITARRA
(A. Yupanqui - J.M. Requena)
TRABAJO, QUIERO TRABAJO
A la guitarra grave y honda y A la guitarra seria y honda y Canción
quejumbrosa quejumbrosa,
estremecida y soledosa, desvelada estremecida y soledosa, desvelada, Cruzando los salitrales Las entrañas de la tierra
quiero referirme. (bis) quiero referirme. (bis) uno se muere de sed. Va el minero á revolver.
A la que perece una abuela A la que tiene sangre en la garganta Aquello es puro desierto Saca tesoros ajenos
que agonizara en cánticos. y le traduce al hombre Y allí no hay nada que hacer. Y muere de hambre después.
No hablo de esa guitarra los gritos esos que le duelen dentro (bis) Trabajo, quiero trabajo
que algunos guitarristas usan y que son como planetas Porque esto no puede ser Trabajo, quiero trabajo
come queridas del oído del sistema solar de la memoria. (bis) Un día veré al desierto Porque esto no puede ser.
de un turista cualquiera. (bis) Convertido en un vergel. No quiero que nadie pase
Hablo de la otra guitarra A la guitarra grave y honda y Las penas que yo pasé.
que a1gunos guitarristas usan quejumbrosa El río es puro paisaje,
para ponerse a recordar sus muertos quiero referirme, Lejos sus aguas se van, Despacito, paisanito,
a encontrarse a sí mismos, nada menos, Pero mis campos se queman Despacito y tenga fe,
nada menos... (bis) nada menos.. Sin acequias ni canal. Que en la noche del minero
Trabajo, quiero trabajo, Ya comienza á amanecer.
Porque esto no puede ser,
Un día veré a mi campo Trabajo, quiero trabajo,
Convertido en un vergel. Porque esto no puede ser.
TUM-TUM MAÑANITA VIDALA DEL SILENCIO
Canción (José R. Luna - Atahualpa Yupanqui) (A. Yupanqui)

A la mañanita se levanta el sol. Me doblo en las surcos, y cada terrón Cierta vez en la mañana de un país de montañas
Y yo, trabajando pa'l chango y pa vos. es un pan que gano, pa'l chango y pa azules, miraba yo esas nubes pequeñas, que suelen
Todas las mañanas al campo me voy. vos. quedar como prendidas de las piedras en la mitad
Golpeando la caja de mi corazón. del cerro. El aire, ausente. Mas arriba, un cielo azul,
Tum tum mañanita del trabajador. abajo, la tierra dura, y cálida.
Tum tum mañanita del trabajador. Tum tum en la tierra pa'l chango y pa vos.
Tum tum en la tierra pa'l chango y pa vos. Tum tum en los surcos con el azadón. Alguien me dijo unas raras palabras refiriéndose
Tum tum en las surcas con el azadón. Tum tum en la caja de mi corazón. a esas nubecitas blancas, quizá lejanas ya, que
Tum tum en la caja de mi corazón. embellecían el paisaje...
Dobla'o en los surcos ya se muere el sol. Eso, que usted está mirando, no son nubes, amigo.
El sol es mas bueno, la vida es mejor. Y yo, trabajando pa'l chango y pa vos.
Y hasta el viento pasa como una canción. Yo creo que son vidalas olvidadas, esperando que
alguien comprenda su silencio, entienda su palabra,
intuya su canción.

VENGO A BUSCAR MI CABALLO Poco tiempo después de ese momento que no se puede
(A.Yupanqui) traducir cabalmente, porque está más allá de nuestro
entendimiento, nació la vidala del silencio.
Vengo a buscar mi caballo
para adornarme con el Antes que despunte el alba
Mañana saldré a los campos, despacio me alejare VIDALA DEL YANARCA
quien sabe si volveré adiós mi viejo algarrobo, (A. Yupanqui)
quien sabe si volveré
Quiero rastrear un recuerdo ¿Pa qué me han dado corazón?
pa’l sur, pa’l norte, no se Pucha que es largo el camino, ¿Pa qué me han hecho sentir?
que duro tiempo he vivido no sirvo pa’andar de a pie ¡Ay! Vidalita, me ausento de aquí...
que larga noche pase por eso ensillo caballo,
para adornarme con el ¡Tan larga es la madrugada!
Si busco rumbo en la tierra ¡Nunca amanece pa mí
seguro me perderé Voy a rastrear un recuerdo, ¡Ay! Vidalita, me ausento de aquí ...
con la luz que llevo adentro pa’l sur , pa’l norte, no se
Serra otra cosa tal vez

VIDALA DE LA NIÑA SOLA Se me entreveran las penas


(A. Yupanqui) cuando me largo a cantar.
¡Ay! Vidalita, me ausento de aquí ...
Tuve un amor en los campos, como el labriego a la lluvia,
dulce novia del ayer te esperaré Como el yanarca en la noche
ay niña yo no sabia, arrebozada en mis sueños, ya me he olvidado de volar.
que nunca mas te iba a ver te esperaré, te esperaré ¡Ay ! Vidalita, me ausento de aquí ...

La niña triste decía, Ay niña yo no sabia ¿Pa qué me han dado corazón ?
te esperaré que nunca mas te iba a ver ¿Pa qué me han hecho sentir ?
como un árbol en la tarde, que nunca mas te iba a ver ¡Ay! Vidalita, me ausento de aquí.. .
te esperaré te esperaré, te esperaré
VIENE CLAREANDO
Zamba
(Atahualpa Yupanqui - Segundo Aredes)

Vidita, ya me voy y tenerte que perder.


de los pagos del Tucumán.
En la Aconquija viene clareando, Malaya mi suerte tanto quererte.
vidita, Viene clareando mi padecer.
nunca te he de olvidar.
Al clarear yo me iré
Vidita, triste está a mis pagos de Chasquivil.
suspirando mi corazón. Y hasta las espuelas
Y con el pañuelo, te voy diciendo, te irán diciendo, vidita,
vidita, no te olvides de mí.
paloma, adiós... adiós...
Zamba sí, penas no,
Vidita, ya me voy eso quiere mi corazón.
y se me hace que no hei volver. Pero hasta la zamba
Malaya mi suerte tanto quererte se vuelve triste, vidita
vidita, cuando se dice adiós...

YO QUIERO UN CABALLO NEGRO


(A. Yupanqui - Pablo del Cerro)

Yo quiero un caballo negro,


y unas espuelas de plata,
para alcanzar a la vida
que se me escapa
que se me escapa...

Yo quiero un lazo trenzado,


mezcla de toro y guanaco,
para enlazar a esos sueños
que se fugaron
que se fugaron...

Yo quiero, un poncho que tenga


el color de los caminos
para envolverme en la noche
de mi destino
de mi destino...

Caballo... espuelas. y lazo,


¡pienso que no han de servir!
Ya ni el poncho me hace falta.
Voy a dormir...
Voy a dormir...

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