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Introduccién Comienza con un bosque, un rio y una «vieja cabafian donde vive una madre con su hijo cuando llega Ja muerte: «flaca, aper- gaminada y huesuda». La muerte le quita al hijo, un bebé, y se lo lleva cruzando rfos, bosques y montafias. La madre sale en su buis- queda. En el camino, esta madre ha de ir arrancdndose partes del cuerpo para ayanzar: los ojos para atravesar el rio, las piernas para poder cruzar el bosque y el brazo detecho para abrir una cueva en la montafa. Finalmente, ella —personificada en una zorra con los ojos vendados y piernas de palo— llega hasta donde vive la muerte. Y esta, una calayera vestida con un traje militar, le reconoce que nunca «habia visto tal abnegacién». Y le anuncia que le va a de- volver al hijo. Pero este hijo ya esta muerto. En ese momento, con una cuna vacia y una estufa ardiendo, acaba La madre y la muerte’. La madre y la muerte es un libro infantil 0, al menos, un libro publicado en una prestigiosa coleccién de literatura infantil, «A la Orilla del Viento», del Fondo de Cultura Econémica en México. Es también, junto a otros como Lejren de Oskar K y La isla de Armin Greder, uno de los libros que han motivado las investi- gaciones y preguntas que orientan Enseftando a sentir. Repertorios éticos en la ficcién infantil. {Qué emociones permitimos en la lite- ratura para nifios y nifias? ;Quién dice cudles son las historias apro- piadas para ellos? ;Cémo hablamos de temas dificiles? ;Es posible fundar esperanza en el pesimismo? Nos preguntamos en este libro por los repertorios emocionales en la ficcién infantil como otra forma de abordar temas de justicia, de inequidades, de ausencias. Abordamos lo emocional en cuanto un entramado social, es decir, no desde una visién tradicional psicologizante en las que las emo- ciones expresan una interioridad y se estructuran en base a las asf llamadas emociones basicas —alegria, miedo, tristeza, ira, disgusto sca, A. y Arispe, N. (2015). y sorpresa~ sino como un flujo social y cultural tanto mas comple- jo en.el que de poco vale separar un interior de un exterior. Esa forma de entender lo emocional y lo afectivo nos orienta también una nueva aproximacién a ese cntramado entre arte y educacién, entre lo estético y lo pedagdégico, que aparece constantemente en la literatura y los medios para los nifios y nifas. Decir que una obra para nifios y nifias es didactica’es conside- rado una forma de degradar su potencial estético. En el campo cul- tural para la infancia se intenta escapar de esa categorizacién: de lo didactico, de lo aleccionador, de tratar al pablico como sujetos que no tienen todavia un sentido estético formado. La historia del arte (y de la filosoffa) arrastra ya numerosas tensiones alrededor de esos productos culcurales orientados hacia, esa tension constante entre la pretensién de autonomia del objeto artistico y las condiciones que regulan sus instituciones. Este libro trata sobre ficciones que se les recomiendan a los lectores més jévenes y avanza sin querer renunciar a entender lo que implica esa condicién de mediado, esa censidn entre lo pedagégico y lo artistico. Pero nos abocamos a una dimensién especifica: la de cémo se usan los textos para ensefiar a sentir, y bajo qué nociones de ética y justicia podemos hacer senti- do de esos repertorios emocionales. La idea de que los libros son un preciado instrumento para educar emocionalmente a nifios y nifias se ha ido tejiendo sobre un argumento mas extenso acerca de como la literatura desarrolla la imaginacién moral, es decir, la capacidad para ponernos en los zapatos de los demds, para imaginar otras vidas y sus pesares’. La filésofa estadounidense Martha Nussbaum asegura que la lectura aumentaria la empatia de los lectores y sentaria las bases para la con- vivencia democritica’. Nussbaum argumenta desde una tradicién aristotélica en la que la racionalidad necesita de la emocionalidad > Zunshine, L. (2006). Why we read fiction: Theory of mind and the novel. Ohio State University Press, * Nussbaum, M. C. y Gardini, C. (1997). Justicia poetica: La imaginacién lieeraria ya vida piblica, Andrés Bello. Nussbaum, M. C. (2010). Not far profit: Why democracy “needs the humanities (vol. 2). Princeton University Press para la formacién del juicio; segin ella, la ficcin —la novela par- ticularmente— nos permitiria ensayar posibles perspectivas sobre el mundo y la diferencia, nos prepararfa para llevar vidas mds buenas. Con la arremetida del positivismo en la investigacién acadé- mica, este argumento ha sido sometido a las reglas de la produccién empirica del conocimiento. Los psicdlogos cognitivos David Kidd y Emanuele Castano, investigadores en Harvard, realizaron estu- dios con los que habrian comprobado que quicnes leen literatu- ra «de calidad» (en su proyecto, textos premiados por la National Book Award en EE.UU.) desarrollan mas teoria de la mente —la capacidad para suponer lo que el otro piensa 0 siente— que aquellos que leen bestsellers o literatura de no-ficcién. En 2013 publicaron Jos resultados en la revista Science, produciendo una nueva verdad para la cruzada por la lectura para la educacién de la empatia’. Kidd y Castano, psicélogos sin formacién en estudios literarios, comienzan alguno de sus articulos citando a Barack Obama y su reflexion sobre cémo este atribuye su formacién como ciudadano a la lectura de novelas y el aprendizaje de que el mundo es «com- plicado y leno de grises»*. Ademds de a Obama, Kidd y Castano citan también a Martha Nussbaum y a Jerome Brunner, psicélogo cognitivo con fuerte influencia en el campo de la educacién, para producir un argumento sobre cudn transversal es la conviccién de que la lectura nos ayuda a mejorar nuestras habilidades interper- sonales. Cuando han de interpretar por qué son las obras literarias premiadas las que mejores herramientas entregarfan, echan mano a la teorfa de la heteroglosia bajtiniana: la novela est4 hecha por dis- tintas voces y visiones del mundo que problematizan la verdad. En Problemas de la pottica de Dostoiewski, Michael Bajtin ilustra como * Luego le siguieron algunos otros estudios que ponfan en duda la evidencia conseguida (ver Paneto, M. E.; Weisberg, D. $.3 Black, J; Goldstein, T. R.; Barnes, J. Ls Brownell, H., y Winner, E. (2017).

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