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principio de “inmutabilidad del proceso” que mantiene el proceso durante su tramitación aferrado al estado de

cosa que existía al momento de proponerse la demanda o al momento de notificarse. El Código no permite que
el Juez, al dictar sentencia, tome en cuenta ningún hecho modificativo o extintivo sobre el objeto litigioso
después de haberse propuesto la demanda, tales como: prestaciones supervinientes accesorias, conexas o
complementarias de las pedidas en primera instancia.
PROCEDENTE DEL JUZGADO SÉPTIMO DEL CIRCUITO DE CHIRIQUÍ, RAMO
CIVIL, INGRESA A ESTE DESPACHO EL PROCESO ORDINARIO PROPUESTO POR
BERLYS VIERSA LÓPEZ LEZCANO EN CONTRA DE WILFRIDA LÓPEZ
QUINTERO. PONENTE: SALVADOR DOMÍNGUEZ B. DAVID, VEINTISÉIS (26) DE
AGOSTO DEL AÑO DOS MIL TRES (2003).

TRIBUNAL SUPERIOR DEL TERCER DISTRITO JUDICIAL.

VISTOS:

Procedente del Juzgado Séptimo del Circuito de Chiriquí, Ramo Civil, ingresa a este
Despacho el proceso ordinario propuesto por Berlys Viersa López Lezcano en contra de
Wilfrida López Quintero.

ANTECEDENTES

El Juzgado Séptimo del Circuito de Chiriquí, Ramo Civil, a través de Sentencia No. 7 de 21
de marzo de 2003, condenó a la señora Wilfrida López Quintero al pago de Seis Mil
Doscientos Cuarenta y Ocho balboas con Setenta y Cinco Balboas (sic) (B/.6,248.75) en
concepto de capital, más los intereses legales generados los cuales fueron fijados en la suma
de Quinientos Sesenta y Dos Balboas con Treinta y Ocho centésimos (B/.562.38).

Esta decisión fue apelada por el licenciado Olmedo Córdoba, apoderado judicial de la
demandada, por lo que una vez sustentado el recurso el mismo fue concedido en el efecto
suspensivo y enviada la actuación a este tribunal.

En su escrito de sustentación, el recurrente manifiesta que la parte demandante actuó durante


todo el proceso sin estar debidamente legitimada, ya que nunca llegó a demostrar que ella era
propietaria del auto que supuestamente vendió a la demandada; que a fojas 121 aparece
certificación del departamento de vehículos del Municipio de Panamá, en la que se hace
constar que el propietario del vehículo lo era Deardorff Dennis J. y no Berlis Viersa López
Lezcano. Que en consecuencia, no hay legitimación en la causa, al no probar la demandante
que fue propietaria del objeto del presente litigio, ni que otorgó un contrato de compraventa
sobre dicho vehículo. Sigue manifestando el recurrente, que aún considerando que la parte
demandante estaba legitimada, ello no le garantiza en modo alguno una sentencia favorable,
por cuanto ella nunca llegó a ser titular del derecho material objeto del presente litigio, ya
que la titularidad del bien recaía en su propietario anterior, Deardorff Dennis J.

Por otra parte, considera el licenciado Córdoba, que el documento que rola a fojas 27 del
expediente es un fotocopia de un documento privado que jamás puede ser auténtico, por
cuanto que su representada en su declaración de parte visible a fojas 16 a 20 del expediente
señaló categóricamente que no reconocía dicho documento y que la firma no correspondía a
la de ella. Que el estudio realizado por los peritos grafotécnicos en ese sentido, permite
resaltar dos hechos fundamentales a saber: que el peritaje no fue concluyente y que no se
cumplió con el análisis solicitado, ya que no se pudo determinar si la firma visible en el
documento manuscrito, correspondía a la practicante de los ejercicios caligráficos. Por
último indica, que la demandante no aportó prueba escrita del supuesto contrato de
compraventa y nuestra legislación exige pruebas por escrito para acreditar contratos que
valgan más de B/. 5,000.00; y en ese sentido no era viable admitir el testimonio de Mirta
Ceballos, pues este medio de prueba no es viable para acreditar contratos y obligaciones
superiores a B/. 5,000.00.
El abogado opositor del recurso, a favor de su representada expresó que comparte las
consideraciones de la Juzgadora A-quo en cuanto al aspecto de legitimación en la causa por
parte de la actora, además de que el recurrente ignora lo establecido en el artículo 1227 del
Código Civil, que es meridianamente claro al establecer que la venta de cosa ajena es válida.

FUNDAMENTACIÓN LEGAL DE SEGUNDA INSTANCIA

Pasa este despacho a resolver la apelación impetrada, una vez conocidos los cargos de
censura formulados por el recurrente de conformidad con el artículo 1138 del Código
Judicial y previa las siguientes consideraciones.

El presente negocio gira en torno a la pretensión del actor de que la señora Wilfrida López
Quintero sea condenada a pagarle la suma de SEIS MIL DOSCIENTOS CUARENTA Y
OCHO BALBOAS CON SETENTA Y CINCO CENTÉSIMOS (B/. 6,248.75) mas el interés
legal de dicha suma de dinero que le adeuda en concepto de precio por la venta del vehículo
Marca Ford, Modelo Taurus, año 1991, tipo Sedan, Motor 1FACP52u4ma141939, color
plateado, transmisión automática, 5 velocidades. Gasolina, 6 cilindros, más las costas y
gastos del presente proceso.

La actora fundamenta su demanda, en que vendió el vehículo antes descrito a la demandada


por el precio de Seis Mil Doscientos Cuarenta y Ocho Balboas con Setenta y Cinco
Centésimos, realizándose el traspaso en el Municipio de Panamá y en la Dirección de
Registro Único Vehicular, comprometiéndose a pagar el precio acordado en cinco (5) pagos
o partidas, que se realizarían en el lapso de doce meses a partir de la fecha de la respectiva
transacción, mediante depósitos en la cuenta No. 43099827, que para tal efecto la
demandante abrió en el Banco Nacional, Sucursal de Balboa; sin embargo la demandada ha
incumplido de manera absoluta la obligación contraída, a pesar de que se realizó el traspaso
legal y la entrega material del vehículo.

La demandada compareció al proceso, por intermedio de apoderado judicial quien dio


contestación de la demanda, negando la totalidad de los hechos así como la prueba
documental alegada; así mismo en los alegatos de primera instancia invoca excepción de
falta de legitimación activa en la causa por cuanto según certificación que obra en el
expediente y expedida por el Registro Único Vehicular Motorizado del Municipio de David,
el vehículo con placa 266887, no ha sido propiedad de la señora Berlys Viersa López
Lezcano como para constituirse en demandante en una causa en la que no tiene ningún
interés legítimo tutelado por Ley.

La Juez A quo, desató la litis accediendo a la pretensión del actor, en base a que existe un
documento privado que acredita la obligación adquirida por la demandada para con la
demandante, y que aquella no ha logrado acreditar el cumplimiento de la misma, además de
que el vehículo fue traspasado a su nombre desde el día 9 de marzo de 1998; en cuanto a la
excepción alegada consideró que "la parte demandada, puesto que confunde la figura de
la legitimación en la causa, con el hecho de ser titular del derecho, como condición para
ejercer el derecho acción, criterio que sostiene una parte de la doctrina; porque si bien es
cierto, la demandada no era la propietaria del vehículo al momento de la venta y traspaso del
vehículo, ello no es necesario para demandar el cumplimiento de una obligación. (f. 132)

Sobre la legitimación en la causa, el procesalista Jorge Fábrega Ponce ha establecido que "es
la condición que debe tener una persona según la ley sustantiva para lograr que el Juez se
pronuncie respecto a las pretensiones formuladas en la demanda con una concreta y,
particular relación jurídica. Desde el momento en que una persona se identifica con la
hipótesis abstracta reconocida en la ley sustancial (demuestra que es heredera, acreedora,
cesionaria, etc) se puede indicar que tiene legitimación y, por tal razón, tiene derecho que se
dicte sentencia respecto a una concreta relación jurídica que afecta sus intereses. La falta
de legitimación sustantiva es motivo de sentencia absolutoria." (FABREGA P. Jorge.
Instituciones de Derecho Procesal Civil. Segunda Edición, Editora Jurídica. Panamá, 1999,
pág.196)

En el caso bajo examen, esta sala discrepa de la decisión tomada por la Juez A quo por
cuanto la demandante no ha demostrado que la obligación contenida en el documento
privado visible a fojas 121 sea a favor de ella en calidad de vendedora; es decir que en ese
documento solamente la demandada se obliga a pagar un precio por el automóvil marca
Taurus, con motor IFACP5204MA141939, año 1991 de 6 cilindros en un lapso de 12 meses,
sin decir a favor de quien se compromete.

La demandante no está legitimada en la causa, no por el hecho de que vendió un automóvil


cuya propiedad no ostentaba, sino porque no hay ningún documento en que se exprese que
ella fue quien efectivamente vendió el bien en litigio; en ese sentido el documento privado
incorporado de prueba únicamente es una manifestación unilateral de voluntad en el que la
señora Wilfrida López se obliga a pagar un precio por el automóvil, sin contemplar a favor
de quien se harían los pagos. Y es que de la definición antes comentada se desprende que
la legitimación en la causa sólo la reconoce la ley sustantiva a favor de una especial
categoría de sujetos, como lo son los acreedores, los contratantes, los herederos, cesionarios,
etc); categoría que no tiene la demandante.

La señora Berlys Viersa López Lezcano afirma que ella vendió el referido bien a la señora
Wilfrida López Quintero, realizándose el respectivo traspaso en el Municipio de Panamá y
en la Dirección de Registro Vehicular; sin embargo, a más de que no demostró que ella fue
quien vendió, está acreditado que el traspaso lo realizó el señor Deardorff Dennis J. quien
figuró como propietario del vehículo Ford Taurus, con motor 1FACP52U4MA141939, hasta
el día 9 de marzo de 1998, fecha en que se realizó el traspaso a su actual propietaria, la
señora Wilfrida López Quintero (fs. 121).

Si bien está fehacientemente acreditado, que el actualmente el vehículo Ford Taurus está a
nombre de la demandada y que ella se comprometió a pagar un precio por el mismo a través
de un documento privado de fecha 9 de marzo de 1998, no encontramos en el expediente
elemento de convicción alguno que demuestre una relación contractual entre demandante y
demandada.

"Es incuestionable que en el presente proceso faltó la legitimación en causa de la parte


demandada, noción que a menudo se confunde con la legitimación procesal. CHIOVENDA
dice que la legitimación en la causa consiste en la identidad del actor con la persona en cuyo
favor está la ley (legitimación activa), y la identidad de la persona del demandado con la
persona contra quien se dirige la voluntada de la Ley (legitimación pasiva), (Instituciones,
tomo 11, pág. 19). La legitimación en la causa (como el interés para obrar) no es presupuesto
procesal, porque, lejos de referirse al procedimiento o al válido ejercicio de la acción,
contempla la relación substancial que debe existir entre el sujeto demandante o demandado y
el interés perseguido en el proceso; es pues, como afirma el tratadista HERNANDO DAVIS
ECHANDIA, cuestión sustancial respecto a la cual la doctrina es uniforme (Nociones
Generales de Derecho Procesal Civil, pág. 288) Este renombrado procesalista nos advierte
que la legitimación en la causa debe existir, en ambas parte, en el momento de constituirse la
"litis contestatio", precisamente porque forma parte de la relación sustancial que debe ser
objeto del juicio ..." (Jurisprudencia Civil al Día, Extractos Jurisprudenciales 1990-1993,
p.348-349)
En fin, si la demandante no demostró ser la persona que vendió el automóvil a la demandada,
carece de legitimación activa en este negocio, y por tanto cabe revocar la decisión de primera
instancia, y absolver a la señora Wilfrida López sin entrar en más consideraciones.

En mérito de lo expuesto, el Tribunal Superior del Tercer Distrito Judicial, en Pleno,


administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de la Ley, REVOCA en
todas sus partes la Sentencia No. 7 de 21 de marzo de 2003 dictada por el Juzgado Séptimo
del Circuito de Chiriquí, dentro del proceso ordinario propuesto por BERLYS VIERSA
LÓPEZ LEZCANO en contra de WILFRIDA LÓPEZ QUINTERO , y en su lugar
ABSUELVE a la demandada de la condena solicitada en su contra.

Las costas en contra de la demandante y a favor de la demandada se fijan en la suma de


Quinientos Balboas (B/. 500.00).

NOTÍFIQUESE Y DEVUÉLVASE,

MGDO. SALVADOR DOMÍNGUEZ BARRIOS

MGDO. ARNULFO BOUTET V.

SUPLENTE ESPECIAL

MGDA. CARMEN DE GRACIA DE GARCÍA


LICDA. DAYRA MARÍA NAVARRO LEZCANO

SECRETARIA INTERINA

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