Introducción:

Un ambiente lluvioso, con palo de agua, truenos y ranas.

Posteriormente una pequeña pieza de guitarra.

-Marta está ya en la casa sucia rodeada de tierra en la casa, limpiando un escritorio -se congela

Aquí ya ni huele a mierda, con todo y que esta lleno de humedad. Vea ese musgo en las paredes, hasta se tragó el
almanaque de los cigarrillos esos, y todo esta lleno de tierra. Por donde uno toca, queda con las manos cuarteadas

-Segundo párrafo narrado con música de guitarra y sombras.

Juan habla de la televisión que sigue justo en el mismo lugar donde se quedó, martha le sugiere hacer tinto por lo que va
a la cafetera

Marta limpiando el escritorio encuentra la muñeca de la niña

Diálogos…

-Mira martha, el televisor sigue conectado. Tal y como lo dejamos

-Como que hace frio, ¿por qué no haces un tinto?

-Traje la cafetera y la pipeta por lo que los fogones deberían de funcionar.

Marta encuentra la muñeca

-Mira juan, es la muñeca de la niña

-pero debe estar llena de bichos

-solo tiene telarañas ya todos deben estar muertos.

-Los fogones no encienden, deben estar demasiado sucios.

-Vamos al patio porque aseo es lo que hay que hacer

Acto siguiente: Juan va al patio -se congela.

Se representa una escena detrás del telón, mostrando lo narrado

-narración de los recuerdos: Con la actuación de Jessica y Angie

Juan le pide a Marta que la acompañe

Marta sale con su trapo en la cintura, ambos agarran totumas (cocas) del patio y van a buscar agua. Al regresar martha s
encuentra el cepillo y le muestra que esta casí limpio

juan intenta recordar. “Yo solo quería volver a tocar la muñeca, volver a sentir a mi hermanita, tratar de recordar su
olor, el sonido de su dulce voz, la hermosa textura de su cabella (suspiro…). No funciono

Mientras la dejaba en su lugar encuentra unas hojas, trae a marta y le entrega la otra hoja

Juan empieza a leer la carta:

- Invención de la carta: Fue esa tarde en la que nos abandonaste juan, es tarde lluviosa. Cuando siempre olia a
tierra, ese día que abandonamos la casa huyendo de los paramilitares. La niña siempre nos preguntaba donde
estaban ustedes. No supimos mas que darle excusas tontas. De que estarían en un mejor lugar, de eso estamos
seguros. Solamente te puedo decir lo siento.

Marta lee la carta en una silla y deja el cepillo en el escritorio, arruga la carta y sale corriendo hacia la quebrada

Juan la persigue hasta la quebrada

-narración

Marta señala la inscripción de la lapida izquierda y mira a Juan.

-Mire Juan, la suya.

Juan Se arrodilla y la escena termina con un acorde disonante.