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10.1016@S0213 48531070049 9
10.1016@S0213 48531070049 9
2010;25(Supl 1):37-45
ISSN: 0213-4853
Volumen 25
Extraordinario 1
Octubre 2010
Catástrofes neurológicas
Editores invitados:
D. Ezpeleta y J. Bautista Lorite
NEUROLOGÍA
Catástrofes, calamidades y desventuras
en la práctica neurológica
D. Ezpeleta y J. Bautista Lorite
Enfermedades neurológicas
catastróficas
Publicación Hipertensión intracraneal aguda
Oficial de la F. Gilo Arrojo, A. Herrera Muñoz y B. Anciones
Sociedad Española Encefalitis agudas
de Neurología J.C. García-Moncó
Trombosis aguda de la arteria basilar
J.F. Arenillas Lara
Catástrofes en trastornos del movimiento
A. Mínguez-Castellanos
Catástrofes neurológicas por enfermedades
desmielinizantes
J.M. García Domínguez
Suplementos y J. Guzmán de Villoria Lebiedziejewski
Enfermedades neuromusculares catastróficas
Catástrofes neurológicas
iatrógenas
Catástrofes neurológicas por desconocimiento
y retraso diagnóstico
R. Alberca
Catástrofes derivadas de las técnicas
complementarias de diagnóstico neurológico
M. Arias Gómez
www.elsevier.es/nrl
Neurocatástrofes farmacológicas
C. Tabernero García
Catástrofes neurológicas en el paciente
quirúrgico
C. Tejero Juste
www.elsevier.es/neurologia
CATÁSTROFES NEUROLÓGICAS
Unidad ELA-Neuromuscular, Servicio de Neurología, Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Madrid, España
0213-4853X/$ - see front matter © 2010 Sociedad Española de Neurología. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
38 J.L. Muñoz Blanco
Introducción
Mielopatía Virus
Nilo
Consideramos enfermedades neuromusculares catastróficas ELA
Occidental SGB LEMS
a aquellos procesos, agudos o subagudos, en los que su cur-
so clínico asocia un riesgo inminente de fallecimiento. El MG
manejo correcto de estas situaciones, en tiempo y forma,
reduce la posibilidad de un desenlace fatal y permite ini-
ciar, o reajustar, el tratamiento específico de su enferme-
Miopatía
dad neuromuscular. También revisaremos los abordajes te-
rapéuticos adecuados para las fases avanzadas de esta
PNP-miopatía Bloqueo NM
patología, con los objetivos de estabilizar el deterioro clíni- enfermo crítico fármacos
co natural o mantener la calidad de vida del paciente.
Síndrome de Guillain-Barré
Sí No
Si esta relación es ≥ 1, los pacientes necesitan menos de Una vez establecido el soporte respiratorio adecuado, se
3 semanas de ventilación y evitaremos la traqueotomía. Si aplica el manejo específico de la crisis miasténica. En nues-
es < 1, el riesgo de ventilación asistida por más de 3 sema- tro centro utilizamos plasmaféresis o inmunoadsorción de
nas es elevado y se aconseja realizar la traqueotomía8. inicio (6 sesiones, la mitad en días consecutivos, el resto en
días alternos), y podrá seguirse, dependiendo de la situa-
ción clínica del paciente, de inmunoglobulinas i.v. (0,4 g/kg
Miastenia grave de peso/día, 5 días consecutivos). Ambos han demostrado
igual eficacia en el tratamiento de la crisis miasténica, pero
El paciente miasténico puede iniciar el cuadro o evolucio- la aféresis es más rápida en alcanzar el máximo de eficacia,
nar a una IRA dentro del curso natural de su enfermedad, o, acortando la estancia en UCI. Además, se deben extremar
con mayor frecuencia, desencadenarse por un proceso in- los cuidados generales (control de arritmias cardíacas, pro-
tercurrente externo que acentúe la alteración de la trans- filaxis de tromboflebitis, protección gástrica, antitérmicos),
misión neuromuscular, y, en consecuencia, aumente la fati- suprimir los anticolinesterásicos (piridostigmina) e iniciarse
gabilidad y la debilidad muscular del paciente. Consideramos la administración de esteroides por vía i.v., mediante metil-
que se encuentra en “crisis miasténica” cuando presenta prednisolona a dosis de 1 mg/kg de peso/día9,12.
IRA y necesidad de soporte ventilatorio9. La crisis colinérgica aislada es excepcional en nuestra ex-
Los pacientes miasténicos son susceptibles de soporte no periencia. La sintomatología secundaria a un exceso de es-
invasivo, mediante presión positiva con máscara facial com- timulación colinérgica suele asociarse a intentos de contro-
pleta (BiPAP), como alternativa a la intubación y ventilación lar situaciones de agudización clínica de la miastenia con
invasiva10. Para ello, el paciente debe estar consciente, ca- dosis crecientes de piridostigmina. Esto provoca un efecto
pacitado para proteger su vía aérea (buen manejo de secre- paradójico de agravación del cuadro de debilidad muscular
ciones orofaríngeas, evitar la deglución del aire inspirado) y asociado a sintomatología colinérgica. Es aconsejable esta-
mantener una PCO2 < 45 mmHg. El soporte con BiPAP puede bilizar primero al paciente (hemodinámica y ventilación);
ser continuo o intermitente, mientras aplicamos la terapia después, retirar la medicación anticolinesterásica, y a con-
específica para controlar la crisis miasténica. También puede tinuación observar la evolución clínica. Habitualmente es
indicarse para agilizar la extubación del paciente ventilado necesario iniciar de inmediato la terapia específica para la
de forma invasiva y acelerar su salida de la UCI. crisis miasténica.
En los pacientes miasténicos con ventilación invasiva, el
tiempo medio de soporte es de 2 semanas. Si la previsión de
intubación es superior a 3 semanas, deben someterse a tra- Disautonomía
queotomía. Tienen riesgo elevado de intubación prolongada
los pacientes con edad superior a 50 años, los que manten- En los pacientes con síndrome de Guillain-Barré, la disautono-
gan cifras de bicarbonato > 30 mg/dl o una FVC < 25 ml/kg mía es más frecuente en aquellos con déficit motor intenso,
de peso al sexto día de ventilación11. insuficiencia respiratoria y lesión axonal5,13. Las alteraciones
42 J.L. Muñoz Blanco
cardiovasculares que presentan estos pacientes no siempre se nosos disminuidos o abolidos y, en ocasiones, alteración
deben a disautonomía; es preciso excluir otras causas como sensitiva distal en los miembros. La debilidad puede ser de
un tromboembolismo pulmonar, hemorragia digestiva o alte- predominio distal (polineuropatía), proximal (miopatía) o
raciones hidroelectrolíticas. La labilidad en la presión arterial generalizada (alteración en la transmisión neuromuscular).
puede persistir durante semanas, a pesar de la estabilización El diferencial topográfico y etiológico lo apoyamos en la
o la mejoría clínica. La presencia de crisis hipertensivas, aso- determinación de las cifras de creatinfosfocinasa (CPK) y en
ciadas o no a hipotensión ortostática, se asocian a cuadros de el estudio neurofisiológico, incluyendo electromiografía
cuadriplejía e IRA, o como respuesta anómala a distintos fár- (EMG) para detectar actividad espontánea en reposo y tipo
macos (hipersensibilidad por denervación). de potenciales de unidad motora (neurógenos, miopáticos),
La taquicardia sinusal sostenida es la arritmia cardíaca electroneurografía (ENG) para valorar las velocidades de
más frecuente asociada a disautonomía, aunque habitual- conducción sensitivas y motoras y el test de estimulación
mente inocua. Los episodios vagales ocasionan bradicardia, repetitiva (TER) a bajas y altas frecuencias (alteración de la
parada sinusal o asistolia, asociadas o no a un estímulo ex- transmisión neuromuscular pre y/o postsináptica). Por últi-
terno (intubación, aspiración de secreciones, maniobras de mo, en casos seleccionados, completaremos el estudio con
Valsalva) o a hipoxemia. Suelen presentarse durante la fase la realización de biopsia muscular o del nervio periférico
clínica de mayor debilidad y, en ocasiones, durante la con- (tabla 5).
valecencia. Son de breve duración y cesan de forma espon-
tánea o con atropina intravenosa, aunque a veces requieren
la colocación de un marcapasos. Bloqueo neuromuscular prolongado por
Otra sintomatología autonómica asociada se debe a la fármacos
alteración de la regulación en la temperatura corporal oca-
sionada por una incapacidad para disipar calor, asociada a El bloqueo neuromuscular inducido por fármacos para per-
inestabilidad vasomotora cutánea, disminución de la sudo- mitir la ventilación mecánica invasiva en UCI puede prolon-
ración o diaforesis. Los episodios de hipertermia deben di- gar su efecto en el tiempo tras cesar su administración. La
ferenciarse de las infecciones concomitantes. consecuencia común es la imposibilidad de suspender la
asistencia ventilatoria debido a debilidad muscular del pa-
ciente. Este efecto bloqueante prolongado debe tenerse en
Anestesia de pacientes neuromusculares cuenta en el diagnóstico diferencial con otras entidades
causantes de debilidad neuromuscular en la UCI.
Los pacientes neuromusculares sometidos a anestesia gene- Los agentes bloqueantes no despolarizantes actúan me-
ral o regional deben ser evaluados previamente con respec- diante la unión reversible al receptor de acetilcolina, y son
to a su reserva funcional cardíaca y respiratoria. El objetivo los utilizados para mantener la ventilación mecánica invasiva
es evitar la insuficiencia cardíaca congestiva y la dificultad en cuidados intensivos. La interacción con otros fármacos
(distress) respiratoria generadas por la cirugía en estos pa- (esteroides, aminoglucósidos) o con procesos intercurrentes
cientes. Debe monitorizarse de forma continua la tempera- (insuficiencia hepática, renal, alteración hidroelectrolítica)
tura corporal, incluso en los procedimientos realizados con puede asociarse a un tiempo prolongado de bloqueo de la
anestesia regional. Existe un riesgo elevado de hipo o hiper- transmisión neuromuscular tras su suspensión. Este efecto
termia, así como desajuste del sistema nervioso autónomo, adverso suele persistir durante un período de tiempo infe-
con riesgo de gastroparesia y aspiración broncopulmonar rior a las 2 semanas. El estudio mediante EMG y TER mues-
secundaria. Para la inducción anestésica e intubación son tra un patrón de alteración postsináptica de la transmisión
preferibles los fármacos intravenosos de acción rápida y neuromuscular17.
vida media corta. Los fármacos relajantes musculares des-
polarizantes provocan rabdomiólisis en los pacientes neuro-
musculares14. Los anestésicos gaseosos, asociados o no a Polineuropatía del enfermo crítico
relajantes despolarizantes, pueden desencadenar hiperter-
mia maligna en los sujetos susceptibles genéticamente15. Estos pacientes presentan un patrón clínico consistente en
debilidad, amiotrofia y alteración sensitiva en miembros in-
feriores con predominio distal, normalidad de los pares cra-
Debilidad neuromuscular del paciente neales y abolición de los reflejos osteotendinosos. La mor-
ingresado en la unidad de cuidados intensivos talidad es elevada (36-55%). En los datos complementarios
destacan unas cifras de CPK normales (o con ligera eleva-
Los pacientes críticos dependientes de un ventilador, en los ción); LCR normal sin disociación albúmino-citológica; EMG
que es imposible realizar la desconexión de la ventilación con potenciales de unidad motora (PUM) neurógenos y pre-
mecánica por asociar debilidad de origen neuromuscular, sencia de actividad espontánea en reposo (fibrilación, on-
suponen un motivo frecuente de consulta neurológica por das positivas); ENG con velocidades de conducción motoras
parte de los médicos intensivistas. El abordaje diagnóstico y sensitivas normales. En la histología del nervio sural en-
debemos iniciarlo con la diferenciación de su patrón clínico contramos degeneración axonal difusa en las fibras de todos
entre patología del sistema nervioso central y patología los tamaños.
neuromuscular16. La polineuropatía del enfermo crítico está asociada a an-
Los pacientes con debilidad secundaria a patología peri- tecedentes de sepsis, fracaso multiorgánico o síndrome de
férica neuromuscular suelen presentar reflejos osteotendi- respuesta inflamatoria sistémica (SIRS). Su patogenia ha
Enfermedades neuromusculares catastróficas 43
Topografía lesión causal Origen conocido pre-UCI Origen desconocido pre-UCI Adquirida en UCI
sido aclarada de forma parcial. El hallazgo histopatológico atrofia muscular secundaria a denervación distal de las fi-
de la degeneración axonal difusa estaría causado por isque- bras musculares (neuropatía del enfermo crítico) y bloqueo
mia de las fibras nerviosas al disminuir la presión de perfu- neuromuscular prolongado. Todo ello amplificaría la ac-
sión vascular, superada por el aumento de la presión hidros- ción de los esteroides administrados, y éstos causarían la
tática intraneural. La presencia de edema endoneural, pérdida de los filamentos gruesos de miosina20.
causado por mayor permeabilidad del endotelio, provoca el Los pacientes presentan una debilidad generalizada de
aumento de la presión hidrostática. El aumento de E-selec- predominio proximal, con posible alteración de musculatura
tina y otras moléculas de adhesión en el endotelio vascular cervical y craneal (respetando los movimientos oculares).
son la causa del cambio en la permeabilidad endotelial. Los reflejos osteotendinosos están disminuidos o abolidos.
Esta cascada se iniciaría por aumento de la respuesta inmu- El pronóstico es bueno, cuando utilizamos las medidas de
ne a tóxicos y patógenos circulantes, a la producción de soporte adecuadas, con fisioterapia y retirada de fármacos
citocinas proinflamatorias (TNF-α, IL-1) y de óxido nitroso. (esteroides, bloqueantes neuromusculares, ciclosporina).
Algunos autores sugieren que la administración de insulina La CPK es normal en el 50% de los casos. La EMG muestra
podría contrarrestar esta cadena a varios niveles, mejoran- un patrón miopático. La histología muscular con microsco-
do su evolución18,19. pia óptica presenta fibras de tamaño variable, atróficas,
núcleos internos, vacuolas ribeteadas, degeneración grasa y
fibrosis. Con electrónico se demuestra la pérdida selectiva
Miopatías del enfermo crítico de los filamentos de miosina, manteniendo los de actina y
bandas Z.
Miopatía cuadripléjica aguda por déficit de miosina
(“miopatía del enfermo crítico”) Miopatía caquéctica difusa no necrosante
Es la entidad más frecuente asociada a debilidad en el Asociada a una estancia prolongada en la UCI, sedación,
enfermo crítico, y puede cursar junto a polineuropatía. Su inmovilidad y malnutrición. Cursa con debilidad muscular
aparición no tiene relación con el tiempo de estancia en la de predominio proximal en miembros. Se maneja mediante
UCI. También se ha descrito en unidades de cuidados inter- la corrección de factores metabólico-nutricionales asocia-
medios (trasplante hepático). Presenta factores predispo- dos y fisioterapia pasiva. Las cifras de CPK son normales y
nentes, que actúan de forma aislada o combinada en su no hay alteraciones significativas en la EMG y TER. La histo-
aparición, como son la utilización de fármacos bloqueantes logía muscular sólo presenta atrofia de fibras tipo II.
neuromusculares no despolarizantes, esteroides, ciclospori-
na, presencia de insuficiencia hepática o renal, trasplante Miopatía necrosante aguda (rabdomiólisis)
de órganos, sepsis o SIRS.
La patogenia se ha relacionado con una mayor sensibili- Esta entidad cursa con debilidad muscular generalizada, y
dad de los receptores esteroideos musculares causada por su pronóstico de recuperación es malo. Su patogenia está
44 J.L. Muñoz Blanco
relacionada con la utilización de fármacos bloqueantes sedación secundaria y parada respiratoria. En la fase termi-
neuromusculares no despolarizantes, con los esteroides y nal de los pacientes neuromusculares crónicos, dentro de
con la patología metabólica e infecciosa asociada al enfer- un contexto de cuidados paliativos, sí está indicada la ad-
mo crítico. El tratamiento de basa en aplicar medidas gene- ministración de oxígeno junto a otras medidas de soporte
rales de soporte y retirada de fármacos. Para el diagnósti- que garanticen comodidad y tranquilidad al paciente.
co, nos basamos en los datos complementarios siguientes: La causa fundamental de muerte en pacientes con escle-
cifras de CPK muy elevadas (perfil de rabdomiólisis) con rosis lateral amiotrófica es la insuficiencia respiratoria, con
mioglobinuria, EMG con patrón miopático e histología mus- una evolución rápida en un corto espacio de tiempo, de tal
cular con una necrosis difusa de todas las fibras. forma que el 40% fallece en las primeras 12 h, el 58% en la
primera semana, y sólo el 2% en más de un mes24. Los pa-
cientes refieren sensación de obstrucción de la vía respira-
Síndrome de Hopkins toria ocasionado por dificultad respiratoria, a pesar de que
el análisis post mortem de estos casos muestra una vía aé-
Cuadro clínico en niños asmáticos con IRA (también descrito rea permeable. Debemos anticiparnos a la aparición de es-
en adultos) que cursa con monoparesia o paraparesia fláci- tas crisis respiratorias mediante un cuidadoso manejo de la
da agudas, semejante a la poliomielitis, seguida de amio- sintomatología secundaria a IRA. Debe respetarse el dere-
trofia que persiste posteriormente. Pueden mejorar con cho del paciente a su autonomía en la decisión concernien-
tratamiento inmunomodulador (inmunoglobulinas i.v.). El te al grado de agresividad que debemos aportar en el trata-
LCR muestra pleocitosis linfocitaria y aumento de proteí- miento de soporte.
nas. En la EMG encontramos signos de denervación aguda y
crónica, y en la histología muscular, un patrón denervatorio
con agrupamiento del tipo de fibras21. Conflicto de intereses
15. Rosenberg H, Dirksen RT. Malignant hyperthermia susceptibili- 21. Kira JI, Isobe N, Kanano Y, Osoegawa M, Ohyagi Y, Mihara F, et
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