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Unidad 1.1
Unidad 1.1
Diana Valero
Máster en Tecnologías de la Información y la Comunicación para
la Educación y el Aprendizaje Digital
Tendencias e innovación docente
Actualizado por Clara Vizoso
MÓDULO 1: Contextualización
UD1: Introducción a la innovación docente en la Sociedad de
la Información
Introducción a la innovación docente en la Sociedad de la Información 3
1. Introducción 3
2. De la sociedad industrial a la sociedad de la información 3
2.1. Un poco de historia 3
2.2. Características 4
3. Hacia una concepción del aprendizaje para la sociedad informacional 8
3.1. Concepciones del aprendizaje para la Sociedad de la Información 8
3. El aprendizaje en la sociedad de la información 10
3.1. ¿Qué hay que enseñar? 11
3.2. Dimensiones de las TIC 12
4. ¿Qué son las nuevas tecnologías? 14
4.1. TIC-TAC 14
4.2. TRIC 16
5. Innovación educativa: pedagogías y tecnologías emergentes 18
5.1. Aproximación conceptual 18
5.2. Interacción e interactividad 20
6. Algunos ejemplos de nuevas pedagogías y tecnologías emergentes: 24
6.1. Conectivismo (Siemens): 24
6.2. Aprendizaje invisible (Cristóbal Cobo) 25
6.3. Aprendizaje rizomático (Cormier, 2008) 26
6.4. Aprendizaje en red y comunidades de aprendizaje 26
6.5. Nuevas aproximaciones al aprendizaje a lo largo y ancho de la vida: 27
6.6. Nuevas aproximaciones al aprendizaje flexible 28
6.7. Deep learning o Aprendiz+aje profundo 28
7. El futuro de la innovación: Educause Horizon 30
1. Introducción
El cambio de una sociedad industrial a una sociedad de la información (SI) ha supuesto
importantes cambios en diferentes campos: en el modo en que nos relacionamos, en el ámbito
económico, en el mercado de trabajo… Vinculados a estos, está el cambio en el modo en que
los estudiantes aprenden y aquello que necesitan aprender para desenvolverse con éxito en este
nuevo modelo social, por lo que es necesario modificar también la enseñanza y adaptarla a esta
nueva realidad. Por ejemplo, la capacidad de acceso que hoy tenemos a una mayor y más
diversa información supone el que hoy se pueda –o deba- consultar más fuentes para realizar
un trabajo, mientras que hace 20 años los mismos trabajos de clase se hacían consultando la
enciclopedia y muy pocas fuentes más; entonces el acceso a la información era limitado y
escaso, mientras que hoy tenemos a nuestro alcance innumerables libros y documentos a través
de internet. En este ámbito la innovación educativa tiene un papel fundamental, adaptándose a
la SI mediante, entre otras cosas, las tecnologías de la información y la comunicación.
En este bloque repasaremos los principales cambios que ha supuesto el cambio de una sociedad
industrial a una informacional y su impacto en la educación. A continuación, veremos cómo la
educación se ha adaptado, o no, a esta nueva realidad y revisaremos las concepciones del
aprendizaje que mejor responden a la SI y que deben enmarcar las innovaciones docentes.
Finalmente, revisaremos los aspectos claves de las TIC en la SI, los ámbitos de innovación y las
cuestiones principales a tener en cuenta. A lo largo de este tema, vamos a profundizar en el
concepto de tecnologías de la información y la comunicación y cómo han impactado la
educación. Abordaremos las principales innovaciones en el campo de la pedagogía con TIC entre
las que se incluyen conceptos como el conectivismo, aprendizaje rizomático, aprendizaje
invisible… así como las innovaciones que están surgiendo de la mano de los cambios que ha
provocado la sociedad de la información, entre los que destacamos la necesidad de un
aprendizaje más flexible y el aprendizaje a lo largo de la vida.
La revolución industrial que se produjo a finales del siglo XIX supuso el paso de una
economía basada en el sector primario, la agricultura y ganadería, a una economía
basada en trabajos industriales. Entre sus implicaciones sociales y económicas destaca
que la gente del campo se va yendo a las ciudades para conseguir trabajo en las fábricas
y aumenta poco a poco el sector servicios. Este paso de una sociedad industrial a una
sociedad informacional conllevó también un cambio en el mercado del trabajo y en la
propia educación.
Un gran salto se produce cuando pasamos de la sociedad post-industrial a los años 70,
con la aparición de Internet, que no solo es importante desde el punto de vista
comunicativo e informacional, sino que lleva aparejada una nueva revolución tecnológica
con implicaciones muy importantes y profundas transformaciones económicas y sociales
que cambiarán nuestra sociedad. Ahora, todos estamos conectados (sociedad en red),
todos podemos saber lo que queramos cuando queramos (accesibilidad de la
información), hay cambios en los procesos de producción y mercado de trabajo, y todo
íntimamente vinculado a la introducción generalizada de las nuevas tecnologías de la
información y la comunicación.
2.2. Características
La característica fundamental de este nuevo modelo social es, en primer lugar, y como su propio
nombre indica, la información. Internet ha supuesto un aumento exponencial de la información y
un cada vez mayor acceso a ésta, lo que ha supuesto cambios económicos, sociales y
educativos.
Respecto a los cambios económicos, entre sus implicaciones cabe destacar que ha nacido un
nuevo sector de trabajo, el sector cuaternario, que es el sector informacional.
Esta nueva forma la podemos ver en cualquier multinacional. Si tomamos por ejemplo
Amazon y su entrada en el mercado alimenticio vemos como antes las tiendas se
abastecían de producto local, los consumidores tenían que ir a la tienda a comprar, elegir
los productos, pagar y llevarlos a casa. Posteriormente, algunos supermercados han
diversificaron el origen de sus productos e incluyeron el servicio de compra por internet,
aunque todavía se suele tardar un día en recibir la compra a casa. Ahora Amazon, con
proveedores de todo el mundo, propone que a través de internet sea posible no solo
hacer la compra, sino que esta llegue en dos horas al domicilio del comprador. Esto ha
provocado un gran debate sobre el futuro de trabajos como los de cajeras, ya que ahora
podemos hacerlo todo por internet. Pero al mismo tiempo, se han creado nuevos
empleos, si bien estos están vinculados a nuevas capacidades y competencias propias
de la Sociedad Informacional -a las que haré referencia más adelante-, los cuales
requieren una formación muy diferente a la recibida hasta este momento.
Igualmente, la relación con las nuevas formas de comunicación es evidente. Cada vez
son más importantes las nuevas herramientas como Twitter, WhatsApp…, que nos
permiten estar en comunicación y diálogo constante no solo con nuestros conocidos,
amigos o familiares, sino con el mundo entero, lo que ha tenido un profundo impacto
también en el aprendizaje.
Finalmente, una vez que las teorías clásicas se han visto desbordadas por la Sociedad
Informacional, surgen nuevas concepciones del aprendizaje que tratan de dar respuesta al nuevo
modelo social.
Las prácticas educativas basadas en esta concepción han demostrado tener excelentes
resultados, no solo en el aumento del aprendizaje instrumental de todo el alumnado, sino también
en la mejora de la convivencia (Apple y Beane, 2007; Elboj, Puidellívol, Soler, y Valls, 2002;
Rogoff, Goodman, y Bartlett, 2001; Wells, 1999).
Las relaciones que se establecen desde esta perspectiva, tienen el diálogo como elemento
central y es a través de ellas, de la interacción, desde donde se dan los significados a la realidad
social.
Respecto al primero, aboga que los conocimientos iniciales del alumno sirven solo para
programar de una manera más eficaz el aprendizaje, pero que el objetivo es transformar esos
niveles desarrollando al máximo el potencial de cada estudiante. Respecto al segundo contempla
una nueva realidad en la que el estudiante ha dejado de aprender única y exclusivamente en la
escuela, para pasar a aprender a través de la interacción con toda la comunidad, con las familias,
sus iguales, etc. Es así como aprenden y se desarrollan y, por tanto, el profesor tiene un nuevo
papel más colaborativo.
Esta perspectiva trata de dar respuesta a los problemas que han surgido en la sociedad de la
Es preciso por tanto que todo el alumnado aprenda y logre el éxito educativo para garantizar su
inclusión laboral y social, y para ello es necesario que el aprendizaje sea por y para la sociedad
actual, teniendo en cuenta los cambios sociales que han tenido lugar en los últimos años, y que
hemos revisado previamente. Para afrontar estas situaciones se debe modificar la metodología
de aprendizaje. Ya no basta con saber leer, escribir y contar, ahora hay nuevas formas de
analfabetismo que requieren que las escuelas no vean al estudiante como un mero receptor
pasivo de conocimientos si no como el eje de un aprendizaje contextual, activo, social y funcional.
Pero, ¿realmente el modelo de aprendizaje actual que siguen nuestras escuelas está en
consonancia con las características de la sociedad de la información y con las necesidades de
los futuros trabajos.
La cuestión es ¿cómo logramos que los estudiantes adquieran estas habilidades en la SI?
Lo que solemos ver es que las empresas dan formación específica sobre lo que
necesitan que aprendan los trabajadores, lo que se produce continuamente porque las
empresas se actualizan, cambia el software que utilizan, introducen una máquina
nueva… Pero en los colegios o en las universidades ¿qué tenemos que hacer? ¿dar
también formación específica? La respuesta es que hace falta dar una formación básica,
general y polivalente por un motivo al que ya hemos hecho referencia, y es que, si en la
SI los empleos y la tecnología cambian rápidamente, lo que se requiere es una formación
que facilite su adaptabilidad. Y dentro de la formación básica nos encontraríamos con la
capacidad de seleccionar y procesar la información relevante, que es la fuente principal
de éxito o fracaso de las personas, grupos e instituciones ya que es lo que nos capacita
para poder acceder al resto de conocimientos de forma autónoma.
Ambas competencias son independientes, es decir, podemos tener una alta competencia
Por otra parte, puede parecer que esta dimensión es cada vez menos necesaria ya que los niños
y jóvenes han crecido ya con ella. Así, se habla de generación digital, nativo digital, etc. Pero ya
hemos señalados que el conocimiento de la tecnología no implica el de su uso y, además, la
educación no es únicamente la de los niños y jóvenes, pues cada vez son más los adultos que
se acercan a la competencia digital a través de cursos específicos (Incluso en las residencias de
ancianos se están realizando cursos de uso de ordenadores) o formación de adultos (véase el
caso del Aprendizaje a lo largo de la vida). Igualmente, el debate de las desigualdades que
genera la sociedad de la información hace referencia a cómo regiones, países o continentes
enteros están excluidos del acceso a la SI (ej. África) y sigue siendo fundamental que estas
poblaciones adquieran las competencias informáticas para no quedar excluidas del mercado de
trabajo.
La ausencia de esta competencia puede tener muchas implicaciones negativas que vemos cada
día, por ejemplo, con el aumento de las noticias falsas.
Estas dos dimensiones coinciden con las anteriormente descritas, pero a ellas se unen 3 más:
Esta dimensión está íntimamente relacionada con el cambio de roles del profesor y del alumnado,
así como con las metodologías y concepciones del aprendizaje que se aplican en el aula,
debiendo orientarse, como ya se ha señalado, hacia entornos de aprendizaje que promuevan la
interacción y el diálogo (ej. Comunidades de aprendizaje). Se trata de fomentar un aprendizaje
activo en el que el rol del profesor pasa a ser el de gestor del aprendizaje y el alumno adquiere
un papel más activo. En este sentido, el aprendizaje activo se define como "el resultado de un
intento deliberado y consciente por parte del profesor para causar que los estudiantes participen
abiertamente en una lección" (Pratton y Hales, 1986, p. 211). Este se refiere a las prácticas que
involucran a los estudiantes en el proceso de aprendizaje e incluye técnicas donde los
estudiantes hacen más que escuchar una conferencia pasivamente. El aprendizaje activo implica
hablar y escuchar, escribir, leer y reflexionar, y puede mejorar los resultados sobre los formatos
tradicionales (Yoder y Hochevar, 2005). Según la teoría generativa de aprendizaje, los
estudiantes aprenden mejor cuando participan en el procesamiento cognitivo activo (Mayer y
Wittrock, 2006).
La sociedad, al igual que la educación, es cada vez más una sociedad en red, que en el
aprendizaje lo entendemos como “aquel espacio o comunidad organizados con el fin de lograr el
aprendizaje” (Salinas, 2008:115). Uno de los métodos más beneficiosos de aprendizaje activo
es el aprendizaje colaborativo, que ocurre cuando los estudiantes trabajan juntos en pequeños
grupos hacia un objetivo común, la creación de significado, que exploren un tema o la mejora de
las habilidades (Prince, 2004).
Lo vemos en el aumento cada vez mayor de términos como participación digital o ciudadano
digital o en importantes hechos sociales como fue la Primavera Árabe, organizada a través de
las redes sociales o la organización en 2003, tras los atentados de las torres gemelas, de una
manifestación con 30 millones de personas (#notinmyname, se sigue utilizando en las protestas
en diferentes partes del mundo, por ejemplo, recientemente en India)
4.1. TIC-TAC
Cabrero (1996) hace 20 años señalaba que “hablar de Nuevas Tecnologías es referirse
a los multimedia, la televisión por cable y satélite, al CDROM, y a los hipertextos donde
su materia prima es la información” (Cabero, 1996:10). Actualmente vemos cómo esta
definición está muy superada y nos da una idea de cómo de rápido avanzan las nuevas
tecnologías, especialmente a raíz de Internet. Si tomamos ésta en relación con el
proceso de enseñanza aprendizaje como ejemplo, vemos una clara evolución:
- Web 1.0 – Era una web de consulta. Se subían a internet contenidos y las
personas los leían, de modo que el nivel de interacción era casi que nulo, la
función del usuario era netamente consultiva. Ppt, vídeos, podcast…
- Web 2.0 – El papel pasivo del estudiante se hace activo y puede subir a la web
sus propios contenidos. Permite aprovechar los contenidos de muchos, pero el
profesor tiene que enseñar a seleccionar, tanto lo que leen como lo que publicas.
Aquí hablamos de Wikis, Blogs…
Vemos así la necesidad de definiciones más amplias y perdurables, Cacheiro (2011) por
ejemplo, señala que
Dada su amplitud Cacheiro (2011) los agrupa en 3 tipos de recursos, los de información,
los de colaboración y los de aprendizaje. Partiendo de su clasificación, vamos a
profundizar y añadir algunos más que nos den una visión general
Los dos recursos anteriores pueden combinarse. Sería un segundo momento en el que
las herramientas de información van más allá para, además, ofrecer opciones
colaborativas. El máximo exponente, o al menos el más popular, sería Wikipedia.
4.2. TRIC
El factor relacional agrupa y contiene muchos aspectos de las habilidades sociales que
permiten al individuo al estado de bienestar. Las habilidades sociales vienen del campo
de la psicología y las habilidades para la vida emergen del campo de la salud. "El
aprendizaje de la vida debe basarse en todas las dimensiones: instrumental, cognitiva,
actitudinal, axiológica y emprendedora, para convertirse en un proceso de
retroalimentación en el que el análisis, la reflexión, la acción y la creación de bienes
comunes son competencias extensibles a múltiples escenarios y contextos reales y
virtuales con los cuales Vivimos y relacionamos cada día"(Marta-Lazo & Gabelas, 2016:
120).
El Factor Relacional tiene dos dimensiones: Relacional misma que contiene el potencial
de habilidades psicosociales; Y la dimensión sináptica que incluye el modelo cerebral y
el modus operandi del proceso de aprendizaje, “Es el epicentro de redes psicosociales y
sinápticas en una órbita doble. Vincula afinidades, cierra y potencia los lazos sociales,
genera empatía y diseña proyectos de acción en un círculo de relaciones humanas y
emociones sociales una órbita que es sináptica espiral, que genera discusión, organiza
y procesa información y crea discurso a través de la escritura ciber-ensayos y científicos
artículos” (Marta-Lazo & Gabelas 2016: 86).
Pero debemos tener en cuenta que el cambio no consiste en cambiar el papel y el lápiz
por el ordenador, sino en la forma en que se utilizan estas herramientas. Con las TIC se
trata que recabar información y transformarla en conocimiento, no en transmitir una
información como ya hacíamos con el libro.
Cambio en los objetivos educativos, para lo que hay que potenciar cuanto antes las
habilidades necesarias para que los alumnos aprovechen correctamente las TRIC.
Cambio en los centros escolares, que tienen que estar dotados de medios.
No obstante, no podemos tener una visión idealizada de las TRIC, como habitualmente
parece que queda reflejado en muchos recursos. Las TRIC, como todo, entrañan
también unos riesgos que debemos conocer y tener en cuenta a la hora de desarrollar
nuestra labor como profesores, especialmente si nuestros alumnos son menores de
edad. Como todo, las TRIC no son buenas ni malas, depende de cómo las utilicemos y
cómo enseñemos a utilizarlas. Así, vemos como las redes sociales favorecen la relación,
pero también como se dan casos de ciberacoso; los videojuegos pueden ayudar al
aprendizaje y las relaciones (por ejemplo, a personas con rasgos del espectro autista),
pero también conllevan el riesgo de comportamientos adictivos y aislamiento social.
Es en este sentido en el que surgen las pedagogías emergentes, que se definen “como
Cabe también hablarse de nuevas pedagogías que, en el sentido en que lo utiliza Fullan
y Langworthy, hacen referencia a “modelos de aprendizaje y enseñanza, que son
permitidos y acelerados por herramientas y recursos digitales, en entornos que miden y
apoyan el aprendizaje profundo en todos los niveles del sistema educativo”. Fullan
considera que esta nuevas pedagogías son una de las tres fuerzas que están abriendo
a nuevas posibilidades el aprendizaje siendo el “Nuevo Liderazgo del Cambio” la
segunda fuerza (surge de la fusión de las energías que se producen de arriba-abajo, de
abajo arriba y lateralmente para generar el cambio que es más rápido y más efectivo que
pasados esfuerzos reformadores) y la “Nueva Economía Sistémica” la tercera (hace que
poderosas herramientas y recursos de aprendizaje que aceleran las dos fuerzas
anteriores sean más asequibles para todos).
Hoy en día el éxito del aprendizaje depende de todas sus interacciones: las que tienen
en el aula con su grupo de iguales y el profesorado, las que tienen en sus casas con sus
familias y todas las que tienen con otras personas de la comunidad en otros espacios
diferentes al educativo. Los procesos de aprendizaje no se pueden desvincular del
contexto social y cultural en el que se relacionan otras personas. Del mismo modo que
individuo y sociedad no se pueden separar, no podemos separar la enseñanza y el
aprendizaje que tiene lugar en el centro educativo del contexto social y cultural, de los
diálogos e interacciones que establecen con sus familias, con el grupo de iguales y con
sus amigos y amigas. Esto influye en el aprendizaje tradicional y el en aprendizaje con
TIC.
Rost (2001: 5) define la interactividad como "una capacidad gradual que tiene medios
para dar poder a los lectores/usuarios en la construcción de la noticia ofreciéndole
posibilidades de selección tanto de expresión como de comunicación". Cuando
hablamos de interactividad, es la convergencia de tres sectores: comunicaciones,
informática y medios.
Hay tres tipos de interacciones en la educación virtual (Anderson & Garrison, 1998;
Moore, 1993):
Interacción entre estudiantes: Algunos estudiantes prefieren explicaciones provenientes de sus
compañeros, debido a que utilizan un lenguaje similar y, por lo tanto, pueden explicar los
problemas y soluciones de manera más efectiva que el profesor (Nicol y Boyle, 2003). El
resultado de estas interacciones es el aumento de la participación y el debate, la mejora del
procesamiento activo y el aprendizaje de orden superior (Crouch y Mazur, 2001) (Michaelson,
Caballero, y Fink, 2004).
Interacción con el profesor: en este caso, la construcción de las interacciones con los alumnos
en clase es una parte importante de la tarea del profesor y un componente crítico del proceso de
aprendizaje (Mayer et al., 2009). Esta interactividad permite al profesor proporcionar
retroalimentación durante la clase, evaluar la comprensión de los estudiantes de los materiales
y conceptos, identificar las dudas y los problemas de estudiantes, y desarrollar relaciones más
estrechas con ellos (Trees y Jackson, 2007). De hecho, la interacción estudiante-profesor está
altamente clasificada entre los factores que influyen en el rendimiento de aprendizaje (Bullock et
al., 2002).
Interacción con el contenido: el proceso de interacción intelectual con el contenido, que cambia
la comprensión, las perspectivas y las estructuras cognitivas del estudiante (Moore, 1993).
Pero la interacción en el aula de estas tres formas difiere en un entorno virtual frente a
una clase tradicional. De hecho, muchos estudiantes prefieren el entorno virtual porque
reduce las dos primeras formas de interacción (Kramarae, 2003) e implica menos
necesidad de diálogo y comunicación. Otros autores argumentan que requiere la
combinación de actividades virtuales y tradicionales para incorporar una interacción más
efectiva entre los compañeros (Pineteh, 2012). En este sentido, Ally (2004) habla de
niveles de interacción, colocando en el nivel más alto la interacción en el contexto donde
los estudiantes aplican lo que han aprendido, seguido conjuntamente por la interacción
entre compañeros, la interacción con el profesor y la interacción con los expertos, en el
Por otra parte, otro elemento menos estudiado dentro de la interacción, y que
recientemente está recibiendo mayor atención, es la interacción social y su influencia en
la educación (Bondi, Daher, Holland, Smith y Dam, 2016; Peña, Rangel, Muñoz, Mejía,
Lara, 2016). Por ejemplo, la interacción social promueve el aprendizaje, aunque este no
sea intencional, y puede hacernos más predispuestos a aprender. ¿Por qué es tan
importante un buen clima en clase? Porque los estudiantes están más a gusto y pueden
aprender más, por eso la socialización es tan importante. Pero esto, tan evidente en
entornos presenciales, puede parecer complejo en entornos virtuales, donde se empieza
a hablar del elemento afectivo del aprendizaje (Peña, Rangel, Muñoz, Mejía y Lara,
2016). Otro concepto que surge con fuerza y que se nutre también de la idea de la
importancia de la interacción social y del aprendizaje en todos los ámbitos es el de Factor
Relacional, al que hemos hecho referencia al hablar de TRIC (Gabelas, Marta-Lazo &
Gonzalez-Aldea, 2015). Esto requiere un poco más de explicación
Es nueva teoría del aprendizaje para la era digital, un nuevo enfoque. Parte de una
pregunta clave: ¿aprendemos igual cuando el crecimiento de la información y el
conocimiento es mayor y cuando la tecnología reemplaza muchas tareas básicas que
antes hacíamos?
A diferencia de otras de las prácticas o metodologías que hemos descrito, este concepto
surge con una vocación mayor, busca integrar diferentes ideas y perspectivas no
pretendiendo ser una nueva teoría sino un proto-paradigma, que tal y como los autores
indican, se encuentra “en fase beta”.
Es difícil dar una definición, pero su concepto es más sencillo de entender en base a los
cinco ejes o ideas en las que se basa:
las competencias no evidentes resultan invisibles en los entornos formales: muchas de las
habilidades o potencialidades de los niños, como por ejemplo la creatividad, son aplastadas y no
valoradas por el sistema educativo actual
las TIC se hacen invisibles: a medida que pasan los años, son más las generaciones que han
nacido con las TIC por tanto, para ellos, estas no plantean una novedad, no son “nuevas
tecnologías”. Aun así, el uso de estas herramientas en el aula sí que es nuevo, por tanto el
objetivo es hacer que la naturalidad con la que las generaciones más jóvenes crecen con estas
TIC se lleve también al aula.
las competencias adquiridas en entornos informales son invisibles: muy ligado a la educación
expandida vemos cómo no se tiene en cuenta todo lo que se aprende fuera del entorno de
educación formal, a pesar de que, por ejemplo, en términos de TIC, la mayoría se aprende fuera
de la institución educativa.
las competencias digitales resultan invisibles: ¿Alguien las evalúa en su asignatura?
hay ciertas prácticas empleadas en la escuela/universidad que es necesario invisibilizar: ¿es
necesario actualmente que los estudiantes memoricen conceptos para el examen para que los
olviden poco después, cuando podrían consultarlos en internet? ¿No sería mejor centrarnos en
aprender cómo utilizar esos conocimientos?
“En el modelo rizomático del aprendizaje, el currículo no está impulsado por las entradas
predefinidas de los expertos, sino que se construye y se negocian en tiempo real con los
aportes de quienes participan en el proceso de aprendizaje. Esta comunidad actúa como
un plan de estudios, de manera espontánea para la formación, la construcción, y la
reconstrucción de sí mismo y el objeto de su aprendizaje actúa de la misma manera a
como el rizoma responde a condiciones ambientales cambiantes (y como metáfora del
concepto de red)” (Cormier, 2008: 3)
La única divergencia con la metáfora del rizoma es que, como personas, podemos formar
parte de varias comunidades y por tanto nutrirnos y aportar de manera diferente en cada
una de ellas. Esta propuesta incluye dos términos en los que profundizamos a
continuación, el de aprendizaje en red y el de comunidad.
La red, como hemos señalado, es una de las características de la SI con una importante
influencia en la enseñanza, tal y como hemos explicado. Gracias a las tecnologías de la
comunicación las personas estamos conectadas, al igual que las empresas, que también
están conectadas, tanto entre ellas como con el contenido, con la información. Se crea
así una red en la que cada persona se convierte en un nodo que conecta con otros
nodos, que interacciona. Este concepto de red ha impactado tanto en la sociedad y en
la educación que se propone un nuevo aprendizaje, el aprendizaje en red. En este
modelo, las TIC promueven conexiones que forman redes de aprendizaje, es decir,
conexiones entre alumnos, alumnos y profesores, o alumnos y cualquier otra persona,
ya que el aprendizaje se da tanto en la educación formal como no formal.
Hemos hecho referencia, especialmente en el Tema 1, a los rápidos cambios que se dan
en la SI y cómo este proceso no es ajeno al mercado de trabajo, en el que las
necesidades de formación continua son cada vez mayores. Este aprendizaje continuo es
lo que se conoce como aprendizaje a lo largo de la vida. Pero, al mismo tiempo, también
hemos hecho referencia a cómo el aprendizaje ya no se basa en la relación entre el
profesor, único poseedor del conocimiento y por tanto transmisor de éste, y el alumno,
que ejerce como mero receptor y reproductor de este conocimiento. Sino que diversos
enfoques y teorías han señalado que el aprendizaje se da en todos los espacios y
contextos en los que están las personas, fruto de la interacción.
Entre las diferentes aproximaciones a esta idea tendríamos, entre otros, el aprendizaje
ubicuo. De forma genérica este aprendizaje hace referencia a cómo, en un sistema de
aprendizaje en línea, el individuo puede aprender en todo momento y lugar. Se basa en
la tecnología ubicua, es decir, aquella que permite construir un espacio de aprendizaje
omnipresente (informática cercana a la persona, por ejemplo, un móvil). Es importante
señalar que esta aproximación propone que el aprendizaje se da no solo en cualquier
momento, sino en todo momento, dando importancia tanto al aprendizaje formal, como
al no formal o el informal.
Por otro lado, el aprendizaje flexible persigue proporcionar un aprendizaje cada vez más
personalizado y en este ámbito también han surgido nuevos conceptos. Uno de ellos
sería el modelo de educación disruptiva que, poniendo el acento en la excelencia, rompe
totalmente con el modelo tradicional y jerárquico que enseñanza-aprendizaje y aboga
por entender la enseñanza formal, no formal e informal como parte de un todo y no como
elementos parcelados.
No podemos terminar este capítulo sin hacer referencia a una tendencia muy importante
en la educación y que puede ser un paraguas para incluir algunas de las tecnologías y
pedagogías emergentes citadas anteriormente, esto es, el aprendizaje profundo.
De hecho, el informe anual Horizont establece las tendencias clave que pueden acelerar
la incorporación de las TIC destacando entre las tendencias a largo plazo el avance de
las culturas de innovación y los enfoques de aprendizaje más profundo. A corto plazo
hace referencia a los diseños de aprendizaje híbrido y al aprendizaje colaborativo, que
Todos estos métodos se caracterizan por el papel activo que toma el estudiante y,
aunque empiezan a estar cada día más presentes en la educación, todavía se utilizan
como un complemento. Su impacto positivo está ampliamente estudiado, pero para que
verdaderamente se dé el aprendizaje profundo es preciso que se den 3 componentes
claves (Fullan y Langworthy, 2014):
Uno de los más destacados ha sido el Informe Horizon del consorcio de nuevos medios que
durante dieciséis años, ha proporcionado una construcción del futuro de la tecnología educativa
en educación, basada en una estructura de tres horizontes temporales y describiendo las 6 áreas
de tecnologías emergentes que vaticinaban cuales tendrían mayor impacto en la educación
superior en los 5 años siguientes. Así, por ejemplo, en el año 2016 RH identificaba las siguientes
tendencias:
Pero desafortunadamente este informe no daba una información real de lo que se podía llegar a
realizar en la educación, la tecnología iba, por un lado y las prácticas educativas que realmente
es lo más importante en la educación por otro, en el año 2020 EDUCAUSE adquiere la propiedad
de Horizon Report, cambia sus métodos de análisis, de manera que omite esa predicción en el
tiempo, que realmente con el paso de los años se vio que no era creíble, para centrase con
evidencias en las tendencias de las prácticas que se están llevando a cabo en la educación, de
manera que EDUCAUSE Learning Initiative (ELI) con la colaboración de un grupo de 98 expertos,
identifican las seis tecnologías claves que se llevarán a la práctica en el año en vigor.
Así las seis tecnologías clave que aparecen en 2021 Educause Horizon1 son:
1. Inteligencia artificial.
2. Recursos educativos abiertos.
3. Analítica de aprendizaje.
4. Modelos de cursos combinados e híbridos.
5. Aprendizaje online de calidad.
6. Microcredencialización.
Estas tecnologías clave, salvo el punto 4, se verán en las siguientes unidades.
1
Autores: Kathe Pelletier, Malcolm Brown, D. Christopher Brooks, Mark McCormack, Jamie Reeves, and
Nichole Arbino, with Aras Bozkurt, Steven Crawford, Laura Czerniewicz, Rob Gibson, Katie Linder, Jon
Mason, and Victoria Mondelli, 2021 EDUCAUSE Horizon Report, Teaching and Learning Edition (Boulder,
CO: EDUCAUSE, 2021).
Castells, M. (2010). La sociedad red: una visión global. Madrid: Alianza Editorial
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