[Trabajo lefdo ante la Sociedad Psicvanalitica Briténica
el 20 de junio de 1956}
~"Comenzaré por dos simples referencias al material elinico:
‘Para mi primer andlisis de un nifio, elegi a un delincuente. El
smuchacho aiats con regularidad a ls sesiones durante un aie, hasta
«que 20 puro fin al tratamiento acauea de ls dsturbies
Sirdar Dea goo SES
penosa para ambes, pese en varias
feasiones se escapaba y corer tal
cantidad de agua que inundé el s6ta
‘to, s0 aubié a ly, valiéndose del ‘sutamétic lo puso en
tarcha con el motor en primera, La cliniea orden6 dar por terminado
41 tratamiento para bien de los demas pacientes. E! muchacho fue
nguisto, esta easado y tiene
‘varios hips. No obstante, temo seguir su caso porque podria volver
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‘a comprometerme con wn psicépata; prefiero que la sociedad siga
‘eargando con Ia responsabilidad de su manejo.
cualquier ori
‘caso siguiente demuestra, en cambio, con, qué facilidad
jemes tratar a veces una ia antisoci terapia
es complementaria de una asistencia ambiental especializada.
‘Una emiga me consults con respec al mayor de sus cuatro his
nana i sila
roches sllay Joka mantenfan por breves instantes tna buena relacién
Teciprosa cuando el nifio ya. se habfa azostado; entonces él solia
hrablarle de la luna y las estrellas. Elia. podrie spro
momento.
“Le propuse 1o siguiente: “Digale que usted sake g reba
porque desee o necesite lo ave. roba, sino. orave busca algo a lo que
Bonk derochor est formulando una demanda a.su madre y su padre,
‘pues af sionté deprivado de su amor’. Le aconssjé que usara un
Tenguaje comprensible para el ifio. Sus padres eran mtsicos y yo
‘conocia a le familia 1o bastante bien como para peribir de qué modo
Sohn at habfa convertido hasta cierto punto en un nifo deprivado, pese
fs tener un buen hogar.
‘Tiempo después recibt una carta de mi amiga, comunicdnvdome que
Inabfa seguido mi consejo: “Le die que cuando robaba dinero, comids
J objetne, on realidad queria tener a su reamé. Debo admitir que en
2 erdad no esperaba ser comprendida, pero l parecer me entendi6, Le
Dpregunté si penseba que no lo amabamos porque a veces era muy
ecobedionte; él me contests sin ambages que no secrefa. muy amado,
145,|Pébrecitol No pued> expresarlelo mal que me sent Le dije que nunca
‘nds volviera a dudar de nuestro ue # alguna ver le asaltaba
laduda me lo reeordara y yo se k
mucho tiempo antes de que nec
sacadén tan grande! Se diria que necesita
nies. Por lo tanto, me muestro mucho mas efusiva con él para tratar
deevitar que recaiga en sus dudas. Hasta ahora los robos han cesado
oe completo”.
‘La madre habia conversado con la maestra de Jehn, explicéndo-
Je que et nifio necesitaba ser amado y aprecindo. La macstra accedié
‘a cooperar, pese a que John catusaba muchos problemas en la escuela
‘Transcurridos ya ocho meses, puedo informar que John no ba vuelto
a robar y que sus rslaciones eon la familia han meforado muchisimo.
‘Al considerar este caso debe recordarse qve yo hiakfa conocido muy
bien a la madre ex su adolescencia y, hasta certo punto,
atendido durante uaa fase antisocial. Era la hija mayor de w
nimerosa. Pertenecia a un hogar muy
{mpuesto una diseplina rigida, especi
nila de corta edad. Por consiguiente, mi intervencién actus emo una
able terapia al posilitarle a esa misjer joven Neg
propias dificultades a través dela ayuda qu» pudo
Cuando podemos ayudar a los padres a prestar ayuda a sus hijos. de
Trecho los estamos ayudando a tratar sus blemas.
(En otro trabajo me propongo presentar casos cli
trativos sobre el manejo de los nifios cor. tendencias antisoci
es. Aqui sdlo intento enunciar brevemente en qué se basa
actitud personal ante el problema clinico.)
CNATURALEZA DE TA TENDENCIA ANTISOCIAL ,
.dstico, ni admite una compa-
neurosis y psicosis. Se Ta puede encontrar en un
ermal @ én una persona neurdtica 0
siones en uso en Gran Bretafa:
‘Una criatura se convierte enlftifio deprivada] cuando se Jo
depriva de ciertas caracteristicas esenciales de la vida hoga-
7efia, Emerge hasta cierto punto To que podria lamarse el.
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ontonees. una
onducta-antivocial en el hogar 0 en un més amp
Ta tendencia antisocial el niio puede imponer, con el tiempo |
la neerdad de consicrcioan nse eee
Para nitios inad
Hevarlo ante la justicia como un menor i le. =e
convertido ahora en delincuenie, juedard_ rtad |
si6n social. Si el hogar de ese nitio deja de cumplir alguna
iportante, la ley de Menores de 1948 autoriza al
c Bee ‘Menore: tomarl a su ¢argo y proporcionarle
ta ¥ Prove En lo posible se busearé para él un
logar adoptivo. estas medidas no dan resi
decirse que el joven adulto se ha convertido en.
Ja just Jo envie a. un correccional 0 a
antisocial es _ufia expresiin de
juisito vital para tratar a los nifios
‘ovtendenia ial manifiesta. Una y otra vez vemosedmo
sperdicia o se momento de esperanza a causa
de su'mal manejo o de la intolerencia. Es otro mode deteque el tratamiento adecuado para Ja tenden
es el psicoanalisis, sino el rfanejo_ debemos ir a
‘se momento de esperanza y_estar.a Ia altura ¢
Los especialistas en Ia materia saben desde hace mucho
tiempo que hay u jin directa entre In tendencia anti-
e ha generalizado el recono-
‘entre Ja tendencia antiso-
‘emocional; los easos tipicos se
verdadera deprivacién y no una simple privacién. En otras
‘palabras, el nifio ha perdido alge bueno que, hasta una fecha
determinada, ejercié_un efecto positive sobre su experiencia’
la experiencia vivide, Una definicién completa de
la deprivacién incluye los sucesos tempranos y tardios, el
trauma en sry ef estado
‘Al enunciar la “posicién depresiva” de Klein con mi propia
terminologia, procuré dejar.en claro la estrecha relacién exis-
tente entre el coneepto de Klein y el énfasis puesto por Bowlby
en la deprivacién. Las tres etapas de reaccién clinica que
describe Bowlby con referencia a un nifio de dos afios que es
italizado pueden formularse,tesricamente, en términos de
1. Esta iden parece estar implicita en la monogralla de Bowlby, Maternal
(Care and Mental Health (Los cuidacdos maternosy la salud mental), pag. 47,
‘donde compara gus abservaciones con las de otros investigadores y eugere que
Is it en los resultados se explcen por In diferencin de edad entre los
perdido, Se puéde profandiza
relativa que tendria la muerte
¥ el eontacto de “objetos buenos” co
tenidos dentro de la psique, asi como la madurez 0
del yo en tanto afecte la capacidad de mantener vivo un
recuerdo,
Bowlby necesita la intrinada enunciacién de Klein, cons-
truida en torno a la comprensién de
de Fread y Abraham,? pero también que ¢
lisis necesita tener en cuenta el énfasis puesto por Bowlby en
1a deprivacién, pues sélo asi podra abordar este tépiro especial
de la[tendencia antisocial
Dicha tendencia presenta siempre dos orientaciones, si bien
a veces el acento recae mds en una de el!
estas dos orientaciones: la busqueda de obi in,
2, Véaw el capttolo 15. (N. de los Comps.)
149Gurae>
El robo va asotiado a la mentira y ambos ocupan el centro
de Ta tendencia entisocial. $
“El nifio que roba_un cbjeto no busea el objeto robado, sino
inti zt ne a “hos. Estos derivan
‘madre fue creada
‘madre, sobre la que tiene ciertos
nae ie (desde el panto de vista del nific)
responder a la creatividad pi
irtié en el objeto que el nifio esteba
ii conviene aclarar dos pt
fi fio reclama a la madre valiéndose de un compor-
aaa tee ee TOnn ee earn
conforme a los detall 8 de su estay fo
smocional. A menor fusién cot
ener
tid
sponde una mayor separacién
-agresién, as{ como un mayor
. De esto se infiere que la
EF al eidado toriene del bebé, a madre debe habérsolas
cotstantamenta con eu eapaciiad_de-cautar asta, Por
ample, comin que eI bebé se ore sobre ol regam de le
madré mientras mama. Ylds adelante, este acto aparece com
el robo, la mentira, la
n Jal condactas b
arulleras 0 gue
sontinene yr $n ee
’
150
Arman lies. Aunque eada sinioma pesee un si ido y valor
‘especiicos, el factor comiin en que se basa la intenciin corr we
‘procuro describir Ta tendencia ai ecidad que
tienen los stntomas ds eausar fa:
rio exglota dicha
j, Su_motivacion es
Su_motivacion es
ro no necesariamente en su
‘MIRA SERNA DEA MENA mii
En mi opinién, las primeras seftales de deprivacién son tan
comunes que pasan por normales. Tomemos como ejemplo la
conducta imperi iio, que la mayoria de les padres
afrontan con una mezcla de sumisién y reac-ién. No ee sing. «
nimo de omnipotencia infantil, por cuanto ésta es una cuest
isocial muy comiin, estrecha- i
a_inhi tito. S: estudiamos la
icontraremes el coraplejo de deprivac
Palabras, si_un bebé
madre a proveer lo necesariv para satisfacer Ta voracidad
del bebé explica el éxito i
‘que el bebé le hace a la madre
sea, cuando aperas empieza a
fencia independiente y acenta por
veces que una madre debe
necesidades de su bebé. Me
1 yo. Una madre
wr en cuanto a la
satisfaccién de las demandas ins hij
canzar un éxitoy esté en edad de mantener esta introyeccién, pe- | en su tarea injeial de amor primario, que es la més delicada.
las del ambiente actual en To que atatie al soporte Suna mare bac esta trai como ui formasén reactive
| ganernda porous propos eompeos dass. qu es demasiado
Siglieas Sal GEE Gey alin: Bete orertn won dor
‘buenos resultados en tanto la madre sea capaz de practicarla
‘que perel Fa Tos réclames del nifio,
de complacer su voracidad eompulsiva. Quiz comprometa no
ala madre, sino tambi fa
Desde el punto de
fronteriza entre la_terapis
tivo (pre-compasivo) no es idéntico
En el proceso de desarrollo de!
ién de la madre. Esta fracasa
“un alto grado de
es eet: inducir a su madre a
wy ‘que le cure esta subdeprivacién atendiendo a su voracidad, su
tendencia a hacer barullo y armar lies, y demés si
eprivagién. La voracidad del nifio forma parte di
‘compulsiva de una cura que provenga de Ja misma persona (la
pe Bade ‘madre) que causé su deprivacién, Es
Yprecursora_del robo; 1a madre puede atenderla y ura
mediante su adaptacién teray ente confun
‘con Ta indulgencia excesiva. Debemos seflalar, sin embargo,
sue Ta-astidn de Ta madre —sea cual fuere— no anula su falla
del infante, aplicando. andoastna ec lerapia contra antisocial
leo de deprivacifn, cereana a su punto de ori
eura al bebé porque le permite expresar su
ella, la terapeuta, es en verdad Ja madre
Ja efjuresis (una afeccién muy comin)
regresién_en el momento del suetio,
Jamar ¢l derecho @ orinai
do. qaieee saab teers ani
comprar algo, una manifest
social que encontramos en ni
1a, que no pertenece a las defensas
del paciente, sino a una tendencia ant
yrapia materna
icin de la madre a atender los reclamos derivad
causar fastidio. La feraj
‘noes amor maternal
4 Jos iis o adelescentes para sus gastos personales, absorben
‘tendencia antisocial normalmente
pia, una segunda oportanidad que
madres, pues no siempre se puede esperar que tengan éxito
centripeto implici
152En circunstancias favorables —o sea, cuando no hay un
exceso de locura, compulsién inconsciente, organizacién para-
—— noide, ete.— es
Deseo sefalar un punta on especi
dendia antisocial hay una buena experi
perdido. Bl bebé ha adquirido la capacidad de
7 causa del desasire radia en wna falle am! es
wig caracfertstiea fundamental de la tendencia a
Bl sonocimiento correcto de que ‘a dé Sannee
cbedece @ una causa ex:erna, y NO Hawai ae
én do Ia personalidad y el affn de aeee ae
isin ambiental. El grate, de Meza. ae Jos celade el nal esperializado
n posibilita hace que un albergue guian a un nifioa travésde todas estos procesos,
‘vez de una enferme- Lucen una terapia sin duda comparable al trabajo analitico,
fedtca. Los nifics presentan muchas compuliiones Por lo comtin, los padres llevan a cabo esta tarea completa
dad te g"ons padces Togran tralar_con éxito en sus cen_uno de sus hijos. No obstante, muchos progenitares per
a saa Bmpeo, ls nlios atisocales preionan fectamente capaces de riar y educar anifios normales fracasan
emonte para obtener esta cura mediante una provi- ein _el hijo que manifiesta una tendencia antisocial.
constantemente para | sees de aprovecharla. Wichas En esta enuneiacién he omitido adrede las referencias a la
rdacién entre le tendencia antisocial y:
La actuacién (acting out].
La masturbacién.
El supery6 patolégico:
que inales y agres nuit 2
oe rag. Ba el momento de eaperanza el nita hase Las tapas dl desaro
fimiente inconsciente de culpa.
linal,
a la preocupacién,
Los vineulos de la sintomatologia con el sexo.
p aery que |a incompasién esté a convertirse en Co 70)
Thor consiguiente, ogila el ambiente que lo rodea, en.» i ino es el tratamiento indi
ae ta el ambien no es el tratamiento indicado para
Rt ane eee se alerta frente al pe método terapéutico adecuado con-
fetin cuidado que él pueda redescubrir
prueba una y ota Ve ‘poner a prueba, y dentro del cual pueda volver a e)
jente inmediato de soportar la agre- tar con Jos impul
y
‘Buscado y encontrado.