PSICOTERAPIA FAMILIAR

Terapeuta: Bien, ¿están cómodos?

Hijo: Cómodos no, yo no iba venir

Terapeuta: Elena, ¿tú estás cómoda?

Hija: Si gracias

Terapeuta: Bueno en esta terapia pensamos que era importante que la familia entera pueda estar
presente para que este espacio, sea el espacio donde puedan decirse las cosas que no puedan
decirse o no encuentran la manera de decirse fuera de aquí y este puede ser un espacio para
poder compartir las problemáticas que tienen. ¿Quién quiere empezar?

Hijo: Bueno yo empiezo, yo no creo mucho en esto, con todo respeto, nunca hice esto, pero si se
trata de hablar hay que hablar o si se trata de hablar, voy a tratar. A mi me mintieron, con algo
muy importante, a lo mejor con lo más importante con que se puede mentir a alguien, y yo soy
una persona que a lo mejor tiene muchas cosas que a ustedes no les convenzan pero yo siempre
fui sincero con ustedes y era como yo creía que ellos estaban siendo sinceros conmigo y me pasa
que ahora no les creo que con todo esto que pasó no les creo nada, entonces si hay algo que
podría decir o pedir, que empiecen a ser honestos con nosotros.

Padre: Entiendo lo que sientes, pero, lo que estas pidiendo está pasando, justamente porque
estamos sincerando una situación y algo que estaba en la oscuridad se hace luz es que estamos
aquí, entiendo muy bien lo que sientes, pero por otro lado te quiero decir que lo que estas
pidiendo está pasando hijo.

Terapeuta: ¿Elena?

Hija: Si es para hablar, se puede decir muchas cosas, no sé si realmente estamos diciendo algo, ya
sabemos que mi papá se fue de la casa y es un hecho que nosotros vivimos juntos sin saber lo que
al otro le pasa, no se más decir, son hechos, pero que se dice con todo eso, yo no sé muy bien que
se dice y a lo mejor parte de eso tiene que ver con ellos.