Cada 15 de septiembre, los mexicanos repiten el famoso Grito con el que se inició la Independencia de México. Pero hay algunas precisiones que hacer: Miguel Hidalgo y Costilla dio el grito alrededor de las 2:00 horas de la madrugada del 16 de septiembre de 1810, y antes pronunció fuertes "¡vivas!" a la Virgen de Guadalupe, a la religión católica y al rey Fernando VII. Y también algunos "¡mueras!" al mal gobierno. 2. El mito de la Revolución Siempre se dijo que el pueblo mexicano "como un solo hombre" se levantó en armas contra Porfirio Díaz y contra Victoriano Huerta. Esta afirmación es falsa. La Revolución mexicana fue la suma de distintas rebeliones. Y el periodo más violento fue cuando los revolucionarios se enfrentaron entre sí. Los supuestos héroes que se decía que lucharon juntos y unidos, terminaron asesinándose unos a otros. 3. ¿Zapata era un pobre campesino? Aunque la historia oficial ha presentado a Emiliano Zapata como un indio pobre que se levantó en armas, lo cierto es que era un pequeño propietario, dueño de un pedazo de tierra para cultivar. Tenía sus buenos caballos e incluso, en una ocasión, los ingresos que ganó por una buena cosecha de sandías los empleó para comprarse una botonadura de plata para su traje charro. Le gustaba la comida francesa y el buen coñac. 4. Pancho Villa ¿bandido o luchador social? En la figura de Francisco Villa se funden realidad y leyenda: desde un Robin Hood a la mexicana, hasta un bárbaro incontenible o un genial estratega. Su revolución fue más allá del bandolerismo. Aunque inculto (aprendió a leer muy tarde), era un hombre simple que conocía bien las miserias de la gente del campo. Creía en el poder redentor de la educación. Fue leal con sus hombres y actuó acorde con sus ideales. Ah... y también derramó mucha sangre sin el menor remordimiento... 5. El Niño Héroe que nunca existió Siempre se dijo que los niños héroes eran seis y que uno de ellos se arrojó envuelto en la bandera desde lo alto del Castillo de Chapultepec. Pero la realidad es otra. Si bien seis de ellos murieron el 13 de septiembre de 1847 y ninguno se aventó, más de 50 cadetes también participaron en la defensa contra el ejército norteamericano, uno de ellos, Miguel Miramón, cayó herido en la defensa de la patria.