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Los órganos de los sentidos son los encargados de hacernos ver, escuchar, olfatear, saborear y tener sensibilidad
táctil.
Cada órgano está asociado a un sentido:
Los ojos están asociados al sentido de la vista (la visión).
Los oídos están asociados al sentido del oído (la audición).
La nariz está asociada al sentido del olfato.
La lengua está asociada al sentido del gusto.
La piel está asociada al sentido del tacto.
Labios menores: dos pliegues que protegen la entrada de la vagina y la uretra. En ellos hay glándulas que
hacen que se mantengan húmedos.
Labios mayores: dos pliegues cubiertos de vello que protegen a los labios menores.
Clítoris: se encuentra en el punto de unión de los dos labios menores. Tiene una función sexual, y es
extremadamente sensible debido al gran número de terminaciones nerviosas que posee.
Orificio uretral: se encuentra en la zona genital, aunque su función no es sexual. Es una abertura muy pequeña
por la que expulsamos la orina al exterior.
Orificio vaginal: Se sitúa un poco más abajo del orificio uretral. Es la entrada a la vagina y se encuentra
parcialmente cubierta por el himen.
Himen: una membrana delgada y muy flexible que dispone de una abertura para expulsar el flujo vaginal y
menstrual.
Órganos Internos
Vagina: Conecta el exterior del cuerpo con el útero o matriz. Sus músculos poseen una gran elasticidad y su
interior es húmedo gracias al flujo vaginal, que evita las infecciones y hace las veces de lubricante. Durante los
primeros años de la vida, la vulva tiene un aspecto infantil; pero con el inicio de la secreción de estrógenos por
parte del ovario durante la pubertad, empieza a adquirir un aspecto característico: aumentan de volumen los
labios mayores y los menores, se incrementa el tamaño del himen y comienza a aparecer el flujo vaginal.
Posteriormente, los labios vulvares aumentarán aún más de volumen. Asimismo va apareciendo vello por encima
de los labios mayores y del pubis.
Cérvix o cuello del útero: Es una abertura muy pequeña, como la cabeza de un alfiler, que une el útero con la
vagina. Por el cérvix sale la menstruación al exterior.
Endometrio: Es una membrana que recubre el interior del útero y en la que se implanta el óvulo fecundado. Si no
se produce fecundación, esta membrana se expulsa junto con una pequeña cantidad de sangre y se renueva
cada mes. Entonces es cuando tienes la regla.
Útero o matriz: es un órgano muscular hueco con forma de pera que alberga al feto cuando estás embarazada,
por lo que sus paredes son muy elásticas. La parte que lo recubre por dentro es el endometrio, un tejido rico en
terminaciones sanguíneas.
Trompas de Falopio: son dos conductos que unen los ovarios con el útero. Por ellos baja el óvulo a la matriz
durante la menstruación, como te explicamos en otro apartado, y en ellos es donde, por regla general, se produce
la fecundación cuando se juntan el óvulo y los espermatozoides.
Ovarios: son dos pequeños órganos del tamaño de una almendra. En ellos maduran los óvulos y se generan
hormonas sexuales, los estrógenos y la progesterona. Una chica ya nace con unos 250.000 óvulos, que en la
pubertad empiezan a madurar.