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TRABAJO DECENTE Y CRECIMIENTO ECONÓMICO: POR QUÉ ES IMPORTANTE

¿Cuál es el objetivo en este caso?

Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y


productivo y el trabajo decente para todos.

¿Por qué?
La erradicación de la pobreza solo es posible mediante empleos estables y bien
remunerados. Casi 2.200 millones de personas viven por debajo del umbral de pobreza de
2 dólares de los Estados Unidos.

La COVID-19 ha alterado miles de millones de vidas y ha puesto en peligro la economía


mundial. El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé una recesión mundial tan mala o
peor que la de 2009. A medida que se identifica la pérdida de empleo, la Organización
Internacional del Trabajo estima que cerca de la mitad de todos los trabajadores a nivel
mundial se encuentra en riesgo de perder sus medios de subsistencia.
Incluso antes del brote de la COVID-19, era probable que uno de cada cinco países (en
donde habitan miles de millones de personas que viven en situación de pobreza) vieran
sus ingresos per cápita estancarse o reducirse en 2020. A día de hoy, las Situaciones
económicas y financieras derivadas de la COVID-19 (como las alteraciones en la
producción industrial, la caída de los precios de los productos básicos, la volatilidad del
mercado financiero y el aumento de la inseguridad) están desbaratando el ya de por sí
tibio crecimiento económico y empeorando los riesgos acentuados de otros factores.
La pandemia de la COVID-19 ha provocado una recesión histórica con niveles récord de
carencias y desempleo, lo que ha creado una crisis humanitaria sin precedentes cuyas
peores consecuencias las están sufriendo los más pobres.

En abril de 2020, las Naciones Unidas elaboraron un marco para la respuesta


socioeconómica inmediata a la COVID-19 como hoja de ruta para apoyar a los países en su
camino hacia la recuperación social y económica. Este marco apela a reforzar de manera
extraordinaria la ayuda internacional y el compromiso político con el objetivo de
garantizar que las personas de todo el mundo tengan acceso a los servicios esenciales y a
la protección social. El marco de respuesta socioeconómica consta de cinco líneas de
trabajo:

Garantizar que los servicios de salud esenciales sigan estando disponibles y proteger los
sistemas sanitarios.

Ayudar a las personas a lidiar con la adversidad mediante la protección social y servicios
básicos.

Proteger empleos y apoyar a pequeñas y medianas empresas, y a los trabajadores del


sector informal, mediante programas de respuesta y recuperación económicas.
Orientar el aumento necesario de estímulos fiscales y financieros para que las políticas
macroeconómicas funcionen en favor de los más vulnerables y reforzar las respuestas
multilaterales y regionales.

Promover la cohesión social e invertir en sistemas de respuesta y resiliencia impulsados


por las comunidades.

Estas cinco líneas de trabajo están conectadas por un sólido imperativo de sostenibilidad
medioambiental y de igualdad de género para una mejor reconstrucción.

El Secretario General de las Naciones Unidas ha enfatizado que la recuperación de la crisis


de la COVID-19 debe conducir a una economía diferente.

Más allá de la respuesta inmediata a la crisis, la pandemia debería ser el impulso para
mantener los logros conseguidos y acelerar la implementación de medidas pendientes
desde hace mucho tiempo con el fin de encauzar al mundo hacia un camino de desarrollo
más sostenible y hacer que la economía mundial se adapte a futuras modificaciones.

¿Cuántas personas están en situación de desempleo?

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la cifra de desempleados asciende


en 2015 a más de 204 millones.

desempleo mundial aumentó de 170 millones de personas en 2007 a casi 202 millones de
personas en 2012, de los cuales, unos 75 millones son mujeres y hombres jóvenes

La estadística muestra el número de personas desempleadas en todo el mundo desde


2009 hasta 2019, así como una serie de previsiones hasta 2021. La cifra de desempleados
se mantuvo por encima de los 180 millones durante todo el periodo, registrando su valor
más bajo en 2018, con un total de 185,5 millones. Por su parte, 2019 concluyó con un
total de 187,7 millones de personas sin trabajo, lo cual supone un incremento en
aproximadamente 2 millones con respecto al año previo

¿Cuántos empleos son necesarios?

A nivel mundial, el número de empleos necesarios entre 2016 y 2030, simplemente para
que las personas que acceden al mercado de trabajo mantengan el ritmo de crecimiento
de la población mundial en edad laboral, asciende a 470 millones. Esta cifra representa
unos 30 millones de empleos al año.
Así pues, si todas estas personas consiguieran un empleo, ¿se erradicaría la pobreza
extrema?

Además de crear empleos, también tenemos que mejorar las condiciones de unos 780
millones de mujeres y hombres que trabajan, pero no ganan lo suficiente para que ellos y
sus familias puedan salir de la pobreza. También es importante que todas las mujeres y los
hombres tengan las mismas oportunidades en el lugar de trabajo. Los gobiernos pueden
trabajar para construir economías dinámicas, sostenibles, innovadoras y centradas en las
personas, promoviendo en particular el empleo de los jóvenes y el empoderamiento
económico de las mujeres, así como el trabajo decente para todos. La continua falta de
oportunidades de trabajo decente, la insuficiencia de las inversiones y el bajo consumo
erosionan el contrato social básico subyacente en las sociedades democráticas: que todos
debemos beneficiarnos del progreso. Las autoridades y las comunidades locales pueden
renovar y planificar sus ciudades y asentamientos humanos con miras a fomentar la
cohesión comunitaria y la seguridad de las personas y estimular la innovación y el empleo.
Además, las mujeres y las niñas deben tener igual acceso y las mismas oportunidades que
los hombres y los niños en el empleo.

Yo tengo un empleo. ¿Por qué debo preocuparme?

Toda la sociedad sale beneficiada cuantas más personas sean productivas y contribuyan al
crecimiento de su país. El empleo productivo y el trabajo decente son elementos clave
para lograr una globalización justa y la reducción de la pobreza. Además, si no se
soluciona, el desempleo puede dar lugar a disturbios y perturbar la paz.

¿Qué podemos hacer para solucionar estos problemas?

Ofrecer a los jóvenes la mejor oportunidad de transición a un empleo decente requiere


invertir en educación y formación de la mayor calidad posible, dotar a los jóvenes de las
aptitudes que se ajusten a las demandas del mercado de trabajo, darles acceso a la
protección social y los servicios básicos independientemente de su tipo de contrato, y
garantizar la igualdad de condiciones para que todos los jóvenes aspirantes puedan lograr
un empleo productivo sin tener en cuenta su género, su nivel de ingresos o sus
antecedentes socio-económicos

Los gobiernos pueden trabajar para construir economías dinámicas, sostenibles,


innovadoras y centradas en las personas, promoviendo en particular el empleo de los
jóvenes y el empoderamiento económico de las mujeres, así como el trabajo decente para
todos

Las autoridades y las comunidades locales pueden renovar y planificar sus ciudades y
asentamientos humanos con miras a fomentar la cohesión comunitaria y la seguridad de
las personas y estimular la innovación y el empleo
¿Qué se entiende por “trabajo decente”?

El trabajo decente implica que todas las personas tengan oportunidades para realizar una
actividad productiva que aporte un ingreso justo, seguridad en el lugar de trabajo y
protección social para las familias; que ofrezca mejores perspectivas de desarrollo
personal y favorezca la integración social.

Objetivos
.1  Mantener el crecimiento económico per capita de conformidad con las circunstancias
nacionales y, en particular, un crecimiento del producto interno bruto de al menos el 7%
anual en los países menos adelantados

8.2  Lograr niveles más elevados de productividad económica mediante la diversificación,


la modernización tecnológica y la innovación, entre otras cosas centrándose en los
sectores con gran valor añadido y un uso intensivo de la mano de obra

8.3  Promover políticas orientadas al desarrollo que apoyen las actividades productivas, la


creación de puestos de trabajo decentes, el emprendimiento, la creatividad y la
innovación, y fomentar la formalización y el crecimiento de las microempresas y las
pequeñas y medianas empresas, incluso mediante el acceso a servicios financieros

8.4 Mejorar progresivamente, de aquí a 2030, la producción y el consumo eficientes de los


recursos mundiales y procurar desvincular el crecimiento económico de la degradación del
medio ambiente, conforme al Marco Decenal de Programas sobre modalidades de
Consumo y Producción Sostenibles, empezando por los países desarrollados

8.5  De aquí a 2030, lograr el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todas
las mujeres y los hombres, incluidos los jóvenes y las personas con discapacidad, así como
la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor

8.6  De aquí a 2020, reducir considerablemente la proporción de jóvenes que no están


empleados y no cursan estudios ni reciben capacitación

8.7  Adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a
las formas contemporáneas de esclavitud y la trata de personas y asegurar la prohibición y
eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la
utilización de niños soldados, y, de aquí a 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus
formas
8.8  Proteger los derechos laborales y promover un entorno de trabajo seguro y sin riesgos
para todos los trabajadores, incluidos los trabajadores migrantes, en particular las mujeres
migrantes y las personas con empleos precarios

8.9  De aquí a 2030, elaborar y poner en práctica políticas encaminadas a promover un


turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos
locales

8.10  Fortalecer la capacidad de las instituciones financieras nacionales para fomentar y


ampliar el acceso a los servicios bancarios, financieros y de seguros para todos

8.a  Aumentar el apoyo a la iniciativa de ayuda para el comercio en los países en


desarrollo, en particular los países menos adelantados, incluso mediante el Marco
Integrado Mejorado para la Asistencia Técnica a los Países Menos Adelantados en Materia
de Comercio

8.b  De aquí a 2020, desarrollar y poner en marcha una estrategia mundial para el empleo
de los jóvenes y aplicar el Pacto Mundial para el Empleo de la Organización Internacional
del Trabajo

Datos destacables

En  2017, la tasa de mundial de desempleo se situaba en el 5,6%, frente al 6,4% del año
2000.

En todo el mundo, en 2016 el 61% de los trabajadores tenía un empleo no regulado.


Exceptuando el sector agrícola, el 51% de todos los trabajadores se incluyeron en esta
categoría de empleo.

Los hombres ganan 12,5% más que las mujeres en 40 de los 45 países de los que se tienen
datos.

La brecha salarial de género en todo el mundo se sitúa en el 23% y, si no se toman


medidas, se necesitarán otros 68 años para lograr la igualdad salarial. La tasa de
participación de la mujer en la población activa es del 63%, mientras que la de los
hombres es del 94%.

A pesar de su creciente presencia en la vida pública, las mujeres se siguen haciendo cargo
2,6 veces más del cuidado de personas no remunerado y del trabajo doméstico que los
hombres.

Entre 2016 y 2030, se necesitan 470 millones de puestos de trabajo en todo el mundo
para aquellos que van a acceder por vez primera al mercado laboral.
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/wp-content/uploads/sites/
3/2016/10/10_Spanish_Why_it_Matters.pdf

datos destacables
En 2016, más del 64,4% de los productos que los los países en desarrollo exportaban a los
mercados mundiales se encontraron con aranceles nulos, un aumento del 20% desde
2010.

La evidencia de los países en desarrollo muestra que los niños en el 20 por ciento más
pobre de la población tienen hasta tres veces más probabilidades de morir antes de
cumplir cinco años que los niños en los quintiles más ricos.

La protección social se ha extendido significativamente en todo el mundo. Sin embargo,


las personas con discapacidad tienen hasta cinco veces más probabilidades de enfrentarse
a gastos de salud calificados de catastróficos.

pesar de la disminución general de la mortalidad materna, en la mayoría de los países en


desarrollo las mujeres de las zonas rurales tienen hasta tres veces más probabilidades de
morir durante el parto que las mujeres que viven en centros urbanos.

el 30% de la desigualdad de ingresos se debe a la desigualdad dentro de los propios


hogares, incluso entre mujeres y hombres. Además, las mujeres tienen más
probabilidades que los hombres de vivir por debajo del 50% del ingreso medio.
Objetivos

De aquí a 2030, lograr progresivamente y mantener el crecimiento de los ingresos del 40%
más pobre de la población a una tasa superior a la media nacional

Objetivos

10.2 De aquí a 2030, potenciar y promover la inclusión social, económica y política de


todas las personas, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia,
origen, religión o situación económica u otra condición
10.3 Garantizar la igualdad de oportunidades y reducir la desigualdad de resultados,
incluso eliminando las leyes, políticas y prácticas discriminatorias y promoviendo
legislaciones, políticas y medidas adecuadas a ese respecto
10.4 Adoptar políticas, especialmente fiscales, salariales y de protección social, y lograr
progresivamente una mayor igualdad
10.5 Mejorar la reglamentación y vigilancia de las instituciones y los mercados financieros
mundiales y fortalecer la aplicación de esos reglamentos
10.6 Asegurar una mayor representación e intervención de los países en desarrollo en las
decisiones adoptadas por las instituciones económicas y financieras internacionales para
aumentar la eficacia, fiabilidad, rendición de cuentas y legitimidad de esas instituciones
10.7 Facilitar la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de
las personas, incluso mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien
gestionadas
10.a Aplicar el principio del trato especial y diferenciado para los países en desarrollo, en
particular los países menos adelantados, de conformidad con los acuerdos de la
Organización Mundial del Comercio
10.b Fomentar la asistencia oficial para el desarrollo y las corrientes financieras, incluida la
inversión extranjera directa, para los Estados con mayores necesidades, en particular los
países menos adelantados, los países africanos, los pequeños Estados insulares en
desarrollo y los países en desarrollo sin litoral, en consonancia con sus planes y programas
nacionales

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