No sé tu nombre Porque no has nacido No sabré tu nombre nunca Pero sabrás el mío Serás morena y alta, Y buena como tu padre. Serás morena y alta, Y esbelta como tu madre Mas de él heredarás el viento Que lo trajo a mí una tarde A él lo amarás como yo lo amo Y le darás tu alma, y todo, Incondicionalmente Tal vez, sólo tal vez, Él descubra en tus ojos Cierto brillo, cierta tarde Cuando el sol esté cayendo entre los árboles Un cierto destello que le recuerde a mí Un perdido atardecer En Buenos Aires, Hace tanto tiempo, hace Tantas lágrimas... Tal vez niña hermosa Que aún no has nacido Por la fuerza de este amor Heredes algo de mí, el anhelo De volver a verlo... A tu abuelo Niña de los ojos negros.