La investigación de operaciones es la aplicación organizada de la ciencia moderna,
las matemáticas y las técnicas informáticas a los complejos problemas militares, gubernamentales, comerciales o industriales que surgen en la dirección y gestión de grandes sistemas de hombres, materiales, dinero y maquinas. El propósito de la investigación de las operaciones es dar a la empresa una comprensión y evaluación cuantitativa explicita de situaciones complejas y tener una base más solida para tomar las mejores decisiones. La investigación operativa busca el estado óptimo en todos los ámbitos y, por lo tanto, proporciona una solución óptima a los problemas organizativos. También se dice que tiene un valor considerable en la gestión de la producción. La investigación de operaciones emplea lógica matemática para problemas complejos que requieren decisiones administrativas. La investigación de operaciones ayuda a resolver diversos problemas comerciales y a planificar e investigar las principales decisiones operativas. Se dice que históricamente el origen de la investigación de Operaciones se dio durante la segunda guerra mundial cuando las fuerzas Armadas de EE.UU. y gran Bretaña buscaron la ayuda de científicos para resolver problemas estratégicos y tácticos complejos y muy difíciles de la guerra, como hacer que las minas sean inofensivas o aumentar la eficiencia de la guerra aérea antisubmarina, etc. A principios de 1941, se descubrió que tal Investigación Operativa tenía valor para la toma de decisiones militares ordinarias. A mediados de la década de 1950 cuando la investigación de operaciones asumió el manto de una profesión comenzó a adoptar en su metodología una variedad de métodos matemáticos emergentes como, por ejemplo: la programación lineal, la teoría de inventarios, la teoría de búsqueda y la teoría de colas.