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Algunos textos bíblicos para tu Oración personal.

Procura, durante estos días, orar con alguno de estos textos. Al rezar con ellos puedes
preguntarte:
¿Con qué personaje me siento identificado? Con Gedeón

¿Por qué? Así como Gedeón sintió por un momento, como si Dios no estaba con él por
todas las tribulaciones y no veía milagros para confortar su alma, al igual por un
momento de mi vida me siento como Gedeón, con la fe hasta abajo esperando
comprender los caminos de Dios en mi vida

¿Qué desearía decirle al Señor a partir de ellos? Que me está costando mucho entender
su voluntad en mi vida, que me falta fe como cada uno de los profetas que lo dieron
todo, principalmente mamita María que no se quebrantó en los momentos difíciles, que
dijo: hágase en mí según tu palabra. Reconozco que a veces siento firmeza en decir esas
palabras, pero, cuando experimento tristezas entonces es ahí donde cuestiono y me
cuesta comprender los caminos de Dios.

¿Con qué momentos de mi historia personal se relacionan? En mi situación laboral y


amorosa

¿Qué me dicen hoy? Que por muy inalcanzable que parezcan las cosas tengo que creer,
aún cuando no lo comprenda y clamar a Dios para escuchar su voz en mi vida, perseverar
ferviente en mis oraciones.

La vocación de Abraham Gen. 12,1-9:“Deja tu tierra y ven al lugar que te mostraré”


La vocación de Moisés Ex 3,1-22:“He visto cómo sufre mi pueblo”
La vocación de Gedeón Jue 6,11-16:“El Señor está contigo, hombre valiente”
La vocación de Amós Am 7,10-17:“El Señor me sacó de detrás de las ovejas”
La vocación de Isaías Is 6,11-13:“Aquí estoy, envíame a mí”
La vocación de Jeremías Jer 1,4-10; 20,1-18: “Tu palabra es fuego en mi interior”
La vocación de Ezequiel Ez 3,1-21: “No les tengas miedo”
La vocación de Samuel 1 Sam 3,1-21: “Habla Señor, que tu siervo escucha”
La vocación de Josué Jos 1,1-9:“Ten mucho valor y firmeza”
La vocación de 5 discípulos Jn 1,35-51: “Hemos encontrado al Mesías”
La vocación de los doce Mc. 3,13-19: “Llamó a los que Él quiso”
La vocación de Mateo Mt. 9, 9-13: “No vine a llamar a los buenos sino a los pecadores”
La vocación de María Lc. 1, 26-38: “Que Dios haga conmigo como me has dicho”
La vocación de Pablo Hechos 22,3-23,1: “Tú serás testigo suyo ante todo el mundo”
Una vocación frustrada Lc. 18, 18-30: “Se puso triste porque era muy rico...”
Los desafíos del maestro Lc. 9, 57-62“Tú, sígueme...”

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