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Sumeria
- Cartas de Crédito
- Cuentas Sintéticas
- Cuentas Recapitulativas
También vale la pena mencionar que este período contó con los servicios de una
muy eficiente institución bancaria que, además de desempeñar la tarea de
recaudador fiscal, cumplía funciones bancarias en el sentido moderno de la
palabra. Los banqueros llevaban al día sus libros de ingresos, divididos en
ingresos y pagos, registrados día por día y con una especie de auditoría mensual.
Las cuentas de los templos. A partir de los textos encontrados, se puede deducir
que la gestión financiera de los templos se recogía en cuentas de diferentes
clases, los archivos de Soknopaios, de Tentunis.
Los banqueros debían llevar al día un libro de sus ingresos y de sus gastos. Estos
libros recibían el nombre de efemérides y se dividían en dos grandes secciones: la
primera referida a ingresos y la segunda a los pagos. Cada día se registraban
todos los pagarés y recibos expedidos; al final del mes el banquero rendía cuenta
a un funcionario llamado Eklogista.
La Contabilidad en Gracia
La historia de Grecia data desde el primer milenio a. C., y para el período micénico
existen documentos que muestran el papel de los templos como centro de
actividades de finanzas al igual que sucedía en las civilizaciones Sumeria y
Egipcia. También en Micenas los templos demostraron verdadera calificación y
capacidad para administrar las operaciones de compañías comerciales. Es en la
civilización Griega donde encontramos el origen del método científico.
Los templos desempeñaban la función de centros de las finanzas- Situación que
cambia hacia el siglo IV a.C., cuando se conforma un gremio de funcionarios
conocidos como el Cuerpo de tesoros. Este gremio propició un método de cuentas
cronológico con certificaciones detalladas de gastos, ingresos, contribuciones, etc.
Es también la época en la que aparecen los primeros bancos privados. En el siglo
VIII a.C.
Se cree que hasta ese momento tan sólo se empleaba para la contabilidad, como
parece demostrarlo las tablillas que se han descubierto en los palacios de Knosos
y Mecenas, pero adquirió la forma escrita que se ha mantenido hasta nuestros
días cuando los griegos adoptaron el alfabeto fenicio y lo ajustaron a sus propias
necesidades.
En el año 454 a.C., el tesoro federal fue transportado a Atenas, con cuyo motivo
se instauró una administración financiera totalmente seglar al servicio del Estado.
No obstante, los templos continuaron siendo verdaderas reservas de capitales; no
solo tenían su propio tesoro, sino que el Estado y los particulares los utilizaban
como bancos de depósito, e incluso a partir de entonces se transformaban
también en bancos de crédito, tanto público como privado.
La contabilidad de los bancos privados. Hacia el siglo V a.C., comenzamos a
asistir a la especialización del comercio con dinero. Es el momento cuando los
primeros bancos privados se establecen junto a los bancos de los templos. A los
banqueros se les conocía con el nombre de traperitas, estos funcionarios
desempeñaron un papel muy importante. Alcanzaron a conocer muchos de los
elementos de la técnica financiera moderna incluida la contabilidad bancaria.
Existen fuentes epigráficas y literarias que nos permiten formarnos una idea de la
técnica en Atenas. Se usaban corrientemente dos libros de contabilidad: las
efemérides o diarios, y los trapedzitica grammata o libros de las cuentas. Es
interesante saber que los giegos, al igual que sus contemporáneos los romanos,
tuvieron desde sus inicios una importante organización, administrativa, comercial,
financiera y por tanto contable.
La contabilidad en Roma
En esta ley se admitió la comprobación del nexum, escrita por el acreedor con el
consentimiento del deudor en el codex. El nexum tenía como origen el préstamo
de dinero; según la Ley paetelia papiria, bastaba la inscripción del nombre del
deudor en el codex del acreedor, con el consentimiento del primero, y la mención
de la cantidad debida para crear la obligación a favor del acreedor.
En efecto, desde los primeros siglos de Roma, todo jefe de familia tenia cuidado
de escribir día a día en una especie de libro borrador, llamado adversaria, sus
ingresos y sus gastos; y en la cual se realizaban asientos referentes al arca (caja).
Posteriormente se procedió a transcribirlos todos los meses a un registro llevado
con más cuidado y que era el único que se conservaba: era el Codex o tubulae,
código o libro de ingresos y gastos de los romanos. En este libro se asentaba el
importe, la clase y la fecha de todas las transacciones, que primeramente se
habían apuntado de manera sumaria en el adversaria. El codex de los romanos,
comprendía una doble serie de anotaciones; a un costado se anotaban los
ingresos acceptum y en el opuesto los gastos expensum. El Codex accepti et
expensi reproducía así fielmente el estado de caja, arca. Todo lo que
consideramos egresos figuraban en el expensum y lo que consideramos ingresos
en el accpetum. Era este un libro de deudores y acreedores.
Además del codex cada banquero llevaba un diario especial, o libro de cuentas
con un aparte designado para cada cliente. Incluso estaban obligados los
financieros a dar cierta publicidad a sus documentos contables, ofrecían a sus
clientes “extractos de cuenta”. El codex de los romanos, todavía usado en tiempos
del emperador Justiniano en el siglo VI, tenía un valor probatorio -legal- superior al
de nuestros libros de contabilidad actuales, puesto que toda anotación hecha con
consentimiento del deudor se consideraba como causa de obligación.
La Edad Media comprende un periodo de casi mil años, cuyo comienzo se asocia
con la caída del Imperio Romano, aproximadamente en el año 476, y su final se
ubica con el Renacimiento, el descubrimiento de América, la caída de
Constantinopla en manos de los turcos –y con ello el final del Imperio Bizantino- y
la conformación de los modernos estados europeos, hechos acontecidos hacia
fines del Siglo XV.
Las cruzadas
El desarrollo mercantil, favorecido con las cruzadas produce los documentos que
permiten seguir la trama de la técnica contable. No hay que olvidar que las
operaciones con base en valutas o letras de cambio era cosa corriente, debido
particularmente al peligro de transporte de dinero; así mismo, eran comunes las
reuniones que los comerciantes sostenían en las ferias donde realizaban
intercambio de títulos a manera de Cámara de Compensación, de manera que las
operaciones de crédito requerían un sistema de cuenta corriente efectivo y ágil,
mismo que, combinado con asientos cruzados con la caja, facilitaba enormemente
la determinación rápida de situaciones financieras.
La utilización de la caja, no duro muchos años a pesar de que en el presente se
mantiene la practica de asientos cruzados, y la de designar todo ingreso como
“debe” y todo egreso como “haber”, si bien su significado, aun hoy, nos extraña,
particularmente al ingresar al estudio de esta disciplina.
A partir de los memoriales, poco a poco, se empezó a conformar cierto orden más
sistemático y estructurado y ello origina la contabilidad por partida simple, la cual
ofrecía una organización del material en un número considerable de libros llevados
de formas cada vez más racionales. Finalmente, hacia el siglo XIV se desarrolla
en Italia el sistema partida doble, y se perfecciona hasta la aparición de la primera
obra impresa de contabilidad.
Los memoriales se pueden describir como documentos en los cuales los asientos
se suceden en orden puramente cronológico, sin ninguna clasificación en su forma
más primitiva. El mas antiguo memorial que se conoce data del año 1211,
corresponde a los estados de cuenta de unos banqueros de la ciudad de Florencia
con sede en Bolonia, donde ya se registra la moderna terminología de la
contabilidad con términos tales como el debe y el haber. Para el siglo XV un
ejemplo de documento memorial perteneciente a un tal Johann Pisz, comerciante
alemán, ofrece registros divididos por el contador en tres partes: la primera
reservada para las ventas a crédito, la segunda para las compras y la tercera para
los negocios en comisión.
Al final del periodo contable, cuando quería conocer el estado de riqueza, se hacia
una liquidación de estados, de la siguiente manera:
El capital inicial estaba constituido por los aportes existentes y los realizados por
los dueños de la unidad económica.
El activo era determinado con base en los registros del libro de caja, en los
deudores del mayor y en las existencias de almacén; a esto se le sumaban el valor
de los bienes poseídos (telares, terrenos, locales,etc.), para lo cual se hacia un
inventario final de inmobiliario. El pasivo se determinaba con base en los
acreedores y proveedores del mayor y de un inventario.
Renacimiento
El Siglo XVI marca una serie de eventos que sacuden a toda Europa del
letargo medieval. Se reencuentran los autores clásicos y se convierte en un
clamor el volver a nacer en la cultura clásica. De ahí la palabra
Renacimiento.
Fue alumno del celebre matemático y eximio pintor de aquella época Piero de la
Francesca. Posteriormente se traslado a Venecia y paso al servicio del rico
mercader Antonio Rompíais en calidad de profesor de sus hijos. En 1470 escribió
un tratado elemental de álgebra que dedico a los hijos de Rompíais. Es seguro
que así pudo familiarizarse con la vida de los negocios y observar de primera
mano el desarrollo de lo que ahora llamaríamos “trabajo de oficina”.
No sobra mencionar que Pacioli fue amigo personal de Leonardo da vinci sobre
quien influyo como autoridad en las matemáticas. Algunos han otorgado a Pacioli
el remoquete de “padre de la contabilidad” y quizás le convenga en el sentido de
que su papel de estudioso, compilador y, especialmente, el de difusor de la
contabilidad conocida como Del Método Veneciano.
Desde el mismo momento en que se concede o se admite que una empresa tiene
personalidad propia, distinta del propietario, es indispensable que posea un
“patrimonio”, el cual esta integrado por bienes materiales (efectivo, mercancías,
deudores, etc.) o por bienes inmateriales (por ejemplo derechos adquiridos
diversos) y aun por obligaciones (tales como realizar alguna tarea, pagar
determinadas cantidades, etcétera).
Vale la pena aclarar, que algunos expertos en contabilidad hoy día denominan
inventario al documento en donde se hace constar el patrimonio de la Empresa.
Otros simplemente le llamamos estado patrimonial, en donde se conjugan los
activos, los pasivos y la cuenta de patrimonio.
Al proceder a agrupar las partidas del activo, del pasivo y del patrimonio con el fin
de construir y establecer las “cuentas”, es absolutamente indispensable que se
cumpla la condición de que entre todas las partidas que intervienen en una misma
cuenta exista una completa homogeneidad contable.
Así, es admisible que en la contabilidad exista una sola cuenta de caja para
representar la moneda funcional de cada país (billetes, monedas, cheques, etc.),
pero también es admisible una cuenta única denominada caja y bancos, o
simplemente caja, que se destine globalmente al movimiento de la caja y de las
cuentas corrientes bancarias. En cambio seria incorrecto establecer una sola
cuenta con el titulo de almacén que comprendiera la existencia de todas las
mercancías que se encuentran en el almacén y además las instalaciones y
mobiliario del mismo.
Según la doctrina clásica, las cuentas que representan cosas o valores o derechos
inmateriales se deben considerar, para los efectos contable, como su fuesen
personas susceptibles de adoptar la posición de deudoras o acreedoras. Ahora
bien, cuando la contabilidad establece la ficción de considerar personas a las
cuentas que representan cosas, valores o derechos inmateriales, no se puede
pretender que a estas cuentas personificadas se les concedan sin excepción los
mismos atributos que corresponderían a una persona natural o jurídica.
Esto nos indica, que evidentemente en toda transacción comercial, intervienen dos
sujetos: uno que vende y otro que compra, o dicho grotescamente, un sujeto que
recibe otro que entrega. Por supuesto, ambos sujetos deben recibir o entregar un
importe igual y es aquí donde interviene la homogeneidad contable.
Domenico Manzone.
Girolamo Cardamo.
Simón Stevin. Fue quizás el primer autor que encaro el problema de una
contabilidad pública.
En conclusión, es difícil concebir una actividad enmarcada dentro del entorno de la
esfera económica de la sociedad que no requiera de información financiera
adecuada y oportuna, para medir resultados y evaluar la gestión administrativa.
Por lo anterior, la contabilidad se ha constituido en el elemento de información
más valioso que posee la gerencia para el desempeño de sus funciones. La
consolidación de los estados nacionales, y el crecimiento de una economía
monetaria dieron origen al Mercantilismo.