APRENDEREMOS A…Convivir y participar democráticamente promoviendo la resolución pacífica de conflictos
dentro de la convivencia democrática y la participación ciudadana. Asimismo, aprenderemos a interactuar con otras personas, a manejar conflictos de manera constructiva y a deliberar sobre asuntos públicos. Todo ello a partir de la reflexión sobre situaciones cotidianas de la convivencia social relacionadas con el uso de los espacios públicos. Convivencia, diálogo y participación El diálogo entre el Estado y los pueblos originarios es fundamental para la convivencia democrática y el mantenimiento de la paz social. Al respecto, un importante avance en términos jurídicos se consiguió en el año 2011, con la promulgación de la Ley del Derecho a la Consulta Previa a los Pueblos Indígenas u Originarios. Esta ley obliga al Estado a consultar a las pueblos indígenas sobre las operaciones extractivas y los posibles daños que estas puedan ocasionar en sus territorios. La consulta previa constituye un mecanismo de participación democrática, en el que el Estado y las comunidades nativas dialogan para llegar a acuerdos sin recurrir a la violencia, evitando así el surgimiento de conflictos sociales en el país. A su vez, por su naturaleza jurídica, este mecanismo se convierte en una forma de empoderamiento de los pueblos originarios, al reconocer sus derechos y promover su inclusión social. Así, a través de la conciliación entre las necesidades locales y los intereses nacionales, el Estado promueve una cultura de diálogo y participación que hace posible la convivencia democrática.
¿A qué poblaciones se les denomina pueblos indígenas u originarios? ¿Qué se entiende por consulta previa? ¿Qué derechos de los pueblos originarios defiende la consulta previa?