Parte 1: éTe parezco disidente? Escaneado con CamScanner2 Todas somos el esperpento de alguien mas Gwendolyn Ann Smith Ser trans es garantia de que vas a incomodar a alguien. La gente se molesta con las personas trans que eligen habitar un espa- cio de tercer género en vez de «escoger un bando». Hay quien se molesta porque existen personas trans que no rehtiyen sus historias de nacimiento. Hay otras tantas que se levantan en armas contra quienes optaron por no hacer uso de las. opciones quirdirgicas, viviendo més bien con sus érganos originales. Se levanta la ira contra quienes transitan y luego transitan nue- vamente cuando deciden que el cambio inicial no era la me- jor solucién para ellas. Joder, algunos respingan solo porque esta o aquella persona trans simplemente no «estd haciendo su mejor esfuerzo» para ser de un género particular, sea lo que sea que eso signifique. Algunos se enfadan porque el progra- ma RuPaul’s Drag Race, de la marca de entretenimiento Logo (inspirada por la comunidad LGBT), muestra una versién de la vida trans diferente de la propia. Mientras tanto, por todas partes estan quienes han decidido que no se sienten cémodos con todas nosotras porque nos atrevimos a cambiar de una expresién de género o identidad a alguna otra. A la mierda con eso. Verds, he aprendido no solo que debo hacer lo que sea nece- sario para ser feliz sin importar las batallas que debo enfren- tar, sino que también soy la nica persona responsable de mi propia comodidad o incomodidad acerca de mi género. Puedo 39 Escaneado con CamScannerio por lo = otra Le a Pero al fin cabo lo que Jos demas hagan no puede cambiar quien Soy Recibé una peticion inusual de una amiga mia hace algiin ti dio que NO mencionara que era amiga suya, von soy mas, no es ningun secreto que yo sea trans s, s ‘onalmente, asi como fundadora del Trans Day. Remembrance, el dia conmemorativo trans. Ella temia ae ue la conozco, entonces asumiria autométics. alguien sabia q) ambién es trans. mente que ella t ar que mi sola existencia era percibida como para dafiar a una persona a quien considero mi amiga. Trato de no hacerle dafio a nadie en mi quehacer co. tidiano; no obstante, aqui estaba yo, escuchando que lo tinico que debo hacer para causarle dificultades a alguien es decir que Fue dificil escuch: motivo suficiente es mi amiga. A raiz de este incidente, les pregunté a muchas de mis amista- des que son trans si también se sentirfan incémodas al quedar identificadas puiblicamente como amigas mias. Considero que estas personas son amistades cercanas, les dije, pero, aun asi, si este salir del armario inadvertido pudiese causarles algiin pro- blema, prometi que me desentenderfa de ellos inmediatamente. Extrafiamente, a nadie més parecia molestarle tanto. No toqué el tema con mis amistades no trans, pero quiz4 deba hacerlo supongo que seria una gran sorpresa descubrir que él solo he- cho de conocerme tiene el potencial de poner en tela de juicio el género con el que nacieron. as de las afios # grup? de set ees lecciones que aprendi en algun Ia gus Seis (hace mas de personas an Imitir) era que el formar parte de 4 ns aumenta exponencialmente el ries? 40 4 Escaneado con CamScannerleida como trans. «Si deseas permanecer escondida», me dije- ron, «evita a otras como tii». Eventos con grandes grupos de personas siempre requeririan ubicaciones remotas donde todas pudiéramos seguir ocultas: el concepto de reunirte con tus her- manas y hermanos trans en cualquier lugar era tabii. Este era un mundo que se encontraba a un paso de los saludos secretos y las contrasefias cifradas. Mucho tiempo después, aprendi que esta estrategia de divide y vencerds habfa sido comin en los viejos programas universita- rios sobre transexualidad de la década de 1970. Ser asociada con otras personas trans podia ser motivo de expulsién del programa. Después de todo, se suponia que debfas asociarte con quienes pertenecian al género de tu preferencia y avanzar por el camino hacia lo «Normal», y no estar en compaiiia de otros que trataban de tomar caminos similares al tuyo. Aunque esos sistemas de vigilancia desparecieron hace mucho tiempo, perduran sus supervivientes. O, peor atin, estos indi- viduos, ellos mismos transexuales, perpettian la aplicacién del sistema que ellos mismos tuvieron que sortear. Si no te ajus a esas reglas que normativizan el género y que se esperaba que ellos hicieran respetar, eres sujeto de burla, merecedora de no mis que el ridiculo de tus posibles pares. Han aprendido a cons- truir un orden jerarquico de quién es aceptable y quién no lo es. Igunas lesbianas y gais Lo puedo pormenorizar de este mod: sienten que sus preocupaciones son mas importantes que los temas trans, porque las personas trans son un esperpento. Al- gunas personas trans -con frecuencia, pero no siempre, tran- sexuales— consideran més importantes los temas transexuales que los asuntos de, por ejemplo, los travestis. Algunas, entre la parte mas queer de nuestra comunidad, desprecian a quienes optan por vivir en un espacio mds «genéricamente normativo». 41 Escaneado con CamScanneruso hay grupos con relacién a los cuales los tray, Inelus? yperiores:sisses®, drag queens y kings, lt) i ety segura de que podriamos incluso Tastrear ial de ‘sstos grupos ¥ descubrir que, a la larga, todo we a quien ve como un esperpento, Mund stig a Se sienten © girls tiene a alguien Fs un fendmeno humano, ee que ocurre especialme, parecer, entre grupos marginados. Trekkers Contra trekkieg contra personas disfrazadas de Klingon, o furris* contra furris disfrazados contra, por ejemplo, los plushéfilos’. Estoy segura de que, si observara a los aficionados del modelismo ferroyis. tio, probablemente descubriria que los aficionados al ancho de via Ho desprecian a los que prefieren la escala N, 0 algo asi. Las taxonom{as son inacabables, con frecuencia circulg. res, y usualmente graduadas hasta alcanzar una sutileza que seria invisible para cualquier extraiio. Simplemente queremos identificar a los esperpentos «verdaderos» para sentirnos mas préximos a lo normal. En realidad, ni una sola de nosotras es tan magicamente normativa como para reclamar el derecho a te, af separar a los esperpentos de toda la demas gente. Todas somos un esperpento para otra persona. Quiza incluso -para ser sin- cera— para nosotras mismas. Finalmente, nos encontramos con una de dos alternativas: gap" tamos a personas semejantes a nosotras para encajar mejor? 0 buscamos a personas afines a nosotras en busca de confort Y compaiiia? Es més, si todas somos el esperpento de otra a "A, ¢esto significa que también somos lo «normal» para Persona y dignas de ser aceptadas? —____ S Pal, inplé ‘labra del inglés que podria traducirse como «mariquita> érmino insta fe 6 Término inglés co exto para rf n varios signifi ste cont! Hrs a personas pel nificados, usado en e: das, 7 Plushéfilos son. cia os . aquellas pe: stacion sexual ha Muliecos de peluch Personas que sienten excitaci6 ie. 42 Escaneado con CamScanner 4Estas son preguntas que me he hecho una y otra vez. Confieso haber pasado por una fase en la que no me asociaba con otras personas trans, por temor a ser declarada culpable por asocia- cién, 0 a que «se me pegara lo trans». Quizd tem{a ver cosas en mj misma que no estaba preparada a enfrentar, o tenfa miedo de desafiar mis propias suposiciones. Descubri que era una for- ma muy limitada de vivir, y he decidido acoger a quienes puedo ver como mis hermanas y hermanos. Si, incluso a aquellas y aquellos para quienes pueda ser dificil acogerme. Esto no significa que no exista tal cosa como la difamacién, © que todo sea aceptable. Todo lo contrario. Siempre hay ne- cesidad de estar atenta a los ataques al conjunto de todas no- sotras. No podemos ignorar a los demagogos de derecha que insisten en que la palabra de un médico que proclama el sexo de un infante al nacer de alguna manera tiene mas peso sobre la realidad de un cuerpo que la palabra de la persona que lo habita. Pero, asi como cualquier persona puede dirigirse a mf como quiera, me corresponde a mf decidir si quiero responder- le. Ademis, deberia ser irrelevante para mi lo que decida hacer cualquier otra persona trans. Su accién no cambia de manera alguna quien soy. No puede hacerlo. Sé lo que soy. Sé que he decidido identificarme como una mu- jer trans, y que -en general- estoy feliz en donde estoy en este mundo. Estoy lejos de ser perfecta, y podria darte una lista tan larga como mis brazos de las cosas que me encantaria cambiar. No obstante, sigo aqui, y todavia soy yo, y nadie puede cam- biar eso sin mi permiso. Al mismo tiempo, a pesar de que estoy contenta de identificar- me como una mujer trans, también aplaudo a quienes buscan redefinir las nociones de género y que estan labrandose espa- 43 Escaneado con CamScannereg eal que me da gusto Ver fir estén desafiando los su- ‘amente representan quiza mis creencias uiz4 acaben siendo cios propios. Mi propia comodidad gue otras personas que andan por allf est o necesari puestos y saber que sus desafios n ign sabe, una amenaza a mis creencias. Qui merecen ser retadas de vez en cuando, y 4 mas amplias de lo que eran antes. ariaciones increfbles que tiene al- de palomillas y mariposas en el + capas de hielo nevadas y y donde la biodiversidad es lo que | complejo sistema. La idea de cla- sificar las cosas y Inego declarar que solo esto 0 aquello ie la versién apropiada de algtin ser es un constructo distintiva- mente humano, rebosante de arrogancia y soberbia. Cuando aquellas que somos forajidas del género de cualquier calafia buscamos fijar definiciones sobre nuestra condici6n real y de- s de alguna manera «normal» entre nosotras, Habitamos un mundo de v rededor de 200.000 especies planeta, donde una puede encontra calderos de lava hirviente, mantiene en sintonfa todo é terminar quién e: la idea parece todavia mas enloquecida. Supongo que es algiin tipo de deficiencia humana la que hace que siempre necesitemos repudiar a quien percibimos como «més distinto/a que ta». Algunas personas simplemente nece- sitan sentirse mejor con respecto a sf mismas al despreciar a quien esté mds abajo que ellas en la cadena alimenticia. No obstante, esto no parece ayudarnos a progresar en el mundo en general. Podemos preocuparnos acerca de quién es esto o quién es aque- Ilo, y podemos discutir acerca de quién pertenece o no pertenece. Podemos hablar de cémo una de nosotras es mucho més legitima que la otra. Finalmente, todas somos el esperpento de otra perso” na, y la dignidad humana basica no es un privilegio de los poces afortunados superiores, sino el derecho de todas o de nadie. 44 ft Escaneado con CamScanner3 Transcorporacién: andlisis de los beneficios de ser un hombre trans en un entorno corporativo transnacional CT Whitley Me agazapo en mi guarida: un cubiculo modular con un es- critorio preconstruido, encerrado entre plafones alfombrados de color gris. Me he vuelto un cadaver de oficina, enterrado en esta tumba de tres paredes bafiadas de luz fosforescente. En la sala de juntas se escucha una voz hostil que grita «jYa, idiotas! Tienen que dejar de hacer las cosas con el culo». Respiro pro- fundo. Ya pasé por el curso de iniciacién para convivir en ar monja en el trabajo. La primera clase versé sobre cémo lograr la comunicaci6n sin que te vapulee el jefe. Aqui no hay ni rastro de la atmésfera sentimental a la que me acostumbré como estudiante de Antropologia Social en mi universidad. No puedo poner en practica lo que aprendi al leer teoria sobre diversidad sexual y estudios de género acerca de cémo cuestionar los estereotipos en el ambiente laboral. Tam- poco trabajo para una ONG que ofrezca cursos sobre diversi- dad o talleres que sensibilicen al personal sobre el valor de la diferencia. En esta compaiiia se cataloga la procedencia étnica del personal solo para cubrir cuotas y ganar puntos en las eva- luaciones éticas y de inclusién, de modo que cada persona se reduce a la casilla que tacha: afrodescendiente, blanco, latino o asidtico. Los altos mandos son todos gente pudiente; los inicos incentivos que hay son econdémicos; siempre se esté midiendo el desempefio y, desde luego, poderoso caballero es don dinero. 45 Escaneado con CamScannerfios que pasé al frente de la dire in los dos ' Ea eee corporativo neoyorgine, me fui dang a de como las cuestiones de genera pe mean todo tipo de ate racciones en las oficinas. Predominan los esquemas bing, te. ge obstruye Ja comunicacion entre hombres y mujeres, \ ie frecuencia, todo esto va en detrimento de las mujeres, Cuan adquiri consciencia plena de esta dinamica, decidy Movermee, las orillas de las categorias genéricas, de modo que comenes. intercambiar y yariar los registros comunicativos convencig, nales de mi género anterior y actual, segtin fuera Necesatio, Fy tanto que disidente de género, con la costumbre bien arraigada de irme abriendo camino en todas partes, aprendi a comuni- carme de maneras que no forman parte del repertorio cultural de mis colegas que no son trans. Esto me permitié transformar el riesgo corporativo de ser trans en una ventaja laboral. Mj pasado femenino y mi presente masculino me han funcionado como puntos de referencia invaluables para poder relacionar- me y negociar con hombres y mujeres. Ya casi ni me doy cuenta cuando varfo mi forma de comunicacién. A veces lo hago en una misma conversaci6n, tan pronto cambio de interlocutor. Justo hace unos dias, mientras hablaba por teléfono, mi pareja me pregunté -sonriendo maliciosamente- si estaba hablando con un hombre. Le respondf que si, con algo de extrafieza, y le pregunté cémo se habia dado cuenta. Me contesté que, cuan- do hablo con mujeres, agudizo la voz, cambio la entonaci6n y demuestro més mis emociones. Dice que no es que me vuelva mujer, pero que si me comunico como mujer. Y tiene raz6n. En el transcurso de mi vida he aprendido a utilizar aspectos 4 mi identidad asignada en mi identidad optada siempre que me resulte conveniente. Combino mi vocabulario femenino ©” el masculino, a fin de crear patrones de negociacién que ~ 46 Escaneado con CamScannerpermitan comunicarme y trascender las barreras de género, de suerte que me puedo expresar con mas libertad y claridad, mas alld del sexo y el género. Yo sé que el sexo y el género son constructos sociales, pero también sé que se vuelven realidades en tanto que forman parte integral de la mentalidad cultural predominante. Puedo afir- mar que los patrones de comportamiento mediados por el gé- nero son responsables de por lo menos la mitad de los proble- mas de comunicacién en mi oficina. Asi pues, en estas paginas no pretendo hacer un ejercicio de critica deconstructiva, sino més bien una observaci6n sobre las realidades de las practicas mediadas por el género en el ambito profesional. El mundo laboral esta cimentado en las definiciones tradicionales de lo que es ser hombre o mujer, lo que es masculino 0 femenino, heterosexual u homosexual. Y todo esto se complementa con los prejuicios y postulados misdginos que son parte del patri- monio social dominante. Si bien yo no creo en estas categorias binarias de identidad, ni tampoco puedo ni quiero encajar en ellas, sé que son las que dan forma y estructura a la esfera la- boral. Como hombre trans que combina su pasado femenino con el presente masculino para abrirse camino por una tierra incégnita, no tengo la intencion de reforzar los paradigmas bi- narios, sino que utilizo mi riqueza genérica para cuestionarlos y trastocarlos, de modo que he logrado mejorar el ambiente que se respira en mi trabajo, al tiempo que sigo creciendo en lo profesional. Mis experiencias en espacios donde impera la diversidad sexual, asi como en entornos progresistas, me han permitido tener una vision m4s completa sobre el ambiente heteronormativo en el que trabajo y la forma en que la convivencia en las oficinas esta 47 Escaneado con CamScannerrarquias de género. En el entorno COrporg, ransnacional, donde la diversidad de sexo y género ri cin sexual son temas de los que no se habla, me resus en practica estereotipos de comunicacion. Si querig uchar por los hombres, lo mas importante erg ser der el tiempo en pensar en la entonacién, todo d, rayana en la altaneria. mediada por las ie tivo 1 orienta aiti] pone hacerme esc conciso, sin per’ dicho con segurida: Puesto que parte de mi trabajo tenfa que ver con administra. cién de contratos, a veces me tocaba llamar a los directivos para informarles de que los contratos con sus clientes habjan terminado y que habia que redactar nuevos. Cuando hablaba con un hombre, mi estrategia era saludarlo rapido e ir directo al grano con algo como: «Tenemos 27 clientes que necesitan renovar el contrato. Si no tienes inconveniente, les vamos a subir el sueldo, ¢de acuerdo?». Por lo general, respondia de in- mediato con un si o un no, y procedfamos a colgar el teléfono. Por el contrario, mis colegas mujeres tendian a saludarlos con gran amabilidad y luego pasaban un rato regafidndolos por no haber respondido a sus correos ni haber devuelto sus !lama- das. Tras ocho 0 nueve minutos de conversacién, mis colegas OS. i compromisos acordados. Y es ; le la linea habia de; le preguntal é 6 ban «zy como estén tus no habi. fealescuclado)i omar En estas conversagj = hombics que el hombre al otro lado d. atencién en cuanto ellas hijos?», y, por lo tanto, cutora le pidié después, %¢ perdian el aspecto humano al estar penes se’? (08 hombres Préctico de la llamada, de modo que no en 1° SO! en el lado tna conexidn significativa o un sentide de cable Construir tnidad entre ‘jado de poner 48 Escaneado con CamScannerambas partes. En situaciones de ese tipo y momentos simila- res, mis conocimientos sobre los diferentes estilos que tienen hombres y mujeres para comunicarse me permitieron evitar los errores de mis colegas mas experimentadas; mi andlisis cuida- doso y mi adopcién consiente de la forma masculina de inte- racci6n me ayud6 a tener éxito con los altos directivos. En otra ocasién, mi departamento tuvo que desarrollar un pro- yecto con un grado de dificultad extraordinario. Estresados, los hombres no trans se encerraron en si mismos, dejaron de con- testar el teléfono y se concentraron de Ileno en la tarea que los ocupaba, como si cada uno de ellos fuera un pelotén completo. Por su parte, las mujeres buscaron brindarse apoyo mutuo y hablar sobre sus frustraciones y preocupaciones, recurrieron a las redes sociales e hicieron planes para salir a divertirse al final de la semana. Estas respuestas tan dispares pueden resul- tar efectivas para cada uno, pero tienden a generar complica- ciones enormes para la oficina en general, dado que se crean dos facciones incapaces de comprender las estrategias ajenas para manejar el estrés. Me di cuenta de que yo podfa hacer de intermediario al adoptar el papel que fuera necesario en cada caso. Con los hombres me aislaba y me dedicaba solo a traba- jar, mientras que con las mujeres manifestaba mi disposicion para apoyar y comprender. Entonces, los hombres irrumpian en mi oficina refunfuiando cosas como: «Esa mujer no puede terminar de hacer nada porque se pasa el tiempo hablando con todo el mundo. ;No se da cuenta de que tenemos que entregar esto ya?», Las mujeres también Ilegaban corriendo a quejarse de sus colegas diciendo: «jQué molesto es fulanito! Yo que me acerqué para tratar de aliviar un poco la tensién, y él solo se cierra y me ignora. Hay gente a la que no le gusta colaborar.» Yo me dedicaba a escuchar con empatia a ambas partes, para 49 Escaneado con CamScannerluego hacer lo mfo y ayudarles a resolver el asunto, Con ean ONO g, e vefa como parte de su grupo, me era fé¢j] inten Cady a ue pensaban los del otro lado del muro dega a i slo q plicarle: ne vando y trayendo agua a “a, Era como estarles lle y tray 8! sus Tespectiy, desiertos, irradiados por una neurosis ardiente que estahy a punto de calcinarlos. lado mi No por nada fui de los primeros en recibir buenas Calificacig, nes por parte de colegas hombres y mujeres. En conversacién con mis jefes hombres sobre compatieras que ya no trabaja. ban ahi, me decfan cosas como: «Es que a los hombres aquellg no les parecia nada efectiva. Se pasaba la jornada Ilamando por teléfono a los directores, molestandolos por detalles in. significantes, A las mujeres les agradaba su forma de ser, pero supongo que es porque entre ellas se entienden.» Al hablar so- bre antiguos empleados del sexo masculino, pasaba lo mismo, Los hombres se referian a ellos como «altamente eficientes», mientras que las mujeres los tildaban de «poco comprometi- dos». Ambos estilos de comunicaci6n tienen su lado positivo. Es mas, las practicas de interaccién entre mujeres, que por lo general son tachadas de frivolas, suelen ser las que favorecen el sentido de pertenencia y cohesion en las oficinas, dados los patrones de machismo y heteronormatividad que rigen ese tipo sere nna ear emo tans, los directivos parecian no A i ‘arse cuenta de la forma en que tiendo Ppuentes de comunica- cion entre los géneros, Me ascendfa! . nde estaba con un pie en el Puesto sin notar que mundo masculino y otro en el femenino. so Escaneado con CamScannertecho de cristal. Y eso es justo lo que sucedfa en la oficina de la que les hablo. Se sabe que las categorfas de «hombre» y «mujer» empiezan a construirse desde antes del nacimiento, lo cual significa que, en el momento de incorporarse al mercado laboral, una persona ya ha estado expuesta a unos 20 0 30 afios de construcci6n cultural de la masculinidad o feminidad tradicional, de tal manera que los estereotipos ya forman parte de cada fibra de su ser. Todo esto resulta sumamente desven- tajoso para las mujeres. A las de cardcter fuerte y decidido las tachan de «cabronas» o de «lesbianas», y pocas veces logran ascender en el trabajo porque su incumplimiento de la norma- tiva de género socialmente aceptada genera incomodidad. De igual manera, las mujeres con comportamientos femeninos que se comunican mediante los patrones esperados para su género tampoco llegan hasta arriba, sin importar qué tanto aporten a los proyectos o las discusiones. Existen casos atipicos, desde luego. Hay quienes logran dominar el arte de la actuacién de género, asi que son percibidas como «femeninas» en aparien- cia, pero utilizan ciertos recursos «masculinos» en su forma de interactuar, tales como la brevedad y la brusquedad. En la empresa de la que les hablo, donde los hombres mandan, este tipo de mujeres son las que sobresalen. Entender las diferencias de comunicaci6n creadas por las ex- pectativas sociales de género va més alld de darse cuenta de que los hombres esperan que las mujeres se comuniquen con ellos en sus propios términos. Implica también seguir anali- zando con detenimiento las practicas laborales en las oficinas y las politicas ptiblicas. No se trata de un curso rapido sobre diversidad, sino de un proceso constante de ver al individuo en su aspecto social, de forma que se logren entender diversos esquemas de comunicacién dentro y fuera de contextos media- 5I Escaneado con CamScanner‘ones de género- Las experiencias que he Vividg an hecho valorar mi camino hacia la tran. puedo utilizar mi pasado Y mi presente promover cambios en los dems y en el trabajo me h sexualidad, dado que de forma estratégica para avanzar en lo personal. En los tiltimos dos afios, me propuse llevar a la prdctica las n diferencias comunicativas en la oficina. ee mi ee presién corporal, el tono de mi voz y mi esti 7 € conversacion para dirigirme a los directivos hombres, y me di cuenta de que, en reuniones en las que mi presencia pasaba desapercibida, en- seguida empezaron a tomarme en cuenta, pasando por alto a mi supervisora, quien Ilevaba 25 afios trabajando para la em- presa. Darme cuenta de que he alcanzado la maestria de un nuevo lenguaje me deja un sabor agridulce en la boca. Me he convertido en un comunicador bigénero. Como hombre trans eso es motivo de alegria, porque he logrado que otros hombres me vean como tal. Pero ostentar este nuevo poder también me recuerda que esta posicién que tengo ahora es adquirida, por lo que me confiere la responsabilidad de no guardar silencio cuando veo a otras personas ser silenciadas. También me hace cuestionar el estilo de comunicaci las oficinas. Saber cémo utilizar diferencias comunicativas entre h abogar por quienes son relegada on machista que existe en ae al maximo las salsilencio. 7844 Durante mis afios de transicién, con frecuengi, estimar la complejidad de tal cambio. Jaman 17 U°BUE a sub- iba a terminar subiendo los peldatios del gen, t* MARINE que a la manipulacién de los patrones de géne,«. 9 Fal gracias que han llegado a dudar de si mismas, q valor, que han sufrido acoso y abuso, les of, ° €ZCOQ ero, 0. We han cues wauellas estionad lo su "" Consuelo 52 Escaneado con CamScannerque quizd les parezca extrafio: es posible adquirir poderosas estrategias de vida negociando las divisiones de género. Nues- tra diversidad puede convertirse en una estrategia muy efectiva para reconfigurar los sistemas sociales en los que nos fuerzan a vivir, incluso si vamos por la vida de incégnito. Por desgracia, los directivos de mi empresa no solo han per- petuado los estereotipos de género, sino que han cafdo en la autocomplacencia y han soslayado las valiosas aportaciones del personal que alli trabaja. Si se hubieran dado cuenta de que yo era un puente entre los estilos de comunicacién mediados por patrones de género, o si tan solo hubieran notado que mi diversidad les podfa ayudar a aprender de ambas partes, po- dria haberle ayudado a la compafifa a desarrollarse de verdad, en vez de operar tras bambalinas y solo en beneficio propio. En la actualidad, mi vocacién me ha Ilevado a abandonar el am- biente corporativo para incorporarme a la academia, pero me gustaria que otros disidentes de género que trabajan en ofici- nas se levantaran y salieran de sus cubiculos oscuros para pro- piciar conversaciones estratégicas que permitieran cuestionar las estructuras de poder que imperan en sus compaiifas. Con nuestra experiencia, nuestra voz diversificada podria llegar a transformar las oficinas disfuncionales en parafsos de género. Dado que somos conscientes de los sistemas heteronormativos de comunicacién que dominan el mundo laboral, podrfamos lograr transformar las dindmicas nocivas desde dentro. Al ser traductores bilingiies del lenguaje de género en el sistema bina- tio dominante, podemos comenzar a crear espacios en los que quienes viven en silencio puedan finalmente hablar. 53 Escaneado con CamScannerFoto: Sandra Dominguez Br re Escaneado con CamScanner4 Por un chato de vino R. Lucas Platero Méndez He decidido salir de packing esta noche. Es esta mezcla de op- timismo y gallardia la que me lleva a hacer notar mi masculi- nidad, mi pene prostético debajo de mis calzoncillos y panta- lones. Me acicalo en el espejo. Me aseguro de que he domado bien mis curvas de serie. Mi pelo asoma cuidadamente despei- nado, mi camisa negra nueva de una talla sorprendentemente adecuada... «Estoy estupendo», me digo sin poder evitar son reir. En realidad, no tengo ningdn plan, no me preparo espe- cialmente para un encuentro sexual con alguien conocido. Se trata de un regalo para mi, que me hace sentir bien cada vez que me muevo, recoloca mi postura y mi centro de gravedad. Me pregunto si Maria Elena saldria de packing esta noche, si nos tomarfamos algo por un bar de por ahi mientras miramos a todas las chicas interesantes con una media sonrisa picara. De ti, Maria Elena N. G., todo lo que conozco es lo que se dice en un archivo policial franquista de 1968. De hecho, no sabe- mos si atin estas con vida. Si sigues travistiéndote para salir a tomar algo. Si atin vives en Catalufia. Pero si que tu historia es importante. Tienes un ntimero de expediente, un nombre y toda la verbo- trea de los represores que te aplicaron el articulo seis de la Ley de Vagos y Maleantes de 1954. Todo esta en un manojo de pa- peles amarillentos que ha encontrado Victor Bedoya entre pilas 5S Escaneado con CamScannerLey de Vagos y Maleantes de 1954 abla proxenetas Y rufianes, a los mendiga, yivan de la mendicidad ajena, exp}, os mentales 0 lisiados [...] para das, sucesivamente, las medidas siguientes. Fi ablecimiento de trabajo 0 Colonia agricola, metidos a esta medida de seguridad debe. nstituciones especiales y, en todo caso, de los demés. b) Prohibicién de residir erritorio Y obligacién de declarar su lancia de los delegados.» ientes. Esta mosexuales, y alos que le edad, enferm de exped a «los ho! profesionales ten menores de que cumplan to! Internado en un est Los homosexuales sO! rn ser internados en I con absoluta separacion en determinado lugar 0 © domicilio. c) Sumision a la vigil Miro tu nombre y pienso que puede que el juez y los funciona- rios te llamaran Maria Elena, queriendo sefialar que te recono- cfan en un cuerpo diagnosticado como de mujer. Creo que yo te voy a llamar M. E. Me suena mas andrégino y mas actual. Si M. E., con tus 21 afiitos salieras hoy sébado con mis colegas como saliste una noche de 26 de marzo de 1968, probablemen- te serfas el centro de atencién -aunque para eso tendrias que ri- valizar con otros tios, como Clark, o yo mismo. Tii eres alguien que, segiin la Guardia Civil que te detuvo, utilizabas zapatillas de baloncesto, calcetines y calzoncillos frente a los zapatos de tacén, las medias y las bra i i ; ls mos deta depo, Dien gue obtenins un san lacs de usar esta vestimenta... Yo creo que te adele oe peed de Tus zapatillas de baloncesto eran como las gu patos ini colega Clark, conel que es probable que compares Heva gunos gustos, ademas de ser paisanos, de aed al- 0 Miriam segin su DNI, vive un momento apasio ee siendo consciente de su deseo por moldear su cuerne ten dolo fuerte y musculoso; ajusténdolo a la ima de si mismo. Qué pensarias ti de esto, M. E.? moldear o transformar tu cuerpo a tu gusto? «1 Tpo, hacién- 'BeN que tiene ePensarias en éltias al gimna. 56 a Escaneado con CamScannersio con Clark? gDiscutiriamos sobre dénde encontrar ropa de tio de nuestra talla? Todo lo que puedo decir es que somos unos travelos*, Pienso en ti, M. E., miro a Clark y me miro, y creo que esta noche lo pasarfamos fenémeno, disfrutando de un reconocimiento mutuo que nos permitirfa ser y estar en un ientes, vin- espacio elegido. Generamos, sin ser siempre cons culos tiznados de homoerotismo que generan curiosidad en el ojo ajeno. En tu ficha policial, la descripcién de tu aspecto tiene un gran peso; nos deja ver que se preocuparon en ver qué llevabas y qué no. Ahora no solemos pensar en los calcetines y los panta- lones como formas de travestismo, porque ha transcurrido ya tiempo desde que fueran exclusivos de los varones. Y sin em- bargo, a pesar de que han pasado 40 afios desde tu detencién, la ropa sigue siendo un marcador de las normas de género, de lo apropiado, con las debidas excepciones. Esta noche ti verias un mundo cambiado, y tendriamos que explicarte que si, pero no tanto, Que se sigue sancionando la ruptura de normas; que a menudo se sefiala que nuestra masculinidad sobrepasa los Iimites de lo aceptable; que todavia existen sanciones sociales y psiquidtricas, aunque no nos encarcelen por ello. Al menos no en el Estado espaiiol. Verias que algunos hombres se sienten interpelados ante formas «defectuosas» de masculinidad; que ante el descubrimiento de un impostor que se hace pasar por hombre querran castigarte por ello. Esto no es nuevo, ni ha cambiado tanto. 8 Con todo el cuidado de no caer en lo que llamamos «presentismo perver- som, este ensayo trata de pensar sobre el pasado sin asumir que las identidades, del presente y de nuestro entorno son exportables a otros espacios o tiempos. ‘Mi propésito es ficcionar una historia posible para M. E, (N. del A.) 57 Escaneado con CamScanner, vino a La Gran Cava, un bar de | le Hospitalet, como hacemos Cla % Cally ; . . MLK y rid. Te imagino con el codo Yyo Sob te mente con los biohombres® q de 4 i Saliste omar salto, > Cpe oche por Mad ndo ruidosa arr. char i ta bar de jmaginar™ a mi no: os dos AS; « chavales 6 " aepsonia$ val noi Jemente dos personas un ln lerass mente ti a a das S& deruviero" necesariamente sobre ti, M. E., ya que ada p ia ( mit éxito come tio: te descubrieron y te llevaton illo. La Guardia Civil te condujo a |y 1968, tras lo cual d e como te miraban tus paisa, s observan no s2 biendo si wt tias muy masculinas y por a poco excéntric nto, 26 de marzo de tarazanas, UP Maleantes. «ee ante el jue? de Vagos Y 6 en un acto sospechoso y a OjOS del juez y la repre- na N.G. eras una mujer no que tenfas por mision no cabia pensar ntigo, a no algoaun bar se convirti ropio de una peligrosa social, ya que sta, Maria Ele colo eso, sit travestida de s», Bajo esta, SU légica, ente estar CO adieran clegir librem io historico las mujeres an en los espacios deli- rio de sexo, sexualidad do. No se podia no sa- Esta claro que en ese contexto Y espaci decentes no salfan a Jos bares ni estab: mitados para los hombres, ya que elt y género estaba perfectamente delimita — we nie no cis-y asi decir cishombres para sefiae legen dw iagnosticada como varon Y 4 = néntco Sin embargo, el uso de este prefijo en el oe ee Ss nlts que definir qué significa «cis» pute dl vac re person est4 cémoda y de acuerdo con el sexo Sr es eae de cissexual, frente a aquellas Person fs fsuras y rupturas ante esa asignaci6n [N- del Al- rue esta confor .| Estado esp? ‘0 «cissexua” 58 Escaneado con Camscannerber cual era el espacio, comportamiento P otras. Si rompiste las normas es Porque de trasgresion deliberada, y Merecias un ¢,; sino propio de la violencia de Estado, existia una voluntad ‘AStIBO No solo social En tu tiempo, las mujeres eran madres y a ser sumisas y humildes; ey el de 1 Pacios puiblicos que posibi- lit6 la II Republica (Pineda, 2008). Asi, las mujeres ca ree r heterosexuales, como parte f EA social y polftica faseista ten aos, mujeres que no querfan seguir el camino de aie, a . t n matrimonio y la maternidad solo tenfan como salida el convento, la locura o la solterfa como servicio a los demas. O convertirse en una pe- ligrosa social, una puta, una delincuente (Platero, 2009). Para la psiquiatria de la época, las mujeres eran inherentemente pa- tolgicas, de una naturaleza inferior, cercanas a una naturaleza infantil y a la patologfa, lo que hace necesaria la regulacion de sus instintos, su comportamiento y su participaci6n en una so- ciedad que se tenia por civilizada como la propia del nacional catolicismo. Requieren de unos frenos que han de proveer tan- to los varones como el Estado, para poder manejarse (Vallejo y Martinez, 1939, en Bandrés y Llavona, 1996: 8). Los hombres debian ser cabezas de familia, trabajadores y pro- veedores de bienes, fieles patriotas. Sumisos ante un Estado autoritario que exaltaba una masculinidad ligada al fascismo, con la promocién de imagenes de los cuerpos j6venes, unifor- mados y musculados, en el contexto de la camaraderfa militar y belicista (Pérez Sanchez, 2007). Varones situados en un lugar Conflictivo, por la feminizacién de su sumision y, al tiempo, obligados a mostrar una virilidad en los margenes deterr os por el control del Estado, la Iglesia y !a psiquiatria. En termina- 59 Escaneado con CamScannertiempo la eugenesia franquista buscaba poteng She idad natalista de aquellos individuos a¢, Cat tng ba contra la degeneracion moral ts | relax en el control social que ten n d : iciada sido prop is (Monferrer Tomés, 2003: 182), una mujer, las mujeres no salen a tomar an den buscar a los hombres en espacios dy No tenias una familia propia de la que rido aunque sf un novio que resy|. coartada-, y no tenias un trabajo n hombre, tal y como eviden- los guardias. Es muy posible 1e te conociera fue con travestismo no fuera run varén todo el Ti no podias set | bar, no pues como iguales. se te conocia ma! por tanto una yino a relacion cuidar, no t6 ser marica Y conocido. Y tampoco podias ser u ciaba tu cuerpo bajo la mirada de que algo te delatara: 0 bien alguien qu el cuento a los guardias, © puede que tu totalmente convincente como para pasar po! tiempo y ante los ojos de todo el mundo. atraccién hacia las mu- una mujer por tu a pesar de que «sientes una irresis- »Y que tu comportamiento y Estabas poniendo en eviden- el orden Tampoco podias se! jeres. Y no eras un hombre, tible inclinacin por las mujeres» atendencia es la de los hombres». sia uno de los pilares fundamentales del franquismo, de género y sexualidad. Un mundo binario que ademas de bue- nos y malos, justos y pecadores, nacionales" y rojos, se orga- 10 Durante la Gi uuerra Civil buena : ; Seal Sas Seat a parte de la tropa nacional, de extracci6n ee ee percibiendo como normal el acceso carnal de un va siempre y ve : ee Yevando se cifiese a los roles culturales adscritos al género eee pee relacién fuese un «mero encuentro sexual il y uno afeminado. Como dit y en los ejércitos . Como diria Franco; «No hab. - A : bia embargo, no deja de ser alas 6rdenes de los inductores de la aroma 2 a de ser una » se le conocié quimera més en | . I conocié en diferentes momentos desu vid a nenre del diceadon, a aig » 0 «Paca la culona» (Ok la como «Miss Islas Canari » (Ol : ‘anarias eda, 2004:53) [N. del A.]. 60 Escaneado con CamScannernizaba en hombres y mujeres, heterosexuales y Los cabezas de familia y las madres, los pilares frente a estos, los maleantes, peligrosos Sociales homosexuales, de la sociedad; Y putas, Sabemos que durante los afios siguientes a posguerta, el régimen no presté gran aten: xualidad, porque estaba mas Preocupado por enfrentars I postguerra y estaba delegando en la iglesia catélica el iis i de los comportamientos inmorales (Bastida Freijedo, saa 185). Sin embargo, en los afios 50 se creé un pénico moral y sexual que Ilev6 a la regulacion de la homosexualidad (Olme- da, 2004: 34). Pensemos que la reforma del Cédigo Penal de 1944 consideraba que los actos de homosexualismo eran delito cuando se salian del Ambito privado y tenfan una repercusién social. Hasta 1954, la legislacién no castigara conductas, sino que pretenderé defender a la sociedad contra comportamientos individuales considerados peligrosos. Es el escandalo de una tercera persona, y no el acto en si, lo que constituye el delito. la victoria y en Ja cién a la homose- El Cédigo Penal de herencia napoleénica, reformado por Primo de Rivera (1928), sanciona la homosexualidad y el lesbianismo como un delito contra la honestidad y el escndalo piblico. Mas tarde, el Cédigo Penal es reformado con la II Reptblica (1932) y esta referencia hecha con Primo de Rivera se elimi- na. Sin embargo, se promueve una Ley de Vagos y Maleantes (1933), que una vez que entra el perfodo franquista (1954) se modifica para incluir la homosexualidad. Se hacia una conside- racién explicita de los homosexuales como un peligro para la sociedad; el Estado se encargarfa de internar y controlar a los sujetos «peligrosos», que incluia a homosexuales, proxenetas ) rufianes. 61 / Escaneado con CamScannerLs eligrosidad y Rehabilitag &F safre varias modificaciones cig Este texto también considera = jetos peligrosos, sustituyendo |g a or «aquellas personas que rs a las que se articulan medida 1996: 203 Aliaga ves Je el régimen estaba esp Se. mento en 444 s considerada: S como Jas persona’ | los vagos ¥ maleantes, aquellas que en. encial o que de hecho transgreden con sy fandamentales de la moral, la vida astigo, Antonio Savater Tom{g osamente sobre la «contagiosidad del homose. ba verdaderamente alarmado ante el peligro M.E., no solo eres percibida como una mujer r tanto una mujer fea o un intento ademas que segtin tu expediente amiento indeseable y reincidente, ue requeria de la intervencién del ulsos. Sudaca, gitana, mora, ne- da en la lectura de la sexuali- inante para generar discur- n racializada, anudando ion social, racial, Sommervi- ola propiedad. E] juez que te ¢ escribid gener’ xualismo» y esta de tal desviacion. y travestida, y PO! masculina pensemos fallido de yar6n; eras una sudaca de comport una problemdtica bebedora q| Estado para controlar tus imp! gra, etc., la inscripcion racializa dad desviada es a menudo determ: sos sobre la peligrosidad y degeneraci61 consideraciones racistas sobre la degenerac moral y sexual de estas personas (ver por ejemplo Ile, 2000: 16-38). Si salié oe aliiatl esta noche a dar una vuelta Clark, M. E.yyo z ‘ B a c rid de hoy, serfamos conscientes de cémo nuestté inidad seria observada por los demas @ través de un 62 _A Escaneado con CamScannerramiz atravesado por las experiencias raza, etnia, religion, ocupaci6n, edad, entre otras (Halberstam, 2007: 198) yo somos profesionales liberales, aparente discapacidad y urbanos, percibidos como chaval una edad indefinida -asistida por nuestro aspecto- . d masculinidad mas o menos convincente, con las ene de tener cuerpos asignados como mujer, Y sin mbar pesar de ars situacion de Privilegio, encarnamos una competencia profesional que es cuestionada, evidenciada por nuestra organizacion del tiempo y el espacio que no se corres- Y expectativas de clase, belleza y personalidad. - Importarfa que Clark , blancos, de clase media, sin les de le una ropias O,ya ponde a los patrones heteronormativos que giran hegemonica- mente alrededor del orden familiar (Halberstam, 2005); nues- tro posicionamiento ambiguo en términos de género y sexua- lidad se hace insoportable para muchas personas, ya que no terminamos de ser percibidos con una edad que se corresponda a la cronolégica; de hecho, representamos muchos cuestiona- mientos simultaneos e interseccionales (Platero, 2009). Mientras, M. E., es mas que posible que a ti te delatasen el acento, el color de piel y tu saber estar, y asf serfas percibido como un travelo sudaca. No tienes «ni oficio ni beneficio». Eres facilmente identificable encarnando una masculinidad de clase obrera; ademés se te asocia con la prostitucién, los rufianes y los maleantes, tal y como la construyen los ojos propios de tu tiempo en el marco de la peligrosidad social. Curiosamente, las minorfas sexuales de hoy dfa parece que nos hemos olvidado de otras personas en los margenes y posibles aliadas, como las Putas, sin papeles, seropositivas, etc. Con estas y otras diferencias, cruzando las fronteras del tiempo . i jus- Yel espacio, a los tres se nos percibe como personajes desaju: A _ eee tados, impostores travestis que encarnamos diversas versione: 63 Escaneado con CamScanner|, Estamos transgrediendo normas y logicas. Estamos en el a Li pan Cig definicions OS ae binarios no 80, Ja no piolgic0 poco mujeres. Desordenam Mos varones Dl A los yar0! - sexual ; la clase social, la raza, la Ea d i Ia belleza, la salud mental, * dela inasoulinidad 0 naturales . jecen ©01 tabl ‘6n; dentro de I enero, tencia social ¥ han estudiado tu aparien. Icetines y calzoncillos») y para medir tu cuerpo y a de un cuerpo aparentemente normal («El clitoris es de un tamafio normal») ponia sobre la mesa la necesidad de observar su genotipo y las influencias ambientales que han llevado a una mujer a comportarse de esta manera. Te y al desnudo frente a los ojos de los repre- Pongo los ojos en mi tiempo y me pregunto nos sentimos) todas las personas de «sexua- vamos al fisioterapeuta, por los protocolos médicos, pro- les que implican desnudar- se; 0 al tener que vestirse con ropas que tienen una adscripcion de género muy rigida; o al tener que desarrollar un comporta- miento construido como de hombre o mujer; 0 al mostrar las cicatrices y marcas de nuestras propias opciones, Y exponernos a la mirada ajena. Pienso en las diferentes sanciones a las que nes Pht ne nos tratan nuestras familias, nuestro en- Leocon nfado oe ae id es cualquier espacio social. Cont inoue tees yy se esta exigiendo mostrar el de nombre. para acceder al cambio registral an examinado, jedad («usa ca han desnudado Ya sabiamos que T hi tus formas. La evidenct: imagino, sin ropa sores franquistas. cémo se sienten ( lidades desviadas» cada vez que cuando nos sometemos a ejemplo, ‘as social cedimientos legales 0 practic: Me pre . -gunto si tus los af padres te apoyari ios sesenta, 0 si poyarian entonces, a final , © si ahora , a finales de , encontrandote S en el momento 64 Escaneado con CamScanneractual, a la luz de los cambios sociales, tus padres elegirfan apoyarte. al rechazo de tus elecciones personales o se atreverfan a rom- perlas ofreciéndote su apoyo? Sabemos por la Guardia Civil de Hospitalet que tus padres mandaron una carta afirmando que «no saben nada desde el 30 de diciembre de 1967 cuando se ausento del domicilio». Te fuiste un dia antes de nochevieja para no volver, tres meses antes de que te detuvieran y nun- ca miraste atras. ¢Necesitaste irte para encontrar tu identidad, para poder vivir mas alla de los limites de tu cuerpo y tu bio- grafia? ¢COmo te ganabas la vida? Bibliog! acl (199) «La Psicologta en| los a, Rafael ( Javier Y uavoNAs ™, psicotbema, Vill bpp. rey BANDRES,] a Frat 1 : je concenteacio” ae 2 5 (1986): LOO franquismo, cannes yo, Francisco J la Dictad: a RASTIDA REVEDO sen ‘supremo e” dura. Bare - del miento politico nénerO» Barcelona, Paid6s, pens Jona, Ariel. : “pushover if : BUTLER, Ja (08 ; 1998)? Female Masculinity. London, Die HALBERSTAM, J : S. ): «Boys will be... Bois?: Or, Transgen. University Pres HALBERSTAN der Feminism an tersections betwee McMillan, pp- 97-115- ): Ina Queer Time and Space. 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Una decoracion tipica de un chalet de personas liberales de cierta edad, en realidad. Pero: en el s6tano, varios bolsos voluminosos, cada uno mar- cado con una barra de maquillaje que dice «drag». En el garaje tenovado de la planta baja, un batil, con la tapa cubierta de polvo, repleto de material para sadomasoquismo. En el primer piso, mi oficina, donde escribo los libros que ganan el dinero que paga todo esto. En el piso de arriba, nuestra habitaci6n. Hay dias en los que mi pareja se queda en la habitacién todo el dia, baja solo a hacer pipi y a comer. Esos dias, trato de encon- trar trabajos que pueda llevarme arriba, para estar cerca de él Y que podamos tocarnos de vez en cuando. El mira la tele con subtitulos Para no distraerme, o se entretiene con juegos en su ordenador, o dormita, mientras el dolor traza surcos desde su hatiz hasta las comisuras de su boca. | “erano pasado en el jardin delantero: 71 Escaneado con CamScannerstuviera tan gorda ~dije jor si no & He os, ia mucho m4 A ” jos justo do nde estaban a, —Me sentiri mis gordos mus Jon de hormigo”- | Jo la espalda, plantando algo. podrias hacer mas ejercicio —dijo— 7 rfamos comer mas frutas y verduras, a car otro bulbo de la bols as Yo Ita para sa las mano: S sy llorandg a golpeando ahi, en el sca Me estaba dand alo mejor lad es que debe: verd: Cuando se dio la e estaba sostenl a. con mi moco tendido. . A _-Ay, corazon —me dijo, y se sento a mi lado en el escalén, y me pasd el brazo por los hombros—. {Qué te pasa? No tenfas que estar de acuerdo conmigo —me temblaba Ia vOZ. —Ahhh —dijo, pensativo. Nos quedamos sentados al sol mien. Me abrazo—. Lo siento mucho, tras yo intentaba controlarme. on —dijo con sinceridad—. Siempre pienso que eres una corazt machorra grandota, y para una machorra grandota eso no se- ria importante. Pero se me olvidé: eres un maric6n grandote, y por supuesto que importa. ¢Cémo podria no amar a un hombre como él? No puedo Ilamarlo mi «esposo». Tuve uno de esos y sé lo que significa la palabra. Se refiere a alguien que suspira y mira ha- cia otro lado cuando te excedes en la cuenta de cheques. La gir cee ata hermowo para que pueda disfru- inclasificables potajes a fi oh esto; (2 coc er ee nien una semana, qui uego lento que no podemos acabarnos ciente agua y pean recuerda que tengo que tomar sufi ee Cones B para no estresarme demasiado: por su salud, preguntan ¢ huestros amigos cercanos preguntan 6mo se ha estado sintiendo mi esp 72 Escaneado con CamScannerilrimamente. Para todos los demas, sin embargo, es mi ae esposi una palabra extraiia, tiesa, torpe, pero POs. Es S la tinica que tengo. ard mide un metro ochenta y dos y es delgado. Tiene unos arga y una barbilla sua- on a Y a veces a Bugs Bunny. su pelo es un campo de trigo ondulado que seria la envidia de muchos hombres con la mitad de sus aiios; le frustra que se Ie alborote tanto y quiere raparselo, y yo le suplico pase haga: me encanta meter los dedos y sentir sus rizos htimedos y Edw: oa rmes OJOS azul grisdceos, una cara | eno’ y ‘a veces se parece a David Bowie roscos. A veces la gente nos dice que nos parecemos, y supongo que sf: hay algo tal vez en los ojos grandes, levemente saltones, o los dientes que hacen que nuestra dentista ponga los ojos en blanco y suspire desesperada. Tiene unos vivaces senos pequefios. En estos momentos no pienso que sean algo tan raro; muchos hombres de edad me- dia tienen senos. Pero me cuenta que, cuando era mas joven, provocaban que le lanzaran miradas fulminantes en los clubes gais, tal vez porque a Edward le gustan sus senos, le gusta usar camisetas apretadas, con las mangas y el cuello recortados, y la tela muy delgada, de modo que la parte superior de su cuerpo parece la de una chica adolescente. A mf también me gusta esto; tiltimamente he estado buscando maneras de envejecer algunas camisetas mds para que queden tan suaves, delgadas y transparentes como las viejas que él tiene. Posee una voz hermosa, profunda y precisa y emotiva, ae de un locutor de radio de los de antes; dice que su maestra de ‘eatro del instituto le ensefié a hablar asi. ucho mas lento Algunos dias camina derecho, a un paso no m poya con fuer- Aue el mio. Sin embargo, casi todos los dias s¢ a! 73 Escaneado con CamScanneron de madera grueso, y cada tantos pasos tep, ver en cuando Jo miro desde 6)08 id be ar lento, incl. r im delantes gafas gruesas, yestido con varias capas ds nado vat pana y un gorro que le llega a los ojos~ y |, con un za en un bas! sudadera' confundo oa veces hace una 1a; todavia NO- anciano. Y entonces me acerco a él, y sonrje se rompe la ilusion y me sicnts aliviad Ya vamos por nuestro tercer ney- os de las lesiones de sy hace 25 afios, cuando se iene? Nadie Jo sabe. malhumorado- Sabem jones: sucedieron un chofer borracho. Explican res musculares. Pero no te -siempre en un lugar jo, ni las punzadas en las lescargas eléctricas que u torpe coordinacién eQué ti rologo caro Y columna y articulaci paré entre un carrito de bebé y Ja artritis y tal vez algo de los dolot explican la agonfa que surge de repen distinto-y que lo tira de rodillas al suel manos y pies que dice que siente como d salen de los extremos de sus dedos, ni s' que significa que yo SOY quien debe Ilenar los largos cuestiona- ‘tan los neurdlogos y después ni siquiera miran. becera, un buen amigo, dice que por aho- dad de Edward». rios que solici Nuestro doctor de ca ra la llamaremos la «enferme encargo de ga- La enfermedad de Edward significa que yo me para mi. Mi nar gran parte del sustento, lo que est perfecto iiltima pareja me dejaba ganar todo el dinero también y no tenfa la enfermedad de nadie. ane ev ii aio a tes min Eso Ns 2 oe lo ree ver la tele y hacernos mimos y dor- he tenidd Inds nee ‘ecto, pero, gsabes qué?, tengo 50 aos eae ee oa la mayoria de la gente. Me voy de me cuando regreso to la necesidad, y él esta aqui esperando- Y eso es suficiente. 74 Escaneado con CamScannerNos casamos el afio pasado, en el juzgado a Alameda tt puso un traje negro que yo le regalé en Navidad, Le eae ie perfecto Y le hacia clegante Y sofisticado; definitivamente D ‘ vid Bowie. Lo vi con él puesto y ensegnida me An di cuenta di Jo que yo planeaba ponerme era desalifiado y absurdo coe : Sefer pone que la novia es la guapa, pero todavia pude ir enelcaos de unas rebajas posnavidefias yestido para el dia de mi boda. de compras ¥ me compré un nuevo Los anillos que intercambiamos son de titanio, con un termi- nado martillado. Por supuesto, no se puede martillar el titanio, Un joyero hizo con mucho esfuerzo un molde con una textura martillada y vertié el titanio derretido en él. Pero Parecen ani- llos de titanio martillado. Me encantan: son fuertes, hermosos y no son exactamente lo que parecen ser. La mayoria de nuestros vecinos piensa que somos una pareja amable, comtin y corriente, de edad media. No saben, 0 no les importa, o son demasiado educados para especular, lo que po- dria significar que un tipo use una camiseta apretada que deja Ver sus senos, 0 que una mujer se corte el pelo cortito y camine arrogante dando fuertes pisadas. Unos cuantos vecinos -la lesbiana y el hombre gay dos casas mas abajo que se casaron y tuvieron juntos un bebé, y la pareja interracial de radicales de los sesenta del frente- conocen una verdad diferente sobre nosotros. N i alguna No estoy segura de cual es la imagen correcta, o de si algu de ellas lo es, Si sg gamos la a >No obstante, que todas las noches, cuando ap en la y ente, ZY yo me acuesto de lado y me enrollo suavem . ” Escaneado con CamScannerartes oscuridad, y las P4 arte tr? resionan la pa mis musctl fos, que dos pi siento que n pe se vuelve 76 s delanteras de sus muslos | arg ra de los mfos, cortos oad Jos se suavizan y entibian. va mag estamos en casa. +7 mig Es scaneado con CamScanner6 Querido baiio austiniano Para discas StormMiguel Florez Tii. Ta me entiendes. Siempre me esperas con los brazos abier- tos tan pronto me bajo del avién en el Aeropuerto Interna- cional de Austin-Bergstrom, y también siempre me despides cuando es hora de irme. Sin importar a dénde vaya, te pienso, te deseo y te extrafio. Tu compafifa me tranquiliza y consuela por completo; nunca me he sentido tan seguro como cuando estamos juntos. Acabo de regresar de Las Vegas, y el viaje me hizo darme cuen- ta de lo mucho que me haces falta. jEsta relacién a larga dis- tancia me esta matando! Estuve en varios casinos y en dos ae- ropuertos, pero no estabas en ningiin lado. Cuando te busqué entre el bafio de hombres y el de mujeres, solo vi el cuarto de la limpieza. Odio tener que ir al bafio de mujeres, pero no me qued6 otra. Me sentf sucio. Todo el tiempo que estuve ahi no dejaba de pensar en que me aguardabas en Austin. Pero debes entender que me duele esperar tanto. Literalmente duele. Es un dolor fisico, Ojala entiendas por qué lo hice, tuve que hacerlo. Después de todo, soy humano y tengo necesidades. Te prometo que no significé nada para mi. ‘ i sf Fuimos al restaurante del hotel y me urgia estar ee go : i ic r usa! que decidi hacer el viaje de regreso a mi cuarto para ae ave ii a fiaba. Le tu’ ¢l bafio ahi. Mi hermana dijo que me acompaiiaba 77 Escaneado con CamScannerqué. «Hay un bafio afuerg qué que odio los bafios pyipy, el se. bs « co mor) lo respondié: No te Preocr § a Fi ie me entiende! es, (menos 4 ti, ml ete vie Acababa de bajar del ayig re . on do la ol c yntraba en un lugar en el que nunca habia estaga, encontraba te , ; e a cosquilleo que me da cada vez que Viaio dia creerlo, era demasiado bue te vi. No po do que me acerqué con cautela, me echazado, pero me sentfa tan atraido hacig e no hubo marcha atras: tenia que saber si eras para my, acogiste. En ese momento supe que ha. e llevaba toda la vida buscando, Recuel y me empecé 4 senti cuando de repente no para ser verdad. Recuer daba miedo ser ™ ti qu ‘Abriste tu puerta Y me bia encontrado aquello qu He estado con muchos otros, pero nunca me he sentido del todo bien. De hecho, todo lo contrario. Siempre me siento mal de hacerlo con ellos, pero n0 puedo controlarme hasta la Esperar me matarfa, por eso hago lo préxima vez que te vea. que tengo que hacer hasta volverte a encontrar. Ya no puedo esperar para vernos otra vez. ¢Cudnto falta? ¢Dos semanas? Y luego, ¢dos meses? Es una tortura. Les hablé a mis amigos sobre ti; no lo pueden creer. Me encan- tarfa que algiin dfa los conocieras, porque lo nuestro es amor verdadero. No conozco a nadie como ta. Bueno, esta el baiio del Parkway Theater, pero no es lo mismo. No es tan bueno como estar contigo. Nos vemos pronto. Escaneado con CamScanner7 Identidad, identibla Telyn Kusalik Dado que soy una persona de género mixto, nuamente cuestiona mi identidad de género, me preguntan: «¢Cémo te identificas en cuant o «(Qué género gramatical utilizas?», suelen hacer la pregunta menos sofisti o mujer?». la gente conti- Algunas veces ito al género?» Con mayor frecuencia, icada de «Eres hombre Si fuera mujer «u hombre» estas preguntas serian faciles de responder; como no Soy ni lo uno ni lo otro, mi res- puesta siempre es larga y complicada, y conduce a toda una conversacién sobre mi identidad. En lugar de hablar acerca de reparar bicicletas, de como hacer un sorprendente curry vega- no* o de la genial pelicula alemana que proyectaron la noche anterior, acabamos discutiendo sobre identidad de género, No es lo que yo prefiero. Me desenvuelvo en la subcultura «queer radical», para la cual la identidad es una cuestién central. EI principal paradigma Politico con el que operamos es el de las politicas de la identi- dad: resistir la opresién de las personas de un grupo identitario Por parte de las personas de otro grupo. La gente forma comu- nidades a partir de una identidad compartida, lo cual genera €spacios exclusivos para las mujeres, para las personas trans, Para las personas de color, etcétera. En mi experiencia, la gente RO tiene idea de cémo interactuar conmigo hasta que se ente- tan de como me identifico. 79 Escaneado con CamScannerdoa la conclusion de que Ia iden, he llega a de pensar En primer lugae ho, me resulta mu. dentitaria fija; mj Por muchas razones, ri 1 tidad no es central para ™ | cl ente CO aren fectament oa sion ; me resulta per oget 5 escog ae isteri ne ontinta siendo un misterio para cho mas comodo- énero en particu jar mera gue orientate r e afecta cuando |g énero», por ejem- 2 rf ee ifico como una. En tercer lugar, estar en espacios basados en la que hacen un esfuerzo especial ee ; jdentidad. A diferencia de una gran i jbo a otras perso- dentidades. Por supuesto, al a menudo no logro Ita mas natural con- Io de hee propio a no me ¢ inos de i ha moldeado, pero me resul ncias compartidas. nas principalmente e” cérmi igual que la cultura que me evitar pensar en €s0S términos, ‘ cebir a la gente como unida por sus experle | verano pasado experimenté acoso sexual mien- tras compraba un sandwich. El hombre detras del mostrador me pidié ensefiarle «lo que traigo debajo de la falda». Con todo Jo que me repugnd su comportamiento, senti cierta obligacion i sandwich en vez de seguir mis de quedarme ahi y terminar mi instintos y salir corriendo. Me senti afectadx después de esta experiencia y busqué especificamente el apoyo de amistades que habian vivido un acoso similar. En este caso, la identidad no era tan importante para mf como la experiencia. Por ejemplo: € A decir verdad, no hay manera de negar que esta experiencia 7 beri a fuera una experiencia con género. Tengo la a ae que, si el hombre del mostrador me hubiera leido re, no me habria dicho lo que me dijo. De hecho, la 80 Escaneado con CamScannergran mayorfa de mis amistades que ha: Nn sido acosad, v3 ? las sexual- mente también fueron lefdas como muj al Cres © chicas cuando las acosaron. Es importante notar que el factor relevant acoso sexual no es la identidad de género del género. Algunas amistades y conocidos so, de hecho, no se identifican como mu » sino la bercepcion que han viyido aco- . eres; se les percibe como mujeres. En mi busqueda de apoyo, la cuestién clave no era su identidad de género, sino los significantes del género que les Ilevaron a ser percibidxs como mujeres. Si no acepta- mos que el acoso sexual es una experiencia con 8énero, jamas podremos visibilizar el sexismo implicito en muchos casos de acoso. Sin embargo, al abordar este tipo de experiencias del gé- nero, podrfamos encontrarnos con que la identidad de género no es la categoria mas util para hacerlo. Esto de hablar del género como un conjunto abstracto de ca- tegorias identitarias es lo que me parece intitil. No encuentro fascinacion alguna en hablar sobre cudntos géneros puede ha- ber, sobre cual es el verdadero significado de genderqueer, ni sobre cudl es la diferencia entre el tercer y el cuarto género, ni siquiera sobre cuales de mis amistades se identifican con una Uotra combinacién de estas denominaciones de género. Siento incomodidad cuando me preguntan de qué género soy o cémo me identifico; dudo que indicar con cudles de estas categorias abstractas me identifico les ayude a las personas a entenderme mejor, , ien sobre mis Por otro lado, siempre me gusta hablar con alguien s . ‘Oo no res- ©xperiencias de género. Por ejemplo, aunque prefier an », me Ponder la pregunta «Eres hombre o mujer?», m 81 Escaneado con CamScanner 4ue frecuencia te perciben con me resulta un tema de ¢ 0 ‘On. ndo se vuelve algo concrey cto de «gon gi Fi | genero or? ‘lg : activo ua > en lugares basados en identid, cios exclusives de mujeres 0 de personas espacios ue las categorias identitarias no mas relevante para Jos objetivos de dj. ye estos «espacios» serian mucho en términos de experiencia en acio feminista clasico: una jicada a combatir el sexis- Jecer el mandato de «solo erimentan el sexismo y, cial en la lucha contra tales espacios olvidan e nada en los hom- Consideremoss por ejemplo, el = n exclusiva para mujeres det (para mi) de establ las quienes €xP un papel espe reunié mo. La razon obvia mujeres» es que son él por lo tanto, desempefian este. Sin embargo, Jas organizadoras de que hay algunos hombres (pienso mas qué bres trans, pero tengo la seguridad de que hay otros también) a quienes 4 menudo se les percibe como mujeres, de manera que experimentan sexismo todos los dias. También hay algunas mujeres que son percibidas como hombres y que quizas solo experimenten sexismo de forma ocasional. Aunque existen al- gunas formas de sexismo que todas las personas que se iden- tifican como mujeres sienten (y tnicamente ellas), hay otras em pret cme como mujeres, ¢serfa =e aioe cap : Ss para todas las personas que ex} meee ee ge esto pueda crear un espacio en Pa ae a el que algunxs de sus particr 82 Escaneado con CamScannerpantes experimenten sexismo dentro del espacio por parte de otrxs participantes, esta circunstancia igualmente puede ocu- rrir en un espacio exclusive para quienes se ide ntifican como muje Desde hace décadas ha habido en la comunidad feminista una vociferante faccion que intenta (y a menudo logra) mantener acios de mujeres, argumen- tando que en realidad no son mujeres «de verdad» a las mujeres ¢ ‘ans fuera de los esp ; r Durante la mayor parte de ese mismo tiempo también ha habido una fac- cién muy vociferante de personas trans y aliadas que protestan ante esta exclusién. Ambos bandos se apoyan en argumentos identidad para defender su causa. La pregunta, tal y como se debate y discute, es si las mujeres trans son o no son mujeres. basados en Ia Pero el debate no tiene que ser sobre quién si y quién no es una mujer. Este tipo de discusiones se vuelven irrelevantes si empezamos a organizar nuestros eventos, reuniones y grupos de trabajo en términos de la experiencia del sexismo en lugar de las identidades. Me atreverfa a decir que todas las faccio- nes involucradas en el debate tienen claro que la mayoria de las mujeres trans son percibidas como mujeres y, por lo tanto, experimentan sexismo en muchos contextos. Incluso en el caso de una mujer trans que esta siendo «leida» por alguien que fiscaliza la inclusi6n de género e «interpretada» a partir de una historia personal previa que no corresponde a la de una mujer, ella puede recurrir a sus experiencias de sexismo en la vida real como evidencia de su pertenencia. et ‘a. un espacio Una ventaja de tomar la experiencia como base a ee , i cl ds facil dem feminista es que, si te cuestionan, es mucho ae ‘dad. Esto , i idad. cémo te perciben que probar la validez de tu ident 83 Escaneado con CamScannerque algu' . i at acuya identidad de mujer «real» seq Puesye (o ef acceso a servicios o a la comunidag *&h ien con prejuicios contra las mujeres te dificul contra cualquier duda) les impida Muchas feministas contempordneas han reconocidg qu, ten muchas formas de sexismo (como la objetivacign a o que experimentan las mujeres trans, y otras (como no tene, al) ceso al aborto) que experimentan los hombres trans, Ast Fe a, estas feministas han trabajado para crear espacios de ~ = y personas trans» que estén abiertos tanto para hombres ‘ Tes jeres trans como para mujeres cisgénero. Esta practicg abre espacio feminista a algunas personas que no se identifica, perciben a ellas mismas como mujeres, partiendo de que dich, 0 personas experimentan sexismo. las Por desgracia, estos espacios «trans y de mujeres» gj ser lo suficientemente abiertos. Existe gente que ex; sexismo y que no necesariamente se identifica com como trans. El espacio feminista ideal estaria abie; las personas que experimenten sexismo, BUEN sin Petiment, © Mujer pj TCO @ todas » Ya Sea por ser percibj. das como mujer, por tener un ttero y/u ovarios y/o un balance hormonal dominado por el estrégeno, por manifestar cualida- des que se perciben como «femeninas» o por tener una imagen personal negativa provocada por vivirse a si mismas como mu- jeres en esta sociedad sexista. Reorganizar el espacio feminista para que sea incluyente con todas las personas que experimenten sexismo, independiente- mente de sus identidades de género, seria tan solo el primer paso. Hay muchas otras maneras en las que podriamos creat tuna cultura enfocada en las experiencias de género y no en identidades. Podriamos hablar de nuestra orientacién se 4 Escaneado con CamScanneren términos de cuales presentaciones ¢ no de cuales identidades. Podriamos de tades y conocidos ante la gente el género nos atraen 7 scribir a nuestras amis- apelando a sus experiencias mnoeidos ante Jt gen 4 sus experiencias y 0 a las categorias identitarias a las que Pertenecen. Esper noa i 0 que podamos dejar atrés el hablar de las cosas en términos identidad y avancemos haci a de ident y hacia un paradigma basado en la experiencia. *El increible curry vegano de Telyn Sobre el que ellx preferiria hablar % cucharadita de semillas de comino ¥% cucharadita de semillas de mostaza Aceite de cocina 2 cebollas medianas 4 zanahorias medianas 1 batata dulce o boniato grande Especias de curry al gusto (segtin lo que se tenga a mano, utilizo comino, ctircuma y cilantro, o curry preparado en pasta o en polvo) 1 lata de garbanzos lata de 14 onzas (aprox. 400 ml.) de leche de coco Coloca las semillas de comino y de mostaza en el fondo de una olla grande y ctibrelas con aceite. Pon la olla a fuego medio y pica las cebollas mientras las semillas se cuecen y liberan sus sabores. Echa las cebollas en la olla y saltéalas. Mientras las cebollas se cuecen, pela la batata dulce y pi- cala en cubos de un centimetro, pica las zanahorias en tro- 85 Escaneado con CamScannerzos mas 0 menos del mismo tamafio, Las cebolla estar bien cocid las demas verduras. Agrega las zanahorias y Ia batats cada dos minutos. Silas verduras es hien. r¢gales media taza de agua, Defa gy las 5 dehy hy any de cone | jas para cuando hayas terminady Ia olla y revuelve zan a pegarse, ag} verduras se cuezan en el vapor de sus propios jugos ie 5 an. te al menos 15 minutos. Ahora es un buen moment pa sidiv'c , ara comenzar a hacer el arroz 0 decidir con qué otros platil = latillo, yas a acompaiiar el curry. 8 Una vez que las verduras estén tiernas, agrégales agua hasta cubrirlas; agrega también los garbanzos y los condimentos, Lleva todo casi a punto de ebullicion y déalo cocinarse du. rante aproximadamente 30 minutos, mezclando de manera constante, pues el curry tiende a pegarse. Prueba Ja saz6n para verificar si le hacen falta mas condimentos (a mi siem- pre me pasa). Si atin hay trozos de boniato y el curry esta muy liquido, deja que se siga cociendo. Sabras que esté lis. to cuando la batata se haya vuelto puré y haya espesado el curry. Retira del fuego, agrega la leche de coco y revuelve, Sfrvelo con arroz 0 pan naan y yogurt. 86 Escaneado con CamScannern 8 Dejar salir mj luz Leona Lo Cuando se publicé el fotolibro My Siste 1s, Their Stories! pm : e 2003, quedé bajo los focos como la prime: . Ta mujer trans que se i ' ; junidad trans «invisi- ble» de Singapur. Me ahogué en solicitudes de entrevistas para medios nacionales e internacionales, ¢ atrevié a alzar cl velo que cubria ala com s Cuantas mds entrevistas daba, mas confiada me sentia para hablar sobre los derechos mpre afirmaba que lo hacfa tinicamente desde mi experiencia personal. Con el tiempo adquiri popularidad como «activista» trans, aunque siempre negué serlo. No crefa estar cualificada ni ser lo suficientemente valiente como para ser activista. de las personas trans, a pesar de que Ser activista de cualquier indole en Singapur implica que eres facineroso, aunque Ixs singapurenses no hacen asociaciones tan sofisticadas como para entender «facinerosa» en sentido figurado. Por ende, me describian como «radical». Radical es la persona cuyas acciones y ambiciones se distancian de las normas y expectativas tradicionales. En Singapur, ser normal implica tener horarios de oficina de 9 a 6, casarse, comprar un apartamento... o, si eres mas exitosa, una propiedad a la orilla del mar y un carné de socia del country club. Irénicamente, esas cosas, pero, por el sim- Yo también aspiraba a algunas de ; gia de reasignacion ple hecho de haberme sometido a una cit a 11 Viscom Editions, 2003. 87 Escaneado con CamScannerno solo por €S0, sino también por estar fuera del armario-, se me consideraba «radical». Cargar con la Stiquerg ae «radical» en Singapur no es motivo de orgullo, Equi lea ser un tonel con una od as oe “SUSTANCIAS tOxicagy Solo asf mis compatriotas podian asimilar mi lugar y mj Pape| en Singapur. sexual -Y La facinerosa habla y se comporta de formas que transgre. den la convencin social. Tras el lanzamiento de mi biograta, From Leonard to Leona: A Singapore Transsexual’s Journey tg Womanhood," mi fama como la facinerosa trans de Singapur quedé grabada en piedra. No obstante, seguia rechazando ser vista como «activista». No trabajaba de forma activa ni cons- tante para crear conciencia sobre cuestiones trans; solo aborda- ba el tema cuando se presentaba la oportunidad, como cuan- do me expulsaron de un antro popular después de llamarme «mujercito». No obstante, tres sucesos que ocurrieron en 2009 modificaron mi perspectiva de forma radical. EI primer catalizador de mi activismo fue un intento de secues- tro del prominente grupo singapurense de derechos de las mu- jeres AWARE (Asociacion de Mujeres para la Accién y la In- vestigacion). AWARE Ilevaba afios impulsando discretamente la agenda feminista en el pafs. La asociacion creé un pequefio espacio para lesbianas en el que pudieran compartir sus inguie- tudes, lo que incluyé la proyeccién de una pelicula de temétice lésbica y la organizacién de un festejo del Dfa de las Madres incluyente para lesbianas. En su plan curricular de educaciét eee ere N. concepto neutro, con la intenci6n de sent las b: I" ases de un entorno de aprendizaje tolerante y comprens! een 12 Select Publishing, 2007. 88 4 Escaneado con CamScannervo para la juventud homosexual, Usan como justificacién, un grupo de felij glicana Iglesia de Nuestro Sal do esta «ideologia gay> igresas de la parroquia an- Ivador (COOS), fai . . . }, famosa por su fundamentalismo derechista, organiz6 un golpe para eet a las cabezas de AWARE en las elecciones generales anuales. Sus acciones atrajeron la atencién de la nacién cuando una reportera del emblematico periddico singapurense The Straits Times dio a conocer la noticia. De ahi devino una prolonga- da batalla (descrita en los medios como «pelea de gatas») que culminé en una exagerada contienda entre la vieja y la nueva guardia, y sus seguidoras, Por primera vez, las lesbianas y los hombres gais singapurenses salieron al paso para respaldar a las lideres anteriores y orquestar la expulsién de la nueva guar- dia. Yo no solo blogueé activamente al respecto, sino que fui la tinica mujer trans que participé en la culminante Reunién General Extraordinaria. Con el incidente de AWARE, la iglesia anglicana expuso pi- blicamente por primera vez su fundamentalismo, el cual seria rechazado nada mas y nada menos que por el primer ministro de Singapur en el discurso que dio durante el Desfile del Dia Nacional. Las cabecillas del golpe que estaban afiliadas a la iglesia también recibieron abucheos en la Reunién General, lo que senté las bases para el regreso de la anterior dirigencia. Por desgracia, fue una victoria efimera. El ministro de Educacién cedié ante la presién publica, llevé a cabo una revision del programa de Educacién Sexual Integral de las escuelas y deci- dié eliminar a AWARE como proveedora de educacién sexual hasta que «recuperara 1a confianza piblica> en su programa. Los fundamentalistas cristianos triunfaron en las aulas y logra- ron bloquear el esfuerzo humilde pero significative que habia hecho AWARE para aniquilar los estereotipos negativos sobre la homosexualidad en el entorno escolar. 89 Escaneado con CamScanneret fa lo que era enfrentarse a COOS. Hace a ndo yo era apenas una joven trans Preoperary. n famoso ex transexual de COOS me vet padres, para «aconsejarme» que no m, i Por Me conto que atin albergaba Sentimiento. otros hombres, pero que no los expresaba Porque eran aa nosos ante los ojos de Dios. Viéndolo en retrospectiva, fy = primer roce con el fundamentalismo cristiano de la awrupacig Enfoque a la Familia, fundada por James Dobson, ive = vinculos estrechos con COOS. Tras el incidente de AWARE, hs singapurenses han empezado a darse cuenta de cudn artaigads esté el fundamentalismo cristiano en nuestro pais y de cémo gy ideologfa antigay y antitrans no solo deforma las vidas de kh juventud LGBT, sino que también amenaza la unidad nacional, Yo ya sab década, cua rransiciOn, un f invitacion de mis tiera ala cirugia. En agosto de ese mismo afio, puse en escena el monélogo 4} Kua Show™ sobre mis experiencias de infancia y juventud en Singapur. Era la conmemoracién de una voz trans que se ya fortaleciendo con cada ataque, una voz de resistencia pacifica enmarcada por la poesia y el performance. Me conmovié que un grupo de estudiantes de mi alma mater, Hwa Chong Junior College, fuera a ver la obra y se quedara al final para expresar- me su admiracion por el camino que elegi. Por primera vez, me senti reivindicada y valorada como disidente de género. Quizé la iglesia anglicana triunfé en las aulas, pero la nueva gene racion de estudiantes singapurenses no est4 conformada pot borregos descerebrados. La verdad -y la revolucién de inter net- les ha abierto las puertas. Por tiltimo, en noviembre de 2009, John Chew, el arzobise? anglicano, se pronuncié en contra de los tres «ejes del m# ————. mado. nslish, 0 inglés cologuial singapurense, «ah kua> significa #*™! ado 0 travesti [N. dela], 90 4 Escaneado con CamScanneren Singapur: la homosexualidad, el materialismo exacerbado e, irénicamente, el fundamentalismo religioso. Le atribuyé la descomposici6n de la unidad familiar y el declive de los valores morales a los estilos de vida alternativos de los homosexua- les, lo que es, sin duda, una afirmacién desmedida. Esta tiltima provocacién por parte de la iglesia anglicana ha fortalecido mi decision de realizar investigaciones sobre el repunte del fun- damentalismo cristiano en Singapur y desarrollar soluciones creativas para frenar los excesos de la derecha religiosa. Quie- nes ya somos disidentes de género debemos detener la caida de la sociedad por el resbaladizo desfiladero de la discriminacion y la culpa que, en tiltima instancia, histricamente ha derivado en genocidios. Tafie las campanas que atin pueden sonar y olvida tu crecimiento perfecto. todo tiene una grieta y asi es como entra la luz. —Leonard Cohen Hoy en dia, yo, Leona Lo, ya no rechazo ser conocida como activista trans. Aspiro también al titulo de «defensora de los derechos gay». Mi conocimiento y valentia no ser4n perfectos, pero creo que, al sumar mi voz al coro pacifico de la resisten- cia, estoy permitiendo que entre un poco de luz. Quiza no solo eso; también estoy permitiendo por fin que salga al mundo la luz que hay dentro de mi. 91 Escaneado con CamScanner9 Impostor Quince Mountain Vivo una vida queer, aunque a veces lo olvido. El fin de semana pasado me senté con Madame Magdalene y su esclavo a beber té de manzanilla. Ella me llama Q —Q —pregunt6—, gsabes de alguien que quiera alquilar una habitacion? Miré por encima de mi taza de té, més alla del hombro del esclavo. A pesar de que la casa de Magdalene es mucho mas acogedora que su calabozo, tuve que considerar lo que un posi- ble inquilino podria pensar del espacio. La sala de la Madame transmitfa al mismo tiempo sensacién de comodidad y castigo. A los visitantes se les recibe con una encantadora mesa en la que hay un taz6n de chocolates finos envueltos individualmen- te y algunas revistas como Vanity Fair colocadas en forma de abanico. Si el dia ha sido Iluvioso, pueden dejar sus paraguas en el perchero entre miiltiples plumas coloridas de pavo real y bastones. Hay mucho espacio para sentarse, incluso si uno des- conffa de la silla de dentista cubierta de felpa. Sillones enormes tapizados con piel sintética color negro delimitan ambos lados de la estancia. Sobre uno de estos hay una almohada mullida donde la chihuahua Roxy reposa resplandeciente con su collar incrustado de diamantes. A veces me siento junto a Roxy y me 93 Escaneado con CamScannercorprende Ver argollas en la pared. Hay muchas argo, % as fécilmente por qué Magdalene Obtuvo 4, 98. Da, ne Home Depot," lugar que ella llama Dom Depos Play , lugar para un apuro —dice—. Esta abjeres cu —Gran a itios ya han cerrado. dy otros S e siempre me ha dado curiosidad saber cugles son caracterfsticas de «un apuro» para Maggie, nunca |e he p guntado. Me imagino que su madre ya le hace Suficientes 5 acerca de su trabajo. 1 Aunqu has ree es guntas —Lo siento —murmuro—, no conozco gente que esté buscan. do una habitacién por ahora, nadie que pueda encajar, La verdad es que conozco a varias personas que podrian enca- jar. Muchos de mis amigos llevan una vida nocturna, fuera del redil, definitivamente fuera del horario reproductivo estandar, Son sabios y ambiciosos, con garras afiladas y exquisitamente emplumados. Mi vida esta Ilena de vaqueros y matronas, terra- tenientes, chicos gog6, gutterpunx'’, vagos, porreros y suficien- tes poetas como para Ilenar un albergue. Algunos son notable- mente humildes, pero también hay grupos de gente orgullosa. Hay personas orgullosas de ser sordas y otras orgullosas de ser homosexuales, orgullosas de su redondez y orgullosas de ser de campo. Orgullo en formas y colores mundanos: una cornuco- pia virtual del pecado mortal. 14 Empresa minorista estadounidense de mejoramiento del hogas bicol” Je y materiales de construccién. varie 1S Gutterpunk es la persona sin hogar o némada que muestra una i“ do dad de rasgos de estilos de vida y caracteristicas especificas que # ™* ero eer Pero no siempre, estan asociadas a la cultura punk. 94 Escaneado con CamScanner{Qué os entoncey1P due NO me permite recomendar a alguien como inquilino de la oan como Inq Madame? ¢Seré mi orgullo? renuencia a ayudar a una amiga? casera? ¢Por qué esta éAcaso no creo que sea buena Creo que es esto: en el contexto de mi colorido mundo parezco jodidamente heterosexual. Sentado bajo este arco amenazan- te de anillos de metal, me siento como imagino que cualquier chico heterosexual de mente abierta se sentiria: acogido por el recibimiento de amigos, asombrado por la extrafia elegancia de la mazmorra hogarefia, impresionado por las decisiones de la vida de otros (tan diferentes de las mjas) y, he de admitir, muy insatisfecho con la intensidad con la que el esclavo preparé el té. Me siento tan normal; en definitiva, no lo suficientemente colorido para mis amigos. Magdalene me esta pidiendo ayu- da, pero ¢c6mo podria estar cualificado para ser su servicio de referencia de inquilinos? Soy un poco raro, sf. En el instituto me acosaron mas que al tomboy'* promedio. Pero eso fue hace mucho, ahora solo soy un oficinista mas. No estoy fuera del limite. No estoy dando forma a nuestra comunidad. Soy un as- pirante a escritor: un queer de segunda. Maggie me invita por- que me gustan sus poemas, tal vez porque traigo cecina, pero ciertamente no por mi propio mérito. De alguna manera he logrado encajar en una comunidad a la que no pertenezco. Es as noticias del queer genial sentirse parte de algo, oir las @ underground; pero, algiin dia cercano, mis amigos se daran cuenta de que su fe en mi idoneidad era infundada, de que no soy tan intencional como ellos, ni tan inteligente, ni tan creati- Vo, ni tan comprometido con el movimiento, con ningtin movi- 16 Tomboy, traducido como marimacho o marimacha, es un término in- 5 5 orta- glés usado despectivamente para aludir a mujeres que muestran comps mientos o ademanes masculinos. 95 Escaneado con CamScannerero servicios sociales, digo «no» a las dogg . er s5| Times. Vengo en un gracioso envoltorio, quizas, pero ¢ (4 Mm 7 Bie , soe lo tro ciudadano deprimido y fragil que sustenta d Parad Soy ol i dominante. Mis amigos son las semillas de la Tesistencia 'gma ' »Y Yo soy la paja. miento. Qui Sabiendo ese secreto, el secret de mi manera que, sin dud, alguna, pronto alguien descubrira, como podria Poner en con, tacto a la Madame con un potencial inquilino? Dentro de dos afios, cuando mi amigo (digamos que es Porkchop, el terrate. niente campesino, cuya primera casa no va tan bien como lo planed) y Maggie me inviten a celebrar el solsticio, sabré en mi corazén triste y suburbano que me invitaron por obligacién, que, habiendo tenido tiempo para comparar notas, mis amigos habran descubierto que soy un farsante. Seguiran inclinandose a reconocerme como 4rbitro decisivo de su uni6n. Pero, una vez expuesto, ¢qué valor tendré? Mis amigos son mucho mas valiosos. Y yo simplemente no estoy listo para enfrentarme a mi mismo, para enfrentar ese tipo de rechazo. As{ que contesto: —wNo, no se me ocurre nadie —y minutos después degluto el sedimento de mi bebida y me disculpo. Afuera, en Ia calle, mientras camino hacia mi camioneta, una lampara titilante del porche resalta mi soledad. Quiero un por- che algtin dia, una casa; otra de mis inclinaciones convenciona- les. Y, justo mientras estoy creando una ilusion realmente bella del asfalto de mi propia entrada, un sujeto se asoma bajo la luz de la ampara. Camina directo hacia mi y me interpela: —Engendro. —Me analiza con la mirada—. ;Qué diablos eres ti? —pregunta sin esperar respuesta. 96 Escaneado con CamScannerEn un vacio, ninguno de Nosotros es queer. Cada uno es cosa diminuta. Sin embargo, de lo que me doy cuenta des ne del comentario de Don Qué-dial los-cres es que la cosa dining, ta que soy ~de alguna manera~ es suficiente pata identiicarme como parte de una enorme cosa queer, algo que jam4s podria ser de una sola persona. El Sujeto que me sefiald la calle real- mente no queria saber qué soy. Me |o Pregunté exactamente al hacerlo, me recordé cual para reinventar el mundo. Resulta que nadie lo es, Con valentia repentina, saco el mévil y ansfo escribirle a Mag- dalene acerca del inquilino, «De hecho, conozco a alguien per- fecto», comienzo a escribirle en cuanto me responde, «Su casa se est cayendo.» 97 Escaneado con CamScanner10 Jihad Azadeh Arsanjani jibad mi coraz6n de chica transgresora queer se cans6 jibad de andar préfuga queer cargando con definiciones erradas jibad de estas palabras de sangre queer que la gente blanca jibad no deja de decir queer y, cuando las dicen, hablan de mi. jthad soy una chica de color y en la lucha, queer como toda chica de color en la lucha, jihad y; si algunas somos chicas hace poco, queer lo compensamos luchando. 99 Escaneado con CamScannerjihad okhty, hermana, si confia queer en que ¢! jihad mis bolsas estaran car, J dia que regrese 4 casa queer hambreamos juntas, y JU 100 gadas de carne y frutas ntas nos deleitaremos, Escaneado con CamScanner11 Y ti, geres nifio o nifia? Roe-Anne M. Alexander ES HORA DE UN NUEVO EPISODIO DE... Y TU, SERES UN NINO O UNA NINA? ENTONCES COLEGA... HERES CHICA O. CHICO? HOMBRE, SIN HOMARE, SIN OFENDER, OFENDER, PERO FEROERES Tf seurOESTARIAS COMO UNA ‘DIVINO VESTIDO MUJER MY ff DE COLEGIALA. FEA. HERES MORSA O RINOCERONTE? _ NO SE L0 Gu ERESTERES “4 Fh ei. arr3cRISTO MARICH! ALB JATE DE MIS BEBESp aos WY r; Io Escaneado con CamScanner12 lnterludio anil fue el verdadero hito? 2H momento cuando supe NIA que cambiar, dejar lo que hubiera que dejar, crearme a mi propia imagen y hacer una transicién? Fue pertina de Friday Night Lights, que TEs en una funcién ves- Si, la pelicula de fitbol americano, Cuando termir cl instituto ya habia visto Lucas: la inocen- cia del primer amor nueve mil vec mucha tristeza a Corey H sy habfa disfrutado con aim en su papel de inadaptado del fiitbol. Afios después, cuando vi Friday Night Lights, de pronto ya no pude fingir mas. Me enfadaba mucho que me hubieran rechazado en el fitbol americano “deporte para el que, por la raz6n que fuera, mi papa habia intentado prepararme- y estaba muy triste. Se habla de que, cuando la gente muere, st vida pasa répidamente ante sus ojos; la vida que yo debfa tener pasé répidamente ante los mfos cuando terminé Ia pelicula. Yo, vapuleado, pero no apaleado, por el equipo de fiitbol. Yo, con mi chaqueta del equipo universitario. Yo, como profundo (0, maxima alegria, jreceptor abierto!) en la universidad, qui en Colorado, Georgia o en algtin lugar de California. Yo, es- cribiendo relatos después de la universidad, publicando, dando clases. Yo, un chico, larguirucho como mi hermano, de caderas estrechas, sin senos. En otras palabras, yo como yo mismo. Rafe Posey 103 Escaneado con CamScanner