Estudiante: Oliver José Núñez Matricula:1-21-2592

Grupo: SOC-180-074 Fecha: 10/12/2021

Continuación de la época contemporánea parte II, pág. 81-90
La escuela de Frankfurt
Se conoce como “escuela de Frankfurt” a un conjunto de pensadores
alemanes que aparecen, desde el año 1922 hasta nuestros días.
Se publicó en París el volumen colectivo de estudios sobre la autoridad y la
familia, Además la personalidad autoritaria dirigida por Adorno.
La dialéctica de la ilustración publicada por Adorno.
Los estudios sobre el prejuicio, por Adorno.
La postmodernidad se definiría, según eso, por una doble caída: la de las
Ciencias y la del compromiso social. En los ambientes de vanguardia se
rechaza la razón y la lógica. Se rechaza cualquier sistematización que
pretenda englobar una totalidad, o cualquier fundamentación de tipo
teorético.
La muerte de Dios
Ya en La gaya ciencia aparece el tema de la muerte de Dios, que representa
el fin de toda concepción idealista y el fin de la metafísica occidental, y que
Nietzsche retoma en el Zaratustra. La frase “Dios ha muerto” (que fue Hegel
primero en utilizar), representa para Nietzsche la negación de todos los
trasmundos inventados por la religión, gran mentira que convierte la vida en
una mera sombra. La idea de Dios, entendida como el funda-mento del
mundo verdadero, es la enemiga. el espíritu libre es aquel que es capaz de
perderle el respeto, capaz de asumir que “Dios ha muerto”.
La ontología hermenéutica
A diferencia de la tradición cartesiana o neokantiana, orientadas
exclusivamente a la fundamentación metodológica de la ciencia, Gadamer
puede ser considerado fundador de una ontología hermenéutica: la verdad no
puede ser garantizada por un método que mira a la posesión del objeto
(ciencia), como se puede ver en la experiencia estética y el estudio de los
fenómenos culturales. La verdad se revela en un acto de interpretación que
en la historicidad de sí mismo encuentra no un límite, sino la posibilidad de
un diálogo con la tradición (“fusión de horizontes”) que es comprensible no
en cuanto “ser”, sino en cuanto “lenguaje”.