Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La economía verde tiene el objetivo de reducir los riesgos al medio ambiente y evitar
afectar los ecosistemas de ciertas especies, el desarrollo sostenible es sacar rentabilidad
de la economía verde sin dañar el medio ambiente a futuro.
la economía verde permite:
Evaluar el nivel de transformación económica y el crecimiento en las “empresas
verdes”.
Analizar el impacto del nivel de desarrollo de acuerdo con la extracción y utilización
de los recursos disponibles.
Valorar el impacto social según el acceso de la población a recursos básicos,
sanidad y educación.
Las principales críticas a la economía verde son:
La economía verde puede reducir el ritmo con el que la población mundial avanza
hacia la escasez, pero en ningún caso soluciona definitivamente el problema de los
recursos escasos.
No se propone un modo de distribución equitativa de los recursos, en otras
palabras, seguirán existiendo pronunciadas diferencias en cuanto a distribución de
la riqueza.
No aborda determinados aspectos de las relaciones comerciales internacionales. Si
no se tiene en cuenta cómo afecta al comercio internacional, puede terminar dando
lugar a una escalada del proteccionismo.
Se pretenden corregir las externalidades medioambientales recurriendo al
mercado, sin embargo, los instrumentos del mercado puede que no sean los más
adecuados para medir el impacto medioambiental causado.
Supone importantes costes para las empresas, pues éstas deben hacer grandes
esfuerzos económicos para que sus productos sean respetuosos con el medio
ambiente. Frente a ello, el economista Gunter Pauli propone el modelo de la
economía azul como alternativa, que busca sacar el máximo partido a los recursos
disponibles, todo ello sin olvidar que los residuos también tienen que ser
aprovechados
Las características que debe reunir un desarrollo para que lo podamos considerar
sostenible son:
Promueve la autosuficiencia regional
Reconoce la importancia de la naturaleza para el bienestar humano
Asegura que la actividad económica mejore la calidad de vida de todos, no sólo de
unos pocos selectos.
Usa los recursos eficientemente.
Promueve el máximo de reciclaje y reutilización.
Busca la manera de que la actividad económica mantenga o mejore el sistema
ambiental.
Pone su confianza en el desarrollo e implantación de tecnologías limpias.
Restaura los ecosistemas dañados.