San Juan Eudes, teólogo y escritor

P. Higinio Lopera, cjm

Juan Eudes respondió a su contexto con un corazón abierto y convencido de la misión
de la “formación de Jesús”, no solo desde un esquema teológico sino a partir de su
propia realidad. Plantear a Juan Eudes como doctor de la Iglesia, implica preguntarse y
adentrarse en la relación que su teología guarda con los 36 doctores y doctoras que
actualmente se tienen.
Identificar seis dimensiones en Vida y Reino:
1. La antropología que maneja Juan Eudes (¿Negativa, pesimista)? La antropología
nace de dos realidades: el pecado como realidad concreta y la Encarnación. Por
el pecado es una antropología negativa, por la encarnación es totalmente
positiva. En Juan Eudes es vital jugar con las antonimias: pecado, gracia, bien,
mal, espíritu mundo…Situar esto en dos escritos: Meditaciones de la humildad
(Antropología negativa), coloquios interiores (antropología positiva o de la
gracia).

2. La teología que maneja Juan Eudes. Centrada en Cristo y expuesta de forma

vehemente en Vida y Reino de Jesús. La mariología de Juan Eudes: Parte de la
Cristología. María es el centro en tanto se comprende el sentido del Misterio de
la Encarnación.

3. La mística de Juan Eudes: La vivencia de los Estados y Misterios de Jesús. Es

situar la vida cristiana (seguimiento) como una continuidad de los misterios de
Cristo. Eso es totalmente mística. Juan Eudes es el único místico que expresa
esto al pueblo: pobres, humildes y sencillos. La mística se vive para transmitirla.

4. La espiritualidad de Juan Eudes: Una manera de ser, pensar y actuar bajo la

acción del Espíritu. Pensar en esto, tiene como base la reflexión en torno al
bautismo y la formación de Jesús en nosotros. Juan Eudes no es elitista, escribe
para todos los cristianos.

5. La liturgia según Juan Eudes: Todo lo que Juan Eudes expresa, converge en la
liturgia con tres realidades: el culto, la comunidad y la misión. Es interesante
descubrir a Juan Eudes, en su siglo como un promotor de una reforma litúrgica.

6. La pastoral según Juan Eudes: Es el acompañamiento del creyente en su

experiencia de fe. Vida y Reino es una estrategia de acompañamiento a la
comunidad cristina.
Temáticas fundamentales:
1. Introducción a las Obras Completas
2. El camino al doctorado de Juan Eudes
3. Vida y Reino de Jesús.
 1. Introducción a las Obras Completas
La espiritualidad eudista nos sitúa en el marco de una opción misionera y
evangelizadora, que se suscita en la experiencia de una comunidad que obra y piensa
bajo la acción del Espíritu Santo. Acercarse a las obras completas de Juan Eudes es
alimentar el sentido de pertenencia a la comunidad y al Espíritu, con dos criterios: la
intencionalidad y los oyentes de su tiempo. Juan Eudes es un evangelizador que tiene en
la impronta sus fundaciones y la Iglesia misterio en sí misma: presbíteros, laicos y
mundo entero. Ante las situaciones complejas de su tiempo, Juan Eudes busca ser clave
en la respuesta para su mundo.
Hay muchas formas de enfocar la temática de las obras completas, todas son válidas
desde el momento en que se asumen como parte vital del proyecto de vida cristiano y
eudista. Una forma de hacerlo es cronológica, que va desde el primer escrito (1629) a el
último (1680) y las obras póstumas.
1. Carta a Madame de Budos (1629): Juan Eudes recién ordenado inicia su
itinerario misionero, en ello establece una amistad profunda con la señora de
Budos. Él se presenta como un acompañante espiritual, siendo promotor de la
vida y el reinado de Jesús y la mística del Corazón de Jesús. Mística y Misterio
tienen la misma realidad, esto es propio de Eudes.
2. Memorial de los Beneficios de Dios (1630 en adelante): Favores que ha recibido
de Dios, el cual tiene su última anotación el 25 de julio de 1680. Invita a
identificar la acción misericordiosa de la Santísima Trinidad en la vida
específica.
3. Ejercicio de Piedad (1636): Cosas necesarias para vivir cristiana y santamente.
Forma específica y dinámica de las primeras misiones de Juan Eudes. Él
presenta en este escrito su método kerigmático, para llegar a la gente más
sencilla de su tiempo: La voluntad de Dios, nuestra santificación: ejercicios
para la mañana, el día, la noche, la preparación sacramental y ocho medios
para vivir en gracia.
4. Voto o elevación a Jesús para ofrecerse en condición de víctima: Es un voto que
tiene una importancia capital en la vida de Juan Eudes. El alma es víctima, en
tanto es alma entregada.
5. Vida y Reino de Jesús en las almas cristianas (1637): La vida según Jesucristo.
6. El testamento de Jesús y del cristiano (1641): Texto que se perdió, pero del cual
se perdieron algunos rastros. La muerte como ofrenda de amor.
7. La vida del cristiano o el catecismo de la misión (1642): Juan Eudes quiere dar
una respuesta a la ignorancia y falta de compromiso en la fe cristiana. Juan
Eudes es identificado como un mistagogo kerigmático, aterrizado en el campo
misionero. El kerigma tiene tres pasos secuenciales: Anuncio, denuncia y
compromiso. 30 capítulos dedicados al Misterio de Dios, la Virgen, la Iglesia,
los sacramentos, el Espíritu, las bienaventuranzas y el examen personal. Texto:
El perfil del catecismo misionero.
8. Consejos a los confesores misioneros (1644): Es la opción de Juan Eudes por la
misericordia que invita y promueve en los confesores.
9. Memoria a la asamblea del clero de Francia (1645): Se trata de una petición
sobre la organización de los seminarios. Es un texto poco conocido, pero
necesario para identificar el espíritu eudista en los seminarios.
10. Reglas de la CJM (1646): El proceso del discipulado hoy. Un tejido bíblico
conformado por 637 citas bíblicas, a fin de desarrollar y evaluar un proyecto de
vida cristiana y sacerdotal. La regla del Señor Jesús y la regla de la santísima
Virgen María basadas en el principio de los cuatro fundamentos y motivada por
las nociones teológicas de la renuncia y la adhesión. Se centra en vivir en, con y
de la vida de Cristo. El cristiano es sacerdote, a ejemplo de las virtudes la Madre
del amor hermoso
11. La devoción al Santísimo Corazón y al sacratísimo nombre de la Virgen María
(1648). Juan Eudes imparable en su trabajo misionero, ha propagado y
madurado su devoción al Corazón de Jesús y María. Ha celebrado la primera
fiesta litúrgica. A partir de esta obra, comienza la gestación de su libro más
importante: El corazón admirable de la Madre de Dios.
12. Tratado del amor Divino a los lugares santos: Juan Eudes se ocupa del cuidado
de los actos litúrgicos. “A lo santo, santamente”.
13. Oficios compuestos según el uso del breviario romano: Juan Eudes es también
un autor litúrgico. Hace nacer y proyectar la liturgia en las seis dimensiones
presentadas anteriormente. Presenta y desarrolla una serie de devociones muy
propias de su escuela, afianzando una liturgia en la cual participa el pueblo y los
presbíteros.
14. Contrato del hombre con Dios por el santo Bautismo: Es un libro único en la
espiritualidad cristiana en la noción bíblica de la alianza, donde radica su
originalidad. Trae consigo un contenido bíblico que presenta la plenitud humana
como un camino de unión al Corazón de Dios.
15. Estatutos y constituciones de la CJM (1658): Todo sacerdote y laico puede
encontrar en ellas una espiritualidad dinámica para elaborar un proyecto de vida
personal y apostólica. Todo el contenido tiene el espíritu propio de la caridad,
regla de las reglas, más allá de lo jurídico.
16. Cómo ayudar bien a la santa misa: El espíritu con el cual el creyente ha de vivir
este ministerio.
17. Meditaciones sobre la humildad: Nos hace descubrir la realidad negativa del
pecado, pero al mismo tiempo, la misericordia como antropología positiva. Este
doble aspecto (misericordia humildad) es el principio del desarrollo
antropológico.
18. Coloquios interiores del alma cristiana con su Dios (1662): Hay dos polos que se
repelen, pero también dos abismos que se atraen y entran en comunión: el
pecado y la gracia; el hombre y Dios, la miseria humana y la divina
misericordia. Este y el anterior texto constituyen la verdadera antropología
eudista. Dios y el hombre (amor), bautismo (criatura nueva).
19. El Buen Confesor (1666): Las cualidades que deben tener los confesores y
especialmente los misioneros. ¿Qué hacer antes de la confesión? El ejercicio
mismo del ministerio con un detallado examen de conciencia. Jesucristo asocia
al sacerdote a Jesús misionero, doctor, médico, mediador, salvador y juez con el
poder infinito de su divinidad. El sacerdocio ministerial como participación del
sacerdocio bautismal de Jesucristo.
20. La devoción al Santísimo Corazón de la preciosísima Virgen: El Corazón de la
Virgen como un retrato del Corazón adorable del Padre eterno.
21. Los oficios parvos de los Sagrados Corazones: Más allá de oraciones y
devociones particulares, el pueblo ha de entrar en la comunión orante de la
Iglesia.
22. Manual para uso de una comunidad eclesiástica: Se trata de una expresión de fe
hecha oración en el seno mismo de la Iglesia, al ritmo de la liturgia y sus
diversas manifestaciones.
23. Contrato de una santa alianza con la Sacratísima Virgen María, madre de Dios:
La experiencia mariana que caracteriza a san Juan Eudes, la cual emerge en el
marco de la liturgia, la misión y el estudio.
24. Reglas de san Agustín y Constituciones para las religiosas de Nuestra Señora de
la Caridad: Es la manera en cómo Juan Eudes sintetiza y se ocupa de las mujeres
de su tiempo.
25. El testamento de san Juan Eudes (1671): Es dónde se encuentra el legado que
Juan Eudes ha dejado a la Iglesia y sus fundaciones.
26. La Infancia Admirable de la Santísima Madre de Dios: Es la matriz de toda la
mariología eudista: fundada en la Biblia, la patrística y la liturgia. Juan Eudes
identifica los estados y misterios de María: Dios Padre predestina, la promete, da
signos de su venida al mundo e inculca en ella sus virtudes.
27. El memorial de la Vida eclesiástica (1681): Contiene una síntesis de todas las
cosas que son útiles a todos los cristianos y su santificación. Memorial: Actúa
antes de proclamar. Buen Pastor y santo sacerdote, según el Corazón de Dios.
28. El Corazón Admirable: Todo es corazón: Desde la contemplación de María se
da la contemplación del Verbo Encarnado. Mariología y Cristología en
complementariedad. Es necesario identificar el objetivo cristológico de la
mariología eudista.
29. Predicador apostólico (1685): Es un libro considerado “maravilla de su siglo”
que presenta en 31 capítulos dos objetivos: hacer hablar a Dios y evangelizar a
los pobres con la palabra misma de Dios. Insiste en el ser, actuar y misión del
predicador recibida en la Iglesia, además de describir una concreta pedagogía
para los predicadores.
30. Cartas a los P. de la CJM (1643 – 1680): Son 115 cartas en las cuales se
identifica su celo pastoral, amor fraterno y afecto paternal. Exhorta de forma
contundentemente a la misión, con el anuncio, la denuncia y el compromiso
tomando como base el principio de la Divina Misericordia.
31. Cartas a NSC (1644 – 1680): María como modelo perfecto de acompañamiento
espiritual y cercano.
32. Cartas a diversas personas (1629 – 1680): Juan Eudes se presenta como la
persona cercana que pregona la palabra cercana.
33. La Vida Admirable de María des Valles: Constituye el volumen 13 de las Obras
Completas, necesaria de leer desde el Corazón místico de Juan Eudes, para quien
Madame de Vallés es realmente una fuente mística. Es un contenido extenso y
particular con relación a los otros escritos, pero muy afines al conocimiento del
padre Eudes.
 34. Opúsculos y fragmentos: Se trata de los “escritos personales” de Juan Eudes,
como el MBD, el voto en calidad de hostia, la santa alianza con la Virgen María,
el Testamento de Eudes, etc.
35. Manuscritos del padre Eudes perdidos hasta el momento: El hombre cristiano
(El cristiano sus posibles vicios y virtudes, Todo Jesús (Doce libros para amar y
conocer a Jesús), El oficio Divino, el sacrificio admirable de la Santa Misa,
colección de meditaciones para toda clase de estados y personas (Tres tomos),
sermones, favores hechos a la Iglesia de Coutances por la Santísima Virgen, la
Infancia de Jesús, la Devoción al Corazón Adorable de Jesús, la Vida de MV
(¿Distinto al tomo XIII?), cartas o correspondencia.
36. Obras inspiradas en san Juan Eudes: Institución de la Santa cofradía del sagrado
corazón de Jesús y María. Oficios compuesto en honor a los corazones,
reglamento para jóvenes y mujeres penitentes, etc. La religión práctica del
cielo y de la tierra (O.C. VIII 716 – 724): Una verdadera joya de nuestra
espiritualidad.
Visión muy general de las Obras Completas
¿No será eminente toda esta doctrina, para que sea declarado doctor de la Iglesia?
Con la vida y el pensamiento de Juan Eudes, se ha tratado de identificar el perfil de los
Doctores de la Iglesia. Conduce a la pregunta: ¿Tendrá Juan Eudes una aporte para la
nueva mística propia de Nuestro Siglo panenteista que integra en un dinamismo al
hombre y a Dios?
1. En cuanto a la presentación de la vida y el contenido doctrinal de Juan Eudes la
Congregación cuenta con los documentos suficientes. 26 y 27 de la revista
eudista.
2. Hipótesis: Una doctrina eminente es aquella que tiene notabilidad frente a otras
doctrinas. Marco bíblico, antropológico, espiritual, místico y pastoral. Además,
alienta en la práctica una vida cristiana en calidad, con una influencia que
perdura en la Iglesia.
3. Llamada a ser eminente cuando nace de una profunda experiencia espiritual que
sigue siendo banda para toda la Iglesia.
Temas centrales:
1. Dios en todo, por encima de todo y al término de todo: Todo tiende a la Trinidad
y no se comprende sin ella.
2. Jesucristo y su cuerpo místico: La gran obra de la Encarnación.
3. El Corazón de Jesús: De los hijos e hijas de Dios que nos indica el Corazón
como el amor es la proyección del universo.
4. María, un solo Corazón con Cristo: Cristo le ha participado su gloria.
5. El bautismo que nos incorpora a Cristo: Alianza, sumerge en la pascua y nos
hace participar del sacerdocio de Cristo.
6. La continuación, participación y comunión en los misterios y virtudes de Cristo
para prolongar en nosotros su vida, animados por el Espíritu Santo.
7. Toda la vida en un clima contemplativo con la mirada puesta en Jesús y al
mismo tiempo en el servicio a las personas.
 8. Participación en la misión de Cristo: Misión que se recibe desde el bautismo,
que constituye un sacerdocio para hacer vivir y reinar a Jesús en el Corazón de
la humanidad.
9. Sacerdotes y pastores según el Corazón de Dios.
Juan toma este contenido fundamentado en la biblia, busca hacer entender la Palabra de
Dios para culminar en lo más místico que tiene Eudes: El ejercicio del Divino amor.

4. Juan Eudes, teólogo y maestro para el pueblo de Dios. El teólogo contempla

desde la fe el Misterio, el maestro nos orienta al único maestro.
5. ¿Qué ha caracterizado a los doctores y doctoras?
5.1. Llenos del Espíritu y Maestros con el único maestro
5.2. Vivieron en obediencia total a la Palabra de Dios, a la Divina Voluntad y
a la Iglesia.
5.3. Dieron una respuesta cabal a los grandes problemas de la vida cristiana
en su tiempo.
5.4. Fueron mistagogos: Mistagogo (Maestro), Místico (Qué nos adentra en
los umbrales del Misterio. Eudes es el mistagogo del Corazón
5.5. Su santidad de vida, reconocida por la misma Iglesia, por la gente, por la
muchedumbre de sus seguidores y discípulos.
5.6. Su doctrina y práctica han sido asumidos por la Iglesia en temas
capitales para la fe. Haurietis Aquas – Pio XII.
Catecismo de la Iglesia incluye: Continuar y completar los Misterios de la Vida de
Jesús, la vida en Cristo desde la perspectiva de Cristo cabeza y nosotros sus miembros.
No hay duda de que Juan Eudes anticipa, tres siglos antes, las nociones teológicas del
Concilio Vaticano II.
5.7. Su enfoque de la vida cristiana da a la Iglesia una perenne vitalidad.
5.8. Su creatividad pastoral sigue dando vitalidad a la Iglesia.
5.9. Dentro de la Tradición de la Iglesia, poseen una gran originalidad: Juan
Eudes es original al crear una mariología y Cristología. “Juan Eudes formador
de Jesús, es una originalidad casi única en la Iglesia. Lo mismo que su
doctrina bautismal
5.10. Su única fuente de inspiración ha sido la Palabra de Dios leída y
practicada dentro de la Iglesia guiada por el Espíritu Santo.
5.11. Nos enseñaron el verdadero camino de la mística: “O amar o morir, o
mejor, morir de amor: o mejor, vivir muriendo de amor”. SJE
5.12. La perennidad de su gran aporte al Misterio cristiano
5.13. La Iglesia necesitó y sigue necesitando de ellos en su obra
evangelizadora.
Juan Eudes llena, desde el contenido e intencionalidad de su lenguaje, de su vida y
ministerio y con creces, las condiciones para ser maestro de vida, y más aún, doctor de
la Iglesia. Podemos dar como eudistas “formadores de Jesús y misioneros de la Divina
Misericordia”.
Vida y Reino de Jesús en las almas cristianas
P. Higinio Lopera, cjm
Vida y Reino de Jesús es uno de los textos más estudiados de las Obras Completas de
san Juan Eudes. Fue en su tiempo, el equivalente a lo que hoy se considera un cambio
de paradigma. Plantea cambios radicales y no simples prácticas, desafíos para todos los
eudistas que desean vivir su identidad. En torno al año 1637 en Francia emerge una
triada espiritual, filosófica y literaria: Cornelio publica El Cid en 1636, Descartes el
Discurso del Método y Juan Eudes Vida y Reino de Jesús en 1637. Es una obra
caracterizada por una originalidad y un dinamismo, anclado en la biblia pero
específicamente en dos textos de Lucas: El Reino de Dios está dentro de ustedes.
Vida y Reino son dos palabras distintas, pero que se emplean mutuamente. La vida de
Jesús, el Jesús Rey y el reinado del padre proclamado es un signo de la Encarnación que
se adhiere a la vida del ser humano sin omitir la identidad de Jesús ni de la persona. Más
allá del lenguaje, es necesario indagar la intencionalidad y el contenido de la obra, de
acuerdo con los diferentes parámetros: antropológico, cultural y teológico. Lo
fundamental no está en cambiar textos ni expresiones, sino a partir de una sincronía,
estudiarlo tal cual ha llegado a nosotros. Sin salirnos de nuestra fenomenología, es
importante dejarse interpelar por el texto, al punto de confrontar nuestra realidad.
Tanto la intencionalidad como el contenido, nos han de cuestionar en la persona misma
del autor: es formador, evangelizador, misionero de la divina misericordia y formador
de Jesús en el corazón de todo cristiano.
Perspectivas de acercamiento al texto.
Seis puntos de acercamiento a la propuesta de Juan, centralizados en la Palabra de Dios
que no es un accesorio, sino un elemento central en la vida de Juan Eudes. Acude a ella
no para probar filosofías ni teologías, sino para permitir que Dios hable.
Antropología: Visión integral del hombre en sí mismo y ante Dios
Teología: Reflexión desde la fe entendida como la aceptación de la palabras.
La mística: Vivencia de los Misterios de Cristo.
Espiritualidad: Manera de ser, actuar y pensar.
Liturgia: Comunidad, culto y misión.
Pastoral: Servicio de acompañamiento a las personas, desde la Palabra y lo propio de la
comunidad eclesial.
Vida y Reino de Jesús – Obra programática
El título de la obra muestra la intencionalidad y el contenido; una obra programática
convertida en proyecto de vida para todo cristiano.
Elevación. Dedicatoria a Jesús y María: En Juan Eudes, la oración nace de lo que
cree y vive en la práctica; nace de las actitudes fundamentales de la vida.
Dedicatoria a Madame de Budos: No se trata de un formulismo, manifiesta el celo
apostólico de Juan Eudes: Deseo ver que el Espíritu Santo y el divino amor de Jesús
viva y reine en su espíritu y Corazón…
Prefacio necesario para comprender el título y el objetivo del libro y hacer uso de
él: Una síntesis de la Cristología eudista que brota de la Palabra de Dios y le da un
dinamismo kerigmático muy poderoso: Cristo, todo en todos. El ser y la acción salvífica
del Verbo Encarnado expresado en dos palabras: Vida y Reino. Todo en Juan Eudes
brota espontáneamente de la Palabra de Dios, gustada, orada, contemplada y
hecha vida en todo tiempo, lugar y circunstancia de la vida.
Primera parte - Perspectiva antropológica: El hombre aparece en su condición de
creatura, finitud y temporalidad que puede iniciar día a día en el mundo como una nueva
creación. La antropología no se trata de un pesimismo ni de un optimismo filosófico,
sino de dos antinomias: el pecado y la gracia. “La noche oscura que nos trae el pecado y
el amanecer que nos trae la gracia”. La antropología eudista se polariza en las
antinomias y se resuelve desde los polos que se atraen y terminan en comunión: Dios y
el hombre en oposición como dos abismos extremos separados infinitamente, el Todo y
la Nada. El Todo por la Encarnación se anonada y la Nada se transforma en Jesús
glorificado que es Todo. Así entraron en comunión los dos abismos y fuera del Todo ya
no hay Nada.
Por la Encarnación, el Todo asume la Nada. Por la Encarnación el Verbo asume esa
nada (se anonada) para darle un giro radical de altura y de grandeza: Jesús se quiere
formar en el hombre para vivir y Reinar en él.
Perspectiva teológica: Y a partir de estas realidades Juan Eudes convierte la oración en
teología y la teología en oración y nos da a entender que las prácticas y ejercicios de
piedad nacen de un contenido y de una actitud teológica.
Mística de la primera parte: Las elevaciones breves a Jesús durante todo el día (1,
117ss), son fuego, llamas celestes de amor que buscan la intimidad más profunda. Las
elevaciones son “ex - tasis”, salidas de sí mismo para unirse al Señor, así como la
Encarnación es el “ex – tasis”, la salida del Verbo para unirse a nuestra humanidad.
Estamos ante la mística cristiana más pura, asequible a toda persona que abandonada al
Espíritu Santo quiere vivir los misterios que se hacen realidad salvadora en la Vida y el
Reino de Jesús. “El objetivo místico del libro se desarrolla de manera estructurada y
progresiva como una auténtica mistagogía: formar, santificar, hacer vivir y reinar a
Jesús.
La espiritualidad de la primera parte: La espiritualidad como manera de ser, de
pensar y de actuar del cristiano, aparece desde la primera página como fruto de la acción
del Espíritu Santo que inicia con el proceso de formar a Jesús en sí mismo, de
identificarse con Jesús y de manifestar en todo a Jesús. Esta espiritualidad tiene su más
profundo hontanar en la Vida y el Reino de Jesús que es Todo para nosotros. Al
someternos a su Señorío en el amor vamos a tener una manera nueva de ser, de pensar y
de actuar. Desde el amanecer de cada día el amor es la dominante del existir cristiano:
“Te adoramos, Señor Jesús, te bendecimos, te amamos con todo el corazón, con toda
nuestra alma, con todas nuestras fuerzas” (1, 99).
La liturgia en la primera parte: Cada cristiano enmarca su vida litúrgicamente, con
miras a una vida sacramental que marca el acento en la penitencia y la Eucaristía.
La pastoral de la primera parte: Quiere dar con el cristiano cuatro pasos: formar,
santificar, hacer vivir y reinar a Jesús. Quiere que el cristiano inicie su vida como un
profesional con las actitudes propias que implican las “profesiones cristianas”.
Vida y Reino de Jesús – Segunda parte
Contiene lo que el creyente ha de hacer durante su vida, para vivir cristiana y
santamente, y para formar, santificar, hacer vivir y reinar a Jesús en nosotros. Toda una
vida con Jesús.
La antropología de la segunda parte: Una antropología en ascensión, es decir, que se
orienta a la unión con la persona de Cristo. Parte de una realidad: el hombre es
esclavizado por el pecado, pero tiende a la vida y el Reinado de Jesús, con las actitudes
cristianas que son las virtudes. Este énfasis antropológico se desarrolla con un análisis
de los antivalores y, en contraste, los valores que pertenecen a las virtudes cristianas. El
discernimiento de espíritus que realiza Juan Eudes es el eje central de su antropología
teológica. En toda antropología cristiana hay un NO a una antropología negativa y un sí
a una antropología de ascensión, gracias a la asunción que realiza el Misterio de la
Encarnación.
Que valioso es, tal como lo hizo Juan Eudes, presentar el Reinado de Jesús de acuerdo a
las categorías de nuestro tiempo.
La teología de la segunda parte: Esta parte nos abre a una cristología centrada en los
atributos de Cristo Hijo de Dios e Hijo del Hombre, no solo nuestro Dios, Salvador y
Soberano, sino también nuestra Cabeza que, por el Bautismo, como hemos dicho, nos
hace “hombres nuevos”, miembros de su Cuerpo. A partir de la Palabra de Dios hace el
perfil existencial del cristiano: es hueso de sus huesos y carne de su carne; forma parte
de su Cuerpo; está animado del Espíritu de su Cabeza; vive de su vida; sigue sus
huellas; está revestido de sus sentimientos e inclinaciones; hace todas las actividades
con las disposiciones e intenciones con las que Jesús las hizo; en pocas palabras:
continúa y cumple la vida, la religión y la devoción de Jesús cuando vivió en la tierra.
La mística de la segunda parte: Esta segunda parte nos hace sumergir en el cuerpo
místico de Cristo para llevar la misma vida de Jesús con su mismo espíritu. Juan Eudes
da con el cristiano el paso sencillo y tradicional (pero igualmente místico) de la
imitación de Jesucristo en todo lo que hacemos, para luego centrarse, en lo más
profundo y místico: la formación de Jesús.
La espiritualidad de la segunda parte: A partir de las actitudes, se entra en un
verdadero proceso de formar, santificar, hacer vivir y reinar a Jesús y va mucho más allá
de una simple ascética o camino moralizante y culmina en una mística de adoración,
ofrenda e inmolación.
La liturgia de la segunda parte: Todo el dinamismo de la formación de Jesús en
nosotros tiene un punto central en la liturgia sacramental: Bautismo, penitencia,
eucaristía, etc., nos comunican la gracia para todo el proceso cristiano desde sus
fundamentos hasta su ejercicio de las actitudes vistas. Hacer girar toda la vida
cristiana en torno a la liturgia.
La pastoral de la segunda parte: El proceso de la vida cristiana será siempre objetivo,
camino y meta del ejercicio pastoral. Juan Eudes va a recomendar siempre a los
sacerdotes y pastores la práctica de La vida y el Reinado de Jesús y esto explica
porque tuvo tantas publicaciones en vida de su autor.
“La oración nace de la vida y la vida se hace oración”. La oración es el núcleo dinámico
de la espiritualidad eudista. Formar, santificar, hacer vivir y reinar a Jesús. La oración
como pedagogía sencilla de interpretar, interpelar y confrontar al hombre.

El contrato del hombre con Dios

Franklin Echenique, cjm
Es la obra que Juan Eudes escribe hacia el año 1654, en la madurez de su misión y
percepción teológica. Eudes escribe tal libro tras presentar algunas intuiciones con
relación al bautismo, como las publicadas en el año 1637 en Vida y Reino y
anteriormente los ejercicios de piedad. Otras obras, como el catecismo de la misión y
los coloquios interiores son parte esencial de este énfasis doctrinal. ¿Qué sucede en Juan
Eudes para que se ocupe de la vida bautismal? Además de las realidades socioculturales
propias de la Francia del siglo XVII, Juan Eudes identifica un carente sentido de
pertenencia en la vida cristiana, y se enfoca en la base de tal experiencia: El Bautismo.
Juan Eudes se proyecta como un profeta, busca la manera de impregnar a los hombres
del lenguaje de Cristo. Se siente enviado, misionero y se dispone a exhortar a quienes,
siendo parte del pueblo de Dios, no viven el espíritu de su Bautismo. Surge el Contrato
del hombre con Dios cómo una forma pedagógica de enseñar a los creyentes el
significado de la alianza, de un contrato que implica asumir compromisos que implican
la trascendencia. No se trata de un contrato de esclavitud, sino de plenitud en Dios. “El
bautismo ha instaurado en el hombre un nuevo ser, del cual parte toda su
actividad espiritual y del mismo modo nacen sus obligaciones para con Dios y para
con el prójimo”.
Juan Eudes, es en su tiempo, un resurgir del dinamismo espiritual al interior de la
Iglesia. Ocuparse en algo tan sencillo y a su vez complejo como el bautismo, lo lleva a
confrontar un contexto, un pensamiento y un modo de hacer pastoral. Reconocer el
compromiso bautismal, es tener un corazón abierto a la santidad. Juan Eudes actualiza
la teología, no exclusivamente para teólogos sino para los laicos; enérgica y
sencillamente invita al pueblo a la conversión, a asumir la totalidad del amor de Dios en
la propia vida y proyectar el ejercicio de la misión. Se fija en el ser humano, lo reconoce
y descubre que su dignidad radica en Dios; fuera de Dios nada es porque se ve atado al
espíritu del mundo, en Dios encuentra dignidad y libertad. Esto es la vivencia del
bautismo.
Lo más complejo en el contexto religioso de Juan Eudes fue la situación del clero. La
negligencia de los pastores era una causa directa de la equívoca formación del pueblo.
“La vida cristiana implica una lucha contra el mal”. ¿Qué busca la escuela francesa y el
mismo Juan Eudes al promover el bautismo? Recuperar el sentido siempre vivo de la
vida cristiana. El bautismo es el medio natural del proceso hacia una realización de
Cristo en la vida de todos los cristianos. Por la predicación, el bautismo ha de ser para
los cristianos la misma experiencia de los primeros creyentes.
¿Cuál es el lenguaje correcto para expresarle a la gente el sentido del bautismo? Juan
Eudes utilizó la palabra y el significado del contrato. ¿Cuál sería el lenguaje proyectado
para hoy? Hacer llegar, de la mejor manera, la experiencia de Dios a las personas. El
bautismo se consolida, en la vida de Juan Eudes, como: sacramento, gracia recibida y
proyecto (continuar en nosotros los estados y misterios de la vida de Jesús). Eudes
busca hacer comprender al pueblo que la “vida interior” es el primer deber del cristiano.
Esto ha de conducir a: Asumir la vida de Cristo.
El Padre y la Alianza Bautismal: Se ha comprometido a mirarte con los mismos ojos,
a amarte con el mismo corazón, a tratarte con el mismo amor con que mira, ama y trata
a su propio Hijo, con el que formas una sola cosa como un miembro con su cabeza.
El Hijo y la Alianza Bautismal: Cuando el Hijo de Dios te recibió en su alianza como
a uno de sus miembros, se comprometió a mirarte, amarte y tratarte como a una parte de
sí mismo, hueso de sus huesos, carne de su carne, espíritu de su espíritu, ya que eres una
sola cosa con él.
El cristiano y la alianza bautismal: Ser cristiano significa ser una sola cosa con
Jesucristo, y por consiguiente vivir de la vida de Jesucristo. Así como la vida del brazo
es continuación de la vida de la cabeza, así la vida del cristiano continúa la vida de Jesús
en la tierra. Por boca de tu padrino, te comprometiste a renunciar a Satanás.
Preguntas:
1. ¿Qué llevó a Juan Eudes a promover esta doctrina?
2. ¿Cómo puedo actualizar esta propuesta a la actualidad?
3. ¿De qué palabra podría valerme para proponer esta espiritualidad?
4. Sacar mis propias conclusiones.

Propuesta de estructura para la catequesis de mañana:

1. La elección de un equipo. (El significado del perdón en el proyecto de Jesús)
2. De cero. (El sentido del sacramento de la reconciliación)
3. Misiones. (Llamados a ser propagadores del perdón).