CONCLUSIONES

El triaje se ha convertido en el ‘’signo distintivo’’ del servicio de urgencias hospitalario,

ya que es una herramienta que nos permite clasificar a los pacientes según su estado
de salud de una manera rápida, completa, precisa y segura, mejorando el
funcionamiento del servicio.

Los actuales modelos de triaje son estructurados en cinco niveles en base a las
prioridades. La designación de estos cinco niveles debe basarse en decisiones
objetivas, respaldadas por algoritmos y sistemas informáticos que mecanicen estas
decisiones y accedan a un ajuste experto por los profesionales.

Para instaurar un sistema de triaje es necesario tomar en cuenta todos los recursos
disponibles: físicos, materiales y humanos, de acuerdo con las necesidades y tipo de
población, así como con las políticas de cada institución hospitalaria.

La participación de los profesionales de Enfermería ha demostrado alta capacidad

para coordinar con liderazgo, profesionalismo y seguridad la realización del triaje
hospitalario, haciendo de éste una herramienta esencial en los servicios de urgencias
hospitalarias.

RECOMENDACIONES

Dentro de los servicios de Emergencia, ampliar el conocimiento sobre los efectos

potenciales en la realización de los sistemas de triaje.

Sugerir que el triaje sea realizado por un equipo que es constituido por Medico y
Personal de Enfermería para disminuir el tiempo de espera de los pacientes.

Estandarizar un solo sistema de triaje a nivel nacional para mejorar la atención en

todos los servicios de Emergencia del país.

Capacitar y dar a conocer al personal de Enfermería los sistemas de clasificación de

triaje en los cinco niveles con métodos válidos y confiables.