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Rv PMA LEATAQ ow 24 ACU A ( eC. Qooe 42nito S46 YA COSOFEA, “SRRACUCA I malestar en'la escuela 2 ‘Somos fundamentalmente sujetos institucionales En este capitulo recarremos los diferentes espacios por los que transcurre nuestra vida en tanto sujetos insti- tucionales. Su descripcién aparece aislada, pero es nece- sario tener en cuenta que un espacio siempre incluye aotro y que el sujeto esté inmerso simulténeamiente en todos. El espacio sociocultural El espacio socio-cultural es el dispositive dentro del cual cada ser humano se va conformando. Este espa- cio esta compuesto por elementos que:anteceden al na- cimiento de cada individuo 2) La cultura dentro de la cual se nace. b) La lengua a la cual se pertenece. ) Las coordenadas geogratficas e histéricas 4) Las ideologias dominantes, 6) Los valores éticos-morales, El espacio socio-culturales el dispositivo donde se produce lo que podemos llamar la subjetividad de la época, es decir el modo en que cada comunidad va cons- truyendo sus valores, sus sistemas legales, sus formas de entablar vineulos con los otros, sus maneras de comer, Claudio R. Boys alimentarse, vestirse, hacer el amor, de entender y deco- la rodea, Todo esto va a generar un ico de una comunidad, en una época determinada. Es en este espacio donde el ser hu- mano, ser social por definicién, es constituide en su subjetividad. Por ejemplo, la subjetividad de la antigua Grecia entendia el cuerpo como algo que debia ser valorado, cuidado, mostrado. Para esto los griegos dirigian sus acciones de acuerdo con una ética, que podriamos deno- minar una estética de la existencia, una estética basada en la medida. Cudnto habia que ingerir en las comidas y bebidas, cudntos ejercicios debian realizarse, etc. Todo ‘un culto al cuerpo. Cabe aclarar que se trataba del cuerpo de los mancebos, jévenes a quienes un maestro entrenaria en el arte de la guerra y el amor. Cuando el cristianismo se impone, genera un dis- positive que produce una subjetividad diferente a la griega. En lo que se refiere al cuerpo, éste es concebido ‘como cage que se corrompe, como “la prisién del alma”. El cuerpo como lugar de pecado y corrupcién debe ser ocultado, lo tinico que importa es cuidar el alma que es. eterna, y la forma de hacerlo es no dejandose tentar por los placeres de la came, Los individuos, entonces, estructuran sus experien- cias de acuerdo con la época en que viven. Es decir que los valores, as formas de vincularse con los otros, la moral y las diferentes percepciones que cada sujeto ten- 0, estarin determinadas por este espiritu de la época. Parafraseando al gran filésofo podemos decir: “Nadie escapa a'su época”. Sin embargo cuando se trata de ser educaslor “mejor que renuncie quien no pueda unir a su horizonte La subjetividad de su época”. modo de ser caraci 2B malestar en la escuela 3 Las instituciones ‘Los hombres y mujeres, sobredeterminados por el dispositive socio- cultural, habitamos espacios institu- cionales. Las instituciones siempre son sociales. Se ca- racterizan por permanecer en el tiempo . Trascienden al duo. Son conservadoras, y esto les garantiza su propia supervivencia. Tienen sus propias leyes y sus propios cédigos. Ejemplos de instituciones son: la edu- al derecho, la lengua Las leyes y los cédigos imponen ciertas formas de circulacién dentro de la institucién, asi como sanciones cuando estas formas no son respetadas. El momento de la fundacién de toda inst na marea de nacimiento, que persistiré mas allé de las modificaciones que se hagan en tomno a sus reglamentos 0a sus cédigos, Esto ocurre porque las actas fundacio- rales, los cddigos de fondo y los objetivos deben perma- necer intactos en lo esencial para que la institucién per manezca. + Nosotros.nos ocuparemos de Ia institucién educa- Jién, pero no nos centraremos solamente en el aspecto institucional, sino también en el de practica social de la educacién [ cap.3 ], Esto quiere decir en los sujetos de estas précticas: los docentes y los alumnos; sin descuidar los espacios institucionales que los atraviesan. La icidn; entre lo instituyente y lo instituido La institucién se compone de un movimiento ins- tituyente y de un nicleo instituido, El movimiento instituyente es contemporineo del momento de la fundaci6n, Inseribe lo nuevo en forma de 26 Claudio R. Boyé cédigos, éstatutos, normativas, (Recuérdense las actas de fundacién de cual titucién, por ejemplo), A partir de ese momento, Io nuevo queda instituido como nuevo. ‘La paradoja es que al quedar instituido queda congelado en el tiempo, por lo tanto en el momento que empieza a nacer comienza a envejecer. Todo lo que fue instituyente en el momento de la fundacién_se convierte luego en lo instituido. Lo insti- tuido es necesariamente conservador, porque mienza a envejecer, no quiere morir, Entonces acepta reformas. Un ejemplo es la reforina que suelen tener las leyes. ‘Tomemos la reforma a la Ley de Matrimonio Civil de 1987 con la inclusion del divorcio vincular. El Codigo Civil aceptaba la separacién de bienes, pero no la diso- lucién del vinculo matrimonial y, en consecuencia, ve~ daba la aptitud nupcial. Esta reforma fue consecuencia de ‘un movimiento instituyente generado en el seno de la sociedad. La cantidad creciente de uniones de hecho con descendencia que quedaban al margen de la ley, plantea~ tba un problema social y politico. Problemas tales como la herencia entre los “concubinos” asi como Ja diferencia entre los hijos de un primer matrimonio y los hijos de las uniones de hecho. Diferencias tanto en lo que se refiere a la proteccién que debe garantizar la ley, como a las consecuencias sociales. En ciertas escuelas privadas no permitian la inscripcién de estos “hijos del pecado”. Una vez sancionada la ley, el divorcio vincular pasa a ser un instituido en el Cédigo Civil. Ahora bien, cuando un posible nuevo instituyente viene a modificar de alguna manera lo instituido, genera un conflicto en la institucién, Muchas veces lo institu- yente & leido no como algo nuevo, sino como algo que EI malestar ea la escuela n viene a perturbar el equilibrio institucional, garantizado por lo instituido, Para el caso, recordemos que la reforma de la ley matrimonial generé un conflicto en la sociedad, que se manifest a través de sus diferentes instituciones. Se hicieron conjeturas sobre los hijos del divorcio, sobre sus nefastas y amorales consecuencias. En definitiva, los sectores més conservadores lefan este instituyente exclu- sivamenté como un elemento perturbador, y no como algo nuev. Un ejemplo de un movimiento instituyente en la escuela, seria hoy la discusibn en tomo a la disciplina, la forma de regularla y las sanciones. Lo resiimimos asi: : Insttucién: Bducacién Tstcuido: ‘sancién disciplinaria ‘Método distiplinario: amonestaciones (punter, Iétigo etc). Hasta un determinado momento, esta “ecuacion” funciona, Cuando aparece la propuesta “amonestaciones no” es un ataque directo a ituido. No es una mera reforma que se refiere al disciplinar (“vamos a hacer mas eve el sistema de sanciones”), sino que la nueva pro- puesta se estd oponiendo a un niicleo importante de lo instituido en Ia educacién y puede llegar a ser un insti- tuyente (“no més sanciones, sino educacién para Ia con~ vivencia”) 5 J esquema anterior resultar Claudio R. Boys Isttuidn: Eaeasiéa Tsityente ‘ho mids sanciones nepal (gosible y nuevo}: vas Método “isp regulada por coneejos de convivencia Tad no mis sanciones Lo que tiene de interesante este hecho es que genera una discusi6n entre los actores de la institucién, donde se puede suponer que lo que no esta claro es que se esté cuestionando e intentando derogar un instituido muy arraigado en el sistema educativo. ‘Los que defienden el sistema actual sostienen que “siempre fue ast”, “siempre” hubo amonestaciones, es lo natural, Alguno podré recordar que antes se ulilizaba el puntero, pero ahora “se humaniz6”. Lo que no se piensa de ninguna manera es eliminar el sistema de sanciones, En este caso, los actores no son plenamente conscientes de que estén defendiendo uno de los niicleos fundacio- nales del sistema educativo del siglo XIX. Por otro lado, los que impulsan el “movimiento Instituyente” tampoco tienen plena consciencia de que aatacando un micleo fundacional. a Es interesante observar que los actores, individuos, a pesar de que ereen que estén actuando en plena libertad de décisién, lo estén haciendo porque estan jugados y son jugados por la institucién educacién, ya sea a favor o en contra, De esto es de lo que no son plenamente conscien- tes, jest en In escuela » Este ejemplo, es util para reflexionar sobre la di- ficultad que hay en decidir si algo nuevo es La respuesta conservadora se ampara en el viejo y cono- ido refugio de la tradicién. Desde este lugar, argumenta para descelificar cualquier manifestacin de lo nuevo. El problema esti en determinar cual o cuéles son los criterios necesarios para decidir que algo nuevo es vilido en el sentido de que es instituyente, de que va a fundar algo diferente y que va atener consecuencias, para nuestro aso, en el sentido de una mejor convivencia, De esto podemos eaneluir que fodo Jo nuevo, todo Io que puede devenir instituyente es perturbador y va a la inversa no es valida: todo lo que 10 es nuevo, es decir instituyente. La institucién y los grupos Un grupo es, basicamente, un conjunto de indivi- duos que comparten coordenadas témporo-espaciales y objetivos comunes, que desarrollan sentimientos d caracteristicas particuleres que detallaremos en cl Un grupo puede constituirse 0 no en una ‘ci6a, pero una institucién esta compuesta necesariamente por grupos. I grupo también es conservador, tiende a mante~ ner su equilibrio, “‘su statu-quo”, aunque éste sea pato- légico. Los conflictos que se producen en los grupos son equivalentes a los de las instituciones. Cuando aparece algo nuevo, es leido como amenazante para el equilibrio grupal, aunque éste sea precario, y por lo tanto se produce in fendmeno grupal llamado resistencia al cambio. De modo que podemos decir: 0 Claudio R. Boys Bara tii grupo Todo To riuevo, To que tmplique alguna modificacién del statu-quo, es peligro- 0 yamenazante y por lo tanto debe ser recha- zado. Pero no todo lo amenazante es nuevo. El espacio familiar La familia es una institucién porque, como dijimos en el apartado de Instituciones, permanece en el tiempo. y trasciende al individuo. Cada nuevo grupo familiar se inscribe en Ia institucién familia. La familia actual se constituye por la pareja paren- tal y su descendencia, es decir sus hijos. Cada pareja que se une con un proyecto comin y con el deseo de tener descendencia se inscribe, quiéralo 0 no en la institucion familia. En este sentido la familia es la primera insti- tucién en la que cada sujeto hace su experiencia prima- ria de socializacién. Bs alli donde va adquiriendo habitos y costumbres, desde ta higiene hasta las normas més elemeniales de convivencia, desde cémo tratar sus pro- piedades (juguetes) hasta cémo tratar la de los otros (objetos de la casa); desde como tratarse a s{ mismo hasta cémo tratar a los otros. Es importante indicar que estas modalidades, estos incorporan de diferentes maneras. Una es por educacién explicita: por ejemplo, cuando los padres le dicen al nific’ qué se puede hacer y qué Cuando se van instalando ciertas prohibiciones, ex tando diferentes normas. Otra, a través de la educacién implicita, 1a que se genera por la misma convivencia: por ejemplo, el trato que los padces tienen entre si y para con el nifio, y cémo ellos mismos respetan o no sus propios hat medio El malestar en Ia escuela 1 dichos. En pocas palabras, si son coherentes entre lo que dicen qué hay que hacer y Jo que hacen, Las contradic- éspacio familiar es el lugar en el cual Io social y lo cultural es transmitido al nifio. También es el ugar donde acaece el proceso de individuacién, es decir, don- de cada sujeto adquiere su singularidad, lo que lo hace ‘inico y diferente. Esto se produce por la forma en que ‘cada sujeto tramita sus experiencias en el seno familiar. Ese proceso le permitira encontrar respuestas a las dis- tintas experiencias, exigencias y preguntas que los otros, le planteen. Eas respuestas se'vinculan con el deseo que habita en cada sujeto. Deseo que lo singulariza y que le permite cierto: grado de autonomia, pero tam- bién es un gripo. El primero al que pertenece el ‘Como todo grupo tiene su propia dinémica y sus propies formas de comunicacién, su particular manera de resol- ver las situaciones, de tratar a sus miembros, de producir sus [ideres, en una palabra, su particular manera de en- tablar sus vinculos. El vinculo -iculo es una estructura bi-corporal pero tri- personal”. Esta definicién esta tomada de la teoria vin- ‘cular del Dr. Pichon Rivigre Segiin este autor, el nifio vive una-situacion trian- gular primaria con la madre y el padre. En un primer ‘momento el nific/a va a sentir amor y odio hacia la madre Claudio R. Boye y, en un segundo momento, va a sentir lo mismo hacia el padre. A esto hay que agregarle la relacién de amor- odio entre los padres. Si lo graficamos con un triangulo, podemos inseribir cada relacién como un lado de la figura, Esta matriz va a establecer el patrén de medida con el cual el sujeto va a elegir, repetir y evaluar el resto de sus relaciones vinculares. Esta matriz vincular va a ser internalizada, formara yjeto, se ir complejizando y realidad. A partir de una situaci6n inicial de indiscrimi- nacién, el sujeto aprende: 1) a disetiminar los objetos (me gusta - no me gusta), 2) a‘relacionarse con Tos otros (bueno ~ malo); 3) a vinculasse con los otros (amor - odio). Una vez incorporada, esta matriz permite constituir el grupo intemo, que forma parte del psiquismo incons- ciente y acta como mediador, entre nosotros y el grupo externo en el cual nos movemos, Esto nos lleva a una cuestién que consideramos crucial para todo abordaje, tebrico’y prictico, de las problematicas intersubjetivas: la relacién del los otros, del individuo y los diferentes grupos a los que pertertécerd en el transcurso de su vida. {Por qué? Porque I malestar en Ie escusla a saber que el grupo no es algo externo a la persona sino que forma parte de su psiquismo nos permite otro nivel de entendimiento, Este nivel de entendimiento nos posi- bilita ubiearnos de manera diferente frente al grupo y a sus miembros y, por lo tanto, lograr un mayor grado de eficacia, Por ejemplo, en lo que concierne al coordinador (docente) en relacién al grupo y a la promocién de los objetivos orientados hacia la tarea El espacio escolar El espacio escolar y el familiar comparten por un lado, el mismo marco general: el socio-cultural, y por iro, el hecho de ser ambos los primeros espacios para la socializacién del nifio. : La socializacién en la escuela implica para el sujeto tanto el aprendizaje de nuevas normas que la institucién escuela impone, como la convivencia con pares y con ‘adultos que no pertenecen al espacio familiar, Es decir, que el nifio/a comienza a vincularse con grupos diferen- tes, mas alld de lo conocido, mas alla de lo familiar. Ademés, tendra que habituarse, adaptarse a un rit- mo mucho més pautado y a una ensefianza sistematizada. Desde el punto de vista del nifio, familiarizarse con un “mundo” nuevo al que debera incorporarse. Sabemos que ello no siempre es tarea facil, ni para el nifio ni para el docente. El pasaje es, enténces, del espacio del grupo fami- liar al espacio del grupo escolar El espacio escolar est incluido en el socio-cultural, y, de manera espetifica, en el dispositive que hace a la circulacién“del saber y del ‘poder. Este dispositive se materializa en la Institucién Educacién, Esta, a su vez, o Claudio R. Boye transmite por un lado sus eédigos y normas y, por otro sus formas de hacer circular ese sabery ese poder a través, de [a institucién escuela. La escuela se inscribe en la Institucién Educacién para hacer cuniplir los objetivos esenciales —Lo instituido decimos nosotros-, en la practica social de la educacién, a través de la relacién docente-alumao, La préctica social de la educacién es vehiculizada mediante los grupos de cada una de las escuelas. Grupos de autoridades, de docentes, de administrativos, de pa- dres cooperadores, de asesores, de gabinetes. Las relacio- nes que estos grupos entablen entre ellos va.a delinear un perfil diferente en cada escuela, Este perfil va a incidir, directa o indirectamente, en el vinculo que establezca el docenté con el colectivo de alumnos con el que deberd trabajar en el transcurso del afio. De la perpcepcién que el décente tenga de su lugar, en relacién con los diferentes grupos que conforman la institucién en la cual realiza su prattica, dependera el modo en que se relacionard con el conjunto de alumnos asignados. Si el docente esta en condiciones de hacer una lectura de a institucién a la cual pertenece y, ademas tiene a su disposicién Is herramientas necesarias para: constituir al conjunto de alumnos en tn grupo operativo, funcionar como coordinador de grupo, y poder agrupar ‘en funcién de la tarea, lograré realizar una eficaz y crea- tiva gestion educativa, Entonces, si se trata de pensar y actuar en institu- ciones como Ia escolar, y el grupo 0 los grupos son su constant, nuestro objetivo es pensar lac trada en el sujeto de nuestra problem: BI malestar en le eseucla ae E] espacio massmedistico El espacio massmedisitico, a diferencia del familiar ‘o del escolar, es consecuencia del avance de la tecnologia aplicada a las comunicaciones. Aparece como problema- tica de los afios 90. Si bien tiene su antecedente en la _ television abierta, no podemos negar las diferencias cuantitativas y cualitativas entre aquella T.V. de los 60, Jos 70 y los 80 y la actual, Entre las diferencias cuantitativas, la primera que salta a la vista es la cantidad de informaciéa en tiempo real a la que se tiene acceso, la cantidad de opciones en la programacién, con la inclusién'del cable, etc. i cualitativas, existe una que la presencia permanente de la T.V. en cada casa, no importa si esta encendida o no. Los efectos que esto tiene en cada sujeto y en la sociedad es materia, en algunos aspecios, de futurologia. Asi y todo hay algunas cuestiones que si constatamos. Por ejemplo, la articulaci6n entre la globalizacién de la economia y la informacién proveniente de cualquier punto del planeta. Entonces ocurre que los problemas que nos muestran nos resultan similares aunque pertenezcamos a culturas su- mamente diferentes, Circula por la tel&visin todo lo que uno se pueda imaginar, desde las costumbres sexuales, la moda, la politica, las guerras, el hambre, las miserias humenas, de productos comerciales pueden acceder. El efecto mt de La marca” por parte del consumidor. Paradoja en Ia que'se sustenta la sociedad posmodema massmeditica mercan- tilista, Claudio R. Boyé Por supuesto que el universo massmediético no se agota en la T.V. Abarca desde las computadoras perso- rales, los fax, los CD ROM, hasta Internet (la red de redes), y el ciberespacio, pasando por los video juegos y la realidad virtual. Todo este conjunto, més lo que vendré, genera una discusion muy de actualidad respecto a cémo ineluir estas nuevas formas culturales en el émbito educativo, es decir en las escuclas. Las preguntas que nos hacemos son {es posible incluirla? yhay una nueva cibercultura?, Jo n0 serd que ya estamos incluidos a pesar de nosotros mis- mos? Explicitemos esto tltimo. Sin dudas es posible,y de hecho ocurre, ensefiar computacién en la escuela, conec- tarIntemet,o instrumentarlos CD ROM pare laensefianza de ciertos temas. Ahora bien ise trata de ésto cuando se discute sobre videocultura? Consideramos que no. Nuestro punto de vista es que la videocultura, 0 como se la quiera llamar, forma parte de nuestro espacio sociocultural, que tiene una posicién dominante en el imaginario social, y que sin duda esta produciendo efec~ tos en los sujetos. Intentar precisar cuéles excede los objetivos de este libro. : No obstante consideramos que esta cultura de la imagen deberd articularse con la del texto escrito, pues ‘sola va en detrimento del pensamiento critico. Este cen el debate oral, en la discusién de textos, en la practica de la escritura, en la capacidad de reflexionar sobre nuestro entorno y sobre nosotros mismos. Por lo tanto consideramos que lo importante no es tomar una posicién a favor o en contra. de, estos productos de tecnologia sino integrarlos al debate, y, la reflexién orgie conviven con nosotros y nosotros con ellos. BL milestar en escucle 37 Pensar la convivencia Dijimos en parrafos anteriores que el ser humano ‘es un ser social por definicién. Esto quiere decir que la hominizacién, el proceso que leva a la cria humana a convertirse en un ser humano, es un proceso cultural que se produce en el seno de la sociedad. En diferentes épocas, nifios perdidos o abandona- dos fueron encontrados luego de una larga “convivencia” con alguna especie animal: El ejemplo del “nifio gacela” es muy elocuesite, A comienzos de la década del sesenta, un nifio que formaba parte de una manada de gacelas fue observado en el desierto del Sahara. El nifio gacela de Mauritania no hablaba, su coordinacién motriz era la de una gacela ~daba saltos de hasta cuatro metros~ y reaccionaba frente a los humanos con la misma desconfianza y actitudés de temor que los animales con los que habia convivido, se Jamia las heridas, marcaba su terri Este ejemplo nos muestra que si no hay un entorno ‘humano no hay ser humano, La imagen del cuerpo y su coordinacién estén sujetas a la forma que vemos en el otro, en el semejante. Esta adquisicién es consecuencia de la presencia del otro. Para que un nifio adquiera la bipedestacién y la coordinacién motriz. humana es condicién necesaria que haya un otro humano. De esta mariera, el pequetio sujeto podré identificarse con una imago de su propia especie yy asi asumir jubilosamente la gestalt, la forma con la cual "amen, J.C: *Lenfaat sauvage du grand dese Ginn Delachaux et Niestlé, 1971, em ee * Ginebra ae 38 Claudio 8. Boyt se identificara. Este recor nto de la forma humana es un complejo proceso jico que se construye ¥ te consolida en el vinculo con los otros significetivos, ‘Asimismo el lenguaje es una adquisicién que no surge esponténeamente, se logra oyendo hablar a otros. La posibilidad de aprender la lengua existe desde unos meses después del nacimiento, Si un nifio esta en una situacion, como en el caso mas arriba citado, en la que tho conoce el lenguaje humano perderd la posibilidad de adquirilo si esta situacion se protonga més alla de los siete afios de edad. A partir de alli no seré capaz de aprender la primera lengua. ‘Somos porque nas reconocemos en otro que a Su vez nas reconoce, Este otro es internalizado con toda su carga de amor y de odio, es decir con ambivalencia. La ambivalencia junto a las tensiones agresivas y la rivali- dad asesina, productos de una division original en el psiquismo, van a dominar como wna constante a relacién fon el semejante, De aqui que la convivencia sea una problematica. a idea de una convivencia en armonia es, siempre, uma aspiracién, un Ideal, La convivencia es, en todo caso, algo que se puede construir en la cotidianeidad de los unos con los otros. Como veremos, es un trabajo ‘constante, no se logra de una vez y para siempre. Capitulo IL

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