CONTIENE

EL PODER DE LA
PALABRA HABLADA DE DIOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1

SALUDO A LOS MAESTROS

DE NIÑOS DE CHILE . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27

EL ESPÍRITU DE VIDA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 43

EL QUE ES DE DIOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57
EL PODER DE LA
LA RESTAURACIÓN DEL REINO . . . . . . . . . . . . . . . 79
PALABRA HABLADA
NUESTRO TRABAJO
DE DIOS
EN EL REINO DE DIOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 105
Por William Soto Santiago
LA GLORIA DE DIOS SOBRE
LA JERUSALÉN CELESTIAL . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 121
28 de enero de 1992
Santiago de Chile, Chile
DEDICACIÓN DEL SALÓN
DE ANTOFAGASTA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 137

SALUDO A LOS CACHORRITOS

DE LEÓN DE CHILE . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 141

LA EDAD MESIÁNICA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 147

POR LA FE SE HEREDAN
LAS PROMESAS DE DIOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 185

Muy buenas noches amados amigos aquí
presentes en Santiago de Chile, y también a
cada uno de ustedes en Loprado, en Lota, y en
cualquier otro lugar que esté en la línea
telefónica.
Es para mí un privilegio muy grande estar
con ustedes aquí en Chile. La llegada nuestra
era para el jueves, pero la hemos adelantado, y
esperamos que en estos días Dios nos dé Sus
bendiciones, esperamos dos días de bendiciones
por adelantado. Siempre esperamos que las
bendiciones se adelanten y no que se atrasen.
Así que esperamos de parte de Dios, en estos
días que aquí estamos, Sus bendiciones para
nosotros.
En una ocasión el apóstol San Pablo,
hablando de la fe y la Palabra de Dios, él dijo:
``Es pues la fe la certeza (o sustancia) de las
cosas que se esperan, la convicción (o
demostración de las cosas que no se ven) de lo
4 WILLIAM SOTO SANTIAGO
que no se ve.
Porque por ella alcanzaron buen testimonio
los antiguos.
Por la fe entendemos haber sido constituido
el universo por la palabra de Dios, de modo que
lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.''
La Palabra creadora, el poder de la Palabra
hablada de Dios: Ese es el poder de la Palabra
creadora de Dios.
``EL PODER DE LA PALABRA
HABLADA DE DIOS.''
El poder de la Palabra hablada de Dios es
ese poder creador que creó los cielos y la Tierra,
es ese poder por y con el cual Dios ha estado
llevando a cabo Su programa en este planeta
Tierra y en el universo completo; porque a la
Voz de Su Palabra las cosas vienen a existencia,
y al poder de Su Palabra hablada las cosas que
tienen que dejar de existir dejan de existir.
Por el poder de la Palabra hablada viene la
bendición para el pueblo de Dios y viene el
juicio o la maldición para la cizaña. Por el poder
de la Palabra hablada vino la bendición para el
pueblo hebreo a través de Moisés; y por el
poder de la Palabra hablada vino el juicio, la
maldición, para el reino del faraón.
Por el poder de la Palabra hablada vendrá la
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA... 5
maldición para la cizaña, para el reino de los
gentiles, para el reino de la bestia y su imagen,
juntamente con los diez reyes que le darán el
poder a la bestia.
Por y con el poder de la Palabra hablada de
Dios será hablado el reino de los gentiles (repre-
sentados en los diez dedos de hierro y de barro
cocido, en esos pies de hierro y de barro cocido)
fuera de existencia.
Y por el poder de la Palabra hablada de Dios
será hablada toda bendición divina a existencia
para cada hijo de Dios.
Ahora, uno es el momento en donde es
hablada esa Palabra, y otro es el momento
donde se materializa esa Palabra hablada.
Así que vean ustedes, esa Palabra que tiene
que ser hablada son los pensamientos divinos.
En la mente de Dios ha estado todo ese progra-
ma divino que El llevaría a cabo, y ahí estába-
mos nosotros también, por eso somos genes de
la mente o pensamiento divino.
Ahora, para que se materialice algo, tiene
que ser hablada la Palabra que contiene las
características que tienen que ser materializadas.
Podemos ver que en el tiempo de los apósto-
les, los apóstoles no podían estar anunciando
que estaban predicando el año del jubileo, la
 6 WILLIAM SOTO SANTIAGO
trompeta final, la gran Voz de trompeta, porque
no era el tiempo.
Por esa causa el Mensaje que cada uno de
los apóstoles y cada uno de los siete mensajeros
predicó fue el Mensaje correspondiente a su
tiempo. Y por ser la Palabra hablada de Dios a
través de cada uno de esos mensajeros, la cual
Dios colocó en su boca, produjo el programa
divino correspondiente para ese tiempo;
apareció el mensajero con ese Mensaje, con esa
Palabra, la cual contenía las características
completas para esa Edad y las características
que tendrían los escogidos de ese tiempo.
Ahora, ninguno de ellos predicó el Mensaje
de la trompeta final, porque el Mensaje de la
trompeta final o gran Voz de trompeta es el
Mensaje final. Y ninguno de ellos tuvo el Men-
saje final.
Luego del Mensaje de uno de ellos vino el
Mensaje de otro; y así sucesivamente hasta que
llegamos al fin del siglo, al fin del tiempo, en
donde Dios ha prometido el Mensaje final, que
tendrá todas las características para la Edad y
dispensación correspondiente del fin del tiempo,
en donde comienza la Dispensación del Reino,
en donde surge, nace, la Edad de la Piedra
Angular, y en donde cada escogido recibirá su
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA... 7
transformación, porque esa Palabra hablada de
Dios contiene todas esas características para ser
materializadas.
Por lo tanto en este tiempo final todo
escogido estará escuchando la Palabra hablada
de Dios, para que se materialice en él cada
promesa divina correspondiente para el fin del
tiempo; porque esa Palabra contiene los genes
de Dios para ser materializados, ser convertidos
en una realidad, para el fin del tiempo.
Así que la Palabra hablada de Dios para el
fin del tiempo, estará hablando cosas que pon-
drán fuera de existencia el reino de la bestia con
los diez reyes y la imagen de la bestia, señalán-
dole que el tiempo ha terminado.
Al proclamarle que el tiempo ha terminado,
lo coloca fuera de existencia para esta Dispensa-
ción del Reino. Por lo tanto no pueden entrar a
la Dispensación del Reino, ni pueden entrar a la
Edad de la Piedra Angular, que es la única Edad
de la Dispensación del Reino.
Por lo tanto todas las cosas irán llevando a
cabo, para el reino de los gentiles, todo lo que
corresponde para su destrucción. Todo se va a ir
acomodando en su lugar para la finalización del
reino de los gentiles, encabezado en el anticristo
o el hombre de pecado. Todo irá tomando su
8 WILLIAM SOTO SANTIAGO
lugar para que salga de existencia el reino de los
gentiles, y todo pase al Reino de Cristo, al
glorioso Reino milenial, para que todo el poder,
la autoridad, el Reino, la honra, la gloria, sea de
nuestro Señor Jesucristo, como dice la Escritura.
Ahora, lo primero es la Palabra hablada de
Dios, y luego se materializa esa Palabra; porque
esa Palabra contiene los genes divinos en donde
están todas las características de las cosas que
deben materializarse.
Ahora, para los escogidos se les habla en la
Palabra hablada de Dios todas las bendiciones, y
se le colocan esas bendiciones en existencia para
la Edad de la Piedra Angular, para la
Dispensación del Reino. Y luego todo irá mo-
viéndose en favor de todo eso que ha sido
hablado para que se materialice esa Palabra
hablada, porque es la Palabra creadora de Dios.
En el principio creó Dios los cielos y la
Tierra. ¿Y cómo fue que Dios creó los cielos y
la Tierra? San Juan capítulo 1, verso 1 al 4,
dice: ``En el principio era el Verbo (o sea la
Palabra), y el Verbo era con Dios, y el Verbo
era Dios. Este era en el principio con Dios.
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él
nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.''
Ahora vean, todo fue hecho por El, por el
 EL PODER DE LA PALABRA HABLADA... 9
Verbo, la Palabra, y ``En él estaba la vida, y la
vida era la luz de los hombres.''
Y en el verso 14 de este mismo Evangelio
según San Juan, capítulo 1, dice: ``Y aquel
Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros
(y vimos su gloria, gloria como del unigénito
del Padre), lleno de gracia y de verdad.''
Ahora, aquí podemos ver que lo que se
materializó fue el Verbo, la Palabra; y en esa
Palabra estaban todas las características.
Por esa causa cuando Jesús de Nazaret
estuvo aquí en la Tierra dos mil años atrás,
encontramos que El cumplió cada promesa
correspondiente a la Primera Venida de Cristo,
porque El era la Palabra hecha carne. En esa
Palabra estaban todas las características que
tendría esa Palabra cuando estuviera hecha
carne, porque la Palabra hablada de Dios contie-
ne todas esas características.
Y todas las características que tiene la
Palabra hablada de Dios para el fin del tiempo,
para los escogidos, serán las características que
estarán manifiestas en el fin del siglo en y para
los escogidos.
Y la Edad de la Piedra Angular y Dispensa-
ción del Reino tendrá las características de la
Palabra. Y esa Palabra al ser hablada producirá
10 WILLIAM SOTO SANTIAGO
todo lo que está en la Palabra, y tendrá las
características que contiene la Palabra; porque
los genes de la Palabra contienen las
características que serán materializadas, y luego
serán vistas, manifestadas, en la Edad, en la
dispensación, y en las personas de esa Edad y
dispensación.
Así que todo lo que El ha prometido para
Sus escogidos está en la Palabra hablada de
Dios para el fin del tiempo. En palabras más
claras, está en esa Palabra hablada de Dios que
fue representada o simbolizada en la trompeta
final o gran Voz de trompeta, o en la trompeta
de Dios o trompeta del año del jubileo, la Voz
como de trompeta de Apocalipsis capítulo 1,
verso 10, y capítulo 4, verso 1.
En esa Palabra hablada estarán todas las
características de bendición que nosotros recibi-
remos, en esa Palabra hablada de Dios está el
cuerpo eterno que hemos de recibir, porque
solamente por la Palabra creadora hablada de
Dios puede venir un cuerpo eterno, puede ser
creado un cuerpo eterno. Y solamente puede ser
creado un cuerpo eterno alrededor de esa
Palabra hablada de Dios, porque esa Palabra
hablada de Dios contiene los genes de ese
cuerpo eterno.
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...11
Así que cuando una persona recibe la Pala-
bra hablada de Dios para su Edad o
dispensación por medio del mensajero que Dios
ha enviado, está recibiendo ahí todo el programa
divino que Dios va a desarrollar en ese tiempo.
Y toda bendición divina que Dios tiene para ese
tiempo está en ese Mensaje que ha enviado por
medio del mensajero.
Fuera de ese Mensaje no hay bendición para
ser materializada para el pueblo de Dios, porque
fuera de ese Mensaje no se encuentran los genes
de la Palabra, los genes divinos, para ser mate-
rializados. Buscar fuera de esa Palabra una
bendición de Dios para ese tiempo es buscar
algo fuera del programa divino, por lo tanto no
conviene.
Todo conviene que venga de la Palabra
hablada de Dios correspondiente para ese tiem-
po, porque eso viene de Dios, y eso es la perfec-
ta voluntad de Dios, y la bendición que se está
recibiendo es en la perfecta voluntad de Dios.
Así que cuando se ora de acuerdo a la
Palabra hablada de Dios para el tiempo en que
uno vive, se está orando en la perfecta voluntad
de Dios. Por eso es que estamos pidiendo la
transformación de nuestros cuerpos, y que
venga pronto; porque es para nuestro tiempo,
 12 WILLIAM SOTO SANTIAGO
para nuestra Edad, para nuestra dispensación. Y
ya tenemos los genes, ya tenemos esa Palabra
hablada. Y cada día se va juntando más y más
Palabra hablada con los genes de ese cuerpo
eterno que hemos de recibir, y con toda bendi-
ción que Dios tiene para nosotros.
Así que vean ustedes, las características del
cuerpo nuevo están en esa Palabra hablada, por
eso es que les he dicho que el cuerpo nuevo será
de apariencia de 18 a 21 años. Cuando usted ha
recibido esa Palabra y le ha dicho: ``Amén'',
usted ha recibido esos genes de esa Palabra para
que ese cuerpo sea de apariencia de 18 a 21
años.
Y así por el estilo cada vez que usted escu-
cha la Palabra y le dice: ``Amén'', y la cree con
todo su corazón, usted está recibiendo la Palabra
hablada de Dios, la Palabra creadora que contie-
ne los genes divinos, para que se materialice en
usted toda promesa divina correspondiente para
ese tiempo.
Cuando usted ha recibido esa Palabra habla-
da, usted puede decir como Abraham, que
aunque no nacía el hijo, él podía decir: ``yo
tengo un hijo, el hijo prometido.'' ¿Y dónde
estaba? En esa Palabra que Dios le había dado,
porque esa Palabra contenía los genes divinos
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...13
para que algún día se materializara esa Palabra.
Y Abraham fue rejuvenecido y Sara
también, por esa Palabra que tenía, que era la
Palabra divina, la Palabra creadora, que había
venido a él, porque era profeta. Porque la
Palabra creadora, la Palabra hablada de Dios,
viene a los profetas; y ellos la hablan, y después
se materializa.
Así que Abraham veía al hijo prometido
como ya existente, estaba existiendo en esa
Palabra que le había sido dada, estaba ahí, él lo
veía, pero los demás no lo veían.
Igual que cuando Noé: los científicos envia-
ban los satélites y todas estas cosas que ellos
tenían en su tiempo para hacer sus investigacio-
nes científicas, pero no encontraban la lluvia, no
encontraban el agua que Noé decía que caería.
¿Sería que ellos no sabían que agua es H2O?
Todos ustedes lo saben y aquella generación ¿no
sabía eso acaso? Y la unión de hidrógeno y
oxígeno en su composición correcta produce
agua.
¿No sabían ellos que el Creador de los cielos
y la Tierra creó hidrógeno y creó oxígeno, y en
el momento que El deseara unir esas dos cosas
en la composición que corresponde a agua, lo
unía y aparecía el agua?
14 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Ahora, Noé veía el diluvio. ¿Y dónde lo
veía Noé si no había llegado todavía? Lo veía
en la Palabra creadora; porque por la Palabra
creadora de Dios hablada es que las cosas
vienen a existencia. Y por cuanto Dios ya lo
había hablado y Noé lo había escuchado, luego
cuando Noé lo habló ya era la Palabra aquí en la
Tierra por labios humanos, y tenía que
materializarse esa Palabra.
¿De dónde vino el diluvio? Lo buscaban.
Vino de la Palabra creadora de Dios hablada por
Noé. Y Noé la habló porque la escuchó de Dios;
pero para que se materialice, tiene que pasar a
una boca humana porque ahí es donde El coloca
Su Palabra, y luego es hablada por carne huma-
na, y luego se materializa. Ahí estaban los genes
de la Palabra hablada para producir el diluvio.
Cuando uno conoce ese misterio de la Pala-
bra creadora de Dios hablada, uno está
tranquilo. Uno está tranquilo al escuchar las
bendiciones de Dios habladas a nosotros, porque
como El ha dicho así El hará.
Así que nosotros estamos esperando nuestra
transformación. Y no estamos esperando la
transformación como los tontos, sin tener la
base. Tenemos la base donde está depositada
nuestra fe: en la Palabra creadora de Dios habla-
 EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...15
da para este tiempo final. Esa es la Palabra
hablada de Dios para ustedes y para mí, la cual
no fallará.
Jesús dijo: ``los cielos y la Tierra pasarán,
pero mi palabra no pasará.'' ``No pasará''
significa que la Palabra hará aquello que dice
esa Palabra.
También Dios a través del profeta Isaías, en
el capítulo 55, hablando de Su Palabra, comen-
zando en el verso 10 hasta el 11, dice: ``Porque
como desciende de los cielos la lluvia y la nieve,
y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la
hace germinar y producir, y da semilla al que
siembra, y pan al que come,
así será mi palabra que sale de mi boca; no
volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo
quiero, y será prosperada en aquello para que
la envié.''
``...será prosperada en aquello para que la
envié'' Dios hace que esa Palabra se cumpla; en
palabras más claras, hace que toda la naturaleza
y todas las cosas obren a bien, para que se
cumpla esa Palabra hablada.
Todo entonces obrará para bien para los que
aman a Dios y para aquellos que Dios ama,
todas las cosas obrarán para bien cuando la
persona ha recibido esa Palabra.
16 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Todas las cosas obrarán para bien para que
esa Palabra sea prosperada en todo y lleve el
fruto de lo que ha sido hablado, para que pro-
duzca lo que ha sido hablado; porque contiene
los genes, por lo tanto contiene todas las carac-
terísticas que se necesitan para la
materialización de lo que Dios ha prometido.
Así que yo veo a cada uno de ustedes trans-
formado. ¿Dónde? En la Palabra. Y luego se va
a materializar eso que yo veo.
Veinte años atrás no se podían ver quiénes
serían los que estarían en la Tierra y que serían
transformados en el fin del tiempo; pero luego
que ha ido pasando el tiempo y ha estado lle-
gando la Palabra creadora de Dios, y ha estado
siendo hablada esa Palabra creadora, ahora
podemos ver que el noventa y algo por ciento
(para ser un poquito conservadores y dejarle una
oportunidad a los de otras naciones fuera de la
América Latina y el Caribe) de los que serán
transformados, serán latinoamericanos y caribe-
ños. Antes no podíamos ver eso; pero ya que ha
sido hablada esa Palabra y ha sido mostrado el
programa divino, ya sí podemos ver quiénes
serán los que serán transformados.
Los que serán transformados conforme a las
promesas divinas tendrán la fe para ser transfor-
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...17
mados y raptados. Y la fe para ser transforma-
dos y raptados está en los siete truenos de
Apocalipsis. Y los siete truenos de Apocalipsis
son la Palabra hablada de Dios para el fin del
tiempo, que es la trompeta final, la gran Voz de
trompeta, la trompeta del Año del Jubileo, la
Voz como de trompeta; en palabras más claras:
el Mensaje del Evangelio del Reino, de la
Dispensación del Reino y Edad de la Piedra
Angular a la cual nosotros pertenecemos,
porque El nos escogió desde antes de la
fundación del mundo para ser parte de la Edad
de la Piedra Angular y estar en la Dispensación
del Reino, y recibir el Mensaje de la Palabra
hablada de Dios para este tiempo final.
Así que al tener todas estas cosas no cabe
duda en nuestros corazones o en nuestra mente
de que nosotros seremos transformados, porque
tenemos la Palabra hablada de Dios para este
tiempo final. Y esa Palabra hablada de Dios es
la Palabra creadora de Dios, para crear todas las
cosas que El ha prometido para Sus escogidos.
¿Y qué otro pueblo tiene esa fe? No es sola-
mente decir: ``Dios dijo que habrá una transfor-
mación y yo la creo.'' No. Hay que tener la
Palabra creadora de Dios, porque esa es la que
contiene los genes, las características en esos
 18 WILLIAM SOTO SANTIAGO
genes, para esa transformación.
Así que teniendo esa Palabra, en esa Palabra
es que nosotros vemos nuestra transformación,
el cuerpo nuevo, podemos ver que es de 18 a 21
años, podemos ver que será un cuerpo perfecto,
podemos ver que es el cuerpo que Dios diseñó
desde antes de la fundación del mundo para
cada uno de nosotros.
Podemos ver todas estas cosas porque están
en la Palabra, y esa Palabra está siendo hablada;
y esa Palabra son los pensamientos divinos. Los
genes del pensamiento divino están ahí en ese
Mensaje, para que se materialicen y produzcan
esas características que esa Palabra dice que
producirá, que tendrá.
Así que todas las características que serán
vistas en nuestra Edad, en nuestra dispensación,
aún en cada uno de nosotros como individuos,
en nuestros cuerpos que hemos de recibir y
todo, todo eso está en la Palabra hablada de
Dios.
Y cuando nosotros podemos escuchar esa
Palabra hablada de Dios, esa Palabra hablada de
Dios contiene un poder: El poder creativo de
Dios, ese poder que los científicos han tratado
de encontrar, ese poder que se mueve de acuer-
do a las leyes divinas, ese poder que produjo la
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...19
Creación, que le llaman el Big-Bang (la explo-
sión grande que produjo la creación del univer-
so, la primera explosión). Y vean ustedes, fue la
Palabra creadora de Dios que produjo todo eso.
Así que esa Palabra creadora contiene un
poder, y ese poder es el que hace que se mate-
rialice toda esa Palabra. Y nosotros tenemos que
estar bien contentos, bien agradecidos a Dios, y
bien seguros y tranquilos en cuanto a las prome-
sas de Dios.
Ahora, eso no quiere decir que nos vamos a
cruzar de brazos esperando la transformación.
La estamos esperando, estamos seguros en
cuanto a eso, pero no cruzados de brazos, sino
trabajando en el Reino de Dios en todas las
cosas que se tienen que hacer en el Reino de
Dios. Y todo obrará para bien y en favor de toda
promesa que Dios ha hecho para nosotros.
Bueno, ¿y por qué trabajamos entonces en la
obra de Dios, cuando lo que estamos esperando
es la transformación y el cuerpo nuevo? Porque
también tenemos otra promesa. El ha dicho que
El dará a cada uno de acuerdo a sus obras.
Dios dará la recompensa, los galardones, a
cada persona, de acuerdo a lo que ha trabajado
en el Reino de Dios. Y si se quedó con los
brazos cruzados y no hizo nada, ¿cuánto va a
20 WILLIAM SOTO SANTIAGO
recibir? ¿qué va a recibir? Nada. Y si no va a
recibir nada, entonces ha perdido el privilegio
que Dios le ha dado de trabajar en el Reino de
Dios, y ha hecho exactamente como hizo el
hombre que escondió su talento.
No esconda su talento. Todos tenemos el
privilegio dado por Dios de trabajar en Su obra,
unos más, otros menos, pero cada uno tiene ese
privilegio de parte de Dios. No eche a un lado
ese privilegio.
Usted tiene la Palabra; por lo tanto usted
tiene ese privilegio de trabajar en la obra de
Dios, y hacer llegar esa Palabra por diferentes
lugares, para que llegue a todos los que están
escritos en el Libro de la Vida del Cordero y
también en la otra sección, y así se lleve a cabo
la obra de Dios correspondiente para el fin del
tiempo.
¿Y qué es lo que está aconteciendo
cuando nosotros trabajamos en la obra de
Dios, teniendo nosotros la Palabra hablada
de Dios, esa Palabra creadora? ¿Saben lo que
está aconteciendo? A medida que usted
trabaja en la obra de Dios, esa Palabra que
usted tiene, por cuanto es una Palabra
creadora, está creando, materializando,
muchas cosas que han sido dichas que serían
 EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...21
realizadas.
Y ustedes son portadores de esa Palabra;
entonces la obra que ustedes llevan a cabo no
es una obra de ustedes, sino es la obra de la
Palabra hablada de Dios que está en ustedes.
Y entonces ustedes pueden decir: ``Esto no lo
hice yo; solamente fui el instrumento para
esta labor, esta es la obra de la Palabra
hablada de Dios que yo llevo por dentro.''
Y entonces podemos ver la obra de Dios
cómo se mueve, cómo se va materializando
todo, cómo se realiza, porque en esa Palabra
hablada que usted ha recibido están los genes
para materializarse toda promesa que Dios ha
hecho para este tiempo final. Ahí están todas las
características, por lo tanto llevando la Palabra,
veremos la materialización de todo lo que Dios
ha prometido.
Así que yo estaré siempre entre ustedes,
trayéndole a todos ustedes aquí presentes, y a
todos alrededor de todos los lugares, de todas
las naciones, y principalmente en América
Latina y el Caribe (aunque eso no quiere decir
que no pueda ir a Europa u otros lugares), pero
principalmente entre los latinoamericanos y
caribeños estaré viajando, caminando,
llevándole la Palabra hablada de Dios para este
22 WILLIAM SOTO SANTIAGO
tiempo final, porque es la Palabra creadora de
Dios, para crear, para materializar, toda
promesa que El ha hecho para el fin del tiempo.
Yo le doy gracias a Dios por esa Palabra
hablada, yo le doy gracias a El, y les puedo
decir que yo he visto el poder de la Palabra
hablada de Dios.
Así que esa Palabra hablada tiene un poder,
es un poder creativo. Y cuando se lleva esa
Palabra, se habla esa Palabra, y luego se coloca
en folletos y en videos, y cuando esa Palabra se
hace correr por todos los lugares, esa Palabra
lleva un poder: es el poder creador de Dios para
materializar toda promesa que El ha hecho para
el fin del tiempo, y para el Milenio, y también
para la eternidad. Porque siendo el Mensaje
final, en ese Mensaje final están todas las carac-
terísticas de la obra que Dios hará para este
tiempo final, para el Milenio y para toda la
eternidad.
En esa Palabra hablada de Dios para este
tiempo final, se estará dando a conocer las cosas
que deben acontecer pronto, las cosas que deben
acontecer después de las Edades de la Iglesia,
las cosas que deben acontecer después de la
Dispensación de la Gracia, las cosas que deben
acontecer en la Edad de la Piedra Angular y
EL PODER DE LA PALABRA HABLADA...23
Dispensación del Reino.
La Dispensación del Reino son los mil años,
pero la Edad, siendo una Edad eterna, pasará a
la eternidad; por lo tanto ahí estará todo habla-
do, todas las cosas que deben acontecer son
habladas y reveladas al pueblo para luego ser
materializadas.
Por esa causa el Dios de los espíritus de los
profetas, dice: ``ha enviado a su ángel para dar
testimonio, para manifestar a sus siervos las
cosas que deben suceder pronto'', porque tienen
que ser habladas para que luego sucedan;
porque esa Palabra hablada tiene el poder
creativo o creador de Dios.
Así que recibiendo la Palabra hablada, lo
que estamos recibiendo es el poder de la Palabra
hablada, para materializarse toda promesa divi-
na, toda bendición divina que a nosotros nos
corresponde como hijos e hijas de Dios.
``EL PODER DE LA PALABRA
HABLADA.'' Y vean lo sencillo que es todo.
Todo es sencillo, pero ahí está el poder:
¿Dónde? En la Palabra hablada.
``EL PODER DE LA PALABRA
HABLADA.'' Que Dios nos continúe
bendiciendo a todos, que Dios nos guarde; y
hacia adelante recibiendo la Palabra hablada
 24 WILLIAM SOTO SANTIAGO 26 WILLIAM SOTO SANTIAGO

para nuestra Edad y para nuestra dispensación.

Pasen todos muy buenas noches. Muchas
gracias por vuestra amable atención, y Dios les
continúe bendiciendo grandemente a todos, y
también a mí.
Dios les bendiga a ustedes también en los
diferentes lugares de aquí de la República de
Chile, en Loprado, en Lota; y también cada uno
de ustedes allá en Venezuela, en Colombia, en
México, y en todos los lugares que en esta
noche o a través de este video puedan escuchar
esta conferencia titulada: ``EL PODER DE LA
PALABRA HABLADA DE DIOS.''
Con nosotros nuevamente Miguel Bermúdez
Marín.
``EL PODER DE LA PALABRA
HABLADA DE DIOS.''
 SALUDO A
LOS MAESTROS
DE NIÑOS DE CHILE
Por William Soto Santiago
29 de enero de 1992
Santiago de Chile, Chile

Un saludo a todos los maestros y maestras
aquí reunidos. Es para mí un privilegio estar con
ustedes, y ver que cada uno de ustedes está muy
interesado en los niños, y que ellos conozcan
bien el Mensaje que han recibido, porque es
para ellos también. Y de ese Mensaje depende
nuestra transformación, la transformación de los
adultos y la transformación también de los
niños.
Y ninguno de los padres desea que sus niños
se queden sin esa bendición de la transforma-
ción; por lo tanto todos los niños también están
interesados en su transformación. Y por eso se
requiere que esa simiente de la Palabra venga a
ellos, y que sea regada con la enseñanza, el agua
de la enseñanza, para que ellos crezcan en el
conocimiento de esa Palabra que han recibido, y
puedan conocer ese Mensaje así como conocen
que 2 + 2 = 4.
Así debe conocer cada persona el Mensaje,
ser ese Mensaje una parte de la persona, ser bien
conocido ese Mensaje por la persona, y estar
consciente del Mensaje que han recibido;
SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
31
porque eso es estar la Palabra encarnada en la
persona, y estar creciendo esa Palabra, y estar
echando raíces.
Usted siembra una simiente, una semilla,
pero cuando la siembra no tiene raíces, no ha
crecido; pero luego cuando viene la lluvia, que
representa la enseñanza de la Palabra, y cuando
viene el sol también y le da con su luz, su rayo
de luz de la Palabra, de la enseñanza de la
Palabra, esa simiente brota ahí dentro en la
tierra, que somos nosotros, la buena tierra, los
latinoamericanos y caribeños, brota ahí, nace, y
comienza a crecer para arriba y para abajo.
Esa simiente crece para arriba en cuanto al
tallo y para abajo en cuanto a sus raíces; porque
si crece solamente para arriba y no echa raíces,
luego cualquier viento de persecuciones, de
problemas, se la lleva, arranca esa simiente, esa
Palabra, y entonces esa persona se queda sin la
bendición de Dios.
Porque la bendición está en esa semilla, en
esa Palabra, y la persona es conceptuada por
Dios como una buena tierra cuando ya se ha
sembrado esa semilla y esa semilla ha echado
raíces, esa semilla ha crecido, y luego lleva el
fruto.
Ahora, ¿Cuál es la evidencia de la buena
32 WILLIAM SOTO SANTIAGO
tierra? La misma parábola dice cuál es la evi-
dencia de la buena tierra. Y ustedes son maes-
tros; así que esa pregunta se la puede dejar
Bermúdez ahí pendiente para ver si ustedes
descubren cuál es la evidencia de la buena
tierra; y si no la ven, en estos momentitos que
vamos a estar aquí vamos a verla. Es sencillita,
pero se requiere esa evidencia para la persona
saber que es la buena tierra, y para poder ver en
las personas que son la buena tierra.
Porque no queremos estar sembrando en
pedregales, ni junto al camino, sino aprovechan-
do todo el esfuerzo para sembrar en la buena
tierra, y para regar con el agua de la enseñanza
esa buena tierra, porque contiene la buena
simiente.
Así que yo estoy muy contento con que Dios
haya levantado maestros y maestras para ense-
ñarle la Palabra a los niños, para regar esa buena
tierra con el agua de la enseñanza, del Mensaje,
para que esa semilla ahí crezca y produzca
mucho fruto.
Así que la labor que ustedes tienen es una
labor muy hermosa, muy bonita.
Y miren ustedes, todas las naciones tienen
maestros que les enseñan matemáticas, inglés, y
esto y lo otro, que les enseñan las cosas que la
 SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
33
gente necesita para después poder trabajar,
poder entender los números, poder evolucionar
en los negocios, en las compras, en las ventas;
para que así la vida diaria la puedan llevar a
cabo correctamente. Pero está la vida espiritual,
y esa vida espiritual depende de la enseñanza de
la Palabra, para que sepan desenvolverse en el
programa divino para el tiempo en que viven.
Tanto los adultos como los niños también.
Así que ustedes tienen un privilegio muy
grande en este tiempo final. Muchos pueden
decir que son maestros o maestras de tal país, y
que enseñan tal o cual clase de las clases asigna-
das por el gobierno de ese país para las escuelas.
Pero ustedes pueden decir: ``nosotros somos
maestros y maestras que enseñamos la Palabra,
el Mensaje correspondiente para nuestro tiempo,
para nuestra Edad, la Edad de la Piedra
Angular, para nuestra dispensación, la
Dispensación del Reino; y somos maestros y
maestras del Reino de Dios.''
Y esa es la clase de maestro que tienen el
nivel más alto, porque es del Reino de Dios, los
cuales tienen recompensas de y para vida eterna.
Así que ustedes tienen ese privilegio, el cual
ha surgido, esa oportunidad de trabajar en el
Reino, sin nadie forzar la situación. Y ustedes
34 WILLIAM SOTO SANTIAGO
han aparecido, y todo esto podemos ver que
estaba ya desde antes de la fundación del mundo
en el programa divino, y ustedes han surgido
con una posición muy bonita, muy importante,
en el Reino de Dios.
Así que estamos trabajando unidos en la
enseñanza del Mensaje: Ustedes a los niños, a
los cuales les ha sido dada esa oportunidad. Y
yo les felicito y le doy gracias a Dios por uste-
des, y le pido a Dios que les use grandemente en
Su Reino, y que los niños aprendan el Mensaje
de la hora como 2 + 2 = 4.
Eso quiere decir que conozcan el Mensaje
(como decimos nosotros también) ``al dedillo'',
y que lo conozcan en tal forma que ellos puedan
también explicar el Mensaje, y puedan llevar
actividades (como también los adultos y los
jóvenes) tanto en el lugar a donde asisten, como
en la ciudad, la comunidad donde asisten, para
llevar el Mensaje a otros niños, y que también
jóvenes y adultos sean impactados, y reciban el
beneficio de esas labores que ellos lleven a
cabo.
Porque Dios en Su Reino no quiere vagos;
por lo tanto los niños también tienen la oportu-
nidad de trabajar en el Reino de Dios. Y ellos
son los primeros que quieren trabajar en el
SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
35
Reino de Dios.
Yo le doy gracias a Dios por cada uno de
ustedes, le doy gracias a Dios por los niños, le
doy gracias a Dios por los padres de los niños
que han visto la necesidad de que sus niños
conozcan la Palabra y estén así preparados para
ser transformados; porque ningún padre y madre
quiere que sus hijos se queden sin la transforma-
ción; por lo tanto todos queremos que los niños
reciban la Palabra, la entiendan, y lleven mucho
fruto.
Muchas gracias. Dios les continúe
bendiciendo grandemente. Luego le contestan a
Miguel la pregunta que le colocamos a ustedes:
¿Cuál es la evidencia de ser la buena tierra?
Vamos a ponerla más sencilla: ¿Cuál es la
evidencia de la buena tierra, antes de llevar
fruto a treinta, a sesenta y a ciento, antes de
producir el fruto de la simiente que se sembró?
Porque después que el fruto está producido,
cualquiera lo sabe. Cualquiera sabe que es
buena tierra, porque está produciendo ya el
fruto.
Pero cuando la semilla se siembra, la perso-
na no está viendo el fruto, sólo sabe que está
sembrada ahí una semilla. Y cuando la plantita
va creciendo todavía no se ve el fruto, pero
 36 WILLIAM SOTO SANTIAGO
cuando está dando el fruto ya cualquiera sabe
que es buena tierra.
¿Cómo tú sabes que tal árbol que ha sido
sembrado es de naranja o de mango sin todavía
haber crecido, y sin todavía dar los frutos?
Vamos a ver, yo creo que Jesús nos puede
contestar la pregunta; se la tenemos hecha al
Señor Jesucristo, vamos a ver qué El nos dice
(San Mateo 13:18-23): ``Oíd, pues, la parábola
del sembrador: Cuando alguno oye la palabra
del reino y no la entiende, viene el malo, y
arrebata lo que fue sembrado en su corazón
(fue sembrada la Palabra, la recibió en el
corazón, pero no la entendió; y entonces vino el
malo y se la llevó). Este es el que fue sembrado
junto al camino.
Y el que fue sembrado en pedregales, éste es
el que oye la palabra, y al momento la recibe
con gozo (este la recibió); pero no tiene raíz en
sí (de lo que hablábamos, que es necesario que
eche raíces después que la persona ha escuchado
la Palabra), sino que es de corta duración, pues
al venir la aflicción o la persecución por causa
de la palabra, luego tropieza (tropiezan y se
van).
El que fue sembrado entre espinos, éste es el
que oye la palabra, pero el afán de este siglo y
SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
37
el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y
se hace infructuosa (ese la recibió también, fue
sembrada ahí, pero no produce fruto; porque así
como las espinas ahogan cualquier matita que
uno siembra, así los afanes de este siglo y el
engaño de la riqueza, las cosas terrenas o terre-
nales, pues entonces le afectan y le impiden el
crecimiento, y el llevar fruto también le impiden
a esa simiente que fue sembrada).
Mas el que fue sembrado en buena tierra
(aquí está la contestación), éste es el que oye y
entiende la Palabra, y da fruto; y produce a
ciento, a sesenta, y a treinta por uno.''
¿Cuál es la evidencia de la buena tierra?
El que entiende esa Palabra que recibió.
Y por eso es que queremos que nuestros
niños entiendan la Palabra que han recibido, la
Palabra que ha sido traída.
Todos deben entenderla, desde los niños
hasta los adultos; porque si no la entienden,
entonces caen en la clasificación de los otros
tres grupos; y en algún momento se van, o si se
quedan no llevan fruto; porque están más pen-
dientes a las cosas terrenas que a las cosas del
Reino de Dios, no llevan el fruto que deben
llevar para este tiempo en que estamos nosotros
viviendo, y entonces vienen a ser los tipos de
38 WILLIAM SOTO SANTIAGO
creyentes que solamente se van en escuchar,
pero no producen nada en el Reino de Dios.
Cuando hay que hacer un trabajo en el
Reino de Dios, dicen: ``no, yo tengo que ir a
trabajar'' o ``tengo este compromiso'' o ``si yo
hago esto, perdería tanto de dinero, y esto y lo
otro.'' Y es ahogada la Palabra que tienen, es
ahogada con las cosas de este mundo, con las
riquezas y los afanes de este mundo.
Dicen: ``no puedo quedarme un poquito
más, porque mañana tengo que madrugar'', y a
lo mejor después llega a la casa y se queda
viendo televisión, y no está una hora, sino dos
horas viendo televisión; y no pudo estar una
hora para hacer un trabajo, cuando necesitaba
una hora para un trabajo de la obra de Dios.
Entonces queremos que nuestros niños no
solamente tengan esa Palabra sembrada, sino
que la entiendan, para que lleven el fruto que
Dios requiere para esta hora final; porque si no,
no pueden llevar fruto, solamente son oidores,
pero no son personas que entienden el Mensaje.
Y cuando les viene algún momento difícil,
entonces no saben qué decir, o qué hacer, o se
apartan, y les da lo mismo venir o no venir a las
actividades.
Pero cuando entienden la Palabra, saben que
 SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
39
en ellos esa Palabra creadora está siendo coloca-
da para que produzca esa transformación que
nosotros estamos esperando y que Dios ha
prometido para nosotros. Y entonces ellos
pueden entender que sin esa Palabra ellos no
pueden ser transformados, y esa Palabra la
tienen que entender para que pueda llevar fruto,
y para que pueda llevar ese fruto de la transfor-
mación, que será un fruto de esa Palabra que fue
sembrada; así como todas las cosas que haga-
mos en el Reino de Dios serán fruto de esa
Palabra, porque en cada labor que hagamos
se estará cumpliendo la Palabra.
Por ejemplo, cuando cantamos con alegría,
con regocijo, pues se está cumpliendo la Palabra
que dice: ``regocíjate mucho, oh hija de Sión,
da voces de júbilo, oh Jerusalén.''
¿Ven? En todo lo que hagamos en el Reino
de Dios se estará cumpliendo alguna Escritura,
una, dos, o tres a la misma vez, se pueden
cumplir un sinnúmero de Escrituras. Y la Trans-
formación será el cumplimiento de las
Escrituras que hablan de una transformación
para nuestros cuerpos, en la cual obtendremos el
cuerpo eterno; este será transformado, y
entonces ya tendremos un cuerpo eterno para
vivir por toda la eternidad.
40 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Pero antes de venir ese fruto de la Palabra
veremos otros frutos apareciendo; pero todo
será la Palabra, frutos de la Palabra que fue
sembrada.
Así que por esa causa todos necesitamos la
enseñanza de la Palabra, y todos necesitamos
entender la Palabra; porque entender la Palabra
es la evidencia de que una persona es la buena
tierra donde fue sembrada esa Palabra, ese
Mensaje, para el tiempo en que uno está vivien-
do.
Así que Dios les bendiga, Dios les guarde. Y
ahora Miguel puede examinar las
contestaciones. Pero no se preocupen, si ustedes
fallaron, falló también él; porque en los cuatro
grupos fue sembrada la Palabra, pero solamente
en uno llevó fruto, y ese uno en el cual llevó
fruto a ciento por uno, a sesenta y a treinta por
uno... Pero la evidencia, como hemos visto, es
que entiende la Palabra, esa Palabra que fue
sembrada en él.
Así que tenemos una responsabilidad: y es
ayudar a todos para que todo se haga tan simple,
tan sencillo, que hasta los niños pequeñitos
puedan entender esa Palabra que ha sido
sembrada en nuestra Dispensación del Reino, en
nuestra Edad de la Piedra Angular, y en cada
SALUDO A LOS MAESTROS DE NIÑOS...
41
uno de nosotros como individuos.
Que Dios les bendiga, Dios les guarde.
Muchas gracias por vuestra atención, muchas
gracias por la invitación para estar con ustedes
aquí, por estos momentitos tan agradables que
he pasado junto a ustedes, y muchas gracias,
Miguel, por invitarme aquí, y por permitirme
examinarte a ti también en esta mañana.
Así que a Miguel no se le escapan los maes-
tros cuando él está examinando a los niños; así
que lo mismo que él hizo, tenía yo que hacerlo
con él.
Así que podemos ver que necesitamos noso-
tros también recibir más conocimiento, más
enseñanza; y eso solamente viene con esa lluvia
de la enseñanza de la Palabra, para estar al día
en el conocimiento de todo el programa de
nuestra dispensación, de la Dispensación del
Reino, de nuestra Edad, la Edad de la Piedra
Angular.
Así que Dios me ayude a mí en todo; y que
cuando el Señor Jesucristo me examine, que El
antes me prepare para toda pregunta que El me
haga yo pueda contestársela correctamente, de
acuerdo a la enseñanza que corresponde para
este tiempo final.
Muchas gracias y Dios nos continúe bendi-
 42 WILLIAM SOTO SANTIAGO

ciendo a todos.
 Muy buenas noches amados amigos y
hermanos presentes, y también cada uno de
ustedes a través de la línea telefónica.
Es para mí un privilegio muy grande estar
con ustedes en esta noche, y tener la oportuni-
EL ESPIRITU DE VIDA dad de dirigirme a ustedes con la Palabra de
Dios.
En esta noche le damos gracias a Dios por
Por William Soto Santiago Su Palabra, porque es la Palabra de vida.
29 de enero de 1992 El Señor Jesucristo en una ocasión, en el
Santiago de Chile, Chile verso 63 de San Juan capítulo 6, dijo: ``El
espíritu es el que da vida; la carne para nada
aprovecha; las palabras que yo os he hablado
son espíritu y son vida.''
``EL ESPIRITU DE VIDA.''
No toda palabra tiene el Espíritu de vida, no
toda palabra es Palabra de vida eterna. La única
Palabra de vida eterna y que tiene Espíritu de
vida es la Palabra de Dios.
Y la Palabra de Dios para cada Edad y
dispensación es la Palabra con el Espíritu de
vida, para darle vida a los hijos de Dios que
 48 WILLIAM SOTO SANTIAGO
viven en ese tiempo.
Por esa causa Jesús podía decir: ``mis pala-
bras son espíritu y son vida... y el que oye mi
palabra, tiene vida eterna.''
Bien dijo el apóstol San Pedro a Jesús: ``Tú
tienes palabra de vida eterna.''
Así que el Espíritu de vida está en la Palabra
de vida para el tiempo en que es enviada esa
Palabra. Y el Espíritu de vida pasó de los he-
breos a los gentiles, y ha estado moviéndose por
aproximadamente dos mil años en medio del
pueblo gentil, pero el pueblo hebreo tiene la
promesa de recibir ese Espíritu de vida en el fin
del tiempo.
El pueblo hebreo ha estado por dos mil años
aproximadamente en y conforme a la profecía
de los huesos secos, pero la promesa divina para
el pueblo hebreo es que esos huesos secos
vivirán.
En Ezequiel capítulo 37, Dios le muestra
esta visión a Ezequiel, y dice: ``La mano de
Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu
de Jehová, y me puso en medio de un valle que
estaba lleno de huesos.
Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en
derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre
la faz del campo, y por cierto secos en gran
EL ESPIRITU DE VIDA 49
manera.
Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos
huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes.
Me dijo entonces: Profetiza sobre estos
huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de
Jehová.
Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos:
He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y
viviréis.
Y pondré tendones sobre vosotros, y haré
subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel,
y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y
sabréis que yo soy Jehová.
Profeticé, pues, como me fue mandado; y
hubo un ruido mientras yo profetizaba, y he
aquí un temblor; y los huesos se juntaron cada
hueso con su hueso.
Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la
carne subió, y la piel cubrió por encima de
ellos; pero no había en ellos espíritu.
Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza,
hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho
Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro
vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán.
Y profeticé como me había mandado, y
entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron
sobre sus pies; un ejército grande en extremo.''
50 WILLIAM SOTO SANTIAGO
``Y profeticé como me había mandado...''
¿Cómo le había sido mandado? ``Y me dijo:
Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre,
y di al espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor:
Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla
sobre estos muertos, y vivirán.''
Porque el Espíritu de vida no estaba en
Israel, no estaba en medio de esos huesos, sino
que estaba en medio de los gentiles.
Por eso es mandado aquí al profeta a llamar
al espíritu de los cuatro vientos de la Tierra,
para que regrese el Espíritu de vida al pueblo
hebreo, y así la vida venga a ellos, y así ellos
puedan vivir en ese programa divino, puedan
ellos vivir esa vida espiritual que les correspon-
de, puedan ellos vivir delante de Dios, y Dios
establecer Su pacto con el pueblo hebreo.
Ahora, el Espíritu de vida todavía está en
medio de los gentiles porque el Espíritu de vida
todavía no se ha ido para el pueblo hebreo,
porque se requiere que los escogidos que viven
en el fin del tiempo reciban la transformación
de sus cuerpos; por lo tanto el Espíritu de vida
está moviéndose en medio de los escogidos de
entre los gentiles, para luego pasar al pueblo
hebreo.
Así que el Espíritu de vida nos trae vida por
 EL ESPIRITU DE VIDA 51
Su Palabra, por la Palabra de Dios, porque Jesús
dijo: ``Mis palabras son espíritu y son vida... y
el que oye mi palabra, tiene vida eterna.''
No busque la vida y el Espíritu de vida fuera
de la Palabra de Dios. Fuera del Mensaje que
corresponde para nuestro tiempo ninguna perso-
na encontrará el Espíritu de vida, porque El se
ha ido moviendo de Edad en Edad y de dispen-
sación en dispensación.
El se movió de la primera dispensación a la
segunda dispensación, y de la segunda dispensa-
ción a la tercera dispensación.
Y en la segunda dispensación el Espíritu de
vida se movió de San Pablo, el primer mensaje-
ro, al segundo mensajero; y del segundo mensa-
jero se movió al tercer mensajero; y del tercer
mensajero se movió al cuarto mensajero; y del
cuarto al quinto mensajero; y así sucesivamente
se fue moviendo de mensajero en mensajero. Y
donde estuviera ese mensajero, ahí estaba el
Espíritu de vida.
En la nación o continente en donde estaba el
mensajero, ahí estaba el Espíritu de vida para
traer la Palabra a través del mensajero, y darle
vida a los escogidos de Dios.
Así el Espíritu de vida se movió del primer
mensajero al segundo, del segundo al tercero,
52 WILLIAM SOTO SANTIAGO
del tercero al cuarto, del cuarto al quinto, del
quinto al sexto, del sexto al séptimo, que fue
William Marrion Branham; el cual vio moverse
ese Espíritu de vida, la Columna de fuego, el
Pilar de fuego, para hablarle a otro mensajero.
Ya el séptimo mensajero terminaba su labor,
pero el Espíritu de vida no había terminado Su
labor, por cuanto los escogidos todavía no
estaban transformados, y los muertos en Cristo
no estaban resucitados.
Por lo tanto, el Espíritu de vida tiene una
labor muy importante para llevar a cabo en
medio de los gentiles; y para eso El entonces le
habla al mensajero de la Dispensación del
Reino, y lo envía con un Mensaje, con el Men-
saje del Evangelio del Reino, dando testimonio
de estas cosas a todos los hijos de Dios, a todas
las iglesias, a todas las naciones, para llamar y
juntar a todos los escogidos con ese Mensaje del
Evangelio del Reino, que es el Mensaje de la
gran Voz de trompeta o trompeta final; y así
llevar a cabo la obra divina que corresponde
para el fin del tiempo, para que así todos los
escogidos regresen a la vida eterna con cuerpos
eternos.
Se necesita ese Espíritu de vida moviéndose
en medio del pueblo y moviéndose a través de
EL ESPIRITU DE VIDA 53
la Palabra, a través del Mensaje, que correspon-
de para nuestro tiempo, para que así podamos
nosotros recibir vida por medio de Su Palabra, y
poder nosotros decir: ``¡Tú tienes palabras de
vida eterna!''
¿Quién tenía palabras de vida eterna? La
Columna de fuego, el Pilar de fuego que estaba
encarnado en Jesús de Nazaret tenía Palabras de
vida eterna, las cuales se estaban manifestando a
través de carne humana.
Y así ha sido siempre: esa Columna de
fuego, ese Pilar de fuego, que le apareció a
Moisés y le apareció a San Pablo, ese Pilar de
fuego que estuvo encarnado en la persona de
Jesús es el que siempre ha tenido palabras de
vida eterna para todos los escogidos de Dios.
Y en este tiempo final yo digo al Pilar de
fuego, a esa Columna de fuego: Tú tienes
palabras de vida eterna para nosotros en este
tiempo final.
Y esas palabras de vida eterna son la trom-
peta final, la gran Voz de trompeta, el Mensaje
del Evangelio del Reino, para darnos vida a
todos nosotros, y para regresarnos a la vida
eterna con un cuerpo eterno, y vivir por toda la
eternidad llenos de vida, llenos de juventud,
llenos de felicidad, llenos de alegría, de paz y de
 54 WILLIAM SOTO SANTIAGO
armonía, y llenos del amor divino,
representando de 18 a 21 años.
¿Por qué? Porque el Espíritu de vida ha
venido a nosotros, a los latinoamericanos y
caribeños.
¿Y cómo ha venido el Espíritu de vida?
Cada vez que surgió el mensajero de cada Edad,
cuando le fue colocado el Mensaje en su boca y
comenzó a predicar ese Mensaje, el Espíritu de
vida vino a esa Edad, vino a ese lugar, nación o
continente, donde fue enviado ese mensajero,
vino a ese pueblo que lo recibió.
Y con alegría de corazón y agradecimiento a
Dios podemos decir: El Espíritu de vida ha
venido a nosotros los latinoamericanos y caribe-
ños. Y luego irá al pueblo hebreo, el cual tiene
la promesa de recibir el Espíritu de vida después
de nosotros.
Así que aprovechemos bien el tiempo
porque el Espíritu de vida está con nosotros,
está entre nosotros, para darnos vida y vida en
abundancia.
Y esto tiene que ver tanto en lo espiritual
como también en lo físico, porque nos dará un
cuerpo eterno con vida eterna; porque el
Espíritu de vida ha venido a los
latinoamericanos y caribeños.
EL ESPIRITU DE VIDA 55
Está entre nosotros el Espíritu de vida,
está entre nosotros la Columna de fuego, el
Pilar de fuego, el Jehová del Antiguo Testa-
mento, el Jesús del Nuevo Testamento, está
entre nosotros dándonos Su Palabra de vida
eterna, para que nosotros recibamos vida, y
vida en abundancia de parte de El.
Saber que el Espíritu de vida está entre
nosotros es saber la cosa más grande que un ser
humano puede saber en este tiempo final; por-
que todas las naciones están buscando a Dios,
pero por la ciencia no lo han encontrado, por la
cultura tampoco lo han encontrado. Cuando
ellos vienen a descubrir algo, ya ha pasado el
tiempo.
Cuando las religiones vienen a descubrir que
Dios estuvo con Noé, ya el diluvio pasó hace
tiempo. Cuando los gobiernos vinieron a descu-
brir que Dios estaba con Noé, ya había pasado
el diluvio; porque el gobierno o los gobiernos
del tiempo de Noé no se dieron cuenta que Dios
estaba con Noé. Y todos perecieron con todos
los sistemas establecidos en aquellos días.
De igual forma el faraón con todos los
sistemas de gobierno que tenía, incluyendo los
políticos, los religiosos, los sociales, los econó-
micos, todos esos sistemas, no vieron que Dios
56 WILLIAM SOTO SANTIAGO
estaba con Moisés y con el pueblo hebreo; pero
ahora todos los pueblos saben que Dios estaba
con Moisés y con el pueblo hebreo, después que
ya pasó el tiempo.
El pueblo de Israel no supo que Dios estaba
con y en Jesús de Nazaret; y todavía no lo
saben. Dos mil años después todavía no han
descubierto que Dios estaba en Cristo reconci-
liando al mundo consigo mismo.
Ahora, lo están buscando por un lado, por
otro lado, pero no saben dónde está. Pero noso-
tros sí sabemos dónde está Dios, dónde está el
Espíritu de vida, dónde está la Columna de
fuego: Está con nosotros los latinoamericanos
y caribeños, dándonos Su Palabra, el
Mensaje de vida que corresponde a nuestro
tiempo.
``EL ESPIRITU DE VIDA EN LA AME-
RICA LATINA Y EL CARIBE.''
Que Dios nos continúe bendiciendo a todos,
que Dios nos guarde y que continúe el Espíritu
de vida con nosotros, y que pronto nos transfor-
me conforme a Sus promesas; porque el Espíritu
de vida está en la América Latina y el Caribe
con los latinoamericanos y caribeños.
Dios nos continúe bendiciendo, Dios nos
guarde, nos dirija, nos guíe, y que pronto todos
 EL ESPIRITU DE VIDA 57

entremos a la eternidad con cuerpos eternos.

Pasen todos muy buenas noches, y con
nosotros Miguel Bermúdez Marín.
Muchas gracias por vuestra amable atención.
``EL ESPIRITU DE VIDA.''
 Muy buenas noches a todos los aquí
presentes, y a cada uno de ustedes a través de la
línea telefónica en La Florida, en Loprado, en
EL QUE ES DE DIOS Lota, en Chiguayante, en Venezuela, y en los
diferentes lugares que a través de la línea
telefónica están escuchando esta actividad.
Por William Soto Santiago Quiero leer una Escritura y se encuentra en
30 de enero de 1992 San Juan capítulo 8, verso 47, y dice: ``El que
Santiago de Chile, Chile es de Dios, las palabras de Dios oye.''
Y a aquellos que no querían escuchar a
Jesús, les dijo: ``por esto no las oís vosotros,
porque no sois de Dios.''
Ahora, los que estaban escuchando a Jesús
de buena gana, con deseos de escuchar Su
Palabra y aprender, estaban escuchando porque
eran de Dios, porque ``mis ovejas oyen mi voz
y me siguen'', dijo el Señor.
``EL QUE ES DE DIOS.'' Toda persona
dice que es de Dios, pero el Señor Jesucristo
hizo la diferencia entre el que es de Dios y el
 EL QUE ES DE DIOS 63
que no es de Dios. El dijo: ``el que es de Dios,
la palabra de Dios oye'', escucha la Palabra, el
Mensaje correspondiente para su tiempo.
Ese Mensaje de Dios viene para esas perso-
nas, es Dios llamando a Sus ovejas por su
nombre; por lo tanto todo hijo de Dios responde
a la Voz de Dios para la Edad y dispensación en
que vive; porque fuera de esa Palabra no hay
vida para los hijos de Dios.
Jesús dijo: ``mis palabras son espíritu y son
vida, y el que oye mi palabra tiene vida eterna.''
El también dijo: ``el que guarda mi palabra,
nunca verá muerte.''
Vean ustedes la forma de evitar la muerte:
escuchando y guardando la Palabra de Dios.
Ahora, nos preguntamos para nuestro
tiempo: ¿Y cómo podemos hacer para guardar
la Palabra del Señor y no ver muerte? Porque El
dice: ``el que guarda mi palabra nunca verá
muerte''
Ahora, aquí en Apocalipsis capítulo 1, verso
3, está la Palabra del Señor Jesucristo enviada
por medio de Su Angel. Dice Apocalipsis capí-
tulo 1, verso 3: ``Bienaventurado el que lee, y
los que oyen las palabras de esta profecía, y
guardan las cosas en ella escritas.''
¿Por qué? Porque esta es la Palabra de Dios,
64 WILLIAM SOTO SANTIAGO
la Palabra del Señor Jesucristo para ser dada a
todos los hijos de Dios, y que la puedan leer y la
puedan escuchar; ``porque el que guarda mi
palabra, nunca verá muerte'', dice el Señor.
Y si hay una vida eterna, tiene que venir por
medio de Su Palabra. La vida eterna está en la
Palabra, y el que guarda esa Palabra de vida
eterna, nunca verá muerte.
Pero alguna persona puede pensar: ``pero
nosotros podemos ver a través de la historia que
los apóstoles del Señor, los discípulos del
Señor, recibieron al Señor, guardaron Su
Palabra, y se murieron.'' No están muertos. Lo
único que murió fue el cuerpo; ellos están vivos
en el Paraíso esperando la Resurrección de
todos los santos en Cristo que partieron en el
pasado y que guardaron la Palabra de Dios;
porque ellos tienen la promesa de nunca ver
muerte.
Por esa causa ellos se levantarán en cuerpos
incorruptibles, en cuerpos eternos, y vivirán por
toda la eternidad. Y nosotros los que vivimos en
el fin del tiempo, que estamos guardando la
Palabra del Señor Jesucristo, que estamos guar-
dando el Mensaje final del Señor Jesucristo, la
gran Voz de trompeta, esa trompeta final, la
Voz de Cristo en el fin del tiempo, tenemos
EL QUE ES DE DIOS 65
también la misma promesa.
Si estamos vivos en el momento de la Resu-
rrección de los muertos en Cristo, entonces
nosotros al verlos a ellos seremos
transformados; porque tenemos la promesa de
no ver muerte.
Y cuando se da la promesa de no ver muer-
te, eso nos muestra que entonces tenemos vida
eterna. ``El que oye mi palabra no verá muerte;
porque mis palabras son espíritu y son vida.''
Así que la promesa de vida eterna está en la
Palabra. Por eso cuando la Palabra se hizo carne
y habitó entre nosotros, y fue conocido por el
nombre de Jesús de Nazaret, El podía decir: ``el
que oye mi palabra, no verá muerte, sino que
pasó de muerte a vida.''
El podía decir también: ``yo soy el camino,
la verdad y la vida, y nadie viene al Padre, sino
por mí.'' Y El es la Palabra que se hizo carne;
por lo tanto la única forma para llegar al Padre
celestial es por medio de la Palabra. Por lo tanto
toda persona, todo hijo de Dios, en cada Edad y
dispensación en que viva, si es un hijo de Dios,
escuchará la Palabra de Dios para ese tiempo.
No es decir: ``yo creo el Mensaje de Noé.''
Eso está bueno, pero ya eso es historia. Usted
está creyendo la historia de algo del pasado;
 66 WILLIAM SOTO SANTIAGO
pero usted tiene que creer en la Palabra en
tiempo presente. Y cuando se cree en la Palabra
en tiempo presente, esa Palabra producirá todo
lo que está prometido para ese tiempo presente.
Así que el que es de Dios, la Palabra de
Dios oye.
Cuando vinieron a donde el Señor Jesucristo
y le dijeron: ``Mira, he aquí tu madre y tus
hermanos te están buscando.'' Y El estaba
predicando la Palabra.
Ahora, para el Señor Jesucristo, ¿qué era
más importante: ir a recibir a María, y a los
hijos de María y José, o estar predicando la
Palabra? El dijo: ``¿quién es mi madre, y quié-
nes son mis hermanos? Aquellos que oyen la
Palabra de Dios.''
Ahora, una cosa es que uno tenga hermanos
aquí en la Tierra, y hermanas; pero eso en
ningún momento quiere decir que ellos son
primogénitos de Dios, eso en ningún momento
quiere decir que todos sean hijos de Dios;
porque los que son de Dios, la Palabra de Dios
oyen; el que es de Dios, la Palabra de Dios oye.
Y los verdaderos hermanos... Ahora, cuando
digo los verdaderos hermanos, no estoy menos-
preciando en ningún momento el que nosotros
tengamos hermanos y hermanas acá; pero digo
EL QUE ES DE DIOS 67
los verdaderos hermanos, porque estoy
hablando de los hermanos de la vida eterna, de
los hermanos eternos. Son los que oyen la
Palabra de Dios; por lo tanto eso es mayor y
está a un nivel superior, celestial.
En cuanto a la familia acá, nuestros herma-
nos de acá de la Tierra, son nuestros hermanos
porque nacieron de nuestros padres terrenales;
pero nuestros verdaderos hermanos son los que
estaban con Dios antes de la fundación del
mundo, en donde nosotros estábamos también.
Por eso es que a través del Nuevo Testamen-
to, los creyentes en la Palabra de Dios para el
tiempo en que viven se llaman los unos a los
otros hermanos. Y esa es una hermandad mayor,
más alta que la del hogar terrenal, porque esa es
la del Hogar celestial, que está sobre el hogar
terrenal.
Así que el que oye la Palabra de Dios, ese es
el hijo de Dios, o esos son los hijos de Dios.
Para cada Edad o dispensación Dios ha
enviado un grupo de Sus hijos, y han escuchado
la Palabra de Dios. En unas Edades o dispensa-
ciones menos, en otras ocasiones más, pero
siempre ha enviado hijos Suyos a vivir en este
planeta Tierra.
Ahora, para el fin del tiempo también Dios
68 WILLIAM SOTO SANTIAGO
tiene un grupo de hijos Suyos, de primogénitos
escritos en el Libro de la Vida del Cordero. Y
los primogénitos son los principales en el Reino
de Dios, porque son los herederos a la Bendi-
ción de la Primogenitura, que cubre los cielos y
la Tierra
Es una bendición de arriba, del cielo, y
también de acá de la Tierra. Esa bendición
contiene una herencia tan grande, que toda
persona a través de la historia ha deseado ser un
hijo primogénito de Dios.
Ahora, los hijos primogénitos de Dios escu-
chan el Mensaje con la Bendición de la Primo-
genitura. Vean ustedes, ¿qué Mensaje escuchó
Jacob de parte de Dios a través de Isaac? el
Mensaje de la Bendición de la Primogenitura.
¿Qué Mensaje escuchó Esaú? Otro Mensaje,
pero no pudo escuchar el Mensaje de Bendición
de la Primogenitura. Cuando vino, ya era dema-
siado tarde, ya había pasado ese Mensaje y lo
había escuchado Jacob.
Jacob en esa Palabra que había escuchado y
había recibido, y la había creído y la había
entendido, ahí tenía la Bendición de la Primoge-
nitura; pero tenía que pasar por diferentes eta-
pas, por diferentes procesos. Y esa Palabra de
Bendición de la Primogenitura tenía que nacer,
 EL QUE ES DE DIOS 69
crecer, y luego llevar su fruto.
Si Jacob no escucha esa Bendición de la
Primogenitura, y la escucha Esaú, ¿qué hubiera
sucedido? Todas las Bendiciones de la Primoge-
nitura hubieran venido a través de Esaú, y no a
través de Jacob.
Por lo tanto, el Mesías, el Cristo, hubiera
venido en medio de la descendencia de Esaú, y
no de la de Israel, no de la de Jacob, sino de la
de Esaú. Y en vez de Jesús de Nazaret ser de
allá de la tierra de Israel, aparecer en la tierra de
Israel, hubiera aparecido en la tierra de Esaú,
que es la tierra de Edom.
Así que vean ustedes todo lo que contiene
un Mensaje sencillo, pero que contiene la
semilla de un programa divino de Primogenitura
para una persona y toda la descendencia de esa
persona.
Así que miren, el arca del pacto no hubiera
sido dada al pueblo de Israel, sino al pueblo de
Esaú; y entonces el pacto de Dios hubiera sido
con Edom, que son la descendencia de Esaú.
Así que todo el programa divino de la Ben-
dición de la Primogenitura para un pueblo,
como nación, hubiera caído sobre la
descendencia de Esaú, y no sobre la
descendencia de Israel.
70 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Y esa bendición es tan grande que todavía
en el Milenio y en la eternidad estará dando
grandes beneficios para el pueblo hebreo.
Si Esaú hubiera escuchado esa bendición y
no Israel, y no Jacob, el Trono del Señor Jesu-
cristo durante el Reino milenial tenía que ser
establecido en medio de la descendencia de
Esaú, allá en Edom. Y la capital hubiera sido
allí, en medio de la descendencia de Esaú; y
desde allí el glorioso Reino milenial se llevaría
a cabo.
Pero no fue así. La fe y la agilidad de un
hombre, y la ayuda de su madre, trajo un resul-
tado positivo para el pueblo de Israel; y también
la elección o predestinación divina, pues Dios
dice antes de nacer Jacob y Esaú: ``a Jacob amé
y a Esaú aborrecí.''
Ahora, podemos ver que para los amados de
Dios y para los que aman a Dios, todas las cosas
obran a bien. Y en todo el programa divino
podemos ver que los que son de Dios lo ven y lo
agarran, y ahí está la bendición divina para esas
personas, no solamente para el tiempo en que
están viviendo aquí en la Tierra en el cuerpo
terreno, sino para el Milenio y para toda la
eternidad.
No hay que esperar al milenio y a la eterni-
EL QUE ES DE DIOS 71
dad para recibir las bendiciones allá. Uno tiene
que recibir esas bendiciones acá, en el Mensaje
que contiene esas bendiciones.
Y cuando uno agarra ese Mensaje, esa
Palabra de bendición, ahí uno tiene el futuro
glorioso del glorioso Reino milenial con todas
las bendiciones que estén allí, y tiene toda la
eternidad con todas las bendiciones que estarán
allá.
No es que cuando estemos allá vamos a
luchar allá para obtener las bendiciones que
hayan allá. No. Acá es que luchamos, porque
estamos en estos cuerpos mortales, temporales,
y acá es que tenemos esa lucha.
Acá una persona recibe la Palabra y luego
vienen algunas personas, y desgraciadamente
algunas veces en su propia familia terrenal, y
comienzan a desanimar a esa persona; pero esa
persona tiene que agarrarse bien de esa Palabra,
porque ahí está el futuro de esa persona. Y no se
puede dejar llevar por las personas que lo desa-
niman, porque después ellos no le van a ayudar
en nada para recibir de nuevo esas bendiciones,
porque ellos no tienen ningún poder para darle a
usted nada. Solamente Dios por Su Palabra es
que tiene ese poder para darle en forma de
Palabra todas las bendiciones, para que luego se
 72 WILLIAM SOTO SANTIAGO
vayan materializando cada una en su debido
momento.
Así que no podemos dejar que otras
personas nos desanimen, porque caeríamos en
alguno de los tipos de personas que oyen la
Palabra y no producen fruto. Son cuatro tipos de
tierra: unos son representados junto al camino,
otros son representados en pedregales, otros son
representados entre espinos, y otros son
representados como la buena tierra.
Ahora, vean ustedes, los únicos en los cuales
la bendición de toda la Palabra es manifestada
es en la buena tierra, que son los que oyen la
Palabra de Dios y la entienden. Los demás
escucharon la Palabra, pero no hubo raíces, no
estuvo bien arraigada esa Palabra. Otros la
recibieron con alegría, con gozo, pero cuando
vino la aflicción, la prueba, la persecución, por
causa de esa Palabra, se fueron.
¿Por qué? Porque esos escucharon, se
alegraron mucho, pero no entendieron esa
Palabra; por lo tanto no supieron apreciar esa
Palabra, no pudieron entender lo grande que era
esa Palabra, no pudieron comprender que esa
Palabra era la semilla del futuro para esa
persona.
Y menospreciaron esa Palabra; algunos por
EL QUE ES DE DIOS 73
miedo, o por no pasar vergüenzas, para que no
se mofaran de ellos. Otros por los bienes mate-
riales, pues estaban muy ocupados (estos son el
terreno que está lleno de mala hierba y espinos,
que son los afanes de este mundo, los afanes de
las riquezas); por lo tanto las cosas terrenales les
estorbaron, porque le dieron más importancia a
lo terrenal, a lo temporal, que a lo eterno; por lo
tanto perdieron la bendición o la oportunidad
que tuvieron.
Pero la buena tierra, que son los hijos del
Reino, que son los escogidos, son personas que
oyen la Palabra de Dios y la entienden; y luego
esa Palabra nace, crece, echa raíces; crece para
abajo y para arriba: para abajo echando raíces, y
para arriba, y luego lleva el fruto: unos a treinta,
a sesenta, y a ciento por uno.
Ahora, es necesario escuchar la Palabra que
corresponde para el tiempo en que uno vive.
Otra Palabra no funciona para el tiempo en que
uno vive, sino la que corresponde para el tiempo
en el cual Dios envió a esa persona; porque esa
Palabra va a producir de acuerdo a lo que Dios
tiene en Su programa para ese tiempo.
Así que la Palabra que corresponde para
nuestro tiempo, conforme a la promesa divina,
producirá el recogimiento de los escogidos;
74 WILLIAM SOTO SANTIAGO
porque dice: ``enviará sus ángeles con gran voz
de trompeta, y juntarán a sus escogidos.''
Ese Mensaje de gran Voz de trompeta es el
Evangelio del Reino, el Mensaje de la Dispensa-
ción del Reino, el Mensaje de la Edad de la
Piedra Angular, una Edad eterna; por lo tanto
tiene que producir un Mensaje para vida eterna,
tiene que producir un Mensaje para que los
muertos en Cristo puedan ser resucitados, y los
que estamos vivos podamos ser transformados.
Ese Mensaje tiene que ser y tener la semilla
para la transformación nuestra y para la resu-
rrección de los que murieron en Cristo; porque
Jesús dijo: ``todos los muertos escucharán la
voz del hijo de Dios, y resucitarán, se
levantarán.''
Ese Mensaje tiene que tener esa semilla.
Ellos en el Paraíso estarían escuchando ese
Mensaje, el cual también nosotros estaríamos
escuchando acá. Ellos para regresar a vida, pero
con vida eterna, y nosotros para regresar a la
vida eterna. Y luego nunca más habrá muerte
entre los primogénitos de Dios.
Todas esas bendiciones las contiene el
Mensaje final del Señor Jesucristo enviado por
medio de Su Angel.
Por esa causa en Apocalipsis capítulo 21, El
 EL QUE ES DE DIOS 75
hizo la promesa: ``Al que tuviere sed, yo le daré
gratuitamente de la fuente del agua de la vida.''
y ``El que venciere heredará todas las cosas.''
Y en el verso 17 del capítulo 22, dice: ``Y el
Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye,
diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que
quiera tome del agua de la vida gratuitamente.''
Por eso el verso anterior dice: ``Yo Jesús he
enviado mi ángel para dar testimonio de estas
cosas en las iglesias.''
El Angel del Señor Jesucristo es enviado
con el Mensaje final del Señor Jesucristo dando
testimonio de estas cosas, para que el que tenga
sed, venga y tome del agua de la vida gratuita-
mente, venga y tome la Palabra, venga y tome
ese Mensaje de bendición, para que así viva
eternamente. Y ``el que es de Dios, la palabra
de Dios oye.''
El Mensaje es proclamado, y al ser procla-
mado o estar siendo proclamado, gradualmente
vendrán los que son de Dios.
No se puede decir: ``en tal lugar o tales
personas no son de Dios, o no hay hijos de Dios
allá en tal lugar o cual lugar, o tal familia'', sino
hay que darle la Palabra; y frente a la Palabra
ellos se van a identificar o como hijos de Dios o
como que no son hijos de Dios.
76 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Y primeramente se identifican los
primogénitos, y luego más adelante el resto de
los hijos de Dios.
Así que estamos para dar la Palabra, el
Mensaje de la trompeta final o gran Voz de
trompeta, para que se reproduzca esa Palabra en
lo que dice, se reproduzca en una manifestación
gloriosa de todo lo que está prometido.
Estando consientes de que el que es de Dios,
la Palabra de Dios escucha, oye, entonces no
hay otra cosa para hacer sino darle a la gente, a
los pueblos, a las naciones, a todas las personas,
la Palabra de Dios; y cada uno va a identificarse
de acuerdo a lo que es.
Yo estoy muy contento y muy agradecido a
Dios, porque al darle la Palabra a los latinoame-
ricanos y caribeños, han estado respondiendo a
esa Palabra con ¡Amén! ¡así es! ¡esto es lo que
yo estaba esperando! Y eso está identificando a
la América Latina y al Caribe como portadores
o portadoras de los últimos hijos de Dios que
viven en este planeta Tierra, como los portado-
res de los escogidos de Dios para el fin del
mundo.
Y por cuanto hay muchos hijos de Dios
primogénitos, escogidos, en el Caribe y la
América Latina, también tiene que haber del
EL QUE ES DE DIOS 77
resto de los hijos de Dios que no sean primogé-
nitos, pero como en una casa: que no todos son
primogénitos, pero todos son hijos de esa fami-
lia.
Así que más son el resto de los hijos de
Dios, que los primogénitos. Los primogénitos
son un grupo pequeño, pero el resto de los
hijos de Dios es una multitud que nadie
puede contar, como aparece en Apocalipsis
capítulo 7 y Apocalipsis capítulo 15.
Así que donde estén los escogidos, los
primogénitos, por ahí también tiene que estar el
resto de los hijos de Dios. A menos que no pase
como en algunas familias que algunos de los
hijos se van fuera de la casa y fuera de la ciudad
y del país en donde está el núcleo de la familia,
buscando mejores empleos, un mejor nivel de
vida; pero no son muchos. La mayoría se queda
alrededor de los padres, después se casan, y casi
siempre se quedan alrededor por ahí en la
ciudad, y van a visitar a sus padres; porque no
se quieren alejar mucho de sus padres, porque el
amor de sus padres hacia ellos y el amor de
ellos hacia sus padres los mantienen ahí como
un imán, unidos lo más cerca posible. Y si así es
en lo natural, en lo espiritual también.
Así que la América Latina y el Caribe tiene
 78 WILLIAM SOTO SANTIAGO EL QUE ES DE DIOS 79

muchos hijos de Dios: primogénitos y de los Palabra de Dios oye.

otros que no son primogénitos. Que Dios nos continúe bendiciendo a todos,
Ahora, los que tienen la bendición más que Dios continúe dándonos Su Palabra, hablán-
grande son los primogénitos de Dios, los escogi- donos Su Palabra, porque nosotros continuare-
dos, los cuales serán transformados. Ellos son mos escuchando Su Voz, Su Palabra; porque el
los que tienen la promesa de la transformación que es de Dios, la Palabra de Dios oye.
para tener un cuerpo eterno y vivir por toda la Dios les bendiga, Dios les guarde. Muchas
eternidad, y ser Reyes y Sacerdotes en el Reino gracias por vuestra amable atención, y pasen
del Señor Jesucristo. todos muy buenas noches.
Los primogénitos de este tiempo final y los Con nosotros nuevamente Miguel Bermúdez
primogénitos de cada Edad del pasado tienen Marín.
esa bendición. Así que ellos recibieron la ``EL QUE ES DE DIOS.''
Palabra para el tiempo en que ellos vivieron, la
Palabra de la Bendición de la Primogenitura. Y
nosotros en nuestro tiempo la estamos
recibiendo: ese es el Mensaje de la trompeta
final, ese es el Mensaje de la gran Voz de
trompeta, ese es el Mensaje de la trompeta del
año del jubileo actualizado, esa es la Voz como
de trompeta de Apocalipsis capítulo 1, verso 10,
y capítulo 4, verso 1, esa es la Voz del Señor
Jesucristo por medio de Su Angel en el fin del
tiempo, llamando y juntando a todos los escogi-
dos para que reciban la Bendición de la
Primogenitura.
Y estamos escuchando esa Palabra, ese
Mensaje, ¿por qué? porque el que es de Dios, la
LA RESTAURACION
DEL REINO
Por William Soto Santiago
31 de enero de 1992
Valparaíso, Chile

Muy buenas noches amados amigos y
hermanos aquí presentes y a cada uno de ustedes
en los diferentes lugares de esta nación y tam-
bién del Caribe, y de toda la América Latina.
Dios les bendiga a cada uno de ustedes allá en
Puerto Rico y a ustedes allá en diferentes luga-
res de Norteamérica y el Canadá.
Que Dios en esta noche nos permita com-
prender Su Palabra, y así cada uno de nosotros
recibamos las promesas divinas por la fe.
En el libro de Los Hechos, en el capítulo 1,
verso 3 en adelante, cuando el Señor Jesucristo
estuvo dando las últimas instrucciones a Sus
discípulos, dice de la siguiente manera:
``A quienes también, después de haber
padecido, se presentó vivo con muchas pruebas
indubitables, apareciéndoseles durante
cuarenta días y hablándoles acerca del reino de
LA RESTAURACION DEL REINO 85
Dios.
Y estando juntos, les mandó que no se
fueran de Jerusalén, sino que esperasen la
promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de
mí.
Porque Juan ciertamente bautizó con agua,
mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu
Santo dentro de no muchos días.
Entonces los que se habían reunido le pre-
guntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el
reino a Israel en este tiempo?
Y les dijo: No os toca a vosotros conocer los
tiempos y las sazones, que el Padre puso en su
sola potestad;
pero recibiréis poder, cuando haya venido
sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis
testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Sama-
ria, y hasta lo último de la tierra.
Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo
ellos, fue alzado, y le recibió una nube que lo
ocultó de sus ojos.''
Nos llama la atención en esta noche la
pregunta de Sus discípulos: ``Señor, ¿restaura-
rás el reino a Israel en este tiempo?''
``LA RESTAURACION DEL REINO.''
El pueblo hebreo ha estado esperando la
restauración del Reino, pues el pueblo hebreo
86 WILLIAM SOTO SANTIAGO
espera esa restauración del Reino de Dios, el
cual a través del rey y profeta David, en una
ocasión estuvo manifestado en medio del pueblo
hebreo, y el pueblo hebreo ha estado esperando
la restauración del Trono de David; y el pueblo
hebreo espera que Cristo, el Mesías, se siente en
el Trono de David y reine sobre Israel y sobre
todas las naciones.
Ahora, el Arcángel le dijo en una ocasión a
José y también a María que el niño que ella ten-
dría, recibiría el Trono de David, se sentaría en
ese Trono.
El Señor Jesucristo enseñando a Sus
discípulos a orar, les dijo: Ustedes oren así:
``Venga Tu Reino. Y hágase Tu voluntad en la
Tierra así como en el cielo.'' (San Mateo 6:10).
Ahora, la promesa del Trono de David
corresponde entonces a Cristo, porque El es el
heredero al Trono de David.
Vean ustedes, cómo el Arcángel Gabriel le
dijo a María (San Lucas 1:31): ``Y ahora,
concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y
llamarás su nombre JESÚS.
Este será grande, y será llamado Hijo del
Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de
David su Padre;
y reinará sobre la casa de Jacob para
 LA RESTAURACION DEL REINO 87
siempre, y su reino no tendrá fin.''
Ahora, aquí podemos ver esta promesa, que
es la promesa del Trono de David, a la cual es
heredero el Señor Jesucristo; por esa causa el
pueblo hebreo ha estado esperando la Venida
del Mesías, la Venida de Cristo; la cual pasaron
por alto en Su Primera Venida.
Por esa causa el Trono de David ha perma-
necido vacío, y por esa razón el Reino de Dios
no ha sido establecido en medio del pueblo
hebreo todavía; pero el pueblo hebreo tiene la
promesa de que el Trono de David será ocupado
por el Mesías, por Cristo; y entonces allí estará
el Reino de Dios sobre la Tierra, conforme a la
promesa divina.
Ahora, el profeta Daniel vio representada la
Venida del Reino en el sueño que tuvo Nabuco-
donosor, el cual Daniel le interpretó.
Vean ustedes aquí en el tiempo de los pies
de hierro y de barro cocido de esa imagen o
estatua que vio Nabucodonosor.
En el tiempo de los pies de hierro y de barro
cocido, que representa el reino del anticristo, de
la bestia, en el fin del tiempo, es también el
tiempo para la Venida de la Piedra no cortada
de mano humana, que es la Segunda Venida de
Cristo, porque El es la Piedra angular, es la
88 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Piedra del ángulo, es la Piedra de tropiezo. El es
esa Piedra que vio el rey Nabucodonosor salir
de la montaña, y que el profeta Daniel le
interpretó. El profeta Daniel cita este sueño,
dice (Daniel 2:34-35):
``Estabas mirando, hasta que una piedra fue
cortada, no con mano, e hirió a la imagen en
los pies de hierro y de barro cocido, y los
desmenuzó.
Entonces fueron desmenuzados también el
hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el
oro, y fueron como tamo de las eras del verano,
y se los llevó el viento sin que de ellos quedara
rastro alguno. Mas la piedra que hirió a la
imagen fue hecha un gran monte que llenó toda
la tierra.''
Ahora, esta es la forma en que el Reino de
Dios viene a la Tierra. Vean ustedes la interpre-
tación que le dio el profeta Daniel al rey Nabu-
codonosor. En el capítulo 2, verso 44 al 45: ``Y
en los días de estos reyes.'' ¿En los días de
cuáles? En los días de los diez reyes, estos diez
dedos, los cuales le dan su poder y autoridad a
la bestia.
``Y en los días de estos reyes el Dios del
cielo levantará un reino que no será jamás
destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo;
LA RESTAURACION DEL REINO 89
desmenuzará y consumirá a todos estos reinos.''
Pero vean cómo es que éste Reino que Dios
levantará, desmenuzará y consumirá a todos
estos reinos, cuando está como la Piedra no
cortada de mano.
Ahora, vean la sentencia de juicio divino
que tienen estos reyes, estos reinos, que se
unirán a la bestia y le darán su poder y su
autoridad. Vean ustedes la suerte que correrán
estos reinos, estos reyes con estas naciones, las
cuales son gobernadas por estos diez reyes; y
vean ustedes también, éstos son los diez dedos
de hierro y de barro cocido, los cuales
componen el reino de la bestia.
Y esa misma suerte que correrá el reino de
los gentiles en su etapa de los pies de hierro y
de barro cocido, también será la suerte que
correrá el resto de esa estatua o imagen. Dice
que desmenuzará los pies de hierro y de barro
cocido, que es el reino integrado por la bestia y
por esos reyes; pero también dice que esa Piedra
desmenuzó los pies de hierro y de barro cocido.
Vean ustedes, dice: ``Estabas mirando,
hasta que una piedra fue cortada, no con mano,
e hirió a la imagen en sus pies de hierro y de
barro cocido, y los desmenuzó.
Entonces fueron desmenuzados también el
 90 WILLIAM SOTO SANTIAGO
hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el
oro.'' Todos esos imperios pertenecientes al
reino de los gentiles, en el tiempo de la Venida
de esa Piedra no cortada de mano, recibirán el
juicio divino.
Así que todas esas naciones que en algún
tiempo formaron parte de esa estatua o imagen,
en el fin del tiempo el juicio divino caerá sobre
ellos en toda su plenitud. Dice: ``...y fueron
como tamo de las eras del verano, y se los llevó
el viento sin que de ellos quedara rastro alguno.
Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha
un gran monte que llenó toda la tierra.''
Vean ustedes, así viene el Reino de Dios. En
la Venida de esa Piedra no cortada de mano
viene el Reino de Dios. En El está el Reino de
Dios. En Su Primera Venida, cuando le pregun-
taron a Jesús cuándo vendría el Reino de Dios,
El les dijo: ``el reino de Dios entre vosotros
está.'' (San Lucas 17:21). ¿Por qué? Porque allí
estaba la Piedra no cortada de mano, allí estaba
la Piedra angular, allí estaba la Piedra que los
edificadores estaban desechando, era la Venida
de Cristo.
Y la Primera Venida de Cristo es la Venida
de la Piedra, pero en esa ocasión (en Su Primera
Venida) vino en la etapa de las piernas de
LA RESTAURACION DEL REINO 91
hierro, que fue el imperio romano; pero la
ocasión en donde esa Piedra hiere a esa imagen,
al reino de los gentiles, es en la etapa de los pies
de hierro y de barro cocido.
Pero en la etapa en que se cumplió la Prime-
ra Venida de Cristo, esa imagen (esas piernas de
hierro) hirió a Cristo en Su Primera Venida, en
la Cruz del Calvario; porque fue el imperio
romano quien crucificó al Señor Jesucristo, a
petición del pueblo hebreo.
Y por cuanto la sangre de los justos y de los
santos será demandada de manos de esa estatua,
de esa imagen, de mano del reino de los genti-
les, estando en los pies de hierro y de barro
cocido la imagen que representa el reino de los
gentiles, dará cuenta a Dios por la muerte del
Señor Jesucristo, dará cuenta a Dios por la
muerte de los santos que el reino gentil mató
allá en el Antiguo Testamento y también los que
mató durante el Nuevo Testamento.
Así que la sangre de todos los santos será
demandada en el fin del tiempo del reino de la
bestia, del imperio de la bestia, del anticristo,
que estará gobernando en la Tierra.
Ahora, en este tiempo final es que se abre la
revelación divina para comprender todas estas
cosas, porque es el tiempo en donde se ha de
92 WILLIAM SOTO SANTIAGO
establecer el reino de los gentiles en los pies de
hierro y de barro cocido, y le darán su autoridad
y su poder al anticristo, a la bestia; pero la
Venida de Cristo traerá bendiciones para todos
los hijos de Dios, y marcará el fin de la esclavi-
tud de los hijos de Dios, marcará el fin de la
estadía en cuerpos terrenales de los hijos de
Dios; porque en el fin del tiempo todos los
escogidos serán transformados (esa es la reden-
ción del cuerpo), y marcará el fin del reino de
los gentiles también, para que el reino de los
gentiles le dé paso al Reino de Dios.
Por esa causa podemos ver en Apocalipsis
capítulo 17, que dice así: ``La bestia que era, y
no es, es también el octavo; y es de entre los
siete, y va a la perdición.
Y los diez cuernos que has visto, son diez
reyes, que aún no han recibido reino; pero por
una hora recibirán autoridad como reyes junta-
mente con la bestia.
Estos tienen un mismo propósito, y entrega-
rán su poder y su autoridad a la bestia.
Pelearán contra el Cordero, y el Cordero
los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey
de reyes: y los que están con él son llamados y
elegidos y fieles.''
Aquí tenemos lo que vio Daniel: la Venida
 LA RESTAURACION DEL REINO 93
de la Piedra no cortada de manos. Y podemos
ver el reino de los gentiles, en la etapa de los
pies de hierro y de barro cocido, que hará guerra
en contra de Cristo, en contra de la Venida de
esa Piedra no cortada con mano.
Aquí también en Apocalipsis 19, verso 19,
dice: ``Y vi a la bestia, a los reyes de la tierra y
a sus ejércitos, reunidos para guerrear contra el
que montaba el caballo, y contra su ejército.''
Contra el que montaba el caballo blanco de
Apocalipsis capítulo 19, que es la Venida de
Cristo.
Ahora, la bestia recibe su derrota al hacerle
guerra a Cristo en Su Venida. Dice: ``Y la bestia
fue apresada, y con ella el falso profeta que
había hecho delante de ella las señales con las
cuales había engañado a los que recibieron la
marca de la bestia, y habían adorado su ima-
gen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de
un lago de fuego que arde con azufre.
Y los demás fueron muertos con la espada
que salía de la boca del que montaba el
caballo, y todas las aves se saciaron de las
carnes de ellos.''
Aquí tenemos en Apocalipsis capítulo 19,
verso 19 al 21, la victoria de Cristo en Su
Segunda Venida. El obtiene la victoria contra la
94 WILLIAM SOTO SANTIAGO
bestia y contra la imagen de la bestia, y contra
los diez reyes que le dan su poder y su autoridad
a la bestia. Todo esto corresponde al fin del
tiempo; y luego el glorioso Reino milenial será
establecido sobre la Tierra. Y ese será literal-
mente el glorioso Reino de Dios en la Tierra,
gobernando sobre el pueblo hebreo y sobre
todas las naciones, pues todas las naciones
estarán sujetas al Reino de Cristo.
Por esa causa en Apocalipsis 11:15 dice:
``El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo
grandes voces en el cielo, que decían: Los
reinos del mundo han venido a ser de nuestro
Señor y de Su Cristo; y él reinará por los siglos
de los siglos.''
Y también en el capítulo 12 de Apocalipsis,
y verso 10, dice: ``Entonces oí una gran voz en
el cielo, que decía: Ahora ha venido la salva-
ción, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la
autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado
fuera el acusador de nuestros hermanos, el que
los acusaba delante de nuestro Dios día y
noche.''
Así que podemos ver que los reinos de este
mundo pasarán a ser de nuestro Dios, pasarán a
ser los reinos de Cristo. Y El reinará no sola-
mente sobre el pueblo hebreo y desde la tierra
LA RESTAURACION DEL REINO 95
de Israel, sino que reinará sobre todas las nacio-
nes. Dice: ``y él las regirá con vara de hierro.''
Por lo tanto el glorioso Reino del Señor
Jesucristo será un Reino a nivel mundial, pero
que Su Trono estará establecido en la tierra de
Israel; ahí estarán las oficinas administrativas,
ahí estará el Gobierno de Cristo; y desde ahí se
extenderá (ese Gobierno, ese Reino) sobre todas
las naciones; y ahí estaremos también nosotros,
porque tenemos una promesa de parte de Cristo,
la cual encontramos en el capítulo 1 de Apoca-
lipsis, verso 5 y 6, dice:
``Y de Jesucristo el testigo fiel, el
primogénito de los muertos, y el soberano de
todos los reyes de la tierra. Al que nos amó, y
nos lavó de nuestros pecados con su sangre,
y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su
Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos
de los siglos. Amén.'' Nos hizo Reyes y Sacer-
dotes.
Y aquí en el capítulo 5, versos 9 y 10, dice:
``y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno
eres de tomar el libro y de abrir sus sellos;
porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos
has redimido para Dios, de todo linaje y lengua
y pueblo y nación;
y nos has hecho para nuestro Dios reyes y
 96 WILLIAM SOTO SANTIAGO
sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.''
Y en Apocalipsis capítulo 20, verso 4 al 6,
dice: ``Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los
que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas
de los decapitados por causa del testimonio de
Jesús y de la palabra de Dios, los que no ha-
bían adorado a la bestia ni a su imagen, y que
no recibieron la marca en sus frentes ni en sus
manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil
años.''
Este es el Reino de Cristo, de mil años sobre
la Tierra, el cual pronto comenzará en la Tierra.
Sigue diciendo: ``Pero los otros muertos no
volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil
años. Esta es la primera resurrección.
Bienaventurado y santo el que tiene parte en
la primera resurrección; la segunda muerte no
tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacer-
dotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil
años.''
Así que cada uno de los escogidos tiene la
promesa de estar en ese Reino, y ser Reyes y
Sacerdotes con Cristo, para que ese Reino,
desde la tierra de Israel, se extienda sobre todo
el planeta Tierra.
Por esa causa el Señor Jesucristo podía
decir: ``los mansos heredarán la tierra, recibirán
LA RESTAURACION DEL REINO 97
la tierra por heredad.'' También El dijo: ``por-
que de los tales es el reino de los cielos.'' Y
también dijo que los pobres recibirían el reino.
Así que tenemos la promesa de estar en ese
glorioso Reino de Cristo, el cual será
establecido plenamente aquí en la Tierra; pero
que viene en la forma de esa Piedrecita no
cortada de mano, que es la Segunda Venida de
Cristo, como León de la tribu de Judá, como
Rey de reyes y Señor de señores; porque El es el
heredero al Trono de David.
Por esa causa El en Apocalipsis capítulo 22,
verso 16, dice: ``Yo soy la raíz y el linaje de
David.'' También en Apocalipsis capítulo 2,
verso 28, dice que El es la Estrella resplande-
ciente de la mañana.
Ahora, para los escogidos que serán Reyes y
Sacerdotes con Cristo en ese glorioso Reino,
veamos lo que dice Apocalipsis capítulo 2,
verso 26 en adelante: ``Al que venciere y
guardare mis obras hasta el fin, yo le daré
autoridad sobre las naciones (los vencedores
recibirán autoridad sobre todas las naciones
gentiles), y las regirá con vara de hierro, y
serán quebrantadas como vaso de alfarero;
como yo también la he recibido de mi Padre...''
Vean ustedes, al que venciere El le dará
98 WILLIAM SOTO SANTIAGO
autoridad sobre las naciones, y las regirá con
vara de hierro, y serán quebrantadas como vaso
de alfarero.
Esto nos habla del juicio, de la gran tribula-
ción que vendrá sobre todas las naciones, sobre
los gentiles, sobre estas naciones que han sido
parte de esta imagen desde la cabeza hasta los
pies, y desde los pies hasta la cabeza.
Ahora, sobre la Tierra estará en el fin del
tiempo uno que obtendrá la victoria, porque
ya los demás han partido, pero cuando regre-
sen los mensajeros con los escogidos de las
Edades pasadas, también estarán en la
Tierra por cierta cantidad de tiempo,
juntamente con los que estamos vivos que
seremos transformados; y ya con la
Resurrección de ellos en cuerpos inco-
rruptibles y la Transformación nuestra,
todos nosotros recibimos plena autoridad
como Reyes y como Sacerdotes de Dios.
Veamos también la promesa que hay en
Apocalipsis 3:21, que dice: ``Al que venciere, le
daré que se siente conmigo en mi trono (ese es
el Trono de David), así como yo he vencido, y
me he sentado con mi Padre en su trono.''
El se sentó en el Trono del Padre cuando
ascendió al cielo, en el Trono allá en el cielo,
 LA RESTAURACION DEL REINO 99
pero ahora el Trono de Cristo es ese Trono de
David que está en Israel esperando por la Veni-
da de Cristo, lo cual para nosotros no es la
Primera Venida, sino la Segunda Venida de
Cristo; pero para ellos, como no han entendido
la Primera Venida, están esperando la Primera
Venida de Cristo; porque ellos siempre han
estado esperando la Venida de Cristo como
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y
Señor de señores, para que se siente en el Trono
de David.
Y ellos no sabían que la Primera Venida
sería como Cordero de Dios para quitar el
pecado del mundo, pero ya pasó Su Primera
Venida y estamos en el fin del tiempo, el tiempo
para el cumplimiento pleno de la Segunda
Venida de Cristo como la Piedra no cortada de
mano humana, como Rey de reyes y Señor de
señores, para el establecimiento del Reino de
Dios.
Ahora, en el Monte de la Transfiguración el
Señor Jesucristo mostró la Venida del Reino y
el orden de la Venida del Reino de Dios.
Vean ustedes lo que El le había dicho a Sus
discípulos en San Mateo capítulo 16, verso 27
en adelante, hablándole a ellos de la Venida del
Hijo del Hombre:
100 WILLIAM SOTO SANTIAGO
``Porque el Hijo del Hombre vendrá en la
gloria de Su Padre con sus ángeles, y entonces
pagará a cada uno conforme a sus obras.
De cierto os digo que hay algunos de los
que están aquí, que no gustarán la muerte,
hasta que hayan visto al Hijo del Hombre
viniendo en su reino.
Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a
Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte
a un monte alto;
y se transfiguró delante de ellos, y resplan-
deció su rostro como el sol, y sus vestidos se
hicieron blancos como la luz.
Y he aquí les aparecieron Moisés y Elías,
hablando con él.''
Aquí tenemos nosotros en miniatura la
Venida del Reino de Dios, porque ahí tenemos a
Jesucristo transfigurado y tenemos a Moisés y a
Elías, que son los Angeles, el ministerio de Sus
Angeles que con gran Voz de trompeta juntarían
a los escogidos de Dios; por lo tanto aquí
tenemos en miniatura el orden completo de la
Venida del Reino de Dios, ahí tenemos la
Venida del Hijo del Hombre con Sus Angeles:
uno a cada lado. Moisés a un lado y Elías al otro
lado.
También el profeta Malaquías en el capítulo
LA RESTAURACION DEL REINO 101
4, y verso 2, dijo: ``A los que temen mi nombre,
nacerá el Sol de justicia (que es la Segunda
Venida de Cristo), y en sus alas traerá salva-
ción.'' Sus alas: el ministerio de Moisés y el
ministerio de Elías.
Así que vean ustedes todo lo que contiene la
Venida de esa Piedra no cortada de mano, que
es la Segunda Venida de Cristo con Sus Ange-
les, con el ministerio de Moisés y de Elías para
llamar y juntar a todos los escogidos.
Todo esto corresponde para este tiempo
final. Y como dijo Jesús en Su Primera Venida,
cuando le preguntaron: ``¿Cuándo vendrá el
reino de Dios?'' El dijo: ``el reino de Dios entre
vosotros está.'' ¿Por qué? Porque allí estaba la
Primera Venida de Cristo cumplida, allí estaba
la Piedra no cortada de mano; y en esa Piedra
no cortada de mano está todo el Reino de Dios.
Por eso el profeta Daniel hablando de esa
piedra no cortada de mano que hirió a la imagen
en los pies de hierro y de barro cocido, y los
desmenuzó, dice: ``Mas la piedra que hirió a la
imagen fue hecha un gran monte que llenó toda
la tierra.''
Ahora un monte representa un Reino; y esa
Piedra, que es la Segunda Venida de Cristo,
luego forma el glorioso Reino de Dios. Dice que
 102 WILLIAM SOTO SANTIAGO
creció y llenó toda la Tierra.
¿Por que? Porque la Segunda Venida de
Cristo como Rey de reyes y Señor de señores
crecerá y crecerá y llenará toda la Tierra. Y toda
la Tierra será llena del conocimiento de la
Segunda Venida de Cristo como León de la
tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de
señores. Y en aquel día, dice Dios: ``Todos me
conocerán...'' (Jeremías 31:34). ``En aquel día
Jehová será uno, y uno su nombre.'' (Zacarías
14:9).
Vemos en Habacuc 2:14 que la Tierra será
llena del conocimiento de Dios. La Tierra será
llena del conocimiento de la Segunda Venida de
Cristo, en Su obra de reclamo de todo lo que El
redimió con Su Sangre preciosa. Y los reinos de
este mundo vendrán a ser los reinos de Dios, los
reinos de Cristo, bajo el reinado de Cristo desde
Jerusalén, sentado en el Trono de David.
Así fue prometido: ``Al que venciere, le
daré que se siente conmigo en mi trono...''
(Apoc. 3:21). Ahí estará en ese Trono del Señor
el vencedor, el que obtendrá la victoria y regirá
con vara de hierro a las naciones; porque El lo
promete: ``Así como Yo he recibido de mi
Padre autoridad, Yo le daré autoridad sobre
todas las naciones.'' Y todos estaremos en ese
LA RESTAURACION DEL REINO 103
glorioso Reino milenial, todos los escogidos
tendrán el Reino de Dios, y estarán en el Reino
de Dios como reyes y sacerdotes.
Y para comenzar reinaremos con Cristo mil
años. ¿Y qué después? ¿Le quitarán su posición
de reyes y reinas a los escogidos? No. Es que
esos mil años serán el glorioso Reino milenial,
será la luna de miel de Cristo y Su Esposa, pero
durante la eternidad estaremos también como
reyes y sacerdotes en el glorioso Reino de Dios.
Ahora, vean ustedes que literalmente este
Reino estará sobre la Tierra, y serán mil años de
paz sobre la Tierra. Esto comenzará luego que
haya terminado la gran tribulación o apretura de
Jacob, la cual terminará con la destrucción del
reino de los gentiles; y los reinos de esta Tierra
pasarán a ser los reinos de Cristo. Así que
estamos muy cerca de ese glorioso Reino.
Y con la Venida de la Piedra no cortada de
mano, que es la Segunda Venida de Cristo, el
Reino de Dios llega a la Tierra, pero llega en la
forma de una Piedra no cortada de mano. Llega
el Reino de Dios en la Venida de Cristo como
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y
Señor de señores.
Y en el tiempo de la Venida de esa Piedra,
el Reino de Dios entre nosotros está, para llevar
104 WILLIAM SOTO SANTIAGO
a cabo toda la obra que tiene que llevar a cabo
como reclamador, como Rey de reyes y Señor
de señores y Juez de toda la Tierra.
Así que nosotros estamos viviendo en el fin
del siglo, el fin del tiempo de los gentiles, en
donde estaremos viendo con nuestros propios
ojos la obra de esa Piedra no cortada de mano,
estaremos viendo la obra de Cristo en Su Segun-
da Venida como Rey de reyes y Señor de seño-
res en la Venida de Cristo para el establecimien-
to del Reino de Cristo, en donde todos nosotros
tenemos una posición muy especial. La
posición más importante de ese Reino,
después de la posición de Cristo, es la
posición de cada uno de los escogidos.
De modo que vale la pena escuchar las Pala-
bras del Señor Jesucristo: ``Buscad primeramen-
te el reino de Dios y su justicia, y las demás
cosas serán añadidas.'' (San Mateo 6:33).
El Reino de Dios en el fin del tiempo viene
en miniatura, en la Venida de Cristo, y después
crece y crece hasta que se forma ese gran mon-
te, ese gran Reino sobre la Tierra; pero primero
viene como una piedrecita pequeña, lo cual para
muchas personas será tan insignificante que no
entenderán que el Reino de Dios entre nosotros
está.
 LA RESTAURACION DEL REINO 105 106 WILLIAM SOTO SANTIAGO

``El establecimiento del Reino de Cristo.'' luego estemos en ese glorioso Reino milenial, y
Dios nos continúe bendiciendo a todos, Dios por toda la eternidad en el Reino de Dios.
nos guarde, y que pronto sea establecido el Muchas gracias por vuestra amable atención,
Reino de Cristo sobre la Tierra; en donde que Dios siga bendiciéndonos a todos, y que
nosotros estaremos como reyes y sacerdotes pasen todos muy buenas noches. Con nosotros
reinando juntamente con Cristo. nuevamente Miguel Bermúdez Marín.
Y esperamos que a ese glorioso Reino de ``LA RESTAURACION DEL REINO.''
Cristo entre toda la América Latina y el Caribe.
Y que el progreso y las bendiciones que ha
estado buscando la América Latina y el Caribe,
las encuentren ahí: la prosperidad, la felicidad,
el amor divino, la comprensión entre los hom-
bres, esa confraternidad entre seres humanos.
Todas estas cosas hermosas las encuentren ahí
los latinoamericanos y caribeños; porque todo
eso estará en el glorioso Reino del Señor Jesu-
cristo; por eso se requiere el establecimiento del
Reino de Cristo.
Jesús dijo: ``Ustedes oren así: Padre nuestro
que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.
Venga tu Reino.'' Porque el Reino de Dios
vendría en el fin del tiempo para el estableci-
miento del Reino de Cristo.
Que Dios nos continúe bendiciendo con
todas las bendiciones del Reino de Cristo; y que
pronto nosotros que vivimos seamos
transformados y pasemos a la vida eterna, y
 Muy buenas noches amados amigos y
NUESTRO TRABAJO hermanos presentes; es para mí un privilegio
muy grande estar con ustedes aquí en esta
EN ocasión.
``NUESTRO TRABAJO EN EL REINO
EL REINO DE DIOS DE DIOS.''
Ese es el único trabajo que tiene promesas
Por William Soto Santiago de recompensa para vida eterna. Como hemos
escuchado que citó nuestro amado amigo
1 de febrero de 1992 Miguel Bermúdez Marín, que Habacuc, capítulo
Santiago de Chile, Chile 2, verso 13 al 14, dice: ``Los pueblos, pues,
trabajarán para el fuego, y las naciones se
fatigarán en vano.''
¿Por qué? Porque la labor que llevan a cabo
no es una labor que tiene promesas para vida
eterna, porque no es una labor hecha en el Reino
de Dios, no es una labor correspondiente para el
tiempo en que vivimos en el Reino de Dios, sino
que es una labor del reino de los gentiles, de esa
imagen que vio Nabucodonosor y que interpretó
 NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 111
Daniel.
Ahora, hay una obra, una labor, que tiene
recompensa para vida eterna, y esa es la obra o
trabajo que se lleva a cabo en el Reino de Dios,
en el tiempo en que uno está viviendo.
Para eso se requiere que la persona reconoz-
ca el tiempo que está viviendo: la Edad y dis-
pensación en que está viviendo, y el Mensaje y
mensajero del tiempo que le corresponde, y
trabajen unidos brazo a brazo en esa Edad y en
esa dispensación, porque ahí es donde el trabajo
no es en vano, sino que tiene recompensas de
vida eterna, porque ``vuestro trabajo en el
Señor (eso es en el Reino de Dios) no es en
vano.'' (I Co. 15:58). Pero la Escritura dice que
los pueblos trabajarán para el fuego, y las
naciones se fatigarán en vano.
Pero nosotros trabajamos, y aunque nos
fatiguemos, no es en vano, porque tenemos
promesas para vida eterna. Y los galardones que
El estará repartiendo darán testimonio de que el
trabajo que cada persona hizo en el Reino de
Dios, no fue en vano.
Y el que mucho hizo, mucho le será dado,
grande será el galardón que ha de recibir; y el
que trabajó poco, poco recibirá; y el que no hizo
nada, ¿cuál será su galardón? Del tamaño de su
112 WILLIAM SOTO SANTIAGO
labor será el tamaño del galardón.
Miren ustedes, el que tenía cinco talentos y
los multiplicó y tuvo diez, éste recibió una
bendición muy grande; pero el que tenía uno y
lo enterró y no hizo nada, ¿cuál fue el galardón
que recibió? Nada, y aún lo que tenía le fue
quitado y le fue dado al que tenía más; porque
al que más tiene, más le será dado; y el que no
tiene nada, porque no hizo nada, aún lo que
tiene, lo que Dios le había concedido, le será
quitado; y le será dada a otro esa bendición;
porque no fue un buen administrador de lo que
Dios le dio; porque Dios le ha dado a lo menos
un talento a cada persona, para hacer algo en el
Reino de Dios.
Por eso siempre les he dicho que Dios no
quiere vagos en Su obra. ¿A cuántos de los que
están aquí Dios no quiere?
Ahora, ¿a cuántos de los que están aquí Dios
quiere? ¡Amén! A todos nosotros, porque noso-
tros no somos vagos; porque nosotros estamos
trabajando y nuestro trabajo es en el Reino de
Dios, por lo tanto ese es un trabajo en el Señor,
en la obra del Señor Jesucristo.
Y como dijo el Señor Jesucristo: ``en los
negocios de mi Padre me conviene estar.'' Y a
nosotros en los negocios del Señor Jesucristo
NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 113
nos conviene estar.
Y estamos en los negocios del Señor Jesu-
cristo, en nuestra Edad, la Edad de la Piedra
Angular, y en nuestra dispensación, la
Dispensación del Reino, trabajando unidos
todos en la obra del Señor Jesucristo, en el
trabajo del Reino de Dios.
Así que todo lo que ustedes han estado
haciendo en el programa divino es un trabajo en
el Reino de Dios, que contará para cada uno de
ustedes para ese glorioso Reino milenial,
contará para cada uno de ustedes también para
la eternidad.
Por eso Dios ha prometido un tiempo en el
cual estará repartiendo los galardones a cada
uno de los escogidos. Y yo deseo que los que
reciban los galardones más grandes en esa
repartición, en ese juicio para repartir los
galardones, sean los escogidos de la Edad de la
Piedra Angular, de la Dispensación del Reino.
Yo estaré haciendo mi parte, y estaré brazo
a brazo con cada uno de ustedes en la labor que
corresponde para este tiempo.
Así que ustedes también estén brazo a
brazo en esta labor que corresponde para
nuestro tiempo, porque yo deseo, espero y
creo que los galardones más grandes nos los
 114 WILLIAM SOTO SANTIAGO
vamos a llevar nosotros.
Uno de los premios grandes, el cual ya no
pueden recibir los de las Edades pasadas, ¿saben
cuál es? Estando vivos ser transformados. Y yo
espero que la mayoría de todos ustedes reciban
la transformación sin tener que ver muerte, y yo
también.
Yo espero grandes bendiciones de parte de
Dios para cada uno de nosotros en nuestra Edad
y nuestra dispensación, porque las bendiciones
más grandes, las promesas más grandes, están
para este tiempo final.
Y los únicos que están viviendo en este
tiempo final somos nosotros; porque los demás
de las Edades pasadas partieron, durmieron,
porque los santos no mueren, sus cuerpos están
dormidos, pero ellos están despiertos allá en el
Paraíso en un cuerpo al igual que nosotros aquí,
pero en un cuerpo de la sexta dimensión.
Así que ellos están muy contentos allá, muy
tranquilos, pero ellos quieren regresar acá,
porque la acción ¿dónde está? acá. Allí ni
trabajan, ni comen, ni duermen. Algunos desean
irse, partir. ¿Por qué? Porque son vagos. Y
dicen: ``como allí no hay trabajo, pues ese es el
lugar donde yo quiero estar.''
Pero recuerde que donde no hay trabajo,
NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 115
tampoco hay galardones. Los galardones están
acá, porque acá es donde está la acción, donde
está la lucha, donde está el trabajo, donde está el
esfuerzo, y donde se está llevando el Mensaje
hacia adelante.
Así que ¿cuántos quieren estar allá en el
Paraíso, en la sexta dimensión? Como que el
uno por ciento nada más. Así que yo creo que el
resto quiere estar aquí trabajando.
Y podemos decir que no tenemos tiempo
para dormir, o sea, para morir, porque nuestro
trabajo en el Señor es tanto en este tiempo, y es
el último trabajo que se lleva a cabo para que
venga la Resurrección de los muertos en Cristo
y la Transformación de nosotros los que vivi-
mos.
Ellos no serán perfeccionados sin nosotros.
Así que ellos no llegarán a la perfección sin
nosotros. Ellos dependen de nosotros, de la obra
que se lleva a cabo en este tiempo final, en la
Edad de la Piedra Angular, perteneciente a la
Dispensación del Reino.
Así que nuestro trabajo en el Reino de Dios
es el trabajo más importante que se está hacien-
do en este planeta Tierra, pero como siempre
Dios obra en forma sencilla, en forma simple,
así también es la obra que se lleva a cabo, en la
116 WILLIAM SOTO SANTIAGO
cual la persona no tiene que ser rica para traba-
jar, ni ser una persona que haya estudiado en la
universidad para poder trabajar en el Reino de
Dios, sino que sea un hijo de Dios que desea
trabajar en el Reino de Dios y que esté bien
agradecido a Dios por el privilegio que le ha
dado de vivir en este tiempo, en el fin del siglo,
para así tener parte en el trabajo del Reino de
Dios.
Si usted no está agradecido o agradecida
a Dios por el amor de El hacia usted, y por el
privilegio que Dios nos concede de estar aquí
viviendo, porque Dios lo envió para vivir en
el fin del siglo veinte, entonces usted no está
preparado o preparada para trabajar en el
Reino de Dios, porque tiene que ser porque
usted agradece a Dios todo ese privilegio y
bendición que Dios le ha dado; y porque
usted ama a Dios sobre todas las cosas.
Por lo tanto es una obra de amor y en el
amor divino la que se lleva a cabo en el Reino
de Dios. Nadie es obligado a trabajar. Cada uno
reconoce su posición en el Reino de Dios, y
sabe que Dios no quiere vagos, Dios no quiere
la pereza. Dios ama a la persona diligente, a la
persona que toma cuidado de la labor que tiene
que llevar a cabo en el programa divino.
 NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 117
Por lo tanto cada uno de nosotros estamos
en el fin del tiempo como personas diligentes,
personas que conocemos el tiempo en el cual
estamos viviendo.
Si estuviéramos viviendo en el tiempo de
Noé, estaríamos con Noé ayudándole en la
construcción del arca, y con nuestro propio
dinero comprando los materiales para la cons-
trucción del arca de Noé.
Ahora, nosotros estabamos allí
representados en Noé y su familia, porque
siempre los creyentes de una Edad han sido
representados en los creyentes de las Edades y
dispensaciones que ya pasaron.
Algunas personas quizás piensan que si
hubiésemos vivido en el tiempo de Noé, nos
hubiese destruido el diluvio; pero no es así,
porque entonces no hubieran sido ocho personas
salvas, sino ocho personas más nosotros.
Vean ustedes, Noé y su familia fueron los
últimos de aquella generación. Noé fue el
último profeta mensajero de aquel tiempo, y
fueron ocho personas las que se salvaron.
Nosotros estamos en el fin del tiempo con el
Mensaje final, como Noé tuvo el Mensaje final;
por eso el Señor Jesucristo representó la Segun-
da Venida del Hijo del Hombre como en los
118 WILLIAM SOTO SANTIAGO
días de Noé.
Allí tenían el último Mensaje, el último
profeta y también la única y última forma de
escapar del juicio divino. Y fueron ocho perso-
nas salvas. ¿Y qué tenemos nosotros? La Edad
número ocho, con el Mensaje número ocho.
Y de las tres grandes dispensaciones, tene-
mos el tercer Mensaje de la Dispensación del
Reino. Y si contamos las siete dispensaciones,
desde la primera hasta la séptima, nosotros
tenemos el Mensaje de la séptima dispensación,
que es la Dispensación del Reino. La tercera
dispensación de las tres grandes dispensaciones,
es la Dispensación del Reino. Y la séptima
dispensación de las siete dispensaciones, es la
Dispensación del Reino.
Ahora, nosotros tenemos todo eso: el último
Mensaje, el Mensaje de la trompeta final, la
última trompeta. Y la trompeta es la Voz de
Dios; por lo tanto es la Voz de Dios, el Mensaje
de Dios, el último Mensaje de Dios para la raza
humana.
Luego del Mensaje final viene la
transformación de los que estamos vivos,
antecediéndole la resurrección de los muertos en
Cristo; y después de eso el rapto; y después del
rapto, la repartición de los galardones durante
NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 119
tres años y medio; porque son muchos los
escogidos (contando los de todas las Edades).
¿Pero qué estará pasando aquí en la Tierra
en ese tiempo? ¿Cómo los pueblos trabajan para
el fuego y las naciones se fatigan en vano?
Durante esos tres años y medio de gran tribula-
ción, aquí en la Tierra estará el fuego destruyén-
dolo todo; y descubrirán que todo su esfuerzo
fue en vano.
El profeta Malaquías en el capítulo 4, verso
1 en adelante, dice: ``He aquí, viene el día
ardiente como un horno... aquel día que vendrá
los abrasará...'' Y no es un abrazo de cariño,
sino que los abrasará con fuego, los quemará.
``Y todos los soberbios serán estopa,'' dice el
Señor.
Vean ustedes lo que le espera a las naciones
y a los pueblos: ellos verán que sus trabajos
fueron en vano. Y en esos tres años y medio
ellos descubrirán que todo el trabajo que hicie-
ron no fue un trabajo en el Reino de Dios, por lo
tanto fue en vano.
Pero los escogidos no trabajan en vano,
porque los escogidos saben en qué Reino ellos
trabajan, y ellos trabajan en el Reino de Dios
con amor divino.
Por lo tanto cada uno de nosotros tenemos
 120 WILLIAM SOTO SANTIAGO NUESTRO TRABAJO EN EL REINO... 121

una recompensa, un galardón, en el cielo. El tiempo final. Ese es nuestro trabajo en el Reino
Señor Jesucristo dijo que nosotros tenemos una de Dios; nuestro trabajo en la Edad de la Piedra
bendición muy grande en el cielo; por lo tanto Angular, nuestro trabajo en la Dispensación del
nuestro galardón en el cielo es muy grande; y lo Reino, ``NUESTRO TRABAJO EN EL
disfrutaremos en el Milenio y por toda la eterni- REINO DE DIOS.''
dad. Que Dios nos bendiga y que Dios nos
Por esa razón yo le digo a ustedes: guarde a todos. Con nosotros Miguel Bermúdez
Aumentemos nuestro trabajo en el Señor, Marín nuevamente.
nuestro trabajo en el Reino de Dios, porque es ``NUESTRO TRABAJO EN EL REINO
lo único seguro. DE DIOS.''
Que Dios nos continúe bendiciendo a todos,
que Dios nos guarde; y hacia adelante en
``NUESTRO TRABAJO EN EL REINO DE
DIOS.''
Que este año 1992 sea de grande bendición
para cada uno de nosotros y de un trabajo
multiplicado, superior al del año pasado; que
pensemos: ``Ahora en este año haremos un
trabajo mayor que el que hemos hecho en todos
los años pasados juntos.'' ¡Amén!
Así que estaremos brazo a brazo trabajando
en el Reino de Dios, en nuestro trabajo en el
Reino de Dios, porque en los negocios de mi
Padre, que son los negocios del Reino, me
conviene estar. ¿Y a ustedes? Entonces
continuaremos trabajando en los negocios del
Reino de Dios que corresponden para este
LA GLORIA DE
DIOS SOBRE LA
JERUSALEN
CELESTIAL
Por William Soto Santiago
2 de febrero de 1992 (P.M.)
Santiago de Chile, Chile

Muy buenas noches amados amigos y
hermanos presentes, y también a cada uno de
ustedes a través de la línea telefónica allá en
Puerto Rico, y en los diferentes países de la
América Latina y del Caribe, y también de
Norteamérica y el Canadá.
Que Dios en esta noche continúe bendicién-
donos a todos y nos permita entender Su Pala-
bra, porque la promesa de entender Su Palabra
es para la buena tierra; por lo tanto yo pido esa
bendición para cada uno de ustedes, porque
ustedes son la buena tierra donde la buena
simiente de la Palabra ha sido sembrada.
El profeta Isaías en el capítulo 60, verso 1
en adelante, dijo: ``Levántate, resplandece;
porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová
ha nacido sobre ti.''
``LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN CELESTIAL.''
El apóstol San Pablo en su carta a los He-
LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 127
breos, en el capítulo 12, y verso 22 en adelante,
dijo: ``sino que os habéis acercado al monte de
Sión, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la
celestial, a la compañía de muchos millares de
ángeles,
a la congregación de los primogénitos que
están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de
todos, a los espíritus de los justos hechos per-
fectos,
a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la
sangre rociada que habla mejor que la de
Abel.''
La Jerusalén celestial es el cuerpo místico
del Señor Jesucristo, en el sentido espiritual.
Así como tenemos un Israel literal, que es el
pueblo hebreo, y tenemos una Jerusalén
terrenal, literal; también hay un Israel celestial,
que son los escogidos de Dios; y también está la
Jerusalén celestial, que es el cuerpo místico del
Señor Jesucristo, Su Iglesia.
Y también tenemos la nueva Jerusalén que
estará aquí en la Tierra luego que haya termina-
do el juicio final: Esa Nueva Jerusalén que
estará establecida en la tierra de Israel; y se
levantará allí en donde está la Jerusalén actual.
Y en esa ciudad estará la Jerusalén espiritual,
128 WILLIAM SOTO SANTIAGO
que son los hijos de Dios, juntamente con 144
mil hebreos que vivirán allí.
Ahora, todo lo que estará en esa ciudad allá
en la eternidad se refleja en la Jerusalén espiri-
tual, que es el cuerpo místico de creyentes
escogidos, del Israel celestial.
Y así como la Gloria de Dios estará en la
Ciudad Santa, Jerusalén, en la eternidad, así
también la Gloria de Dios en la Jerusalén espiri-
tual, en el fin del tiempo, estaría Su Gloria
manifestada conforme a la promesa divina.
Dice: ``Levántate, resplandece; porque ha
venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido
sobre ti.'' Porque el cuerpo místico de creyentes,
los escogidos, representan la Jerusalén nueva
que estará en la Tierra, y los escogidos son los
ciudadanos de esa ciudad.
Encontramos que así como estará la Gloria
de Dios sobre la Jerusalén allá, también en la
Jerusalén espiritual estaría manifestada la Gloria
de Dios acá.
Ahora, vean aquí en Apocalipsis capítulo
21, verso 23, dice: ``La ciudad no tiene
necesidad de sol ni de luna que brillen en ella;
porque la gloria de Dios la ilumina, y el
Cordero es su lumbrera.
Y las naciones que hubieren sido salvas
 LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 129
andarán a la luz de ella; y los reyes de la tierra
traerán su gloria y honor a ella.''
Ahora, aquí podemos ver que la Gloria de
Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
Todo esto en el fin del tiempo estaría
reflejándose en el cuerpo místico del Señor
Jesucristo, que es la Jerusalén espiritual
celestial.
Y por cuanto esta Escritura estará cumplién-
dose literalmente también allá en la eternidad,
después del juicio final, en la Nueva Jerusalén,
la ciudad que estará sobre la Tierra, vean uste-
des que eso será cuando se haya entrado a la
eternidad, o sea, después del Reino milenial y
después del juicio final.
Ahora, para que estas cosas que estarán
manifestándose en la eternidad, en la ciudad
celestial, la Nueva Jerusalén, la cual estará en la
Tierra, para que esas cosas se reflejen acá, el
pueblo tiene que pasar a una Edad eterna, por-
que solamente en una Edad eterna pueden
reflejarse esas cosas que corresponden a la
eternidad.
Y esto no será otra cosa sino la Segunda
Venida de Cristo conforme a como El prometió
en San Mateo capítulo 16, verso 27 y 28, que
130 WILLIAM SOTO SANTIAGO
dice: ``Porque el Hijo del Hombre vendrá en la
gloria de su Padre con sus ángeles...''
Al venir el Señor en la Gloria de Su Padre,
entonces en la Jerusalén espiritual, que es el
cuerpo místico del Señor Jesucristo, se estaría
manifestando la Gloria de nuestro Padre celes-
tial, la Gloria de Dios estaría y sería vista sobre
nosotros: ``Levántate y resplandece, porque la
Gloria de Jehová ha nacido sobre ti'' en la
Venida del Hijo del Hombre con sus ángeles.
``...y entonces pagará a cada uno conforme
a sus obras.'' Al trigo de acuerdo a las obras del
trigo, que son los hijos del Reino, y a la cizaña
de acuerdo a las obras que ha hecho la cizaña.
Y sigue diciendo: ``De cierto os digo que
hay algunos de los que están aquí, que no
gustarán la muerte, hasta que hayan visto al
Hijo del Hombre viniendo en su reino.''
Aquí podemos ver que estas cosas que El
promete aquí, se estarían manifestando en el fin
del tiempo en Su cuerpo místico, que es la
Jerusalén celestial, la Jerusalén espiritual, como
también es el Israel espiritual.
Porque todas estas cosas que serán vistas en
la eternidad, en la Jerusalén, allá en la tierra de
Israel, serán vistas en Jerusalén, y Jerusalén
pertenece a Israel. Por lo tanto serán vistas en
LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 131
Israel, en el Israel literal, porque en el Israel
literal estará también el Israel espiritual.
Así que primeramente todo esto se manifies-
ta en el Israel espiritual y en la Jerusalén espiri-
tual, que somos nosotros, con la Venida del Hijo
del Hombre en Gloria con Sus Angeles.
Ahora, esto fue representado también en el
templo que hizo Moisés y en el que hizo Salo-
món. En el lugar santísimo de ese templo fue
que la Gloria de Dios entró y se detuvo allí, y se
colocó en medio de los dos querubines de oro
que estaban sobre el arca del pacto. Allí estaba
la Gloria de Dios manifestada.
Y en el Templo espiritual del Señor
Jesucristo, que somos nosotros, en la Edad de la
Piedra Angular, que es la Edad del Lugar
Santísimo del Templo espiritual del Señor,
estarían manifestados el ministerio de Moisés y
Elías, que es el ministerio de los dos querubines
actualizado, ministrando la Palabra de Dios para
el pueblo de Dios.
Así como el lugar santísimo estaba en el
occidente del templo de Salomón, también en el
occidente estará el Lugar Santísimo del Templo
espiritual del Señor Jesucristo, en donde la
Gloria de Dios estaría manifestada, la Gloria del
 132 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Señor en la Venida del Hijo del Hombre.
Dios le dijo a Moisés: ``en medio de los dos
querubines de oro Yo me manifestaré, me
revelaré al pueblo hebreo y a tí también.'' Dios
se manifestaba, se revelaba, a Moisés de en
medio de los dos querubines; porque en medio
de los dos querubines estaba la Gloria de Dios
manifestada.
Vean ustedes dónde la Gloria de Dios estaría
manifestada en el Templo espiritual del Señor
Jesucristo. ¿Por qué? Porque así estuvo manifes-
tada en el templo literal que hizo Moisés y en el
que hizo Salomón, y así estará manifestada en
ese gran Templo o Tabernáculo de Dios en la
Tierra nueva, allá en la eternidad, en la tierra de
Israel.
La Gloria de Dios estará manifestada en esa
gran ciudad que estará en forma de monte, y en
la cima de ese monte, de esa ciudad, estará la
Gloria de Dios manifestada, y dice: ``y el Cor-
dero es su lumbrera.''
Allí estará el Cordero, allí estará Jesucristo
iluminando esa ciudad, El estará allí como ese
gran Pilar de fuego, así como estuvo en medio
del pueblo de Israel alumbrándole el camino por
40 años durante las noches. La Gloria de Dios
estará allí manifestada, y el Cordero será la
LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 133
lumbrera, pues El estará manifestado como esa
gran Columna de fuego, ese gran Pilar de fuego,
en la cima del monte de Sión, del monte de
Dios, de esa Nueva Jerusalén, en donde estare-
mos cada uno de nosotros.
Y nosotros estaremos ocupando la parte más
importante de esa ciudad. Ya que nosotros
hemos estado viviendo en la parte más alta del
cuerpo místico del Señor Jesucristo, que es la
Jerusalén espiritual, nos corresponde entonces el
lugar más alto de la Nueva Jerusalén, que estará
en el glorioso Reino de la eternidad allá en la
tierra de Israel.
Así que nosotros estaremos habitando en la
parte más alta de esa ciudad, en el lugar en
donde estará la Gloria de Dios, y donde estará el
Cordero como la lumbrera de esa ciudad.
Dice: ``y no habrá necesidad de sol (literal)
ni de luna (literal) para que alumbren; porque la
Gloria de Jehová la ilumina, y el Cordero es su
lumbrera.'' Esa cuidad tendrá Luz propia. Vea-
mos lo hermoso que será este lugar, dice: ``Sus
puertas nunca serán cerradas de día, pues allí
no habrá noche.'' Una ciudad que las 24 horas
estará de día. ¿Por qué? Porque allí estará la
Gloria de Dios manifestada, y el Cordero, Jesu-
134 WILLIAM SOTO SANTIAGO
cristo, es su lumbrera, como la Columna de
fuego que guió al pueblo hebreo.
Ese es el Trono del Señor en la eternidad, en
esa ciudad, ahí en la cima de ese monte, de esa
ciudad.
Así que la Gloria de Dios estará allá mani-
festada en la eternidad, y por cuanto nosotros
estamos viviendo en el ciclo divino que repre-
senta la eternidad; pues la Edad de la Piedra
Angular siendo la Edad número ocho (el ocho
representa eternidad), por lo tanto las cosas que
estarán en la eternidad, estarán acá manifestán-
dose, reflejándose, en el campo espiritual.
Y la Gloria de Dios estará sobre la Jerusalén
espiritual (que somos nosotros) en la Segunda
Venida del Hijo del Hombre. Y la lumbrera,
Jesucristo, el Pilar de fuego, estará iluminando
esta ciudad espiritual que somos nosotros;
iluminándonos para que podamos ver Su
programa, para que las 24 horas del día sean de
Luz espiritual para cada uno de nosotros;
porque dice que allá no habrá noche.
La Edad de la Piedra Angular es una Edad
que no tendrá noche, porque la noche fue en las
siete Edades de la Iglesia gentil, en donde los
siete mensajeros aparecieron como una estrella,
un mensajero para cada Edad. Y la Iglesia fue
 LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 135
representada en la luna, para darle luz a los
habitantes de la Tierra, reflejarle la luz del sol.
Pero por cuanto en la Nueva Jerusalén, en la
eternidad, no habrá noche, en la Edad de la
Piedra Angular que representa la eternidad,
tampoco habrá noche; como la hubo en las siete
Edades de la Iglesia gentil, porque ya el tiempo
de la noche pasó.
Estamos en un nuevo día dispensacional, en
donde el Sol de justicia ha salido, y en donde el
Cordero, Jesucristo, el Pilar de fuego, es la
lumbrera que nos ilumina el camino, que nos
ilumina el programa divino en el cual nosotros
estamos.
Nadie podía ver que estamos en la Edad del
Lugar Santísimo del Templo espiritual del
Señor Jesucristo, sin que fuera con la Luz del
Cordero que es la lumbrera que ilumina en la
Edad de la Piedra Angular a todos los hijos de
Dios; por lo tanto El con el Mensaje
correspondiente para nuestro tiempo nos
ilumina para que veamos Su programa para este
nuevo día dispensacional en donde ya no habrá
noche, sino que todo será día, para que todas las
naciones y pueblos vean la Gloria de Dios
manifestada en Su Templo espiritual, en la
136 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Jerusalén espiritual, y vean la Luz del Cordero
que es la lumbrera que ilumina a cada hijo de
Dios en este tiempo final; porque la Gloria de
Dios está sobre la Jerusalén celestial, la
Jerusalén espiritual, en la Edad del Lugar
Santísimo sobre el Arca del Pacto en medio de
los dos querubines que representan el ministerio
de Moisés y de Elías.
De en medio del ministerio de Moisés y de
Elías en la Edad del Lugar Santísimo, se mani-
fiesta la Gloria de Dios, y el Cordero es su
lumbrera, en la Edad de la Piedra Angular.
Así que tenemos a Jesucristo, el Cordero
convertido en el León de la tribu de Judá,
tenemos a Jesucristo, el Pilar de fuego, la Co-
lumna de fuego, alumbrándonos en el Lugar
Santísimo del Templo espiritual del Señor
Jesucristo, porque la Gloria de Dios está sobre
la Jerusalén celestial, la Jerusalén espiritual.
Por eso es que podemos ver las cosas que
están realizándose en el programa de Dios en
este tiempo final.
En otros tiempos no podíamos ver estas
cosas, porque no era el tiempo todavía, no había
amanecido un nuevo día dispensacional en
donde la Gloria de Dios estuviera sobre la
Jerusalén espiritual o celestial, y donde el Cor-
LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN... 137
dero fuera su lumbrera, en un tiempo en donde
nunca más habrá noche como la hubo en las
Edades de la Iglesia gentil.
Así que estamos viviendo en el tiempo en
que la Gloria de Dios está sobre la Jerusalén
celestial, la Jerusalén espiritual.
Que Dios nos continúe bendiciendo a todos,
que Dios nos guarde, y adelante viendo la
Gloria de Dios manifestada sobre la Jerusalén
espiritual y celestial, y viendo a Jesucristo, el
Pilar de fuego, como la lumbrera que nos
alumbra el camino de la vida eterna.
Muchas gracias por vuestra amable
atención: cada uno de ustedes aquí presentes, y
los que están a través de la línea telefónica. Y
pasen todos muy buenas noches.
Con nosotros Miguel Bermúdez Marín.
``LA GLORIA DE DIOS SOBRE LA
JERUSALEN CELESTIAL.''
 DEDICACION
DEL SALON
DE ANTOFAGASTA
Por William Soto Santiago
3 de febrero de 1992
Antofagasta, Chile

Muy buenas noches a todos, que Dios nos

continúe bendiciendo en esta noche, y que siga
Dios añadiendo a este lugar los escogidos que
viven en esta ciudad y sus alrededores, para que
sean alimentados y reciban así la Palabra que
necesitan para la transformación de sus cuerpos;
porque sin esa Palabra no puden ellos tener la fe
para ser transformados y raptados, porque esa fe
está en la Palabra.
Dios creó todas las cosas por Su Palabra, y
El estará creando un nuevo cuerpo para noso-
tros; y no puede hacerlo de otra forma, sino por
 DEDICACION DEL SALON DE 142 WILLIAM SOTO SANTIAGO
ANTOFAGASTA 141
prometida para cada uno de nosotros para el fin
Su Palabra. Primero es hablada la Palabra, y del tiempo.
luego se realiza esa creación. Y para eso se ha dedicado en esta noche este
En el principio creó Dios los cielos y la lugar, para venir a este lugar los hijos de Dios y
tierra, y lo hizo por Su Palabra; primero habló y recibir la Palabra creadora, y así ser preparados
después todas las cosas fueron tomando forma, para esa transformación.
todas las cosas fueron materializándose; porque Que Dios les bendiga, Dios les guarde, y
esa es la forma de Dios para crear. muchas gracias por vuestra amable atención.
Y así la creación del nuevo cuerpo que
nosotros estamos esperando será un producto de
la Palabra creadora de Dios hablada en este
tiempo final, para producir por creación divina
ese cuerpo eterno que Dios nos ha prometido a
cada uno de nosotros.
Por eso esa Palabra creadora que sería
hablada fue representada en esa gran voz de
trompeta que llamaría y juntaría a todos los
escogidos, fue representada también por San
Pablo como la trompeta final, que es el Mensaje
final de Dios, para así producir la resurrección
de los muertos en Cristo en un cuerpo eterno, un
cuerpo creado por Dios, y producir la transfor-
mación de nosotros los que vivimos.
Podemos ver que a la resurrección de los
muertos en Cristo y a la transformación nuestra,
lo que antecede es esa gran voz de trompeta,
que es la Palabra creadora de Dios, que ha sido

SALUDO A LOS
CACHORRITOS
DE LEON DE CHILE
Por William Soto Santiago
6 de febrero de 1992
Santiago, Chile
Muy buenos días niños, cachorritos de
León; es para mí un privilegio muy grande estar
con ustedes este día y ver la alegría y el regocijo
que hay en vuestros corazones, y verlos a cada
uno de ustedes en el programa divino haciendo
como deben hacer en este tiempo final; ocupan-
do vuestra posición en el Reino de Dios como la
ocuparon los niños en otras edades y otras
dispensaciones en el programa divino frente a
todo lo que Dios estaba cumpliendo en su
tiempo.
Para mí es un privilegio muy grande verlos
a ustedes en los negocios del Señor Jesucristo,
de nuestro Padre celestial, trabajando en esta
hora final en aquello que El les ha concedido
SALUDO A LOS CACHORRITOS DE
LEON... 145
hacer en este tiempo final; y verlos también
recibiendo Su Palabra y siendo preparados para
la transformación de sus cuerpos, ya que la
promesa es para los ancianos, para los adultos,
para los jóvenes y para los niños también.
La promesa de la transformación de nuestros
cuerpos es para todos; por lo tanto, todos los
que reciben Su Palabra para esta hora final, la
trompeta final o gran voz de trompeta, tienen la
promesa de la transformación de sus cuerpos; y
no importa la edad.
Así que yo estoy muy contento de ver que
aquí en Chile hay muchos niños que están
esperando la transformación de sus cuerpos y
están en los negocios del Señor Jesucristo, los
negocios de nuestro Padre celestial.
Hacia adelante niños, trabajando en el Reino
de Dios, luchando en esta hora final; porque
estamos luchando por la vida eterna, por la
transformación de nuestros cuerpos; y estamos
llevando el Mensaje a otros para que también
reciban esa bendición que Dios ha prometido
para todos los escogidos: sean niños, jóvenes o
adultos. No importa la edad.
Yo estoy muy contento también por ver que
aquí en Chile hay tantos niños que están reci-
biendo la Palabra; por lo tanto, tienen promesa
146 WILLIAM SOTO SANTIAGO
de una transformación para sus cuerpos, para
vivir por toda la eternidad en un cuerpo eterno.
También aprecio mucho la labor que han
estado haciendo las maestras y maestros en
favor de los niños. Una labor muy bonita que
Dios les ha concedido; y también es un privile-
gio ser maestro o maestra del Reino de Dios,
para dar a conocer la Palabra de Dios para esta
hora.
Ustedes tienen la posición más grande que
una maestra o maestro en este planeta Tierra
puede tener: y es ser maestro o maestra del
Reino de Dios para enseñar a los niños la Pala-
bra de Dios, instruyendo al niño en su carrera de
la vida eterna para que nunca se aparten del
camino de Dios, del camino de la vida eterna, y
así lleven una vida agradable ante Dios, y
honren a sus padres; porque este es un manda-
miento con promesa de vida. Porque El dijo:
``Honra a tu padre y a tu madre para que se te
alarguen los días sobre la tierra.'' Porque al que
no honre a su padre y a su madre, sus días serán
acortados. (Exodo 20:12).
Honrando a nuestros padres terrenales agra-
damos a Dios. Todos los niños deben hacer eso:
honrar a sus padres, ser obedientes a sus
madres, y trabajar en el Reino de Dios,
sirviéndole a Dios en Su obra para este tiempo
 SALUDO A LOS CACHORRITOS DE
LEON... 147

final.
Así que cachorritos de León, adelante en el
Reino de Dios, trabajando en la obra que corres-
ponde para este tiempo que Dios le ha dado a
ustedes hacer.
Continúen pasando un día feliz, lleno de las
bendiciones de Dios; y Dios les bendiga y Dios
les guarde a todos.
 Muy buenos días amados amigos y herma-
nos presentes; es para mí un privilegio muy
grande estar con ustedes aquí, y también un
LA EDAD MESIANICA saludo para todos los que están a través de la
línea telefónica en los diferentes lugares de la
América Latina, del Caribe, de Norteamérica y
Por William Soto Santiago del Canadá. Es para mí un privilegio muy
9 de febrero de 1992 grande en esta mañana dirigirme a cada uno de
Lo Prado, Chile ustedes con la Palabra de Dios para esta hora
final.
Leamos en San Mateo capítulo 16, verso 27
al 28, y también en el capítulo 17, verso 1 al 5.
Dice así: ``Porque el Hijo del Hombre vendrá
en la gloria de su Padre con sus ángeles, y
entonces pagará a cada uno conforme a sus
obras.
De cierto os digo que hay algunos de los
que están aquí, que no gustarán la muerte,
hasta que hayan visto al Hijo del Hombre
viniendo en su reino.
 LA EDAD MESIANICA 153
Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a
Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte
a un monte alto;
y se transfiguró delante de ellos, y resplan-
deció su rostro como el sol, y sus vestidos se
hicieron blancos como la luz.
Y he aquí les aparecieron Moisés y Elías
hablando con él.
Entonces Pedro dijo a Jesús: Señor, bueno
es para nosotros que estemos aquí; si quieres,
hagamos aquí tres enramadas: una para ti, otra
para Moisés, y otra para Elías.
Mientras él aún hablaba, una nube de luz
los cubrió; y he aquí una voz desde la nube, que
decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo
complacencia; a él oíd.'' Y todo esto para la
Edad mesiánica.
``LA EDAD MESIANICA.''
Cuando el Señor Jesucristo apareció dos mil
años atrás se estaba viviendo allí la Edad mesiá-
nica de la Piedra Angular, la Edad del cumpli-
miento de las profecías mesiánicas de la Primera
Venida de Cristo.
Esa Edad o etapa mesiánica no pudo ser
comprendida por el Sumo Sacerdote y la reli-
gión hebrea, la religión del judaísmo, o sea, bajo
la Dispensación de la Ley, pues esa Dispensa-
154 WILLIAM SOTO SANTIAGO
ción de la Ley no tenía las promesas de esa
bendición, sino que estas promesas mesiánicas
correspondían para una nueva Edad, bajo una
nueva dispensación.
Cuando Juan el Bautista bautizó a Jesús, allí
estaba comenzando una nueva dispensación con
un mensajero ungido con la unción correspon-
diente para ese tiempo; por esa causa el Señor
Jesucristo tomó en una ocasión la Escritura y
leyó en Isaías capítulo 61. En San Lucas capítu-
lo 4, verso 17 en adelante, dice: ``Y se le dio el
libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el
libro, halló el lugar donde estaba escrito:
El Espíritu del Señor está sobre mí, por
cuanto me ha ungido...'' Aquí El se está identi-
ficando como el Ungido por el Espíritu de Dios,
el Ungido con la unción mesiánica, con la
unción correspondiente para cumplir la Primera
Venida de Cristo, la Primera Venida del Mesías;
por lo tanto, esa Edad o etapa en donde El está
apareciendo es conocida como la etapa o Edad
mesiánica de la Primera Venida de Cristo.
Y por cuanto es la Edad mesiánica, allí tenía
también el Ungido de Dios, el mensajero mesiá-
nico con la unción correspondiente para ser el
mensajero mesiánico.
Mesías significa Ungido o Cristo. O sea, es
LA EDAD MESIANICA 155
lo mismo en diferentes idiomas: Cristo, Ungido
o Mesías es lo mismo, significa lo mismo.
Ahora, el Señor Jesucristo fue identificado
en la Escritura como el mensajero mesiánico
para cumplir todas las profecías mesiánicas
correspondientes a la Primera Venida del Señor
como Cordero de Dios para quitar el pecado del
mundo.
Ninguna otra persona podía morir por el
pecado de la gente, sino el mensajero mesiánico,
el cual tenía esa unción del Espíritu de Dios; por
eso dice: ``por cuanto me ha ungido.''
Así que El podía decir: ``el Espíritu del
Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido'',
y comenzó a enumerar las cosas para las cuales
había sido ungido. Había sido ungido para
cumplir toda promesa correspondiente para la
Primera Venida del Señor.
Ahora, podemos ver que cuando ya El llega
al verso 2, en donde dice: ``a predicar el año
agradable del Señor.'' (dice:) Y enrollando el
libro, lo dio al ministro y se sentó; y los ojos de
todos en la sinagoga estaban fijos en él.
Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido
esta Escritura delante de vosotros.''
Allí estaba el mensajero ungido, el mensaje-
ro mesiánico, con el Espíritu del Señor. El
 156 WILLIAM SOTO SANTIAGO
decía: ``El Espíritu del Señor está sobre mí, por
cuanto me ha ungido...''
Allí tenemos el mensajero mesiánico, el
mensajero ungido para cumplir las promesas
mesiánicas de la Primera Venida del Señor. Y
apareció en la Edad mesiánica, en esa etapa
correspondiente para aquel tiempo para llevar a
cabo la obra de redención por Su Sangre precio-
sa muriendo en la Cruz del Calvario.
Ahora, muchas personas no comprendieron
lo que estaba aconteciendo allí, y pensaron que
Jesús de Nazaret era un falso profeta. Pero no
era un falso profeta, sino que era el verdadero
profeta ungido, el verdadero profeta mesiánico,
para cumplir las promesas mesiánicas para aquel
tiempo.
Ahora, el que la religión hebrea bajo la Ley
haya confundido al Señor Jesucristo y haya
estado ciega a la Venida del mensajero mesiáni-
co, eso no invalidó el programa divino corres-
pondiente para aquel tiempo; con todo y eso se
cumplió el programa divino, y todo obró para
bien del programa divino.
¿Qué hubiera pasado si el pueblo hebreo
hubiera reconocido que Jesús de Nazaret era el
mensajero mesiánico? Lo hubieran recibido y lo
hubieran coronado como Rey en Israel, hubiera
LA EDAD MESIANICA 157
ocupado el Trono de David y hubiera reinado
como Rey. Si lo hubiera aceptado, hubiera
reinado como Rey sobre un pueblo y sobre un
mundo caído, lleno de problemas, un mundo
caído que está y estaba bajo el control del
enemigo de Dios.
Eso fue también lo que le ofreció el diablo a
Jesús en aquella temporada de ayuno que tuvo
el Señor. Cuando terminaron los cuarenta días
de ayuno, Jesús tuvo hambre, y allí encontramos
que el diablo le ofreció los reinos del mundo sin
que pasara por la muerte en la Cruz del Calva-
rio.
Con la muerte en la Cruz del Calvario, el
Señor Jesucristo quitó el pecado. Y el glorioso
Reino del Señor Jesucristo será establecido en la
Tierra, y con El estarán los escogidos y estarán
limpios de todo pecado con cuerpos eternos; y
eso no hubiera sido posible si el Señor Jesucris-
to aceptaba los reinos de este mundo cuando el
diablo se los ofreció allá.
Y si el pueblo hebreo hubiera recibido a
Cristo, y lo hubiera coronado como Rey sin
pasar por la Cruz, por la muerte en la Cruz del
Calvario, el mundo completo, con todos los
escogidos, estarían con el pecado, y sería un
Reino pecador, lleno de pecado, y el diablo
158 WILLIAM SOTO SANTIAGO
estaría suelto en ese Reino haciendo daño.
Así que el mensajero mesiánico, Jesús de
Nazaret, comprendió que el pueblo hebreo
estaría ciego para que se cumpliera en Jesús
todas las profecías mesiánicas, y fuera
rechazado por el pueblo hebreo y pidieran Su
muerte.
Pero el Señor Jesucristo, sabiendo que con
Su muerte El quitaría el pecado del mundo,
viendo al pueblo hebreo que estaba ciego y
estaba rechazándolo y pidiendo Su muerte, El
oró y dijo: ``Padre, perdónalos, porque ellos no
saben lo que hacen.''
El Señor Jesucristo tuvo misericordia del
pueblo hebreo, de Su pueblo; y esa misericordia
es extendida al pueblo hebreo para que en el fin
del tiempo ellos puedan retornar a las manos de
Dios, y el Reino de Dios pueda regresar al
pueblo hebreo.
Por esa causa, aunque ellos murieron bajo
diferentes persecuciones, recibirán vida eterna
luego que sean juzgados, porque ellos estaban
ciegos al programa divino.
Ahora, vean ustedes, el pueblo hebreo se
mantuvo en la Dispensación de la Ley y no pasó
a la Edad mesiánica de la Piedra Angular, en
donde estaba el mensajero mesiánico, y en
 LA EDAD MESIANICA 159
donde estaba la Luz de Cristo alumbrando a Sus
discípulos, los cuales pasaron a esa Edad mesiá-
nica.
Ahora, encontramos que para el fin del
tiempo, el fin del siglo, nuevamente se repite la
Escritura y se llega al ciclo divino de la Edad
mesiánica, en donde para el pueblo hebreo se
continuará la semana número setenta en la
segunda parte que le falta a esa semana.
Ahora, el pueblo hebreo está esperando la
Venida del Mesías, porque ellos no saben que
ya vino en Su Primera Venida y ellos no lo
vieron; pero ellos están esperando la Venida del
mensajero mesiánico, la Venida del Mesías, la
Venida de Cristo, y para eso se requiere la Edad
mesiánica; porque solamente la Edad mesiánica
puede tener como mensajero a un mensajero
mesiánico, a un mensajero ungido.
Recuerden que Mesías significa Cristo y
también significa Ungido, o sea, ``el Cristo''
significa el Ungido.
Cada Edad y cada dispensación ha tenido su
mensajero ungido, el Ungido de Dios como
mensajero para esa Edad o dispensación. O sea,
ha sido el Ungido, el Mesías o el Cristo de esa
Edad o de esa dispensación.
Ahora, Jesús siendo el Ungido de Dios con
160 WILLIAM SOTO SANTIAGO
el Espíritu de Dios, y siendo el mensajero para
la Edad mesiánica, es reconocido como el
Cristo, el Mesías, de la Edad mesiánica, cum-
pliendo las profecías mesiánicas correspondien-
tes a la Primera Venida de Cristo, y llevando a
cabo así el sacrificio por el pecado del mundo.
Ahora, encontramos que el Señor Jesucristo
es el Mesías, el Ungido, el Cristo de Dios. El
Cristo de Dios es el Ungido de Dios.
Y por esa causa el nombre de Dios para
redención lo trajo el Señor en Su Primera Veni-
da, lo trajo el mensajero de la Edad mesiánica
dos mil años atrás.
Ahora, los demás profetas de las demás
Edades y dispensaciones pasadas, en alguna
parte ellos tenían algo del nombre de Dios. Por
ejemplo, el nombre Elías, ahí hay parte del
nombre de Dios. Y encontramos que los nom-
bres de estos profetas de Dios tenían un signifi-
cado relacionado al nombre de Dios. Por ejem-
plo, algunos significaban: ``Dios es poderoso,''
otros significaban: ``Dios es glorioso,'' y así por
el estilo.
Ahora, encontramos que Dios tiene un
nombre eterno. Ese nombre eterno de Dios, en
el Antiguo Testamento, todos quisieron
conocerlo. Encontramos que el mismo Moisés
LA EDAD MESIANICA 161
quiso conocer ese nombre. Vemos que Moisés
le preguntó a Dios por Su nombre. Exodo
capítulo 3, verso 13 en adelante: ``Dijo Moisés
a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de
Israel, y les digo: El Dios de vuestros padres me
ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren:
¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé?
Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE
SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO
SOY me ha enviado a vosotros.
Además dijo Dios a Moisés: Así dirás a los
hijos de Israel: Jehová, el Dios de vuestros
padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de
Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi
nombre para siempre; este es mi memorial por
todos los siglos.''
Vean ustedes, Moisés quiso conocer el
nombre de Dios, pero Dios le dio aquí el nom-
bre en esta forma.
En los originales está señalado que este
nombre son cinco consonantes, cinco letras
impronunciables. Y han tratado de conseguirle
la forma para poder pronunciar el nombre de
Dios. Pero ni los doctores en divinidad, en
teología, ni los Sumos Pontífices, que ha tenido
el pueblo hebreo han podido pronunciar ese
nombre.
 162 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Dicen que algunos profetas conocieron ese
nombre y supieron la pronunciación, pero no
dejaron registro. Si alguno lo supo, no dejó
registro de cómo pronunciar ese nombre de
Dios.
En Exodo capítulo 23, verso 20 al 23, Dios
habla aquí nuevamente de Su nombre, y dice:
``He aquí yo envío mi Angel delante de ti para
que te guarde en el camino, y te introduzca en
el lugar que yo he preparado.
Guárdate delante de él, y oye su voz; no le
seas rebelde; porque él no perdonará vuestra
rebelión, porque mi nombre está en él.''
¿Dónde estaba el nombre de Dios? En el
Angel que envió para llevar al pueblo a la tierra
prometida. El Angel de Jehová, el Angel de
Dios, vino con el nombre de Dios; por lo tanto
la manifestación de Dios estaba en y a través de
Su Angel para guiar al pueblo de Israel a la
tierra prometida.
Dice: ``Pero si en verdad oyeres su voz e
hicieres todo lo que yo te dijere (¿cómo le
comunicaba Dios al pueblo todo? A través de
Su Angel.), seré enemigo de tus enemigos, y
afligiré a los que te afligieren.
Porque mi Angel irá delante de ti, y te
llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del
LA EDAD MESIANICA 163
ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a
los cuales yo haré destruir.''
Ahora, vean ustedes para qué envió Su
Angel. A través de Su Angel estaba Dios mani-
festándose y guiando al pueblo hebreo hasta la
tierra prometida. Hacia la tierra prometida llevó
el Angel de Jehová al pueblo hebreo; y ahí
estaba el nombre de Dios.
En otra ocasión un hombre le preguntó al
Angel de Dios cuál era Su nombre. Y el Angel
le dice: ``¿por qué tú preguntas por mi nombre,
cuando mi nombre es oculto?'' Fue Manoa el
que le preguntó al Angel del Señor cuál era su
nombre, para cuando se cumpliera lo que él
dijo, entonces Manoa honrar al Angel del Señor,
y así darle gracias por la bendición que le trajo.
Pero el Angel le dijo: ``mi nombre es oculto.''
(Jueces 13:17-18).
El nombre eterno de Dios ha estado oculto
por todas estas dispensaciones pasadas, pero ese
nombre eterno de Dios está prometido para el
pueblo de Dios, para ser conocido por el pueblo
de Dios. Pero para eso se requiere que el pueblo
de Dios esté en una dispensación mesiánica, en
donde el nombre de Dios tiene que ser manifes-
tado.
Como fue manifestado el nombre de Dios
164 WILLIAM SOTO SANTIAGO
para redención, el nombre Jesús, en la Edad
mesiánica de la Primera Venida de Cristo, así
también el nombre eterno de Dios corresponde
para la Edad mesiánica de la Segunda Venida de
Cristo como León de la tribu de Judá, como Rey
de reyes y Señor de señores.
Hay personas que no saben que el Señor
Jesucristo tiene un nuevo nombre, pero El lo
dice aquí en Apocalipsis capítulo 3, verso 12,
cuando dice: ``Al que venciere, yo le haré
columna en el templo de mi Dios, y nunca más
saldrá de allí; y escribiré sobre él (¿qué escribi-
rá?) ...escribiré sobre él el nombre de mi Dios
(ese nombre eterno), y el nombre de la ciudad
de mi Dios (porque la ciudad de nuestro Dios,
que es la Jerusalén celestial o la nueva Jerusalén
es la que recibe el nombre eterno de Dios), la
nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de
mi Dios, y mi nombre nuevo.''
Ahora, encontramos que los hijos de Dios
tienen la promesa de recibir ese nombre eterno
de Dios. En Apocalipsis capítulo 22, verso 4,
dice... vamos a leer un poquito antes, hablando
de esa ciudad, la nueva Jerusalén, la cual estará
establecida en el planeta Tierra en el territorio
de Israel; allí en Jerusalén la terrenal nacerá ese
monte en donde será la ciudad nueva, la nueva
 LA EDAD MESIANICA 165
Jerusalén establecida. Dice: ``Y no habrá más
maldición; y el trono de Dios y del Cordero
estará en ella, y sus siervos le servirán, y verán
su rostro, y su nombre estará en sus frentes.''
Ahora, vean ustedes aquí en Apocalipsis
capítulo 14, verso 1, dice: ``Después miré, y he
aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de
Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que
tenían el nombre de él (el nombre del Cordero)
y el nombre de su Padre escrito en la frente.''
Cuando se habla de la frente se habla de la
mente; por lo tanto se habla del conocimiento
que tendrán los hijos de Dios del nombre eterno
de Dios.
Ahora, vean ustedes que aquí este grupo de
ciento cuarenta y cuatro mil, que son los siervos
de nuestro Dios, no los hijos, sino los siervos de
Dios, esos reciben ese nombre escrito en sus
frentes, ¿por qué? ¿y quién le escribe ese nom-
bre?
Aquí en Apocalipsis capítulo 7, verso 2,
dice: ``Vi también a otro ángel que subía de
donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo;
y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a
quienes se les había dado el poder de hacer
daño a la tierra y al mar,
diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al
166 WILLIAM SOTO SANTIAGO
mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sella-
do en sus frentes a los siervos de nuestro Dios.
Y oí el número de los sellados: ciento cua-
renta y cuatro mil sellados de todas las tribus
de los hijos de Israel.''
Ahora, vean ustedes que es este Angel del
Señor con el Sello del Dios vivo, que llama y
junta ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, y los
sella con el Sello del Dios vivo en sus frentes. Y
encontramos luego en Apocalipsis capítulo 14
esas personas ya selladas; y vemos en sus fren-
tes el nombre nuevo del Señor Jesucristo y el
nombre eterno de Dios, que es el mismo nom-
bre. Escrito en sus frentes, lo cual significa que
ellos tienen la revelación divina del nombre
eterno de Dios.
También el profeta Zacarías nos habla
acerca de las bendiciones divinas que vendrán.
Zacarías capítulo 14, verso 9, dice: ``Y Jehová
será rey sobre toda la tierra. En aquel día
Jehová será uno y uno su nombre.''
También el profeta Abdías y el profeta
Habacuc, hablan acerca de las bendiciones que
Dios tiene para ese glorioso Reino milenial.
Aquí dice el profeta Habacuc en el capítulo 2,
verso 14: ``Porque la tierra será llena del
conocimiento de la gloria de Jehová, como las
LA EDAD MESIANICA 167
aguas cubren el mar.'' Aquí tenemos esa bendi-
ción divina de la Tierra ser llena del conoci-
miento de Dios.
Esta promesa será realizada en la Edad
mesiánica. La Edad mesiánica producirá la
Dispensación del Reino, la Dispensación Mesiá-
nica, la Dispensación del Reino del Señor Jesu-
cristo, pues la Edad mesiánica pertenece a la
Dispensación del Reino.
Así que esta Edad mesiánica tendrá todas las
promesas mesiánicas para ser cumplidas en esa
Edad mesiánica; por lo tanto, bajo esa Edad
mesiánica se abrirá la Dispensación del Reino,
que es la Dispensación Mesiánica, en donde el
Señor Jesucristo recibe el Reino, recibe el Trono
de David y el Reino de David; y se sentará en
ese Trono y reinará sobre las doce tribus de
Israel, y ese Reino se extenderá sobre todas las
naciones.
Esa Edad mesiánica también contiene el
Mensaje mesiánico que es el Evangelio del
Reino que proclama las buenas nuevas, las
buenas noticias, del Reino de Dios, el cual
estará literalmente establecido muy pronto en la
Tierra como el glorioso Reino milenial del
Señor Jesucristo.
Ese Mensaje mesiánico también fue simboli-
 168 WILLIAM SOTO SANTIAGO
zado en la gran Voz de trompeta o trompeta
final, que antecede a la Resurrección de los
muertos en Cristo y a la Transformación de los
que estamos vivos.
Esa Edad mesiánica también contiene el
mensajero con el Mensaje mesiánico para ser el
mensajero de la Edad mesiánica, trayéndole al
pueblo todas las promesas mesiánicas para
nuestro regreso a la vida eterna.
Nuestro regreso se realiza en la Edad mesiá-
nica que es la Edad de la Piedra Angular, la
Edad de la Venida del Hijo del Hombre como
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y
Señor de señores en Su obra de reclamo de todo
lo que El redimió con Su Sangre preciosa.
Así que esa Edad mesiánica entonces tendrá
el mensajero de la Edad mesiánica, el cual está
señalado en la Escritura como el Angel que el
Señor Jesucristo prometió enviar para la Edad
mesiánica. El Señor Jesucristo dijo: ``Yo Jesús
he enviado mi ángel, para dar testimonio de
estas cosas en las iglesias.''
Y en la Edad mesiánica son dadas a conocer
todas las cosas que deben acontecer en esa Edad
mesiánica. Y el mensajero de la Edad mesiánica
con el Mensaje mesiánico da a conocer todas
esas cosas que deben acontecer. Por esa causa
LA EDAD MESIANICA 169
en Apocalipsis 22, verso 6, dice: ``Estas pala-
bras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios
de los espíritus de los profetas, ha enviado su
ángel, para manifestar a sus siervos las cosas
que deben suceder pronto.''
Así que el Señor Jesucristo envía Su Angel
mensajero, lo unge con Su Espíritu para la Edad
mesiánica. Y a través de Su Angel mensajero el
Señor Jesucristo se manifiesta, se revela, a Su
pueblo para traer todas las bendiciones de la
Edad mesiánica a todos los hijos de Dios, los
cuales son colocados en la Edad mesiánica, y
reciben el Mensaje mesiánico con todas las
promesas mesiánicas para recibir todas las
bendiciones mesiánicas que corresponden a la
Segunda Venida del Señor.
Y entre las bendiciones de la Edad
mesiánica está la gran Voz de trompeta o
trompeta final, que es el Mensaje mesiánico;
también está la Resurrección de los muertos en
Cristo, pues es una bendición de la Edad
mesiánica; también está la Transformación de
nosotros los que vivimos, pues esa es una
promesa de la Edad mesiánica, es una promesa
mesiánica, es una promesa que el Señor
Jesucristo cumplirá en la Edad mesiánica, en Su
Segunda Venida, conforme al orden de Su
170 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Segunda Venida.
Por esa causa también en la Edad mesiánica
el Señor le revela a todos Sus hijos todos los
pormenores de Su programa para la Edad
mesiánica, incluyendo el gran misterio
escondido bajo el Séptimo Sello, que es la
Segunda Venida del Señor en la Edad
mesiánica.
La causa por la cual la Primera Venida de
Cristo no fue entendida por el pueblo hebreo,
fue porque ellos no se movieron a la Edad
mesiánica, sino que se quedaron en una Edad
pasada y en una dispensación pasada.
Y cuando una persona se queda en el pasa-
do, no puede ver nunca el presente, no puede
ver siendo materializado todo lo que fue prome-
tido para ese tiempo. Y aunque con sus propios
ojos puedan ver las cosas que están
realizándose, están ciegos espiritualmente para
comprender, para entender, que esas son las
promesas divinas que fueron hechas en el
pasado, las cuales se están realizando.
Así que esa fue la causa por la cual no
pudieron ver que el Señor Jesucristo era el
Cristo, el Mesías, prometido para esa Edad
mesiánica.
Ahora, nosotros estamos viviendo en el fin
 LA EDAD MESIANICA 171
del tiempo, en donde la Edad mesiánica comen-
zaría, la Edad mesiánica de la Piedra Angular.
La Edad de la Piedra Angular es la Edad
mesiánica con el Mensaje mesiánico, con el
mensajero de la Edad mesiánica, que trae el
Mensaje mesiánico, y que trae en Su Mensaje
todo lo que nosotros necesitamos conocer para
recibir todas las bendiciones mesiánicas que
Dios ha prometido para este tiempo final.
Así que esta Edad mesiánica recibirá tam-
bién el nombre eterno del Señor; por esa causa
durante el Reino milenial el nombre eterno del
Señor será manifestado, conocido. Y toda la
enseñanza que corresponde para el glorioso
Reino milenial girará alrededor de la Segunda
Venida de Cristo con Sus Angeles, como León
de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor
de señores, con Su nombre eterno o nombre
nuevo que el Señor Jesucristo recibió cuando
ascendió al cielo.
Así que el Mensaje para el glorioso Reino
milenial es el Mensaje de la Edad mesiánica. Y
durante ese glorioso Reino milenial continuare-
mos con el mismo Mensaje que nosotros tene-
mos en este tiempo final, en la Edad mesiánica.
El Mensaje de la Edad de la Piedra Angular,
el Mensaje de la trompeta final, que tenemos en
172 WILLIAM SOTO SANTIAGO
este tiempo final, es el Mensaje mesiánico que
se estará enseñando en el glorioso Reino mile-
nial del Señor Jesucristo.
Así que el Mensaje que estamos recibiendo
es tan grande que la generación del glorioso
Reino milenial no recibirá otro Mensaje, sino el
mismo Mensaje que nosotros hemos recibido, el
que nosotros hemos conocido; en el cual son
dados a conocer por los siete truenos de Apoca-
lipsis todos los misterios escondidos bajo el
Séptimo Sello; revelados a nosotros acá en la
Edad mesiánica; y serán dados a conocer tam-
bién allá en el glorioso Reino milenial a todos
los que estarán viviendo allá. Y así se estará
dando a conocer, enseñando, la historia de lo
que El está haciendo en este tiempo final en la
Edad mesiánica.
Así que podemos ver que se está haciendo la
historia que se estará dando a conocer en el
Reino milenial, así como en la Edad mesiánica
de la Primera Venida de Cristo se hizo la histo-
ria que se dio a conocer en la Dispensación de la
Gracia por aproximadamente dos mil años.
El Mensaje del Evangelio de la Gracia dio a
conocer la Primera Venida de Cristo como
Cordero de Dios con el nombre de redención, el
nombre Jesús, para llevar a cabo la redención
LA EDAD MESIANICA 173
con Su muerte en la Cruz del Calvario.
Vean ustedes que el Mensaje de la Dispensa-
ción de la Gracia fue la historia de la Primera
Venida de Cristo y Su obra en la Edad mesiáni-
ca; que comenzó allí cuando Juan el Bautista
bautizó a Jesús y terminó cuando el Señor
Jesucristo fue rechazado por el pueblo hebreo,
fue crucificado, murió, y luego resucitó y ascen-
dió al cielo. Y esa es la historia que durante dos
mil años aproximadamente se ha estado dando a
conocer entre los gentiles y entre algunos he-
breos que han creído la historia de la Primera
Venida de Cristo en la Edad mesiánica.
La Edad mesiánica para el pueblo hebreo
nuevamente continuará en la segunda parte de la
semana número setenta. Comenzará esa segunda
parte para el pueblo hebreo en el momento
asignado por Dios, y entonces la Edad
mesiánica pasará al pueblo hebreo. Se unirán
esas dos etapas mesiánicas, la de la Primera
Venida y de la Segunda Venida, para el pueblo
hebreo. Perdieron la primera parte de la semana
número setenta, pero no perderán la segunda
parte. Tienen promesas divinas para la Edad
mesiánica.
Por esa causa el pueblo hebreo nunca ha
querido recibir el Mensaje del Evangelio de la
 174 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Gracia, porque ellos perdieron esa Edad
mesiánica de la Primera Venida de Cristo; por
lo tanto todos los que han tratado de convertir el
pueblo hebreo al cristianismo han fallado;
solamente Dios ha tenido algunos hebreos que
han creído la Palabra, y han recibido el Mensaje
como individuos y no como nación. Pero Dios
con el pueblo hebreo trata con ellos como
nación, por lo tanto ellos como nación perdieron
la primera parte de la semana número setenta,
por lo tanto perdieron la Edad mesiánica de la
Primera Venida de Cristo como Cordero de
Dios; pero recibirán la segunda parte de la
semana número setenta, la recibirán en la Edad
mesiánica, en donde lo recibirán como León de
la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de
señores.
Por esa causa podemos ver que nadie podrá
convertir el pueblo hebreo al cristianismo,
porque la promesa es que ellos serán
convertidos en la Edad mesiánica, serán
convertidos a la Palabra, al Mensaje que les
enseñará la Segunda Venida de Cristo como
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y
Señor de señores.
Así que al pueblo hebreo no hay quien los
convenza o los engañe haciéndoles recibir otro
LA EDAD MESIANICA 175
mensaje diferente al que Dios le ha prometido a
ellos para la Edad mesiánica. Y nadie podrá
convertir al pueblo hebreo a Dios, excepto el
Angel del Señor Jesucristo, el cual viene con el
Mensaje mesiánico de la Segunda Venida de
Cristo como León de la tribu de Judá, como Rey
de reyes y Señor de señores, en Su obra de
reclamo; en donde reclama todo lo que El
redimió con Su Sangre preciosa; por lo tanto
reclama a todos los escogidos, reclama también
su derecho al Reino de Israel, al Trono de
David.
El reclama todo aquello a lo cual El tiene
derecho, porque El es el Redentor, y con Su
Sangre El pagó el precio de la redención; por lo
tanto todo le pertenece a El; pero no lo había
reclamado. Pero en este tiempo final, en la Edad
mesiánica, se efectúa el reclamo de todo lo que
El redimió con Su Sangre. Y ahí estamos noso-
tros también en esa obra de reclamo, en donde
El reclama para nosotros todo lo que se perdió
en la caída, reclama para nosotros la vida eterna,
reclama para nosotros un cuerpo eterno, reclama
para nosotros el Reino, todo lo reclama, porque
en la Edad mesiánica, la Edad del Reino, El está
como León reclamador de la tribu de Judá, y
está como Rey de reyes y Señor de señores.
176 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Por eso en Apocalipsis capítulo 19 El viene
sobre un caballo blanco, dice: ``Entonces vi el
cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el
que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y
con justicia juzga y pelea.
Sus ojos eran como llama de fuego, y había
en su cabeza muchas diademas; y tenía un
nombre escrito que ninguno conocía sino él
mismo.''
No es el nombre Jesús, porque el nombre
Jesús todos lo han conocido, por dos mil años
aproximadamente. Este es el nombre eterno de
Dios.
``Estaba vestido de una ropa teñida en
sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.''
Ahora, ``Verbo'' no es nombre, pero el
Verbo tiene un nombre. El Verbo cuando se
hizo carne dos mil años atrás fue conocido por
el nombre de Jesús. Jesús de Nazaret fue
conocido en toda la tierra de Israel, porque ese
fue el nombre del Señor en Su Primera Venida,
como redentor.
Ahora, sigue diciendo: ``Y los ejércitos
celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y
limpio, le seguían en caballos blancos.
De su boca sale una espada aguda (esa es la
Palabra, el Mensaje, los siete truenos de Apoca-
 LA EDAD MESIANICA 177
lipsis capítulo 10, esa es la Voz de los siete
truenos, las voces de los siete truenos, es el
Mensaje del Evangelio del Reino, es el Mensaje
de la trompeta final o gran Voz de trompeta)...''
``De su boca sale una espada aguda, para
herir con ella a las naciones, y él las regirá con
vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del
furor y de la ira del Dios Todopoderoso.''
El trae el juicio divino sobre las naciones
también, porque es el día de la ira del Cordero,
el cual se convierte en el León de la tribu de
Judá. Sigue diciendo: ``Y en su vestidura y en su
muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y
SEÑOR DE SEÑORES.''
Pero ``Rey de reyes y Señor de señores''
tampoco es un nombre, no es un nombre de una
persona, es más bien un título. Pero ahí tiene el
nombre eterno de Dios, el cual ninguno conoce,
sino El mismo. Así que ese es el nombre eterno
de Dios.
Y durante el glorioso Reino milenial todos
conocerán al Señor y conocerán Su nombre, lo
tendrán en sus mentes, en sus frentes, conforme
a la promesa divina.
Pero para todos los hijos de Dios en la Edad
mesiánica tenemos la promesa de recibir la
revelación de los siete truenos de Apocalipsis,
178 WILLIAM SOTO SANTIAGO
que contienen todos los misterios de Dios para
la Edad mesiánica.
Así que bajo la Edad mesiánica en el fin del
tiempo están todas las bendiciones de Dios, y
está ahí en la Edad mesiánica la fe para ser
transformados y raptados, y la fe para los muer-
tos en Cristo ser resucitados.
Así que encontramos que en la Edad mesiá-
nica en el fin del tiempo y en la Dispensación
Mesiánica del glorioso Reino milenial, todos
conocerán el programa divino y todos lo verán
como León de la tribu de Judá, como Rey de
reyes y Señor de señores, conforme al orden de
Su Venida.
Por lo tanto todos en la Edad mesiánica
colocarán su fe y su esperanza en las promesas
divinas que El ha hecho para la Edad mesiánica,
en la obra que El hace como León de la tribu de
Judá, como Rey de reyes y Señor de señores.
En Su obra como León de la tribu de Judá,
como Rey de reyes y Señor de señores, está la
fe para ser transformados y raptados, y está
también la fe para pasar al glorioso Reino
milenial, tanto nosotros, como los 144 mil
hebreos.
Así que todo lo que se perdió en la caída
será restaurado a los hijos de Dios en la labor
LA EDAD MESIANICA 179
que El hace de reclamo como León de la tribu
de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores.
Y todo eso El lo manifiesta, El lo da a conocer
en la Edad mesiánica por medio de Su Angel
mensajero.
Por lo tanto en la Edad mesiánica tendre-
mos la Edad ungida con el Espíritu de Dios,
tendremos el pueblo ungido con el Espíritu
de Dios, tendremos el mensajero ungido con
el Espíritu de Dios, tendremos todo el
Mensaje ungido por el Espíritu de Dios;
porque es la Edad mesiánica con la unción de
Cristo, con la unción de Dios, del Espíritu de
Dios, para cumplir en esa Edad mesiánica
toda promesa mesiánica.
Así que todas las promesas mesiánicas para
el fin del tiempo serán cumplidas en la Edad
mesiánica. De esa Edad nosotros no nos
moveremos, en esa Edad recibiremos todo lo
que Dios ha prometido para nosotros en el fin
del tiempo, para nuestra transformación y para
nuestro traslado o rapto y para el glorioso Reino
milenial. Esa es la Edad que tiene todas las
bendiciones divinas para la Segunda Venida de
Cristo.
Así que yo le doy gracias a Dios por la Edad
mesiánica, la Edad de la Piedra Angular, que ha
 180 WILLIAM SOTO SANTIAGO
comenzado, en la cual El nos ha colocado para
darnos todas las bendiciones que tiene para
nosotros en el fin del tiempo.
``LA EDAD MESIANICA.'' Esa es nuestra
Edad, por esa causa estamos recibiendo las
bendiciones prometidas para el fin del siglo, y
también recibiremos las que corresponden para
el Milenio.
Estamos esperando la transformación de
nuestros cuerpos, porque esa es una promesa
para la Edad mesiánica y para todos los que
estén en la Edad mesiánica. Estamos esperando
también a los muertos en Cristo que resuciten,
porque la promesa es que ellos se levantarán en
el fin del tiempo, y en el fin del tiempo es que
se manifiesta la Edad mesiánica.
Por eso fue prometido que los muertos en
Cristo vienen con El, vienen a la Edad mesiáni-
ca, que es la Edad de la Segunda Venida de
Cristo como León de la tribu de Judá, como Rey
de reyes y Señor de señores.
Esta es la única Edad vigente, porque ya las
demás Edades de la Iglesia gentil han
terminado; así que no hay promesas para esas
Edades y para las personas que viven en esas
Edades continuar hacia adelante, porque ya sus
Edades terminaron.
LA EDAD MESIANICA 181
Y si terminaron ellos en esas Edades, y con
esas Edades no pueden pasar al glorioso Reino
milenial y establecer allí esas Edades, o estable-
cer allí alguna secta religiosa que está en una
Edad que ya pasó... por eso usted encuentra en
la Biblia que para el glorioso Reino milenial y
para la eternidad no aparecen ahí religiones o
sectas religiosas, sino que lo que aparece ahí es
el conocimiento del programa divino; porque
dice que todos conocerán a Dios. También dice:
``Y en aquel día Jehová será uno y uno su
nombre.''
No habrá diferencias religiosas, sectarias,
sino que todos tendrán la misma enseñanza, el
mismo conocimiento. Y todos creerán en la
misma forma; por lo tanto no habrá sectas
religiosas; porque la causa del sectarismo es la
falta del conocimiento pleno de Dios y Su
programa.
Al conocer todos a Dios y Su programa y Su
nombre, nadie podrá tirar para algún lado y
decir: ``Yo entiendo que esto es así.'' Porque lo
mismo que entienda uno lo entenderá el otro.
Será entonces un solo cuerpo de creyentes.
Por eso en Apocalipsis cuando se habla del
Milenio o de la eternidad no se habla de ningún
nombre de sectas religiosas o de alguna religión,
182 WILLIAM SOTO SANTIAGO
como que será establecida en el Reino milenial;
porque todas las religiones y sectas religiosas
llegarán a su final en la gran tribulación, y esos
nombres sectarios desaparecerán; por eso no los
encuentra usted en el Reino milenial ni tampoco
en la eternidad.
Así que el glorioso Reino milenial será un
Reino lleno del conocimiento de Dios. Esa será
la enseñanza que ocupará el primer lugar, será
la enseñanza divina; y con esa enseñanza el ser
humano recibirá todas las bendiciones de Dios.
Y todo esto para la Edad mesiánica que produci-
rá la Dispensación del Reino del Señor Jesucris-
to en ese tiempo de mil años.
Así que para pasar al glorioso Reino
milenial se requiere entrar en la Edad mesiánica,
porque la Edad mesiánica contiene el Milenio y
contiene también la eternidad. Todo está en la
Edad mesiánica, en donde está la Palabra; y de
la Palabra saldrá toda bendición prometida.
Toda bendición está en la Palabra, por lo
tanto esa Palabra se materializará en el cumpli-
miento de esas bendiciones que han sido habla-
das.
Así que hacia adelante en la Edad
mesiánica, que es la que tiene la promesa de
recibir a los muertos en Cristo que han de
 LA EDAD MESIANICA 183
resucitar, y que tiene la promesa de la
transformación de los escogidos que estamos en
la Edad mesiánica. De ahí yo no me moveré.
El que quiera tomar del agua de la vida
eterna, del Mensaje del Evangelio del Reino,
que venga a la Edad mesiánica y tome; pero de
ahí yo no me saldré. El que se salga de ahí
pierde las bendiciones de la Edad mesiánica.
Así que no saldremos de la Edad mesiánica
a donde Dios nos ha colocado con el Mensaje
mesiánico que nos enseña el gran misterio de la
Segunda Venida de Cristo como León de la
tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de
señores. Todo esto en la Edad mesiánica, donde
están todas las bendiciones para nosotros.
Así que estando en la Edad mesiánica noso-
tros estamos tranquilos, sabiendo que toda
bendición que Dios ha prometido para el fin del
tiempo, la cumplirá en la Edad mesiánica, para
todos los que han recibido y para los que recibi-
rán (que no han recibido todavía pero que
recibirán) el Mensaje mesiánico de la Segunda
Venida de Cristo como León de la tribu de Judá,
como Rey de reyes y Señor de señores, en Su
obra de reclamo.
Todas esas bendiciones prometidas ahí, son
nuestras; porque nosotros estamos en la Edad
184 WILLIAM SOTO SANTIAGO
mesiánica, la Edad más grande de todas las
Edades.
Que Dios nos continúe bendiciendo con
todas las bendiciones de la Edad mesiánica. Esa
es nuestra Edad. Por eso también se le llama la
Edad de oro, la Edad de la Venida del Hijo del
Hombre, la Edad de la Piedra Angular, y así por
el estilo. Nuestra Edad tiene un sinnúmero de
nombres por los cuales puede ser llamada, y
todos señalan lo más alto, lo más grande, que
una Edad puede significar.
Esta es nuestra Edad, es la Edad de la Veni-
da del Hijo del Hombre, es la Edad de los
escogidos, de los primogénitos escritos en el
Libro de la Vida del Cordero en el cielo, es la
Edad del Séptimo Sello, es la Edad de los siete
truenos de Apocalipsis capítulo 10, es la Edad
del Angel fuerte que desciende del cielo, es la
Edad del Angel del Señor Jesucristo enviado
para dar testimonio de estas cosas a todos los
seres humanos, a todas las iglesias, a todas las
personas. Esta es la Edad mesiánica.
Que Dios nos continúe bendiciendo con
todas las bendiciones de la Edad mesiánica, y
que pronto recibamos todos la bendición de la
transformación de nuestros cuerpos.
Que Dios nos bendiga, que Dios nos guarde.
LA EDAD MESIANICA 185
Muchas gracias por vuestra amable atención a
cada uno de ustedes aquí presentes, y también a
los que están a través de la línea telefónica en
los diferentes países.
Y será hasta la tarde, Dios mediante, para
continuar dando a conocer las bendiciones que
Dios tiene en la Edad mesiánica.
También antes de la conferencia de la tarde
estaremos transmitiendo a Puerto Rico para la
reunión de los hombres y mujeres de negocios
del Evangelio del Reino, los cuales estarán
reunidos en esta tarde; y estaremos nuestro
hermano y amigo Miguel Bermúdez Marín y yo
saludándolos a todos a través de la línea telefó-
nica, a todos los hombres y mujeres del Evange-
lio del Reino.
Que Dios nos continúe bendiciendo a todos,
que Dios nos guarde, y pasen todos muy buenas
tardes. Con nosotros nuevamente Miguel
Bermúdez Marín.
``LA EDAD MESIANICA.''
 POR LA FE SE
HEREDAN LAS
PROMESAS DE DIOS
Por William Soto Santiago
9 de febrero de 1992 (P.M.)
Lo Prado, Chile

Muy buenas noches, amados amigos y

hermanos presentes aquí en Lo Prado, Chile, y
también a cada uno de ustedes a través de la
línea telefónica en Puerto Rico y en todos los
lugares de la América Latina y del Caribe, y
también de Norteamérica y el Canadá.
El apóstol San Pablo en Hebreos capítulo 6,
verso 12, dice: ``A fin de que no os hagáis
perezosos, sino imitadores de aquellos que por
la fe y la paciencia heredan las promesas (las
promesas de Dios).'' Porque las promesas de
Dios se heredan por la fe.
``POR LA FE SE HEREDAN LAS PRO-
MESAS DE DIOS.''
Encontramos los héroes de la fe en el libro a
los Hebreos, los cuales por la fe llevaron a cabo
 POR LA FE SE HEREDAN LAS
PROMESAS... 189
la obra correspondiente para su tiempo, y
recibieron las promesas, las bendiciones corres-
pondientes para su tiempo.
La Escritura, hablando de Abel, dice: ``Por
la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrifi-
cio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de
que era justo, dando Dios testimonio de sus
ofrendas; y muerto, aún habla por ella.'' (Heb.
11:4).
Ahora, vean ustedes, Abel por la fe ofreció
ese sacrificio. Abel por esa revelación que tenía
del programa divino correspondiente para ese
tiempo, sabiendo que sin sangre no hay
remisión de pecados, ofreció a Dios un cordero
y agradó a Dios por la fe.
También encontramos a Enoc, dice: ``Por la
fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no
fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes
que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber
agradado a Dios.'' (Heb 11:5).
Ahora, vean que el rapto o traslación de
Enoc dice que fue por fe; porque por la fe se
heredan las promesas de Dios.
``Pero sin fe es imposible agradar a Dios;
porque es necesario que el que se acerca a Dios
crea que le hay, y que es galardonador de los
190 WILLIAM SOTO SANTIAGO
que le buscan.'' (Heb. 11:6).
También dice: ``Por la fe Noé, cuando fue
advertido por Dios acerca de cosas que aún no
se veían, con temor preparó el arca en que su
casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo,
y fue hecho heredero de la justicia que viene
por la fe.'' (Heb 11:7).
Vean ustedes lo importante que es la fe. El
apóstol San Pablo, hablándonos de la fe, en
Romanos capítulo 10, verso 17, dice: ``Así que
la fe es por el oir, y el oir, por la Palabra de
Dios.''
Así que la fe, que es revelación, viene por
el oir la Palabra, el Mensaje que corresponde
para el tiempo en que uno vive, y entonces la
persona conoce el programa divino y se mueve
en fe en ese programa divino, y trabaja en fe y
recibe las promesas que corresponden para ese
tiempo por la fe.
Enoc por la fe fue raptado, traspuesto al
cielo. Y Enoc es tipo y figura de los escogidos
del fin del tiempo que por la fe que reciben a
través del oir de la Palabra de Dios, de los siete
truenos de Apocalipsis capítulo 10, por esa fe
que reciben por esos truenos, nosotros seremos
transformados y raptados para no ver muerte
como aconteció con Enoc y con Elías.
POR LA FE SE HEREDAN LAS
PROMESAS... 191
Elías también, dice la Escritura que por la fe
él fue raptado, trasladado, arrebatado, conforme
a lo que Dios le dijo.
Encontramos que los hijos de Dios han
heredado las promesas divinas por la fe. Y
por la fe cada uno de nosotros en este tiempo
final heredaremos todas las promesas que
Dios ha hecho para este tiempo final, y tam-
bién para el glorioso Reino milenial.
Así que damos gracias a Dios por esa fe
producida por los siete truenos de Apocalipsis
capítulo 10, esa fe que ha venido por el oir de
esa Palabra de Dios para este tiempo final;
porque con y por esa fe heredaremos todas las
promesas de Dios para este tiempo, para el
Milenio, y también para la eternidad; porque
``POR LA FE SE HEREDAN LAS PROME-
SAS DE DIOS.''
Muchas gracias por vuestra amable atención,
para cada uno de ustedes aquí presentes, y
también los que están a través de la línea telefó-
nica.
Que Dios les bendiga grandemente a todos.
Y será hasta una próxima ocasión en que estaré
nuevamente con ustedes aquí en Chile, para
continuar dándole la Palabra de Dios para este
 192 WILLIAM SOTO SANTIAGO

tiempo final.
``POR LA FE SE HEREDAN LAS PRO-
MESAS DE DIOS.''