Inodoro suspendido: Ventajas y desventajas

El baño es uno de los espacios más importantes del hogar, por lo que elegir cada uno de sus
elementos es una decisión difícil. Si estás pensando en transformar tu baño, debes saber que el
inodoro es la pieza más fundamental. El inodoro debe ser cómodo y combinar con el estilo del
baño. Así que la pregunta es ¿inodoro al suelo o suspendido? Lo más común es al suelo, sin
embargo, el inodoro suspendido ha ganado popularidad en los últimos años. Aquí te
presentamos algunas ventajas e inconvenientes del inodoro suspendido.

Ventajas
1) Mayor espacio
Si escoges instalar un inodoro suspendido, el mecanismo quedará detrás de la pared, de esta
manera, el inodoro generará una sensación de amplitud en la habitación ya que ocupará menos
espacio. Además del espacio, también conseguimos mayor comodidad y amplitud visual.

2) Diseño innovador
La instalación y su poco tamaño hacen que tengan una estética atractiva. Este estilo de inodoro
combina perfectamente con cualquier tipo de baño, sobre todo en los baños minimalistas y
modernos.

3) Fácil de limpiar
Además de la estética que ofrecen, los inodoros suspendidos son también muy fáciles de
limpiar. De igual manera, al no presentar un orificio entre el inodoro y la pared y estar
suspendidos en el suelo, es mucho más sencillo limpiar el cuarto de baño.
Inconvenientes
1) Espacio en la pared
Para colocar un inodoro suspendido, debes asegurarte de tener espacio en la pared para colocar
la cisterna. Si es posible, entonces elegir un inodoro suspendido es la mejor opción.

2) Precio más altos

Los inodoros suspendidos tienen un precio mayor en comparación con los convencionales. Así
que debes tener en cuenta cuánto es lo que puedes invertir para uno.

Si bien los inodoros suspendidos tienen una gran popularidad y brindan una estética atrayente,
también debes pensar tanto en las ventajas como inconvenientes, todo depende de ti.