Está en la página 1de 1

Las características que nosotros tenemos en común al haber vivido en un ambiente de alcoholismo

familiar, o una familia disfuncional.

1.- Nos aislamos y le tememos a la gente y figuras de 7.- Nos convertimos en adictos a las emociones y aventuras
autoridad. fuertes.

2.- Buscamos la aprobación de otras gentes y perdimos nuestra 8.- Confundimos amor con compasión y tendemos a “amar” a
identidad en el proceso. personas que compadecemos y queremos rescatar.

Nos asusta la gente enojada y cualquier crítica personal. 9.- Como consecuencia de nuestras infancias traumáticas,
reprimimos sentimientos y perdimos la habilidad de sentirlos y
3.- Nos volvemos alcohólicos, nos casamos con ellos o expresarlos. Esto duele mucho (Negación).
buscamos una personalidad compulsiva, como un trabajador
compulsivo, para satisfacer nuestras necesidades de abandono. 10.- Somos personalidades dependientes a quienes aterroriza la
idea de ser abandonados. Haríamos cualquier cosa para
4.- Vivimos la vida con la perspectiva de encontrar y ayudar mantener una relación con tal de no volver a vivir el dolor del
víctimas y somos atraídos por esa debilidad en nuestras abandono. Estamos condicionados a este tipo de relaciones.
relaciones de amor y amistad.
11.- Nos juzgamos severamente y nuestra autoestima es tan
5.- Hemos desarrollado un exagerado sentido de baja que algunas veces lo compensamos tratando de aparentar
responsabilidad y es más fácil preocuparnos por los demás que superioridad.
por nosotros mismos. Esto no nos permite vernos a nosotros
mismos. 12.- El alcoholismo es una enfermedad familiar y nosotros nos
convertimos en para-alcohólicos, o sea que tomamos las
6.- Nos sentimos culpables cuando defendemos nuestros características de la enfermedad aun cuando nosotros no
derechos, por lo tanto, nos dejamos de los demás. consumimos alcohol.

13.- Los para-alcohólicos somos reactores antes que actores.

También podría gustarte