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Facultad de Economía, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)

LA CRÍTICA DEL SOCIALISMO CENTRALMENTE PLANIFICADO. EL APORTE DE JANOS


KORNAI
Author(s): Alfredo Erquizio Espinal
Source: Investigación Económica, Vol. 50, No. 195 (enero-marzo 1991), pp. 87-123
Published by: Facultad de Economía, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
Stable URL: http://www.jstor.org/stable/42779022
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Investigación Económica 195 , enero-marzo de 1991 , pp. 87-123

LA CRÍTICA DEL SOCIALISMO CENTRALMENTE


PLANIFICADO. EL APORTE DE JANOS KORNAI

Alfredo Erquizio Espinal*

Introducción

El propósito de este ensayo es presentar sintéticamente las característi


sistémicas del socialismo centralmente planificado. El aporte teóri
que utilizaremos es principalmente el que ofrece el economista Ja
Kornai y en general el de la denominada escuela húngara. Dicho
foque tiene un gran alcance teórico y posee un fuerte contenido crí
respecto a ese tipo de economías. Supera así los enfoques empír
descriptivos de por ejemplo Alee Nove, y los contenidos apologéti
que ofrecen los manuales soviéticos sobre economía del socialismo.1
También consideramos que la teoría de la escuela húngara es p
tinente para el análisis de los problemas económicos actuales del soc
lismo puesto que se concluye de sus planteamientos la necesidad
reformas económicas en el socialismo con una clara orientación hacia
el socialismo de mercado que, como sabemos, constituyó el diseño final
al que llegó el proceso húngaro en los últimos años de la década pasada
y parece ser también el rumbo que está tomando actualmente la re-
forma soviética. La que es, dicho sea de paso, la única vigente bajo
conducción de un partido comunista, puesto que en los otros países de

* Dep to. de Economía, Universidad de Sonora. El texto es una versión del primer capítulo
del libro Socialismo: teoría 3 crisis y reformas que se publicará en breve, y es parte de una
investigación que auspicia la Universidad de Sonora.
1 Alee Nove, El sistema económico soviético. Siglo xxi editores, 1982.
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Europa del Este, salvo Bulgaria, las reform


son más bien las de la restauración capital
Mostraremos que las tres principales car
funcionamiento de las economías socialista
son la restricción por los recursos, la repr
y la economía de succión, y que dadas ésta
es posible pero paulatinamente va decrecie
camiento y la crisis. Puesto que la fase ex
ineficiencia y las dificultades para generar
nológico, cuando se agota, el único modo d
tensiva es realizar reformas económicas q
mico necesario para cambiar las regular
agentes: autoridad central y empresas est
características sistémicas: restricción po
presión, aunque dichas reformas tiendan a
en términos de dilemas entre la eficiencia

I. Descripción inicial de las economías centralmente


PLANIFICADAS

A partir de la descripción que nos ofrece el economista polaco


zimerz Brus, podemos iniciar nuestro análisis del funcionamie
la economía socialista.
Partimos de un sistema económico en el que hay tres tipos de agentes :
Una autoridad central.
Un conjunto de unidades productoras de bienes y servicios, tanto
de producción (materiales y equipos) como de consumo, que son de
propiedad estatal.
Un conjunto de individuos que son a la vez consumidores y trabaja-
dores. Un subconjunto de estos individuos que desempeña tareas de
dirección económica (planificadores a nivel de autoridad central) o
hacen gestión económica (administradores o gerentes a nivel de uni-
dad productiva).
El sistema económico debe funcionar de tal manera que se formen
proporciones de producción, distribución e intercambio, que acoren :
Las exigencias de un rápido crecimiento a largo plazo.
La obtención de una óptima asignación de recursos, que es la que
genera una tasa de inversión que garantiza el crecimiento a largo pía-

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La crítica del socialismo centralmente planificado 89

zo, a la vez que satisface crecientemente las necesid


blación.2
En otras palabras, el problema fundamental de las ec
listas es la configuración de un mecanismo económico
adecuada combinación entre el crecimiento del product
Para ello es preciso definir las condiciones en que se
tipos de decisiones por parte de los tres agentes de
cialista :
Decisiones macroeconómicas fundamentales (ritmo y
neral de desarrollo, distribución fundamental del ingreso
tera). Éstas, normalmente serán tomadas por la autori
Decisiones referentes a la estructura de consumos individuales dado
el ingreso, elección de la profesión y el lugar de trabajo. Éstas, nor-
malmente corresponderán a los consumidores-trabajadores.
Decisiones corrientes, que conciernen al manejo empresarial: sur-
tido de la producción, orientación de las ventas, métodos de produc-
ción, gastos de trabajo vivo y objetivado, fuentes de suministro, inver-
siones menores, formas particulares de retribución de los trabajadores.
Según Brus, cualquiera que sea el mecanismo utilizado para la toma
de decisiones, las de tipo macroeconómico se toman a nivel centrali-
zado y las de consumo y elección del empleo las toman los individuos
mediante el mercado y por tanto descentralizadamente.
El problema reside en cómo tomar las decisiones corrientes; si se
toman a nivel central, estamos en un modelo centralizado de socialismo
o economía centralmente planificada, o como dice Kornai : "la forma
clásica de economía socialista". Si se toman a partir de las unidades
productivas y en el marco de las relaciones de mercado, estamos en
un modelo descentralizado de socialismo con utilización del mecanismo
tic mercado. La gráfica 1 puede ser una síntesis de modelo centralizado.
Aparentemente un mecanismo económico como el descrito, basado
en la asignación central de los recursos de inversión y de operación
corriente, aseguraría, mediante el cumplimiento estricto de las metas
obligatorias por parte de las empresas, que se diera un crecimiento
rápido y armonioso del aparato productivo a la vez que la satisfacción
generalizada de las necesidades de la población. Sin embargo, no es
necesariamente así.

2 Wlodzimerz Brus. El funcionamiento de la economía socialista. Oikos Tau. Barcelona


1978, p. 161.

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LA CRÌI ICA DEL SOCIALISMO CENTRALMENTE PLANIFICADO 91

Y es que el sistema económico socialista enfrenta contradicciones


que pueden ser descritas en los tres tipos siguientes:
Las que provienen de las reminiscencias del pasado capitalista y de
la existencia del capitalismo externo.
Las que son resultado del eterno conflicto entre el hombre - con sus
crecientes y diferenciadas necesidades - y los recursos escasos que la
naturaleza brinda.
Las que genera el socialismo por sí mismo.3
Las dos primeras causas no pueden ser ignoradas en un análisis con-
creto del funcionamiento de una economía socialista; pero mientras
una es externa, la otra es de carácter general y actúa en cualquier sis-
tema. Lo importante es explicar cómo el socialismo centralmente pla-
nificado genera sus propias contradicciones internas y, a partir de ellas,
un funcionamiento económico con características sistémicas particula-
res que examinaremos a continuación.

II. Las características sistémicas del funcionamiento


DE LAS ECONOMÍAS SOCIALISTAS CENTRALMENTE PLANIFICADAS

En el sistema descrito en la gráfica 1 notamos que existen tres tipos


de agentes: la autoridad central (los planificadores) ; las empresas
(los gerentes), y la población (consumidores-trabajadores). Estos agen-
tes económicos toman un conjunto de decisiones cuya resultante es la
forma en que funciona la economía. Entre los agentes hay relaciones
diversas: subordinación, coordinación, negociación, compra y venta,
etcétera. Los agentes muestran además, determinadas regularidades
conductuales. La explicación a nivel profundo de las características
sistémicas de funcionamiento de la economía socialista centralmente
planificada debe buscarse precisamente en las relaciones instituciona-
les y en las regularidades conductuales que estas relaciones fomentan
en quienes toman las decisiones en diversos niveles: planificadores, ge-
rentes, consumidores- traba j adores.4
La tarea de una teoría económica del socialismo es formular el ca-
rácter de esas "regularidades conductuales", articularlas de tal manera
3 Janos Kornai, Contradictions and Dilemmas. Studies on the Socialist Economy, mit
Press, Mass. 1986, p. 3.
4 Janos Kornai, Economics of Shortage. North Holland, Amsteraan, 1986, p. 559.

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que se pueda construir un sistema teórico ho


tir de allí análisis que puedan ser verificado
Tal es el proyecto teórico de Kornai, en su
libros principales son:
Antiequilibrium, en el que nos propone lo
gicos generales para el examen teórico de s
una perspectiva comparativa/'
Economics of Shortage, que constituye un
de la economía socialista.7
Growth, Shortage and Efficiency, en el que desarrolla una teoría
macrodinàmica de la economía socialista.8
En lo que sigue vamos a sintetizar aspectos del marco teórico que
este autor nos propone para estudiar los problemas del socialismo. Uti-
lizaremos los textos mencionados y los diversos artículos publicados en
revistas especializadas.
Para hacerlo, el orden secuencial de nuestros razonamientos es el
siguiente. Partiremos de la regularidad conductual que es común a
planificadores y gerentes, cual es el impulso a la expansión que al
actuar en un marco de ausencia de autorrestricciones financieras de-
bido a la actitud paternalista del Estado y a la consecuente restricción
presupuestaria suave para las empresas, tiende a generar y reproducir
insuficiencias y revela que la economía socialista es una economía res-
tringida por los recursos más que por la demanda, como lo es la capi-
talista.
Luego examinaremos las relaciones entre empresas en tanto éstas
actúan como oferentes y demandantes de recursos productivos, y vere-
mos cómo los ajustes en el mercado socialista no se dan exentos de
fricciones, y cómo el estado de mercado socialista tiende a reproducir
la insuficiencia, aunque disminuya la fricción, por causa del efecto de
succión que vacía persistentemente los inventarios.
Seguidamente presentaremos una visión macrodinàmica del funcio-
namiento del sistema, en el que las características sistémicas explicadas
antes se relacionan y producen un crecimiento de carácter extensivo
que enfrentado a largo plazo a una restricción de recursos: fuerza de
5 Janos Kornai, о р. rif4 p. 2.
ь Janos Kornai, Antiequilihrium. North Holland, Amsterdan, 1971.
7 Janos Kornai, op. cit.
8 Janos Kornai. Growth, Shortage and Efficiency. A Macrodynamic Model »f the Socialist
Economy. Basil Blackwell. Oxford. 1982.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 93

trabajo, materiales, energía, y en ausencia de un mecanism


eficiente de generación de innovación tecnológica, entra
de estancamiento y crisis, puesto que la persistencia de m
succión y la agudización de las fluctuaciones de la inversi
desarrollo tecnológico y no se puede transitar a una fase d
to intensivo; o sea, eficiente, productivo, tecnologizado y
respecto al exterior. De donde se desprenderá la necesidad
jornias económicas que modifiquen las características s
mencionadas.

II. 1. Impulso a la expansión y ausencia de autorrestricciones financieras

II. 1.1. El impulso a la expansión es una regularidad conductual


común a planificadores y gerentes

La situación de atraso relativo, el asedio exterior, pero también las


necesidades particulares de poder y prestigio que se asocian al creci-
miento de la esfera de influencia consecuente con el aumento del ta-
maño relativo de las actividades a cargo de la autoridad central en
sus múltiples niveles, hace que éstas estén permanentemente compro-
metidas a lograr las más altas tasas de crecimiento, impulsadas a ob-
tener las más altas metas cuantitativas de producción y los más altos
niveles de inversión que permitan más producción en el futuro.
Los gerentes de las empresas, por su parte, también tienen motivación
para crecer, puesto que sus ingresos y la evaluación de sus desempeños
depende de que cumplan o sobrecumplan las metas que finalmente se
asignan en el plan nacional. Ellos ven con interés que el tamaño de las
empresas a su cargo crezca, puesto que ello también les confiere pres-
tigio y poder y mejores posibilidades de cumplir y sobrecumplir los
planes.9
Ambos, planificadores y gerentes, están motivados por una carac-
terística común a los seres humanos: la autoidentificación con sus ins-
tituciones y organizaciones.
El impulso a crecer, la autoidentificación de los tomadores de deci-
siones, son también características propias del sistema capitalista ; como
sabemos, es la sed de acumular y de crecer para no perecer. Lo que
4 Janos Kornai, "Some Properties of the Eastern European Growth Patern", en World
Development , vol. 9, núms. 9-10, 1981, pp. 965-966.

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sucede es que en el socialismo centralmen


autorrestricción financiera a este impulso,
privada capitalista hay temor a las pérdidas
en la expansión de la producción corriente
inversión, pues éstas, a la larga, podrían lle
lución de la empresa. En el socialismo cent
autorrestricción no existe^ al menos no en
gerentes solicitan recursos, a menudo más d
tan, para facilitar el cumplimiento y sobre
Las autoridades centrales tendrán que de
con los gerentes de las empresas - la distri
permitan cumplir con el plan. Si finalmen
pérdidas, el Estado auxiliará en última in
problemas.
Se trata de una actitud "paternalista" del estado respecto a las em-
presas, y su consecuencia es la ausencia de una restricción presupuesta-
ria fuerte. En esas condiciones, el impulso a la expansión puede ser
una característica permanente no limitada por el temor a problemas
de realización de la producción y de rentabilidad de las inversiones.
Por ello, lo que restringe el crecimiento de una economía socialista
planificada es la restricción por los recursos físicos o reales; la demanda
está, por el contrario, asegurada de antemano. Por ello, a diferencia
de la economía capitalista que es restringida por la demanda , la socia-
lista es restringida por los recursos.
En condiciones de impulso a la expansión sin autorrestricciones fi-
nancieras, hay una extrema tensión por los recursos reales existentes;
ello genera la posibilidad de que las insuficiencias se produzcan una
y otra vez, como veremos más adelante.

II. 1.2. Partenalismo, restricción presupuestaría suave y reproducción


de la insuficiencia

Veamos ahora una primera relación de causalidad que nos permita


explicar la característica sistémica reproducción de la insuficiencia en
el socialismo. Para ello utilizaremos el esquema que nos propone
Kornai.10

10 Janos Kornai, "Gomulka on the Soft Budget Constraint: A Reply", en Economics of


Planning , vol. 19, núm. 2, 1985.

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LA CIUTICA DEL SOCIALISMO CENTRALMENTE PLANIFICADO 95

Relación paternalistica del Estado hacia


la firma.

i
Restricción presupuestal suave (expecta-
tiva de asistencia externa en caso de pro-
blemas financieros).

i
Débil responsabilidad, tanto respecto a los
precios como al producto de las ventas.
I
i
Demanda por insumos débilmente depen-
diente respecto a los precios de los insu-
mos y a las expectativas concernientes al
futuro de las ventas.
I
i
I Reproduc ión de la
insuficiencia

i) Los grados del paternalismo

A primera vista, la relación Estado-empresas en el modelo centralizado


descrito parece ser una relación de tipo militar ; es decir, el Estado or-
dena, las firmas obedecen. Komai sostiene que esa visión es ingenua,
pues en realidad prevalece una relación sujeta al regateo que más bien
semeja a la de padres e hijos; es decir, se trata de una relación pater-
nalista. En ese sentido identifica cinco grados de paternalismo.1
Grado 4: concesión en especie-aceptación pasiva. Se asigna desde
el centro; las empresas no cuestionan y no se toman en serio sus opinio-
nes. Los insumos se distribuyen en especie y la moneda actúa pasiva-
mente.

Grado 3 : concesión en especie-deseos activamente expresados.


centro toma la decisión pero tiene en cuenta los deseos de las firma
Hay un regateo; el centro propone metas de producción más altas y
asigna una cantidad de insumos menor a la pedida por las firma
éstas insisten en sus pedidos. Hay regateo.
11 Janos Kornai, "Degrees of Patternalism", 1980a (1986), pp. 54-55.

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96 Alfredo Erquizio Espinal

Grado 2 : asignación financiera. Ocurre co


que iniciadas por la firma son financiadas
sos del Estado. La firma puede solicitar má
rehusar o aceptar.
Grado 1 : aiitomantenimiento-ayuda. Las
independiente, están obligadas a cubrir sus
tienen dificultades financieras, el Estado acu
de asistencia.
Grado 0: automantenimiento. La firma sale de sus problemas por-
si misma.

it) Tipos de restricción presupuestaria

El grado de paternalismo en la relación Estado-empresas está cer-


canamente ligado al tipo de restricción presupuestaria a la que están
sujetas las firmas. La restricción presupuestaria alude en general a en
qué medida las firmas cuentan sólo, o principalmente, con sus propios
recursos para desenvolverse. Así, todas las firmas se mueven en un
ambiente en que existen intercambios regidos por precios, se pagan
impuestos y se perciben subsidios, se obtienen créditos y se dispone de
fondos para la inversión; de la forma como repercuten estas variables
en las firmas, resultan distintos rasgos de comporatmiento en aspectos
como la sobrevivencia, el crecimiento, el ajuste ante cambios exógenos,
la incertidumbre y la demanda hacia el Estado u otra firma. De allí,
tenemos una combinación de rasgos que define distintos tipos de res-
tricción presupuestaria : fuerte, casi fuerte, suave y casi suave. Veamos
el cuadro 1, basado en Kornai.12

iii) Relación entre el grado de paternalismo y restricción


presupuestaria

Las relaciones entre grado de partenalismo y restricción presupuestaria


son muy claras. Así, al grado cero, automantenimiento, le corresponde
una restricción presupuestaria fuerte, pues si algún percance ocurre y
afecta el balance financiero de la firma, el Estado no interviene pues
12 Janos Kornai, "Hard and Soft Budget Constraint", en Acta Oeconomita , vol, 25. 1980,
pp. 231-245.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 97

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98 Alfredo Erquizio Espinal

sigue cobrando los impuestos y no es sensib


quiebran, es su propio problema.
El grado uno de paternalismo se asocia con
puestaria aproximadamente fuerte. Si la fir
tades financieras, el Estado acude y la excep
créditos en condiciones ventajosas o permit
Incluso si la empresa es débil u opera con p
expandirse.
Si la intervención paternalista ocurre esporádicamente, las firmas no
la esperan, pero si tales intervenciones son muy frecuentes, la conducta
de la firma es influida por la expectativa de que habrá ayuda estatal ;
en caso de problemas, las firmas funcionan con una restricción presu-
puestaria menos fuerte, tendiendo a suave. Si ello ocurre, aparecen
varios fenómenos conectados con el impulso a la expansión que al
actuar sin o con débiles restricciones financieras, generan:
Una casi siempre insaciable demanda por materiales y una tenden-
cia a atesorarlos para protegerse de insuficiencias posteriores.
Una casi insaciable demanda por fuerza de trabajo.
Una casi insaciable "hambre" por inversiones.
Y como consecuencia: la insuficiencia de materiales, fuerza de tra-
bajo y equipos productivos. Por tanto, concluimos que dado que las
economías centralmente planificadas se caracterizan por un grado alto
de paternalismo del Estado con respecto a las firmas, y una consecuente
restricción presupuestaria suave para éstas, no es de extrañar que
la reproducción de la insuficiencia caracterice el funcionamiento de la
economía.

II. 1.3. La tensión sobre los recursos existentes y el efecto


de economía de succión

La relación entre las empresas y la autoridad central está signada por


el paternalismo y la restricción presupuestal suave; los acuerdos a que
se llega en el proceso iterativo de confección del plan, se sancionan
en él al establecerse los indicadores cuantitativos obligatorios, los pro-
gramas de asignación de materiales, el calendario de inversiones, etcé-
tera.

Sin embargo, el proceso planificador, en la medida en que actúa en


el marco del impulso a la expansión sin restricciones financieras, gener

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La crítica del socialismo centralmente planificado 99

una intensa tensión sobre los recursos existentes, por


miento sí está restringido por los recursos con que se
fuerza de trabajo, materiales, energía, capacidades pro
ladas, pero también importaciones y eventualmente rest
sumo en favor de la inversión. Se trata de los factores extensivos del
crecimiento.
Una situación como la descrita genera una extrema tensión sobre
los recursos, lo que en principio propicia un crecimiento dinámico y
de pleno empleo, pero genera también el efecto de la economía de
succión, que es otra de las características sistémicas de la economía
socialista. Así, en la medida en que predomina el impulso a la expan-
sión, la demanda por bienes de producción es muy grande, y ante la
limitación de recursos tiende a succionar recursos que en otras condi-
ciones se destinarían a la producción de bienes de consumo. Por otra
parte, la demanda prácticamente insaciable por recursos tiende a va-
ciar los inventarios de productos terminados y la situación favorece a
las empresas que venden, pues las empresas compradoras tienen que
aceptar lo que se les ofrece o bien sustituir cuando el producto que bus-
can está agotado o no consiguen hallarlo.
Por eso es importante examinar cuál es efectivamente la relación
entre las empresas en el mercado socialista.

II. 2. La relación entre las empresas: el mercado socialista

II. 2.1. Mercado socialista y fricción en el ajuste

Aparentemente, una vez establecido el plan, sólo queda a las empresas


cumplirlo. Pero en la realidad ningún plan puede ser lo suficientemente
minucioso para estipular ex ante todos los detalles de la operación co-
rriente y la gestión de la inversión de las empresas. Asimismo, en con-
diciones de extrema tensión sobre los recursos, es natural que se pre-
senten insuficiencias y carencias que impidan cumplir estrictamente
el plan.
Por tanto, en la realidad las empresas modifican y deciden a discre-
ción en aspectos muy importantes de la operación corriente y la admi-
nistración de las inversiones, porque como vimos el plan no puede ser
detallado al 100%, o puede no ser cumplido tal como está formulado.
La relación entre las empresas es de hecho una relación de mercado.

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100 Alfredo Erquizio Espinal

Aquí la conceptualización de lo que es un mer


la común. Mercado es el lugar económico de
tores: vendedores y compradores, que interca
por medio de dinero y precios. No interesa s
mos o si actúan bajo supervisión de una auto
caso del socialismo. No importa tampoco si lo
del acuerdo contractual o si son fijados o nor
central, como ocurre en el socialismo que est
La pregunta sería, pues, ¿cuál es el estado de
de una economía socialista centralmente plan
por los recursos, reproducción de la insuficien
de succión? La respuesta a esta pregunta ocu
zo teórico de Kornai en Antiequilibrium 14 y en
y lo llevó a criticar profundamente la teoría d
rasiano, propuesta para interpretar el merca
sión a que llegó es que tal estado de equilib
las intenciones de vendedores y compradores
se vacían los inventarios de los vendedores y
satisfechos a un precio de equilibrio, es sólo
dose del mercado capitalista. Y remitido al
se daría en el caso de la planificación perfecta
Y es que el ajuste entre vendedores y comp
de fricción, como se supone en el enfoque
dedores:
a) Pueden tener una regla de formación de inventarios o stocks de
productos terminados que prediga erróneamente la demanda real
de alguno o varios de los productos que producen;
b) Pueden ajustarse con retardo a los cambios de mediano plazo de
la demanda, y tener una política equivocada sobre aumentos en la
capacidad instalada ;
Y los compradores:
a) Pueden ser vacilantes en la determinación de sus demandas es-
13 El concepto de mercado en el sentido que aquí le damos es definido en Janos Kornai,
op. cit., 1971, p. 335, y en Janos Kornai, "Equilibrium as a Category of Economics", en
Acta Oeconomica, vol. 30, núm. 2, 1983, p. 153.
14 Janos Kornai, 1971.
15 Janos Kornai, 1980.
16 Nos basamos en Janos Kornai, 1980, especialmente en el capítulo 8: "Fricctions on
Adjusment".

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La crítica del socialismo centralmente planificado 101

pecíficas y dificultar que éstas sean previstas por los pr


b) Pueden en realidad no contar con información adecu
de los lugares, plazos de entrega y características de los pr
con ello impedir demoras y retrasos en sus compras efectiv
En esas condiciones, hay un conjunto de indicadores que p
cribir el vector de fricción ( w ) y el macroindice w respec
mercado dado: la regla de formación de stocks ; el error en
ción de la demanda; el parámetro de vacilación de los co
el valor ordinal del "paquete" de información con que c
compradores. Intuitivamente, podemos sostener que cuanto
des sean los inventarios de productos terminados que forma
dedores, menores sean los errores de predicción de la dem
nores las vacilaciones de los compradores y más completo e
de información, menor será la fricción en el ajuste entre ve
compradores.
Pero que las situaciones prevalecientes en el mercado sean tales que
eliminen las fricciones en el ajuste sólo puede ser un caso inusitado y
realmente imposible en la práctica; por ello, el caso de equilibrio
walrasiano con mercado libre y el caso de equilibrio con planificación
perfecta son realmente de la misma naturaleza, pues suponen un ajuste
sin fricciones.17

II. 2. 2. Estado de mercado socialista y efecto de succión

Relacionemos ahora el vector de indicadores de fricción ya definido


con un vector de indicadores de insuficiencia y con un vector de indi-
cadores de inactivos (excedentes y reservas). Relacionando los tres
vectores podremos describir más precisamente el estado del mercado
de una economía socialista.
Hemos visto que la insuficiencia es el resultado del impulso a crecer
a las más altas tasas y a emplear totalmente los recursos que tienen los
tomadores de decisiones, planificadores centrales y gerentes, en condi-
ciones en que hay una relación paternalista entre la autoridad central
(el Estado) y las unidades productivas (las firmas), lo que implica la
existencia de una restricción presupuestaria suave para éstas cuyo efec-
to global macroeconómico es la presencia de una insaciable demanda
17 Es exactamente lo que se sustenta en Janos Kornai, 1980 op. cit., p. 17&.

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102 Alfredo Erquizio Espinal

que ha de enfrentar las barreras de una ofert


te a los requerimientos en expansión.18
Sin embargo, la insuficiencia no es un simp
excesos de poder de compra de las firmas pu
ficiencia se hace crónica, las firmas sustituyen
sos que no pueden hallar.
Por eso Kornai define la insuficiencia como la colección de millones
de insuficiencias elementales que se dan a nivel "submicro":
Si en alguna parte algún producto o servicio no está disponible
cuando un comprador, sea firma, institución no lucrativa u hogar,
quiere comprar exactamente ese producto o servicio en ese lugar.
Si algún insumo no está disponible cuando la firma necesita exac-
tamente ese insumo para sus actividades.
Si la firma, la institución no lucrativa u los hogares efectúan impro-
visaciones para compensar las consecuencias de una momentánea in-
suficiencia sustituyendo un producto por otro inferior o más caro.19
La insuficiencia no es, entonces, un simple macroagregado de de-
mandas insatisfechas. No lo es puesto que las empresas, ante ella, se
las arreglan sustituyendo o esperando para más adealnte conseguir el
suministro adecuado. Por eso el vector de indicadores de insuficiencia
puede estar integrado por la relación entre las compras por sustitución
forzada y el total de compras, el número de pedidos no atendidos en
relación al número de pedidos total, el tiempo de espera en la cola
por los suministros adecuados, etcétera. Intuitivamente podemos con-
cebir que a la insuficiencia se le puede asociar un vector de indicado-
res como el mencionado, y que se puede, a partir de él, construir un
macroindice que mida el grado de insuficiencia en una economía (Z)r°
Veamos ahora el asunto de la definición de un vector de inactivos
(excedentes y reservas). En toda economía, en un momento dado,
existen: stock de materiales, productos semiterminados y terminados,
stock de inversiones terminadas y no terminadas, capacidad no utili-
zada de máquinas, equipos, edificios y otras clases de construcciones,
tiempos de trabajo no usados, desempleo abierto y oculto, etcétera.
18 En Janos Kornai, 1982, se discute con otros planteamientos acerca del desequilibrio,
como los de Malinvaud.
19 Janos Kornai, "Resource-Constrained versus Demand-Constrained Systems", en Eco-
nometrica , vol. 47, (1979); también en Janos Kornai, 1986.
20 Los problemas para construir un macroindice de insuficiencias y algunas estimaciones
para Hungría, se pueden consultar en Janos Kornai, op. cit., 1982, pp. 135-142.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 103

Tal conjunto de elementos, de los que obtengamos indicad


ayudarnos a construir un vector de inactivos (excedentes
y su respectivo macroindice (Q)-21
Ya tenemos, entonces, definido lo que son: el vector de
vector de insuficiencia, y el vector de inactivos. Podemos r
tres en una gráfica de dos dimensiones, para describir el
mercado. 4
En la gráf
está ubicado
insuficienci
cualquier p
Veamos el c
Ella puede p
nivel de ina
la curva Wl
to Pl.
Los métodos de planificación pueden mejorar y por consiguiente dis-
minuir la fricción de la economía. Tendremos un traslado de la curva
de fricción hacia el origen, pero ello no necesariamente llevará a una
mejora en el Estado del mercado, es decir, a una disminución del
nivel de insuficiencia o a un acercamiento mayor al caso de planifica-
ción perfecta.
Y es que en la economía socialista centralmente planificada, dado
el impulso a la expansión sin restricciones financieras, lleva a que los
recursos tiendan a ser utilizados plenamente, lo que originará que la
presencia de inactivos tienda a ser reducida permanentemente. La eco-
nomía socialista es una economía de succión, como hemos visto, y tiende
por tanto a "vaciar los stocks o inventarios de productos terminados",
a ocupar toda la fuerza de trabajo disponible, y la planta y equipo ins-
talado.22

21 Si la probabilidad de usar un recurso es cero, se trata de un excedente. Si la probabilidad


es positiva, se trata de una reserva. Ver Taños Kornai, op. cit., 1983, p. 153.
22 Las insuficiencias coexisten con los inactivos en una economía socialista centralmente
planificada. Mientras que los inventarios de productos terminados tenderán a vaciarse per-
manentemente, los inventarios de insumos, capacidades de planta y trabajadores desemplea-
dos dentro del taller, o subempleados, pueden ser frecuentes. Esto se debe precisamente a la
percepción de insuficiencias que tienen los gerentes. Éstos tenderán a atesorar recursos para
evitarlas en el futuro. Además, si no se hallan los recursos deseados o no se les puede sustituir,
otros recursos complementarios a los no hallados permanecerán también inactivos. Por ello
sostiene Kornai que insuficiencias e inactivos coexisten, pues son la manifestación de una
misma característica sistémica "la reproducción de la insuficiencia" en el socialismo.

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104 Alfredo Erquizio Espinal

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La crítica del socialismo centralmente planificado 105

Lo que nos está diciendo Kornai es que el estado del m


PI, o alrededor de PI, tenderá a reproducirse en el tiempo
estado de equilibrio en el sentido de que hay fuerzas end
hacen que haya un valor normal invariante para el nivel
ciencia en la economía, asociado con un nivel también in
inactivos, que no se modificará sustancialmente por las mer
caciones de la fricción en los mercados. Puesto que el efecto
nomía de succión característico de la economía socialista tenderá a
vaciar permanentemente los inventarios y a reproducir los valores no
males de insuficiencia.23
Para comprender mejor este proceso, es conveniente ver la repro-
ducción de la insuficiencia en términos macroeconómicos.

II.3. La reproducción dinámica de la insuficiencia, la ineficiencia


y las tendencias hacia el estancamiento y la crisis

Veamos ahora el problema de la reproducción de la insuficiencia desde


un punto de vista macrodinàmico. Para ello es necesario primero tener
una visión macro de economía cerrada, luego considerar la situación
abriendo la economía y, finalmente, tratar el problema que enfrenta
el crecimiento, tanto desde el punto de vista de corto plazo, dada la pre-
sencia de fluctuaciones de la inversión, y de largo plazo ante la ine-
ficiencia del sistema para generar endógenamente avance tecnológico
y dejar así la fase extensiva de crecimiento por la fase intensiva : tec-
nologizada, más productiva, eficiente y competitiva en el mercado
mundial.

23 La normalidad del equilibrio es definida por Kornai así: "... si las variables de estado
relevantes del sistema muestran claramente en los hechos una invarianza al menos como ten-
dencia, y si existen, en los hechos, fuerzas internas y mecanismos regulatorios tales que llevan
al sistema hacia el equilibrio, si se ha apartado de él..." pp. 149-150. Y más adelante sos-
tiene que la ciencia económica del socialismo tiene varias tareas interrelacionadas en el exa-
men del equilibrio. La primera tarca es: tiene que ser revelado objetivamente dónde se ubican
los estados de equilibrio, las trayectorias de equilibrio, o trayectorias normales en países dis-
tintos, en periodos históricos diferentes, en mercados principales y otros subsistemas. La segunda
tarea: tiene que encontrarse cuáles son las fuerzas internas, los intereses, los mecanismos de
control y las regularidades conductuales que llevan al sistema exactamente hacia puntos
de equilibrio. Y, finalmente, como una tercera tarea, nosotros tenemos que buscar en qué
dirección las fuerzas internas, intereses y mecanismos de control pueden y deben ser cambia-
dos si nosotros estamos insatisfechos con la trayectorias de equilibrio prevalecientes y deseamos
desarrollar otras trayectorias de equilibrio y otros estados normales С 1 983. op. cit pp. 158-
159).

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106 Alfredo Erquizio Espinal

1 1. 3.1. Macroeconomia de la reproducción


en una economía cerrada

En el apartado anterior vimos cómo en el modelo centralizado de eco-


nomía socialista el grado de paternalismo es alto y la restricción presu-
puestaria de las firmas tiende a ser suave y generar una tendencia a
que su demanda sea insaciable, lo que ante una oferta limitada genera
las condiciones microeconómicas de la insuficiencia.
Es necesaria ahora una visión de carácter macroeconómico que per-
mita considerar también a los hogares y a los bienes de consumo. Para
ello, Kornai utiliza un modelo sencillo e hidráulico.24

i) Supuestos simplificadores

Se consideran los siguientes supuestos:


Es un análisis de corto plazo.
Se describe una economía estacionaria o en reproducción simple.
Sólo se tienen en cuenta bienes que se pueden almacenar, por lo que
no se consideran los servicios.
La economía se divide en dos sectores: firmas y hogares;
La producción es de dos clases: clase i (medios de producción) y
clase li (medios de consumo) .
En principio sólo los hogares consumen bienes de clase и mientras
que son las firmas las que producen bienes de las dos clases.
No se considera el comercio exterior.

ii) El reservorio o almacén de medios de consumo (clase 11)

La producción de medios de consumo es un flujo (a la manera de un


líquido que fluye dentro de un gran reservorio o almacén de medios
de consumo).
En el reservorio o almacén al que fluye la producción de medios de
consumo se tenderá a formar un stock de los mismos, cuyo nivel de-
pende de la diferencia entre el flujo de la entrada de productos ( inflow )
y el flujo de salida o venta de productos ( outflow ) ; evidentemente, si
24 Janos Kornai, 1980, especialmente el capítulo 21: "Macrointerrelationschips : the Suc-
tion Model".

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La crítica del socialismo centralmente planificado 107

el inflow supera al outflow habrá medios de consumo en s


contrario, el reservorio estará vacío.
Si está dado el flujo de productos por unidad de tiempo,
reservorio depende exclusivamente del flujo de salida, el q
está regulado por una "tapa", la cual se abre o se cierra dep
de los precios de los medios de consumo y del ingreso nom
hogares.
Los hogares tienen una restricción presupuestal fuerte puesto que
no pueden influir en la fijación de los precios, ni aumentar unilateral-
mente sus ingresos nominales; ambos son fijados por la autoridad cen-
tral. Si dados los precios el ingreso nominal sube, el outflow aumenta.
Si dado el ingreso nominal los precios bajan, el outflow también
aumenta. En ambos casos el outflow puede superar el inflow y el reser-
vorio puede vaciarse; en caso contrario, habrá stocks.
En la medida en que la existencia de stocks indica que el consumi-
dor tiene más alta probabilidad de adquirir lo que quiere, la intensidad
de la insuficiencia será menor. El reservorio de medios de consumo se
puede observar en la gráfica 3.

iii) El reservorio (o almacén) de medios de producción (clase i)

En este reservorio el outflow de productos fluye libremente puesto que,


como hemos visto, la demanda de las firmas no está limitada por su
posición financiera, dado el alto grado de paternalismo y el carácter
suave de la restricción presupuestaria.
El reservorio está siempre vacío; no hay stocks de medios de produc-
ción, por lo que hay un fenómeno de intensa insuficiencia de este tipo
de bienes.
La razón por la que ocurre esto es la inexistencia de la "tapa" que
actuaba en el caso del reservorio de bienes de consumo, y que por el
contrario más bien exista una bomba impulsora de flujos (o agua)
que induce tanto a que se produzca más ( inflow ) como a que se uti-
lice, y por tanto se demande más (outflow).
Las fuerzas que operan la bomba impulsora son dos:

El impulso cuantitativo

El plan central induce siempre a una mayor producción, sea con


órdenes directas o con invocaciones.

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108 Alfredo Erquizio Espinal

Aunque el plan central sea conservador, la empr


te, muestra una demanda insaciable en la medida
presupuestaria es suave y también porque es im
sus pedidos se cumplan. Como vendedores, tamb
por sus clientes en cola, por lo que hay un círcu
insuficiencia.
La presencia de insuficiencia crónica es una constante presión sobre
los recursos y genera cuellos de botella y crea incertidumbre sobre la
oferta de insumos, lo que hace que las firmas atesoren amplificando
el círculo vicioso de la insuficiencia.

El impulso a la expansión

El plan central que fuerza altas tasas de crecimiento del producto


también requiere altas tasas de inversión, lo que supera las disponibi-
lidades de bienes de inversión y expande por tanto la demanda de
producción y equipo.
El impulso a crecer también se autogenera : todas las firmas quieren
crecer, hay "hambre de inversiones". Y es que perciben que su pro-
ducto es insuficiente y que por lo tanto la expansión es necesaria y
urgente. Se trata de un mecanismo autogenerador de insuficiencia,
pero ahora es en la esfera de decisiones a largo plazo.
Dado que la restricción presupuestaria es suave, el riesgo de las in-
versiones es bajo y las quiebras financieras imposibles.
Por lo tanto, el impulso cuantitativo crea una insaciable demanda
por imputs y el impulso de expansión crea también una insaciable
demanda por bienes de inversión.25 El reservorio i se puede ver en la
gráfica 3.

iv) Los reservorios de medios de consumo y medios de producción


vistos en su conjunto

Ahora podemos observar la gráfica 4 que sintetiza el "modelo hidráu-


lico" de Kornai. Así, aunque ambos reservorios están supuestamente
separados de partida, en realidad vemos que entre ellos existen "goteras
y filtraciones", aunque también operan "compuertas" que las pueden
impedir.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 109

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110 Alfredo Erquizio Espinal

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La crítica del socialismo centralmente planificado 111

A través de las "goteras" el agua (el flujo de productos) p


en cualquier dirección (los compradores de repuestos par
viles pueden ser hogares o firmas, por ejemplo) . Pero es el
mas el que puede ejercer un efecto de succión atrayendo
bienes destinados a los hogares, puesto que a diferencia
firmas tienen una restricción presupuestaria suave.
Ya vimos que si se cierra la tapa del reservorio de medios
sumo porque los precios están subiendo, el nivel de reservo
pero sólo transitoriamente pues si el reservorio de medios d
está lleno y el de medios de producción vacío, por la "le
comunicantes" el nivel del reservorio n bajará hasta el niv
es que se da una competencia desigual entre hogares, con p
fuertemente restringido, y firmas, que tienen un presupuesto
ción suave y que por lo tanto no son sensibles a los costos y
Sin embargo, la filtración hacia el reservorio i tiene limita
actuarán como "compuertas" impidiendo las filtraciones. A
Los productos concretos ofrecidos a los hogares pueden no
bajo esa forma a las firmas, y las adaptaciones requeridas p
lentas.

Hay sanciones administrativas para las firmas que compr


y servicios destinados a los hogares (se prohibe utilizar hab
destinadas a vivienda para uso de oficinas) .
Es claro, entonces, que la intensidad de la insuficiencia
de consumo no depende sólo del nivel de precios de los bie
sumo y del ingreso nominal de los consumidores, sino tamb
fuerte sea el efecto de succión del sector firmas.25
El vaciamiento de los reservorios, o lo que es lo mismo, la
cación de la insuficiencia, ocurrirá con particular fuerza
dados los precios de los bienes de consumo aumentan los in
minales de los hogares mientras que la oferta de bienes de
no crece al mismo ritmo que la demanda creciente, y si sim
mente el efecto de succión de las firmas en el reservorio i de m
producción ejerce su influencia en el reservorio u dada la r
presupuestaria suave de las firmas y la ausencia de restr
efecto succión. Así, tendremos una primera representación
nómica de la insuficiencia en el socialismo.

25 Janos Kornai, 1979 (1986), op. cit., p. 24.

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112 Alfredo Erquizio Espinal

11.3.2. Macroeconomia de la reproducción de


en una economía abierta

Ampliemos la analogía hidraúlica considerando ahora el sector exter-


no que por un lado provee importaciones que posibilitan el aumen-
to del flujo de productos, y exportaciones que, por otro lado, actúan
como un tercer sector, y que por tanto succionan recursos de la eco-
nomía.

Así vemos en la gráfica 6 cómo ahora existen dos bombas impul-


soras: la que es impulsada por las necesidades internas de los secto-
res i y il, y la que resulta de los requerimientos del sector de exporta-
ciones. Ambos amplifican el efecto de succión y vacían más fuertemente
los reservorios de bienes de producción y los de consumo, dadas las
filtraciones y goteras.
Sin embargo, las ventas por exportaciones y el flujo de crédito ex-
terno van llenando el reservorio de comercio exterior con divisas que
permiten comprar importaciones del resto del mundo. Las importacio-
nes contribuyen al flujo de productos a los aparatos productivos de
los sectores iyn.
Pero la magnitud del flujo de importaciones está limitada por los
niveles que se forman en el reservorio del comercio exterior, que resulta
a su vez de qué tan rápido y de qué volumen es el flujo de exportacio-
nes, y qué tanto es el saldo de los flujos de nuevos préstamos externos
y el respectivo servicio de la deuda. Dicho reservorio aparece parcial-
mente cubierto, pero puede vaciarse dependiendo del balance de fuer-
zas que determinan la magnitud de los flujos de entrada y salida.
Mientras las importaciones pueden ser un flujo que contribuya a
aumentar las capacidades productivas de ambos sectores: i y n, la
proporción de esta contribución y en general de la magnitud de recur-
sos que se asignen a la inversión y al consumo, dependen también de
la planificación macroeconómica del consumo: lo que en la gráfica
está representado por la compuerta que puede abrirse o cerrarse par-
cialmente determinando de esta manera la tasa de acumulación de la
economía (proporción de la inversión al producto total), y con ello
las posibilidades de crecimiento económico. Cosa que se expresará en
el tamaño que vayan adquiriendo los aparatos productivos de los sec-
tores i у и, y la magnitud de los flujos que alimenten los reservorios
respectivos.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 113

Gráfica 6. Interrelaciones macroeconómicas del modelo de succión:


la reproducción de la insuficiencia en el socialismo

Fuente: Con base en Kornai, Economics of Shortage, vol. В, 1980, pp. 543-548.

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114 Alfredo Erquizio Espinal

El balance entre las fuerzas que succionan p


vorios de bienes de producción y de bienes de
interno como para ventas al exterior; por
determinan la magnitud del poder de compr
portaciones más saldo neto de préstamos y s
política de restricción del consumo, defiren
se vacíen los reservorios, y por consiguiente
ficiencia en un momento dado.
Si, como ya vimos al analizar la economía cerrada, hay una tenden-
cia a que se vacíen los reservorios por el efecto impulsor cuantitativo
y de expansión, dicha tendencia actuará en una economía abierta mo-
dulada por el resultado del balance externo y por lo restrictiva que sea
la planificación macroeconómica del consumo.
En ese sentido, si el sector de ventas de exportaciones no es lo sufi-
cientemente dinámico y no se cuenta con un favorable balance en
deuda externa y el hambre por inversiones prevalece restringiendo así
el consumo, las insuficiencias se reproducirán incesantemente y se rati-
ficará su carácter sistemático en la economía socialista centralmente
planificada.

II. 3.3. La fase de crecimiento extensivo y sus límites:


el estancamiento y la crisis

El impulso a la expansión no limitado por restricciones financieras


genera la reproducción de la insuficiencias y el efecto de la economía
de succión que tiende a vaciar los inventarios en los respectivos reser-
vorios, lo cual es señal, a su vez, de que la expansión ulterior es nece-
saria. Es un círculo de autocausación que puede funcionar en el marco
de una fase o modalidad de crecimiento extensivo.
Tal forma de crecimiento enfrentará paulatinamente la "restricción
de los recursos físicos o reales". Mientras haya fuerza de trabajo dis-
ponible, abundantes recursos naturales, posibilidad de seguir amplian-
do la oferta de materiales y energía, conseguir financiar importaciones
a cuenta de exportaciones o préstamos y restringir el consumo en favor
de la inversión, se puede continuar creciendo, pero tarde o temprano
se presentarán limitaciones a este tipo de crecimiento. Se habrá lle-
gado al empleo total de la fuerza de trabajo; será cada vez más difícil
basar la producción en un uso extensivo de materiales y energía sin
mejorar los coeficientes de usos de estos requisitos hacia menor gasto

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La crítica del socialismo centralmente planificado 115

por unidad de producto; será más difícil financiar impo


deteriorarse la competitividad del sector externo y dificult
con el servicio de la deuda y mantener la capacidad de crédi
mente, restringir más el consumo será inviable políticam
natural descontento de la población.26
El crecimiento extensivo habrá encontrado así su límite y lo
será una fase de enlentecimiento de la dinámica macroeco
tendencias hacia el estancamiento y eventualmente la crisi
dida en que endógenamente no puedan generarse las ba
fase prolongada de crecimiento, esta vez intensivo, basado
nologización que redefina la "frontera de recursos", econo
gasto de materiales y energía por unidad de producto, elev
tividad de los equipos y de los trabajadores, y haga más e
más competitiva en el mercado mundial, a la economía.
La dificultad para crear las bases de crecimiento inte
fase extensiva tiene que ver centralmente con la generació
logía. Y es que la reproducción de la insuficiencia a niv
macroeconómico crea condiciones que frenan el avance
Así, ni el predominio de un mercado de succión, es dec
el que prevalecen los vendedores, ni el carácter fluctuante
de inversión, son condiciones apropiadas para la ampliació
gica. Veamos.

i) Mercado de succión y desarrollo tecnológico

En el análisis que hace Kornai 27 de las formas de mercado, él distingue :


El de presión, que es aquel en el que los vendedores hacen cola o se
disputan a los compradores; se presentan dificultades para vender todo
el producto y, a corto plazo, la política de aumento de la producción
es cautelosa; hay que competir para vender y ello estimula la intro-
ducción de nuevos productos y la mejora de la calidad de los exis-
tentes;
El de succión, que es aquel en que predominan los vendedores y
son los compradores los que hacen cola y se disputan los productos.
Como hay una gran demanda, ello estimula el crecimiento. No hay
necesidad endógena de mejorar o crear nuevos productos pues siempre
26 Op. cit.. p. 27.
27 Janoš Kornai, 1981.

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116 Alfredo Erquizio Espinal

es posible colocar los viejos, y no hay incent


lidad.28
En el socialismo centralmente planificado la forma del mercado es
de succión, la falta de competencia entre productores es la norma, y
no hay impulsos para mejorar y elevar la calidad de los productos;
ello afecta el impulso hacia la mejoría tecnológica de procesos y pro-
ductos.
Y eso no es todo, como ya vimos: en una economía de succión, y
en un mercado de succión, la insuficiencia es crónica y se reproduce
incesantemente. Los productores tienen que:
Sustituir forzosamente cuando no encuentran el insumo o los equi-
pos mejores; las segundas opciones son generalmente de más baja
calidad.
Si se decide esperar en vez de sustituir, entonces, para cumplir los
planes, se concentran las actividades en el periodo del año en que los in-
sumos están disponibles, se trabaja con prisa y el producto final puede
ser de calidad dudosa.29
Por tanto, desde el punto de vista microeconómico el predominio
de los mercados de succión o de vendedores y las condiciones de insu-
ficiencia crónica impiden crear el ambiente apropiado para impulsar
la mejora de productos y procesos. Esa necesidad no surge endógena-
mente del sistema.
Y es que, como vimos, la empresa como oferente enfrenta una cola
de pedidos y puede vender todo lo que sea sin preocuparse por la cali-
dad. Así, produce bienes menos "tecnologizados" que lo que debiera
si prevalecieran condiciones de competencia. Y como demandante, la
empresa a su vez tiene que hacer cola por insumos y equipos, y sus-
tituir forzosamente o esperar, y por tanto producir con un nivel tec-
nológico menor al que desearía. Es claro entonces que el desarrollo
tecnológico no es una característica propia de un sistema con repro-
ducción de insuficiencias y mercado de succión.

ii) Fluctuaciones en la inversión y tecnología

El proceso de inversión, tal como se verifica en la práctica tampoco


28 Janos Kornai, op. cit., 1971, ver especialmente el capítulo 21: "The Consecuences of
Disequilibrium".
29 Op. cit.; aquí Kornai considera de que es preferible que en una economía predomine
el "mercado de presión".

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La crítica del socialismo centralmente planificado 117

es un impulsor de desarrollo tecnológico. La inversión tie


ter fluctuante. Existe el ciclo de la inversión.30
Tal ciclo tiene que ver con las regularidades conductuales de plani-
ficadores centrales y gerentes en el marco del impulso a la expansión:
Los planificadores centrales tienen una tendencia a formular pla-
nes de inversión originalmente altos, e incluso proyectos no incluidos
en el plan original pueden ser considerados por presiones políticas y
locales.
Los gerentes, cuando proponen sus requerimientos de inversión, fre-
cuentemente subestiman los costos, pues así tienen más posibilidad de
que éstos sean aprobados y no sean rechazados por costosos. Lo que
sucede es que una vez que dichos proyectos se inician pueden tener
más posibilidad de conseguir recursos suplementarios de la autoridad
central, que preferirá completar los ya iniciados y evitará detenerlos,
pues sería un desperdicio de recursos.
Como consecuencia de lo anterior, la magnitud global de la inver-
sión suele ser muy grande, y el número de proyectos de inversión en
proceso muy alto. Ello ocasionará una gran tensión sobre los recursos
físicos de inversión, sobre las importaciones requeridas y sobre el con-
sumo. El sistema soportará tasas altas de acumulación, pero a costa
de magnificar las insuficiencias, tensionar el sector externo y restringir
el consumo. Pero esto tiene sus límites: en un momento dado se ten-
drá que recortar la inversión y paralizar proyectos empezados para
aliviar las tensiones señaladas, hasta el punto en que nuevamente se
pueda desatar otra ola de inversiones que volverá a encontrar sus lími-
tes. Tal es el ciclo de la inversión en el socialismo centralmente plani-
ficado.
Este proceso tiene grandes repercusiones sobre el avance tecnoló-
gico y la productividad de equipos y de trabajadores, y por tanto sobre
la eficiencia global de la economía:
Primeramente y aunque la tasa de acumulación sea alta, no signi-
fica que el aumento de la cantidad de activos fijos anual sea de la
misma magnitud. Y es que buena parte del esfuerzo de acumulación
se centra en la iniciación de nuevos proyectos que periódicamente son
interrumpidos ante el surgimiento de las insuficiencias. Esto significa
que la eficiencia de la acumulación es menor a la deseable.31

30 Janos Kornai, "Shortage as fundamental problem of Centrally Planned Economies and


the Hungarian Reform?', en Economics of Platinine, vol. 18. nú m 3 1982.
« Tamas Bauer, "Investment Cycles in Planned Economies"; én Acta О economica, vol. 21;

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118 Alfredo Erquizio Espinal

Luego la prolongación de la terminación de


sión es también desfavorable para el desarr
que las nuevas capacidades que se planean i
disponible en ese momento y, si su operación
nir en obsoletas.
En los momentos de mas aguda insuficiencia los proyectos en pro-
ceso pesan más en las decisiones de inversión de los planificadores cen-
trales. Eso hace rígida la inversión y dificulta que se adopten en esos
momentos decisiones en favor de proyectos nuevos y de avanzada tec-
nológica.
Por tanto, no resulta difícil entender que los equpios prevalecientes
no sean los más modernos, y puesto que además en condiciones de re-
producción de insuficiencias se requiere el concurso de todos los recur-
sos, la tasa de descarte de los viejos equipos es más bien baja. Tenemos,
en suma: equipos no actualizados tecnológicamente y también equipos
viejos físicamente.
Tales tipos de equipo son por cierto de baja productividad y están
asociados a una fuerza de trabajo que difícilmente puede ser estimu-
lada materialmente por los llamados bienes incentivo; es decir, los
que diversifican el consumo personal, dadas las condiciones de, "insu-
ficiencia" aguda que prevalecen en el mercado de bienes de consumo.
Todo ello se suma para darnos como resultado un bajo nivel de pro-
ductividad y eficiencia global de la economía.
Es la incapacidad endógena del socialismo centralmente planificado
para generar desarrollo tecnológico y elevación de la eficiencia global
de la economía la que explica su estancamiento en la etapa reciente;
y es la dificultad de modificar sus características sistémicas mediante
reformas económicas la que motiva su crisis. Pero las reformas econó-
micas no son una panacea, como veremos ; ellas tienen sus propias con-
tradiciones.

III. Las reformas económicas y la contradicción entre


los principios de la eficiencia y la ética socialista

El análisis precedente permite identificar como una de las ca


la insuficiencia y la ineficiência a el alto grado de paternal
núm. 3, 1978, y en Janos Kornai, op. cit., 1980, especialmente el capítulo 9 de
proceso de inversión en el socialismo.

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La crítica del socialismo centralmente planificado 119

Estado respecto a las firmas y la consecuente restricción pr


taria suave con que ellas operan.
Las reformas económicas han seguido el camino de introdu
cipios de eficiencia en la gestión; para ello se ha determinad
decisiones corrientes sean tomadas descentralizadamente por
mas y que la interrelación entre ellas se dé en el mercado
uso activo del dinero.
Se ha tendido también a aminorar el grado de paternalismo y se ha
hecho más fuerte la restricción presupuestaria para las firmas.
No se ha llegado a extremos; las reformas son graduales, se dan
avances y retrocesos, se experimenta. Un examen de casos particula-
res es necesario. El caso húngaro es el más rico en lecciones ya que es
el país en el que se avanzó más en el camino de las reformas. La
U.R.S.S., con la perestroika , ha iniciado también su propio proceso
después de los fallidos intentos de mediados de los sesenta. En otro
capítulo analizaremos esos casos.
Kornai ha reflexionado, a partir de la experiencia húngara, sobre
las dificultades de la reforma económica. Así, sostiene que el estable-
cimiento de los principios de eficiencia económica, como contenido
principal de las reformas, entra en contradicción con los principios
éticos del socialismo. Veamos sus razonamiento, pues nos permitirán
examinar más críticamente las reformas en el socialismo.32
Se puede decir que los principios de la eficiencia en cualquier siste-
ma económico son:
EF 1. Los incentivos materiales y morales son necesarios para esti-
mular el mejor desempeño de los administradores y los trabajadores
en la producción.
EF2. El cálculo de beneficios y costos debe ser cuidadoso; los esca-
sos recursos deben ser usados racionalmente. Las producciones no efi-
cientes deben terminar.
EF3. Se debe procurar un más rápido y flexible ajuste a las condi-
ciones externas.
EFA. Los administradores deben estar dispuestos al riesgo y a la
innovación.
EF5. En cualquier decisión los administradores deben asumir res-
ponsabilidad personal, tanto en las materias que están a su cargo como
en las decisiones que se tomen.

32 Tamas Bauer, op. cit., 1978.

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120 Alfredo Erquizio Espinal

Por otro lado están los principios de la étic


ETI. Principio del salario socialista: todos
a igual trabajo, igual pago.
ET2. Principios de solidaridad: los débiles
ET3. Principios de seguridad: todos los m
deben sentirse seguros; aquí es básica la ga
permanente.
ET4. El interés general tiene prioridad sobr
y también los intereses de largo plazo tienen
La jcontradicción entre ambos grupos de pr
minada a la luz del problema de la introducc
a la ganancia y los criterios para la sobrevive
firma, que generalmente caracterizan las ref
socialismo.
Así, si se introducen primas que incrementen los salarios ligados a
las mayores ganancias (EF 1), ello puede entrar en contradicción con
el principio de que a igual trabajo igual pago (ETI ) puesto que las
ganancias de las firmas pueden diferir por factores ajenos a los traba-
jadores, como el mejor manejo gerencial, mejores equipos y precios
previos, etcétera. Lo que ocurre frecuentemente es que se generan pre-
siones para nivelar los ingresos, con lo que las reformas de este tipo
pierden efectividad.
Si se aplica a cabalidad el principio EF2, que implica una restric-
ción presupuestaria fuerte para las firmas mediante un estricto cálculo
de los beneficios y costos, las quiebras pueden ser inevitables. Ello va
en conrta de los principios de solidaridad ( ET2 ) y seguridad (ET3),
puesto que en el socialismo no se puede dejar a su suerte a una empre-
sa débil ni ningún trabajador debe temer al futuro. Esto implica que
no habrán quiebras y que el Estado va al rescate con subsidios, cré-
ditos, excepciones impositivas, etcétera. Es característico que ni aun
en los casos mas radicales de reforma económica se llega al extremo
de dejar quebrar a las firmas ineficientes.
El problema es que la vigencia de los principios de seguridad y soli-
daridad conduce a una actitud perezosa, pues si la supervivencia de
la firma está automáticamente garantizada, la responsabilidad de los
administradores no es clara, lo que va contra el principio EF4: de res-
ponsabilidad. Asimismo, es difícil imponer disciplina a los trabajado-
res pues en condiciones de pleno empleo éstos pueden conseguir otro
trabajo. Kornai se pregunta si sólo son necesarios los estímulos y no

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La crítica del socialismo centralmente planificado 121

también los castigos; como el miedo a perder el empleo, p


Si la asignación de las inversiones y por tanto las decision
crecimiento de la firma son descentralizadas, entonces los p
flexibilidad ( EF3 ), riesgo (EF4:) y responsabilidad (EF5
ejercer fuertemente y propiciar la iniciativa y la propensió
se flexibilizarán los ajustes precio-cantidad, y la responsabi
directores será menos ambigua.
Pero el costo de mantener el criterio de descentralizac
hacer que prevalezca el interés particular sobre el general
en contra del principio {ETA). Es por eso que la responsabi
las decisiones de inversión se divide en varios niveles y sól
mente corresponde a la firma. Esto propicia que el proc
sión se alargue burocráticamente, lo que va en contra del
flexibilidad ( EF3 ). Así también, si la inversión falla es im
contrar un responsable, pues muchos participan en el itera
de decisión, lo que va contra el principio de responsabilida
(EF5).
Toda reforma económica en el socialismo tiene que enfr
dilemas y contradicciones. Para Kornai, cualquier sistema r
truido con base en compromisos prácticos entre principio
mientos mutuamente contradictorios. La búsqueda de perf
de la reforma un proceso continuo. Así, en Hungría y des
dieron cien ordenamientos legales regulando los beneficios y
ción, pero esta búsqueda de perfección indetermina los efe
que los participantes no se adaptan bien al juego de reglas e
cambio. Por tanto, la búsqueda constante de perfección ca
bilidad. Esta es otra contradicción en la operación práctica
formas económicas.
Lo ideal sería lograr un sistema económico óptimo que c
la mejor manera posible las distintas reglas de juego y la
ración de los mecanismos de control, de tal manera que se
Pleno empleo, como el logrado en Europa del Este.
Alto grado de organización y disciplina en el taller, como
bricas de Alemania Occidental y Suiza.
Un crecimiento económico libre de recesión.
Estabilidad de precios.
Rápido ajuste de la producción a la demanda externa.
Para Kornai, esto es ingenuo, es un sueño diurno. Un sistema real
contiene características buenas y malas; es imposible crear una teoría

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122 Alfredo Erquizio Espinal

socioeconómica normativa y consistente en l


ción entre el sistema de valores ético-político
provoque eficiencia en la economía. Es imp
lista y tiene en cuenta las verdaderas caracter
la gente, las comunidades, las organizaciones y
Para Kornai la tarea es otra, y es el propósi
teórica. Se trata de observar a las sociedades
una explicación a las regularidades de su co
tra ciencia ha de encontrar la respuesta a la p
misos entre los diferentes principios normat
las fuerzas sociales de los diferentes sistemas
mos tratar de encontrar una más racional y b
miento para las contradicciones inevitables. E
tífica que puede brindarnos algún beneficio s
Teorizar sobre las contradicciones y dilema
y contribuir con soluciones siempre transito
Janos Kornai. Y es lo que hemos presentad
nos servirá mas adelante.

Conclusiones : el aporte de Kornai al estudio de las economías


SOCIALISTAS CENTRALMENTE PLANIFICADAS

Como vemos, el marco teórico propuesto por Kornai es un sust


aporte al estudio de las economías socialistas maduras: Euro
Este y la U.R.S.S. Su crítica a las características sistémicas de la
de funcionamiento de la economía centralmente planificada y d
dilemas que toda economía socialista debe afrontar en su inc
búsqueda de un compromiso adecuado entre los principios de la
ciencia y los de la ética socialista, nos proporciona elemento
comprender las motivaciones, el sentido y las perspectivas de las
mas económicas en el socialismo.
Su tesis fundamental es que en las economías centralmente planifi-
cadas hay una relación paternalista entre Estado y las firmas, las cuales
funcionan con una restricción presupuestaria suave; es decir, no sen-
sible a los precios y a los ingresos por ventas, lo que en condiciones del
33 Janos Kornai, "The Dilemmas of a Socialist Economy: The Hungarian Experience", en
Cambridge Journal of Economics , vol. 4, 1980c (1986); también en Janos Kornai, 1986.
31 Janos Kornai, op. cit., 1980a (1986).

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La crítica del socialismo centralmente planificado 123

impulso a crecer que caracteriza a las economías socialistas,


insaciable demanda de materiales, trabajo y equipos, causa
suficiencia recurrente de éstos y propiciando condiciones
ficiência productiva pues son frecuentes las improvisacion
Tal insuficiencia afecta directamente al consumo de l
puesto que a diferencia de las firmas, los hogares sí tienen
ción presupuestaria fuerte, y las firmas succionan medios
e insumos relacionados, compitiendo ventajosamente. Con e
ficiencia se manifiesta también en el sector de medios de consumo
afectando el nivel de vida y en el largo plazo la productividad.
Ineficiencia productiva, dificultades para el ascenso del nivel de
vida y la productividad, resultan del modo como funcionan las econo
mías centralmente planificadas, las que tienden a reproducir la insu-
ficiencia. Las reformas económicas se hacen necesarias. Así se introdu-
cen principios de eficiencia en la gestión, una descentralización de las
decisiones corrientes, uso activo de mercado y un menor grado de pa-
ternalismo del Estado respecto a las firmas. Ello no agota las contra-
dicciones y dilemas, y surgen otras. Las empresas pueden quebrar y
generar desempleo. Si se pagan salarios en función de las ganancias
de las firmas, surgirá una distribución desigual del ingreso; si se des-
centralizan las decisiones de inversión, entonces el interés particular pue-
de prevalecer sobre el general, etcétera. Inseguridad, desigualdad,
predominio de los intereses particulares, pueden reaparecer o ser
reforzados; ello va contra los principios de la ética socialista y amenaza
con renovar la vigencia de los males del capitalismo.
Es imposible lograr un sistema económico óptimo que sea a la vez
eficiente y ético. Un sistema real tiene cualidades buenas y malas. Se
deben estudiar las características del socialismo tal como realmente
son, y tratar de resolver siempre transitoriamente sus contradicciones
y dilemas. Tal es el propósito de Kornai, y allí están sus aportes.

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