Gracias por no esperar

Son las tres de la tarde, creo que debería…debería de estar al llegar, bueno es normal el
esperar una hora…dos. Se ve que la comida chatarra cobra más auge en los parques, los
niños, cada vez más molestos, se quejan por segundo a sus madres…ni les hacen caso,
prefieren escuchar la- de seguro- interesante charla de la vecina de la casa contigua que,
dada la casualidad, nunca se encuentran más que los intrépidos recorridos que hacen al
atravesar el indescifrable parque, el niño se cansó de jalar la falda de su madre…ahora
llora.

Creo que, después de todo, la paciencia de dos horas será de nuevo necesaria, y
otra vez el señor Sol tiene el placer de darme dos sonoras bofetadas, y ríe, maldito,
¿cree que solo por ser un astro lo respetaré?, ya llegará el día en que podré vengarme…
y ríe…por lo menos esta vez no serán las mismas quince de ayer, hoy traje un
paraguas…maldición…ahora me doy cuenta que es transparente, debí aceptar el que me
ofrecían las Desgracias…Por suerte la banca de al lado está desocupada, ayer estaba una
pareja de hormigas revelándose del sistema de la reina y teniendo sus quereres…
supongo que ambos eran machos…Bueno, cambiémonos de banca…si bien el señor sol
tiene dificultades para alcanzarme, no quiere decir que un futuro muy cercano no lo
haga, ¿pero qué es eso!... una sombra, demonios, creí que era algo más interesante, ¿y
qué tenemos aquí?, al parecer la banca lleva tiempo sin pintarse o demasiado tiempo
pintada, será por eso que ahora tengo los pantalones manchados de azul, alguien tendría
que decirme que la pintura recién colocada mancha, ahora entiendo porque las hormigas
están en la tercera banca, siguen dándose sus quereres…

Creo, es momento de tomar alguna bebida…o mínimo algo de comer, hoy olvidé
traer el refrigerio de siempre, a veces detesto cuando me ganan las prisas, malditas ayer
me escondieron el paraguas, ¿qué hago?, no creo que se note la mancha azul, son del
mismo color…mejor sigo sentado… de todas maneras ya debe de estar al llegar, los
retrasos no se dan por cualquier cosa, aunque a veces pienso que los de cinco horas ya
no son un retraso…lo más factible es que me haya equivocado de hora, o que el reloj me
haya mentido, con eso de tener el vicio de contar cada segundo, a veces creo que es
obsesivo compulsivo, por menos ya dejó las drogas…era una buena persona, como
extraño que no me mienta… Mientras tanto aquí estoy, de nuevo, con el traje de hace
dos semanas y con el mismo té de hace un mes, el sabor no ha cambiado, bueno el del
traje…sí…pero no es algo contra lo que se pueda hacer gran cosa, de alguna u otra
manera los vestidos cambian de sabor algún día y…perfecto traje un poco de
mermelada…

Son…bueno ya no se qué hora es…se que el señor sol se ha retirado…creo que

ahora es en serio un poco tarde y de verdad se ha demorado demasiado, yo confirme la
cita, le pregunté claramente si le convenía salir el día hoy…dijo que sí…se confirmó la
hora, y sí como que he han pasado suficientes…incluso la señora dio fin a la tremenda
conversación con la vecina de la primera casa, quinta cuadra, segunda manzana y la
colonia de enfrente…porque el tema ya no tenía más que hablar, según entendí la mujer
se quejaba de que por alguna cosa extraña resulta que la vecina de algún lugar
extranjero se está metiendo con el marido de la “pinta”, una mujer fea y ruda, pero la
mejor para administrar los fondos de los sacerdotes y hasta donde se…también se sabe
hincar, pero lo importante es que esa extranjera no puede salirse con…¿dónde quedó el
niño?, si bien dejó de fastidiar a la madre ahora no lo veo…eso me pasa por no ponerme
los lentes, ¿ese es el niño?, que mal ha quedado, dando placer al tercer ve…

De acuerdo, creo que es necesario irse preparando para una ausencia, no me

gusta hacer eso, es en lo que más tardo en arreglarme, le llamaré a penas llegar a un
teléfono, posiblemente haya un motivo muy fuerte para que el día de hoy se ausentara,
no creo que sea mejor que el de hace tres meses, pero sin duda tiene que ser mejor que
el de ayer…sé que es importante la alimentación…aunque según yo los zapatos tienen
que saber aguardar la hora de la comida…o…¿comen?, aun me lo sigo preguntando.
Supongo que la pintura se ha secado, el señor sol está conforme con esta afirmación, me
agrada más cuando despierta que en las tardes, es más humano…momento entonces de
saciar el hambre con la cuarta cajetilla, no recuerdo haber estado fumando, lagunas de la
memoria que aprecio bastante…es gracioso, al fin fueron descubiertas esas rebeldes, el
zángano ha trabajado y dio muerte a aquellas inconformes con el régimen, epitafio de
las hormigas: “Por putas, tuvieron la gracia de ser asesinadas, el pueblo está contento”.
Pobres, no les dejaron siquiera darse placer de nuevo; al parecer después de todo la
sombrilla servirá de algo, ha comenzado a llover…la lluvia en las mañanas siempre tan
acogedora y fresca, para recordar que no debiste de hacer cosas que has hecho, gracias a
las lagunas de la memoria, que aprecio tanto, no recuerdo haber hecho nada, momento
del tercer cigarrillo de la sexta cajetilla…y…un poco de agua de lluvia para quitar la
sed…maldición, es ácida, pero tiene un sabor extravagante, cerraré la sombrilla, tal vez
pueda recuperar el traje un poco de el aroma rudo del agua de la tierra en la mañana, tal
vez no…

Un reloj sin duda que da la hora, un traje da la presentación, el cigarrillo

sustituye el hambre, un niño que es regañado, una madre poco pendiente, una vecina
que llora a su cuarta hija violada, unas hormigas homosexuales, una comida jamás dada,
un astro que juega a ser hombre, un parque con cada segundo más bochorno, una lluvia
que quita el tiempo, nunca salió la luna…se me han agotado los temas para hablar con
ella…un traje con sabor a nada…perfecto, son las dos de la tarde, he esperado
demasiado, no llegará, tengo el trasero y espalda algo pegajosos, y si la pintura traspasa
la ropa, tengo pintado el cuerpo y por ser este tan poco resistente, tengo el azul en la
sangre y humo en los huesos, cambiémonos de banca, puede ser que llegue más tarde de
lo pensado…

Son las tres de la tarde, ha dejado de llover, el niño ha cobrado por sus servicios,
y la madre ha decidido llevar una cuenta para esos bienes, el basurero quitó, sin darse
cuenta, el justo epitafio de las hormigas, creo que después de todo no vendrá, por suerte
tampoco estaba esperando que asistiera…la verdad sí… se acabaron los cigarrillos,
ahora solo tengo un poco de azul en el cuerpo…