EL SERVICIO PARA LA CONSTRUCCION DEL TABERNACULO

En éxodo 35:5-9 Moisés dio instrucciones al pueblo de Israel para que ofrendaran
elementos para la construcción del tabernáculo.

El tabernáculo iba a ser ese santuario en el que la presencia de JEHOVA nuestro

DIOS iba a habitar para estar con el pueblo. (Éxodo 25:8)

Dentro de los materiales a ofrendar están los siguientes y cada uno tiene su
significado:

EXODO 35:6

1. Azul (significa la naturaleza celestial de Cristo)

2. Purpura (la soberanía de Cristo)
3. Carmesí (el sacrificio de Cristo en la Cruz)
4. Lino fino (la santidad de Dios en CRISTO)
5. Pelo de cabra (útil para servir)

A las mujeres se les dio el privilegio de trabajar con sus manos, debían de hilar esto
es volver a hilo piezas de tela, esas piezas de tela y pelo de cabra que debían de
volver hilo lo tenían que hacer con el conocimiento que iba a ser utilizado para la
construcción del tabernáculo.

Las mujeres hicieron esa labor dice la palabra con sabiduría de corazón, y la palabra
en proverbios 9:10 nos dice que el temor de Jehová es el principio de la sabiduría y el
conocimiento del Santísimo es la inteligencia.

Y en estos tiempos para aplicarlo a nuestra vida, debemos clamar al SEÑOR que
ponga espíritu de temor de Dios en nuestro corazón para que estemos consientes que
DIOS está en todo lugar, lo sabe todo y lo puede todo, y esto nos llevará a conocer a
JESUS, conocer su naturaleza divina que se hizo hombre para redimirnos del pecado
en el sacrificio que hizo en la cruz pago nuestra deuda, y al recibirlo en nuestro
corazón como nuestro único y suficiente salvador, establece su soberanía en nuestra
vida, y nos aparta para ÉL, porque si llegamos a caminar en santidad es porque
JESUS es santo, y en ÉL podremos apartarnos del pecado, y podremos ser útiles
para servir para su reino, y al ser útiles en su obra, serviremos en nuestra familia, en
nuestra iglesia, en nuestro trabajo, en donde nos movamos para dar a conocer el
amor de DIOS manifestado en JESUS, para dar a conocer el plan de salvación y el
amor de DIOS a todo aquel que tengamos alrededor, y esto demandará de nosotros el
trabajo con sabiduría de apartar tiempo para orar, para leer la palabra, para buscar el
rosto del SEÑOR y disfrutar de su presencia en todo momento.