Julián Bernal - María A.

Charris - Emily Cotes

NRC: 2964
Los estudiantes de recién egresados de la secundaria no cuentan con las bases

necesarias de lectura para la complejidad que suponen los nuevos desafíos académicos en la

universidad. La adquisición de conocimientos y la forma de aprender son visiblemente

diferentes. Ya no se trata solo de saber leer y escribir, sino de algo de vital importancia

como la alfabetización académica. Según Peña (2011), el estudiante que ingresa a la

universidad no dispone de las formas de leer necesarias para construir el conocimiento,

desconoce cómo autorregular su proceso de aprendizaje y de cómo hacerse miembro de una

comunidad textual.

Aunque estas deficiencias no se han detectado a tiempo, varios investigadores se

han propuesto crear estrategias con el propósito de que los estudiantes lean de una manera

más critica y analitica. Francisca Peña realizó con un grupo de estudiantes de la

Universidad de los Andes una experiencia didáctica “cuyos objetivos era que los

estudiantes aprendieran a experimentar modos específicos de leer y discutir fuentes de

información propias de su campo de estudio (...) y descubrir ideas y opiniones del autor en

la estructura profunda del texto leído” (Peña 2011).

Sin embargo, debería plantearse la incorporación de estas estrategias que se utilizan

en la universidad para mejorar la comprensión lectora en las escuelas medias, logrando así

que el estudiante de primer ingreso tenga una base de estas herramientas y, por ende, mejor

desempeño en la carrera escogida.

Referencias

De Castro, D., & Gutiérrez, R. N. (2014). Tendencias sobre las prácticas de

lectura y escritura en la universidad colombiana: el punto de vista de los
estudiantes. Diversitas: perspectivas en psicología, 10(1), 71-85.

Peña González, F. J. (2011). Leer y escribir. Prácticas necesarias en la

universidad. Educere, 15(52).