Está en la página 1de 31
JOSE DE LA PUENTE BRUNKE ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU Estudio social y politico de una institucion colonial SEVILLA, 1992 1 Conceptos preliminares €) Precisiones terminologicas Lainsttucion dela encomienda de ndos, que se suscté en el Nuevo Mundo como un mado através del cual se pudieron articular ls relaciones entre los espaoles y os indigenas americanos, hundié claramente sus raoes en la historia de la peninsula ibérca, a pesar de manifestar en Indias caracteristcas originales que marcaron también diferencias con las diversas acepciones que el érmino «encomienda> tuvo ena Espafa medeval. Enla Espatia cistiana de la Ata Edad Media la «enoomendacion tetorial cons- tty el mado de patrocinio que experiment6 mayor desaroll; através de él el encomendado-srataba por lo general de pequefios propietariosruales-cedialas lirras de su propa, o una parte de las mismas, al sero patrono, quien & cambio de elo se obigaba a su proteccién y defensa Estos conceptos de proteccion y de fansa, quo serdnlvego heredados pola encomienda indiana, fueron también la base cde lo que se woniadd vomo wencomienda» en la Baa dad Media. Como bien sefiala \Valdeavellano, en es0s siglos era quella una clase especial de sefiorio que adquiria la forma de cesénde un dominio, cn carter temporal vialicio, por parte dol rey, cde un magnate, do un monastero o de una Orden Mita, a favor de un noble o caballo, «cesion que se le hacia in commendam o encorrienda’ para que asumiese clampara proteccion ydefensa guarda, commenda et deffensione) de las tierra, lugares 0 castilos celdos (.). Jseavolane, LUG. do, Curso de Historia de as Instituclones espaolas. Matra Bbiieca de laReveta de Oona, 977 p38, 13 JOSE DE LA PUENTE BRUNKE fer0" 0 ‘encomendera Mites: y perobi lend © lugar que se pon bajo su protecise yebterses AS pues, de aqucte nen SU" Qe pretenders esa Sin enbarge, prov mein yaqueniacocumamargs eo cborante aludir al témino «repart- eae. 0 ~encornienda, Solos XVI XVII fue itzado est ocably Indios» Vineron a wv. sRepettimiento de Sonicar lo mi indos» 0 «encom testimonios, Tanoioneropansacns fara lenes entooes ras ‘esta mas inmediato precedente dela : Dowie a Sees an eS ‘benemértos, aunque un ral aseiamieni tambien Peninsular, te le come oan rte tl = 1 lt aoa dos histo pean ne os “a 0 significado ios minos “pane ee Comers = (Rips toa “4 ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU ‘ambos aamisma insttucen-*es important adver que por repatimiento no solo se tend una determinada comunidad indigena que se concedia a un encomendero sa palabra tuvo otras acopciones:reparmiento era también todo acto mediante ‘ual se hasian concesiones numerosas de encomiendas, como el reparimiento de Huaynarima dispuesto por Gasca; igualmente, reparimiento era toda concesién, ‘temporal odefnitva, de sovcosindigonas de dvorso tne afavor deuna determinada personaogupo. Més adetante,enesigloXVIl también seentenderéporeparimiento la adquisicon forzada por parte de los indigenas de objetos que les vendian 1s corregidores* +) La instiucién de la encomienda en ef Nuevo Mundo Eigen legal de asta instucén en América se remonta a 1503, aio en el cual | sabe la Catdlca expidé en Medina del Campo una rel oda por medio dela cual Olicialmente se aceptaban los repatimientos de indios-queexistan enl préctica en las Antilas ya desde ero anterior el consecuenterabajoforzoso de os naturales, aunque sefialindose as-nismo que debia pagarse a éstos salario, por tratrse de hombres bree. A posar dol nor dc lareferda espascin, lo cierto fue ue mediante cella se consagré el sistema en tomo al cual gi el establecmiento de los rimeros ‘espaol que llagaron al continent poco antes daccubierto;eetora caractereado Drecisamente por su iil falta de reglamentacion y por los permanentes maltratos ¥ abusos que ls indigenas sutian al estar por completo a merced de ls espafioles los cuales eran reparides. La denominada etapa antilana» de la encomienda en Inias represents la fase mas crue doa instucn. Sin normas concretas -que ego poco apoco fueron suriendo- ue lmitasen el poder delos duets de repartmientes, los indos fueron en los hechos propiedad absoluta de aquélo. ‘Sin embargo, en estos primeros afs, y sobre esa sivacion de injusticia, la ins tiucin dela encomienda se iba desarolando como pilar fundamental sobre el cual ‘se asentaba la naciente sociedad hispano-indigena, Pecisamente el sistema de os ‘epartimientos de indies se revelé como la frm que posibiié ol asentamiento de los esparoles en los nuevos temtoros, yaque era grande su utd no slo para los colonos, sino también para la propia Corona Eloto mative que levaba al virey a considera a inoonveniencia de los ecitos eral hecho de sor mporantes os «empafos» que pesaban sobre a Hacienda Real era Par, y el ex tabi una disposicin regia qe le oenaba proveer prefeareort los reparimerios qv vacaren on peeonas querer ease {2 Gaia Real, con alin de dasemperiarésta. La obigatoredad de publica edictos onvocendo aopostores pera cada encomienda era, pues, en cietomodocotraitoria cone imtcacion de preter on os repartimientosaquienes gozasen de entasacag0 elas acasfecales®, También el conde de Chinchén, en 1632, marifest6compartr ta opin negativa de su antecesor en cvato alos edcos* uiénespodan sels Benes de una cocesin de encoienda? Enos atic os la concuista ol encomendero era aque espaol quo habia serio en la incorprein a la Corona o ena pimerapobacn des nuevos trios, Con el ‘Soaurr de los afoslalegislacion no hizo mas que confirmar est tro. ‘Ast la propia Recoplaciénsefalaba que las conesiones de encomiendas de ban hacerse steniendo espacial cuidado de pete alos quehubire de mayoresmérios, Y sevice, ¥ 02 €508 a os descncentes do pmaros descubsidores Feciicadoros, pbladoes, y vecinos ms aniqus, ue mee, y con més fdelidad hayan servido en las ocasiones de nuestro Real sav (.)> Sin embargo, muy jada estuvo la realidad del tenor de esta dsposiion, sobre tod ene siglo XVIL A pesar de que la Corona misma autor en muchos casos la (g2 Emargte de Gtr SM. Los Paes, 15 2 maz e168, AGI. Lima 4, No.4 18M 115 1164 (Eland de Chih a Mae ayo de 1632, AG Lia NB. 36 S50 (3 cpl VL Vila 5 Estetresaris en ei put meron uae cc pas acl G6 mayo do TSS, are la cal erdoré vin dl Px ue ann sees conleday mercedes x odos ue hen aio aa Coro Srpredeie oes deer gua rin de ecanecaa et ese pa tana ts pal ers Spot senda si sabo pes excepcanes, ho mis alae eras Cr. Zvala, opt, pe 887858 31 6stos estuvieron Disloplons Ya entre los encomenderos de los ramet al poder espafl, el propio Frances Sm htinel (5) Ere arcbizo Makor de Lsény Cie (by emt an Cts nga BNA ag HEAL (52) Soa coon Reta atl, ing . cade nee notenia parecer pareiessaginoconios B13. 32 ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU CUADRO! _ ENCOMENDEROS INDIOS Y MESTIZ08. Indios Mestzos 0 encomendeo ch en cm ah M Dd Fd Inés Yopang | Franca Paro Matin Ange par srt Beatie Manca Cipac Set Marco Cpa x x Pete oe Bera x x henge Busia x etic Manco hs Si de Lega x ip Gaia Fi ws Sakon x JOSE DE LA PUENTE BRUNKE Carson preeipaciyoer es andes tess populares queconaocanse razr loca aa dela postr decstn de csoberao decor ats a era eos sus nes, rida as ramen La 4a ama farilar to a age mer sure: en 1358 misno afo Imada ea aula ena. Depo Say Tips ca obi ley hin Caetelas nporanet enamine ce ouranay Creo asco a aie o Hoya Fuca uv sas cl mort seat deur uehbipeeneio a opi Fans Paro Sula. Cae an el captin Marin Garcia de Loyola, quien re ne he gu capt en tempos dl rey Toe, ana bet en oma ste dato spat po sumatineiocon Bea Cla Coys 0 re tla es enzorenas de igo Sai Tipas nc hereadas pos Tie ieee erent escent te Cstbl Paulina oso igo Sy Tio nea og, asso XV ome pares pen cect ces eae {matin ce Aaa Coy doo a Enroacén alos hij cou ets lan alos hos legitimos, se estableié ihn ws san Een Spr lejuro manne atone. lencamenden, pus, deta serio ein w Fle min tt dria Francisca un nuevo ejemplo de an de inds,eneluesedio-quéstanoeracapardoneeene ye pene lone capaz de poseeros por sermesiza yademés er Soe . a Or Tate ita geal Fated Toko easy Seen a ilna wngrhectaditetavcanates mata os a trce Ne ky rin rns epee a ls se oni Nacralde Esso Fostorowsh de Diz Canseco, Maia, Dota Franlsa Pea : ee ieee Luma, oe Esti (€3)Sodrzane Pero, opt, ib. s . cm. XK, No. (4-0 Fea Pere ar Mac Frode Pea ers, coreg Talo, sbre derecho aun encamenda ao 2 Tos afe de 1552) AG, dur, 298, Maen tate sc 4 ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU “Tampoco debieron ser os etranjros ni sus descendientes, seg aegslaién, bneiciarios de la pasesion de encomiendas™ Sin embargo, varios de ells las ob- tuveron: Miguel Angel Figén; el inglés Tomas Farl; Francisco Bosso, natural de Mid cuyo hijo suceeié ena posesin de surepartimiento; Cipio Fear, también itakano, entre oros®. En cuanto los minstrosy alos ecesidsticos, estuvo establecido que tampoco ‘aelos pada eparioele encomiendas. No fueron pcos, sin embargo, ls funciona fis qe de hecho as poseyron, a pesar dela robin acl incu también a ‘sus mujeres @ ios, con exoapcién de los hes varones casados que tviesen el nti de ss familias al empo de reckisurepartimiento. Varios fueron también los casos de eclesiastios yreigiosos que legaron a ob- toner encomiendas en el Pat, El mas conocido tue el de Fray erérimo de Loaysa, ‘primer arzobspo de Lima, pero también habia que menionar el de Rsk Bravo, tra de la fundacion de Arequipa, y ya en et siglo XVII el de Femando de Bazén, Canbnigo de a ctecral de Sevila®. Hubo también, probeblemete, elgunos ots cléigos que tvieron entre sus planes el poseer una encomienda, como fue el caso {de un «cura soldados: Domingo Ruiz Vizcaino. Habia sido éste almagrista en las queas cvs entre fs conqistadores, ego seincorporé ala hueste de Diego Penton, Posteriormento protendié ante Gasca la cancesién de una encomienda, pero tnamenie ue al parecer convonid por el Pacis pura que earesase @ Espafia, ya que no vel con buenos cos fa permanenca en el Prt de sun hombre tan buloose yarigo de desasosiego-”. Son también dignos de monci os casos de encomenderos que enraron en eligi y siguieron en la posesién de sus rpar timentos. a pesar de la pronibicin legal. Tal ve cl eas, pr ejempo, de Mencia de (65 Reopen, i. i ey 14 (Glcanmen ira Gila Losegiores perpetusdelcabiidode a (15951821) Sova Excna, Deutaon Poca de Sata, 1963, vp. 30. Bsa Duhurbu Jos aide Dieionario aoe ogres de ton conqutadotes det Pari. Lina, tuts 806167, op. 286 Jol iept02 Feige hoster al viey Gara Hufado de Mendoza su cesar po a ‘aneetn de una encomenda a Miquel gal Fpén, ya que -extarros como + oon carr Cos te enconienda El vczeberar cones al monarca que dicho peso ya habla coe seovanloosad ove reparirnia d nos, Caracal iey Garcia Hao de Mes Sree Los Reyes, 3 mayo de 152. AG. Una, 2, No.5, I, 90. (7) Reeoplain, i. tit Vl, yes 129 13 {G8}. meds, opct, op 1411. (G2)AGiL, Lia, 162 {xParr de Tudela Busco, van, Documentos reavosadon Perode la Gascay Gonzalo Piao, Faas teadema del ctor 196, 0.370, Cladoen Bravo Guar Nara Conca Mgt gare sacar elas cas deindos dl veranda Per. Eanglacién yTeclogla ce arcasiglo XV, XSimposi Internacional de Teologia, Pasion, Universitat de Nave ta, 1990, vol p62 083. 35 JOSE DE LA PUENTE BRUNKE ‘encomende aque en 1573 profess en un convento declausura, dejando portal motivo ‘a posesion de su repartimiento”. Las mujeres muchas 6 lac ‘un susttuto, i mont apres a2 CO es areas ol encon io elocseconet et saberoe, sin .¥ pudioso ser iguroca- nlaie oa embargo, conte con a atorizacion Majstad conadote contr po Vergo ae rns ve & rape .confirmacion de esa merced, y Villaiba. El fiscal de Su rmsepseen Ses ee ote eterno tte ean +a vide>. Sin ombargo a ae 8 phos + 8 procuradar lina respon- (7) Toe texan eas 0 os 4S M. Los Reyes, 10. la cuted de La Mendibury, octubre de 1611, Paz. Ch. El me aT EL WER ace pa ASNURAARN Ws ete, sit de Cand ns 7 = ued deods tray baa dae co ata selva Vl 5456. Laaya monsters ei (Setar. apa 8 No oninteLine ce. (7) hese seen Vai? emt G1 040, sss yes Lina knee 7876 nia ae 36 ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU 6 iciendo que no eran pocos ls casos ya permitdos de mujeres encomenderes en primera via’ Enos primers as dela colorizacon, las esposas de los encomenderos fue ron las mujeres que ostentaron mayor importancia en elreino,y en no pocos C280 ‘ucedieron a sus maridos en la posesién de sus repartmiantos, aunque -por pesqul ‘sas realzadas por Lockhart-sabernos que las mujeres espariolas comorecaudadoras de tributes 60 mostraron en general mas duras que os varones". stv también cispuesto en lalegisiacin que no podian poseer encomiendas deindios los monastris, hospitales, cofradias uotrasinstiuciones™. En cuanto alos ‘conventos ymonasterios, nomenos de nuevede els fueron tulaes derepartimientos 6 pensiones en el Prt. En os primerasy conusos aos de la colnizacin, hasta €ltempo de a derota de Gonzalo Pzaro, conocemos que dominicas y mercodarios poseyerenencomiendas® Asi por ejemplo, el convent de Santo Domingo de Lima foe tular dal reparimiento de Aucallama en o valle de Chancay - la jurisdccion Jimefa- del cual ya par 1561 tenemos certeza de que estaba puesto en el patrimonio dela Corona Fueron frecuentes, adomés, los casos de gooe de pensiones sobre fencomiendas por pafte de no pocos cenobios. OtrasInsttuciones que tuvieron tencorriandas en el Per fueron la Universidad de San Marcos, el Colegio Real de San Felipe de Lima, yal menos cinco hospitals: en Lmalos de San Andiés, dela Cara 3 de Santa Ana; en Trl de San Sebastian, yen el Cuzco e de los Naturales Par uitimo, estuvo impicitamonte prohibido el conceder encomiendas 0 el Que ssucediesen en el gooe de as mismas ‘ealosfuriogas, mentecatos, ciegos, mudos, sordos,cojos, conranennos, 0 isiados, o gravados con alguna enfermedad antigua yaraigada, tl ue los saseyé Catalina de Verpadoy Vila. AGI, Lina, 202 (78): Expect rai ala conan 8 2-860, Mic, Fordo de Cura Esanemca, {79 Lockhart James, € mundo Mspanoperuano 1 1982, 202 {00 Rosobinclén RV Vly 12. Paoeador Gasca, pr epi dasa deenmandas racer y eb a Gatas jis y renleros, por supaeain en ceed nope on. i. Perez Face, op. 20 (an Seino eeasode quan movatero pens le SanLorenn dl Esoia apd poset importante eparimanbs en al Per. (62) Perez ernnder (ope. 161) Lockhart (op. 18) ros can eros iormacen seat rim, reseamers on 15471 Mand artyo denn ue wos converts ales pa paced y Santo Duingo a hay prose on esta era. fen nds, qu se mer os treveraran gon cis 00 pla pa, al gaat dela que ueren sus bs ales serve aan de ss cast onpo des sorters para ue iabren yhagan as yas No sectdn an verdad ceo aVM nga de les hye cower i ociado on nesta srt fev Olmedo, op. 14. 37 YOSE DE LA PUENTE BRUNKE dee cam «ie women ge ee Orne ta Ouanc oheredero de algin de sus servicios, Gas slo por ces do i autonig t®P2elo,se pouian opr oe carespondienteo bien paranaee ida. ESabaomene bien por sucesén de un No pos hero ah aa span pom bioncomiensas oe as. 1542 Mate ae Sao BON on ua 2 eas ometian os entomendo Sob odo on oeasiones ey a GUE las veras do ee VES0S abus0s que «hater Que lo renuncian| (ceeparin eset dcomeratr aah cur eng eS sanguesn todo | nana me mane "tapos esa nea MEME te Pachacanas eee 0S entetelones dela (6 Solano Para apt (i Raran iVke e, entender sa ncbaceai men das op Sse auae ENGOVIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU misma: s co la crourstancia de que en 1542 deci regresara Espafia Francisco {le Godoy, poseedor dela refer encomienda, hombre de ayectoria destacada en lacconqusta del Per yen las postriores guerrascivles, y que pudo acopar ademas tuna importante fortune. Antes de volver @ la metropl vendo algunos solares que posefa en Lima ydos terrenos de cto al precio de 8.000 pesos, cuyos compradores fueron dos espafolesjovenes: Herndn Gonzélez y Bernaldo Ruz. Sin embargo, él verdadero valor de las propiedades materia de esa compre-venta era de silo 500 pasos. Lo que ocurié ‘ue que dentro de los 9.000 pesos estaba encubieta la venta el repartmiento de Pachacamac: en eect, Godoy negocé con el gobernador Vaca Castro para que su encomienda -una vez vacante por su etomo a Espafa- ese ctorgada pormitades Hernan Gonzalez Bemaldo Fu, dando posiblementeaaca de Casto parte de los 9.000 pesos. Asi, pues, sla venta de una encomienda {generalmente tomaba la forma legal de una venta de bienes a un precio sumasente itagos™. Se conooen también otros datos sobre ventas de encomiendas: el repartimiento de Moscala, que tuvo en encomienda Diego de Fonseca otrgado por \Vaca de Casto, te comprado a Juan de Escobedo; por esas mismas fechas Miguel Fuiz fue otro encomendero que obtuo su reprtmiento através de una compra” La Corona dspuso también normas para impedir que quienes ya tenian re- partmientos recbiesen nuevas concesiones, salvo que para elo renunciaran alas tencomiendas que antes habian tendo". En eiaciin con este punto podernos citar el aso delrepartimiento de Cristal Pérez, quien lo poseyé hasta su muerte, Luego de su deceso, en 1550 suviuda, Mar Sénchez la Milana, quien ya se habia casado en _sequndas nupcias con Pedro Gelder nici un plo contr su iio Juen de Arbes en forma a a posesion dela encomienda que habia tenido su ctunto primer marido, sosteniendo que ela debié suoeder a Cristal Pérez en la tlardad de ese reparimiento, porque Juan de Arbes posela ya otra encomienda, «y no podia tener dos». Lalegislacénita drgia a evitarelacaparamiontode encomiendas en manos de pooas personas: « nadia poo taner muchos rpartimintns, y més an puablos diferentes». 18 de abril de 1629 se exp una real oédla meciante la cual se autorizaba ccnceder a los encomenderos una vida mas -latercera-en la posesién de sus (@8)Loditan, opt p. 3; Loman, Los repdores..t, vl Ip 141; Bo Othubuu, opt, vol Ip. 180; AG, Js 467. (67) Lore, Rata, Los repos ma, 1988, p28 (6) Recoplacin, in V1 Vl iy 1. (68) AGI, Just, 397 (80) Pate ev ina rx nies, caeacacon Arico de Rea, core la poeein do un "epatimieni eros haba sido do Francsco Marin oe Acraa,dlumo, pine mado do Inge Mutes Asus, 97 Cle Recoplacén tl, wy 26. 39 OSE DE LA PUENTE BRUNKE "sc Hepancamrin 14031 encas, 185%, oI amo pp S05 Mat Consge ‘ees as peseedr Raa et Enso ela eeaige ea 8 Ivestgacnes e seeaaenarca em aac angome eaeEtESrnae e 1 ee anil na uma conossibn dsimncroe #18 F088 del encomence. Primera vid. Ct. Exped 2m storie ecntmaen oe emo op ert lin geen ‘2 0, Bates 1 AS a tc 12 tase ieee et ea ws rpc a i a me ec a Car Shigeo dames eee ottes anasgrtaias ae y ge Ssevn oar ca Gone aoa eon Tees seseetege ENCOVIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU uabuolo que clio sagundo del oncomendero, La posiidad de aleanear ol goce dela segunda vida de una encomienda, como yavimos, estaba slo al acance de los hijos lagitimos del encomendero. En caso de no dejar Sse hos lagimos, debia suvederle su vida, S ésta contralanupcas nuevamente y su nuevo mardo era también encomendera, debian ellos escoger uno de ls repartiientos, ya que les estaba vedado aczar dels frutos de ambos simulténeamente®” Hubo excepciones, como la protagonizada por la encomendera Maria Clara Hurtado de Mendoza, quien soit al monarca licencia -y le fue concedida- para casarse con un encomendero sin dejar por eso de gozar cada uno de sus respectvos repartimientos, para lo cual ore ela servic con lo que rentare durante un fio su encomiendat®. En 1568 se expo une real cédula que dispuso que cuando murese un en: comendero que hubiesegozado de sureparimiento en primera vida ydejase suoesor, eltal sucesordebla acu por so a través dun procurador, al viey en un érmino ‘no mayor de 6 meses, para mostrar su derecho y pedi suttulo en segunda vida, Si nose acudiaal voesoberano durante esepiazo, se perdi os frulosdelrepartiienio clesde el momento on eve nabia quodaco vacate hasta que se obtuviese el to del vie, yondo esos fr ala Caja Real espoctva™ En cuanto alas contravenciones dela legsiacion, es interesante el ejemplo que nos orindalaencomienta que tuvoLucrecia Antonia de Casto Girbn:esereparimiento ‘qued6 vacanteen la segunda mitad del siglo XVI por su muerte, ras la cual pretends ‘suoedora onc goce do esa merced su hormana Maria. Como bion sofa ant exto Lun parecer del Consejo de indias, «laley de sucesién no da derecho a los transversales, y para suoader en las ‘encomiendasde Indias nan de dejar los poseedares suceso legit. Lattulardad do un ropartimionto, use, no pod tranemities entre hermanos. Pero a pesar de ollo los mismos consejeros de Indias opinaron que en ese.cas0-y por los servicios de a Casa de Lemos, ala que pertenecian las releidas damas- podia (0 eps cat eae doo 189 CD1AO, wo 8. 124127 lansing Stuns eeeras prs ogo pees St stra, seas © ciatos soup peer ens mae no epee Sages en eprtiens A vero oma, Roars uses ae Vey Sa Pot bt rar ru nt te nner ee ‘Sci vat cota tas, 9S 08 7 (27 opr anna Sooo 57, CIAO, 71178. (0 cna epee crete AL or cara ia a een AS. ima, 28 (99 Sober Perot, N46 a OSE DE LA PUENTE BRUNKE -gobomantes, quienes: de esta laya para beneficiar a algin ese pon ‘Seguros, toda Pecado queelituardelaenconiendatucee ease a ramen bes lex orepenimern eb asa wae hasate aunque ol mario la sobrevvira™. Alin y cabo, ne aaa -alencendo a mérios de primer mardo duro. En trina pale abe dase he arpa ange ect Sone ovr conn ed tecrmercons woe & an aoe errands scam ct spans ares an ur cisenasne tara) heccen ate a eam ao ee a pace aneernen (ale ai aes ata re eae ala Audencia de Los Reyes, El Escorial, 17 09 _ 8 8 DAG, 9 tp. 42 ENCOMIENDA ¥ ENCOMENDEROS EN EL PERU delaencomienda. Luego ela casé con oo vecino do Los Reyes, Sebastian Sanchez de Merlo, ysesuscté una stuacién orginal: Sénchez de Mero no solo se convirioen titular dela enomionda por la vida de su mujer, sino que pasb a poseera en primera ‘vida por su propio derecho, ,Cémo pudo darseeste caso” Lo que ocuio fue que Ana ‘Suirez_ignoramos si compenetraca con su marido 0 presionada por ésto- habia hecho dejacin desu derecho sobre el repartmiento de Huarochii, como mujer que habia sido de Antonio Picado, para permir que a su nuevo mario se le pudiese ‘trgar ese repariniento como nueva encomienda. En efecto, Vaca de Casto otra festa encomienda a Sénchez de Mero en 1542, y esa concesion le fue confrmada a tél por Gasca en 1548, y pore! marqués de Caheteyaen la cada de 1550". Asi el segundo mardo de Ana Sudrez pudo converse en encomendero de Huarocir en primera vida. Lueg de la muerte de su mujer ete persone contajo nupcias con Batra Marroquin de Montehermoso, quien al ervivdar a su vez de Sebastian ‘Sanchez de Mero pudo lagalmente pasar a converse en encomendera de Hua: Tochir en segunda vida; en efecto, el conde de Nieva le otorgé la sucesion de ese tepartniento en 1562" Noterminéaquila ya compleahistriade las suoesiones en Ta pocacén de esa encomienda, porue Beatz Marroquincas6 nvevamente con Diego de Carbaal,vecina también de Los Reyes. En esta ocasion a él yale tocd ‘onformarse oon sel titular dela encomienda sto por a vida de su mujer. Este ue tin curio c880 que nos hace ver los mdtples recursos que podian utiizarse para ‘conserva la posesin de un reparimiento por parte de personas que ya nada tenfan ‘que ver con el primer beneficario del mismo ni con los méritos pros cvales sehaba ‘orgadoleferida mered. Lahistoria de os sucestvos encomenderes de Huarohit fuedespués menos complea. ya queen 1603 seconced el goce de ese repartimionto ‘2 Gabriel de Castila, cya faa pudo conservarlo por dos vidas mas, acogléndose ala ya mencionada préroga de una ercera vida que para el Peri se dispuso on 1628. ‘Pero fueron los poseedores de a encomienda de Checras quienes nos brindaron 1 mas rlundo ejemp0 de co se pudo mantener la ttvlaridad de un reparimionto cenmanos del mismo grupo familiar ao largo de mas de 200 aos. El prime poseedor dde esa encomienda fue Francisco de Talavera. Su hija, Inés de Sosa, cas6 con Francisco de Cardenas y Mendoza, quien pasb luego también a ser ilar del rmencionado reprtmiento™, Pero Inés falecé sin dejar descendencia,y su marido ‘casb on segundas nupcias con Leonor de Vera y Aragon, manteniendo laposesion de {108 Cr ego Cael y Beatz Marcquin con oil sore a encaminda de Herc ao do 1863) AGI. Escbanla de Ciara 4970. (104) A a uene de Sebastian Sanctet 62 Maro el ce ue Reva yo coricaros del pepehiad owpr et 2 ce ove de 562 sueecn en wl vic el oparmins de archi a {evar de Beatz Waronun. Ck. AGL. Esembnia de Camara 497-. (105) AGN, Prades Cv, 3, cad. 100 YOSE DE LA PUENTE BRUNKE a manos de gu nye mame deC L = ie ia oe es asia rprininops (1O7)AGL, Uma. 176 (ne ee carta len mise. ‘avicenco ys descendercan Rec TenY Gaia 6 1(Una 1965 515, mn tt 44 +e eee seesseeR ENOOMIENDA Y ENCOMCNDCNOS EN EL PERU ‘de Cachapoyas, desde 1548 hasta, almenos, 1692, Porctrolad, yavlamesLockhart hharlatado con cierto detalles divers recursos delos que se vail grupo familiar vasco de oe Vergara pra ranemitr su encomiondaa través d varios membros do ese lan." Fueron diversas las maneras a través dels cuales muchas familias encomen deras pudieron lograr la posesién de sus reparimientos por mas vidas de las contempladas en a legislaién Garcia Bernalha resumido os recursos que paraeste fin ufizaron muchos encomenderos yucatecos-y que también se deron en ‘el Per {en otden a mantener la posesion de un repartimiento sin ning la egslacion: entre ‘tos, enunciar ala posesién de una encomienda en segunda vida, por otra que se recibe on primera, aunque su valor sea menor acuerdos con el gobernadr, seg as ‘uales se renunciaba a una encomienda en segunda vida para, unos meses despues, volver a recibir la misma encomienda, pero ya en primera vida; obtencion de ccncesiones conjuntas a maridoy mujer en una sola vido bien conseguir que una «encemionda, al quodar vacant, ese concodida a tro memo do la mma familia «que a habia gozado, alegando los mismos méritos de as antepasados porlos que ya 2 habia concedido originalmente el repatimient”. Oto sistema muy utiizado para conseauila posesion de repartmientos y evtar que pasaran al pattimonio de la Corona fue el de organizar matimonios de encamenderos ancianos, oqueincluso estaban yaen ellacho de muert-enlos casos «enlos que no habia lugar a suoesion en segunda vida por caecerse de esposa ojos legitmos-con damas que apotaban aprecables sumasde nero por aocede al goce delas encomiendas al envudarprontamente, como era prevsble. Fue 6te un recurso tan fecuentementeutiizado, ue el propo virey conde de Niova, junto con los ‘comisaros del perpetuidad, se vio obigado a tratar ese probiemay dsponernormas ‘Precis que puclesen impedi an notonos abusos de espntu de la lecslacion El mismo conde nos da mis detalles de la magnitud de ls fraudes que ala Gorona se hacian con la mencionada modadad ) Laskar, opt 9.28 (111/GatiaBeral Manulretna, Yuan Poblacion yencomiendabjlos Aust Sein Ex «Ess Hspanoamerians, 1878, pp. 225228. Por orl, nla encomindade Colca, els reparimeis que ueon de aya. cada aml Siva Guzman, Dogo oe Siva wo [a estn en pineal, aca 58, y Th, sj ligtio y sioner othe petomanie ama nueva ancomanda pr de we. Ch. Tat. 11 Par lca Tusa te han caro tambien algunos pocdiientsiequars dels goberadres ara rates eco ‘iendas por mas wds en maos de ceteminadas alas. Por emo. nocasores as aliSdos (geteracres corcedeonroparmioios aos rardos 6 aus ercorerdeae qu ean ut etcees en sounda vial no poder ner anbosconuoes dos ercomandas sas ya que lalla lpchbiaen estos cases el marco sala rerun ala ecarienda propa para see concedes en ime vid a do su mj. Ci. Gorzlez Rodiguez,Adoko Ls, Laem amienda en Tucumén. evil, Exe, Dputacin Prova de Sela 1884. 135. OSE DE LA PUENTE BRUNKE -*(..) Por cuanto es notoro ie frauds y cautelas que as peer on? Pr todos entenci os micas Sus maridos aquellas muj ‘Meseshubieren levado uy las mujeres que al menos durante dos pestis a verdadera via matrimonial, «de consuno como marco Sinembargo, Continuaron tea a 'dandose, a pesar de la dsposicién i cos. En 1567 a comands lteralmente morbundos, poring a Se tees dea a ‘NUEVOS casos me a _ i ndelon oe Chace ‘0° este tipo: uno de ellos en 890 aos de edad, « ntrajo nupcias un encomendara onl naan Ys motos suerte Ces (12 Tad 2 sr a wenn tin rote ena, i itt 38.4 Leak M4 eo ramerens ("1461 Monain aM Lins, 7d ene oo 1867. AG, Lima $2 46 ees ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU ‘Ai, el sobrno deltal encomendero ditunto, quien no tenia derecho alla sucesién ‘on a encomionda, pudo tomar poseein de ella como sogundo marido do la viuda y heredera. Elmismo fiscal Monzén hizo también referencia al caso de Lucas Martinez Vegazo, quien se desposo con una Leimebamba, en lajursdicién de Chachapoyas'*. Sabemos, ademés, que el Cosejode Indes procuré mantener una vglancia constant para que ‘uese apicada en odos ls tertoros inianos la norma dela confrmacién rel. Esto 10s lo muestra, per ejemplo, la oSdula del 2 de mayo de 1652 que esipulaba que en ‘dos los ttulos de encomienda dados por las autoridadesindianas se incuyese una cléusula, en la cual 62 advitiese a los ofciales reales que antes de que los ‘encomenderes enrasen en la posesin de sus mercedes torasen nota del distro en ‘ue estuvieselocalizada cada encomiencda que se proveia. Esto se dspuso on la finalidad de que esos funcionaros pudiesen pedir con rapidez la vaoancia de las ‘encomiendas para cuyo distut los tulares no hubiesen recabado la confirmacion ‘eal en al tiempo previsto™ Junto con el elo que el Consejo de Indias ponia en que se cumpliese con la nor- ‘ma de solar confrmacién, es interesante también referinos a contadiciones en las que calala poltica dela Corona en estas materia. Fiémonos, por un lado, en el ‘caso de Andrés de Carbalaly Mendoza, vecino de Lima y descendiente de primeros ‘escubridores de! Peri, a quion on 1686 se fe denegé la confimacién de la encomienda de Santa Lucia de Moche. El scl el Conse de Iniasafirmé que (127 Gone Roiuez, pt pp. 149164, (120 hp. 14-1. (125) En 1632 se ctrl confrmacn en aposesion cel enconienda de Lemetanbaa Marvels Vega Bazin y Guerra AG, Lina, 23. (130) GF arial op. 241. Maree el cbulae 21 de oad 67820 retréalvirey al Poi que Gta despa de sus enconenas a aguas pasoras que no habla cum con solctarla contac. AG, Esrbaia da Ciara, 517-4 51 OSE DE LA PUENTE BRUNKE ipa 1 la posesiér =partimi Seeger tates paes srantmmaoan se, om ; aes eae ei a sin problema alguro de las rentas de sus ae 34 5X, ws cranny STEMI GL Cans donde, ao ago ‘canfirmacién. Estuvo si or que se cumplira con el ltecimenia una cama ge eee PAGO Bost cunplinone nee ame 2 1884 oc vie ue oa Plat, jostadis, "7249S Poseedores que naseson ee OO 8 tributos de las | conservacion y detensa del con Sus inl resumia las nals obgacions co — Inet de re ago. & ercomendes de on lespinty de . dctna yaad ae Raa Dudes do ‘its encomendados, (19 C0, ina, 2s, (132) E00 ets shu no pons, sade ean Sorts neg ‘etn oee BAS rae ME tae og ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL. PERU Y de su lealtad, la detensa, y conservacion de estos dominios que nabian {ganado para nuestos Reyes, ellos mismos ous paces y ascendientes»™, Las obigaciones des encomenderos fueron también materia sbordada pore! viey Toledo en ls reformas queintrodo ene vreinat; modifié dchas obigaco- nes, dilléndoasaalcanzar tes fines bésicos: aumertar is compromisos de seni alrmonarcaen etribucin de laencomiendarecbda; conseguir un meortratoparalos indigenas:y presonar alos encomenders para sooner als sacerdtes en su labor evangolzadora con los indos a eles coniados. Las nuevas condiciones -esistdas or ls encomendeos, ya que implcaban una dsminucién do sus rentas- fueron Pricipamente cinco: sien alg reprimiento la doctin requria para su sosten- miento un gago mayor al previsto por la tasa realzada,debia el encamendero ‘sufragarlo por sus propios medios, sin poderies exigir ningin tributo adicional a los incios; el enoomendero no podizimponer el senco personal asusigios, nplantear cambios en fo que eos estuviren obigados a pagar pola asa tampaco pda el titular del repartinientoposeerheredades en os téinos del msm; estaba obigado «8 defender a los indigonas fone a posiblee abueoe de sue caciquoe; y no debia camera con fs naturales de su encomenda, ni consent que los doctrines lo hiram = Una de is conccones bésicas que todo encomender debia cumplr era la denominada dela vecindad. Ya en 1538 sa habia spuesto que los rpariiantos debian ser encomendados a «ecinas comarcanas. Los encomenderas debian ‘esti prOximas asus incos para poder cumplrdebidamente con sus obigaciones' Ning sausente» pia ser proveido en encomienda si algin caso semejante se aba, deberaresttise todo lo perctdo de ela”. La disposcén, sin embargo, ue muy pronto variada, en vista de que la mayria de los encomenderes se habia ‘omveridoenun obstculoparalalaborevangezador; se dispuso entoncesque bajo ringin concepo resiiese el encamendero en los pueblos donde lo hacian sus indigenas,y que curpiese la obigacén de vecindad istléndose en la ciudad cabecera dela juisiccion donde selcalizasen sus encomiendas™, (134 ble ema, ct, tunes 1 as 1/3 (135) Levi, Reber, Don Francisco de Toledo, supremo orgnizador del Pei: su vid, su obra (15131982 Buns Ars, 195-182, vl | po 3823. (198 Esta dspscin ue posteiomerte cop an la Recoplcén ity 3 {187 Recoplacin, Vt. Vil, ky 18. Ci Sotizan Pereyra, opt cap. XV No. (13 Portas obs echadason 85,159, 186,158 180s roi alas ncanenros "esi nls pebos donde lo hacian ls indos desu reparmients. Ct. Solano Pera op lb. lap. VI, No. 7.Junocon ol, 1 de marze 1583 esatend Flpellaclgacon Chiodos ercomenderos dene casas blades en las Cutlacescabezas de sus encomienas. (Ck, Recopacn, bi tay 10. Sabre exa me punt, Pars Famine, op. Bat ya7sa74 53 {JOSE DE LA PUENTE BRUNKE nun primer momento fue muy esta la exigecia en cuanto al cumpiien ‘de esta medida. Elmarqués de Cat rid en Lia, of31 de marzodo teh one ‘ordenanzas pera {a ciudad de! Cuzco», en las que reiterd a los encomenderos dela ‘Gudad imperial a oblgaci6n que tenian de residiren la misma! En realidad, al nico ‘CaSO que hasta ahora ‘conocemos, en los primeros tiempos, de encomendero que giz eran sesenca en Lina een un encamonda en el itor be aes Sane mn, Francisco Pizarro, a quien sirvié como una suerte de tame ee ‘epartimiento de Lambayeque, en el distito de la ciudad de Teller Baran puorescisipotemasen li, cudaddelaqufue alae 8 y donde pudo hacerse de considerable fortuna, dedicado a actividades cues hee Ron '@ Ser UN notorio prestamista’®, a Embargo, muy poco tempo despus de legar al Peri, el vine T. nie ato narovan pepe: a esan cen oak Senge rele nants Para auseiase no sto de los dsttos de sus neomiendas, ara witse a Espaia y gozar alla de sus repartimientos». Digi ar Pa ool ma itaen 67 manana que con exo eos leno ‘orion y aa moses oro yo poquona ‘le pores ere as ethane ues oben sus haciendas muchos ‘Melos tratamientos a | os indios»'*, Todavia la tributacién que loe | consierale paralavidaeconica lien nearest onto ". “Como se puede apreciar en la tas realzada tras la vita general el terion recta por el vrey Toledo, Ya para esas fechas estabanestableidas las referdas Cargas dela encomienda para co pag debian realzarsolos deecveros rma ‘a aitrbuto de cada opatmiento anes de legar a manos del encomender, Como gio pone al tuacén no fue recida de buen grado por los encomndras, Soe rasuce por ejemplo, enunacata quel cabldo secu de Los Reyes igo co bg a Conssjo de ndas™. En ese documento se soliiaha wemediar ei nolable grav que ls encomenderos habianrecbido a ravée dels tases mandates car reocionar por Francisco de Toledo, en las cuales se les descontaba sgran pate» Gels trbutos de sus repartmientos para destnarios «alos comegidoresy protectores de los naturales a ores efectos a que fos ‘ncomenders no estén oblgados, porque las cédulas prmeras do las rrcrades de 1s repartmientos solamente les obliga a pagar doctina y ddezmo como lo han pagado y pagan, yno ora cosa. Pero ya que se habia atadido a las oblgaciones de as encomenderas el pag? desalario de ls veces de naturales, loscabldanes imefosplantoaban on amisma rmisiva que aquéllos supusieran una cantdad maderada, neoesaiay no tan excesivas como Son, y que as ese encomendero «un solobenemé- ‘toe, cargando pensiones en favor de otros”. ‘Asi pues, ls pensinistas viiron a se, en princi, personajes que £0 Be- nefciaban con la concesion por pate de las autoridades de una renta pecuniaia fextraida de una determinada encomienda, Sin embargo, segin sefiala Tores Saldamando, en algunas oportunidad ol pencionista quadaba en mejor situacion ‘ue ol encomende, ya que mienras éste sto podiareabi un maximo de 2.000 ‘pesos anvales, as pensions se hieron en ocaiones de , Tlegéndose casos en los que eran tana las pensiones quo ee curgaban sobre o reparimiento que obigaban al encomendero «a recarga el trabajo de losindios afin de ootener alguna utldad»"” (174 Dispos oogonia Recopacin Vi Vly 7 (175) Taras Secamando, ope, pp 3840, (75 Recoplain, Vt. Vil 28 (177 Tere Saldamanco, op... 40. 4OSE DE LA PUENTE BRUNKE e Velasco, después, ait accra Sree bn pre os Pensiones, pues, consitcron one ges 208 J Muchos pobres esti enlas¢ ‘on las ciudades ¢ ‘Si soul gnmn caren saposen Estas dos itmay ooo 8 tuo nd os pensionis- magistrados fueron i rapier opr (SrA seer denums cant Se otra once ‘mostaron GUE alos pansionstas se or Gut ala big delaras eS embarg, 52 quel ‘sarimiendo diversas Teponaber at las pensions que eran concedes pr pe ms bio essa, rece ymca ret a8 Voces personas amperes OBES sions an Li rca cual conte ean it 88rd soa (176) Recaption, iv, (72) Hake opel Hp a Cy (ray 1. LV, ey 31 1 ey 30 64 [ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU resi en la jurisdccén donde se localizasen ls repatimientos sobre los cuales tuviesen sus mercedes. Proponian, en odo caso, que esa obligacion se establecise pata las pesiones qe en elfutuo se proveyeren, «ques aceptaren (os apraiados) la meroed con esta carge, verén lo que las convene» ’A pesar de la opinion en contri de la Aucienca imefa, la obigaion de la residenca para los pensionstas quedé en pie, Asi nos lo sefialaba, unos aos ‘despuée, Juan de Solzano Pereyra, Este trataist, basandose en que las pensio~ res consitufan mercedes otorgadas pore ey y no por los encomenderos, pinaba ‘ue los persionstas debian er realidad sor conideredos como oncomenderos 0 “suocomendatrios». Sostenia Solano que los pensionistas tenan la misma blgacin de los encomerderes do hacor el jramento de fidedad, de obtener ‘onlrmacion de sus mercedes y de resi en a ciudad cabeoera dl juricicién donde selcalzaran os repartimientos de los cuales ecibian sus pensiones.Refria también Sol6rzano-y lo clams en abono del idea que antes hemos mencionado sobre que en ocasiones los pensionsts learon a adquiir una situacién mejor que la de las propios encomerderos- que las rents que las pensiones brindaban no ‘estaban sujtas alos descventos propios de larenta encomendera las «cargas» de la encomienda- aun cuando se dise el caso de que pagadas todas as cargas y engines sle quodase puso 0 nada de renta al oncomondero~" ‘Un documento fechado en Madrid en 1618, yfmado por Gaspar Bermidez de Caso, s2 rofriajustamente a ciortas ventias que podian apreciarse en los pensionstas con respeto a 0s encomenderes: as, por ejemplo, soalaba que los irre solian conceder las pensiones estableciendo que ol monto otorgado para ‘ada una de esas mercedes no debi car rebjado on ningdn caso, aunque la propia tribvacion del epariientecisminuyese;tapoco se hacia pacar alos pensions tas enel pago dela octina nen ninguna de las tras cargas de laencomienda sigue Giciendo el ctado docurrent- «dejando todas estas oblgaciones y riesgos al ‘encomendero=". No pdemos dcirlo mismo acerca dl impvesto dels tecias de encomiendas,nstuido ena segunda dada cel sgloXVIly consistent en el pago {que todo encomendero deba anvalmentehacer ala Real Hacienda dela terceraparte do a rena iquida des epatiianto; pola infrmacién que hemos podido manejar, (101 La Audi aM Loe Foes, 75 abl de 1621, AGL, Lina 7 (182) Ck. Solzano Pereyra, opt fal, cap. W. Gara Bara opt pp 234205. {ias}Parouerde Caspr Bomitne Cast, Madi, 2 eearzode 1618 AGI. Lia, 15.Snerbago Tao algunos casos orbs ae ls pensar ses exact a oblgacion de paca ne oo dels ests da ecamends, cova cox con la pension ue two Faris Galego Se ‘odo etude sbr uadelas mince del earimenn de Psnacochas. Of. Tas. 122 Porc’ ov appl, ito anbinpeniones seas pagn de costs eniaencomienda de Huth Hance Ch, Tasa. tp. 257 65 -siendo (las encomiendas é fgon yuna misma aco oe0%eS) de una misma natura ens |COMer por una misma regian’™_ antes (i rma Cro ea 2 ro oe, 5b en Ga Boal wal onan ene os aos wavarenes que ste as ene e890 XI rect ENOOMIENDA ¥ ENCOMENDEROS EN EL PERU ‘A efectos préctions, ambos personajes seguiian gozando de su respectva rritad en euanto a a renta del reparimient, lo Cual nos lleva a pensar que muchas Donsionesiveron en elect, -encomiondas enobirtas»', sobre todo en as pst treras del siglo XVI, cuando ya las oblgaciones inherentes a la condicion de ‘encomendero iban carédlendo do sonido, al ise conviiendo progreswvaente la fencomienda en una renta més ala que cualquier personae con cierto predicamento entre las autridades podia accoder. Por oto lado, en el Per hubo casos ens que una misma persona legS a poseet gensiones sobre encomiendas pertenecante ajurisicionesdistitas, con lo cual tna podia cumplrcon la obigacion dela resdencia. As, preform, ena segunda rita delsiglo XVI Pedrode Ciancaera pensionsta sobre repartimientos de Huamanga ¥ de Cuzeo. Enlos primeos ustos del siguiente canta Francisco de Valverde y Gonireras posefa pensiones sobre encomiendas de las juriscicciones de Lima y de Trilla. Para a sogunda mitad del siglo XVI podemas mencionar el caso de Juan CGonzélez de Uzquetay Valdés, quien recbia pensiones de encomiendespertenecion- tas alos distitos de Lima y del Cuzco. ‘Numerosas fueron ls instituciones de dlverso tip que gozaron de pensiones ‘sobre repartimientos de indios, como los monasterios de Santa Clara del Cuzco, de Huamanga y de Trill, y los de la Encamacion de Lima y de Trujillo. Ademés, poseyeron pensiones al menos cinco hospitals: el de Huamanga, el delas Naturales {del Cuzoo, el de San Sebastian de Truilo,ylos de Santa Ana y San Andrés de Lima. Jgualmente, la Universidadde San Marcas ve benefcié también de rntas provenien- tes de pensiones sobre encomiendas. ‘Apesar de a arden que disponia eno poderse conceder pensiones por un vax tormayor de 2.000 pesos, varios casos noe muestra pensiones que excedleron esa cia: por ejemplo, sobre la encorienda de Parinacochastuvo Juan Maldonado de ‘Buendia una pension do3.000 pesos, y Diego Lpez de Zuniga ara por 4.000 pesos. En el eparimiento de Cajamarca goz6 Alonso de Vargas Carbajl una pension de 2.500 pasos a pncipios de siglo XVI Por oto lado, hubo muchos casos -sobre todo en la segunda mitad del siglo XVI- de pensionstas que ala vez poseian encomiendas en propiedad. Incuso ao largo de todo el siglo XVI siguiron dndose e50s casos, aunque con menor frecuencia. neste sentido, hubo al menos una disposiién regia através dela cual et monarca ‘ordené que no se proveyese ninguna encomienda de indios «en personas que tuvieren pensién sobre otras, ni se den persiones a los que tuveren encomiendan [a cla real de 2de julio de 1686™. (188). Garcia Bema, opt. 299 {188} Ene conde de Lemos SM. Lima, 1 de ciemre de 1868. AG. Lina 8 67 YOSE DE LA PUENTE BRUNKE 5+ Los ttimos tempos a a En el ntio de a colonizacin Siaquelapersonaque habiacontb "2 benemérito por antonoma srs Pies bdr Enesanegen steno quesehatacorias a Sona fencomienda trata consigo win Ue vertabraba ol Ya ol bres cle waa droge 2229 © So HV en en elvireinato, Sin estan en aa odes estos factors varianon de teferimos. A pesr de quo la echo a sonido asin Sines dberia drs poned acim 1660 ala que nos fee st (180) alka 56 io de 1758. A, Lina, 140 638 ce sssseRe5 FEN ENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU descendientes de benemértos, lo cierto fue que el avortsmoy as infuencis en la Cone Iban ganardo terreno entre los méviles por los cuales se otorgaban las encomiendas”. Sin embargo, a evolucién descrta no fue general con respecto alas encomien- {as de todos los ‘eritoros ingianos, Por conraste vale citar el caso de Tucumén, donde a fines del siglo XVI la encomienda se habia afianzado plenamente como la insttucién clave en el desarolioecondmico, social y politico de esa jursdicién Esto ‘se explica -y aqui radica la diferencia con el caso peruano- por la casi absoluta inexistencia de yacimientos mineros de oro o de pata. Por tanto, la encomienda no sl fue a base de a riqueza de los primeros espaol que a ese teritrio llegaron, sino que ademas fve para sus descendientes elmejormedioparamantener unabuena situacién econémiza a posesién de un repartmiento brindaba la mano de obra que se requeria paralas actividades agricola yganaderas, que constiuianlos princpales rubra a los que se dedicaban los pobiadores de esa zona’™. Del mismo modo, en ‘tos terttoros, como Yucatan, Paraguay 0 hil, laencomienda sesiquié mantenien- do después del siglo XVI como una de las bases del desenvolvimiento politico, ‘econdmico y social de esas regiones, por su menor quezaen recursos naturales ‘Como sefile Silvio Zavala, en la Reeopilacién de 1680 la encomionda cores ‘onde ao que dae llamar «forma nueva», consistente en la mera cesién de tibutos {que ls indo deben ala Corona; esta encomienda, mucho mas reglamentada, ya tiene poco en contin con fo que signifcaron los repartmientos de indios en los ‘rimeros aos de a colonizacié. En realidad, en el siglo XVI! la encomienda consis- tira en el goce, por parte de un particular, de un impuesto que lees cedido por la Corona. Los derechos del encomendero se reducan ala cobranza del tributo de su respoetvo repartiminto, ya que, al moros lagalmente, el servicio personal estaba ‘supimido. El enoomendero era «un beneficiaro temporal limitado de la Corona, aunque su morced tenia cera establidad por ol iompodolas vidas porlas quehubiere sido concedida™ Pero la referida establidad fue poco a poco desdbujéndose a medida que avanzaba la decinoséptima centuria «Lasnecesidades hacendarias del Estado espafol durante el gobierno delos Litimos Austrias,y el cambio general de la politica al advenimiento de los (191) Recoplacén i Vl eyes &y 8. Como sola Sv Zavala, -lavoisme ye desorden {snare on Co durarisgotiemos dee imac Avra, ncsearamente erejaron ‘niaplteaostucons de at, Zavala, La encomienda.ct 26. (192) Gonzalez Rosier, op. p. 95-6. (193) Vase, or ri, Garcia Baral, op. 2 (198) Zavala Laencamienda..ct. pp. 200 214-26, 69 OSE DELA PUENTE BRUNKE encomenderos ncaa peta rorwneop 7 U8 Guedasenvacanes: ey ee 19 Teens et ro hacia més qu erates, oo disposi ue puesta en |nischocén donde eee lacin aunque en realidad su contri Vicon ss indas enc en este las encomienda, candoapar Nao tee ian rs aa mote 1985, yo, Asta, Virenato pervan,| oon TS Se Pan eer 70 LENCOMIENDA Y ENCOMENDEROS EN EL PERU conqustadoes on el objeto de mantener a posesion de un ropartimionto de insios YYiasuresién de as encomiendas no acarreara ya paralos habitats del vireinato un quebranto econémico™. ‘De este modo, el interés fiscal prim frente a todas las razones que pudioron haberse esgrimdo en conrad a supresion dees encomiondseenlncias, a cual fue dictaéa por Felipe Va través de dos decretos, en 1718 1720**, Por una real cla {el de agosto de 172, caida por el monarca especficamente alas atordades {el vitenato del Ped, se instaba al estctaobservanca de los referdos decretos, ‘atid ve purvalmentesefuosonncorporando ala Coronatodoslosrepartmientos, & meida quo fuecen vacando por muerte da quienes entonces los poseian™” Sin embargo, tampoco en esta materia la realidad iscuriénecesariamente por ‘el derotero seflado por lgilacn. Por ejemplo, podemos care caso de Maria Vicenta Arias, quien en 1724 acoedi ala posesién del repartimiento de Colique, en |ajurediecon oe Tull, cuando pra esas fechasyatoda ecomionda vacane dba incoporarse al pasimonio dela Corona. Pero nucho mas lamatvo fue o caso 40 Nicos Manrque de Lara y Carlo de Abornoz, marqués de Lara, quien fue encomendero en el Per en los primeros alos dl siglo XIX. Tenemos nota de elo fravés deo expresado pore propio pereonajeensutestamento oforgado en 1814, iamo en os tends inaos: Sto algunos ras com raban on desert fete oeeao8o des ces soe et vara on eve ans ceoroica eogia estado estechamente sada abo dln. Ten ue ben expos Goa neaperactn genera ys manuvese ols, esa Bon eed lege Ye nen de as encanta. Guia Baral Manuela Cia, La 90, ‘tad de Yucatn, 170-1750. Sel, Escua de Etc Hispanoarecanos, 1972p $838 (eon Ot Zea aencomlnda_ct pp. 250252 Navara Gara Ls, Foie Conee dens ibaa din encamindas. Temas Americans, 3 (Sv, 1983), 50.5 (201 ea cba dtd agosioce 1721, chia ol expats Str ia encanta da condesn do Alama AG, Esrbaria de Camara, 1085 {ana ho tern pcos ioe encomenders que Squlron en passin do us macades mucho fempo hcp de 1720 Sblen on su mayor pan sera de ques yaposein si eparimets on (atcha cla ncoporacon goer, A don ans casos coy ot a chads de Mara V- see fas de personages que eciberen ercomirdas despuis de 1720 0 de citot cadets oe cya exiseria tneras nota parala segunda rita el so XVI. Prem Sivan it ms wecrmerders de Chars, Contarea ei Cueva Uno, No oe ccudnda acad ala poses es eparment; sn embargo, polafechade su musi es resale qu ubiec ects a mca con poster a caperacn gonea de os rte a OBO casa epee ola Casa Ges cnt de Atari 02 DO ‘Fatercomnda do Cjanarea es 123 La crsofv ue decgus e1720 esa erconenda ‘ect goad por ica fai po res vd rs. Er cunt alaormacon obec str os ‘rcnmencere siglo YL, os ha io batt tl un doom aerate el Aco Hs ‘Grea Naconal de Madd (nasi, 2208), dl ual tuvnos noi pr getleza truest co lope Peco Gund Prez. a quen oxoresars nvesto apadecmients, (180 ad, p. 250. Poo 40 curt a ‘oc, Chile y Paraguay se ercot m1

También podría gustarte