y lenguaje malsonante5 hacen alusión al conjunto de formas lingüísticas (palabras o expresiones6 denominadas malas palabras,7 palabras gruesas,8 palabras libres,9 palabras mayores,10 palabras pesadas,11 palabras picantes,12 palabras sucias13 o palabrotas)14 que la comunidad lingüística o parte de ella considera inapropiadas, obscenas, indecentes, deshonestas, injuriosas u ofensivas. A quien emplea un lenguaje soez se le considera malhablado, desbocado o bruto.15 Estos conceptos suelen identificarse con los de ordinariez,16 vulgaridad ("cualidad de vulgar")17 y vulgarismo ("dicho o frase especialmente usada por el vulgo"),18 y a este último se le identifica con lo soez ("bajo,19 lo indigno, lo vil")20 y lo zafio o grosero ("carente de educación o de delicadeza", "de mal gusto", "de escasa calidad o sin refinar", "que carece de precisión o exactitud"), aunque no deben confundirse con la totalidad del registro lingüístico vulgar, coloquial o familiar ni tampoco con las llamadas lenguas vulgares. Todo lo anterior es lenguaje soez y no está directamente relacionado con convenciones culturales, y solo puede definirse dentro del nivel émico de las ciencias sociales.[cita requerida] Se considera "soez" cuando se hacen manifestaciones lingüísticas de mal gusto, groseras, o con el propósito de ofender al prójimo. Es propio del lenguaje soez referirse a lo que socialmente se considera sagrado (religión, raza, origen familiar o nacional) o tabú (escatología, determinadas partes del cuerpo, sexo, sicalipsis, humor negro); liberando la tensión emocional con expresiones excesivas o hiperbólicas (blasfemia, maldición, reniego, juramento, voto)21 o dirigiéndose a un destinatario concreto en forma de improperio,22 insulto, desprecio, ridiculización, estigmatización o descripción personal exacerbada. También existe el lenguaje no verbal soez (gestos soeces)23 e incluso un lenguaje icónico24 soez (emoticonos). demás de los términos directamente derivados (grosería, crudeza, procacidad), hay muy distintos sinónimos o expresiones equivalentes a estas denominaciones, muchos de ellos con una utilización restringida a ciertas zonas (localismos):