Es un sistema heterótrofo ya que necesita un aporte continuo de flujos materiales y
energéticos para mantener su metabolismo. Estos flujos sustraídos del ecosistema
natural son transformados en el interior del contexto urbano en el curso de actividades económicas y sociales. En su salida dan lugar a los residuos que se incorporan nuevamente al medio ambiente a través de flujos bajo la forma de contaminación.