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carerao 4 Soorr Hunt, Rosexr Besson v Davi SNow Marcos de accién colectiva y campos de identidad en Ia construccién social dé los movimientos* ‘ay bos conjuntos de conceptos relacionados entre si, pero ‘edreamentesn cones formal, los cuales han nfo de forma notable en la teoria reciente de los movimientos sociales y en su investigacén, El primero se centra en los “process de reac de marcos de referencia” (ring procs) que afectan al esquema interpretativo construido por los seguidoes de esos movimientos al buscarel sentido de sus mundos sociales (Gamson ea, 1982; Snow ‘tal., 1986; Snow y Benford, 1988, 1992; Johnston, 1991; Ger hardsy Ruch, 1992; Tarra, 1992; Benford, 1993a, 1993b). El segundo grupo de conceptos dirge su atencion hacia la identi= dades colectivase individuales que construyen los seguidores de los movimientos sociales en la actividades cotidianas ela acc «olectiva (Pizzomo, 1978; Cohen, 1985; Melucci, 1989; Taylor, 1989; Gamson, 1992; Friedman y McAdam, 1992; Hunt, 1992; {hrs Galo) Nr Se mee Fo ay i, Pin Toe Unive Pe S94, fp 185208, An ats eal el Co «rien gc ein Et a we Fe ‘vamos a dar un primer paso en la investigacion de las relaciones ‘entre los procesos de ereacn de marcos de referencia la cons truccién de identidades colectvas yen el andisis de la forma en {que esas conexiones pueden facilitar nuestra comprensién sobre la movilizacién de acciones colectivas. "Nuestra supuestoinical consste en que la construccin de fdentidades, tanto si son intencionadas como sino, son inheren- tesa todas ls actividades relacionadas con lacreacin de mateos de referencia en los movimientos sociales. Los procesos de crea cidn de marcos de referencia no slo establecen las conexiones ieolgicas entre individuos y grupos, sino que también proponen, refuerzan y adornan las identidades, cuya diversidad abarca desde las acciones de cooperacién hasta las que producen conflicos. Tales procesos consiguen esos efectos al situar 0 posicionar a grupos relevantesencl tiempoy el espacio, yalatrbuirlesunascaracteris- teas que impliquen rlacionesespectficas leas de acid eomu nes. Las estudiosos han observado desde hace bastante tiempo que la interaccién entre dos o mis individuos o grupos precisa como ‘minimo que éstos se sitden o identifiquen como objetos sociales (puede consultarse a este respecto: Stone, 1962; McCally Simmons, 1978; Snow y Anderson, 1987). Dicho de otra forma, es preciso cestableceridentidadesespecifias en una situaeidn determinada, [Nuestro argumento es que en el terreno de la accin colectiva se promueven y weafieman unas identidades individuals y colett- ‘vas de dos formas diferentes, que estén incerelacionadas aunque son distintas analiticemente: através de la participacin en la pro pia acién colectva, en los actos reivindicativos 0 en las manifes. taciones de adhesion (eebratng),y tambign através de los procesos dle creacién de marcos de referencia, Alo largo de este capitulo, nos ‘ocuparemos de exa segunda forma, es deci de la relacion existente fete os procesos de configuracin de marcos de referencia y la cconstruccién de identidades relevantes para la accin colectiva, Para elaborar las conexiones conceptuales entre la configu racién de marcos de referencia y la construccion de identidades, ‘os centraremos en las demandas de los miembros de las orga zaciones de movimientos sociales (os) acerca de los grupos mis MaRcos be ACN COLIETIMA¥ CAMEOS BEADENTIBND ws Uestacadas de actores dentro de los contextosen los que se desen vvelven, Baséndonos en la investigaciin que hemos ealizado de ‘una variedad de movimientos desde la mitad de los ais sesenta (Benford, 1984, 1987; Hunt, 1991; Snow, 1993), y teniendo en ‘venta las observaciones conceptuales de otros autores que ana: lisaban categoriasrelevantes de actores en movimientos sociales (compérese con: Gamson, 1990; 14-16; McCarthy y Zald, 1977: 1291-1299. Zurcher y Snow; 1981: 479-477; Turner y Kilian, 1987: 216-217, 225-226, 255-258), sugerimos que las demandas dé los miembros de esos movimientos sobre esas categorias de _ctores se agrupan en tornoa tres conjuntos de identidades sociak mente construidas que denominamos campos de ientidad. En primer lugar, existe un tipo de individuos y de coletivos que son icentifieados como protagonistas por su forma de promover osim- pitizarcon ls valores, metas prcticas de un movimiento social ‘estos actores son los que tambin se benefician de las acciones ddl movimiento, En segundo lugar, se encuentra tr conjunto de personas y colectivos que parecen estar unidos para oponers alos fsferzos de los protagonistasy que porlo tanto Se identifican como Jes antagonistas. Finalmente, tenemos un tercer grupo de pers sas que son percbidos como audiencias en el sentido de que son reutraleso son observadores no comprometidos, aunque algunos deellos puedan responder a, o informa de los acontecmientos que ‘presencien. En adelante, nos referiremos estas categorias de ken: tlades como campos de identidad, debido a que la identidades dentro de cada categoria se traslapan y peemanecen unidas y por ‘que son categoriasestcas, que se amplian y contraen con el trans- comso del tiempo. En este capitulo vamos a explora las relaciones existentes ‘entre ess campos de kdentidad y los proesos de ceacin de marcos de referencia, patiendo de los datos analizados en nuestros est ‘dos etnograficos sobre el movimiento budista de Nichiren Shoshs (Snow, 1993), el movimiento de Ciudadanos de Nebraska para la Tz (Nebraskans for Peace: Hunt, 1991) y sobre otras organiza- ‘cones a favor del desarme nuclear (Benford, 1984, 1987). Sin embargo, primero revisaremos los diversos enfoques existentes sobre la identidad, los procesos de construccién de identidad y la creacién de marcos de sigificados en la literatura sobre los _movimientos sociales. Esperamos que este resumen bibliogrfico proporcione una adecuads linea de partida para evaluat ls con- cxptos que aqut se presentan astcomo los desarrllosteéricos que sugerimos, Tnesminanes ¥ Movinenros soctates ‘Aunque el interés por el estudio de la relaciin ene ls identi des y los movimientos ha eclosionado recientemente, las prime as han sido objeto de interés para los investigadores de los mo- vimientos sociales desde hace bastante tiempo, Al efectuar un seguimiento y una evaluacién critica de este tema, Hunt (1992) distingue al menos tes tendencias distintas en la forma en que se han conceptualizado y enfocado ls dentidades en la literate: de los movimientos sociales. Una de ells consiste en tratar las lentdades como producto de estructura biolgicas,psicolgi ‘as y socioldgicas, Esta tendencia se hace més evident en los mo- delos psicopatolégicos que sugieren que os instntos primaris, 0 las estructuraspsicologicasinherentes a ellos producen violencia, tuaciones de panico, distarbios, ademas de otras conducts 350. ales (MacKay, 1932; LeBon, 1960; Trotter, 1919; Freud, 1922; McDougall, 1928; Moscovii, 1985). Segin este punto de vista as ‘dentidades son marifestaciones de estructurasasociles innatas ‘nel individuo, tanto ene! plano biolgico como en el psicolégico Estos enfoques psicopatoldgicas no son Tos snieos que conciben la ldentidad como un producto de as estructura objetivas subyacen- tes, Por ejemplo, en una etapa incial del pensamiento social, la identad étnica se consideraba a menudo como un rasgo exerci mente primordial, ya que se refiere a una serie de caracteristicas de dseripcién subyacentes y fundamentals que determinan ls iden- tidades (Olzak, 1983: 356). Siguiendo pautas similares, os enfo- ‘ques esencialista sean las caraceristicasisiolégics, las pred posiciones psicolgicas, os mecanismos de a biologia eproduetiva Yl historia division sexual del trabajo como elementos “deter. rminantes” de las identidades de género y de las identidades de los hhomosexualesy lebianas (Epstein, 1987; Marshall, 1991). Algunos investigadores de la teora de a tensién estructural indican también que las identidades se pueden consierar produc: to de ciertas estructura sociales inadaptadas. Por ejemplo, Klapp (1969), partiendo del interacconismo simbélico y a teoria de Ia sociedad de masas,argumenta que la estructuras sociales moder ‘as generan un desarrago que empua a las personas hacia la bis queda colectiva de unas identdades que conficran significado 4 Tavida de esas personas. Otros enfoques, como los de a privacion relativa y la inconsistencia del estatus social desarvollan argu- :mentos andlogos a los anteriores, airman que los movimientos sociales emergen cuando una eategoria de personas experimenta tuna disonancia psicoldgica derivada de la divergencta existente entre las condiciones relesy ls expectativas subjetivas de uni viduo ocolectividad (Davis, 1979; Wilson y Zurcher, 1976), Estos ‘enfoques asumen que las identidades que son generadas por la tension estructural de cardcterpsicosocial dan lugar a indivi duos especialmente prolives ala accin coletiva. Pero esta tendencia teria, centrada en analizar la identidad ‘como si fuera fruto de las estructura sociales presenta varias imi taciones. Al considerar que laidentidad es un producto o incluso tun sintoma de la estructura, el esfuerzo analitico se concentra en latarea de “descubri” las estructura subyacentes que origin as identidades. De es forma, la identiad como tal deja ce sere tema central de a investgacin empirica.Asimismo, hay otra tendencia a reificar los conceptos relacionados con la dentidad. Con relativa frecuencia, Ios investigadores presuponen que algunas eategorias ‘de personas poseen identidades homogéneas. Adem, el hecho de adoptar la perspectiva dels estructuras“determinantes” implica ‘quelas dentidades surgen de una tnica fuente, saber: dl instin= to patologico, de la tension estructural de caricterpsicosocal, Pot tanto, ls elaboracionestericas de carte unidimensional no the- rnen en euenta la complejidad y los diversos componentes de It ‘dentidad y especialmente la forma en que los diferentes actores sociales interpretan construyen y articulan sus identidades (Bhi mer, 1969), ‘Otra tendencia consiste en conceptualizar Is cuestiones de la dentidad y sus cambios como si fueran manifestaciones de los procesos macrosocioldgicos de transformacién social. Esta linea fe pensamiento ha sido impulsada por los investigadores de fos nuc- ‘vos movimientos sociales (0), quienes sostenen que ls cambios {que se estin produciendo en ls sociedadesindustrales anuncian ‘lcomienzo de una nueva etapa histGrica, ue ha dado lugar ala tclosion de un conjunto nuevo de identidades(Pizz01n0, 1979; Habermas, 1984, 1987; Cohen, 1985; Gamson, 1989; Kries, 1989, Dalton y Kuechler, 1990), Segin Melucci (1989), existen diferencia considetables entre ls anteriores formas del conflicto de clase y las que estin surgiendo en el émbito de a accion colec tiva caracteristicas de los tempos presentes. Es decir, se piensa {que los nuevos movimientos sociales van mas all de la hist6rica division de clases y de las hachascorrespondientes que pretend Togratel control del Estado y de as instituciones econémicas; por cleontrario, esas movimietos parecen orientarse hacia la trans formacion dela sociedad civil y de los mundos de vida (lfevor). “A pesar de las notables aportacones de estos anaist al este dio de los movimientos sociales contempordneos, tal tendencia {cayo fandamento esteba en considera las identidades como ‘manifestaciones del cambio macrosociolégico) también presenta varias limitaciones. Por una part, su foco de atenciOn quizd es “demasiado limitado, ya que examina solamente un subconjunto de Jos movimientos sociales que se dan prineipalmente entre Tos suje- tosde raza blanca, y clase media localizados en pafses de Europa fccidental y Norteamériea (Gamson, 1992: 58). Por otra parte, Ta teoria de los nuevos movimientos sociales sélo analiza aquellos rmovimientos politic-culturales de orientaién progressta y por tanto no conskeraottostipos de movimientos sociales como los religiosos y los de derecha, “Melucei (1989), entre otros autores, ha angumentado en con ‘ua de la eificacion de la “novedad” de los movimientos sociales contemporineos, Asimimo a la huz del andlisisde Weber (1978) ‘sobre confictos de estat, liderescarsmétios, movimientos reli ‘iososy estamentos militares, el supuesto de que todos los movi imientos “aptiguos” estaban basados en clases sociales parece poco fundado Tratar de suavizar esa hipotess, sosteniendo que [os Gnicos movimientos“antiguos" realmente signiicativos son los {que se fundan en clases socials, parece un mero eercicio de auto- ‘complacencia, Adems, ls afirmaciones de los analista dels 1s en el sentido de que el papel fundamental de la identidad colec- tiva es nuevo resultan tun tanto dudosas, ya que por definicién cualquier grapa autoidentficado plantea una demanda de iden- tidad. Por altimo, algunas formulaciones de la toria de los sous {mplican una tautologa: esos movimientos son definidos en térm- nos de un radicalism autocontrolado, de polities relacionadas con ‘cuestiones de identidad y ransformaciones de a sociedad civily ‘delos mundos de vida, y son considerados manifestaciones de una nueva etapa histrica emergente, caracterizada por un radicals mo no revolucionario, por larevalorizacin de identidades devs Iuadas y por la alteracin de la sociedad civil y sus mundos de vida, excepcién del trabajo de Melucci (1989) ls considracio nes de esas fendencias conceptusles consisten en afirmar que las identidades de los movimsientos son determinadas hist6ricamen- teen mayor o menor grado, en lugar de ser fruto de los procesos de interaccin social ‘Otroenfaque para conceptuaizarlasdentidades esl que spun ta hacia el resultado de la interacein ({nzractional accomplish tment). Por ejemplo, Nagel (1986) coneibe la identidad étnica ‘como unaconstrucciénpolitica Lasperspectivasdelconstructvis- mo han confrontado tambign los argumentos de los esenci angumentando que las identidades asoiadas al género, como las de los homosexuals y de las lesbians, se (re)oonstruyen a través de la Jnteraccin social de forma permanente (Ponse, 1978; Gerson y Peiss, L985; Margolis, 1985; Smith, 1990; West y Zimmerman, 1987; Marshal, 1991). Meluccidestacaigualmente ese aspecto cen relacién con el origen de a ientidad en la interacciOn, sehia- lando que la identidad colectiva es una definicion interactiva y ‘compartida (1989: 32). Taylory Whitier (1992), pariendo del ‘marco te6rico especfico de ls nuevos movimientos sociales y de Tas teorias del interaccionismo simbélico y del movimiento femi- nist, han investigado la construccin de la identidad colectiva ‘en Ja inceracein en funcién de los limites de los grupos y la dis Posicin para la negociacion que hay en un movimiento, ‘Los analistas de los movimientos vineulados a interaccionis- smo simbélico han tenido también an interés permanente en la ‘creacin de identidades aunque sobre todo de manera implica. Podemios mencionar a ese respecto que el énfasis de Blumer (1939) sobre el “espritu corporativo", la moral, la solidariad y la ideo: logia ya apuntaba directamente hacia cuestiones asociadas ala construccion de identidades. Taner y Killian se adhieren igual- ‘mente a ese enfoque, al afrmar que la continuidad de una iden- tidad de grupo (1987: 224) es un aspecto clave de la accion colectiva. Anilogamente, una serie de estudios recientes realiza- ‘dos por analistas del paradigma inteaccionista han investigado el lscurso en que se expresa el proceso de construccin dela iden tidad personal en una variedad de contextos diferentes (Snowy Machalek, 1984; Snow y Anderson, 1987). Esos anilisis coinc ddenen sefialar que la identidad individual, ndependientemente de ‘stestructraobjetva es ruto dela interacionseconstruyesocio= logicamente, Porellose considera que el discurso de a identidad individual puede entenderse como una retérica construida con- forme a unas pautas especificas de un grupo social y redefinida continuamente con base en las nuevas experiencias adquividas {Snow y Machalek, 1984: 175-177). En el plano omganizativo, ‘tenemos que los miembtos de las organizaciones de movimientos sociales oMs proporcionan aquellos vocabularosy roles adecuados para que los participantes y simpatizantes construyan sus identi dadesindividuales de forma que se una entre so incluso lleguen 4 comprometerse con el movimiento en cuestin, 0 con sus ON (Benford, 19936; Hune y Benford, 1994) Este énfasisinteraccionista en la dentidad y los contexts del liscursoesimportante para comprende la construocion establei- ‘mientoy transformaciin de la identidades coletivas. Si se con- ‘ceptualizala identidad colectiva en funcidn de a gama de caracte- Histicas destacadas que la organizacién del movimiento atribuye ‘otros conjuntos de actores,entonces la construcciny afiema- sens De ACCION COLECHYAY CAMPOS DE IDENTIOND 6

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