Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
de la
Realidad Peruana
ADVERTENCIA
EL PROBLEMA DE LA TIERRA
-EL PROBLEMA AGRARIO Y EL PROBLEMA DEL INDIO
-COLONIALISMO = FEUDALISMO
-LA POLÍTICA DEL COLONIAJE: DESPOBLACIÓN Y ESCLAVITUD
-EL COLONIZADOR ESPAÑOL
-LA "COMUNIDAD" BAJO EL COLONIAJE
-LA REVOLUCIÓN DE LA INDEPENDENCIA Y LA PROPIEDAD
AGRARIA
-POLÍTICA AGRARIA DE LA REPÚBLICA
-LA GRAN PROPIEDAD Y EL PODER POLÍTICO
-LA "COMUNIDAD" BAJO LA REPÚBLICA
-LA "COMUNIDAD" Y EL LATIFUNDIO
-EL RÉGIMEN DE TRABAJO.p; SERVIDUMBRE Y SALARIADO
-"COLONIALISMO" DE NUESTRA AGRICULTURA COSTEÑA
-PROPOSICIONES FINALES
-REFERENCIAS
EL FACTOR RELIGIOSO
I. LA RELIGIÓN DEL TAWANTINSUYO
II. LA CONQUISTA CATÓLICA
III. LA INDEPENDENCIA Y LA IGLESIA
REFERENCIAS
REGIONALISMO Y CENTRALISMO
I. PONENCIAS BÁSICAS
II. REGIONALISMO Y GAMONALISMO
III. LA REGIÓN EN LA REPÚBLICA
IV. DESCENTRALIZACIÓN CENTRALISTA
V. EL NUEVO REGIONALISMO
VI. EL PROBLEMA DE LA CAPITAL
REFERENCIAS
EL PROCESO DE LA LITERATURA
I. TESTIMONIO DE PARTE
II. LA LITERATURA DE LA COLONIA
III. EL COLONIALISMO SUPÉRSTITE
IV. RICARDO PALMA, LIMA Y LA COLONIA
V. GONZÁLEZ PRADA
VI. MELGAR
Vil. ABELARDO GAMARRA
VIII. CHOCANO
IX. RIVA AGÜERO Y SU INFLUENCIA. LA GENERACIÓN
"FUTURISTA"
X. "COLÓNIDA" Y VALDELOMAR
XI. NUESTROS "INDEPENDIENTES"
XII. EGUREN
XIII. ALBERTO HIDALGO
XIV. CÉSAR VALLEJO
XV. ALBERTO GUILLÉN
XVI. MAGDA PORTAL
XVII. LAS CORRIENTES DE HOY. -EL INDIGENISMO
XVIII. ALCIDES SPELUCÍN
XIX. BALANCE PROVISORIO
REFERENCIAS
“Ich will keinen Autor m ehr lesen, dem man
anmerkt, er wollte ein Buch machen: sondern
nur jene, deren Gedanken unversehens
ein Buch wurden. ”
NIETZSCHE, D er W a n d e re r und sein Schatten.
ADVERTENCIA
O tra vez rep ito que no soy un crítico im parcial y objetivo. Mis
juicios se n u tren d e mis id ea les, d e mis sentim ientos, d e mis
pasiones. T engo una d e c la ra d a y e n é rg ic a am bición: la d e
concurrir a la creació n d el socialism o peru an o .
Estoy lo m ás lejos p o sib le d e la técnica p rofesoral y d el espíritu
universitario.
Lima 1928
ESQUEMA DE LA EVOLUCION ECONOMICA
I. LA ECONOMIA COLONIAL
3°- El acortam iento d e las distancias y el aum ento del tráfico e n tre
el Perú y E stados Unidos y E uropa. A co n secu en cia d e la a p e rtu ra
del C anal d e Panam á, q u e m ejora n o tab lem en te n u estra posición
geográfica, se a c e le ra el p ro c e so d e incorporación d el Perú en la
civilización occidental.
REFERENCIAS
SU NUEVO PLANTEAMIENTO
REFERENCIAS
6. Obra citada.
EL PROBLEMA DE LA TIERRA
EL PROBLEMA AGRARIO Y EL PROBLEMA DEL INDIO
COLONIAUSMO = FEUDALISMO
EL COLONIZADOR ESPAÑOL
LA "COMUNIDAD" Y EL LATIFUNDIO
REFERENCIAS
•k -k -k
LA UNIVERSIDAD DE LIMA
REFORMA Y REACCION
Los años 1924 a 27 han sido d esfav o rab les p a ra el m ovim iento de
reform a universitaria en el Perú. La expulsión d e 26 universitarios
d e la U niversidad d e Trujillo en N oviem bre d e 1923, p relu d ió una
ofensiva reaccio n aria que, poco tiem po d e sp u és, movilizó en la
U niversidad d e Lima a todas las fuerzas co n serv ad o ras contra los
postulados d e 1919 y 1923. Las m ed id as d e re p re sió n e m p le ad a s
p o r el G obierno contra los estu d ian tes d e v a n g u a rd ia d e San
M arcos, lib ra ro n a la docen cia d e la vigilante p re se n c ia d e la
m ayor p a rte d e q u ien es m antenían ale rta y d e sp ie rto en el
alum nado, el espíritu d e la Reforma. La m uerte d e dos jó v en es
m aestros. Zulen y Borja y G arcía, red u jo a un núm ero exiguo a los
p ro fe so re s d e aptitud ren o v ad o ra. El alejam iento d el doctor
V illarán trajo el ab an d o n o d e su ten d e n c ia a la c o o p eració n con el
alum nado. El re c to ra d o q u e d ó en una situación d e interinidad,
con to d as las co n secuencias d e inhibición y e ste rilid a d anexas a
un rég im en provisorio.
Esta conjunción d e contingencias ad v e rsa s tenía que p ro d u cir
in ev itab lem en te el resu rg im ien to d el viejo espíritu co n serv ad o r y
oligárquico. D ecaídos los estím ulos d e p ro g re so y reform a, la
enseñanza rec a y ó en su antigua rutina. Los re p re s e n ta n te s típicos
d e la m entalidad civilista resta u ra ro n su p a s a d a absoluta
h egem onía. El e x p e d ie n te d e la interinidad, aplicado c a d a día
con m ayor extensión, sirvió p a ra disim ular tem p o ralm en te el
restab lecim ien to del conservantism o en las p o siciones d e d o n d e
fuera desalo jad o en p a rte p o r la o lea d a reform ista.
En las e leccio n es d e d e le g a d o s d e 1920, se b o sq u ejó una
concentración d e las izquierdas estudiantiles. Las plataform as
e lecto rales sostenidas p o r el g ru p o q u e p rev aleció en la nueva
federación, reafirm ab an todos los postulad os e sen ciales d e la
Reform a (29). Pero n u ev am en te la re p re sió n vino e n auxilio d e los
in te re se s c o n serv ad o res.
El fenóm eno característico d e e ste p e río d o reaccio n ario p a re c e
se r el apoyo q u e en él han v en id o a p re s ta r a los elem entos
c o n serv a d o re s d e la U niversidad las m ism as fuerzas que,
o b e d e c ie n d o al im pulso histórico q u e d eterm in ó su victoria so b re
el "civilismo" tradicional, d e c id ie ro n e n 1919 el triunfo d e la
Reforma.
No son éstos, sin e m b a rg o , los únicos factores d e la crisis del
m ovim iento universitario. La juven tu d no está totalm ente exenta
d e resp o n sa b ilid ad . Sus p ro p ia s in su rreccio n es nos e n señ a n que
es, en su m ayoría, una juv en tu d que p ro c e d e p o r fáciles contagios
d e entusiasm o. Este, en v e rd a d , es un defecto d e q u e se ha
acusado sie m p re al hispanoam ericano. V asconcelos, en un
re c ie n te artículo, e scrib e: "El p rincipal defecto d e n u estra raza es
la inconstancia. In cap aces d e p e rd u ra r en el esfuerzo no p o d em o s
p o r lo m ism o d e sarro llar un plan ni llevar a d e la n te un propósito".
Y, m ás ad elan te, a g re g a : "En g e n e ra l hay q u e desconfiar d e los
entusiastas. E ntusiasta es un adjetivo al cual le d e b e m o s m ás
daños q u e a todo el resto del vocab u lario d e los calificativos. Con
el n o b le vo cab lo entusiasm o se ha aco stu m b rad o en cu b rir
nuestro defecto nacional: b u en o s p a ra com enzar y p a ra p ro m eter;
m alos p a ra term inar y p a ra cum plir" (30).
Pero m ás q u e la v e rsa tilid a d y la inconstancia d e los alum nos,
o b ran contra el avance d e la Reforma, la v a g u e d a d y la
im precisión d el p ro g ra m a y el c a rá c te r d e e ste m ovim iento en la
m ayoría d e ellos. Los fines d e la Reform a no están suficientem ente
esclarecid o s, no están cab alm en te en ten d id o s. Su d e b a te y su
estudio ad elan tan lentam ente. La reacció n c a re c e d e fuerzas p a ra
sojuzgar intelectual y espiritualm ente a la juventud. A sus
victorias no se les p u e d e atrib u ir sino un valor contingente. Los
factores históricos d e la Reforma, en cam bio, continúan actuando
so b re el espíritu estudiantil, e n el cual se m antiene intacto, po r
consiguiente, a p e s a r d e sus m om entáneos oscurecim ientos, el
anhelo q u e anim ó a la juventud e n las jo rn a d a s d e 1919 a 1923.
Si el m ovim iento ren o v a d o r se m uestra p re c a ria m e n te d e te n id o
en las u n iv ersid ad es d e Lima, p ro sp e ra , en cam bio, en la
U niversidad d el Cuzco, d o n d e la élite d el p ro fe so ra d o a c ep ta y
sanciona los principios sustentados p o r los alum nos. Testim onio
d e esto es el a n tep ro y ecto d e reo rganización d e la U niversidad
del Cuzco form ulado p o r la com isión q u e con e ste e n c arg o
nom bró el G obierno al d e c la ra r e n re c e so dicho instituto.
Este p royecto, suscrito p o r los pro feso res, se ñ o re s Fortunato L.
H errera, José G abriel C osío, Luis E. V alcárcel, J. Uriel G arcía,
Leandro Pareja, A lberto A raníbar P. y J. S. G arcía Rodríguez,
constituye in co n testab lem en te el m ás im portante docum ento
oficial p ro d u cid o hasta ahora so b re la reform a universitaria en el
Perú. A n o m b re d e la d o cen cia universitaria, no se h a b ía hab lad o
todavía, e n tre nosotros, con tanta altura. La com isión d e la
u n iv ersid ad cuzqueña ha roto la tradición d e rutina y m ed io crid ad
a que tan sum isam ente se ciñen, p o r lo g e n e ra l, las com isiones
oficiales. Su plan m ira a la com pleta transform ación d e la
U niversidad d el Cuzco en un g ra n centro d e cultura con aptitud
p a ra p re sid ir e im pulsar eficientem ente el d esarro llo social y
económ ico d e la reg ió n andina. Y, al m ism o tiem po, in co rp o ra en
su Estatuto los postulados card in ales d e la Reform a U niversitaria
en H ispanoam érica.
Entre las "ponencias básicas" d e la com isión, se cuentan las
siguientes: creació n d e la d o cen cia lib re com o co o p e ra n te del
p ro feso rad o titular; ad o p ció n d el sistem a d e sem inarios y
conversatorios; su p resió n d el exam en d e fin d e año com o p ru e b a
definitiva; co n sag ració n absoluta d el catedrático universitario a su
m isión educativa; p articipación d e los alum nos y ex-alum nos e n la
elección d e las a u to rid ad es universitarias; re p re se n ta c ió n del
estu d ian tad o e n el consejo universitario y en el d e c a d a facultad;
dem ocratización d e la enseñanza (31).
El dictam en co n c ed e , p o r otra p a rte , esp ec ial atención a la
n e c e sid a d d e organizar la U niversidad en m odo d e d arle, en
todos sus aspectos, una am plia aplicación p ráctica y una com pleta
orientación científica. La U niversidad d el Guzco asp ira a se r un
v e rd a d e ro centro d e investigaciones científicas, p u esto
ín teg ram en te al servicio d el m ejoram iento social.
7. Ib., p. 27.
13.1b.,p. 127.
14.1b.,pp. 120, 123 y 124.
16.1b.,p. 33.
•k -k -k
REFERENCIAS
5.1b.
27.1b.,p. 162.
32. El líder de las Y.M. C.A. Julio Navarro Monzó, predicador de una
nueva Reforma, admite en su obra El problem a religioso en la
cultura latinoamericana que: "habiendo tenido los países latinos la
enorme desgracia de haber quedado al margen de la Reforma del
siglo XVI, ahora era ya demasiado tarde para pensar en convertirlos
al Protestantismo ".
REGIONALISMO Y CENTRAUSMO
I. PONENCIAS BASICAS
V. EL NUEVO REGIONALISMO
REFERENCIAS
I. TESTIMONIO DE PARTE
V. GONZALEZ PRADA
VI. MELGAR
VIII. CHOCANO
X. COLONIDA Y VALDELOMAR
XII. EGUREN
D esde la aurora
combaten dos reyes rojos,
con lanza de oro.
Falcones reyes
batallan en lejanías
de oro azulinas.
Por la luz cadmio,
airadas se ven pequeñas
sus formas negras.
Viene la noche
y firmes combaten foscos
los reyes rojos.
•k -k -k
Se alejan de madrugada
con perlas y berilos
y con la luz del cielo en la mirada
los ángeles tranquilos.
Comienzan ambiguas
añosas marquesas
sus danzas antiguas
y sus polonesas.
Y llegan arqueros
de largos bigotes
Y evitan los fieros
de los monigotes.
("El Duque")
Es el descanso automático
que hace leve el andar del vendedor ambulante
Cooperativa general de esperanzas
(XXXIV, Trilce)
Este a rte señ ala el nacim iento d e una nueva sen sibilidad. Es un
a rte nuevo, un a rte re b e ld e , q u e ro m p e con la tradición co rtesan a
d e una literatura d e bufones y lacayos. Este len g u aje es el d e un
p o e ta y un h o m b re. El g ran p o e ta d e Los Heraldos Negros y de
Trilce -e se g ran p o e ta q u e ha p a sad o ig n o rad o y d esco n o cid o p o r
las calles d e Lima tan p ro p icias y re n d id a s a los lau reles d e los
ju g la re s d e feria- se p re se n ta , en su arte, com o un p re c u rso r del
nuevo espíritu, de la nueva conciencia.
¿Hacia dónde?
¡No importa! La Vida esconde
m undos en germ en
Y yo arrojé m i duda
y, en m i mano, desnuda,
llevo m i voluntad!
Desnuda el corazón
de toda vanidad
y pon tu voluntad
donde esté tu ilusión;
"El, ella, todos existen, pero en ti". "Soy todos los hom bres
en mí". "¿Mis contradicciones no son una prueba de que
llevo en m í a muchos hombres?" "Mentira. Ellos no mueren:
somos nosotros que morimos en ellos".
Estas líneas co n tienen algunas briznas d e la filosofía del Uno,
Ninguno, Cien Mil d e Pirandello.
No creo, sin em b arg o , q u e Guillén, si p e rs e v e ra p o r esta ruta,
lleg u e a clasificarse e n tre los e sp ec ím e n e s d e la literatura
hum orista y cosm opolita d e O ccidente. Guillén, en el fondo, es un
p o e ta un poco rural y franciscano. No tom éis al p ie d e la letra sus
blasfem ias. Muy ad en tro del alm a, g u a rd a un poco d e
rom anticism o d e provincia. Su p sicología tiene m uchas raíces
cam pesinas. P erm an ece, íntim am ente, ex trañ a al espíritu
q u in taesen ciad o d e la u rb e. G uando se le e a G uillén se advierte,
en seg u id a, q u e no consigue m an ejar con d e stre za el artificio.
El título d el último libro d e G uillén Laureles resu m e la se g u n d a
fase d e su literatura y d e su vida. Por conquistar estos y otros
laureles, q u e él m ism o se cre ta m en te d e sd eñ a , ha luchado, ha
sufrido, ha p e le a d o . El cam ino d el laurel lo ha desv iad o del
cam ino d el Gielo. En la a d o le sc en c ia su am bición e ra m ás alta.
¿Se contenta ahora d e algunos lau re le s m unicipales o
académ icos?
Yo coincido con G abriel Alom ar en acusar a G uillén d e sofocar al
p o e ta d e Deucalión con sus p ro p ia s m anos. A G uillén lo p ie rd e la
im paciencia. Q uiere lau reles a to d a costa. P ero los lau reles no
p e rd u ra n . La gloria se construye con m ateriales m enos efím eros.
Y es p a ra los q u e lo g ran ren u n ciar a sus falaces y ficticias
anticipaciones. El d e b e r del artista es no traicionar su destino. La
im paciencia en G uillén se resu e lv e en abundancia. Y la
ab u n d an cia es lo q u e m ás p erju d ica y dism inuye el m érito d e su
o b ra que, en los últim os tiem pos, aunque a d o p te en v e rso la m oda
v an g uardista, se re sie n te d e cansancio, d e d e sg an o y d e
rep etició n d e sus p rim ero s motivos.
Ven, bésame!...
qué importa que algo oscuro
m e esté royendo el alma
con sus dientes?
ah! - y s in embargo
amo de tal manera la alegría
como amarán las amargas plantas
un fruto dulce
madre
receptora alerta
h o y no respondas porque te ahogarías
h o y no respondas a m i llanto
casi sin lágrimas
•k -k -k
El criollism o no ha p o d id o p ro sp e ra r e n n u e stra literatura, com o
una co rrien te d e espíritu nacionalista, ante todo p o rq u e el criollo
no re p re s e n ta todavía la nacionalidad. Se constata, casi
uniform em ente, d e s d e h ace tiem po, que som os una nacionalidad
en form ación. Se p e rc ib e ahora, p rec isan d o e se concepto, la
subsistencia d e una d u alid ad d e raza y d e espíritu. En todo caso,
se conviene, unánim em ente, en q u e no hem os alcanzado aún un
g ra d o elem ental siq u iera d e fusión d e los elem entos raciales que
conviven e n nuestro suelo y q u e co m ponen n u e stra población. El
criollo no está netam en te definido. Hasta ahora la p a la b ra
"criollo" no es casi m ás q u e un térm ino q u e nos sirve p a ra
d e sig n a r g e n é rica m e n te una p lu ralidad, m uy m atizada, d e
m estizos. N uestro criollo c a re c e d el c a rá c te r que encontram os,
p o r ejem plo, en el criollo argentino. El arg en tin o es identificable
fácilm ente en cualquier p a rte d el m undo: el peru an o , no. Esta
confrontación, es p rec isam e n te la q u e nos ev id en cia q u e existe ya
una n acionalidad arg entina, m ientras no existe todavía, con
p e c u liare s rasg o s, una n acionalidad p e ru a n a . El criollo p re se n ta
aquí una se rie d e v a rie d a d e s. El costeño se diferencia
fu ertem en te d el serrano. En tanto q u e e n la sie rra la influencia
telúrica indigeniza al m estizo, casi hasta su ab so rció n p o r el
espíritu indígena, en la costa el p redom inio colonial m antiene el
espíritu h e re d a d o d e España.
En el Uruguay, la literatura nativista, n acida com o en la A rgentina
d e la e x p e rien c ia cosm opolita, ha sido criollista, p o rq u e ahí la
po b lació n tien e la u n id ad q u e a la n u estra le falta. El nativism o, en
el Uruguay, p o r otra p a rte , a p a re c e com o un fenóm eno
esen cialm en te literario. No tiene, com o el indigenism o en el Perú,
una su b co n scien te inspiración política y económ ica. Zum Felde,
uno d e sus su scitad o res com o crítico, d e c la ra q u e ha lle g a d o y a la
hora d e su liquidación. "A la devoción im itativa d e lo ex tran jero -
e sc rib e - h a b ía q u e o p o n e r el sentim iento autonóm ico d e lo nativo.
Era un m ovim iento d e em ancipación literaria. La reacció n se
operó; la em ancipación fue, luego, un hecho. Los tiem pos e sta b a n
m aduros p a ra ello. Los p o e ta s jó v en es volvieron sus ojos a la
re a lid a d nacional. Y, al v olver a ella sus ojos, v iero n aquello que,
p o r contraste con lo eu ro p eo , e ra m ás gen u in am en te am ericano:
lo gau chesco. Mas, cum plida ya su m isión, el tradicionalism o
d e b e a su vez p a sar. H ora es y a d e q u e p a se, p a ra d a r lu g ar a un
am ericanism o lírico m ás a c o rd e con el im perativo d e la vida. La
sen sib ilid ad d e nuestros días se n utre y a d e rea lid a d e s,
id e a lid a d e s distintas. El am b ien te p late n se ha d ejad o
definitivam ente d e s e r gaucho; y todo lo g au ch esco -d e sp u é s d e
a rrin co n arse en los m ás huraños p ag o s- v a p a san d o al culto
silencioso d e los m useos. La v id a rural d el U ruguay está toda
transform ada e n sus co stu m b res y en sus c a ra c te res, p o r el
avance del cosm opolitism o urbano" (36).
En el Perú, el criollism o, a p a rte d e h a b e r sido d em asiad o
esp o rá d ico y superficial, ha estad o nutrido d e sentim iento
colonial. No ha constituido una afirm ación d e autonom ía. Se ha
contentado con se r el secto r costum brista d e la literatura colonial
so b rev iv ien te hasta h ace m uy poco. A b elard o G am arra es, tal vez,
la única ex c ep c ió n en e ste criollism o dom esticado, sin orgullo
nativo.
N uestro "nativismo" -n ec e sa rio tam b ién literariam en te com o
revolución y com o em ancipación-, no p u e d e se r sim ple
"criollismo". El criollo p e ru a n o no ha a c ab a d o aún d e
e m an cip arse espiritualm ente d e E spaña. Su eu ropeización -a
trav és d e la cual d e b e en contrar, p o r reacción, su p e rso n a lid a d -
no se ha cum plido sino en p a rte . Una vez europeizado, el criollo
d e hoy difícilm ente d e ja d e d a rs e cu enta d el d ram a del Perú. Es
él p rec isam e n te el que, rec o n o c ié n d o se a sí m ism o com o un
esp añ o l b a sta rd ea d o , siente q u e el indio d e b e s e r el cim iento d e
la n acio n alid ad (V aldelom ar, criollo costeño, d e re g re s o d e Italia,
im p reg n a-d o d e d'annunzianism o y d e esnobism o, e x p erim en ta
su m áxim o d eslum bram iento cuando d e s c u b re o, m ás bien,
im agina el Inkario). M ientras el criollo p u ro conserva
g e n e ra lm e n te su espíritu colonial, el criollo e u ro p eizad o se
re b e la , en nuestro tiem po, contra e s e espíritu, aunque sólo sea
com o p ro te sta contra su lim itación y su arcaísm o.
C laro q u e el criollo, diverso y m últiple, p u e d e a b a ste c e r
ab u n d a n te m e n te a n u e stra literatura -narrativa, descriptiva,
costum brista, folclorista, etc.-, d e tipos y m otivos. P ero lo que
su b co n scien tem en te b u sca la genuina co rrien te in digenista en el
indio, no es sólo el tipo o el motivo. M enos aún el tipo o el motivo
pinto resco. El "indigenism o" no es aquí un fenóm eno
esen cialm en te literario com o el "nativismo" en el Uruguay. Sus
raíc es se alim entan d e otro hum us histórico. Los "indigenistas"
auténticos -que no d e b e n s e r confundidos con los q u e explotan
tem as in d íg e n a s por m ero "exotism o"- colaboran,
co n scien tem en te o no, en una o b ra política y económ ica de
reivindicación -no d e restau ració n ni resu rrecció n .
El indio no re p re s e n ta únicam ente un tipo, un tem a, un motivo, un
p er-so n aje. R ep resen ta un p u e b lo , una raza, una tradición, un
espíritu. No es posible, pues, valorarlo y considerarlo, d e s d e
puntos d e vista exclusivam ente literarios, com o un color o un
asp ecto nacional, colocándolo e n el m ism o plano q u e otros
elem entos étnicos d el Perú.
A m ed id a que se le estudia, se av erig u a q u e la co rrien te
in digenista no d e p e n d e d e sim ples factores literarios sino d e
com plejos factores sociales y económ icos. Lo q u e da d e re c h o al
indio a p re v a le c e r en la visión d el p e ru a n o d e hoy es, so b re todo,
el conflicto y el contraste e n tre su p redom inio dem ográfico y su
se rv id u m b re -no sólo inferioridad- social y económ ica. La
p re se n c ia d e tres a cuatro m illones d e h o m b re s d e la raza
autóctona e n el p an o ram a m ental d e un p u e b lo d e cinco m illones,
no d e b e s o rp re n d e r a n a d ie e n una é p o c a en q u e e ste p u eb lo
siente la n e c e sid a d d e e n co n trar el equilibrio q u e hasta ahora le
ha faltado e n su historia.
it it it
REFERENCIAS
12. Ib.
16. Federico More, "De un ensayo sobre las literaturas del Perú ", en
El Diario d e la Marina de La Habana (1924) y El Norte de Trujillo
(1924).
25.1b.,pp. 43 y 44.
35. Jorge Basadre juzga que en Trilce, Vallejo emplea una nueva
técnica, pero que sus motivos continúan siendo románticos. Pero la
más alquitarada "nueva poesía", en la m edida en que extrema su
subjetivismo, también es romántica, como observo a propósito de
Hidalgo. En Vallejo, hay ciertamente mucho de viejo romanticismo y
decadentismo hasta Trilce, pero el mérito de su poesía se valora
p o r los grados en que supera y trascien-de esos residuos. Además,
convendría entenderse previam ente sobre el término romanti
cismo.
38. Una nota del libro d e López Albújar que se acuerda con una nota
del libro de Valcárcel es la que nos habla de la nostalgia del indio.
La melancolía del indio, según Valcárcel, no es sino nostalgia.
Nostalgia del hom bre arrancado al agro y al hogar p o r las empresas
bélicas o pacíficas del Estado. En "Ushanam Jampi" la nostalgia
pierde al protagonista. Conce Maúle es condenado al exilio p o r la
justicia d e los ancianos de Chupán. Pero el deseo d e sentirse bajo
su techo es más fuerte que el instinto de conservación. Y lo impulsa
a volver furtivamente a su choza, a sabiendas de que en el pueblo lo
aguarda tal vez la última pena. Esta nostalgia nos define el espíritu
del pueblo del Sol como el de un pueblo agricultor y sedentario. No
son ni han sido los quechuas, aventureros ni vagabundos. Quizá p o r
esto ha sido y es tan poco aventurera y tan poco vagabunda su
imaginación. Quizá p o r esto, el indio objetiva su metafísica en la
naturaleza que lo circunda. Quizá p o r esto, los jircas, o sea los
dioses lares del terruño, gobiernan su vida. El indio no podía ser
monoteísta.
Desde hace cuatro siglos las causas d e la nostalgia indígena no han
cesado de multiplicarse. El indio ha sido frecuentem ente un
emigrado. Y, como en cuatro siglos no ha podido aprender a vivir
nómadamente, porque cuatro siglos son m u y poca cosa, su
nostalgia ha adquirido ese acento d e desesperanza incurable con
que gimen las quenas.
López Alhújar se asoma con penetrante mirada al hondo y mudo
abismo del alma del quechua. Y escribe en su divagación sobre la
coca: "El indio sin saberlo es schopenhauerista. Schopenhauer y el
indio tienen un punto de contacto, con esta diferencia: que el
pesim ism o del filósofo es teoría y vanidad y el pesim ism o del indio,
experiencia y desdén. Si para uno la vida es un mal, para el otro no
es ni mal ni bien, es una triste realidad, y tiene la profunda
sabiduría de tomarla como es".
Unamuno encuentra certero este juicio. También él cree que el
escepticismo del indio es experiencia y desdén. Pero el historiador
y el sociólogo pued en percibir otras cosas que el filósofo y el
literato tal vez desdeñan. ¿No es este escepticismo en parte, un
rasgo de la psicología asiática? El chino, como el indio, es
materialista y escéptico. Y, como en el Tawantinsuyo, en la China, la
religión es un código de moral práctica m ás que una concepción
metafísica.