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Acciones comunes u ordinarias

Representa la propiedad de capital de una empresa y otorgan derechos y


obligaciones a los accionistas, y son del mismo valor. No tiene fecha de
caducidad, siempre y cuando la empresa continúe con su actividad.
Aquellas que, de acuerdo con los estatutos sociales de la emisora, no tienen
calificación o preferencia alguna. Tienen derecho a voto general interviniendo en
todos los actos de la vida de la empresa (tales como elegir al consejo de
administración o decidir las políticas de la empresa). Sólo tendrán derecho a
dividendos después de que se haya cubierto a las acciones preferentes. También
se denominan acciones ordinarias.
Son aquellas que incorporan los derechos normales que tiene el accionista en la
sociedad. Acciones comunes son las que si no existen otras que confiere distintos
derechos, los acuerdan por igual a todos los accionistas. En el articulo 159 Inc. 2
C. Com. Regula estas acciones dice que si no se establecen diversas acciones en
la escritura social, habrá una sola clase de ellas.
Las ordinarias o comunes sí permiten al propietario votar y tener voz, y eso
precisamente las hace que valgan más que las otras; además dan derecho sobre
los activos y disfrutar de las ganancias que produzca.
En las acciones ordinarias no está garantizado el pago de dividendo y puede ser
variable.
Las acciones comunes están en último lugar de prioridad a la hora de reclamar
cuando la empresa quiebra o cierra.
Algunos inversionistas se pueden dejar llevar por las acciones comunes, con tal de
tener voz y voto; otros inclinan la balanza a las preferentes por el nivel de
protección de su dinero; sin embargo, debes tener presente que todas las
acciones están sujetas a la marea del mercado y lleva riesgos.

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