V- ------, por el presente documento declaro: “Que otorgo Poder General de Administración y Disposición al ciudadano --------, venezolano, mayor de edad, titular de la Cédula de identidad N° V- ---------; en tal virtud queda mi prenombrado mandatario ampliamente facultado para vender, arrendar, permutar o gravar los bienes muebles o inmuebles de mi propiedad; para determinar el valor de dichos bienes y en caso de enajenación o gravamen, recibir el precio que se fije y otorgar y firmar la documentación traslativa de la propiedad o del gravamen; para celebrar toda clase de contratos, ya sean de carácter civil o mercantil. En ejercicio de este mandato además de las facultades inherentes a todo administrador, tendrá especialmente disposición las siguientes: Cobrar y recibir cantidades de dinero; otorgar y firmar finiquitos y cancelaciones pudiendo extenderlos en documentos públicos o privados, abrir, movilizar y cerrar cuentas corrientes o de ahorro en institutos bancarios o casas mercantiles, pudiendo depositar o retirar de aquellas por medio de cheques, giros o cualquier otra forma de acuerdo con los respectivos reglamentos, en especial de las siguientes cuentas: ------------------, librar, aceptar, endosar, avalar cheques, letras de cambio y otros efectos cambiarios mercantiles; admitir daciones en pago, traspasos de créditos de cualquier naturaleza, sustituciones de deudores o de garantía; convenir en ampliaciones, reducciones o limitaciones de garantías personales o reales. En especial queda facultado para vender un vehículo de mi propiedad, el cual tiene las siguientes características,---------. Queda facultado para intentar toda clase de acciones judiciales, ya sea de carácter contencioso-administrativa, posesoria, inquilinaria, civil, mercantil, fiscal, laboral o de cualquier otro carácter y para intervenir en aquellas que se intenten en mi contra, pudiendo constituir apoderados judiciales dándoles las facultades que tenga por convenientes para la defensa de mis derechos o intereses, entre las cuales puede concederles la facultad de transigir, convenir, reconvenir y desistir, pudiendo revocar esos poderes cuando lo creyere conveniente; y finalmente declaro que el nombrado apoderado puede ejercer este poder general y disponer de mis bienes en la misma forma como yo lo pudiera hacer personalmente, ratificando desde ahora y declarando firme y definitivo todo lo que haga en mi nombre, pues las facultades aquí conferidas en el presente poder son meramente enunciativas y en ningún caso taxativas, sin que pueda alegarse en ningún caso insuficiencia del poder.”