¿Qué

hacemos El niño que no pronuncia correctamente

ante…?

El caso Rubén es un alumno de nueve años que, sin tener ningún tipo
de problema fisiológico, pronuncia mal. Los profesores y los
padres piensan que se debe a pura comodidad y que, por eso,
dejar caer los finales de palabra y de frase, confunde muchos
fonemas entre sí, omite sílabas en medio de una palabra,
provoca desplazamientos del acento...
El propio Rubén empieza a estar preocupado porque sus
propios compañeros se ríen de él y le corrigen. Sin embargo,
pasan los años y sigue sin apenas mejorar.
Dado que el problema no es físico y tampoco grave, los padres y
los profesores quieren esperar a ver cómo va progresando.
Aunque, la verdad, ya se empiezan a inquietar.

¿Qué Lo ideal en casos semejantes es consultar a un logopeda que

podemos vea las peculiaridades de Rubén. Su problema p uede deberse a
hacer? múltiples causas y, sin el consejo del especialista, es arriesgado
aventurar una solución.
De todas formas existen ejercicios que, si los padres y los
profesores actúan en el mismo sentido, ayudarán a Rubén a
pronunciar mejor. Entre ellos aconsejamos los siguientes:
- Escuchar textos orales repetidamente donde se pronuncie con
claridad y corrección. Pueden ser canciones, discursos,
conversaciones...
- Discriminar un sonido determinado y distinguirlo de los que le
pueden ser próximos desde un punto de vista fonético.
- Pronunciar un sonido que se ha escuchado y discriminado
anteriormente. Rubén lo pronunciará una y otra vez.
- Trabajar con programas informáticos como los visualizadores
fonéticos o de habla que permiten “ver” los sonidos que
producimos y compararlos con los de otras personas.
- Jugar con dichos populares como trabalenguas, pareados,
refranes, frases hechas, adivinanzas...
Rubén irá mejorando si se aplican estos ejercicios,
independientemente de lo que aconseje el especialista.