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LECTURA. El sueño de Otto.

Antes de leer.

Actividad 1.

Aquí tienes el comienzo del segundo capítulo de El sueño de Otto. Falta la primera
frase. ¿Sabrías decirnos dónde están las dos amigas que hablan? ¿En qué época del año
tiene lugar esta conversación? ¿Son las dos españolas?

«(...) Hay mucha gente dentro y casi no pueden andar. Por fin llegan a sus sitios. Hace
mucho calor. Carmen se quita la chaqueta. Sylvie abre su bolso y coge una botella de
agua.Tiene sed.
—Lo ves, Sylvie, no hay duda: todos estos madrileños se van de vacaciones —le dice
Carmen.
Sylvie la mira y sonríe. Carmen es muy simpática. Sylvie la conoció el año pasado en
aquella escuela. Fue su profesora de español, ahora son buenas amigas.»

Actividad 2. El primer día de clase

Carmen es profesora de español y es su primer día de clase en este curso. Hay muchos
alumnos nuevos, casi todos tienen la misma profesión: son pilotos o azafatas, ¿sabes a
qué se dedican los pilotos y las azafatas? El piloto «conduce» el avión y la azafata
ayuda a los viajeros, reparte la comida, la bebida, la prensa...

Vamos a ver un poco del vocabulario que vas a encontrar en el texto. Seguro que hay
muchas palabras que ya conoces.

Despegar Un asiento Un motor Aterrizar Una azafata Unas alas Un avión


Una ventanilla Volar Pilotar

SUSTANTIVOS SUSTANTIVOS
VERBOS
MASCULINOS FEMENINOS

Actividad 3. Vuelos y aviones

Y ahora que ya sabes a qué categoría pertenece cada palabra, vamos a ver si conoces su
significado.

Aterrizar Persona que dirige un avión u otro vehículo.


Piloto Dirigir un avión.
Pilotar Tomar tierra.
Ventanilla Persona que atiende al público o a los pasajeros de un avión.

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Azafata Iniciar el vuelo
Despegar Pequeña ventana lateral de un vehículo o transporte.

LECTURA. El sueño de Otto.

Glosario

Madrileños, telegrama, raro, ¡puag!, pizarra, pilotos, azafatas, estación, bisabuelo,


arquitectura, volar, pilotar, motor, alas, aterrizo, aviación, alemana, inventor, planeador,
prisa, se casa, boda, enfadada, camarero, pincho de tortilla, perro, paso doble, diario,
ocas.

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LECTURA. El sueño de Otto.

II

Carmen y Sylvie ya están en el tren. Hay mucha gente dentro y casi no pueden andar.
Por fin llegan a sus sitios.

Hace mucho calor. Carmen se quita la chaqueta.


Sylvie abre su gran bolso y coge una botella de
agua. Tiene sed.

—Lo ves, Sylvie, no hay duda: todos estos


madrileños se van de vacaciones —le dice
Carmen.

Sylvie la mira y sonríe. Carmen es muy


simpática. Sylvie la conoció el año pasado en aquella escuela. Fue su profesora de
español, ahora son buenas amigas.

—Te veo muy tranquila, Carmen. ¡Qué suerte tienes! Yo no hago otra cosa que hacerme
preguntas. No entiendo toda esta historia. Un año sin escribirnos, sin llamarnos por
teléfono... Un año sin darnos noticias, y ahora, Otto nos escribe ese telegrama...

—Es bastante raro... pero tú conoces a Otto mejor que yo. No es fácil saber qué tiene en
la cabeza. No hace nunca las cosas como todos.

—Sí, es un chico diferente —contesta Sylvie—. ¡Puag! Esta agua está caliente. Es
imposible beberla.

Luego deja la botella en el suelo y mira por la ventana sin hablar.

«Pero... un año, un año —se repite la joven una y otra vez—, es mucho tiempo;
demasiado tiempo...»

Sylvie cierra un momento los ojos y empieza a pensar en Otto: «No puedo olvidar aquel
primer día de clase. Sí, lo estoy viendo, estoy viendo a Otto entrar en clase aquella
mañana».

***

—Buenos días, ¿cómo estáis? Yo me llamo Carmen y voy a ser vuestra profesora de
español estas cinco semanas. ¿Cómo os llamáis? —pregunta Carmen después de
sentarse y dejar su bolso encima de la mesa.

—Mi nombre es Alec —contesta uno de los estudiantes.

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—¿Y de dónde eres, Alec?

LECTURA. El sueño de Otto.

—Yo soy alemán, de Berlín ——contesta Alec.

—Yo soy Ruth, también soy de Berlín —contesta otra estudiante, sentada a la derecha
de Alec.

Todos empiezan a decir cómo se llaman y de dónde son.

—Y yo me llamo Sandra. Soy de Stuttgart, pero ahora vivo en Múnich.

—¿Y tú? —pregunta Carmen a una chica morena de ojos verdes.

—Yo soy francesa, de París... y me llamo Sylvie.

—¿Conocéis España o estáis aquí por primera vez?

—Hemos venido muchas veces —explica Sandra.

—¿Cuántas veces? —pregunta Carmen.

—Doscientas, doscientas cincuenta... ——contesta ahora Alec.

Los jóvenes no dicen nada más. Todos ellos parecen estar de acuerdo con Alec. Carmen
no sabe qué pensar; no entiende qué está pasando. Ella los mira uno a uno y sonríe.
Después va hasta la pizarra y escribe: «200, 250».

—Sí, doscientas, doscientas cincuenta —repite Alec.

—¿De verdad..., estáis seguros? —pregunta Carmen un poco nerviosa.

Todos contestan que sí con la cabeza. Carmen no dice nada. «No puedo creerlo —
piensa—. Me parece que ya estoy vieja y no oigo bien.»

—Y... ¿cuál es vuestro trabajo? —les pregunta después.

—Somos pilotos y azafatas... —contesta Sylvie .

Ahora todos empiezan a reír. También Carmen.

—Conocemos muy bien los aeropuertos españoles... ——explica Ruth.

—Y también los hoteles... —dice Sandra después.

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En ese momento se abre la puerta de la clase y entra un chico alto, rubio, de ojos
grandes y muy abiertos. Lleva una bonita camisa verde agua y unos pantalones azules.

LECTURA. El sueño de Otto.

Anda despacio, sin decir nada y se sienta detrás de Alec, muy cerca de Sy1vie. Carmen
se pone las gafas y lo mira bien. Sí, es el mismo chico del bar de la estación.

—Buenos días. Tú también eres nuevo, ¿no es así? —pregunta Carmen un poco
enfadada.

—Sí, siento llegar tarde ——explica el chico con la cabeza. No conozco bien esta parte
de la ciudad y me he perdido... Me llamo Otto, en español «Otilio», y soy alemán.

—Otto... ¡Ah, sí! Aquí tengo tu nombre.

Carmen lee en su cuaderno y repite: «Otto, Otto Lilienthal».

—No, ése es el padre de mi abuelo.

—Tu bisabuelo —explica Carmen.

—Sí, eso es... mi bisabuelo —repite el joven, Yo soy Otto Lilienthal Jr.

—Y dime, Otto Lilienthal Jr., ¿tú también eres piloto?—pregunta Carmen divertida.

—No soy estudiante. Voy a empezar a estudiar arquitectura en la universidad. Ahora


estoy de vacaciones. Pero me gusta mucho volar.

Sylvie está mirando a Otto desde el principio. Le parece un chico muy guapo.

—Bueno, chicos, vamos a ver qué me podéis contar en español —dice Carmen. Alec,
¿puedes hablarnos un poco de vuestro trabajo? ¿Es difícil pilotar un avión?

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—Volar en avión es fácil —empieza Alec.

LECTURA. El sueño de Otto.

—Es más difícil volar sin avión —termina Otto.

Todos se ríen.

—Quiero decir que volar en un avión no es divertido. Es más interesante volar sin
motor, como los pájaros.

Carmen no dice nada. Hoy no es fácil dar la clase.

—Eso no es posible —contesta Sandra.

—¿Por qué no? Mi bis... ¿Cómo dijiste, Carmen?¿Bisabuelo? —pregunta Otto a la


profesora.

—Sí —contesta ella.

—Pues, mi bisabuelo lo hizo.

—¿Quieres decir que tu bisabuelo tenía alas? —pregunta Sandra.

—Sí algo así... —contesta Otto muy seguro.

Los otros chicos se miran entre ellos y empiezan a reír.

—Yo vuelo muchas veces. Todas las noches tengo el mismo sueño. Me ocurre desde los
tres años. Cierro los ojos y empiezo a volar. Ahora puedo volar también —Otto cierra
los ojos—. Ya estoy volando. Vuelo por encima de unas montañas muy verdes. A la
izquierda puedo ver un río de color azul. El sol está jugando en sus aguas claras, corre
entre las montañas hasta llegar con el río a un bonito pueblo. Desde una plaza del
pueblo la gente mira cómo aterrizo.

Todos miran a Otto sin decir nada. Después de un momento Ruth parece acordarse de
algo y dice:

—Ese apellido... Lilienthal... Hay un Lilienthal, un Otto Lilienthal, un hombre muy


rico... ¡Claro, ya sé, fue muy importante para la historia de la aviación alemana... ¿Tú
eres de la familia de aquel Lilienthal? —le pregunta Ruth a Otto.

—Sí, Otto Lilienthal es mi bisabuelo. Un gran hombre. Él fue el inventor del primer
planeador. Yo soy como él, mi padre siempre lo dice.

 —Bueno, ya es la hora. Para mañana, por favor, estudiad el capítulo I y haced los
ejercicios —dice Carmen para terminar la clase.

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Sylvie está saliendo de la escuela y en la puerta se encuentra con Otto.

LECTURA. El sueño de Otto.

—Oye, Otto, ¿tienes prisa? —le pregunta.

—No, ¿por qué? ——contesta él.

—¿Quieres tomar algo conmigo? Así me hablas un poco más de tu familia.

—De acuerdo, ¿dónde vamos?

—Ahora, en agosto, casi todos los sitios están cerrados. Es difícil encontrar un bar
abierto para tomar café.

—Ven —dice Otto—, yo conozco un lugar y está muy cerca de aquí.

***

III

En todo este año sin todo ese año sin noticias, Sylvie no ha podido olvidarse de Otto. Ha
sido un buen amigo y ella siempre se acuerda de los amigos. Además, ahora sabe que
siente algo muy especial por ese chico.

El tren está tranquilo. Muchos duermen. Otros escuchan música o leen. Un tren es
también un buen lugar para pensar. La gente mira por la ventana y siente pasar la vida
delante de sus ojos.

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Fuera, el campo está amarillo. Hace muchos meses que no llueve en España. Los
pájaros parecen correr detrás del tren. Los árboles también parecen moverse.

LECTURA. El sueño de Otto.

Carmen y Sylvie están viajando desde hace ya tres horas.

—Sí, Carmen, estoy segura: Otto se casa. Por eso dice: «UN DÍA MUY
IMPORTANTE EN MI VIDA».

—Pero no habla de boda. No, Sylvie. Otto nos tiene algo preparado en El Barco de
Valdeorras, pero su boda no. No creo. ¿Qué otra cosa puede ser? No lo sé. Sólo allí lo
vamos a saber.

El tren va más rápido ahora. Lejos quedan ya el ruido de la ciudad y las calles grises de
Madrid.

Detrás de Sylvie, unas chicas jóvenes empiezan a cantar. Carmen cierra el periódico y
las escucha divertida.

Sylvie coge el periódico, pero no puede leer. Sólo puede pensar en Otto. Ha estado muy
enfadada con él, y todavía lo está un poco. Irse así, sin decir nada, sin decirle nada a
ella, su gran amiga. Pero es verdad: como dice Carmen, Otto es un chico diferente. Ella
lo sabe muy bien. Aquel día del verano pasado en el bar, después de salir de clase...

***

Paco, el camarero de la estación del Norte, ve llegar otra vez a Otto. Y ahora viene con
una amiga.

—¿Qué van a tomar, señor, un chocolate y un pincho de tortilla para usted, y para la
señorita...? —pregunta Paco.

—No —contesta Otto.

—Ah, ¿no?

—No, son dos; dos pinchos de tortilla y dos chocolates muy calientes, por favor.

Paco vuelve a la cocina. Habla solo: «Paco, tranquilo —se dice—. No pasa nada.
Piénsalo bien, Paco, no es nada malo tomar chocolate con tortilla. ¿Por qué no?».

—Aquí tienen dos chocolates calientes y dos pinchos de tortilla —dice ahora a Sylvie y
a Otto—. La tortilla es de esta misma mañana. Todavía está caliente. ¿Quieren algo
más?

—No, muchas gracias, está bien así —contesta Sylvie.

—Oye, Sylvie, tú, ¿por qué estudias español? —pregunta Otto a su compañera de clase.

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—Muy fácil; debo hablarlo bien por mi trabajo. Ahora es muy importante saber español.
Además, me gusta mucho España.

LECTURA. El sueño de Otto.

—¿Dónde vives?

—En París, en un pequeño piso del centro de la ciudad. Vivo sola. Bueno, con mi perro;
se llama Pasodoble.

—Ése es un nombre muy español, ¿no es así? —pregunta Otto.

—Sí, es el nombre de un baile típico. Mi perro es muy pequeño y por eso anda así... con
pasos dobles.

Paco sonríe. Esos chicos son divertidos. Un poco raros, pero simpáticos. Por eso se
queda cerca de ellos, para poder escucharlos.

—Y tú, Otto —pregunta ahora Sy1vie—, ¿por qué estás en España?

—Dentro de un año empiezo a estudiar arquitectura en Alemania. Pero antes quiero


conocer otros países, otras gentes... España me parece muy interesante. Mi bisabuelo
habla mucho de España en su diario. Esos pequeños pueblos de Galicia, León,
Asturias...

—Otto, ¿por qué dices que vuelas desde los tres años?

—Es verdad, empecé a volar a los tres años. ¿Te cuento la historia? ¿Quieres?

—Sí, por favor ——contesta rápido Sylvie.

Otto bebe un poco de chocolate. Se queda sin hablar un momento. No mira a Sylvie,
tiene los ojos perdidos. Parece estar en otro sitio, lejos. Por fin dice:

—Todo empieza un día de primavera, en el mes de abril, en la vieja casa de campo de


mi bisabuelo. Estoy jugando en el jardín, sentado en el suelo, con mis pantalones cortos
y una camisa blanca. Mis padres se han ido a la ciudad. Mis dos hermanos están allí,
con unos amigos. Están hablando y mirándome. Luego vienen y mi hermano mayor me
coge de la mano. Me llevan detrás de la casa. Allí tenemos los pollos.

—¿Los pollos? —pregunta Sylvie.

—Sí, los pollos, esos pájaros grandes, blancos. En francés se llaman «oies», creo... Pero
yo no sé mucho francés... Mi padre es un hombre de campo y le gusta tener pollos...
siempre comemos uno los días de fiesta.

Sylvie no sabe qué hacer para no reírse. Bebe un poco de chocolate.

—No, Otto, esos pájaros no son pollos. En español se llaman ocas —explica por fin la
chica.

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—Bueno, sí, ocas... ocas —repite Otto un poco enfadado—. Pues mi hermano me dice.
«Otto, ven, no te va a pasar nada, tranquilo. Ahora vas a volar como nuestro bisabuelo».

LECTURA. El sueño de Otto.

Él coge una de las ocas, muy grande. Entramos en casa los dos, con el animal. Los otros
se quedan en el jardín. Vamos a mi habitación, en el primer piso. Allí, mi hermano me
lleva hasta la ventana. Sube la oca, me sube encima de la oca y...

Sylvie escucha. Le parece que está en medio de un sueño.

—En ese momento, la oca abre sus grandes alas y empezamos a volar. Al principio
tengo los ojos cerrados, pero después los abro. Es muy divertido mirarlo todo desde
arriba, veo el jardín, mi hermano Sigmund, sus amigos...

—¿Y...? —pregunta Sylvie bastante nerviosa.

—¿Después?

Después me veo a mí en mi cama. Mi madre está conmigo y me dice: «¡Mi Otto, mi


pequeño Otto! ¡Cómo pudieron hacer eso tus hermanos! ¡Matarte casi! No sé qué voy a
hacer con ellos».

—¿Y no te rompiste nada? —pregunta Sylvie.

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—Sólo una pierna, tuve suerte...

LECTURA. El sueño de Otto.

Tomado del libro de Rosana Acquaroni Muñoz:


El sueño de Otto, Editorial Santillana, pp. 11 -23

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LECTURA. El sueño de Otto.

Ahora ya conoces mejor a Otto. También sabes con qué sueña Otto desde que era
pequeño, ¿verdad? ¿Te parece que es un sueño fácil de realizar?

Otto dice que vuela desde los tres años. Vamos a recordar su historia mientras
repasamos las formas de algunos tiempos verbales que han desaparecido.

A los tres años _______________ (comenzar) a volar. Todo


_______________ (empezar) en casa de mi abuela. Mi hermano mayor me
_______________ (coger) de la mano. Me _______________ (llevar) a la
ventana de mi habitación. Yo _______________ (subir) encima de la oca. La
oca y yo _______________ (empezar) a volar.

Ahora, lee la siguiente frase tomada del texto:

«Sylvie está mirando a Otto desde el principio. Le parece un chico muy guapo.»

¿Sabes por qué se dice muy guapo y no *mucho guapo? A veces, en español es difícil
saber cuándo usar muy y cuándo mucho o mucha.

Vamos a practicar un poco esta diferencia. Une la primera parte de cada frase, que
encontrarás en la columna de la izquierda, con la segunda, que encontrarás en la
columna de la derecha.

Hay mucha

Hace mucho

España me
parece muy

Quiero un
chocolate muy

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calor

caliente

gente
Yo vuelo muchas
veces
LECTURA. El sueño de Otto.
interesante

¿Te has dado cuenta de que muy y mucho no se utilizan


de la misma manera ni en los mismos casos? Mirando  los ejemplos, ¿cuándo crees que
se debe usar cada una de
estas formas?

MUY – MUCHO: Usos y actividad.

 
 
MUY: Se usa muy en los siguientes casos:
 
Antes de adjetivos (excepto mejor, peor, mayor, menor)
Antes de participios que actúan como adjetivos
Antes de Sustantivos adjetivados
Antes de adverbios, excepto más, menos, antes, después
 
Ejemplos:
Ese señor era muy bondadoso.
Era una mujer muy amada por todos.
La población queda muy lejos del centro.
Jorge actuaba siempre muy correctamente.
 
MUCHO: Mucho, como adverbio, se antepone a los adjetivos mejor, peor,
mayor y menor y a los adverbios más, menos, antes y después.
 
Ejemplos:
Si quieres triunfar debes ser mucho mejor que los otros.
Será mucho peor si llegas tarde.
En África es mucho mayor el hambre que en otros lugares.
Si te preparas la duda serán mucho menor.
Carlos obtuvo muchos más votos que Eduardo.
Hoy tendremos mucho menos tiempo que ayer.
Llegaremos a la estación mucho antes del tren salir.
Ustedes se despertaron mucho después que Sara.

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Para modificar al verbo, sólo se usa la forma MUCHO

LECTURA. El sueño de Otto.

Tenemos que practicar mucho para ganar el partido de rugby.


Lamento mucho que algo así haya ocurrido.
La ONU ha criticado mucho los sucesos de la Guerra del Golfo.
Felicitaron mucho al ganador del Premio Nobel de la Paz
 
MUCHO también puede ser adjetivo
Pedro tiene mucho talento.
Todos tuvieron mucho heroísmo para enfrentar esa situación.

Por estos días ha hecho mucho calor.


Tenía muchas ganas de pasear.
Anoche hubo mucho frío.
En la casa del lado tenían mucha bulla.
 

MUCHO también puede ser pronombre indefinido


Mucho quieres y nada haces.
Gasta mucho y no trabaja.
 

Ejercicios

Hace __________ poco tiempo que él llegó a vivir a este barrio.


Él la quiere ___________ pero es _________ tímido, por eso no se lo dice.
A María todo el vecindario la quiere ____________ porque es ___________
buena persona.
No por ___________ madrugar amanece más temprano.
Es _____________ lo que pides y ______________ poco lo que das.
Marina es _____________ más estudiosa que sus compañeros.
Esa ciudad es _____________ menos poblada de lo que me habían dicho.
Esa playa queda _____________ lejos para ir caminando.
No vayas tan rápido, es __________ peligroso.
Si vienen _____________ personas es mejor cenar temprano.
Carlos y María tienen _____________ deseos de venir para el verano.

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LECTURA. El sueño de Otto.

Actividad 3. Me gusta, no me gusta…

Lee. ¿Qué le gusta hacer a Cristina y a Marcos en su tiempo libre?

- Cristina, ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?


- Pues …me gusta escuchar música, ir de compras, pasear, jugar al tenis…¿Te
gusta jugar al tenis?
- Sí, sí me gusta. Me gusta jugar al tenis y al fútbol.
- ¿Y que más te gusta hacer?
- Pues me gusta ir al cine, ver la televisión… ¿A ti te gusta ver la televisión?
- No, no me gusta.

A CRISTINA LE GUSTA…

A MARCOS LE GUSTA…

Actividad 4. En los siguientes verbos, separa la raíz de la terminación.

1. Cantar cant + ar 5. Leer

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2. Escribir 6. Hablar
3. Comer 7. Correr

LECTURA. El sueño de Otto.

4. Jugar 8. Salir

Actividad 5. Clasifica las siguientes formas verbales.

Bailan, cantan, bailo, camináis, dibujas, baila, dibuja, camina, hablamos, cantas,
canto, bailas, cantamos, camino, dibujan, habláis, dibujamos, caminamos,
dibujáis, bailamos, cantáis, caminas, dibujo, bailáis, caminan.

Yo

él

Nosotros

Vosotros

Ellos

Actividad 6. Rellena los espacios en blanco con los verbos indicados en negrita.
Ponlos en presente.

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LECTURA. El sueño de Otto.

El profesor de Dibujo _______________ (decir) que _______________ (hablar,


nosotros) mucho en clase.
¿ _______________ (Conocer, tú) a Mario, el amigo de Cristina?
Si _______________ (querer, vosotros) a Mario, el amigo de Cristina?
Los niños _______________ (estar) cansados y se van a la cama ya.
La reunión de padres y profesores _______________ (ser) el jueves por la tarde.
¿Cómo _______________ (llamarse) usted, por favor?
Esta tarde mis padres y yo _______________ (ir) a visitar a mi abuela.
_______________ (Andar, tú) demasiado deprisa, no te puedo seguir.
Si el Barca _______________ mañana, _______________ (pasar, él) a la final de la
Champions League.
¿Vosotros también _______________ (ser) americanos?
No _______________ (tener, yo) hambre, gracias.
¿Dónde _______________ (estar, vosotros)? ¡No puedo veros!

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LECTURA. El sueño de Otto.

En la lectura los chicos/as que estudian español son azafatas y pilotos. Vamos a ver
otras profesiones.

 
El maestro La maestra

.......................... ..........................

 .......................... .........................

.......................... ........................

.......................... .........................

.......................... .........................

.......................... .........................

.......................... ..........................

.......................... .........................

 
.......................... ..........................

.......................... .........................

.......................... .........................

18
 

LECTURA. El sueño de Otto.

..........................
..........................

.......................... ..........................

..........................   ..........................

¿RECUERDAS EL VERBO SER?


LEE ATENTAMENTE LOS SIGUIENTES EJEMPLOS
       
(Nosotros) somos
(Yo) soy bombero
bomberos
 
 
(Vosotros) sois
(Tú) eres camarero
camareros
 
 

(Él) es guardia (Ellos) son guardias

Recuerda: si la profesión termina en vocal, para el plural se añade una s

(Vosotros) sois
(Tú) eres bailarín
bailarines

Usted es juez Ustedes son jueces

¿Usted es actor? ¿Son ustedes actores?

Ahora escribe una oración empleando las formas del plural del verbo y de
los sustantivos.

Yo soy futbolista ...............................

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Usted es jueza ..............................

LECTURA. El sueño de Otto.

Soy actriz ...............................

Es albañil ................................

Eres médico ................................

Ella es maestra ...............................

Tú eres músico ...............................

Escribe nombres de profesiones relacionados con:

EL CAMPO Y EL MAR LA INDUSTRIA EL COMERCIO

LA CONSTRUCCIÓN EL TRANSPORTE LA SANIDAD


 

 
 
ACTIVIDADES OCIO Y TIEMPO LIBRE OTRAS ACTIVIDADES
INTELECTUALES

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LECTURA. El sueño de Otto.

A D M I N I S T R A D O R F A R Q U E O L O G O
B H U O A V H I L D Z C I T C A R Z C B I L E T
O N C O L O G O I A R Q U I T E C T O V T C O I
G M T L U H P E L L U Q E R R O D A V R E I L N
A T L E T A E C E M C F V R I D E F D A J R O T
D X A P N G L I V A Z V U N Z O O L O G O R G J
O U G E O F I S I C O S O N D W E S X R B E O V
A D O G L R Ñ M T E A U S F E D F V S A X M Z I
P L C I O E I Y K N E Y I O C I R U J A N O J N
E E I A U E K L M E O Q A N U Q D A T U C D W E
R I C T O T J O Q R V C T O C A R S U X S E E F
I Q A U A P V G M O F T A L M O L O G O D L T E
O P T I C O H O D E C T R O D O V C R E C O W S
D Q E R O T L E E S X R T G A B C Y O A F I U T
I W D E C O R A D O R A W A N E S T E S I S T A
S V R M I R V V O R C E L O R W Q G B B E O T D
T N A V N T A E C R I M I N A L I S T A E C W I
A Ñ T D E I E O T O J U W J S R V I C E N I Y S
I Y I C R O O I O L U G O W T A S T O N E O C T
F P C H O S X E R B R C B I R Y F E R I N L B I
I C O Y W I U L D U T H A G O T O W E I Y O C C
S X W S T A I F A L Q U I O L E R V I V T G O O
I N F O R M A T I C O D O D O N T O L O G O M H
C U N P E I V A C O M E V W G D E Y I A T R E O
O T O R R I N O L A R I N G O L O G O F E T T D

VOCABULARIO. PROFESIONES.

ADMINISTRADOR SOCIÓLOGO ALMACENERO

ARQUEÓLOGO ANESTESISTA ONCÓLOGO

ABOGADO CRIMINALISTA ARQUITECTO

PERIODISTA DOCTOR ZOÓLOGO

21
FÍSICO DECORADORA GEÓLOGO

LECTURA. El sueño de Otto.

INFORMÁTICO COCINERO MODELO

OTORRINOLARINGÓLOGO ÓPTICO CIRUJANO

ODONTÓLOGO CATEDRÁTICO ACTRIZ

ASTRÓLOGO GEOFÍSICO CRIMINALISTA

ESTADÍSTCIO ATLETA

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LECTURA. El sueño de Otto.

MUY - Se usa muy en los siguientes casos:

o Antes de adjetivos (excepto mejor, peor, mayor, menor)


o Antes de participios que actúan como adjetivos
o Antes de Sustantivos adjetivados
o Antes de adverbios, excepto más, menos, antes, después

Ejemplos:
o El hombre fue muy bondadoso
o Era una persona muy respetada
o La ciudad queda muy lejos
o La secretaria escribe muy correctamente
o El albañil hizo todo muy de prisa.

MUCHO - Mucho, como adverbio, se antepone a los adjetivos mejor, peor, mayor y
menor y a los adverbios más, menos, antes y después.
Ejemplos:
o Si dices la verdad será mucho mejor
o Anda ahora mucho mejor
o Así será mucho peor
o Es mucho menor la duda
o Él sabe mucho más
o Ud. tiene mucho menos
o Estuvo mucho antes
o Llegaron mucho después

Para modificar al verbo, sólo se usa la forma MUCHO


o Tenemos que practicar mucho para ganar el partido de voley.
o Lamento mucho que algo así haya ocurrido
o La ONU ha criticado mucho los sucesos de la Guerra del Golfo
o Felicitaron mucho al ganador del Premio Nobel de la Paz

MUCHO también puede ser adjetivo


o Mucho talento
o Mucho heroísmo
o Mucho calor
o Tenía muchas ganas de pasear
o Mucho frío
o Mucha bulla

MUCHO también puede ser pronombre indefinido


o Mucho quieres
o Gasta mucho

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