La ética puede ser definida como el conjunto de normas morales, principios
y valores que rigen, limitan y direccionan la conducta de una persona en los diversos ámbitos en los que se desarrolle, tanto en lo personal, social como en lo profesional.
¿Cómo voy a aplicar la ética a mi profesión?
Manteniendo una actitud recta, honrada e integra en todo momento sin
importar las circunstancias y no ceder ante presiones externas de cualquier tipo. Respetando a las autoridades, colegas y a las personas que requieran de mis servicios profesionales actuando siempre apegado a lo establecido por las normas y el derecho mismo de forma transparente y con educación.
La forma en la que aplicaría la ética en mi vida profesional sería brindándole
a las personas que requieran de la prestación de mis servicios un trato humano y personal, respetando su dignidad, el valor inherente a los seres humanos que está por encima de cualquier otro, y no verlo simplemente como un trabajo a realizar o una fuente de ingresos. Brindando un servicio igualitario sin hacer distinciones de sexo, edad, religión, estado económico y social o de cualquier otro tipo.
Preparándome y estudiando con suficiente tiempo de antelación para poder
desempeñar un trabajo acorde a la importancia y significado que ello supone para el cliente y no simplemente dejar las cosas al azar y esperar que la suerte me favorezca. Procurar de forma atenta y responsable los casos que lleguen a mis manos y no renunciar a ellos o abandonarlos por motivos que no sean verdaderamente justificados.
Buscando siempre la consecución de la justicia y de lo que es correcto.