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MENESES LEE

¿Sabías que el Tae Kwon Do es uno de los deportes más disciplinados y

completos que podrían practicar?

Encontrar un buen deporte para nuestros niños puede llegar a ser un poco abrumador, y nos
cerramos a algunas opciones como el Tae Kwon Do, ya que no queremos incitar a nuestros
hijos a pelear. 

¡Y aún mejor, se convierte en un estilo de vida!  

Tae kwon do deporte de origen coreano es “arte de golpear con pies y manos», combina
técnicas de disciplinas más antiguas, ya que su filosofía se basa en cinco principios:
cortesía, integridad, perseverancia, autocontrol y espíritu indomable. 

 El Tae Kwon Do les exigirá mucho físicamente y mentalmente. Esto por que los métodos
de enseñanza de este increíble deporte les enseña a: 

 No darse por vencidos. Querer es poder

 Forjar el carácter 
 Crear disciplina 
 Ser constantes no faltar a clases
 Tener autocontrol
 Ser ordenados y limpios
 Seguir luchando, con mucha perseverancia
 Buenos alumnos y padres
 Buenos hijos y hermanos
 Buenos y responsables trabajadores

Cosas son fundamentales en nuestros dias. 

¡Y no solo eso! 

Esta es una disciplina que pueden seguir practicando el resto de su vida, ya que existen los
“cinturones” que representan el grado alcanzado o superado. Esto mismo motiva a nuestros
pequeños a seguir con sus practicas, a ponerse y obtener metas. 
Entonces.. ¿Cuáles son los beneficios de las practicas de taekwondo,
increíble Arte Marcial y deporte ? 

 Mejora los reflejos, la resistencia y la fuerza muscular.

 Ayuda a los niños a adquirir una vida saludable, hábitos y valores, como el respeto,
el esfuerzo, la disciplina, la constancia y el control.
 Se mantienen en forma y aumenta la flexibilidad y la agilidad. 
 Reduce o elimina la posibilidad de obesidad.
 Les enseña a tener control de su propio cuerpo y mente. 
 Mejora la calidad de vida y se ha comprobado que tienen cambios positivos en su
conducta, tanto en la casa como en la escuela. 
 Crea consciencia y los motiva a tener mayor confianza. 

¡Así que no lo pienses más!