Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CONSEJO DE ESTADO
SALA DE LO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
SECCIÓN TERCERA, SALA PLENA
Referencia: 11001-03-26-000-2012-00078-00(45679)
El artículo 615 del Código General del Proceso, y de recordar que este artículo entró en
vigor el 12 de julio de 2012 (teniendo en cuenta el artículo 627 del mismo código)
Subreglas: No hay.
Ratio decidendi:
Decisión:
- Ordenar a la Policía Nacional y al Ministerio del Interior, realizar todos los estudios de
seguridad necesarios para determinar el grado o tipo de riesgo al que están sometidos los
demandantes, la Juez Administrativa de Arauca, el apoderado de la parte demandante, el
Juez Administrativo de Bogotá o al funcionario judicial a quien por reparto corresponda
avocar el conocimiento del proceso.
- Remitir copia de esta providencia al Defensor del Pueblo para que en el ámbito de sus
competencias adopte las medidas que sean necesarias para garantizar la vida y seguridad de
las personas a que se refiere el numeral segundo de la parte resolutiva de la providencia.
Precedentes jurisprudenciales relevantes para la decisión:
- Corte Constitucional, Sentencia C- 825 de 2004, M.P. (E); Rodrigo Uprimny Yepes.
- Corte Constitucional, Sentencia C- 252 de 2010, M.P. Jorge Iván Palacio Palacio.
- Corte Constitucional, Sentencia T-199 de 2010, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto.
- Consejo de Estado, Sección Tercera, Sentencia del 16 de agosto de 2007, Exp. AP-
250003225000200400992 01.
- Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, auto del 8 de abril de 2011, Exp.
36145.
- De acuerdo con los artículos 228 y 230 de la Constitución, los jueces gozan de autonomía
e independencia para el ejercicio de sus funciones y “en sus providencias, sólo están
sometidos al imperio de la ley”. Sin embargo, es ampliamente aceptado que los jueces, más
allá de llevar a cabo una aplicación mecánica de la ley, realizan un ejercicio permanente de
interpretación del ordenamiento jurídico que se contrae a determinar cuál es la disposición
jurídica aplicable y cuáles son los efectos que de tal ejercicio se derivan para el caso
concreto. En este sentido, es claro que mediante sus providencias, los jueces llevan a cabo
un complejo proceso de integración e incluso de creación del derecho, que trasciende la
clásica tarea de subsumir hechos a normas y elaborar silogismos.
Derecho Familiar
Referencia: 11001-31-03-005-1999-00246-01
Violación de los artículos 762, 771, 772, 774, 2512, 2518, 2531, 2532 y 2534 del Código
Civil, 90 y 332 del Código de Procedimiento Civil.
Argumentos del demandante:
Subreglas. No hay.
o Identidad de objeto, en tanto los actos posesorios recaen sobre una misma cosa y no
sobre un sector de la unidad.
Decisión:
Derecho Médico
Referencia: 11001-31-03-032-2012-00445-01
Su protección como finalidad del recurso de casación por responsabilidad médica frente a
entidad hospitalaria y EPS. Hermenéutica del artículo 16 de la Ley 1285 de 2009.
Aplicación del artículo 333 del Código General del proceso.
Argumentos del demandante:
o La historia clínica del Hospital San José, demostrativa de una atención médica
tardía y negligente de las entidades demandadas, al resaltarse “un cuadro clínico
de 8 días de evolución, dado por episodio sincopal (pérdida de conocimiento)
precedido de tinnitus acompañado de disminución de la fuerza y sensibilidad del
hemicuerpo derecho, alteración del campo visual”
Subreglas: No Hay.
Ratio decidendi:
Decisión:
En las sentencias de primera y segunda instancia se concluyó grosso modo que la parte
demandante no acreditó la culpa médica ni la relación de causalidad entre la actuación de
las entidades prestadoras del servicio de salud y las consecuencias que señala la demanda
como causantes del perjuicio cuya indemnización se reclama.
El único cargo propuesto alega violación indirecta de unas normas en las cuales aduce que
existieron errores de hecho al apreciar las pruebas que allí se citan.
El Único cargo en casación se formul6 por la vía indirecta de la causal primera del artículo
368 del Código de Procedimiento Civil, al denunciar la violación de normas sustanciales
como resultado de errores de hecho en la valoración material de las pruebas.
A folio 19 se afirmó que los elementos "axiológicos" que debe demostrar "el afectado" son
"la conducta antijurídica, el daño y la relación de causalidad entre éste y aquélla, así como
la culpabilidad". Esa aseveración sólo corrobora que los elementos estructurales que han
de quedar probados en el proceso (sin importar a quién corresponda aportar la prueba) son
los supuestos de hecho que exige el artículo 2341 del Código Civil, independientemente
del nombre que quiera dársele a la figura jurídica. Luego, toda la argumentación sobre el
fundamento constitucional de la responsabilidad patrimonial por los daños producidos a los
usuarios en el ejercicio de la medicina, confluyó en la norma sustancial que consagra el
régimen de responsabilidad general por los delitos y las culpas, como no podía ser de otra
manera.
Entre los elementos que el fallo afirma que deben quedar probados se mencionó la
"relación de causalidad" entre el daño y la conducta antijurídica [folio 19]. En esa misma
línea argumentativa, la motivación giró en torno a la falta de demostración en casación de
los errores que cometió el Tribunal al concluir que "la pretensora no acreditó la culpa
médica ni la relación de causalidad".
o Basada en su pretendida soberanía sobre estas islas y cayos, con un área terrestre
total de 44 kilómetros cuadrados y una longitud costera total que es inferior a 20
kilómetros, Colombia reclama el dominio sobre más de 50,000 kilómetros
cuadrados de espacios marítimos que pertenecen a Nicaragua, sin perjuicio de
cómo se decida finalmente el asunto de la soberanía sobre estas pequeñas islas y
arrecifes. De hecho, los espacios marítimos de Nicaragua en el Mar Caribe han
sido reducidos a menos de la mitad por la pretensión de Colombia, que está siendo
apoyada por la Armada Colombiana, mucho más poderosa que la de Nicaragua.
Las embarcaciones pesqueras nicaragüenses o embarcaciones con licencia dada
por Nicaragua son interceptadas y capturadas por botes patrulleros colombianos
en áreas tan cercanas como a 70 millas de la costa nicaragüense.
Subreglas: No hay.
Ratio decidendi:
o Por catorce votos contra uno, Considera admisible la reivindicación formulada por
la República de Nicaragua en la sección I 3) de sus conclusiones, en la que solicita
a la Corte que juzgue y declare que, en el marco geográfico y jurídico constituido
por las costas continentales de Nicaragua y Colombia, el método de delimitación
apropiado consiste una frontera de la plataforma continental que divida a partes
iguales los derechos superpuestos a una plataforma continental de ambas Partes;
o Por unanimidad, Determina que no puede hacer lugar a la reivindicación formulada
por la República de Nicaragua en la sección I 3) de sus conclusiones.
o Por unanimidad, Decide que la línea de la frontera marítima única que delimita la
plataforma continental y las zonas económicas exclusivas de la República de
Nicaragua y la República de Colombia seguirá las líneas geodésicas que conectan
los puntos.
o Por unanimidad, Decide que la frontera marítima única en torno a Quitasueño y a
Serrana seguirá, respectivamente, una zona de arcos trazados a 12 millas náuticas
medidas desde QS 32 y desde elevaciones que emergen en bajamar ubicadas
dentro de las 12 millas náuticas medidas desde QS 32, y una zona de arcos
trazados a 12 millas náuticas medidas desde Cayo Serrana y los demás cayos de
sus inmediaciones.
o Por unanimidad, Rechaza la reivindicación formulada por la República de
Nicaragua en sus conclusiones finales por la que solicita a la Corte que declare que
la República de Colombia no actúa con arreglo a sus obligaciones contraídas en
virtud del derecho internacional al impedir que la República de Nicaragua tenga
acceso a recursos naturales al este del meridiano 82.
Decisión:
La corte decide que la República de Colombia tiene la soberanía sobre las islas de
Alburquerque, Bajo Nuevo, Cayos del Este Sudeste, Quitasueño, Roncador, Serrana y
Serranilla. sin embargo con este fallo Colombia perdió cerca del 43% de su territorio
marítimo en el Mar Caribe.
Precedentes jurisprudenciales relevantes para la decisión:
En su opinión disidente, el Magistrado Owada afirma que, pese a que votó a favor de todas
las conclusiones de la Corte relativas a los méritos de la controversia tal como figuran en el
apartado 1) y los apartados 3) a 6) del párrafo dispositivo, no ha podido votar a favor del
apartado 2) relativo a la cuestión de la admisibilidad de la reivindicación de Nicaragua que
figura en la sección I 3) de sus conclusiones. En su opinión, las conclusiones de la Corte
sobre este punto no se ajustan al criterio empleado para juzgar la admisibilidad de una
demanda elaborado por la Corte y no son adecuadas por cuestión de principios.