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Trabajo final de acreditació n

Materia: Aná lisis filosó fico de la educació n


Estudiante: Carranza, Karen Yanina
Docente: García, Gisella
Cursada: 3ra de octubre 2021
Introducción

El presente trabajo, consta de el análisis de un Documental titulado: “La


Batidora, Radio en la Escuela” realizado por el equipo de investigación de la
Universidad Flacso, a cargo de Gustavo Laskier y el equipo de investigación
coordinado por Silvia Duschatzky en una escuela del Conurbano Bonaerense,
cuya realidad social es crítica.

Desde la escuela nos proponemos centrarnos en el modo en que se


reflejan las “grandezas y miserias” que forman parte de la educación Argentina.
Así, podemos observar la experiencia de una escuela pública, en donde los
estudiantes comparten un proyecto de radio llamado “La batidora”, que los
impulsa a debatir y reflexionar sobre distintos temas ligados a lo político y lo
social. También, se da un espacio en donde los estudiantes charlan sobre sus
vidas y se abren a cuestiones personales.

Sin dudas, este proyecto se acerca a ideas de la educación popular,


puesto que a través de la radio puede escucharse la voz de quienes
pertenecen a la comunidad escolar. Así, los estudiantes toman un rol activo en
el proceso educativo en lugar de ser sujetos pasivos que van “sólo a estudiar”.
A lo largo del documental, puede escucharse a varios de los jóvenes expresar
no sólo felicidad respecto al proyecto, sino también orgullo, además de la
esperanza de poder llevar su radio por fuera de la escuela para ser transmitida
en el barrio. Una de las grandes razones para afirmar que estamos frente a un
caso de educación popular es que, en este espacio, puede verse como
“docentes y estudiantes son a la vez estudiantes y docentes, con estatus
similar, y están vinculados por el diálogo pedagógico caracterizado por una
relación horizontal” (Torres, 2001:37). A su vez, este proyecto implica una
integración del sujeto en la educación, lo cual, según Adelar Hengemühle
(2001), consigue motivar a los estudiantes. Un ejemplo de ello es el interés por
hablar sobre temáticas y gustos personales. Otro tema que menciona
Hengemühle respecto a la motivación es la importancia de los desafíos y los
deseos. En este documental, se muestra el deseo de extender la radio hacia
otros horizontes y el desafío que ello supone.

Pero, si “La batidora” representa una grandeza de la educación en el


caso argentino, podemos decir que vemos en el documental también algunas
“miserias”. La falta de inversión en educación no sólo se plasma en el esfuerzo
que hacen estudiantes y profesores para mantener vivo el proyecto por sus
propios medios, sino que se hace visible en las malas condiciones de la
escuela. Vemos entonces una institución que no está equipada
adecuadamente, lo cual muestra un abandono del Estado. Por otra parte, si
bien los estudiantes se entusiasman con “La batidora”, mencionan en
ocasiones que proyectos de este estilo no son muy usuales. Algunos dicen que
no se sienten motivados a estudiar y que no todos los docentes se interesan en
sus gustos. A su vez, en algunas escenas se ven resquicios de una escuela
que aún mantiene viejas prácticas algo autoritarias. Todo ello, en suma, se
vislumbra en un documental que, a nuestro parecer, refleja con claridad
algunos logros y fracasos de la educación argentina.

Desarrollo

El documental “La batidora, radio en la escuela” nos muestra una


realidad compleja en torno a la educación argentina. Al principio vemos un
contingente de estudiantes formando en lo que pareciese ser una escuela que
mantiene prácticas pedagógicas ligadas al paradigma del normalísimo. Los
jóvenes comienzan a formarse en fila en el patio. De fondo, la bandera
argentina en el mástil como símbolo patrio. Una profesora los controla. Allí
aparece el primer “sáquense la capucha”. Más adelante se les pide a los
estudiantes buen comportamiento y se le da un apercibimiento a una joven que
llegó tarde. Mientras tanto, las escenas nos muestran una escuela en malas
condiciones, el discurso de uno de los profesores hace alusión a la falta de
clases por paro. La imagen es desesperanzadora, porque aquel paradigma
normalista se ve opacado por un Estado que ya no acompaña. La primera
impresión que nos da el documental es el de una escuela en crisis en donde la
falta de inversión nos remonta al paradójico pensamiento neoliberal, el cual va
en contramano de una tradición liberal anterior que permitió el florecimiento de
la educación pública. Esta contradicción entre prácticas de la pedagogía
normalista que son aplicadas en un marco de desamparo, creemos, son las
que se vislumbran en un primer pantallazo del documental.

Sin embargo, aparece luego la esperanza. El proyecto de radio “La


batidora” permite a los estudiantes compartir experiencias y gustos personales,
además de debatir sobre cuestiones de su comunidad. Eso, según ellos, los
motiva. Como mencionamos en la introducción, “La batidora” puede
enmarcarse como un espacio en donde la pedagogía escapa del paradigma
normalista para relacionarse más con las ideas de Freire. Así, conviven en la
escuela del documental varios paradigmas: el de una institución que fue
abandonada por el modelo neoliberal y fue recuperada por algunos de sus
profesores y estudiantes, el de un sitio donde continúan estableciéndose
prácticas pedagógicas normalistas y al mismo tiempo existe un proyecto
movilizador en donde se aprende haciendo. Pero, ¿por qué decimos que “La
batidora” puede considerarse un proyecto relacionado a la educación popular?
Pasaremos a desarrollar un poco esta experiencia.

En primer lugar, como mencionamos en la introducción, “La batidora” se


conforma como un espacio radial en donde los estudiantes pueden pasar la
música que les gusta y discuten y reflexionan sobre temáticas sociales,
políticas e incluso personales. Aquí participan también algunos docentes. Así,
“La batidora” basa sus prácticas educativas en “experiencias colectivas e
individuales, tomando muy en serio el conocimiento previo adquirido por las
poblaciones” (2001:36). Además, la radio inspira en los participantes “un
sentido de orgullo, dignidad y confianza en sí mismos para que alcancen un
nivel político y social de autonomía” (2001:36). Este sentido se genera puesto
que los estudiantes toman la iniciativa y ya no son meros repetidores de lo que
le transfieren los docentes. Así, se produce una educación problematizadora en
donde los jóvenes reflexionan y discuten sobre temas de su realidad. Un
ejemplo de ello es cuando se tratan temas políticos como el impacto de la
empresa de tratamiento de basura CEAMSE en la contaminación y la
desaparición de las monedas, en aquel momento fundamentales para viajar en
tren. Uno de los jóvenes resalta, respecto a ello, que la radio podría servir para
que la gente conozca las problemáticas de su comunidad. Esto, desde la
mirada de Freire, significa creer que los cambios son posibles y que la
comunidad no debe resignarse frente a las problemáticas que sufre.

A su vez, los jóvenes se presentan en este espacio con sus gustos y


particularidades personales. Uno de los estudiantes llega a afirmar que muy
pocos docentes le piden “su manera de pensar”. Desde esta perspectiva, y
teniendo en cuenta a Freire, puede decirse que en “La batidora” se comprende
la relación entre el aquí de los docentes y el aquí de los educandos. (Freire,
1985). Es decir, se respetan los saberes de los jóvenes, su modo de ver las
cosas. Esto puede reflejarse en algunas escenas en donde se les pide a los
alumnos que rapeen y luego que expliquen algunas características de la
música que a les gusta. Aquí los docentes no ningunean o menosprecian los
gustos musicales de los jóvenes, sino que se establece una capacidad de
diálogo verdadera. En este diálogo, los sujetos dialógicos aprenden y crecen
aceptando sus diferencias. Con ello, se respeta la autonomía del ser del
educando. (Freire, 2005).

Ligado a esto, podemos volver a mencionar la cuestión de la integración


del sujeto y la comprensión de su complejidad. Esta temática está muy
relacionada a la de la motivación. Según Hengemühle hay que tener en cuenta
que las personas sólo se motivan delante de situaciones que tienen sentido y
provocan el deseo. Un claro ejemplo de ello es cuando se le pide a uno de los
estudiantes que cuide la puerta de la biblioteca para que nadie entre mientras
la radio transmite. Este joven cuenta luego que su padre es policía y que hace
vigilancia al igual que él. Con ello, el chico expresa su alegría por hacer “algo
que sirva”. Desde su perspectiva, cuidar que nadie entre se torna un desafío y
produce sentido.

Otro ejemplo que podemos aportar es el de Marcelino, quien comenta


haber estado preso y que durante tres años se le negó la entrada a la escuela
por no “tener conducta” y ser “atrevido”. “La batidora” permitió que Marcelino
regrese y participe activamente del proyecto, lo cual demuestra que todos
pueden aprender. En este sentido, podemos rescatar a Anijovich (2013), quien
destaca la importancia de un aula heterogénea que dé espacio a todos los
estudiantes, más allá de las dificultades o problemáticas que presenten o estén
transcurriendo. En el documental, Marcelino participa dando una charla sobre
los efectos de las drogas, lo cual es un tema central en la juventud de estos
días. Podemos decir volviendo a Anijovich que, con esta actividad, el joven se
convierte en el centro del proceso educativo gracias a una enseñanza en
donde se intentan presentar las mejores opciones para cada quien.

Por último, una cuestión que podemos visualizar no sólo en la escena de


Marcelino, sino en otras, es la de la concepción de los jóvenes que tienen
algunos docentes. Respecto a este tema podemos sostenernos en lo escrito
por Débora Kantor en su texto Variaciones para educar adolescentes y jóvenes
(2008). Aquí, la autora aborda la importancia de ver a jóvenes y adolescentes
como sujetos de derecho en lugar de caer en la estigmatización. Según Kantor,
la juventud es muchas veces producto de la demonización. Se apela así a la
criminalidad, la ociosidad y la hostilidad para retratar a individuos que, en
realidad, deberían ser integrados en el tejido social. También, es importante
para la autora el modo en que los adultos entran en diálogo con los jóvenes, es
decir, la forma en que construyen discursos y prácticas que habilitan
experiencias educativas. Así, la solución no está ni en desamparar al joven ni
en retornar al viejo esquema autoritario, sino más bien en adultos que sepan
contener a los estudiantes y al mismo tiempo desafiarlos, que puedan confiar
en ellos y a la vez discutirlos. Creemos que en varias escenas puede notarse
esta relación propuesta por Kantor, en donde se considera a los estudiantes
como sujeto de derecho y se los apoya, pero también se les dan desafíos y se
los mueve a tomar acciones por sí mismos.

Ahora bien, como mencionamos en la introducción, nuestra intención es


analizar este documental en torno a los aspectos positivos y negativos que
posee la educación argentina. En este sentido, expresamos también que “La
batidora, radio en la escuela” es un documental que nos muestra una realidad
compleja. Es por ello que, para finalizar, responderemos brevemente la
siguiente pregunta: ¿alcanza el proyecto de “La batidora” para lograr una
educación significativa?
Conclusión

Para concluir este trabajo final, me gustaría resaltar la importancia de las


teorías y corrientes pedagógicas de los diversos autores vistos a lo largo de la
materia.

Y así también, el documental “La Batidora, Radio en la Escuela”, se crea


como un proyecto que redefine la posición pedagógica de los docentes
respecto a sus estudiantes, promoviendo un tipo de educación en donde los
sujetos participen de manera activa en el proceso de enseñanza-aprendizaje,
de manera crítica, reflexionando acerca de las realidades por las que están
atravesados, con la esperanza de lograr cambios a nivel personal y social.

Pero se ve a lo largo del documental, que más allá de los efectos


positivos y esperanzadores que el proyecto conlleva, se necesitan otros
cambios estructurales, tanto en relación a la participación activa y
comprometida del Estado, por ejemplo, lo que respecta al presupuesto
destinado a las mejoras de infraestructura de la escuela, como al apoyo de
proyectos como los de este tipo, entre otros.

Y también al rol que cumplen algunos de los docentes, con carácter


autoritario y normativo, propios de la escuela tradicional, como puede verse
sobre todo al iniciar el documental, las escenas y situaciones que se dan en el
patio de la escuela.

En este sentido, finalmente, creemos que “La batidora” es un proyecto


que promueve grandes valores en torno a la educación y a la mirada sobre los
estudiantes, pero se torna insuficiente cuando vemos la realidad de una
escuela, parecida a tantas otras del país, en donde los derechos mínimos
siguen siendo en varias ocasiones vulnerados.

Sin embargo, este proyecto, requiere de mayor acompañamiento, no


sólo por parte del Estado, sino también del resto de la comunidad de la
escuela. Ante este hecho, insistimos en la idea de que el trabajo debe ser
conjunto, y no se minimice en un proyecto aislado, sino que pueda ser
significativo en su totalidad.
Bibliografía

● Anijovich, Rebeca (2013): Todos pueden aprender. En


www.nacio.unlp.edu.ar/prospectiva/001/Todos_pueden_aprender-
Anijovich.pdf.
● Freire, Paulo (1985): De las virtudes del educador. Conferencia
realizada en el Centro Cultural General San Martín el 21/06/1985.
● Freire, Paulo (2005): Pedagogía de la autonomía, Editorial Siglo XXI,
Buenos Aires.
● Hengemühle, Adelar (2001): “Subjetividad: el desafío de integrar el
sujeto en la educación”, en Revista lasallista de Investigación. Enero-
junio, año/vol. 2 Colombia, pp. 65-75.
● Kantor, Débora (2008): Variaciones para educar adolescentes y
jóvenes, Del estante editorial.
● Torres, Carlos Alberto (2001): Grandezas y miserias de la educación
latinoamericana en el siglo veinte. En Torres, C. (Comp.) Paulo Freire y
la agenda de la educación latinoamericana en el Siglo XXI. (pp. 23-52)
Buenos Aires:Clacso.

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